Si, otro fic jajajaja para no variar A/M jajaja y como unica distincion ... es la primera vez que no es en Universo alterno jeje.
Que les puedo decir de El? No mucho, Solo que es una historia distinta y que espero que le den una oportunidad aunque sea chiquitita. Realmente al principio no me convencia mucho y no sabia si publicar, pero al terminar de escribirlo le he cogido un poco mas de gusto y weno... si No gusta pues solo era un intento jeje y si gusta muxo mejor. Por cierto, gracias a pola por ayudarme con el titulo jeje.
Ahora solo les digo que lean para saber mas sobre el.
Espero k les guste!
DARK OBSSESION
Introduccion
Nunca se han preguntado que hubiera pasado si Aoshi no hubiera dejado a Misao con Okina de niña?
Yo pense en una posibilidad.
Este Fic empieza muchos años despues, en el Castillo Edo, en la Epoca en la que Aoshi y los Onni trabajaban para Kanryu Takeda. Un tiempo antes de que Megumi conociera al Kenshin-gumi y que Hannya y los demas murieran a manos de Takeda.
Aoshi Shinomori, Okashira del Onniwabanshu.
Gran lider contratado por un mafioso del Opio, un Hombre calculador, enigmatico, de personalidad oscura y muy seguro de si mismo. Solo vive para dos cosas, para el Sindicato Onni y para la Batalla. Muy abaricioso, ansia tener el poder y el titulo del mejor guerrero del archipielago Nipon. Un genio de la estrategia oculto bajo un rostro atractivo y apasible, pero serio.
Y tambien ansia otra cosa ...
A Misao Makimachi.
Capitulo 1.
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En la pequeña, pero lujosa, habitacion solo se oia el sonido del gran reloj de madera.
Frente a si el amplio escritorio, donde se encontraba una pila de papeles y mas papeles, con una pequeña lampara de aceite alumbrando unicamente toda la habitacion.
Y Aoshi Shinomori detras de las montañas de papales.
Cruzado de brazos y mirando a la Nada, inmerso en sus pensamientos.
Llevaba tantos años alli... tantos años trabajando para esos mafiosos... y ahora empezaba a darse cuenta de lo rapido que habia pasado el tiempo. Ahora cuando empezaba a plantearse ciertas cosas.
Empezo sirviendole a Takeda como proteccion, pero poco a poco su trabajo se extendio mas de lo que era un simple guardaespaldas.
A esas alturas practicamente llevaba todos los Negocios de aquel hombre que tanto detestaba, el Mismo Takeda no sabia que hacer sin pedirle su opinion.
Y empezaba a plantearse llegar aun mas alto .
Ahora que comenzaban con el Trafico ilegal de armas todo iba viento en popa, el Opio habia quedado atras, aunque aun seguian siendo los Narcotraficantes numero 1 de Japon. Era la oportunidad que buscaba, ahora tenia aun mas poder.
Una presencia le interrumpio sus pensamientos.
Miro hacia una de las esquinas oscuras de la habitacion, No tenia que ver el rostro de la persona que se encontraba alli para saber quien era.
- Que ocurre Hannya?.- Pregunto, cerrando los ojos de nuevo.
De entre la oscuridad de aquellas paredes salio Hannya, el segundo mejor guerrero del Onni, mano derecha y mejor amigo de Aoshi Shinomori. Su persona de mas confianza y mas leal, con El habia vivido grandes aventuras de su vida, le habia enseñado todo lo que sabia, no se habian separado jamas.
- Siento interrumpirle Jefe.- Se disculpo el Ninja, inclinandose.
- Tranquilo, no hacia nada en especial.- Aoshi se levanto de su silla y camino hacia su amigo.- Que pasa?
- Le dije que usted estaria ocupado, pero ya sabe lo insistente que es ese Hombre.
- Y ahora que demonios quiere Takeda?.- No hacia falta que Hannya le dijera de quien se trataba.
- Quiere verle, No me ha dicho para que.
- Sera por alguna estupidez, como siempre.- Aoshi resoplo, antes de dirigirse a la puerta de su despacho.
- Quiere que haga algo mas Jefe?.- Pregunto Hannya, mientras Aoshi abria la puerta, este se volteo.
