Shaman King no me pertenece, ni mucho menos sus personajes, solo este fic que es un final alternativo de la serie ideado por una fan n.n. No tengo ningún fin de lucro, me reservo los derechos de autor.

Disclaimer: Nos ubicamos cuando el torneo de shamanes concluye.

-sama: señor

Ni la muerte nos separa

Por rocio-asakura

Capitulo 8: "La lucha contra el guardian de la Tierra"

-eres impresionante Asakura, me venciste –Ceres coloco unos mechones de su cabello tras su oreja.

-jijiji n/n

-amo Yoh! Ahora podrá ver nuevamente a la señorita Anna! –hablo con voz entusiasmada Amidamaru, colocándose a la par de el joven, mientras que el shaman solo podía sonreír de felicidad y asentir suavemente como respuesta.

-que mala memoria tienen los dos ¬.¬

-eh? o.o –shaman y espíritu la observaron confundidos.

-no escucharon lo que les dije al principio? ù.ú, deben pelear y derrotar a los integrantes del equipo de los cuatro elemento ¬.¬

-y cuanto son? o.o –consulto de manera inocente el castaño.

-cuatro -.-

-aahhh jijiji n.nU

-bien, ahora debes ir a otra dimensión para continuar con el combate. Allí ya te estará esperando el siguiente guardián –Ceres saco una pequeña esfera blanca de entre su ropajes- toma Asakura, esta es la prueba de que me venciste n.n

-gracias n.n

El silencio se apodero de momento.

-que esperas para irte? o.ô

-y cómo me voy? o.o

-o.O...uuff…u.u así –exclamo la joven guardiana, chocando su báculo contra las nubes.

- - - - -

-bien, creo que es mi turno n.n

-qué haces aquí? ya deberías estar allá ¬.¬

-no seas tan mal humorado Ashcroft n.nU –lo reprendió la mujer, ante el bufido de protesta del aludido.

-no te preocupes Aishin, ya me acostumbre n.n

-pero que... ò.ó?

-con su permiso –sin más que decir, el hombre realizo una reverencia y desapareció antes de que pudiesen reprenderlo por su comentario.

- - - - -

Caminaba y caminaba, pero por más que avanzaba, la espesura del bosque que lo rodeaba no aminoraba en lo más mínimo. Observo todo con cuidado, sorprendiéndose de que en aquel sitio el cantar de las aves existiera.

Continuo su andar, con su espíritu acompañante siguiéndolo fielmente. Solo se detuvo al llegar a un claro de verde y mullido césped. Supuso que allí se llevaría acabo el combate. Contemplo su alrededor en busca de su siguiente contrincante, al que diviso perdido en la copa de un árbol.

-disculpa, tu eres otro de los guardianes?

El aludido sonrío aún oculto entre las hojas. "impresionante, me encontró sin problemas n.n"

-en efecto –de un salto, el hombre de cabellera plateada se encontraba frente a Asakura- mi nombre es Seya Kinomoto, guardián de la tierra y el segundo en juzgarte. Es un placer conocerte Yoh-sama –dicho esto, realizo una reverencia mientras la suave brisa mecía suavemente su capa.

-cómo sabe su nombre amo? o.o –Amidamaru lo vio extrañado. Más Yoh simplemente se encogió de hombros.

-el placer es mío n.n

Los ojos de Seya se afilaron. Su sonrisa... podía notar que aquella mueca era algo forzada.

-comenzamos?

-si –el castaño desenfundo a Harusame, y segundos después la posesión ya estaba ejecutada.

Con la misma velocidad, un enorme espíritu hizo acto de presencia tras Seya, con iguales facciones que el de la guardiana del Aire, más este era de diversos tonalidades de verde y con rasgos más amenazadores.

Sin esperar demasiado, y en está ocasión aún más desesperado por terminar lo antes posible con el combate, Yoh se abalanzó contra el espíritu, realizando su conocida técnica "Cuchilla de buda". Más Seya lo recibió sin borrar su sonrisa del rostro.

