Capítulo 26 "¡No!"

Azize abrió los ojos y se encontró con la mirada azul de su marido. Él sonrió y ella le devolvió la sonrisa. De pronto recordó en donde estaban… se movió un poco y sintió que el cuerpo le pasaba factura por haber dormido en una cama bastante confortable, pero en el suelo…

-¿Cómo te sientes?

-Si estoy contigo no necesito nada más…- le dijo ella con voz adormilada.

-Hablo en serio…- dijo él sin poder dejar de mirarla.

-Yo también…- se quejó ella y él se colocó cubriendo su cuerpo con el suyo…

-Debemos volver a casa…

-Cevdet…

-No quiero peros… ni excusas… me alegra que hayas podido colaborar pero nada de lo que suceda está en tus manos… necesito que cuides a nuestro hijo…

-Está bien…- dijo y él sonrió.

-Me alegra…- la besó con suavidad y cuando quiso salir de la posición en la que estaba ella lo tomó del cuello y buscó sus labios otra vez.

-Espera…- le dijo en tono bajo.

-Enfermera Azize…- dijo él y le dedicó un rato a las caricias y a los besos antes de que ambos se levantaran…

Cevdet fue a ver si conseguía alguna fruta para darle algo de comer y cuando volvió ella había terminado de juntar sus cosas…

-Pasaré a ver a unos niños que atendí ayer… y no me digas que no lo haga porque no te escucharé…

-Que terca eres…- dijo él sacudiendo la cabeza.

-Lo soy… soy así…- dijo ella con fastidio y él la dejó pasar hacia fuera.

-Estaré preparando las cosas…

-Trataré de apurarme…- dijo ella y le dedicó una sonrisa conciliadora.

Azize caminó hacia una de las carpas en donde se encontraban los niños y ellos de inmediato la llamaron a su lado y ella se acercó.

Los atendió, cambió sus vendas y les dio parte de la fruta que todavía no había terminado de comer.

Cuando quiso irse, los niños comenzaron a llorar y eso le partió el corazón…

Cevdet entró buscándola un buen rato después y ella lo miró desde lejos…

Azize besó a cada uno de ellos y le hizo señas a Cevdet de que saliera.

-Azize…

-Cevdet… lo siento pero no puedo volver… no lo haré cuando siento que esos niños me necesitan… ambos perdieron a su familia…

-Tú no puedes hacer nada más que cuidarlos…

-Y es lo que quiero hacer… pero no puedo dejarlos… yo no se si me podrás entender o si te enojarás…

-Azize… yo no puedo quedarme aquí… no puedo dejar todo…

-Y yo no puedo dejarlos a ellos… yo… te prometo que me cuidaré… que no dejaré de dormir o de comer adecuadamente… pero no me pidas que abandone a esta gente, Cevdet…

Cevdet se quedó mirándola un momento, estaba molesto, pero muy en el fondo podía comprenderla…

-Tú sabes lo que yo preferiría… pero eres una mujer adulta… y aunque me duela y no esté de acuerdo, te entiendo…- dijo en voz baja, sus ojos en los de ella.

-Me cuidaré…- intentó sonreír ella, sabía por lo que él estaba pasando en ese momento.

Él se subió al caballo y le entregó sus cosas, que ya estaban empacadas para volver. Ella se perdió en sus ojos unos instantes y cuando creyó que él se iba, Cevdet se bajó del caballo y la tomó entre sus brazos…

-Prométeme que estarás bien…

-Lo prometo…- dijo Azize y él miró hacia todos lados antes de darle un beso húmedo, un poco demasiado íntimo.

Azize sonrió y acarició su cara. Cevdet se subió al caballo y esta vez sí, se fue…


Cuando regresó al cuartel, se encontró con que Vasili lo estaba buscando y decidió presentarse ante él…

-General, aquí me tiene…- le dijo algo agitado, estaba un poco cansado por el viaje.

-¿Dónde estaba, coronel?

-Tuve asuntos personales que atender… le pido disculpas…

-¿Asuntos personales? ¿qué puede ser más importante que nuestro ejército, Cevdet?

