Cuando el cambio terminó, se dieron cuenta de que si forma humana se trataba de como eran en la vida real. Algunos pensaron que quizás hubiera una configuración de personaje pero no fue así como sucedió. (En realidad si había pero como fueron transportados, la opción se volvió... desechable, por así decirlo)

—Bueno... No me puedo quejar, nos vemos muy reales... —Ulbert habló primero al no escuchar a sus compañeros.

—Demasiado, diría yo... —Fue Touch-me quien apoyó la idea luego de tocarse el rostro y poder sentir claramente sus facciones cuando en el juego eso era imposible.

—¿Oh? ¿Tanto así?

—Si... incluso puedo sentir... y ¿respirar?

—¿Qué? ¿De qué estás hablando? Eso es imp-... ¿Q-qué?

—¡Alto! No entres en pánico, ¿quizás es un parche que acaban de agregar?

—No creo que puedan... Espera... ¿Qué está sucediendo? ¿Dónde estamos? Este no es definitivamente la zona fuera del campamento... ¿Y los demás? —Ulbert se dio cuenta al final que solo ellos estaban pero se calló cuando alguien comenzó a materializarse de la nada cerca de él. Era Nishikienray.

—Oh, vaya, soy yo... Esto es muy realista... Oh, chicos, ¿qué-...? ¿Y los demás?

—Acabamos de aparecer en este lugar.

—Esto jamás lo había visto antes en todos los mundos...

Pronto se unieron 3 miembros más y luego de unos segundos, 2. Se repitieron las palabras y las dudas. Nadie tenía una respuesta. Muchos entraron en pánico al no ver su habitual panel de estado ni sus estadísticas en pantallas, pero se calmaron luego de unas cuantas palabras de Shijuuten Suzaku y Tabula Smaragdina.

Había pasado cerca de una hora cuando ya todos estaban presentes otra vez. Como al principio hubo pánico pero en menor escala. Ahora era tiempo de actuar con seriedad y calma. Necesitaban descubrir dónde estaban.

Era obvio que ya no estaban en el juego, no había consola, habían intentado comunicarse con el GM o usar el chat pero no hubo respuesta. Era igual con los otros, podían sentir y respirar con normalidad.

Ellos habían sido transportados a otro mundo y el primero que lo dijo fue Whitebrim, el mangaka del gremio; luego fue Peroroncino, el segundo más fanático de los animes y mangas. Todos estuvieron de acuerdo pues, era demasiado real como para que la vista panorámica y sus cuerpos fueran hechos a través de dígitos y códigos.

—Necesitamos buscar o hacer un refugio, no sabemos dónde estamos ni tampoco sabemos si aún podemos usar magia o habilidades en este cuerpo...

—Creo que deberíamos probar con algunos hechizos simples... ¿Qué tal [Mensaje]? Eso se aplica a todos. Ya después-

—Confirmado.

—¿Q-qué? ¿Quién...?

—Podemos usar hechizos, acabo de enviarte un [Mensaje], no me preguntes cómo, ni yo lo sé, fue algo... natural. —Respondió Yamaiko a Nuuboo, quien dio la sugerencia del [Mensaje].

—¿Eso significa que podemos usar magia? ¿Y qué hay de las habilidades? —Preguntó Warrior Takemikazuchi mientras sacaba una espada del aire.

—¡¿Qué acabas de hacer?! —Gritó Beast King Mekongawa asombrado.

—¡No lo sé! —Dijo en defensa algo nervioso.

—Al parecer tenemos nuestro inventario... aunque de una manera extraña —Comentó en un susurro Punitto Moe mientras sacaba una poción roja de salud de su espacio de bolsillo.

—Bien, bien. Descubrimos que la magia existe, al igual que nuestro inventario. Al menos nos podemos proteger ahora si aparece un enemigo.

—Sólo se ha probado el [Mensaje], aún no sabemos si podemos lanzar nuestros hechizos hasta el nivel 10 —Dijo Ulbert mientras flexionaba su mano con garras de cuchilla. —Es lo mismo con las habilidades de un guerrero o samurai... ¿Nadie quiere intentarlo?

Takemikazuchi, quien tenía su katana ya lista en mano, se colocó en una pose especial dando la espalda a sus compañeros y apuntó a un árbol algo solitario.

—¡[Filo de Navaja]!

El árbol en cuestión no puso ninguna resistencia y terminó siendo cortado en diagonal, por la velocidad del impacto tardó unos segundos en caer partido.

—Asombroso, Ken-ya. —Elogió su amigo Nishiki.

—Ah, no es nada. —Respondió algo avergonzado.

