nadaoriginal. 5 meses después del último capítulo y el Barcelona siguió valiendo Bergamo. No le miro mucho potencial, más sin Messi, dudo que vaya a pasar algo. Ikki es el puto amo, seamos sinceros jaja.

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Sin más, comencemos…

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Shoko y Seiya habían salido a dar una vuelta y en el camino, la peli rosa se le vino una idea a la mente la cual la compartió con su novio.

- ¿Qué piensas Shoko?

- Seiya, ahora que lo pienso, pues la verdad es que creo que deberíamos ayudar a los demás.

- ¿Por qué lo dices?

- Sí, digo, ya las cosas están normales entre nosotros, ya no hay rencores ni nada con los demás, acepté mi pasado, aunque no fue lindo, lo hice, por eso, es que quiero ayudar a mis amigas con sus crushes.

- ¿Sus qué?

- O sea, con tus amigos, ¿a poco no los has ayudado? – cuando la Saintia de Equuleus le preguntó eso, Pegaso quedó ido y solo río nerviosamente – Seiya, ¿Por qué no los ayudaste?

- Bueno, lo dice la tipa que me ha tenido teniendo sexo por horas desde que terminó aquella guerra y lo del partido del Barcelona.

- Aguántame las carnes, no solo fui yo, tu también lo hiciste mentiroso – dijo la peli rosa mirando de forma retadora a su pareja.

- Bueno, dejando a un lado eso, sé que a los chicos a lo mejor les gustan tus amigas, pero no sé qué dirán.

- Veamos, se dice que las Saintias son las guerreras que van con Athena y deben preservar su pureza.

- Cosa que no tienes – susurró en voz baja el chico solo para recibir un golpe en la cabeza de parte de su amante – eso dolió.

- Idiota, pero sé que Saori-san realmente ignorará esa propuesta y solo nos hará felices, después de todo no sigue las normas de las Saintias normales, por lo que sé que ellas estarán felices de andar con ellos.

- Bueno, ¿y que sugieres?

- Seamos los cupidos de ellos, es más, tu encárgate de los chicos y yo les diré a las chicas esto.

- Alto ahí Shoko, suena buena la idea, pero la verdad es que no hay aún una idea de cómo hacer esto.

- Es cierto.

- Podríamos decirle a Saori sobre esto.

- A lo mejor, pero como ella está en una encrucijada con mi hermana Kyoko, pues no creo que sea correcto hacerlo, al menos eso pienso – dijo la peli rosa recordando la situación algo tensa entre su diosa y su hermana.

- Por cierto, ¿Cómo van las cosas con tu padre?

- Calmadas, ya todo quedó en el pasado, sin rencores, después de todo es mi padre, la persona que me crío – sonrió Shoko – pero dejemos eso a un lado, ya sé me ocurrió algo.

- ¿Qué cosa?

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Una vez que los Caballeros de Bronce fueron llamados al igual que las Saintias a reunirse en la mansión Kido, ambos equinos estaban liderando eso y los demás estaban confundidos.

- ¿Qué pasa aquí? ¿Por qué nos reúnen?

- Bueno, antes que nada, bienvenidos a todos, hay algo que tenemos que hablar y…

- ¡No me digas, ya sé que es! – dijo Xiao interrumpiendo a la Saintia de Equuleus - ¡Shoko, estás embarazada!

- ¿Eh? – la peli rosa quedó confundida por eso, pero antes de que dijera algo, sus amigas le cayeron encima.

- ¡¿Estás embarazada?!

- N-No, no lo estoy.

- No hay que sospechar quien es el padre – dijo Katya para mirar al Caballero de Pegaso - Я надеюсь, ты не убежишь, потому что, если ты это сделаешь, я заморозю это для тебя (Espero que no te escapes, por lo que si lo haces te lo congelo).

- N-No lo haré, pero es que Shoko no está embarazada.

- Menos mal, ya pensamos que la habías cagado Seiya – dijo Hyoga riendo un poco porque su amigo la había librado por poco.

- Entonces, si Shoko-san no está embarazada, entonces ¿Qué pasa?

- Resulta que queremos hacer una salida entre todos, pero cada quien iría en pareja.

- ¿En pareja?

- Sí, o como quieran llamarlo, en dúo si lo desean, al final de todo solo es una salida.

- ¿S-Salida en pareja? – las chicas fueron las que estaban más sonrojadas por eso sabiendo a lo que los Caballeros equinos estaban haciendo referencia.

- ¿Qué me estás diciendo amigo?

