Disclaimer: No me pertenecen ni Slam Dunk, ni sus personajes; si lo hicieran otro gallo cantaría. Hn!

Este es mi primer Senhana. Kyaaa! Que emoción. Se lo prometí a Akira Sendoh. Akira espero que te guste.

Sumario: La típica historia de que el pobre Hanamichi no tiene NPI de que es gay, y hace falta que tenga detrás suyo a uno de los tipos más sexys de Kanagawa, para darse cuenta.

CAPITULO 9

Hanamichi abrió los ojos y vio que estaba solo. Al recordar que había soñado se sonrojó, en el sueño cuando el beso terminó Akira empezó a hacer in Striptease en medio de la calle.

Entonces vio entrar a Kaede y Youhei los dos sonreían ampliamente. -¿Me he perdido algo? Preguntó curioso.

Kaede al contarle lo ocurrido a Hanamichi se sonrojó un poco.

-Hn! No se porqué reaccionas así, si eres un pervertido. Dijo Youhei.

-A mi no me compares con ese idiota de Sendoh! Dijo Kaede.

Algo en Hanamichi estalló. –Akira no es ningún idiota y mucho menos un pervertido, ¿te enteras? Gruñó Hanamichi.

La pareja se quedó a cuadros. Luego Youhei sonrió pícaro. –A veces la realidad supera la ficción. Dijo pensando en la mentira que le había contado a Haruko sin saber el gran daño que había provocado.

Kaede quería hablar con Hanamichi sobre Haruko pero el pelirrojo no le prestaba atención.

Hanamichi quería que la tierra se lo tragase entero allí mismo. -Mm…er…Ahh! Que tarde es, había quedado con…con…

-¿Con Sendoh? Sugirió Youhei.

Hanamichi tenia tantas ganas de salir de allí que sin pensarlo dijo que sí. –Sí, eso es. Adiós!

-Hanamichi espera! Le llamó Kaede, pero el pelirrojo ya estaba años luz de allí. Youhei deberíamos decirle la verdad sobre Haruko.

-Tranquilo, no creo que haga nada, además dudo mucho que Hanamichi se interese por ella. Dijo Youhei sin saber que el daño ya estaba hecho.

Kaede lo pensó un momento y decidió que su ahora novio tenía razón. Entonces un brillo apareció en sus ojos.

Youhei imaginándose por donde iban los tiros sacudió la cabeza. -¿En que lío me he metido? Susurró cuando Kaede le abrazó y empezó a besarle el cuello.

Hanamichi corrió a toda prisa unos 10 minutos, cuando paró no sabía donde estaba, mirando a su alrededor vio salir a Koshino de una casa. Le sorprendió ver que el chico parecía muy triste y a la vez muy enfadado, aquello le dio mala espina.

-Koshy! Koshy! Le llamó corriendo hacia el moreno, pero este no le escuchó y siguió caminando.

Cuando el pelirrojo llegó en frente de la casa de donde había salido Hiroaki, vio que era la de Akira. Un sentimiento raro se apoderó de él; sentía curiosidad por saber que le había pasado a Akira, tristeza porqué sabía que era algo malo, y rabia, cuando pillase al responsable que le había hecho daño a Akira, el tipo estaba muerto y enterrado.

Al final se decidió a llamar a la puerta. Le abrió un Akira apagado y con los ojos rojos e hinchados de tanto llorar.

Hanamichi al verlo notó como su corazón se rompía en mil pedazos, sin pensarlo abrazó a Akira.

El moreno después de la sorpresa intentó liberarse, pero estaba muy cansado y los brazos de Hanamichi le hacían sentir tan bien. Se rindió y cerrando los ojos correspondió el abrazo. Nuevas lágrimas empezaron a rodar por sus mejillas. Cuando abrió los ojos vio que ya no estaba en la puerta de su casa, sino en su habitación.

-¿Qué haces aquí? Preguntó más calmado, pero su voz era fría como el hielo.

Hanamichi se cortó ante esto pero se apresuró a contestar. –Yo…vi salir a Kosh-Kosh de aquí, como vi que estaba muy triste y enfadado le llamé, pero no me contestó, luego vi que era tu casa…pensé que te había pasado algo malo…y…bueno…yo…quería…quería…

-No puedes castigarle por no amarte! Le recriminó su mente a Akira.

-Ya lo se pero…duele…duele tanto. Además dijo que ya no sentía nada por ella. Se defendió Akira. –No quiero hablar de eso! Dijo en voz alta.

-Entiendo, pero si alguna vez…quieres hablar…yo…me gustaría que tu…estoy aquí, ¿vale? Dijo Hanamichi.

Akira asintió.

Durante unos minutos un silencio inconfortable se apoderó de la habitación.

