Disclaimer: No me pertenecen ni Slam Dunk, ni sus personajes; si lo hicieran otro gallo cantaría. Hn!

Este es mi primer Senhana. Kyaaa! Que emoción. Se lo prometí a Akira Sendoh. Akira espero que te guste.

Sumario: La típica historia de que el pobre Hanamichi no tiene NPI de que es gay, y hace falta que tenga detrás suyo a uno de los tipos más sexys de Kanagawa, para darse cuenta.

CAPITULO 2

- Rukawa! Exclamó Youhei. Pero cuando vio una pequeña, casi imperceptible sonrisa en los labios del zorro. Ahí casi le da un infarto.

-¿Cómo andas Kit's? Preguntó Hanamichi pasando un brazo por encima los hombros del kitsune.

-¿Kit's? Preguntaron los dos morenos. Rukawa con una vena en la frente y Youhei haciendo un agujero en el suelo, con su mandíbula inferior.

-Sip! Kit's de Kitsune. Nyahahaha! Es un mote entre amigos. Tu puedes llamarme Tensai o Rey de los rebotes o Super Rookie o…Decía Hanamichi.

-Torpe te pega mejor. Declaró Rukawa.

-Teme! Exclamó Hanamichi.

-Alto! Ahora mismo me explicáis que pasa aquí. Dijo furioso Youhei. Aunque más que furioso estaba dolido por no saber nada de la nueva "amistad" o quizás por algo más.

Los tres chicos entraron en un bar. Cuando el camarero les trajo lo que habían pedido, empezó el interrogatorio.

-Cuando estaba en rehabilitación, todos los días el Kitsune pasaba corriendo por allí. Cuando nos encontramos cara a cara, discutimos y nos peleamos, pero, poco a poco, nos fuimos haciendo amigos y ya ves. Dijo Hanamichi, explicando por encima lo ocurrido.

Rukawa no abrió la boca en ningún momento, solo asintió.

-¿Y no se te ocurrió comentarme nada? Preguntó Youhei aún molesto.

-No quería que me vieras hecho una mierda. Y sabía que si te decía algo vendrías a interrogarme como ahora. Se defendió el pelirrojo.

-Eso no es excusa y lo sabes. Dijo Youhei más calmado, ya se le había pasado el enfado.

-¿Me perdonas? Preguntó Hanamichi con cara de perrito aporreado.

Youhei suspiró y asintió.

-Bien! Exclamó Hanamichi pasando los brazos por los hombros de los dos morenos. Entonces el móvil de Youhei sonó.

-Ahora vuelvo! Aquí dentro no tengo cobertura. Dijo Youhei levantándose y saliendo a la calle.

Justo entonces Hickoichi del Ryonan entró y vio a los dos del Shohoku, Hanamichi aún tenía el brazo en los hombros de Kaede.

-Joder! Exclamó; después salió corriendo. Pero los otros dos ni se enteraron.

-Bien Kit's, parece que a Youhei no le disgusta que estés por aquí. Seguro que pronto seréis buenos amigos, si le dejas, claro. Dijo Hanamichi sonriendo.

El moreno hizo una mueca semblante a una sonrisa.

-Me encantaría, pero debes ayudarme, ¿crees que me aceptará si sabe que me gustan los hombres? Preguntó preocupado Kaede.

-Yo lo hice, y me enteré de una forma más fuerte. Dijo el pelirrojo, al ver como se ensombrecía el rostro del otro chico quiso golearse. Lo siento, no quería…Intentó disculparse Hanamichi.

-Tranquilo, no pasa nada. Además si no fuese por ti ahora estaría muerto. De todas formas, nadie diría que tuvieras una mente tan abierta. Dijo Kaede malicioso.

-Hey! Protestó el pelirrojo. Eso es un golpe bajo!

Entonces entró Youhei con cara de confusión.

-Acabo de ver salir a Hickoichi, parecía que hubiera visto un fantasma. Solo decía…"Debo informar a Sendoh-san…Debo informar a Sendoh-san" Cada día está más raro, ese crío.

-Puede que sea porqué ha visto, que ahora nos llevamos bien. Dijo Hanamichi refiriéndose a si mismo y a Kaede.

-Debe ser eso. Coincidió Youhei. Por cierto, he oído que Sendoh es el nuevo capitán del Ryonan.

-Era de esperar. Pero eso no importa voy a ganarle, a ese erizo hentai. Dijo Kaede convencido.