- Vamos chicos, hay que salir de vez en cuando entre nosotros y no quedarnos a ver el futbol – Seiya miró de reojo a Ikki el cual solo levantó la mirada.

- Mira caballito de feria, a mí no me dices que me gusta o no.

- Vamos hermano, al menos me gusta la idea de salir a algo así, ¿acaso no quieres? – Shun miró a su hermano mayor el cual sabía que no podría discutir contra él – además, Erda-san estaría triste si no vas.

- Así es, Erda-Senpai se pondría triste si va ella sola – Xiao puso sonrojada a la Saintia de Casiopea la cual casi empieza a toser por su sonrojo.

- B-Bueno, no es como que me moleste, pero si él va no me molestaría que me acompañe.

- Vaya, parece que alguien está sonrojada – río Katya mirando a la castaña la cual estaba más roja que nunca.

- N-No me molesten, aunque tú no debes hablar Katya, que si vas con Hyoga-san podrán estar juntos y no enfriar el ambiente – al decir eso, los dos rusos se sonrojaron por lo dicho por la castaña.

- Почему вы об этом упомянули?! (¡¿Por qué mencionaste eso?!) – gritó la Saintia, siendo Hyoga el único que le entendió lo que dijo, pero las demás asumieron que fue algo malo lo que dijo.

- No te avergüences – Erda sintió como la rusa le daba algunos golpes en la espalda, al mismo tiempo que todos los demás solo miraban la escena, aunque la mirada de los Caballeros equinos los hizo callar a todos.

- Bien, entonces está todo decidido – Shoko fue la que habló – Mii y Xiao irán con Shiryu-san y Shun-san respectivamente.

- ¿Q-Que?

- Katya, irás con Hyoga-san mientras que Erda irá con Ikki-san, yo como es obvio iré con Seiya, así que, si no les gusta, pónganle flores.

- E-Espera Shoko, ¿nosotras iremos con los chicos… a solas?

- Sí, no sean chillonas – en ese momento, Kyoko bajaba de la planta de arriba junto con Saori, aunque se sonrojaron cuando miraron a los demás en la sala.

- ¿Q-Que hacen todas aquí?

- Venimos a hablar sobre un evento – la peli rosa miró a Kyoko - ¿y tu hermana? ¿Por qué venías de la habitación de Saori-san?

- E-Este… p-pues… s-solo hablábamos…

- Aja, eso decía mi madre cuando me tuvo – dijo Hyoga sonrojando más a ambas chicas.

- B-Bueno, solo quedamos en hablar sobre la armadura de Equuleus, nada más.

- Sí claro – Ikki miró a las dos chicas – miren, si no admiten que les gusta la tortilla en vez del chorizo, solo díganlo.

- ¡Que no es así! – gritaron.

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Al día siguiente…

Shun y Xiao estaban caminando por la ciudad, los dos se habían juntado por obra de Shoko, así que solo iban sin hablar y un poco sonrojados, hasta que la china tuvo el valor de hablar.

- ¿P-Por qué es que Shoko nos junta de esta manera? – dijo la castaña – aun así…

- ¿No te molesta andar conmigo Xiaoling-san?

- ¡P-Por supuesto que no Shun-san! – Xiao bajó el tono de su voz al saber que había gritado – 对不起 (Perdón).

- No te preocupes – mientras ambos iban caminando, estos eran vigilados por Erda e Ikki desde una vista considerable.

- Espero que la osita de felpa de país pirata no le haga nada malo a Shun.

- Xiao no es así, a diferencia de la actitud de cierto chico de cabello azul.

- Bueno, yo solo me aseguro que Shun no sufra por alguna de ustedes – Ikki miró a la Saintia de Casiopea - ¿Qué hay de ti? ¿Por qué decidiste en venir conmigo?

- L-La verdad es que debes saber sobre mis sentimientos por ti ¿no? – el peli azul, aunque lo quiso disimular, se sonrojó por eso – debes saber entonces porque te estoy acompañando.

- S-Sí, claro, aunque en el caso sentimental yo no…

- Tu hermano me contó sobre lo de tu amada Esmeralda y tu pasado en la Isla de la Reina Muerte – Ikki la miró fijo – sé que no volviste a amar a ninguna mujer y que solo la tuviste a ella en tu corazón, pero quiero estar contigo del mismo modo que ella lo estuvo.

- Tu… - Ikki solo volteó la mirada, el frio corazón del Caballero de Fénix estaba siendo calentado por la castaña la cual parecía estar entrando en el sitio en el que solo una mujer había estado.