- No... Tienes algo importante que hacer.
- Ahora iba a entrenar un poco con Misao-san.
- Entiendo.- Aoshi se quedo pensativo unos instantes.- Despues nos vemos.
Los dos hombres salieron de la habitacion al mismo Tiempo.
Cada uno a su estilo.
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Misao se miraba en el espejo de su habitacion mientras esperaba a que apareciera Megumi.
Pocas veces lo hacia, solo cuando estaba aburrida, nunca le habia importado realmente su aspecto externo, aunque Megumi siempre estaba detras de Ella para arreglarla y ponerla guapa. Desde que la conocio la doctora siempre habia dicho que si no fuera por Ella se hubiera convertido en un marimacho.
Rio al pensar que tenia mucha razon.
Siempre se habia criado entre hombres.
Sin llegar mas lejos fue criada por cinco. Sus grandes amigos, compañeros..., Su otoo-san.
Cuando era una niña sus padres murieron y fue encomendada a Aoshi Shinomori para que la cuidara. Y junto a El y los demas miembros del Onni aprendio todo lo que sabia, en especial con Hannya, al que consideraba como un Padre. El la habia tratado como una hija, la cuidaba y protegia.
No es que los demas miembros del Onni no hicieran lo mismo con Ella..., todos la querian mucho, cada cual a su manera, pero con Hannya sin duda habia sido mas profundo, mas familiar.
Megumi entro en la habitacion con sus ropajes ninjas en los brazos y una gran sonrisa.
Ella se volteo a mirarla y le devolvio la sonrisa. Tenia muchas cosas que agradecerle tambien a aquella bella mujer.
Hacia varios años que habian empezado a trabajar en aquella Mansion y desde que llego fue acogida con los brazos abiertos por Megumi.
La pobre mujer habia estado sola y amargada bajo el mando de Kanryu, pero cuando Misao y los Onni llegaron no tardaron nada en hacer amistad, y mas que amistad Megumi la trataba como si fuera su hermana pequeña. Megumi Takani le llevaba 7 años y era una estupenda medico, mas de una vez se habia encargado de curar las heridas de los miembros del Onni, aparte de su trabajo primordial fabricando Opio. Ese era un tema que ninguna de las dos tocaba nunca.
Megumi siempre se arrepentiria de esa etapa de su Vida.
- Hola pequeña, siento haber tardado.- Megumi cogio una butaca y se sento junto a Misao frente al tocador.- Tu ropa ninja tardo en secarse.
- No pasa nada Meg.- Sonrio Misao.- Tengo que entrenar con Hannya, hace unos dias que no hemos podido.
- Con esas pintas?.- La miro Megumi de reojo.- Te voy a peinar un poco ese pelo, trae el cepillo.
- Ahora No!.- La jovencita de 18 años se quejo fastidiada.
- No seas tonta.- Megumi le tiro del pelo con suavidad y empezo a cepillarlo.- Que te he dicho siempre?
- Una ninja bien entrenada es buena...- Suspiro Makimachi.
- Pero una ninja bien entrenada y Sexy es el doble de buena.
- No creo que a Hannya le importe como lleve el pelo o la ropa.- Rio Misao.- Y tampoco quiero llamar la atencion de ninguno de los estupidos guardias de Takeda.
- Una mujer atractiva impone mucho mas que un marimacho.- Rectifico Megumi.- Si no mirame a Mi.
- Lo se...- Misao puso los ojos en blanco.- No lo hago por eso, sabes que Hannya siempre ha sido muy tradicional, bastante le costo aceptar que no quisiera que me tejieran un nuevo traje de Onni, cuando el mio empezo a dejar ver mas carne de la que debia.
- Hannya debe saber que ya eres una mujer hecha y derecha, y es normal que hayas... madurado en muchos sentidos.- Rio picaramente Meg.
- Pero me siento incomoda con El, es como mi Padre.
- No deberias.- Sonrio, despues miro el resultado de su peinado, una coleta alta.- Ha quedado perfecta.
Misao se levanto de la butaca y cogio su traje de Onni, empezando a quitarse el Kimono negro que tenia puesto con ayuda de Megumi.
- Atame fuerte el Obi del traje ninja.
