Error... era lo que pensaba mientras la cargaba caminando por los pasillos de su castillo directo a la antigua habitación que pertenecía a Rin desde que era una niña y la cual a través de los años y a medida que fue creciendo fue decorada de acuerdo a su edad. Ahora seguía intacta a como la dejo hace cinco años. Abrió la misma habitación donde muchas noches solo entro para aspirar su dulce aroma que jamás se extinguió ni desapareció a pesar de los años.

Error volvió a pensar para si.

Tal vez habría sido un error traerla o ¿Tal vez no? Que mejor que enfrentar a tus miedos y debilidades de frente y si Rin representaba eso era mejor tenerla cerca de él para vencer lo único que podía hacerlo débil...excusas...sin embargo él había abandonado a Rin para que formara una familia como una simple y normal humana en una aldea común y por eso no la dejaría ir hasta que recordara quien era. Porque si ella fuera la Rin dulce, tranquila, sonriente, que amaba la naturaleza, nunca hubiera decidido estar con ese grupo de exterminadores arriesgando su vida...vida que él le había devuelto cuando ella tenía aproximadamente siete años...vida que por lo tanto de alguna manera le pertenecía y le daba el derecho de reclamarla cuando quisiera aunque la hubiera abandonado.

La recostó en el futon, su cabello largo quedo tendido en las sabanas, se veía hermosa así, con su cabello suelto desplegando ese brillo natural y puso el kanzashi dorado a un lado observándola detenidamente, aprovechando para detallar cada parte de su cuerpo y notar cuanto había crecido...Hermosa... no era palabra suficiente para describir la belleza que poseía Rin. Jamás pensó que una humana pudiera lograr obtener tanta hermosura...no...claro que si lo pensó cuando ella empezó a crecer.

Sesshomaru sentía que ahora estaba perdiendo poco a poco la auto dominación, pero es que verla después de tanto tiempo fue una sorpresa para él, pues aunque la busco después de aquel día para saber cómo estaba sin que ella se diera cuenta le fue de cierta manera imposible.

Al principio creyó que ella había aceptado lo que le ordeno y se había ido a vivir a la aldea cercana donde la dejo, pero se dio cuenta que no estaba allí. Algunas veces recorrió largos trayectos a los alrededores de sus bastas tierras buscando su aroma pero nunca lo encontró. Al final se resignó pensando que ella estaba ocultándose de él. Pero estaba erróneo ya que como le informo Kyoji aquella aldea de exterminadores pertenecía originalmente a las tierras del Este, al lado contrario de donde él se encontraba, lejos muy lejos de sus tierras y por eso no había podido encontrarla, aunque también se debía a que él no intento buscarla más lejos debido a su orgullo...su orgullo... ¿Dónde estaba en este momento para impedirle que siguiera tocando el rostro de Rin con sus dedos apreciando la suavidad de su piel?

-Hakury-susurro Rin entre sus sueños.

Sesshomaru rápidamente detuvo la caricia que le estaba proporcionando. Su rostro se tensiono y apretó la mandíbula con fuerza haciéndolo ver más serio que nunca. Rin fue despertando poco a poco, todo le daba vueltas pero finalmente pudo ver con claridad

-¿Dónde estoy?- se levantó quedando sentada en el futon y con horror miro que aquel Youkai blanco (como lo conocía) estaba de pie mirándola fijamente y muy serio. Rápidamente se recogió a si misma apoyándose contra la pared con algo de miedo y respirando agitadamente.

El miedo era algo que deleitaba a Sesshomaru en los humanos, pero el miedo que estaba viendo a través de los ojos de Rin de cierta manera le disgusto. Ella jamás lo miro así, pero ya se imaginaba que al perder sus recuerdos no lo trataría como la Rin de antes ¿Por que extrañaba a esa Rin? La que tenía ahora enfrente era totalmente diferente.

Un gran silencio invadió la habitación y Sesshomaru claramente podía oír la respiración agitada de ella que lo miraba con temor pero repentinamente cambio a odio...odio...otra sentimiento que nunca ella le demostró.

-Maldito asesino!-Se puso Rin de pie furiosa al recordar a Hakury en el suelo desangrándose y en ese momento no le importo nada, no le importaba enfrentar al youkai que tenia de pie mirándola fijamente, porque él había asesinado casi a todos sus compañeros, a la persona que la amaba, al único que le había proporcionado cariño y amor que de alguna manera sentía que le hacía falta-Si querías vengarte maldito solo tenías que matarme a mí-se acercó a Sesshomaru de frente con lágrimas en los ojos al recordar tanta sangre, como si él estuviera reclamando el doble de sangre que ella le produjo en su pecho y mano, pero había sido ella quien lo hiciera y no los demás.