-Ja! Eso será si no lo hago yo primero, Kitsune! Nyahahaha! Rió el pelirrojo. Los otros dos sacudieron la cabeza, pero medio sonriendo incluso Kaede.

En un barrio cerca de allí…

-¿Estás seguro de que es buena idea? Preguntó Akira por quinta vez en dos minutos.

-Que siiiií! Ya te lo he dicho. Hickoichi haría sombra al mejor espía de la CIA. Dijo exasperado Hiroaki. Mira! Hablando del Rey de Roma…

Hickoichi venia corriendo a toda prisa.

Sendoh-san! Koshino-san! No se lo van a creer. Es…es increíble…es…es…Intentaba explicarse el pobre chico, sin mucho éxito, la verdad.

-Hickoichi, ¿Qué ocurre? Preguntó Hiroaki perdiendo la poca paciencia que tenía.

-Rukawa y Sakuragi…Empezó Hickoichi.

-Rukawa y Sakuragi…Repitieron los otros dos.

-…Son pareja! Exclamó el más joven.

-Ahh! Eso! Dijeron a coro Akira y Hiroaki. Cuando analizaron la nueva información. Akira se desplomó, cayendo al suelo y Hiroaki se pasó una mano por el pelo.

-Sendo-san!¿Que le ocurre? Preguntó preocupado Hickoichi.

-Na…nada, solo me ha sorprendido, eso es todo. Perdonadme, acabo de recordar que…que mi madre…quería…quería…Sin terminar la frase se levantó, y salió caminado con rapidez.

Hiroaki fue tras él. Al doblar la esquina, Akira había desaparecido; Hiroaki pensó que el otro chico había empezado a correr. Así que, él corrió tan rápido como pudo hacia la casa de su amigo. Cuando llegó, tocó el timbre, pero nadie contestó. Estaba abierto, sin pensarlo demasiado, entró y fue a la habitación de Akira. Allí, acostado en la cama, estaba Akira, llorando.

Akira sabía que no estaba solo, como también sabía quien estaba son él.

-Ahora entiendo porqué dicen que los ignorantes son más felices. Hubiera preferido mil veces, continuar pensando que solo le gustaba esa. Dijo Akira, su voz sonaba calmada, pero sus lágrimas no dejaban de caer.

-Solo quería ayudarte, si lo hubiese sabido…yo…Lo siento mucho! Se disculpó Hiroaki, sintiéndose responsable de todo.

-No es culpa tuya, pero no entiendo que le ve a ese Bloque de Hielo andante. Por Dios! Si ni siquiera habla! La rabia y los celos hablaban por la boca de Akira.

-Todos llevamos una máscara, Akira. Le dijo Hiroaki.

-No puedo creerme que te pongas de su lado! Exclamó furioso Akira.

-Sabes que eso no es cierto! Y en lugar de ponerlo a parir, deberías intentar ganarle! Puede que solo se gusten. ¿Desde cuando te rindes en el primer asalto, huh? ¿ Eh, Akira? ¿Desde cuando? Le enfrentó Hiroaki.

Akira se quedó mudo. Más por la forma en que le había hablado Hiroaki, que por lo que le había dicho.

-Tienes razón. Pero ellos se ven todos los días! Dijo Akira.

-Gracias a nuestro espía, sabemos donde vive y que rutina sigue, será fácil hacerte el encontradizo con él. Dijo Hiroaki cruzando los brazos.

-Pareces un mafioso, o algo así. Dijo Akira. De todos modos no me soporta.

-Te ve como un gran rival a vencer, pero con Rukawa le pasa lo mismo. Además eso y su descomunal ego pueden servirte para quedar con la excusa de un uno contra uno. Y no se te olvide que ahora eres el capitán así que puedes proponerle a Taoka que realice algunos partidos amistosos, obviamente con los otros equipos también. Así matas dos pájaros de un tiro. Dijo Hiroaki sabiendo que el otro solo estaba buscando excusas para no luchar.

-A veces me das miedo! Dijo Akira resignado.

-A mi lo que me da miedo es que te abandones, Akira. Porqué si te rindes en esto, también te rendirás en lo demás, y no me da la gana! Así que sécate esas lágrimas! Ordenó Hiroaki.

-Sí, señor! A sus órdenes, señor! Exclamó Akira saludando como un militar.

-Ese es el espíritu, soldado! Dijo Hiroaki siguiendo el juego.

-¿Pero que no era capitán? Preguntó haciendo puchero Akira. Hiroaki puso los ojos en blanco y Akira se secó las lágrimas y empezó a reírse. Hiroaki pronto le acompañó.

Continuará…