Ante todo perdonad el retraso, pero mi PC se murió, lo tuvieron un tiempo arreglando y cuand me lo devolvieron tuve q andar descargando muchos programas y fue un lio... luego me abandonó la inspiración, pero aquí estoy...
Capitulo 5 : Cielo o infierno… ¿Cuál escoges?
El sol brillaba maravillosamente aquel día, cosa que pareció un buen presagió para Makino que tenía que ir al médico a la ciudad. Normalmente solo Ryoku le acompañaba, pero hoy irían con Kokoro.
El tren llegaba con unos minutos de retraso, pero nada podía estropearles ese día. Por primera vez podrían enseñarle la ciudad a la muchacha.
Una hora después, Makino se encontraba ya sentada en la sala de espera de su doctor, habían llegado demasiado pronto y al menos no la atenderían hasta dentro de una hora, eso si no se retrasaban, así que por su mente de vieja celestina pasó una gran idea.
-Hijo mío¿por qué no vais mientras Kokoro y tú a comer un helado y dar una vuelta?
-Ie, ie… no quiero dejarla sola.- intervino Kokoro.-
-No te preocupes pequeña, yo no me moveré de aquí¿qué lugar hay más seguro que un hospital?- sonrió dulcemente.-
-¿Está segura madre?
-Claro, Ryoku llevala por ahí… no os preocupéis por mí.
Ambos muchachos caminaban por las calles de aquella gran ciudad, pero Ryoku veía algo raro en Kokoro, una actitud algo nerviosa que se manifestaba en una colocación continua de la diadema ancha que llevaba.
-¿Ocurre algo?
-Gomen, demo me da vergüenza que la gente mire el golpe de mi cabeza, aún tengo el morado y …
-No hagas caso de lo que piense la gente.- la interrumpió.- Tú eres bella con o sin morados.- Kokoro se sonrojó completamente ante ese comentario y la naturalidad con la que salió de su boca. – Vamos, te invito a un helado.
Una maravillosa tienda con helados de todos los sabores imaginables se extendía ante los ojos más inocentes que nunca de Kokoro. Sonrió tímidamente mirando todos aquellos colores e imaginando los sabores deliciosos de casa uno en su boca.
-¿Cuál quieres?
-Es tan difícil escoger… pero creo que tomaré uno de mango.
-Su novia tiene muy buen gusto señor.- dijo la joven dependienta. Ambos se miraron sonrojados, pero sin la aparente intención de contradecirla o explicarle la verdad. Tal vez fuera vergüenza, tal vez que era una tontería explicarse ante una desconocida o puede que la idea de que les consideraran una pareja no les fuera del todo desagradable.
Ya con su helado en la mano, ambos salieron de la heladería dispuestos a disfrutar de aquel barrio precioso del centro de la ciudad.
Sonreían, paseaban y se reían de cualquier cosa. Era una vida sencilla, llena de pequeñas cosas, pero todas ellas buenas.
Mientras miraban escaparates de tiendas en las que seguramente nunca podrían comprarse nada por los elevados precios, ambos eran felices solo con imaginar. Ella no tenía recuerdos, nada de su pasado, pero el presente prometía muchas cosas buenas. Él trabajaba duro cada día, soportaba mucho cansancio, pero el volver a casa junto a sus dos mujeres mitigaba todo.
Hablaban despreocupadamente cuando Kokoro no pudo evitar que su mirada se fuera hacía un joven que caminaba en dirección contraria a ellos mirando al suelo. No sabía porque le había llamado tanto la atención, solo que esa sensación extraña al verle, esa punzada dolorosa en el corazón se le hizo demasiado familiar.
De pronto, el joven abandonó su triste concentración en la piedrita que llevaba demasiado tiempo chutando ( pateando mientras andaba), sus ojos se encontraron con los ojos confundidos de Kokoro.
-¿Tohru¡¡Tohru!
-¿Le conoces?- le susurró Ryoku al oído a Tohru.-
-Yo… no sé… no… sé…
El sol brillaba sobre el pelo rubio de aquel muchacho de mirada inocente y triste, sus brazos se extendieron solos por el deseo intenso de abrazarla, pero se contuvo. Estaba en medio de la calle, a plena luz del día y con un montón de gente alrededor… abrazarla sería mostrar su secreto a todo el mundo.