—Los detalles de la cortada y caída del árbol son muy diferentes al juego, esto sólo confirma nuestras sospechas de que fuimos transportados...

—Oigan... si me acuerdo bien, el tiempo límite de espera para volver a ser heteromorfos era de veinte minutos... ¿Creen que podamos ser nuestros verdaderos personajes de nuevo?

—Yo digo que sí, debemos de intentarlo cuando el tiempo se termine, mientras que alguien ponga una alarma... Por ahora, ¿Qué debemos hacer exactamente? ¿Buscar algún pueblo o ciudad para pedir información o crear una fortaleza y seguir realizando experimentos? —Preguntó Ankoro Mochi Mochi luego de que Temperance y Lucifer terminaran de hablar respectivamente.

—Creo que debemos hacerlo por voto mayoritario.

Tras las palabras de Touch-me, todos comenzaron con la votación, quedando en empate. Y para resolver el problema, Flatfoot sugirió que se formaran dos equipos con sus ideales para realizar sus actividades por separado, y el que se vuelva más beneficioso, quedará hasta el final.

Todos aceptaron la propuesta.

Bukubukuchagama siendo del equipo 'Fortaleza', utilizó el artículo [Casa secreta verde] para crear una pequeña casa de campo como refugio temporal; además, a pesar de su externa apariencia, en el interior hay varias habitaciones que puede albergar a todos los miembros.

Peroroncino y Nishikienray, como parte del otro equipo 'Búsqueda', utilizaron sus habilidades de pícaro y ninja, en ese orden, para buscar algo de vida inteligente o un pueblo a su alrededor mientras los otros 10 los seguían casi de cerca por si había un ataque desconocido.

Pronto, dos equipos de doce miembros cada uno, se dividió para seguir su objetivo.

—Oye Nishi... ves eso también, ¿no es así?

—Si lo que ves es una gran fortaleza de madera, entonces si... Voy a avisar a los otros, busca una entrada por mientras.

—¡Entendido! Iré por la izquierda.

Sin perder tiempo Peroroncino comenzó a rodear la gran fortaleza siempre escondido entre las sombras lo mejor que pudo, hasta que vio una torre de vigía y dentro había un par de figuras en armadura plateada armadas con lanzas y arcos.

"¿Goblins? ¿Será acaso un pueblo goblin?... ¿Me entenderán si les hablo?" Se preguntó en su mente antes de dar un suspiro casi inaudible. "Si son goblins sin inteligencia tendré que atacar lo más rápido que pueda... pero si son sociables, tendré que decir eso... Aaaah, estoy nervioso..."

—¡Hey! ¡Hola! ¡Aquí abajo! —Los llamó cuando verificó que no había nadie cerca para una emboscada a su persona, pues aunque podía utilizar su inventario, arcos y hechizos, aún no estaba seguro de cuanto sería el nivel de los habitantes del nuevo mundo. Ni mucho menos si podía hablar el mismo idioma.

—¿Quién eres y qué deseas de este pueblo que pertenece a nuestra general Enri?

Ahora que había sido respondido, no tuvo más opción que mostrar una actitud poco usual en él con los desconocidos... si es que así se le podía decir a un goblin, que hace unos minutos sólo pensaba en ellos como monstruos de un buen juego.

... Ya que estaban a una buena distancia de la torre, tuvo que levantar la cabeza en toda la conversación, ni que hablar sobre alzar la voz casi gritando para responder.

—¡Soy un viajero y a la vez un mensajero! ¡Hemos estado buscando por mucho tiempo un lugar donde poder refugiarnos; venimos desde muy lejos, ahora nos encontramos con pocos recursos y con casi nada de dinero! ¡Por favor, permítanos alojarnos en su aldea algún tiempo, podemos ser de ayuda como pago por su amable hospitalidad!

Peroroncino había contestado con las mismas palabras que le dijeron en caso de encontrarse con alguien, era igual para Nishikienray.

—¿Hemos?... ¿Dónde están tus compañeros entonces? —Preguntó el otro Goblin que había estado callado.

—¡Están cerca! ¡Me mandaron a preguntar antes de que se presenten pues somos un grupo de doce y no queríamos causar una mala impresión!

—... ¡Espere un momento! ¡Pronto abriremos las puertas!

—¡Mis amigos y yo agradecemos su amabilidad, buen señor goblin!

Una vez que un guardia desapareció de su vista, movió su mano distraidamente a su cabello para activar el hechizo [Mensaje] y mandar el reporte en un susurro antes de que llegaran sus compañeros del equipo.