- Porque? Siempre te lo ato con fuerza.- Pregunto Megumi, mientras recogia la ultima prenda del Kimono.
- Se me desata un poco cuando entreno y se ve demasiado de ya sabes donde.
- De acuerdo.- Despues de ponerle todo el traje apreto con fuerza el Obi de color Negro.- Donde quedo tu Obi rosadito?
- Shikijo penso que ya era grande y que el Rosa desentonaba demasiado para una Ninja, por eso mando a que me hicieran este nuevo traje.- Despues de que Megumi ajustara bien su traje se viro hacia el Espejo.- Me veo como una .
- Mujer fatal.- Rio Megumi a carcajadas.
Misao contemplo lo que veia en el Espejo.
Una jovencita de 18 años, ya desarrollada como Mujer con un traje de Ninja oscuro y diseñado para una adolescente sin desarrollar. Conclucion.
Como diria Hannya, demasiado descocada.
- Bueno, sera mejor que vaya con Hannya.- Recordo su entrenamiento, mientras pensaba lo anterior.
- Ten cuidado en el entrenamiento, No quiero tener que curarte de nuevo.- Aconsejo Meg, doblando el Kimono de Misao.
- Lo intentare.
- Porque te han puesto entrenamientos mas duros?.- Pregunto la doctora Takani, antes de que Misao saliera de la habitacion.
- Dentro de poco podre empezar a ir a las misiones con Ellos y Aoshi quiere que me entrenen con dureza.- Sonrio Misao.- Llevo esperando toda mi vida a que decidan eso.
- Siempre dire que los Ninjas son bien raros.- Suspiro Meg, mientras Misao acababa de salir de la habitacion.- Ten cuidado Misao!
Resoplo.
Admiraba la fuerza de voluntad de la Jovencita, siempre lo habia hecho.
Desde aquel momento que la conocio, cuando Misao apenas tenia 12 años de edad y los Onni acababan de llegar a la Mansion Edo para empezar a trabajar junto a Takeda.
Megumi trabajaba con El desde hacia poco tiempo, tenia recien cumplida la mayoria de edad y ni siquiera habia terminado del todo su carrera de Medicina. Pero despues de la muerte de su Tutor, un Medico que resulto ser fabricante de Opio, Ella era la unica que le servia a Takeda para continuar con el Negocio, y desde entonces se dedicaba a perpetuar ese Negocio de muerte.
Flashback+
Takani Megumi caminaba por los pasillos de la Mansion, con la mirada perdida en la Nada.
Hacia unos minutos habia acabado su jornada laboral, otro dia horribles haciendo esa cosa horrible ... Ni su nombre queria recordar.
Pero algo llamo su atencion.
Doblando una esquina le habia parecido ver la sombra de una ...
- Niña?.- Pregunto en voz alta, sorprendida.
Corrio al final del Pasillo, no podia ser verdad lo que estaba viendo.
Al doblar la esquina se encontro con una pequeña Niña, de no mas de 10 o 11 años, sentada en una de las sillas del Pasillo impaciente. Como si esperara algo.
Megumi creyo de verdad que tanto encierro la habia vuelto loca.
Se acerco a la pequeña y se arrodillo a su Lado, mientras la Niña la miraba con una sonrisa amplia y alegre, una sonrisa que desde luego no contrastaba con el sombrio lugar.
- Pequeña... que haces aqui?.- Pregunto Megumi, desconcertada.
- Espero.- Contesto la pequeña de enormes ojos verdes.
- Esperas a que?
- A que Hannya salga de esa puerta.- Dijo, señalando hacia la puerta enfrente de Ella, el despacho de Takeda.
Megumi empezo a preguntarse muchas cosas, cosas que esa niña seguro que no sabria contestar.
- Y... como te llamas preciosa?
- Misao, Misao Makimachi.- Sonrio aun mas la Niña.- Y tu?
- Megumi Takani ...- La doctora miro de arriba a abajo a la niña, vestia con ropas muy raras.- Que es lo que llevas puesto?
- Es mi uniforme, Soy una Ninja!.- Se pavoneo, dando un puñetazo comico en el aire.
- Pero eres una señorita, no deberia ser tan... bruta.- Rio Meg.