- Parece que no estoy tan lejos de hacerlo realidad – pensó Erda algo sonrojada.

Mientras tanto, Shiryu y Mii estaban en una cascada, ambos sentados mientras que el agua les caía encima, aunque con ellos las cosas estaban más que claras, el Caballero de Dragón no era tan denso como sus compañeros.

- ¿Segura que querías venir a entrenar conmigo? – preguntó el chino a su compañera de cabello rubio.

- Sí, quiero ser más fuerte por si aparecen más amenazas – la italiana la miró – la señorita Saori necesita que la cuidemos más.

- Puede ser cierto, aun así, deberían relajarse de vez en cuando, no siempre vendrán amenazas por ustedes – dijo el Dragón – por cierto… sobre la carta.

- E-Eso… - Delfín se puso muy nerviosa por eso – es que como dice…

- Lo sé, la verdad no pensé en eso, Sunrei ha sido la chica más cercana con la que he estado, por lo que no me molestaría tener una relación con alguien como tú.

- Vaya, parece que no está nada perdido.

- Sí.

- Entonces sigamos con esto, luego veremos que hacemos – susurró el Dragón algo sonrojado, lo mismo que Mii.

Mientras que estos estaban en lo suyo, Hyoga y Katya solo estaban tomando algo en una cafetería por lo que parecía una salida algo madura.

- ¿Por qué a una cafetería? – dijo el rubio de ojos azules mirando a la Saintia la cual se sonrojó.

- B-Bueno, es algo normal, las primeras citas son de forma calmada para después irnos conociendo más – decía Katya mientras que solo tomaba un poco de su taza con café de forma elegante, cosa que le dio un poco de risa al Cisne - ¿Qué ocurre?

- Я вижу, что ты очень элегантен, даже когда пьешь кофе (Veo que eres elegante, incluso cuando bebes café) – Hyoga la miró fijamente a lo que ella se sonrojó.

- Придурок (Idiota) – la chica dejó su taza a un lado.

- Pero al menos te gusto – dijo el chico mientras que tomaba su café, pero no de forma elegante como lo hacía Katya - ¿o me equivoco?

- S-Solo te dije que me atraías.

- Uy, qué fría eres.

- ¡Mira quién habla! – respondió – b-bueno, estamos en una salida entre los dos, pero… Скажи мне правду, Хёга-сан, я тебя привлекаю? (Dime la verdad Hyoga-san, ¿te atraigo?)

- ¿Por qué me lo preguntas? – Hyoga la tomó del mentón mientras la Saintia de Corona Boreal se sonrojaba mucho - ¿tengo que responder?

- ¡No me hagas eso!

Al mismo tiempo, Kyoko y Saori estaban tomando té en el balcón de la mansión Kido mientras que el silencio reinaba.

- ¿En verdad quieres tener una relación conmigo? – dijo Saori mirando a la ex Saintia de Equuleus.

- B-Bueno, si al final me lo permite, encantada estaré feliz de estar a su lado por el tiempo que me sea posible – la peli morada la observó fijamente – digo, si usted está dispuesta.

- Por ser una diosa, creo que los gustos son diferentes, además, soy bisexual como las deidades, así que… no me molesta.

- Me alegra escuchar eso Saori-san.

- Por fin – susurró Shoko escondida junto con Seiya – al final mi hermana se le confesó a Saori-san.

- Parece que tendremos cuñada millonaria – el castaño río por eso - ¿verdad?

- Así es – Shoko miró a su hermana y ahora cuñada y les sacó una foto en secreto, aunque se miró que Kyoko y Saori se querían besar, pero tímidamente lo hicieron, momento que la peli rosa sacó varias fotos, pero fue expuesta.

- ¡¿S-Shoko?!

- S-Shoko-san, ¿Qué haces aquí?

- No te preocupes, solo publicaré la foto en Facebook, así todas mis amigas sabrán que soy cuñada de la famosa Saori Kido-san, así tendré mucha fama y muchas cosas de qué hablar.

- ¿S-Sabes que mi reputación está en juego? – dijo la peli lila muy nerviosa.

- ¡Corre Seiya! – gritó la peli rosa mientras era cargada por su amante y se iban del sitio, al mismo tiempo que Kyoko y Saori los perseguían suplicándoles que no publicaran las fotos que había tomado.

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Continuará…

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Y hasta aquí el capítulo de hoy.

Señores, el próximo capítulo será el final, quiero cerrar el fic con broche de oro.

¿Lograrán tener los 88 hijos? Quién sabe jaja.

Sin más, este ninja se despide.

Bye.