-No se preocupe, está todo solucionado… dígame para qué me mandó a llamar…

-Quiero que investigue y se ponga al tanto sobre un campamento de refugiados…- dijo y Cevdet sintió un escalofrío.

-Lo haré, general…

-Bien… manténgame al tanto… el ejército otomano ha enviado gente a ayudarlos, pero en lo que a mí respecta, prefiero que mueran allí y no contagien la peste a los nuestros…- dijo y Cevdet cerró el puño para no reaccionar.

-No se preocupe, yo investigaré y se lo haré saber…

Cevdet salió del despacho de Vasili algo apesadumbrado. De alguna manera se sintió culpable por no haber traído aún sin su consentimiento a Azize… él creía que podría manejar el hecho de retrasar o impedir un eventual ataque al refugio, pero lo que no podría impedir era que Azize se terminara contagiando de lo que fuera esa peste desconocida y bastante letal para ellos…

Vio a algunos soldados griegos prepararse para algo que no supo bien qué era y se preguntó si existía la posibilidad de volver hasta el lugar y rescatar a su mujer…

Al promediar la tarde, Azize se tomó un descanso y bebió un poco de agua y un trozo de pan. Se sentía cansada pero no tenía otro síntoma…

Luego fue a visitar a sus pacientes y finalmente se tomó un descanso cuando comenzó a sentirse algo inestable…

Cevdet averiguó un par de datos que quería llevarle a Vasili y cuando fue a verlo lo encontró con el coronel Stavros…

De inmediato pudo ver la incomodidad de ambos no bien él llegó y a pesar de que intentó convencer al general, Vasili lo envió a una misión pero él tuvo en claro que enviaría un grupo de soldados para terminar con ese refugio y "limpiarlo" definitivamente…

Cevdet salió y al poco tiempo sintió que lo seguían, por suerte, su entrenamiento y su intuición lo hicieron darse cuenta de que se trataba de Stavros y le tendió una trampa para inmovilizarlo…

Fue a ver a Yakup y le pidió ayuda para salvar a su mujer, no tenía la certeza de cuando irían a hacer la "limpieza" pero no podía arriesgarse a que ella no se salvara…


Cevdet fue con sus hombres a cumplir con la misión que el general Vasili le había encomendado y se dio cuenta de que era una gran distracción… por lo que terminó lo antes posible y se dirigió hacia el campamento, seguro de que podría llegar a tiempo…

Mientras iba en camino, no advirtió que Stavros, que se había recuperado de la emboscada, lo perseguía de cerca. Cevdet estaba demasiado preocupado por llegar a salvar a Azize…

Cuando llegaba se dio cuenta de que era demasiado tarde, se sintió desolado y de pronto vio que Yakup volvía a caballo con dos niños…

-Yakup…

-Coronel…- dijo algo sentido, aún afectado.

-¿Azize? - preguntó casi sin voz.

-La vi antes del incendio de la carpa… me pidió que me encargara de estos niños… ella iba en busca de uno más… Salih se llamaba…

-Pero…

-Coronel… fue una masacre… ella no se salvó… lo siento tanto…- le dijo casi sin poder mirarlo a los ojos.

-¿Qué? - dijo Cevdet y sintió que todo daba vueltas a su alrededor.

Yakup murmuró que seguiría adelante, tenía que sacar a esos niños de allí, eso era lo que Azize le había pedido…

Giró su cuerpo mientras se alejaba y lo vio al coronel frotándose los ojos, tratando de volver a la realidad... No podría perdonarse nunca no haber podido salvarla…

Cevdet se acercó al lugar en donde había ocurrido la masacre y sintió que su desesperación no lo dejaba respirar…

Pasó por todos los lugares, tratando en vano de encontrarla, y cuando llegó a la carpa quemada, se dio cuenta de que sería imposible reconocer su cuerpo porque todos estaban carbonizados…

-¡Azize…!- dijo cayendo de rodillas al suelo- ¡no!- gritó llorando de rabia y desesperación.


Les pido disculpas pero esta situación debía ocurrir... veremos como continúa, y será pronto! Gracias por leer!