Feliz Halloween.
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nadaoriginal. Ya te imaginas la cara de los dos cuando se enteren que la Guerra terminó, aunque sí, deberán decir que pasó cuando ellos no estaban jaja. ¡Saludos!
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sal1310. Zeus, le da a su padre una poción… me salté el tema jaja. Al ser Caballeros de Athena, vaya resistencia que poseen, no por algo son los más fuertes e Ikki… es el capo de capos, es un dios jaja. ¡Saludos!
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Sin más, comencemos…
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La Guerra había finalizado y aunque no se llevó a cabo tal guerra, al final de todo se logró una victoria sobre la diosa Hera la cual, sin ningún motivo aparente, quería destruir a Athena y el Santuario, sin embargo, gracias a una intervención de Zeus, se logró evitar esta tragedia.
Ahora mismo, el Santuario y el pueblo cercano Rodorio celebrarían esta "victoria" ya que había sobrevivido a una guerra más y es los animaba a festejar por lo alto, tanto que Saori decidió dar como libre el día a todos los que trabajaban en el Santuario por lo que todo el mundo se fue a celebrar, aunque algunos lo hacían más para beber.
En el caso de las Saintias y los Caballeros de Bronce legendarios, estaban en la sala Patriarcal esperando señales de su diosa.
- ¿A qué hora sale la inútil de Saori? – preguntó Ikki recostado en una de las paredes de la Cámara.
- Ikki-san, podría por favor, ¿dejar de referirse a la señorita Saori de esa forma? – dijo Mii algo irritada.
- Está bien – el peli azul carraspeó un poco su garganta - ¿Cuánto tardará en salir la no tan inútil Saori?
- ¡Ikki-san!
- Jajajaja, que buena estuvo esa – reía la Saintia de Casiopea – aunque no me deba reír ya que es un insulto a mi diosa, estuvo realmente buena esa broma.
- Tu sí que sabes Erda – Ikki abrazó por el cuello a la castaña la cual al sentir el contacto del Caballero de Fénix se sonrojó levemente.
- Dejemos eso a un lado, al parecer logramos derrotar a la diosa Hera – sonrió Shun – nos libramos de varias bajas que se podrían haber dado.
- Sí, no me hubiera gustado ver más perdidas, así como en las anteriores Guerras.
- Hera solo era una idiota que quería conquistar el mundo por gusto – dijo Ikki – al menos podré ver el juego del Barcelona en paz.
- ¿A poco eres fan del Barcelona?
- Claro que sí, no soy como el idiota de Hyoga que le va al Real Madrid.
- Oye, al menos tenemos más títulos que ustedes en todas las competiciones.
- Dejando eso a un lado, me pregunto donde están Seiya y Shoko – Xiao miraba hacia todos lados y los demás notaron eso, no había rastro de los Caballeros equinos.
- Pensé que habían ido en la delantera del ejército, creo que a lo mejor lucharon contra algunos de los Guerreros de Hera y después de eso se fueron a celebrar juntos.
- No me sonaría raro eso – dijo Shiryu.
- Esos dos son unos loquillos – río la Saintia de Casiopea.
- Al menos hay que disfrutar que vencimos a la diosa que es la Reina del Olimpo.
- ¡Por Athena! – celebraron los demás y solo pensaban en como estarían Seiya y Shoko.
Saori miraba desde la cima del Santuario a todos en el sitio y solo sonreía sabiendo que hizo lo correcto con llamar a su padre Zeus para evitar una nueva Guerra.
- ¿Qué pasa Athena? – preguntó Shion a la diosa.
- No es nada Shion, solo feliz de la vida por haber ganado esta Guerra.
- Fue una gran idea haber llamado al Olímpico Zeus – el peli verde miró de reojo a los Caballeros de Bronce legendarios y a las Saintias hablando entre ellos – Realmente son unos guerreros todos ellos, me recuerdan mucho a mis antiguos compañeros en la anterior Guerra Santa.
- Creo que los recuerdo – dijo la chica – aun así, me da impresión que solo tú y Dohko hayan sobrevivido.
- Sí, pero hace tiempo que pasó, más de 200 años para ser exacto – río el peli verde para luego mirar hacia el cielo – por cierto, ¿Dónde estarán Pegaso y Equuleus?
- No lo sé, pero ellos están por ahí, creo que, viniendo de ellos, a lo mejor salieron en una cita, ya sabes cómo son ellos ahora.