Fue justo a tiempo pues cuando abrieron las grandes puertas el equipo de 12 miembros ya estaba reunido. Y que por seguridad, habían cambiado su conjunto de ropa de clase lejendaria a una clase reliquia con apariencia más simple y menos llamativa. Antes Peroroncino y Nishikienray, como los exploradores, ya habían tomado este cambio, por lo cual no lo necesitaban.

—Sean bienvenidos, viajeros. Lamento la demora, tuve que enviar un reporte a nuestra general antes de dejarlos entrar.

—No se preocupe, les estamos muy agradecidos por alojarnos. Por favor, le pido que hable con mi líder, él podría explicar mejor que yo nuestras condiciones.

Esa fue la señal para que Touch-me hiciera su aparición.

—Buen día Goblin-dono, mi nombre es Toume, un placer conocerlo.

—¿'Taumi'-dono? Es un gusto también. Por favor, este les pide que me sigan dentro, no podemos mantener la puerta abierta por mucho tiempo.

—Es Toume en realidad, y por supuesto. Todos, entremos.

Antes de ingresar o siquiera moverse, el goblin blindado se inclinó en muestra de una disculpa.

—Disculpe mi pronunciación, Toume-dono, su nombre no es muy común por aquí.

—No, está bien. No se preocupe por algo tan trivial Goblin-dono.

—Gracias. Por favor, si todos son tan amables de seguirme...

Cuando entraron a la aldea, se llevaron una gran sorpresa al ver no solo Goblins, sino también Hombres Lagartos, Humanos y Enanos.

—Disculpe Goblin-dono, tengo unas preguntas...

—Sé lo que quiere preguntar, Toume-dono, todos los visitantes lo hacen. Primero que todo, este lugar se llama Pueblo Carne, que está a cargo de nuestra general Enri, una humana. No solo vivimos goblins, sino también todas las especies que ves y unas cuantas que sólo salen de noche. Vivimos en plena paz y armonía bajo el mando del rey hechicero Ainz Ooal Gown-sama, quien tomó estas tierras hace ya dos años.

—D-Disculpe, podría... ¿podría repetirnos el nombre del Rey?

—Ainz Ooal Gown-sama... ¿Han escuchado de él?

Todo el grupo se quedó en silencio y con una evidente sorpresa en sus rostros. Felizmente, Nishikienray que logró controlarse más rápido que los demás, contestó.

—Sí, hemos escuchado su nombre... desde donde venimos es considerado como una leyenda, un recuerdo del pasado.

—Oh, ya veo.

Nadie hizo más preguntas al respecto y siguieron al Goblin quien caminaba mirando hacia el frente como todo caballero a cargo de un emisario extranjero.

Luego de unos minutos, llegaron a una casa en particular, la cual pertenecía a la general Enri. Era humilde, como cualquier otra casa de campesinos. Eso le dio una buena opinión sobre ella.

El Goblin tocó la puerta y casi al instante se abrió y mostró a una joven de cabello dorado con ropa humilde.

—General Enri, estos señores son los visitantes extranjeros que les mandé a informar.

—Es un gusto conocerlos, señores extranjeros-dono. Soy Enri Emmot, la encargada de dirigir el Pueblo Carne. Por favor, pasen y tomen asiento, quisiera hablar con ustedes acerca de quedarse en nuestro pueblo. Goblin-san, gracias por traerlos.

—Sólo cumplo con mi deber, Enri-sama. Entonces, me despido.

El mencionado se retiró sin decir más, dejando a los 11 chicos y una chica con Enri.

—Con su permiso. —Dijeron todos a la vez que ingresaban después de que Enri diera un espacio.

—Acompáñenme, señores. Si desean agua o alimento, pueden decírmelo, tengo entendido que ya no tienen muchos recursos. Y discúlpenme si no hay suficientes sillas para todos, normalmente no recibimos muchos visitantes a la vez.

—Oh, no se preocupe Enri-dono. Entendemos su situación.

—Gracias. Y, aunque sea un poco tarde, ¿podrían decirme vuestros nombres?

—Con mucho gusto, soy Toume. Y mis compañeros son: Ankoro, Mekon, Blunet, Coupde, Floot, Genji, Lufer, Near, Enray, Peron y Valisman. —comentó mientras señalaba a cada uno de ellos.

Mucho antes de encontrar el pueblo pero aún estando en medio del bosque investigando, todos habían llegado a la conclusión de utilizar unas abreviaciones de sus nombres de jugador por seguridad.

Ya después de la presentación, se enfocaron en tratar con el tema de alojamiento. Hablaron por un poco más de media hora, hasta que al fin llegaron a la parte final.

—... -En este pueblo hay ciertas normas, las cuales son:

•Respetar a todos los ciudadanos sin importar su raza o apariencia.