-Deberías decírselo, quizás le alegre saber que te importa de verdad. Dijo una voz a Hanamichi.

-Ya pero él ama a otro. Dijo Hanamichi.

-¿Y eso que importa? Tu debes hacer que se sienta lo mejor posible, aunque eso signifique otro rechazo. ¿Crees que soportarás mucho tiempo más viéndole así. Le desafió su conciencia.

Hanamichi miró a Akira y supo la respuesta. –Oye…Akira…se que no es el momento apropiado pero…yo quería decirte que…que tú…me…gustas…me gustas mucho. Confesó Hanamichi sin mirar a Akira, cuando lo hizo esperó encontrar simpatía aunque no amor, pero sus ojos toparon con una mirada llena de dolor y tristeza.

-Eso explica porqué estabas metiendo tu lengua dentro de la garganta de tu adorada Haruko. Se mofó sarcástico Akira.

Hanamichi parpadeó confuso y luego recordó el sueño.- El sueño! El sueño era real! Exclamó Hanamichi.

-Sí, ¿Qué bien no? Tu querida te corresponde.

-No! Tú no lo entiendes! Creí que era otra persona…creí que quien me besaba…creí que…Intentó explicarse Hanamichi.

-¿Creíste que? ¿Qué era Rukawa, Maki? Dijo Akira alterado.

Hanamichi se enfadó, que Akira estuviera sufriendo, no significaba que pudiera tratarle así. –No idiota! Creí que eras tú! ¿Pero sabes que? Me alegro que no lo fueras porqué eso significaría que amo a un…un…a un hijo de mphhhhh...La rabia se desvaneció del cuerpo de Hanamichi cuando Akira le beso. Hanamichi colocó sus manos en las caderas de Akira.

Mientras el moreno sujetaba con sus manos el rostro de Hanamichi, cuando se quedó sin aire separó sus labios de los del pelirrojo.

-Akira…Susurró Hanamichi besando el cuello del moreno.

Akira ladeó su cuello dándole mejor acceso a Hanamichi, luego sus manos empezaron a explorar al torso del pelirrojo.

Mientras Hanamichi sujetaba a Akira por el pelo, pero amarrándole suavemente y con su otra mano acariciaba el sexo de Akira.

Ninguno de los dos pensaba en que los padres de Akira podían llegar en cualquier momento, ni que hace a penas unos minutos no eran nada; solo de dejaron llevar por sus sentimientos y su pasión reprimida durante mucho tiempo por razones distintas que ahora no importaban. Ahora solo existían ellos dos en el universo.

Poco a poco empezaron a desnudarse mutuamente el uno al otro. Cuando Hanamichi le quitó a Akira la última prenda de ropa, se quedó observando el cuerpo del moreno mientras trazaba con sus dedos el pecho de Akira.

Hanamichi sin decir nada se arrodilló en frente de Akira y empezó a besar al abdomen, de este. Sujetando son una mano a Akira por las caderas, mientras la otra acariciaba el pene y los testículos del moreno.

-Ah…Hana…Mm…Gemía Akira cerrando los ojos, sus dedos se enredaban y jugaban con el pelo de Hanamichi.

La boca de Hanamichi fue bajando hasta encontrarse con la erección cada vez más grande de Akira. Primero fueron unos simples lametazos como si fuera un gato, luego empezó a chupar lentamente y de forma sensual el pene de Akira. Disfrutando de los gemidos que arrancaba de su amante.

La dulce tortura de Hanamichi estaba volviendo loco de placer a Akira. Este cada vez más excitado, gemía más fuerte.

Hanamichi se compadeció del pobre Akira y aumentó el ritmo. Haciendo que Akira se acostara en el suelo.

-Más…rápido…sí…así…Ahhh! Decía Akira. Segundos después se vaciaba en la boca expectante del pelirrojo gritando su nombre, quien bebió hasta la última gota del semen de Akira.

Hanamichi al ver a Akira con la boca abierta y los ojos cerrados se volvió loco y besó al moreno con desesperación.

Aquello hizo reaccionar a Akira, recuperando sus fuerzas se levantó agarró a Hanamichi y lo lanzó sobre su cama, luego se posicionó encima.

Colocó las manos de Hanamichi por encima la cabeza del pelirrojo y las sujetó con una mano. Cuando Hanamichi empezó a moverse como si quisiera escapar, Akira le miró dolido.

-Quiero tocarte…necesito tocarte…Susurró Hanamichi sacando de su error a Akira, quien sonrió.

Tan pronto Akira liberó a Hanamichi, este le abrazó y empezó a besar la garganta del moreno.

Aunque Akira disfrutaba de esos besos tenía algo que hacer…Empezó a jugar con los pezones erguidos de Hanamichi, con sus manos; mientras introducía su lengua en el ombligo de Hanamichi.

