En Nazarick, el guardián del séptimo piso, Demiurge, esperaba a los Supremos fuera de la oficina principal de Ainz, la sirvienta homúnculo del día parecía no estar y sospechó que se trataba de la orden de Ainz; sin embargo, los Asesinos de Ocho Filos estaban esperando en el techo, colgados. Cuando nuevamente los escuchó dentro, dio unos leves golpes a la puerta y esperó la confirmación para pasar. Fue su creador Ulbert quien le dio el permiso, lo que aumentó su felicidad.
—Sean bienvenidos de nuevo a Nazarick Ainz-sama y Seres Supremos. Me gustaría dejar estos informes en persona y contestar cualquier duda que tengan respecto a mis acciones presentes y futuras.
—Déjalo en el escritorio y siéntate con nosotros en esa silla Demi. —Ordenó su creador y no tuvo más opción que obedecer, un poco de calor se instaló en sus orejas por el apodo dado— Ahora, respecto al Vasallaje del Reino humano que Momonga-san se encargó, ¿cómo va? ¿ya se han recolectado a algunos nobles o todavía?
—... Por el momento están siendo vigilado los peores nobles, los encargados son Demonios Sombra, luego de que regresen entregarán su información a Doppelgängers menores y se iniciará la fase: "suplantar".
—¿Qué hay de esta... herramienta humana tuya, Demiurge? ¿Todavía es necesaria para nuestros planes?
—Lo es Touch-me-sama. —Contestó con cautela, sabía que este Supremo era un defensor de la justicia y los débiles— Su intelecto rivaliza e incluso supera al del Emperador Jircniv, esa habilidad de actuar también es superior. Su figura pública es necesaria para mantener una buena imagen mientras ustedes, mis señores, controlan todo.
—Uhm, bien. ¿Hay altas medidas de seguridad, debo de suponer?
—¡Por supuesto! Ella es vigilada por cuatro demonios sombra las veinticuatro horas del día, incluso con eso, hay otros vigías dispersados por todo el castillo sin que ella u otro humano lo sepa.
—Bien, bien. Me agrada oírlo. —Finalizó el Campeón Mundial todas sus dudas, o al menos, las más importantes. Bellriver continuó al tener libre el paso verbal.
—Pasemos a las Naciones extranjeras, ¿cuáles son sus posiciones y qué les depara el futuro?
—Sí. Comenzando con los Vasallos, el Imperio Baharuth tendrá las leyes actualizadas del Reino Hechicero en un par de días, ya que el Imperio tiene naturalmente una alta calidad en todos los sentidos, se les ordenará seguir como está al menos por unos meses más. El Emperador actual es buena marioneta y acata bien sus nuevos deberes. Respecto al Reino de Re-Estize, se les apoyará de manera económica, social y militar. Sus nobles serán sustituidos en el plazo máximo de dos semanas y las nuevas leyes tardará un mes en adecuarse.
—¿Qué hay de la familia Real? Tengo entendido que el Rey ahora tiene un hijo y una hija para ser sucesores porque las otras ya están casadas y no son aptas para gobernar.
Momonga pudo haber respondido con facilidad la pregunta de Temperance, pero luego de ver el rostro alegre y satisfecho del Guardián del Séptimo Piso, decidió guardar silencio y esperar la respuesta entusiasmada que no tardó en aparecer.
—Cuando el Rey deje su puesto en un futuro no tan lejano, será su hijo el príncipe Zanac quien tomará su nuevo rol; sin embargo, Renner, su hermana, será la que controle todo desde las sombras mientras ostentará el título de Primer Ministro. En otras palabras, Nazarick tomará el control del Reino y lo volverá parte del Reino Hechicero, no un simple Vasallo. —Finalizó con una sonrisa más ancha y divertida, malévola también era su sinónimo. Momonga tuve que reprimir un grito de: "¡¿Eh?! ¡¿Por qué?!"
—Suena estupendo. —Alabó Mekongawa siendo muy sincero y confundiendo a su líder que sin saber estaba en plena confusión— Continúa con el Reino Santo, Momonga-san nos dio una breve explicación de esa Nación cuando fue para allá hace un tiempo.
—Por supuesto Mekongawa-sama. El Reino Santo está siendo manejado por un Doppelgänger de nivel medio, al igual que distintos nobles del norte y el sur. Estos últimos se encargarán de crear una guerra civil, una batalla será librada por la parte Sur para tomar control del lado Norte. El Rey Caspond lo va a ignorar en su mayor parte y se concentrará de contener a salvo pero mal alimentado a sus ciudadanos. Cuando llegue el momento adecuado, el Reino Hechicero irá en su ayuda y, de sólo un golpe, tomará el control total de todo.