•No pelear o atacar a menos que sea en defensa propia, o sino, el Caballero de la Muerte-dono de su majestad Ainz-sama, los podría atacar.

•El lema del pueblo es: "Ayudar a quien lo necesite es de sentido común" por eso, aceptamos a cualquier viajero, pero si ignoran las normas, tendrán que irse.

•Y por último, cualquier acto de robo, maltrato o abuso a un ciudadano, se le dará al causante un castigo dependiendo de sus fechorías y al final, la expulsión.

—Me parece justo... Enri-dono, tenga la certeza que ninguno de nosotros romperá sus normas. Esto lo prometemos.

Todos inclinaron la cabeza por breves instantes, dejando nerviosa a Enri por la acción.

—¿E-es así? ¡Muy bien! Entonces, Toume-dono y acompañantes, por favor síganme, les mostraré unas casas en las cuales podrán alojarse por el tiempo que necesiten. Además, si quieren ayudar, podrían apoyar a los Globins-san en la recolección de alimentos de carne o también, en la preparación de las comidas de lo cual estoy a cargo.

—Estaríamos encantados de ayudar. La mayoría tenemos algunas habilidades de guerreros o magia, y el resto sabe de comida.

Antes de dar esta información, habían estado viendo a los Goblins que pasaban por su costado hace unos minutos. Algunos traían puestos túnicas y llevaban bastones que traían magia en su interior, era de poco nivel, pero al fin y al cabo era magia. Gracias a esto, entendieron que en este Nuevo Mundo la magia era algo común.

—¡Oh! Si puedo saber, ¿alguien puede lanzar hechizos del Nivel 3? Sé que muy pocas personas logran llegar a eso pero, sería de gran ayuda en las cacerías.

—... Sí, por supuesto. Mi amigo aquí, Lufer, puede lanzar hechizos de ese nivel. Los demás son del Nivel 2, aunque se podría decir que pronto se volverán del calibre de Lufer-san.

—¡Eso es asombro! Sólo los genios pueden llegar a ese nivel de magia según mi esposo.

"¿Esposo? ¿Qué no es una adolescente todavía?" Se preguntó Peroroncino sin dejar de mirarla tratando de buscar algún indicio de que estaba mintiendo o bromeando. Ese no fue el caso al final... Ya luego se concentró en los siguiente dicho, no podía permitirse fantasear en un momento como este.

—Aunque claro, los héroes de antaño podían usar el Nivel 6 si recuerdo bien... Pero, por supuesto, Seres Supremos como su majestad, Ainz-sama, pueden usar hechizos de mucho más nivel.

Esa información nueva causó intriga y ansiedad en los 12 presentes que se estaban escuchando. Ya era varias veces que escuchaban ese nombre, el nombre de su tan amado gremio, y el hecho de que sea un lanzador de magia sólo les causó más curiosidad sobre saber quién era aquel Rey.

—Mejor les enseño las casas, aún tengo trabajo que hacer y no puedo gastar mucho tiempo... El trabajo de líder es muy agotador jejeje.

—En ese caso, estamos en su cuidado. Trataremos de no ser tanta molestia para Enri-dono. Y gracias por recibirnos en su amable pueblo.

—No es nada, de verdad. Entonces, ¡vamos!

Las casas mostradas eran 3, en cada una de ellas se podían albergar 4 personas cómodamente en 2 habitaciones, las cuales tenían 2 camas separadas. Era una casa humilde, si, pero tenía un buen espacio para movilizarse sin estar chocando unos con otros. Para la mayoría, esto era incluso más de lo que tenían en el IRL, por tal motivo lo agradecieron en sus corazones.

Luego de la demostración de las habitaciones que había y de algunos artefactos que nunca en sus vidas habían utilizado y sólo fueron vistos en libros antiguos, Enri decidió dejarlos para que exploraran por su cuenta sus nuevas viviendas y el resto del pueblo, advirtiendo también sobre no alarmarse si se encontraban con esqueletos en las zonas de cultivo o el Caballero de la Muerte que rondaba en vigilancia.

Esperaron unos minutos en silencio, y luego para confirmar, Nishikienray utilizó sus habilidades de detección para saber si había un espía pero no fue así.

Por precaución lanzaron hechizos anti-detección y anti-espionaje para estar más seguros en su charla que estaba a punto de comenzar por parte de Touch-me...

—... Todos lo hemos escuchado. Hay un Rey lanzador de magia que se llama Ainz Ooal Gown y es un nigromante de alto nivel, quizás sepa el Nivel 10 en la magia...