Después su objetivo fueron el pene y los testículos del pelirrojo.

Akira separó las piernas de Hanamichi y se colocó en medio. Mientras lamía y chupaba el pene del pelirrojo, sus dedos empezaban a preparar a Hanamichi.

Hanamichi estaba muy excitado así que la primera vez que Akira tocó con sus dedos la próstata del pelirrojo, esté se corrió en la boca de Akira.

-Aún no he terminado contigo Koi. Dijo Akira pasando su lengua por la oreja izquierda del pelirrojo. Akira hizo que Hanamichi se pusiera a cuatro patas delante de él. ¿Estás listo?

-Sí, date prisa! Le espetó Hanamichi impaciente.

Akira miró el trasero de Hanamichi de forma depredadora. Poco a poco fue entrando, dando a Hanamichi la oportunidad de acostumbrarse.

-Muévete…Susurró Hanamichi, no era una orden, pero tampoco una súplica.

Akira accedió encantado, al principió sus movimientos eran lentos; pero luego las embestidas empezaron a ganar velocidad. Atrajo la espalda de Hanamichi hacia su pecho. Luego con una mano empezó a masturbar a Hanamichi al mismo ritmo que penetraba al pelirrojo.

-Ahh!...Sí…Más rápido…fuerte…más fuerte! Gritaba Hanamichi.

Akira obedeció encantado. –Como… quieras pero… puede que mañana…no…no puedas caminar. Dijo embistiendo más fuerte.

-Entonces… será mejor…mejor…que…que me…quede…quede aquí…Akiraaaa! Hanamichi se corrió gritando el nombre de Akira.

Akira necesitó unas embestidas más para terminar, luego se desplomó sobre Hanamichi. Después salió de su amante, se tumbó al lado y colocó al pelirrojo encima de él.

-¿Quieres ser mi novio? Preguntó Hanamichi somnoliento.

-No se que decir, me pillas por sorpresa. Bromeó Akira.

-Idiota! ¿Pero eso es un sí o un no? Dijo Hanamichi.

-Claro que sí! Oye Hanamichi…¿Hanamichi? Se ha dormido! Bueno será mejor que siga su ejemplo. Dijo Akira bostezando.

Epílogo

Al cabo de dos horas la madre de Akira entró en la habitación de se hijo con la intención de regañarle por no cerrar la puerta de la calle con cerrojo. Pero cuando vio a su hijo y a otro chico desnudos en la cama y abrazados, casi le da un infarto. Iba a gritar pero su marido le tapó la boca con una mano.

-Déjales parecen muy cansados. Dijo el hombre como si su hijo hubiera estado jugando al básquet. Además siempre te quejas que solo sale con Hiroaki.

La mujer pensó en ello un momento; luego sin decir nada salió, al cabo de unos minutos volvió con algo que dejó en la mesilla de noche de Akira, y tapó a los chicos con una sábana.

-Oye…Dijo el hombre una vez salieron de la habitación, señalándola. ¿Qué te parece si…? ¿Huh?

-No! Como no quieres que le castigue a él, te castigo a ti. Dijo dándole la espalda a su marido. Empieza la cuenta a tras: 5…4…3…2…1…0 Vaya! Debo estar perdiendo mi toque. Pensó justo entonces su marido la volteó y presionó sus cuerpos contra la pared.

-O tal vez no. No hay nada mejor que negarte lo que quieres, para que lo desees con más fuerza. Dijo ella altiva.

-Calla y bésame! Murmuró él cargando a su mujer como si fuera su noche de bodas y entró en su habitación.

Ya era de noche cuando Akira despertó. -¿Huh? No recuerdo…Ahh! Exclamó golpeando su frente con la palma de su mano. Lo ha visto todo. Dios!. Entonces vio que había algo envuelto con un papel en su mesilla de noche. El papel era una nota.

-"Comed! Las necesitaréis si eres como tu padre" Decía la nota. Eran unas barritas energéticas.

Cuando Akira entendió el mensaje se sonrojó. –Mm…mejor no se lo cuento! Susurró mirando a Hanamichi.

Sin hacer ruido Akira fue a tomar un baño. Ya estaba completamente relajado cuando Hanamichi se metió en la bañera con él.

Después Hanamichi hizo que Akira se sentara en su regazo. –Aún no he terminado contigo Koi! Susurró en el oído del moreno. Y tal vez el que no puede caminar, pero en días seas tú!

Esto estremeció a Akira provocándole escalofríos, pero mucha excitación.

Y digamos que las madres rara vez se equivocan.

(N/A: Uf! Que epílogo más largo ocupa casi tanto como el capi, bueno sigo)

A la mañana siguiente estaba de muy buen humor (y podía caminar perfectamente); incluso escuchó a los profesores.