- Sí, y sí que lo sé.
Los dos solo siguieron mirando al resto del Santuario y como los Caballeros estaban celebrando la "victoria" sobre Hera.
Mientras tanto, con Shoko y Seiya…
Ambos equinos estaban siempre en la cabaña en donde Seiya y su novia seguían teniendo relaciones sexuales, luego de que Hera fue derrotada, ambos seguían en lo suyo.
- ¡No aguanto más! ¡Ah! ¡M-Me corro! – exclamó la peli rosa encima del joven castaño saltando sobre la entrepierna del chico.
- H-Hazlo – Seiya finalmente llegó a su límite al igual que la Saintia y esta llegó a su clímax y cayó encima de su amado.
- Dios, creo que debemos tener un descanso – Shoko se bajó del chico y solo lo miró fijamente – por cierto, ¿Cómo habrá terminado el encuentro entre Saori-san y Hera?
- Ni idea, al menos, creo que deberíamos ir a ver.
- ¿Seguro? – el castaño asintió y la Saintia solo exhaló – bien, al menos podremos seguir más tarde. Puedes creer que aguantamos otras 6 horas.
- A lo mejor, aunque quedé con más ganas.
- Bueno, tal y como te dije, lo haremos toda la noche sin parar.
- Claro que sí – sin más, ambos equinos se levantaron, se vistieron y se fueron del sitio y solo pasaban por el bosque hasta que iban llegando a la aldea de Rodorio, eso sí, siempre llevando sus Armaduras puestas.
La gente por obvias razones los saludaba y todo y más con esto de la guerra que no hubo, fue más la atención que llamaron.
Unos minutos después, llegaron al Santuario y varios soldados rasos y algunos Caballeros y aspirantes los recibieron con aplausos, aunque estos seguían confundidos.
Sin más, se encontraron con los demás Caballeros de Bronce los cuales los recibieron como normalmente lo hacían con Seiya, igual estaban las Saintias.
- ¿Cómo es que todo el mundo los mira como si fueran dioses? – Jabu miró a la pareja la cual solo se quedaron viendo entre ellos.
- Ni creo que sea eso, desde hace tiempo nos viene haciendo eso.
- Parece que el par de yeguas aladas ya están bien – dijo Ikki mirándolos.
- Dios, pues resulta que al final de todo Hera fue llevada por Zeus al Olimpo y creo que no nos molestará en miles de años.
- ¿Y ahora qué haremos?
- Bueno, por el momento no creo que luchemos, bueno, al menos eso creo.
- Pues creo que me aburriré por mucho – el Fénix exhaló - ¿y ahora qué?
- Resulta que tenemos a alguien que a lo mejor te diviertes con él – Seiya se fue corriendo del sitio a gran velocidad, al tener el mismo poder de los Caballeros Dorados podía alcanzar la velocidad de la luz y en menos de lo que canta un gallo, llegó con un saco de papas.
- ¿Y eso que es?
- Míralo por ti mismo – el castaño le pasó el saco al peli azul y este al ver lo que contenía el interior, solo esbozó una sonrisa - ¿Qué te parece?
- ¡Me divertiré como nunca! Pensé que se había muerto.
- ¿Y que es hermano? – Shun se acercó a ver que era y quedó algo helado al ver lo que contenía - ¿Por qué contiene eso?
- Porque será mi nuevo saco de boxeo cuando esté aburrido – Fénix mostró lo que contenía y los demás quedaron callados – ¿lo ven?
- ¡¿Un espectro?! – solo Shoko parecía estar calmada, los demás estaban alerta, pero Ikki los calmó.
- Oigan, no hagan tanto escándalo ya que no estamos en programas de espectáculos, este tipo no es nada de poderoso, creo que hasta un soldado lo hace su hijo – Ikki mostraba al espectro de Rana, Zero, amarrado como si fuera un animal.
- ¿Por qué está aquí? – Katya alistó su ataque de Lágrimas Enjoyadas, pero fue detenida por Hyoga.
- Не делайте ничего, чтобы привлечь внимание, мы в Святилище.
- ¿Que dijo? – Xiao preguntaba ya que no entendió el ruso de ambos Caballeros de hielo.
- Dejando eso a un lado, ¿Por qué traen un espectro aquí?
- Lo uso como saco de boxeo, no tiene gran cosmos, de hecho, es un simple espectro sin nada que hacer más que lamerle los pies a Pandora.