- Señorita? No, soy un ninja.
Takani resoplo, sin duda aquella niña era testaruda.
- Y que hace tu Papa ahi dentro?
- Hablar con un Señor muy feo.- Se regaño Misao.- Vamos a vivir aqui ahora.
- Tu y tu papa?.- Megumi se extraño aun mas.
- No, Yo, Hannya, Aoshi-sama y el resto del Onni.
- Entiendo...- Sinceramente Ella no entendia nada.- Te apetece acompañarme mientras esperas por... toda esa gente?
- Claro!.- La pequeña Misao se levanto de un salto de la silla y Megumi le cogio la mano.
- Te enseñare la Mansion, es muy grande.
Ese seria el comienzo de una amistad, mas bien encaminada a un amor de hermanas, que perduraria hasta los dias actuales.
En los que Megumi habia ejercido de ejemplo femenino para Misao en el momento en el que mas lo necesitaba, resumiendo en su adolescencia, y Ella a cambio recibia el amor y compañia de una jovencita que se habia convertido directamente en su unico ser querido.
Fin Flashback+
Megumi sonrio ausente.
Si no fuera por la alegria de Misao su vida en la Mansion Edo habria sido aun mas infernal de lo que era normalmente.
Por lo menos alli dentro habia conseguido una especie de Familia... bueno, una pequeña familia en la que solo entraban Ella y Misao, por que con el resto de los miembros del Onni no tubo la misma suerte.
Los miembros del Onni eran de por si distantes y serios, por lo menos con los que No tenian confianza ni la querian.
Ya que con Ella apenas le dirigian la palabra, o como en el caso de Aoshi ni siquiera la miraban.
Pero Misao le contaba cosas de Ellos que dificilmente podria creerse.
Sin duda con Misao eran muy distintos. Ella era la niña del Onni... o lo era.
De un tiempo para aca empezaron a tratarla como una mas, algo que Misao siempre habia deseado. Se alegrababa por Ella.
Pero le entristecia que en algun momento tubieran que separarse, y eso podia ocurrir pronto.
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Hannya se cruzo de brazos y la miro, sin duda esa tarde le habia dado mas trabajo de lo habitual.
Mientras Misao intentaba recuperar el aliento, tendida en el suelo boca arriba y con la mirada perdida en el techo.
Pensaba en los fallos que habia cometido para estar en esa posicion.
No vio venir una de las fuertes patadas de Hannya hacia su estomago, algo tan simple como eso ... Gruño furiosa dandole un golpe al suelo con el puño.
Odiaba tener ese tipo de Errores "tontos", era una humillacion a esas alturas todabia dejarse sorprender por tacticas tan basicas, pero indiscutiblemente efectivas.
Su "otoosan" al ver aquel acto de impotencia no dudo en comensar a reir a carcajadas, mientras Misao se incorporaba impulsivamente, mirandole fasdiada y avergonzada.
- De que, si se puede saber, te estas riendo?.- Pregunto con sarcasmo la Joven.- Yo no me rio cuando te tumbo.
- Lo harias si tubieras la oportunidad.- Incremento sus risas Hannya, haciendo que en la frente de Misao saliera una pequeña venita de la rabia.- Es una broma Pequeña.
- Pues no tiene gracia.- Misao se levanto de un salto del suelo.- Me siento humillada.
- Es normal, Yo tambien me sentiria asi.- Le contesto, empezando a disminuir sus risas.
- No ayudas Otoosan!
- No eras tu la que queria que la trataramos como a un igual? Te juro que si le hubiera hecho lo mismo a Bejimi no duraria en doblarme de la risa.
- Si, es verdad.- Misao respiro profundamente, hizo algunos estiramientos rapidos y se puso en posicion de combate.- Venga, otra vez!
- No te rindes, asi me gusta.- Hannya tambien se preparo para comenzar.
Ambos se miraban fijamente, listos para entrar en accion.
Estaban apunto de saltar el uno a por el Otro cuando un carraspeo interrumpio sus pensamientos, llenos de estrategias y golpes en ese momento.
Hannya se viro hacia la puerta rapidamente, mientras Misao casi pierde el equilibrio y cae al suelo de nuevo, con la repentina interrupcion.