-¿Tohru¿Qué ocurre? Soy Momiji…-
-Disculpa¿nos conocemos?- preguntó ella confundida.-
-¿Estás bromeando? Si es así no tiene gracia.-
Tohru se sentía tremendamente incomoda, le sudaban las manos y se preguntaba si realmente ese chico la conocía. Si era así¿quién era?
-¿Realmente nos conocemos¿De qué?-
-Pero… pero…- Momiji no entendía de que iba todo esto.-
Ryoku sintió miedo, miedo de que Kokoro encontrara a su familia o a alguien conocido y que se la llevaran de su lado y del de su madre. Era egoísta, eso lo sabía, pero no pudo evitar cogerla del brazo y echar a correr hacía el hospital.
Momiji corrió tan rápido como podía, tanto que nunca llegó a alejarse más de dos metros de ellos. Desconocía quien era ese chico, ignoraba porque ella parecía no recordarle, pero de pronto un nombre vino a su mente. HATORI. Sí, tenía que ser eso, él borró su memoria por orden de Akito. Por eso, cuando vio que sus perseguidos se dirigían hacía el hospital donde Hatori colaboraba, sintió que el destino le sonreía.
En menos de dos minutos el gran edificio blanco se mostraba ante ellos, las puertas automaticas se abrían a su paso y los pasillos parecían el perfecto laberinto donde perderse. Al menos eso pensó Ryoku.
-Ryoku… No puedo… correr más. Deten… gamonos. – dijo con voz entrecortada ella.-
-Pero… - ambos detuvieron su avance, aprovechando los escasos segundos que sabían que tendrían hasta que Momiji llegara.-
-No sé quien ese chico, no sé si es familiar, amigo o conocido… y sé que no me quiero separar de vosotros…-
-¿Pero? Sé que hay un pero.- dijo tristemente.-
-…pero quizás mi familia esté sufriendo por mí. Quizás tenga una madre tan dulce como la tuya que llore cada noche pensando en que pudo ocurrirme, tal vez tenga un padre cariñoso que se culpe por mi desaparición, puede que incluso tenga hermanas y hermanos que añoren mi presencia. Aunque yo no recuerde nada de eso, puede que exista y yo sería muy egoísta si no me preocupara.
-¿Y no te extraña que no te hayan buscado?.- Momiji estaba en la esquina de ese pasillo, ocultándose mientras oía toda la conversación. Sentía lastima por Tohru, por el dolor que sentiría al descubrir que no tenía nada de eso que ella pensaba, pero también era cierto que tenía muchísima gente que la quería. Desde sus amigas que no entendían el porque de su supuesta huída, hasta cada uno de los miembros Sohma que la extrañaban a rabiar. Su corazón latió con orgullo, quizás con algo de ese amor dolido que siempre ocultó, y con el empuje de esos sentimientos decidió salir de su escondite para enfrentar a aquel muchacho posesivo y preocupado.-
-No es cierto que no la hayamos buscado… lo hicimos, pero por algunas circunstancias que solo incumben a la familia, en la cual incluimos a Tohru aunque no haya lazos de sangre, creíamos que su desaparición no era del todo involuntaria.
-Eso...¿es verdad?-preguntó ella tímida.- ¿Me habéis buscado?
Continuara...
Kumiko Black: Jajajaja, gracias por tu comentario, me alegro q te guste... sí Akito aquí es muy malo, pero no te diré si pagará o no sus crímenes xDD... después de todo el es dios, ne? O puede que dios esté destinado a caer de su trono?... ya veremos ya xDD. Arigatou por le rewiew! Espero q este tmb te guste...
Nejitenten: Sieee... soy mala! Muajajajaja... pero es la gracia del ff, cuanto sufrirán hasta ¿terminar juntos? No sé, ya veremos si terminan juntos muajajaja. Ya veras como mas tarde agradecerás q la desmemorizara como tu dices xDD. Kyoru rlz!
Nakuru-chan: Prometo q terminará bien... o al menos no muy mal xDD. Un beso.
Gracias tmb a...VAMPIRE PRINCESS MIYU, bekgker y Mire-chan...
Proximo capitulo: No es facil ser un angel.
La dulzura de quien es ahora más pura que nunca se ve en la difícil decisión de volver a un pasado que no recuerda o a un futuro que ya adora. Sentimientos, pasión, amor no correspondido, corazones rotos y... más sorpresas.
Nos vemos pronto!
