¡Hola! Bueno, los que me han leído antes saben que nunca había escrito una historia de este tipo, sí había puesto escenas subidas de tono en mis otros fics, pero nada como esto... bueno¡ustedes se darán cuenta!

¡Disfruten el fic y no olviden dejar sus opiniones!

EN UN LUGAR OSCURO

Odiaba eso y Hermione lo sabía, pero le habían prometido a sus amigos que les permitirían realizar la fiesta de Navidad en la casa sólo porque Harry no sabía qué otras excusas dar para librarse en esa ocasión.

Habían pasado ya varios años desde que se habían graduado de Hogwarts, y Harry y Hermione tenían ya casi más de 6 años viviendo juntos. Habían tenido una breve y secreta relación en su séptimo curso, que habían terminado por Harry y todo lo que estaba pasando. Prometieron volver cuando todo se calmara y hacer pública su relación, por lo menos entre sus amigos y familiares. Y así lo hicieron.

Hermione le juró que siempre lo esperaría, ya había esperado demasiados años, un poco más no le haría daño, aunque se equivocó. Le dolía verlo sufrir y no poder abrazarlo, no soportaba verlo preocupado y no poder besarlo para reconfortarlo. Pero el tiempo pasó más rápido de lo que creían y todo terminó, en cuanto se recuperó de las heridas que había sufrido en la última batalla pasó día y noche a su lado, esperando a que se recuperara.

Y a él le gustó verla a su lado cuando despertó, y siguió siendo así hasta que se graduaron. Hermione regresó con sus papás y Harry tenía que actuar como un verdadero novio, ir a visitarla a su casa, salir de vez en cuando, pasar tranquilas y románticas tardes en Grimmauld Place, y soportar los cuestionamientos del señor Granger, su ahora suegro.

Tenían apenas 4 años de casados, pero habían logrado demostrar, ante los ojos de un celoso señor Granger, que se amaban de verdad y le permitió a Hermione vivir con su novio aún sin haberse casado con él.

– ¡no te enojes, Harry! – le suplicó Hermione mientras lo seguía a la cocina.

Harry se veía bastante molesto y hurgaba en el refrigerador y la alacena sin saber qué buscaba realmente.

– llevamos años negándonos, no podíamos evitarlo por más tiempo... – le decía intentando razonar con él – son nuestros amigos... –

– él no es mi amigo... – dijo con tono serio, sin dejar de observar las latas y refrescos que habían en la alacena.

– has pasado otras Navidades con él – razonó Hermione, pero Harry negó inmediatamente.

– era completamente diferente... si me hartaba de verlo podíamos irnos... pero ahora tenemos que aguantarlo hasta que se vaya... – decía molesto, cerrando con fuerza la puerta de la alacena.

– la puerta no tiene la culpa... – dijo intentando no reírse, haciendo que Harry la volteara a ver furioso.

– ¡claro!... ¡búrlate de que me han arruinado mi Navidad! – se quejó mientras salía de la cocina con Hermione pisándole los pasos.

– si quieres podemos hablarles y cancelarlo... les diremos que olvidé que habíamos planeado celebrar nuestra segunda luna de miel... – le decía intentando tranquilizarlo, mientras caminaba a su lado, y se detuvo al ver que él lo hacía – y podríamos aprovechar la mentira y realmente recordar nuestra luna de miel... – le dijo sonriendo con coquetería mientras pasaba sus brazos por su cuello, haciendo aparecer una sonrisa floja en los labios de Harry.

– me encanta tu idea, pero... nadie creerá que olvidaste algo... mucho menos algo así... – dijo ensanchando su sonrisa, antes de inclinarse sobre ella y besarla profundamente, sintiendo el sabor dulce de los labios de su esposa combinado con el sabor a mentol del dentífrico – ¿no te gustaría ir adelantando esa segunda luna de miel? – le dijo con tono sugerente antes de comenzar a besarle el cuello, pero Hermione negó recibiendo una mirada sorprendida de su esposo.

– recuerda que quedamos con mis papás de ir a desayunar con ellos... – le dijo haciéndolo voltear hacia ella para darle un beso lento, tierno, profundo.

– sí... está bien, lo dejaremos para otro día... en la tarde le prometí a Ron acompañarlo a comprar unas cosas que necesita Luna – aclaró al ver que Hermione se iba a quejar, y volvió a besarla – te amo... – le dijo sonriendo, rozando sus labios, y Hermione le respondió con otro beso, que lo hizo buscar apoyo en la pared que estaba detrás de él.

– voy a arreglarme o se nos hará tarde... – dijo sonriendo, luego de terminar el beso, y se alejó mientras Harry intentaba recuperar el aliento.

– ¿Hermione te propuso tener una segunda luna de miel? – le preguntó Ron bastante sorprendido mientras caminaban por Hogsmeade, y Harry asintió – ¿y porqué te negaste? – lo observó aún más sorprendido, entrando a Las Tres Escobas.

– ¡yo no me negué! – se defendió sentándose en la mesa que estaba junto al árbol de navidad, al fondo del local – Hermione me dijo que no... – decía con gesto molesto, recordando lo que le había hecho pasar esa mañana al darle aquellos besos.

– espera¿primero te dice que quiere tener una segunda luna de miel y después te sale con que no?... no entiendo – dijo bastante confundido, antes de pedir con un movimiento de mano y de labios 2 cervezas de mantequilla.

– es sólo que lo insinuó... y... tú sabes... le sugerí que no perdiéramos mucho tiempo, pero ella se negó porque habíamos quedado con mis suegros de ir a desayunar con ellos, y no lo volvió a mencionar... – dijo decepcionado, y no tardó en darle un largo trago a su cerveza en cuanto la tuvo frente a él.

– bueno, quizá sólo debas recordárselo... si lo sugirió es por algo¿no lo crees? – razonó antes de probar su cerveza, aunque no tardó en separarla de su boca – ahora que lo recuerdo, Luna tendrá vacaciones... creo que sería bueno aprovecharlas... – dijo sonriendo como un niño al que le acaban de regalar el juguete que tanto había pedido, haciendo reír a su amigo.

– oye, dale tiempo de respirar... falta poco para que tengan al pequeño Ronnie – decía Harry sin dejar de sonreír, pero Ron negó.

– aún faltan 5 meses para que nazca mi hijo... y el doctor dijo que no había problema – le recordó encogiéndose de hombros.

– ¿y a Luna no le molesta? – le preguntó confundido y el pelirrojo negó con calma.

– sabe que no pasa nada si lo hacemos... – dijo antes de darle un trago a su cerveza.

– vaya... no creo que Hermione aceptaría... – meditó con gesto ausente – aunque, bueno... es bastante... – decía con una pequeña sonrisa, pero Ron lo interrumpió.

– está bien, creo que no es necesario que me entere de algunas cosas respecto a ustedes, por lo menos no con tantos detalles... – dijo con gesto molesto, recostándose contra el respaldo de la silla – ¿ustedes no piensan tener hijos?... se casaron antes que nosotros y... bueno, nunca me has dicho nada al respecto – dio otro sorbo a su cerveza.

Harry se encogió de hombros – sabes que Hermione siempre quiso desarrollarse profesionalmente... y en el Ministerio ha tenido demasiado trabajo por bastante tiempo así que no hemos tenido oportunidad de hablar de eso... y, bueno, talvez Hermione no quiere, ya sabes cómo es, le gusta planear bien las cosas... – dijo con calma, terminando su cerveza de un solo trago.


Bueno, bueno, en esta parte no hubo nada demasiado "fuerte", pero esperen a la próxima parte... por cierto, el fic sólo consta de 3 partes más...