¡He vuelto! (Suena música de psicosis) Bueno, después de un mes sin ordenador, por fin he vuelto a la carga. Además, ya he terminado los exámenes, así que teóricamente debería tener más tiempo para escribir… así que espero actualizar pronto los otros fics. XD.

Cómo especie de regalo compensación por haber tenido que esperar tanto tiempo¿qué les parece un mini concurso de parejas? Me dicen dos personajes y una situación (por ejemplo: Draco y Severus en un bar, después de la Caída.) y el que sea más votado lo convierto en un One-Shot. ¿Se animan?

Como siempre, la contestación de los reviews abajo.

S. Lestrange

PD: Espero que no este muy mal, porque lo subo sin corregir, porque ya es de madrugada y lo quería subir lo antes posible. Ahora si que sí:


UN PEQUEÑO ENCONTRONAZO

- ¡Arriba Dormilón!- cuando el maldito desaprensivo descorrió las cortinas, la brillante luz del sol le dio en los ojos, cegándolo. Tanteó en busca del borde de las sábanas para echarlas a un lado, aún medio ciego.

- ¿Qué hora es?

- Queda una hora para la primera clase, pero como es Transformaciones deberíamos salir dentro de 45 del Comedor si queremos llegar bien.- le respondió una voz alegre y llena de vitalidad.

Cogió su varita y las gafas de la mesita de noche mientras se desperezaba con desgana. Había algo que no le acaba de cuadrar.

Un borrón pelirrojo pasó por delante de su cama, ya totalmente vestido.

- Te espero abajo. Me muero de hambre.

- ¿Ron?

>>

- ¿En serio no te pasa nada?

- Que no, Harry. Estoy perfectamente bien. ¿o acaso me ves mal?

- No si lo digo por eso.- el moreno se encogió de hombros mientras se apresuraban por el pasillo de Transformaciones. A su lado Ron casi iba dando saltos, mientras que Hermione lo miraba desde el otro lado totalmente pasmada.

- ¿Es que quieres que este mal?- le sonrió burlón, mientras que con un gesto caballeroso y algo cómico les abría la puerta de la clase de McGonagall y los dejaba pasar.

- ¡Claro que no!- levantó las manos en un gesto desesperado.- Pero reconoce que llevas un mes muy… apagado. Y ayer prácticamente estuviste autista todo el día y bueno,… me sorprende que hoy, de repente, te levantes tan bien.

- Bueno, reconozco que he estado algo deprimido, pero ayer estuve pensando (por eso estuve algo autista como tu has dicho), y me di cuenta de que tenía que alegrarme… ¡Y aquí estoy!- levantó los brazos y se rió.

- Bueno, entonces estupendo.- la sonrisa de Harry fue algo forzada, pero el pelirrojo no se dio cuenta. Aunque la explicación parecía buena, el moreno se había dado cuenta de que había sido dicha demasiado… rápido, para resultar natural.

Ron se sentó al lado de Harry y empezó a sacar sus cosas con tranquilidad, habían llegado de los primeros Gryffindors e incluso los Ravenclaws con los que compartían clase parecían que llevaban poco tiempo allí, así que tenían tiempo. Había notado que su amigo no acaba de creerse por completo su historia, meticulosamente ensayada por la noche, en la que no pudo pegar ojo hasta la madrugada.

¿Pero como decirle la verdadera razón? Seguro que lo mandaba a San Mungo directamente, sin escalas.

Sabía que habría sido mejor disimular algo su alegría, pero por primera vez en mucho tiempo se había levantado lleno de energía y optimista, como si, después de mucho tiempo, volviera a ser él.

Una pena que hoy no compartieran clases con los Slytherins. Después de años en los que el Director parecía querer ponerlos juntos hasta para comer, el único año en el que a él no le hubiera importado compartir algunas clases con las serpientes, va, y sólo los ponen juntos en Pociones.

Era tan injusto.

- Ron.- un codazo lo sacó de sus ensoñaciones. McGonagall ya había llegado y estaba pasando revista. Levantó su brazo cuando sonó su nombre y se dispuso a escribir la lección.

Al rato se dio cuenta de los susurros que estaban compartiendo Hermione y Harry desde el principio de la clase. O más bien, se fijó en que parecían estar relacionados con él.

- ¿Pasa algo?- las caras de sus amigos al sentirse descubiertos fueron todo un poema, aunque recobraron la compostura con rapidez. Él no se hubiera dejado pillar con esa expresión culpable con tanta facilidad.

- No. ¿Porqué debería pasar algo?- El moreno se volvió hacia delante con un gesto demasiado calmado para ser casual.