-esa técnica es muy buena n.n –susurro el guardián, parado en la mano de su espíritu acompañante.

-pero, cómo...? o.o

-ahora es mi turno, verdad? n.n –con una simple mirada dirigida hacía su espíritu, este proporciono una gran patada a la tierra creando grietas profundas sobre la corteza terrestre.

Si el descendiente de los Asakura no saltaba hacía un lado cuando la grieta comenzó a formarse bajo sus pies, lo más seguro era que hubiese caído a la nada. Más no contó con que un segunda grieta se formara justo en su punto de caída.

-auch! –se quejo del dolor levemente, al momento en que su cuerpo chocaba contra la tierra cuando se sostuvo del risco con una mano para no caer a la nada.

Con fuerzas que sacó de un lugar desconocido para el guardián, Yoh pudo colocarse en la seguridad de la tierra firme. La respiración del joven era agitada, lo que preocupo a Amidamaru quien deseo desfucionarse de Harusame y ayudar a su amo, más comprendía que si lo hacía Asakura perdería.

-eso es Yoh-sama, no me decepcione. Resista a mis ataques n.n. Lamento decirle que los ataques desde la tierra no funcionaran contra mí. –la voz rasposa de Seya comenzaba a molestarlo.

La decisión se hacía aún más notable en los ojos del castaño.

-si no es desde la tierra... –Yoh salto con todas sus fuerzas, consiguiendo una altura considerable- es por el aire! –Harusame se empuño hacía Seya.

-exacto n.n. Buena conclusión.

La mano libre del espíritu de la Tierra se elevo, golpeando al shaman y haciendo que este se estrellara con fuerza contra el suelo.

-más debe ser una altura mayor, la cual solo alcanzarías si tuvieses alas n.n

-Amo Yoh... –susurro con pesar Amidamaru, aún en Harusame.

La sonrisa que poseía Seya por unos momentos se borro al ver como con esfuerzo su contrincante se incorporaba. Tan importante era aquella persona para él? Porqué? Qué lo impulsaba a continuar?

-porqué? –la pregunta salió de sus labios en un susurro. El castaño lo vio confundido- porqué quieres volver a verla?

-por que... yo la amo –confesó también en un susurro, seguro de aquellas palabras y aún sin poder incorporarse del todo.

Seya sonrió ante aquella respuesta.

Yoh intento normalizar su respiración, más le era algo complicado. El golpe ante la caída lo habían dejado muy lastimado.

-"si tan solo tuviera alas" –pensó mientras fijaba su mirada en el suelo ante el cansancio.

Su vista se clavo en algo que brillaba con insistencia sobre el césped frente a él. Se irguió un poco más y observo el objeto con curiosidad, era la esfera que Ceres le había entregado.

-"seguro se salió de mi bolsillo al caer" –la tomo con cuidado. La observo unos segundos más hasta que una idea surco su cabeza- no tengo nada que perder al intentarlo –se dijo, logrando incorporarse del todo.

La mano que sostenía a Harusame se cerro con un poco más de fuerza, mientras el joven miraba a Seya fijamente. Sostuvo con fuerza también la esfera y solo rogó por que su plan funcionara. Con lentitud acerco ambos objetos con el firme objetivo de unirlos.

-"debo estar con ella de nuevo"- ese simple pensamiento hicieron que el milagro sucediera.

Frente a los ojos de Seya, Yoh desapareció tan rápido como soplaba el viento.

-donde esta? o.o –se pregunto, observando fugazmente todo el contorno del claro. Cuando el sonido de aleteos llamo su atención.

Rápidamente elevo su mirada. Llevándose una gran sorpresa al encontrarse en lo alto a Asakura Yoh, volando con majestuosidad gracias a unas bellas alas blancas que no supo a ciencias ciertas de donde le habían salido.

El resto se torno borroso.

Continuara...