- ¿Y qué haremos?
- Lo usaré para practicar mis golpes – Ikki sonrió de forma malvada y miró de reojo al espectro – creo que tú y yo nos divertiremos mucho.
- Mmmm hmmm mmm – el espectro seguía moviéndose tratando de liberarse, y a parte de estar amordazado no podía hacer nada.
- ¿Qué dices? – Ikki le quitó la mordaza.
- Me amarraron como puerco, me amarraron como puerco, ¡miren! ¡miren! ¡Me amarraron como puerco!
- Ya cállate, no quiero buscar las referencias – dijo Mii suspirando.
- Bien, lo callaré – Ikki volvió a ponerle la mordaza ya que no quería que siguiera hablando y quejándose.
- Saori-san creo que los quería llamar – dijo la Saintia de Delfín recordando la orden de la diosa hacia los Caballeros equinos.
- Bien, por el momento debemos ir – Shiryu miró fijo a Seiya y Shoko - ¿irán ustedes?
- No quiero ya que quería ir a dar una vuelta, pero ni modo, si Saori lo dice – Seiya decidió ir junto con su amada peli rosa a la Cámara de Athena junto con los demás Caballeros de Bronce, pasando por las casas de los Dorados hasta llegar a la Cámara de la diosa.
Pero durante el camino Ikki y Seiya se comenzaron a juntar para molestar a Jabu y a los demás de Bronce, normalmente por temas de futbol, cosa en la que se involucraron mucho al punto de que también Shoko se unió por ser fanática de este deporte. Al momento de llegar a la entrada de la Cámara, todos los involucrados se encontraban peleando, pero solo a gritos, cosa que llamó poderosamente la atención de Saori y Shion quienes salieron a ver qué pasaba.
- ¿Qué es todo este griterío? – el Patriarca miró a los demás los cuales estaban batallando por saber si era mejor el Barcelona o el Real Madrid, pero Saori intentó calmar las cosas junto con las demás Saintias.
- Oigan, cálmense de una vez.
- Silencio – ordenó el Patriarca, pero fue ignorado ya que no paraba la pelea.
- Silencio – ahora fueron las Saintias a excepción de Shoko que estaba en la pelea.
- Tápense los oídos – Saori les dijo eso a su Patriarca y Saintias e hicieron caso y juntando mucho aire en sus pulmones, la diosa exclamó con voz dulce y calmada - ¡Oigan pedazo de idiotas, cállense de una puta vez!
- ¿Eh? – la mayoría se callaron, aunque alguien debía seguir ya que era común que alguien hablara de más y ese fue Ikki.
- ¡Está más que claro que Saori es lesbiana!
- ¡I-I-Ikki! – gritó la diosa al igual que varias de las chicas, Shion solo desvió la mirada algo sonrojado.
- Bueno, desde que supe que mi hermana estaba enamorada de Saori-san, pues pasaron muchas cosas que digamos.
- P-Pero no soy lesbiana.
- Pues tienes pinta de lesbiana – dijo Hyoga dejando helada a la diosa – además, ¿no se supone que los dioses son bisexuales?
- P-Pero…
- Bueno diosa Athena, ellos no van por rumbo distinto, es cierto que los dioses son bisexuales, ya ve a su padre Zeus.
- P-Pero el caso de él es diferente al mío.
- Bueno, dejando a un lado que Saori es lesbiana.
- ¡Seiya, no soy lesbiana!
- Deja a un lado tu homosexualidad Saori-san, mejor dinos porque nos mandaste a llamar.
- Creo que mi vida sexual ya está arruinada – dijo por lo bajo la diosa – como sea, solo quería decirles que bien hecho en las batallas que libramos contra los resucitados del ejército de Hades y el de Poseidón, creo que es momento que la Tierra llegue a su periodo de paz definitivo.
- O sea que no batallaremos más.
- No es eso, puede que vengan futuras batallas, ya sabes cómo son los dioses.
- Sí, unos idiotas que solo buscan sexo y que son bisexuales como Saori.
- ¡Que no soy lesbiana!
- Solo disfrutemos del tiempo libre que tengamos, quien sabe cuándo alguien más con ansias de dominar el mundo llegue.
- Y sin contar la homosexualidad de Saori.
- ¡Que no soy lesbiana!
- Pero sí parece Diosa Athena.
- ¡Que no lo soy!
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Continuará…