- Bueno, por cuchichear Mione ha dejado hasta de escribir la lección, así que no creo que hablarais del tiempo.- A su espalda, la castaña se sonrojó con violencia y agachó la cabeza hacia su pergamino, mientras Harry ser revolvía en su asiento incómodo.

- Comentábamos la clase de Pociones de ayer.- le soltó algo bruscamente. Pero así era Harry Potter, cuando tenía que decir algo que le resultará incomodo lo decía a toda prisa y sin ambages. Él, en cambio, daba vueltas y más vueltas al asunto, yéndose por las ramas.

- ¿Y que tenía de interesante?- Por primera vez en su vida consiguió no sonrojarse y responder con tranquilidad. ¿Se estaría haciendo mayor¿o simplemente de tanto pensar el él se le había pegado algo¿Eso era posible?

El moreno pestañeó desconcertado y confuso, una parte de él había esperado que Ron se sonrojará y balbuceara con expresión culpable, no esa tranquila y casi desdeñosa respuesta.

- Bueno, tú y Malfoy…bueno.- se rascó la barbilla incómodo.- No parecíais enfadados.

- ¿Y por qué lo teníamos que parecer?

La mitad de la clase, mitad a la que Ron tuvo ganas de espetarle que se metieran en sus asuntos, que ya tenía el suficiente con lo que tenía, se inclinó para escuchar totalmente anonadada.

- Pero… pero… ¡Así ha sido siempre! Nunca nos hemos hablado con ese… ese niño mimado.

No hables de él de esa manera.>>

Respingó, repentinamente culpable ante sus pensamientos. Bajó la mirada azorado hacia su pergamino.

- Bueno, quizás sea hora de dejar las peleas infantiles a un lado¿no? Además si tengo que trabajar con él un mes entero será mejor… no sé… evitar las discusiones…- musitó con voz débil.

Un largo silencio siguió a sus palabras. Ron se sintió enrojecer. Se sentía sucio al mentirle así a su mejor amigo. Bueno, mentirle no, pero desde luego no estaba siendo sincero con él respecto a sus motivaciones. Por el rabillo del ojo lo vio abrir la boca para hablar, sus ojos verdes relucían desconfiados.

- Pues me parece una actitud muy madura de tu parte, Ron.- la voz de Hermione se adelantó a la de Harry.- ¿No crees Harry? Ya va siendo hora de dejar atrás las peleas de primero.- le sonrió orgullosa de él. Se sintió rastrero.- Estoy muy orgullosa de ti.

>>

Se dirigían al Gran Comedor desde su clase de DCAO, que volvía a dar Remus Lupin, charlando amigablemente. Había intentado quitarse de la cabeza la breve conversación de Transformaciones con bromas y risas, mostrándose inusitadamente amigable con Harry y Hermione.

Estaba relatándoles una particularmente aparatosa caída de su hermano Fred, mientras reponía los últimos estantes de su tienda de bromas, cuando se giró para gesticular y poder verlos de frente, andando hacía atrás.

- … y entonces¡BUM! El estante se cayó hacía atrás y le dio al que tenía detrás, que también se movió…

Notó como su espalda chocaba contra alguien, y antes de darse la vuelta para disculparse ya sabía con quién había chocado. En palabras de Harry, era pura Ley de Murphy.

Efectivamente, la persona que estaba de rodillas en medio del corredor, con todos su libros desparramados a su alrededor, era el mismísimo Draco Malfoy. Pudo ver, sentir, como su espalda se tensaba de ira, mientras alzaba la cabeza para poder ver, y apuntar con la varita, al que había tenido la osadía de tirarlo al suelo.

Jamás pensó que la visión de sus ojos acerados por la rabia fuera tan… excitante.

- Ups.

- ¡WEASLEY!

- Presente.- Estaba tan aturdido por los mensajes contradictorios de su mente y su cuerpo, Ayúdale a levantarse, así podrás tocarlo Ni se te ocurra acercarte, lo único que te falta es que se te vea el plumero en medio del Castillo. ¿Cómo sería tenerlo así en…?

Sacudió la cabeza con fuerza para centrarse en el problema actual. Cuando consiguió volver al mundo real, oyó por primera vez el coro de risitas de los alumnos presentes. Por un aterrador segundo pensó que todos habían podido leer en su cara sus pensamientos como si de un libro abierto se tratase, pero luego se dio cuenta de que reían por su contestación.

En lo último que había pensado era en ser gracioso. Vamos, seis años intentando serlo para dejarlo en ridículo y ahora que no quería… tendría que investigar las malditas leyes de Murphy. Parecían regir su vida, al menos desde hace un par de meses.

