Abrió los ojos, algo mareado. Enfrente suyo había un techo blanco, miró a su alrededor, las paredes, el suelo, la cama donde estaba, todo era blanco. ¿Estaría muerto? Pensó que ojalá fuera así, ya que alguien como el no se merecía el don de la vida. Talvez la sobredosis de opio y alcohol hubiesen causado el efecto deseado. Aunque lo dudó al verse conectado a un tubo de suero, y al ver a Tohma a su lado, dormido.
Se incorporó, todavía algo ausente, le daba la sensación de haber dormido mucho tiempo, quizá un día o dos. Tohma se despertó, algo preocupado, pero su expresión se alivió mucho al observar que Ryuichi había despertado.
-Ryuichi... gracias a dios... –Le tomó las manos.-No sabes lo preocupado que estaba, pensé que...-calló.
-No te preocupes Tohma, estoy bien... –Ryuichi bajó los ojos. Sintiendo como todo el dolor que había logrado amainar, retornaba ahora con mayor intensidad.
-Como... ¿como llegaste a ese extremo Ryuichi...? –Tohma apretó sus manos.-Jamás pensé volver a verte así. ¿qué es lo que ocurrió Ryuichi? –le miró a los ojos.-tu ya lo habías superado hace mucho tiempo.
-No... es que...-¿Qué podía responderle? Tohma era capaz de descubrir los pensamientos de alguien con solo mirarle, a pesar de que ahora lo suyos eran un remolino de caos.-Yo no sé lo que...
-Ryuichi, sé muy bien que me mientes. Tal vez seas capaz de engañar a otra persona, pero sabes perfectamente que a mi no me puedes engañar. La mirada que tienes ahora mismo hacia diez años que no la veía.
No podía excusarse, de hecho no tenía nada que decir. Pero bajo ningún concepto podía explicarle a Tohma lo ocurrido. No solo por el, si no también por Shuichi. Puede que Tohma supiera cosas de el que nadie más aparte de K podría imaginarse... pero esa vez era diferente a la otra. Esa vez no podía explicarlo.
-Por favor Tohma... por favor... deja este tema...-Ryuichi le miró seriamente a los ojos.- Te lo suplico. No busques nada, no investigues. Simplemente olvida todo lo que viste en mi casa. Y olvida a este Ryuichi. –le mostró entonces su sonrisa aniñada.-Te gusta más este Ryu-chan ¿Verdad¡Tohma no da!
-Ryuichi...
-¡Tengo hambre no da! – dijo con carita suplicante.- ¿Cuando podré comer?
Como si respondieran a su petición, una enfermera entró con una bandeja de comida, que hizo que a Ryuichi se le iluminaran los ojos.
-Bueeegh... ¿que es esto?- cambió de idea al probar su contenido.-¡No me gusta!
-Bueno, a poca gente le suele gustar la comida de hospital.- le dijo la enfermera riendo.-pero no debe preocuparse, mañana mismo ya podrá salir.
-¿Enserio no da¡fantástico!
La enfermera se marchó, dejando solos de nuevo a Tohma y a Ryuichi. Este se lo pensó mejor y decidió dejar la comida a un lado. Tohma seguía preocupado.
-Ryuichi, rehuyendo a los problemas no lograrás hacer que desaparezcan.-dijo Tohma.- no te digo que me lo cuentes ahora, ni mañana, pero algún día tendrás que hacerlo.
-¿Y si no quiero hacerlo? –Tohma le miró sorprendido ante la dureza con la que dijo aquellas palabras.- ¿Y si esta vez no quiero enfrentarlos¿qué harás si rehuyo de ellos¿me obligarás a afrontarlos a la fuerza?
Tohma no sabia que decirle, la aniñada cara de Ryuichi había cambiado esta vez a una fría y dura mirada de odio. Tohma comprendió que por ahora era mejor dejar las cosas donde estaban.
-Esta bien Ryuichi. calmate. No voy a hacer más preguntas. Te lo prometo.-le dijo ante la expresión de desconfianza de Ryuichi.- dejemos el tema... por ahora. ¿de acuerdo?