- Ocurre algo Jefe?
Aoshi se encontraba apoyado en la puerta del Dojo, observando seriamente y de brazos cruzados.
En la mente de Misao y de Hannya aparecio la misma pregunta ... Como no se habian dado cuenta de su presencia hasta que carraspeo, Fuera como fuese eso ya daba igual.
- Tengo una nueva mision para Ti.- Informo Aoshi.- Tranquilo, no te llevara mucho tiempo, es otra de las estupideses de Takeda.
- Usted manda, que tengo que hacer?.- Hannya se puso frente a su Jefe, dispuesto a cumplir ordenes.
- Shikijo te espera en la entrada para ir a visitar a uno de los Contactos de Takeda, otro arreglo de cuentas.
- De acuerdo, Necesito alguna informacion?.- Hannya se paro antes de salir del todo del Dojo.
- No, Shikijo te dira lo que debes saber.- Concluyo Aoshi, sin siquiera moverse de su posicion.- El tiene toda la informacion.
Como siempre, Hannya desaparecio por arte de magia.
Misao, aprovechando la interrupcion y viendo que el Entrenamiento habia acabado por ese dia, se secaba el sudor de la frente y el Cuello con una toalla, dispuesta a irse a dar una ducha.
Todabia no se habia dado cuenta de que Aoshi no habia salido del Dojo.
- Ya te vas?.- Pregunto Aoshi, cuando Misao empezaba a caminar hacia la salida.
Misao se sorprendio bastante, pensaba que Aoshi se habia ido nada mas darle ordenes a Hannya.- Bueno..., Hannya esta ocupado y .
- Te iba a proponer que entrenaras conmigo, para evaluar tu nivel.- Aoshi, sin reparos, se adentro en el Dojo, quitandose la gabardina.- O estas cansada?
- No, para nada.- Misao dejo la toalla aun lado del Dojo, Aoshi le estaba poniendo un reto y sonrio con orgullo.- Estoy preparada.
Aoshi la miro de arriba a abajo, sin ningun tipo de disimulo, sorprendiendola.
Pocas veces podia permitirse el Lujo de estar con Ella a solas, y ahora que podia no iba a desaprovechar el momento.
Y mas en esas condiciones ...
Misao se veia algo cansada del duro entrenamiento que habia tenido con Hannya, aunque aun tubiera la fuerza y el coraje para atreverse a entrenar con El.
El peinado que le habia hecho Megumi estaba destrozado y mechones de su largo cabello Negro caian sobre su rostro, aunque Ella intentara apartarlos una y ora vez ... Su piel estaba perlada de sudor y sus ropas algo revueltas, algo que segun Aoshi le daba su mas sensual aspecto, acompañado del rubor de sus mejillas.
Una pequeña sonrisa escapo de sus labios, casi minima.
Y se puso en posicion de ataque. No podia esperar al contacto fisico, ni verla luchar.
- Adelante, ataca primero.- Ordeno.
Misao no dudo en hacerle caso, y le quito importancia a las miradas de Aoshi, tenia que demostrarle que era una buena ninja y que podia contar con Ella para luchar con el Onni en cualquier circunstancia.
El primer golpe fue devil, para que Aoshi empezara a atacarla y Ella poder demostrar sus habilidades.
Solo utilizaron Kempo durante los primeros minutos, que resultaron ser minutos donde ambos pareciera que danzaban mas que peleaban, atacaban y se defendian, con movimientos rapidos y agiles. Aoshi no podia negar que la Jovencita habia aprendido mucho y penso que hizo bien al dejar su entrenamiento en manos de Hannya. Su amigo habia hecho un trabajo excelente.
Consiguio darle algunos golpes a la Muchacha, pero se sorprendio al notar que Ella tambien estubo a punto de devolverselos, y ante nada se rendia, parecia que habia sacado fuerzas de la Nada.
Pero pronto dejo de pensar en luchas y golpes.
Hubo un momento en el que el contacto de sus cuerpos fue casi completo, durante unos fugaces segundos, que Aoshi no dejo pasar. Sintio como el cuerpo menudo de aquella muchacha se habia apretado contra el suyo, Y apartir de ahi poco le importo como habia progresado el entrenamiento de Misao.