Sesshomaru poso su mano en su cuello apretándolo levemente, pero por más que ella quisiera él nunca podría hacer algo así, al contrario lo que estaba haciendo era otra estúpida excusa para seguir tocando su piel...diablos se estaba haciendo una adición para él acariciar su piel y nuevamente pensó que tal vez si había sido un error tenerla cerca cuando ya la había alejado.

-Vamos aprieta hasta asfixiarme y mátame como lo hiciste con Hakury-pero Sesshomaru la soltó bruscamente inmediatamente al escuchar ese nombre ¿Por que lo seguía repitiendo?¿Acaso lo amaba?

-Ese humano no está muerto-le respondió como única explicación y le dio la espalda

-Mientes!- le grito-¿Por que me trajiste aquí?-Rin miro a su alrededor un poco confundida ¿Le habría dicho la verdad acerca de Hakury? - ¿Que piensas hacer conmigo?-

Él no le respondió, camino hasta la puerta y la cerro con llave...no...No dejaría que escapara hasta que recordara quien era ella para que no siguiera con esa idea absurda de pertenecer a una aldea de exterminadores donde arriesgaría cada día su vida. Rin camino hasta la puerta también para intentarla abrirla pero se dio cuenta que estaba con llave

-Déjame salir!-empezó a gritar, necesitaba ver a Hakury y asegurarse que no había muerto.

-Se ha vuelto una escandalosa mi amo-comento Jaken caminando detrás de Sesshomaru pero en el fondo se alegraba que Rin estuviera de vuelta aunque algo cambiada-y también una irrespetuosa, aunque malcriada siempre fue..-como siempre Jaken por estar envuelto en sus comentarios torpemente se chocó con el pie de Sesshomaru y el pánico lo embargo-amo no fue mi intención chocar con usted-dijo algo temeroso de recibir esos golpes certeros que le daba su amo bonito en la cabeza.

-Aun no es tiempo Akira-miro de reojo a una Youkai cuyo cabello era azul oscuro y ojos color aguamarina y cuya figura era muy parecida a la de un humano, solo que su sangre provenía de los Youkais del Sur, los señores del mar donde había nacido y al igual que Kyoji había servido al padre de Sesshomaru por muchos años.

-Si amo-asintió Akira reprimiendo los deseos de ver a su niña, porque había sido ella quien la cuidara y criara mientras estuvo viviendo en el castillo. A diferencia de muchos Youkais ella no le tenía ningún resentimiento ni odio a los humanos, y tal vez una de las razones era porque su apariencia era igual a la de ellos.


-Maldito me aseguraste que él jamás atacaría a mi aldea mientras ella estuviera con nosotros-Ryu se encontraba adentrado en un espeso bosque hablando con un Youkai cuyo cabello largo y negro estaba amarrado con una coleta, sus ojos eran rojos. Poseía una armadura en su pecho que había sido hecha con la piel escamosa de algún animal y como arma llevaba colgando detrás de su espalda una espada que aunque no fuera visible ante los ojos de Ryu por ser humano destilaba una aura del mismo color de sus ojos.

-Lo siento pero Sesshomaru puede ser tan incomprensible-su tono de voz sonaba sarcástico y una pequeña sonrisa de malicia se esbozó de sus labios sin poderla ocultar

-¿Lo siento?-volvió a repetir Ryu a un más disgustado-Mi hijo está casi agonizante por culpa de ese maldito Youkai quien solo regreso para llevarse a Rin con el-una carcajada profunda se escuchó como eco esparciéndose en el bosque -¿Y aun te ríes maldito?

-No lo puedo evitar Ryu mi plan está saliendo a la perfección-Se acerco agarrando por el cuello a Ryu alzándolo algunos centímetros sobre la tierra-

-¿Plan?- alcanzo a replicar pensando que en el plan no estaba implicado que Sesshomaru se llevara a Rin.

-Si Ryu, todo este tiempo te utilice para llevar a cabo mi real plan. El que te enviara a pisar las tierras de Sesshomaru solo fue con el propósito de que él supiera de aquella humana y por consiguiente que la volviera a reclamar como su pertenencia-empezó apretar con algo de fuerza produciendo entre cortados gemidos agonizantes en Ryu.