-Si. Por favor Tohma. ¿podrías dejarme solo ahora? –No era una petición, era una orden.
Tohma suspiró, no había descubierto nada, pero al menos ya no estaba en el mal estado en que lo había encontrado.-Esta bien. Vendré mañana a llevarte a tu casa.
-Gracias.
-No tienes por que dármelas. –le dedicó una sonrisa y cerró la puerta.
Lagrimas contenidas rodaron por sus mejillas. Había querido olvidarlo todo. Todo lo que había tomado y bebido, quería que lo sumieran en el olvido, intentando no recordar el duro presente. Y funcionó, realmente funcionó. Pero los efectos no duraban eternamente, y cuando se acababan, el dolor volvía, y la dura realidad le golpeaba de pleno.
Intentó controlar el llanto, pero le era imposible, y le dolía tanto el corazón... sabía que se volvería loco, lo supo en cuanto pasó. Ni Tohma podría ayudarle esta vez, ni Tohma ni nadie. Miro al blanco techo.
-¿Y tú, Shuichi¿cómo estarás tu?
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Con las pupilas dilatadas y los ojos irritados, miraba por la rendija que dejaban las dos cortinas cerradas. Shuichi tenía un aspecto deplorable. Hacia días que estaba encerrado en esa habitación, entre las tinieblas de la oscuridad y el desamparo, intentando no pensar. Yuki entraba continuamente a mirar como se encontraba, había intentado hacerle salir de la habitación innumerables veces, pero no lo había conseguido. Shuichi no se movía, no hablaba, no escuchaba. Solo podía removerse en su interior y sentir esa presión en el corazón insoportable, sentir las lagrimas caer sin esfuerzo, sin mover siquiera los ojos. Hundiéndose cada vez mas.
Así duró tres días, sin que nadie supiera nada ni de Shuichi ni de Ryuichi. Hasta que un día, sin previo aviso, para sorpresa de Yuki, Ryuichi se presentó en su casa.
-Tu...-dijo Yuki sorprendido.
-¿Puedo... ver a Shuichi?-Dijo Ryuichi muy serio.
-Antes deberías responderme ciertas preguntas.-Yuki puso una mano en el marco de la puerta dispuesto a obligarte a hablar.
-Lo siento no estoy para preguntas.-intentó entrar, pero Yuki no le dejó pasar.
-Pues vas a tener que estar.
-Pues no, ahora dejame entrar, es a Shuichi a quien vengo a ver.-Ryuichi le empujó mirándole con una mirada tan fría capaz de contrarrestar a la de Yuki, cosa que lo dejo fuera de lugar confundido. Ryuichi fue directo a la habitación de Shuichi y cerró la puerta. Yuki intentó abrirla pero habían echado el cerrojo.
-¡Maldito!- suspiró.-En fin... supongo que lo único que puedo hacer es esperar.-Se fue al comedor muy contrariado y enfadado.
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-Shuichi...- Ryuichi confirmó el mal estado de Shuichi. Evidentemente se encontraba en shock. Se sentó a su lado. –Soy el único que puede ayudarte Shuichi, porque soy el único que puede entenderte.
No dijo nada más, pasaron unos minutos sentados sin moverse, hasta que Shuichi se giró hacia el, con la cara bañada en lagrimas.-No Ryuichi, no puedes ayudarme, al igual que tampoco yo puedo ayudarte a ti.
-Nadie puede ayudarnos, es cierto.-Ryuichi secó las lágrimas de Shuichi.- Y ya no podemos hacer nada para evitarlo. Estamos perdidos y solos. –Shuichi bajó la cabeza intentando contener las lagrimas que se agolpaban de nuevo en sus ojos.- pero no por eso debemos abandonar a los demás.-Le levantó la cara.- No podemos hacer sufrir a los que queremos.
-No puedo entenderte... no se que hacer... yo... –se cubrió la cabeza con los brazos.- No podré olvidarlo jamás...