Desperto de ese pequeño momento de confusion cuando vio venir la pierna de Ella contra su estomago.
Y sorprendentemente agarro su menudo pie a centimetros de sus duros abdominales, haciendo que Misao se tambaleara un poco de la imprecion y se le quedara mirando con los ojos como platos.
- No ha estado mal, apunto has estado de darme.- Admitio Aoshi, manteniendo la pierna de Misao en alto.- Pero has tenido un fallo.
- Cual?.- Ella saliendo de su asombro, fruncio el ceño al oir la palabra "fallo.
- La posicion de tu pierna, te dire como deberias haberla puesto si pensabas en la posibilidad de darme.- Aun sin soltar el pie de Ella lo subio un poco.- Manten el equilibrio.
- Si.- Accedio, curiosa por saber la nueva leccion que aprenderia, hacia muchos años que Aoshi no le enseñaba nada.
- Dobla un poco la rodilla.- Fue instruyendo Aoshi, mientras con una mano sostenia su pie y con la otra doblaba con cuidado la Rodilla de Misao.
- A si?
- Si, muy bien.- Aoshi observaba su pierna con seriedad.- Y ahora tendrias que subir un poco mas la inclinacion del Muslo.
Un escalofrio le recorrio la espalda a Misao cuando sintio la mano de Aoshi subir por su rodilla, acariciando el blanco muslo hasta sujetarlo por debajo, todo con mucha suavidad.
- Asi.- Termino Aoshi, dirigiendo sus azules ojos hasta los de Ella.- Recuerdalo bien.
- De acuerdo...- Susurro Ella, se habia quedado en blanco.
Aoshi solto su pierna y se dio la vuelta tranquilamente, en direccion ha donde habia dejado su gabardina.
- No ha estado mal, pero aun tenemos que perfeccionar algunas cosas.- Comento, mientras se colocaba la gabardina.- Todabia tengo que ver como te desenvuelves con las Kunais.
Misao permanecia en el mismo sitio, mirando a la Nada, pensando en lo que habia pasado, en ese pequeño contacto.
- Misao, me oyes?.- Pregunto Aoshi, sintiendose orgulloso en su interior al ver la reaccion de Ella.
- Si, perdone.- Misao sacudio la cabeza y le miro.- Cuando quiera.
- Estupendo.
Aoshi se dirgio a la salida del Dojo, con una sonrisa en su Rostro, dejando a Misao sola.
Los resultados eran los esperados.
Habia notado a Misao tensa y sorprendida, y para El habia sido todo un placer ese contacto. Acariciar su suave piel, se la habia imaginado calida, pero No tanto. Y aparte de disfrutar de Ella, aquel momento habia significado algo mas. Sabia perfectamente que haber actuado de esa manera años antes no hubiera causado ningun tipo de reaccion en Misao, despues de todo no tenia nada de especial, era simplemente otro truco de Kempo para la lucha. Pero Misao ya no era una niña, y ahi era a donde queria llegar.
Ahora Ella le habia demostrado que Si habia sentido algo.
Y no seria la ultima vez.
Era el principio de un nuevo reto para El, de una nueva "mision", como mision prioritaria en la Vida tenia el conseguir todo lo que queria.
Y queria a Misao.
Aquella que habia sido una niña alegre y emprendedora se habia convertido en una fuerte y bella mujer, y eso No lo habia dejado pasar de largo. Al contrario.
En cambio Misao se habia quedado algo anonadada.
Era la primera vez que sentia algo parecido. Aquel escalofrio que sintio al sentir la mano de Aoshi en su Muslo... Que significaba todo aquello?
Sacudio la cabeza, no debia darle mas importancia de la que tenia a un asunto como aquel.
Lo que le daba mas curiosidad era saber .
Desde cuando Aoshi Shinomori se interesaba por Ella? o mejor aun, Desde cuando la miraba de aquella forma tan... extraña?
Fin del Capitulo 1
Notas de la Autora:
Que les parecio?
La respuesta a las preguntas de Misao en el proximo capitulo, si es que lo escribo jajajaja eso depende de lo que ustedes opinen.
Porfi manden Reviews! Muchos besos a todos!
Rinoa S.