-Asi que ya no te necesito. Tú fuiste solo un elemento que utilice a mi antojo, algo inútil y sin valor para mí; pero ella a pesar de ser humana es valiosa porque será el arma perfecta para llevar a cabo mi victoria y venganza en contra del señor del Oeste y finalmente poseer sus tierras a mi entera disposición- Ryu abrió los ojos consternado por lo que estaba oyendo-si Ryu sé que te prometí que te daría algunas de las tierras de Sesshomaru después que acabara con él, pero ¿Cómo crees que yo compartiría algo asi con un insignificante humano como tú?-finalmente Yakori termino por apretar con fuerza el cuello de Ryu asfixiándolo y dándole asi muerte. Tiro el cuerpo a un costado y camino perdiéndose en la profundidad que brindaba aquel bosque

-Un poco mas de tiempo señor Sesshomaru y a lo que más le temes será tu perdición-


-Rin-abrió por fin los ojos Hakury débilmente viendo a su lado a Mizuki quien lucía preocupada por su estado

-Tranquilo Hakury trata de no esforzarte mucho-cambio el paño que estaba en su frente remojándolo en la cubeta de agua fría que tenía para intentarle bajar la fiebre.

-¿Donde esta Rin?-pregunto con algo de dificultad y noto el nerviosismo en el rostro de Mizuki quien esquivo su mirada hacia un lado- ¿Donde esta?-volvió a preguntar alzando un poco la voz

-El youkai que ataco la aldea...se la llevo-al escuchar aquellas palabras Hakury intento levantarse pero el agudo dolor que tenía en la parte superior de su pecho no se lo permitió, abriéndose la herida que Mizuki había tratado dificultosamente cerrar para que él no siguiera perdiendo más sangre

-Tengo que ir por ella-fue lo último que alcanzo a decir Hakury antes de caer desmayado de nuevo, debido a lo débil que se encontraba.


Rin se encontraba agotada de gritar y gritar para que la dejaran salir, algo que había sido en vano. Se preguntaba porque el Youkai blanco no la había matado como a los demás en la aldea. Ya él había tenido dos oportunidades y no lo había hecho. Además ¿Como el sabia su nombre?¿Por que cuando escuchaba su nombre en sus labios su corazón latía fuertemente queriendo salirse de su pecho?¿Era emoción lo que sentía su corazón? ohh Kami ese no era el momento adecuado para pensar esas cosas, porque si seguía así se volvería loca...loca de dudas e incertidumbres. Tenía que escapar de ahí como fuera, se levantó y miro su kimono con algo de tristeza, en estos momentos seria la mujer de Hakury.

De cierta manera se sentía culpable pues no se perdonaría el que haya echo ese tonto deseo de que algo sucediera, pero no fue su razonamiento, eso vino de la profundidad de su corazón, fue algo que

salió porque tal vez sentía que estaba engañando a Hakury...no...Era el sentimiento como si estuviera engañando a alguien más...y he otra vez allí ese alguien que no conocía ni recordaba.

-La ventana!-¿Como no lo había pensado antes? Caminó hacia ella abriéndola. Desde donde se encontraba era un poco alto pero si tal vez...sonrió un poco aliviada encontrando por fin la única salida que la sacaría de este infierno.

-Por fin dejo de gritar-entro algo malhumorado Jaken de haber estado todo el día de pie en la puerta de la habitación de Rin, escuchando sus gritos y cuidando de que no intentara nada. Vio a su amo en aquella mesa de forma rectangular y larga sentado en la cabecera mientras Akira recogía el plato que su amo había dejado después de cenar.

-¿Que haces aquí Jaken?-el pequeño Youkai verde se detuvo estático y con algo de temor de haber cometido algo malo pero después de pensar por algunos segundos y confirmar que él no había cometido alguna tontería decidió proseguir y sentarse en la mesa. Además su amo le había hablado en un tono suave, así que no estaba enojado por algo ¿Verdad?

-Vine a comer algo amo, tengo mucha hambre-se quejo esperando que Akira le trajera algo-aprovechando que la gritona de Rin parece que por fin se cansó y se durmió- Sesshomaru se levantó con algo de paciencia y paso por el lado de Jaken donde repentinamente y de la nada le salió un chichón en su cabeza mientras Sesshomaru salía de aquel lugar-Pero amo ¿Ahora que hice?-

Rin bajaba cuidadosamente por la "cuerda" que había hecho por medio de sabanas. Había encontrado muchas en aquella habitación y se notaban que eran de buena calidad, pero eso no era de importancia, amarro una con otra y otra lo más fuerte que pudo hasta lograr que el largo de aquella "cuerda" que había formado llegara hasta el piso. A pesar de la incomodidad de su Kimono y de la lluvia que de repente había comenzado dificultándole el que pudiera bajar, no le importo; miro hacia arriba viendo la distancia que llevaba, pronto llegaría a tierra y podría salir de allí.