Esto en lugar de alegrar al claustro los dejó aterrorizados.

-Cuando estalle será peor! Se quejó Prof. 1

-¿Qué hemos hecho para merecer esto! Exclamó histérico Prof. 2

-Creo que voy a jubilarme. Dijo Prof. 1

-Solo tienes 30 años. Le recordó su compañero.

-Auxiliooooo! Gritó Prof. 1

Hanamichi le contó a Youhei lo ocurrido, sin mencionar detalles sin importancia como que él y Akira no habían parado en toda la noche, el interrogatorio de sus suegros. Naa! Tonterías! ¿A quien le importaba eso?

-¿Me llamó Koshy! Exclamó Hiroaki cuando Akira le explicó su última hazaña. ¿ Toda la noche? ¿Pero de que planeta sois vosotros dos?

-Oi! Grita más que en Plutón, no se han enterado. Se quejó Akira.

-Te recuerdo que tu madre ya lo sabe! Sheesh! Con lo estricta que parece, y mira que liberal que nos ha salido. Dijo Hiroaki palmeando la espalda de Akira, este se rascó la cabeza y rió.

Dos semanas después los 4 equipos más fuertes de Kanagawa: Shohoku, Ryonan, Shoyo y Kainan; disputaron un torneo amistoso. También participaron Maki, Fujima y Hanagata.

(N/A: No voy a relatar los partidos; ganó el Ryonan y ya está).

Al terminar todas las fans de Akira empezaron a echársele por encima. Y esto Hanamichi no quiso tolerarlo.

Gruñendo y murmurando, vete tu a saber que, se dirigió a la conmoción.

Ryota intentó detenerle, ya que sabía que Akira y Hana eran pareja al igual que Youhei y Kaede; pero Mitsui se lo impidió.

-No te metas o saldrás herido. Además que nosotros sepamos nunca ha puesto la mano encima a una mujer. Dijo Mitsui. Ryota asintió.

Kaede y Youhei miraba atentos todo el embrollo.

-No…no será capaz de…Dijo Youhei pasando una mano por su pelo.

Hanamichi rescató a Akira de las br…fans y atrajo a Akira hacia su cuerpo, luego le dio un beso en los labios delante de todo el mundo. Cuando Akira abrió la boca para decir algo, Hanamichi aprovechó para meter la lengua dentro.

El único ruido que se escuchaba eran las carcajadas de la banda de Hanamichi.

-Si es capaz…Murmuró Youhei.

-¿Él! ¿Te referías a él? Gritó histérica Haruko señalando a Akira.

Youhei iba a contestarle como se merecía pero los labios de Kaede se lo impidieron.

-Ahhh! Gritaron las fans de Kaede, para luego desmayarse como habían hecho las de Akira.

-¿Por qué no aprovechamos antes? Se quejaron las de Hanamichi.

-¿El mono rojo con Sendoh? ¿Rukawa con el amigo del mono rojo? Exclamó Kiyota.

-¿Celoso? Se burló Miyamasu.

-¿Celoso yo? Maki-sempai está más bueno que todos esos juntos! Cuando Kiyota se dio cuenta de que había dicho quiso morirse.

-¿Eso crees? Preguntó Maki avanzando como un cazador hacia Kiyota.

-Ah! No…yo…quería decir que mphhhh! Fuese lo que fuese, lo que Kiyota quería decir, los labios de Maki evitaron que lo hiciera.

Fujima y Hanagata se miraron y luego se apuntaron a la moda.

Hiroaki miraba satisfecho es espectáculo. –Soy el mejor cupido del universo.

Entonces alguien le tocó le hombro con un dedo. Era Mitsui.- ¿Quieres imitarles? Susurró agarrando a Hiroaki por los hombros y acercando sus bocas a escasos milímetros.

OWARI

Kh9: Ya ta! ¿Y bien que os ha parecido?

Hana: Has dejado el lemon a medias justo cuando me tocaba a mí ser el seme.

Ru: Al menos tú has tenido, nosotros ni lo hemos visto pasar.

Kosh-Kosh: ¿Con Mitsui!

Michy: Oi! Que prefiero mil veces a mi Megane-chan.

Aki: ¿Y se supone que el pervertido soy yo, cuando esos solo hablan de sexo?

Kh9: Bwaaaa! No les ha gustado. Snif! Snif! Bwaaa!

Aki: A mi me ha gustado mucho, no llores más que luego te duele la cabeza.

Kh9: ¿ De…verdad…Sniff!...te ha gustado…Sniff?

Aki: (Asiente una y otra vez)

Kh9: ¿Y si no hubiera puesto lemon…Sniff?

Aki: …

Kh9: Bwaaa!