Ahora que Ainz lo pensaba, fue buena idea dejar que sus amigos preguntaran a Demiurge sobre lo que sucede o sucederá en el futuro. Sin saberlo, le quitaron una carga pesada del hombro y lo prepararon para los próximos eventos. Nuevamente, en su mente, Ainz agradeció profundamente a todos sus amigos que tuvieron y tendrán preguntas.
—¿Cuánto tiempo hasta que eso suceda? ¿dos o tres meses?
—O-oh... Me disculpo profundamente Shijuuten Suzaku-sama, pero mi intelecto sólo a logrado planearlo hasta dentro de seis meses. Si intentara adelantar... no, me sería muy difícil aunque no imposible. Si los Supremos lo desean, puedo pensar en un atajo en estos días.
—Tranquilo. Está bien Demiurge, sólo quería saber; si en seis meses el Reino Santo será nuestro, esperaremos de manera paciente. No hace falta apresurar las cosas.
—Entendido. Muchas gracias.
—Continúa con el Reino Enano. —Dijo Peroroncino aunque el Guardián lo interpretó como una orden— Cuando fuimos a verlos, ellos se veían bien y felices, parecía que incluso estaban más relajados ahora que su amenaza se ha ido.
—Es como usted dice Peroroncino-sama. El Reino Enano mantiene un acuerdo comercial beneficioso unilateral con el Reino Hechicero. El vasallaje para esa Nación... bueno, tal vez en siete u ocho meses para que se unan. Cuando Ainz-sama recuperó su capital aumentó por mucho nuestra posibilidad de ponerlos bajo control. Por supuesto, era como se esperaba del líder de los Supremos, su sabiduría, previsión y carisma están en un nivel inigualable para simples subordinados como nosotros los Guardianes o habitantes de Nazarick.
—Jajaja, es como dices Demiurge, fueron por esas y muchas otras características más de Momonga-san que fue nombrado Líder del Gremio. Si te soy sincero, el tiempo que pasamos todos juntos con él en Yggdrasil fueron lo mejor de nuestras vidas.
—Blue Planet-san... yo también lo pasé muy bien con ustedes. Las grandes aventuras, batallas y momentos que pasamos siempre estarán en mi memoria aún si pasa miles o millones de años.
El ambiente se tornó cálido y familiar por unos segundos, luego de eso, volvió a la normalidad y siguieron preguntando sobre la Teocracia Slane, el Estado-Consejo Argland y la Alianza de Ciudades Estado, esas Naciones estarían siendo vigiladas en ese orden.
Cuando se introduzco el Reino Dracónico, los Supremos que habían ido allá se acomodaron un poco en sus sillas o se mostraron ansiosos y felices por dar la noticia a Demiurge. El que tuvo que hablar primero fue el más intelectual y quien organizó todo.
—Tenemos noticias. —Dijo para todos, así el Guardián pensaría que recién revelaban la información— Cuando fuimos al Reino Dracónico hicimos un trato con la Reina Draudillon. Nosotros, o mejor dicho Takemikazuchi-san, se encargaría de destruir o matar tres avanzadas de hombres bestias a cambio de favores al futuro. Estos "favores" serán utilizados con sabiduría y de tal manera podremos adelantar el Vasallaje o unión. ¿Qué dices Demiurge? Esto no ha modificado algún plan tuyo, ¿cierto?
—N-no Punitto Moe-sama. En realidad, desde que habíamos pedido un sello de acuerdo a esa Nación para invadir el Reino de Re-Estize no hemos mantenido contacto. Pensé que lo mejor sería obligarlos a entrar en una situación más desesperada antes de brindar la ayuda necesaria...
—Bueno, no siempre puedes conseguir todo con el mismo método. Trata te pensar en planificaciones más suaves y humanitarios para la próxima, te aseguro que te dará otra perspectiva~.
—Tomaré su consejo Punitto Moe-sama, muchas gracias por brindarme esa información privilegiada.
—No es nada chico, me recuerdas un poco a Ulbert-san cuando lo conocí por primer vez al unirme al clan. Todos sus planes siempre tenían muerte, destrucción, saqueo y, bueno, más muerte jajaja. Le tomó tiempo calmar su ansia... catastrófica, pero lo hizo.
—Hey, eso fue hace tantos años, era... un poco más joven. Al contrario, pienso que Demi puede superarme en ese aspecto, después de todo, es mi creación. —La sonrisa orgullosa que mostró al finalizar no pudo faltar.
—En eso estoy de acuerdo, es más controlado que tú... cabra vieja.
El sonido de muchas risas inundó la oficina por un buen tiempo mientras se escuchaba con las justas los murmullos malhumorado y divertidos de su creador. Demiurge sonrió con timidez pero lo hizo, compartir un momento así con los Supremos sería algo que atesoraría por siempre.