-Lo se. Yo tampoco. Estamos marcados por aquella noche para siempre hasta el momento de nuestra muerte. –Ryuichi se miró las manos.- Nuestras manos están manchadas de una tinta de sangre que jamás se borrará... pero debemos seguir adelante.
-¿Seguir adelante? –Shuichi le miró.-¿cómo quieres seguir adelante¿cómo podrás vivir fingiendo?
-No será difícil... siempre lo he hecho... –susurró para si mismo sin que Shuichi pudiera oírlo. –No te pido que lo olvides... no te pido que perdones... solo te pido que, ya que hemos arruinado una vida junto con las nuestras, no arruinemos la de los demás.
-No lo sé...
-Escucha, hay mucha gente que nos necesita aun. Si nos marchamos, los dejaremos solos, piensa en Yuki¿cómo se sentiría si no te recuperaras nunca? Estoy seguro que se hundiría contigo, que moriría si le dejarás. – Ryuichi le miraba seriamente.- o piensa en Hiro también, o en tu familia... o en todos tus amigos. No podemos fallarles a ellos como a Ryotsu. Debemos seguir adelante por ellos, aunque nos carcoma el sufrimiento por dentro, aunque solamente finjamos... no importa que suframos nosotros. Lo que importa que no sean ellos los que sufran.
Quedaron en silencio de nuevo. Shuichi procesaba toda la información dada, intentándose convencer que aquello no era más que una terrible pesadilla... pero la pesadilla ya hacía mucho que duraba... y lamentablemente, iba a durar para siempre. Estuvieron callados unos segundos que parecieron horas, hasta que Shuichi dijo finalmente:
-De acuerdo.
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Ni Hiro, ni Suguru, ni Noriko sabían que había ocurrido, simplemente creían que ya se habían repuesto del empacho, y no pensaron nada extraño cuando les vieron aparecer tranquilamente una mañana dispuestos a volver a trabajar. Los que si se extrañaron muchísimo fueron Yuki, Tohma y K. Sabían que Ryuichi había ido a hablar con Shuichi, y al salir le habían pedido perdón a Yuki por preocuparlo, que ya estaban bien. Sin darle más explicaciones a su anterior comportamiento con un ''conflicto interior'', no habían podido sacar más. K no había podido encontrar a Ryotsu, pues este vivía fuera de la ciudad y no había podido comunicarse con su familia tampoco para preguntar su estado. Todos sospechaban algo. Pero decidieron no hacer nada, solamente observarlos con detenimiento, y quedaron para una semana después, para comentar lo que habían notado. Así lo planearon.
Antes de la secreta quedada de Tohma, K y Yuki, Shuichi y Ryuichi volvían a su anterior rutina de trabajo. Nada parecía haber cambiado, todo era como antes. Hasta que algo ocurrió.
Estaban ensayando una canción, tranquilamente, sin que nadie los molestara. Shuichi cantaba la letra como lo hacía normalmente. Cuando le sacudió un escalofrío que lo hizo mirar fuera de la habitación, lo que vio o lo que le pareció ver lo paralizó, dejándole en un estado de terror. Todos lo miraron extrañado cuando dejó de cantar, y se acercaron preocupados cuando lo vieron así.
-¿Shuichi? Shuichi ¿estas bien¿qué te ocurre?-Hiró lo miraba preocupado. –Te has quedado pálido.
La cabeza empezó a darle vueltas, estaba muy alterado ante la visión que ahora había desaparecido, se tambaleó y se desmayó.
-¡Shuichi Shuichi! –oyó que gritaban antes de que todo se volviera oscuridad.
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Aquí subí un nuevo capitulo, espero que les haya gustado y no me maten por dejar el capítulo ahí jejejeje... :P en fin, que será lo que ha visto Shuichi? Que será, será... xD Gracias a los que me dejaron review, muchas gracias a Issichan, M-cha, Rei y Kathy-zero! Espero sus reviews en este capítulo! Bye bye na no da!