- Eh… ¿estás bien?- Se acercó un paso para ayudarlo a levantarse, pero un destello de los ojos grises lo detuvo helado en su sitio.

- No necesito la ayuda de un pobretón como tú, Comadreja.

- Por una vez no había sido intencionado.- intentó disculparse, pero Harry y Hermione se lo llevaron de allí, al ver que tanto el rubio, como todos sus compañeros Sly que estaban detrás suya, echaban mano a la varita. Y allí aparte de ellos, sólo estaban una pandilla de Hupplepuff que no tenían pinta de ayudar mucho.

- ¡Ron! Dijiste que ibas a dejar las peleas atrás.- Hermione se apartó la melena de la cara con un gesto irritado.- Y tu Harry deja de reírte.

- Es que ese es mi Ron.- le palmeó la espalda.- Reconozco que en Transformaciones me habías llegado a asustar.

- Ah…

- Pero Harry, de verdad pienso que…

Dejó a sus amigos discutir, mientras recordaba lo que acababa de ocurrir. ¿Cómo había podido ser tan imbécil¡Ayer estaba de buenas y hoy lo fastidiaba todo! Seguro que no conseguía volver a tener una "conversación" con él en todo el mes. Su oportunidad desperdiciada.

Se paró en seco en la entrada del Gran Salón.

Un momento.

¿Su única oportunidad?

¿En que estaba pensando¿En ser su amigo¿En ligárselo?

Oh, Dios mío. Estaba pensando en ligárselo.

Vamos, ni que fuera a ser homosexual. Con la cantidad de novias que se le conocían. Claro que también a él se le conocían unas cuantas y ahí estaba. Con bisexual se conformaba, en todo caso.

Dios. Lo estaba haciendo otra vez.

- Ron¡Ron!- Alguien sacudiéndole lo sacó de su momento zen.

- ¿Um?

- ¿Se puede saber que te pasa? Te has parado de repente con cara de susto.

- ¿Así?- enfocó su mirada en la perpleja del moreno. Se dio cuenta de que todo el comedor lo miraba. Evidentemente, se puso de un vivo color tomate.- No me pasa nada.- le sonrió mientras se sacudía sus brazos de encima y se dirigía a paso rápido hacia su sitio, donde ya los esperaba Mione.

- ¿Te pasa algo?- se preocupó la castaña.

- Na, que me acabo de dar cuenta de que Malfoy es mi pareja.- el cucharón se detuvo a mitad de camino de su plato. ¿Es que era tonto¿Para que contestaba eso?- … de pociones.- le sonrió falsamente, con las orejas coloradas.

- ¿Ves? Por eso le decía a Harry de que vuestros enfrentamientos deben de acabar. Ahora deberás hacer el trabajo en un ambiente de tensión. Eso si no te echa en cara la caída y os volvéis a pelear…

- ¿Trabajo?

- Claro, el que puso el profesor Snape. Teniendo en cuanta de que ambos tenéis entrenamiento de Quidditch tendréis que poneros ya si queréis terminarlo a tiempo. No creo que tengáis muchos huecos libres a la vez los dos.

La cabeza de Ron golpeó con bastante fuerza la mesa, mientras a su lado Harry le pasaba compasivamente la mano por la espalda.

>>

El trecho de apenas dos metros que lo separaban de donde hablaba con Zabbini se le hizo eterno, mientras se sentía a punto de vomitar toda la comida. Estaba de espaldas a él, así que aún no lo había visto. Observó el brillo del Sol en su cabello. Parecía tan suave. Seguro que era muy suave. Alzó con lentitud su mano… y le tocó el hombro con timidez.

- ¿Y ahora que quieres?

Bueno, aún parecía enfadado por lo ocurrido. A ver, respira, respira, tranquilo, no muerde.

Una pena, por otra parte.

Céntrate

- Antes de todo disculparme por lo de antes, no fue mi intención. Lo que quería era ver cuando podíamos quedar para hacer el trabajo de Pociones.- se sintió orgulloso de si mismo al poder recitarlo del tirón y sin balbucear.

Draco lo miró con fijeza, sin variar un ápice su postura altiva. Intentó permanecer lo más quieto posible, sin rebullir como haría un niño pequeño. Casi lo consiguió, solo cambio una vez el peso de un pie a otro.

- Bien. ¿Cuándo tienes entrenamiento de Quidditch?- aún sonaba enfadado.

- Pues…- Ups¿Cuándo tenía entrenamiento? Normalmente se lo recordaba Harry por la mañana. ¿Por qué no le había preguntado antes de acercarse¿Por qué?

- ¿No lo sabes?- le sonrío con suficiencia, burlonamente. A su lado, Zabbini se rió.