—Ya estuvo muchachos, volvamos a lo importante. Ya que han terminado con sus preguntas, es tiempo de lo principal... Demiurge, nos gustaría a todos nosotros informarte de nuestro próximo movimiento en el cual el personaje Jaldabaoth está involucrado.
El rostro del guardián se mostró pensativo y confuso por un par de segundos cuando el líder de todos los Supremos y el absoluto gobernante de Nazarick se dirigió a él; luego sonrió de manera siniestra al entender un poco de lo que hablarían.
El tiempo empleado para escuchar los diversos detalles de varios Supremos llenó de dicha el oscuro pero leal corazón del Guardián. La inteligencia que los amos y dueños de Nazarick demostraron en poco lapso le dio una excitación anticipada.
—Eso es todo, prepara a tu subordinado ya que máximo sucederá en una semana. Debemos despejar la duda de tu verdadera identidad para que puedas salir en tu forma principal sin sospechas.
—Entendido Amanomahitotsu-sama. En estos mismos instantes iré y haré lo que me han pedido. Si me disculpan.
Dio su reverencia y salió de la oficina. Los Supremos esperaron un poco antes de volver hablar, puede que Demiurge no tenga el oído tan desarrollado como los gemelos guardianes pero aún así estaba muy desarrollado, lo suficiente para escucharlos con claridad incluso si estaban a cien metros de distancia.
—... Bien. Ya que todo está en orden, pueden volver a sus habitaciones o visitar a sus creaciones. Recuerden que mañana tengo una proclamación que hacer en el Reino de Re-Estize y después algo igual en el Reino Hechicero, ustedes me tiene que acompañar en ese último.
—Lo sabemos Momonga-san, no te preocupes. —Tranquilizó Touch-me con voz amigable— No vamos a escondemos de algo tan simple como una presentación que puede durar un par de minutos.
—Je, tienes razón, sería algo vergonzoso si se evade por temor. Bien. Iré a mi habitación y haré... algunas cosas, si necesitan algo no duden en contactarse conmigo a través de [Mensaje].
—Me gustaría saber que cosas harás pero respeto tu privacidad. —Despidió Ulbert mientras se daba la vuelta y caminaba hacia la salida, casi seguidamente todos comenzaron a seguirlo— Nos vemos Momonga-san~ estaré un par de horas en mi habitación catalogando todos los Ítems que me devolviste, luego de eso puede que visite el Séptimo Piso.
—Aquí lo mismo, me gustaría ver cómo están las sirvientas homúnculos y mi querida Solution. Si me sobra más tiempo, estaré durmiendo profundamente luego de haberme dado un festín en la cafetería.
—Creo que la mayoría pasará tiempo en su habitación o con sus creaciones... En mi caso, estaré visitando todo el Noveno Piso, quiero saber si los juegos decorativos que colocamos están siendo funcionales.
—¡Oh! Te acompañaré luego Peroroncino-san, primero iré al Bar, quiero tomar un par de bebidas y si es posible preparar algunas. —Propuso Amanomahitotsu y el arquero asintió en comprensión.
Cada uno empezó a decir sus planes, Momonga sólo los vio en silencio y asintió a sus palabras cada que se dirigían a él. Se quedó solo y pensó: "... ¿Qué?"
En ningún momento Peroroncino, Touch-me, Tabula y Bukubukuchagama mencionaron a sus creaciones. Puede que parezca extraño, pero pareciera que ellos no querían encontrarse con sus creaciones los Guardianes por el momento. ¿Quizás tenían algo de vergüenza por haberlos creado así?
Al inicio no lo demostraron pero podía haber sido el momento del reencuentro después de largos años... Incluso él mismo se avergonzó de Actor de Pandora; sí, podía entenderlos. Necesitaban un poquito de tiempo para acostumbrarse a lo que crearon.
Ahora entonces, tenía que ponerse manos a la obra. Momonga caminó hasta su habitación y se encerró en ello al segundo que entró. Sabía que no había nadie más, él había enviado un [Mensaje] antes para despachar a todos por tema de privacidad.
Abrió su inventario y de el sacó cuatro libros simples y ligeros, cada uno contenía diversos temas pero que se conectaban entre sí. Casi como tomos.
—... Será una noche larga, muy larga. —Y suspiró cansado, sus ganas de no hacer nada o pasar tiempo con sus amigos en aventuras se deslizaron al rincón más profundo de su mente.
Agarró el primer tomo, leyó el inicio y asintió mientras sacaba una pluma de escribir elegante y su propio libro titulado: "El camino hacia la Supremacía 4".
Era tiempo de sacar notas y los libros que sacó, especialmente este: "Realeza: Modales y Etiqueta" le ayudaría un montón en lo que sería su proclamación de mañana y su conducta como Rey. Su acto que estaba casi terminado podría dejarlo al último, primero era esto.