—... ¿Crees que sea él? —Preguntó Ankoro en un susurro audible para todos.

—No estoy seguro... puede que si, puede que no.

—Necesitamos más información sobre este tipo... ¿Qué sucede si en verdad es él, si es Momonga-san? Después de todo, en el IRL fue marcado como desaparecido... —Dijo Blue Planet con aire de esperanza.

—No nos apresuremos y demos falsas esperanzas. —Respondió Lucifer, que aunque tenía los mismos pensamientos puso algo de realismo para mantener el orden y la mente calmada en todos.

—Entonces, podemos preguntar sobre este Rey a Enri, ella parece conocerlo personalmente, ¿No les parece? —Cuestionó esta vez Variable Talisman.

—Eso sería arriesgado y muy sospechoso.

—¿Y si le preguntamos sobre la capital?, como para conocer más el Reino. De seguro podemos encontrarlo allí si lo hacemos. —Mekongawa dio a conocer su idea pero nadie contestó por unos segundos tan largos que bien podrían haber sido casi horas para ellos.

—Puede ser pero... Dejemos esto de lado por unos momentos y centrémonos en lo siguiente: los Niveles de magia. Al parecer en este mundo lo máximo alcanzado es el Nivel 3 para los genios y el Nivel 6 para los Héroes del pasado. —Touch-me cambió de tema. Sentía que su cabeza dolía de tanto pesar y por intentar saber como conocer al tal Ainz sin levantar sospecha alguno sobre él y sus amigos... Además de sentir miedo, nervios, esperanza y ansiedad porque fuera cierto de que sea su amigo en realidad.

—¿Eso quiere decir que los que viven en este mundo son muy débiles? ¿Qué hay de los otros monstruos? ¿Existirán? Creo que si, hemos visto muchas razas al entrar a este pueblo, en ese caso, ¿Existirán los dragones, los Jefes de Mazmorra o los Entes Mundiales? —Afortunadamente, Coup De Corâce entendió la indirecta y decidió apoyarlo.

—Es muy probable que no, Coup-san. Si ella dijo que el máximo Nivel era de 6, eso no sería suficiente para derrotar a esos monstruos y este mundo estaría en plena destrucción.

—Umu. Tienes razón... Tenemos que avisar al otro equipo por si llegan a encontrarse con nuevos individuos. No tenemos que mostrar nuestro verdadero potencial hasta estar seguros.

—... Saldré a dar un paseo y algo reconocimiento por el Pueblo, no me siento nada bien en estos momentos. Discúlpenme.

Peroroncino salió sin hacer caso omiso a sus compañeros. Su cabeza le dolía y sentía que se iba desmayar de tanta información... realmente quería saber quién era Ainz, y esperaba que fuera Momonga, su Momo-chan, como de cariño le llamaba.

Caminó sin rumbo durante un largo rato con la mirada baja, hasta que se detuvo al ver varios cestos llenos de flores y una pequeña niña peliroja sentada.

—Hey... Hola, ¿Qué haces aquí, pequeña? ¿Dónde están tus padres? —Preguntó en un tono paternal para no asustarla.

—... Uh, Hola señor, mis padres no están, ellos... fallecieron, pero aún tengo a mi hermana mayor, ella cuida bien de mi y sabe que estoy aquí. Y sobre lo que hago... —Hubo un cambio en el tono de voz, ahora era más triste— Estoy rezando por Ainz-sama...

Peroroncino levantó la vista y allí fue cuando lo vió... Era un No-Muerto, un Overlord, que sostenía un artefacto parecido a un centro con grandes detalles de serpientes en la parte superior. Este ser poseía una túnica larga con capucha y de mangas muy sueltas; tenía grandes hombreras parecidos a huesos que adornaban su apariencia.

Su boca se abrió de sorpresa, su mirada se volvió incrédula y poco a poco sentía que su visión se desvanecía por las lágrimas que amenazaban con salir. Su cuerpo se tensó en un instante pero luego sus piernas comenzaron a temblar y sintió que pronto podría caerse como una marioneta cuyos hilos fueron cortados.

La pequeña se había volteado a ver la estatua de bronce antes de ver la reacción del joven, y con una voz cada vez más rota dijo lo siguiente:

—Y-yo sé que... sé que él n-no está muerto, y-yo lo sé... E-el señor A-Ainz-sama es muy, m-muy fuerte como para ser... s-ser asesi-nado.

Eso fue la gota que derramó el vaso de agua.

Espero que todos hayan pasado una feliz navidad y, además, pasen un felíz año nuevo -w-. Les deseo lo mejor para el año que viene (lo cual ya falta muy poco :3)

3 N16R0MAN73 ;y