Finalmente sintió su pie dar contra tierra y se soltó dispuesta a correr hasta donde sus fuerzas le dieran pero al voltearse para salir corriendo choco contra un pecho varonil y repentinamente sintió la horrible sensación que el aire era insuficiente para respirar al imaginarse quien era. Lentamente subió su rostro para encontrarse con unos inexpresivos ojos color ámbar y como reflejo solo dio unos cuantos pasos hacia atrás tocando la pared por donde había bajado

-¿Como lo supo?-fue un pensamiento que se le salió en voz alta a Rin asustada y como respuesta escucho claramente como el aspiraba una gran cantidad de aire, cayendo en cuenta lo que había aprendido en la aldea; los youkais pueden percibir tu aroma, tu esencia, pero ¿Tan poderoso era olfato de este Youkai que la podía oler desde cierta distancia?

Por su parte Sesshomaru miro hacia arriba mirando como ella había amarrado sabanas para bajar desde su habitación y huir...huir de él, pero no se lo iba a permitir. Bajo su mirada algo molesto pero la imagen que vio lo desconcertó. El agua de la lluvia trascurría por aquel cabello ébano, que aunque estaba húmedo seguía siendo tan hermoso e inclusive más largo, aquéllas gotas que hacían su recorrido a través de su piel logrando algo que él no quería pero deseaba hacer y su Kimono se había adherido mucho a su cuerpo y debido a su color blanco está dejando traslucir la parte de su pecho...pecho tan perfecto para ser humana. Volteo su rostro hacia un lado molesto de tener esos deseos cada vez más incontrolables, si, se estaban haciendo muchos más fuertes que su propia voluntad y eso era a una de las cosas que interiormente le temía. Temor...no, él quien era el más poderoso Youkai no debería ni siquiera pensar en esa palabra.

Rin aprovecho ese estado de ¿Desconcierto? Otra vez el parecía distraído porque aunque aquellos ojos ámbares la vieran, su mirada parecía perdida entre pensamientos ¿Que estaría pensando? Eso no le importaba por Kami, se reprochó y trato de aprovechar aquella distracción que él tenía para cumplir con lo primero que se había propuesto, correr, y cuando alcanzó a dar algunos pasos fue fuertemente agarrada por el brazo y casi arrastrada para que caminara junto a él.

-Suélteme ¿A dónde me lleva?-Pero algo que estaba aprendiendo Rin era que por más que ella preguntara él parecía nunca responder dando alguna explicación ¿Será que ahora si la mataría por intentar escapar? Cerro los ojos hasta que sintió que el dejo de jalarla soltándola con algo de fuerza produciendo que cayera sentada en un charco de lodo, ensuciando por completo su Kimono blanco.

-Por más que lo intentes jamás podrías saltar esos muros-Miro hacia arriba al igual que ella observando unas imponentes y altísimas murallas hechas a base de piedras cortadas que parecían imposibles de trepar. Rin siguió con su mirada el largo de los murallas las cuales rodeaban el castillo y por ende tenían que ser altos e inquebrantables por si eran atacados...que tonta, había pasado por alto eso ¿Acaso no habría salida alguna de ese castillo tan horrífico? su respuesta fue dada:

-No podrás salir de aquí, a menos que yo quiera-Sesshomaru la vio completamente empapada por la lluvia y sucia. Rin bajo su rostro mirando al suelo que de por si ya estaba cerca y apretó con fuerza sus manos sintiéndose sin escapatoria produciendo lagrimas silenciosas las cuales se confundían con las gotas de lluvia pero Sesshomaru las podía distinguir y oler, el olor salino de sus lágrimas...hace mucho tiempo que no la había visto llorar.

Camino de vuelta a la entrada principal de su castillo dejándola allí, sabía muy bien que ella tendría que entrar pues no tenía opción alguna.

Rin quería morir en ese momento, no entendía el porqué ese Youkai se empeñaba en retenerla, en mantenerla con vida, pero si no la mataba entonces mientras viviera encontraría la manera de huir de ese lugar.

Continuara...


Chicas gracias a todas por sus reviews, me alegra mucho cuando los leo.

LadyJ07