- Claro que lo sé.- le respondió bruscamente.- martes, miércoles y viernes en el segundo turno. ¿Y tú?

- Creo que podríamos quedar hoy para empezar, a las 8 en la Biblioteca.- evadió la respuesta directa.

Un momento. ¿Hoy?

- Eh… Claro.

- Ya nos veremos entonces.- le sonrió de medio lado por encima del hombro mientras se alejaba.

- Claro.

Um… Eso es un culo y lo demás tontería.

- Bueno, asunto solucionado, no ha sido tan difícil. – se vanaglorió de vuelta con sus amigos, sacando pecho como si hubiera vuelto de una gran batalla. Se echó a reír.

- Oh, pero ahora te queda lo más difícil. Hacer el trabajo sin echarle un hechizo.- se burló Harry.

Otra cosa quisiera echarle yo…

- ¿Para cuando habéis quedado?

- Hoy a las 8 en la Biblioteca.

- Creía que íbamos a estudiar Transformaciones juntos.- le reprochó Mione.

- Ups. Bueno, como tu misma dijiste es difícil quedar con nuestros horarios de Quidditch. Ya estudiaremos juntos otro día.

- Claro.- la voz de la castaña sonó algo decepcionada.

- ¿Estás enfadada?- La abrazó por los hombros mientras le sonreía. La estrechó un momento contra él.- ¿Conmigo?- le hizo un puchero.

- Claro que no, tonto.- le devolvió la sonrisa.


CONTESTACION A LOS REVIEWS

Una pequeña nota: Se que no ha habido mucho Draco, pero es para compensar el siguiente capitulo. Jejeje.

Segunda nota: Siento los >> pero como no me deja separar los parrafos...

DanielaGrangerBueno, se que Draco ha sonado más bien amistoso, y la verdad es que a mi me gusta más en su plan de siempre… pero tampoco lo puedo poner tan borde que no le deje ninguna oportunidad a Ron. Pero te haré caso y en el siguiente capítulo volverá algo más loco a nuestro pelirrojo. Jejeje.

Si has leído la nota de arriba verás porque no he podido actualizar ni escribir emails (aunque reconozco que los emails no son lo mío.) Se me rompió el disipador y no me di cuenta y se quemó el procesador. Y en plenas vacaciones del personal…

Espero tener noticias tuyas pronto. Bss

BcnGirlLa verdad es que si está algo confuso el pobre. Pero claro, no es fácil descubrir que te gusta no solo tu peor enemigo, sino el peor enemigo de tus amigos. Y más que le queda, jejeje. ¿Qué te parece en este?

Aglae¿de verdad? Pues me alegras mucho, porque siempre intento que los personajes se parezcan lo máximo posible a sus personalidades del libro, en las medidas de las posibilidades del fic, claro. Al verdadero Ron no creo que le gustase mucho Draco.

Bueno, ya sabes que tienes la oportunidad de elegir pareja y tema para un mini fic. Espero tu idea.

AshuraTarde, pero aquí está. Llevo un año con el ordenador… cuando no es una cosa es otra. ¿Qué te ha parecido aquí? No te preocupes, aunque aquí solo lo insinúo, va a tener más quebraderos de cabeza. Ya lo verás en el siguiente capítulo. Y veremos si aprovecha o no los trabajos de Pociones.

Joanne Distte: Ya se que me repito pero¡Y SDY! Bueno, seguro que ahora miro y acabas de actualizar, las leyes de Murphy rigen mi vida además de la de Ron. El siguiente que espero actualizar será el de Salazar, aunque escribiendo esto se me acaba de ocurrir una idea genial para un "examen". Creo que te encantará. Jejeje.

He de decirte que la pareja Ron/Draco siempre ha tenido un especial morbo para mi, creo que se complementan a la perfección. Ron es mucho más varonil físicamente que Draco, pero sin embargo Malfoy tiene una personalidad mucho más fuerte que Ron (corramos un tupido velo sobre la escena de los baños del sexto libro). Ha veces las personalidades de los fics acaban adquiriendo más fuerza que las de los libros, no crees?

Espero noticias /fics tuyos pronto.

¿Te apuntas al concurso?

Miss Andreina Snape: Aquí tienes más Ron, aunque poco Draco. Espero proseguir pronto, porque los principios de curso siempre se comen mucho tiempo y hay que aprovechar. Bss.

Dagon¿a que está para comérselo? Bueno, va a empezar a confundirse más y más. Al pobre le voy a dar los siguientes capítulos. ¿Has leído lo del concurso¿Se te ocurre algo? Seguro que sí. Mientras más loco mejor.