Disclamer: Digimon no me pertenece ni nada que contenga, ni siquiera los personajes… ;; (creo que este es uno de los sueños de cualquier fan, el que la historia y los personajes de alguna serie le pertenezcan…)
TWO KINGS, ONE HEART
Capitulo 6
El joven Ichijouji avanzaba entre con gran rapidez sobre su corcel, el frió de la noche aun no se extinguía pero el sol ya comenzaba a mostrarse. Las nubes comenzaban a teñirse de un color amarillo casi naranja, señal clara de que aquel día seria soleado tal vez eso seria bueno, sobre todo para el joven pelinegro, en la noche no había hecho mas que soportar un frió intenso y una ligera lluvia.
Atravesó los campos y árboles que rodeaban aquel reino a pesar del ataque del Norte todo parecía muy tranquilo y lo mas extraño es que no se había conseguido con ningún soldados perteneciente al ejercito del Norte. La mañana llego y ya las personas del Reino comenzaban sus faenas, Ken había llegado a la hora cuando las personas comenzaban sus trabajos.
Sin perder mucho tiempo se dirigió al castillo después de todo debía entregar dos cosas una de ellas era la carta, tal vez esta era la mas importante y la otra era entregar aquellas telas a la sobrina del rey. Su rostro se tomo un ligero color carmesí al recordar a la chica, se sentía extraño cuando la recordaba, había algo en esa chica pero él no sabia que era…
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Mimi aun no se acostumbraba mucho a la idea de estar en casa ajena, todo allí era diferente no tenia ni el menor parecido con el Reino del Oeste. A pesar de tener algunos días en ese lugar y de haber conocido parte del Reino, todo era diferente. A pesar de vivir con un general se sentía como una reina. Las costumbres de aquel reino no le eran familiares aunque tuvo que aprender rápido, ya había perdido la cuenta de cuantos días llevaba allí y aun mas en compañía del joven Ishida.
Mientras la chica se paseaba por las calles del reino se percato de que la alegría que había observado en las personas estaba disminuyendo. Había escuchado noticias sobre el nuevo ejército del Reino del Norte, todo indicaba que una nueva y peor guerra se acercaba, tanto el Reino del Este como el Oeste habían gastado gran parte de sus "inversiones" entre la guerra de estas dos y se encontraban en total desventaja contra el nuevo Reino salido de la nada.
La castaña continuaba caminando desde hace algunos momentos estaba siendo acompañada por el joven Ishida habían decidido salir a pasear un momento por el Reino, el general era quien lo había propuesto, Mimi sospecho que el reino ya estaba solicitando los servicios del joven, no había duda.
El ojiazul caminaba al lado de la chica parecía distraído como todas las personas estaba pensando en la nueva guerra que se avecinaba, el ejercito del Este había tenido considerables bajas esto le inquietaba de sobre manera, había propuesto aquella caminata por el Reino intentando despejar su mente consiguiendo ningún resultado.
No supo bien en que momento pero se percato de que la chica ya no estaba a su lado, giro su vista hacia atrás donde la vio, allí parada parecía haber visto un fantasma el chico volteo en la dirección a donde apuntaba la vista de ella y se percato de que trataba. Un chico de cabellos negros que venia acompañado de un caballo y ropas extremadamente gruesas estaba caminando en dirección al castillo.
-¿Ichijouji? –murmuro el joven aun teniendo dudas pero un grito las disipo todas.
-¡Ken! –había gritado Mimi a todo lo que le daban sus pulmones, un grito era mas que suficiente, el nombrado se detuvo conocía esa voz. ¡Rayos! no pensaba encontrársela tan pronto…
El pelinegro giro su cuerpo en dirección a la voz observando como se acercaba la joven ninja. Sin previo aviso un grupo de soldados se atravesó entre ambos se trataba se varios jóvenes que se dirigían a las fronteras del Reino probablemente los habían enviado con el deber de proteger, seria tonto intentar un ataque contra el nuevo Reino que se sumaba a la lucha.
Ichijouji sin saber bien que podría hacer, si quedarse allí esperando o ir rápidamente al castillo… Obviamente no deseaba quedarse ahí como un tonto para luego recibir una de las particulares interrogaciones de Mimi. No, Primero iría al castillo.
-¡Espera aquí! –fue lo único que grito Ken antes de partir en dirección al castillo sobre su caballo. El camino no se le hizo largo, lo que de verdad le fue interminable fueron aquellos soldados que custodiaban las puertas del castillo. En un momento de distracción Ken aprovecho para entrar al castillo, dio algunas vueltas por los pasillos, después de todo no le vendría nada mal dar un paseo por el castillo. Se había perdido de nuevo, lo que menos deseaba en ese momento era encontrarse con los hermosos y amaestrados animales que vigilaban los pasillos.
Sin saber como, había logrado dar con el lugar que buscaba, distrajo a los centinelas de las puertas y entro en la lujosa habitación, tal y como lo pensaba el viejo rey se encontraba postrado en su trono, su mirada lucia mas cansada y pesada parecía no haber dormido desde hace algunos días el pelinegro apenas entro se arrodillo, llamando así la atención de todos los presentes incluyendo la de unos jóvenes uniformados que se encontraban frente al rey.
-Traigo una carta urgente del Reino del Oeste –fue todo lo que dijo el joven acercándose al rey, uno de los uniformados detuvo el avance del joven Ichijouji, este sin inmutarse coloco la carta frente a èl.
-Pásame la carta –ordeno el rey, el joven frente a Ken tomo la carta y se la dio al rey, este por su parte llamo a un chico que se encontraba en una de las esquinas de la habitación, el chico tomo la carta la abrió y comenzó a leerla, el tono de voz del joven era bajo, estaba leyendo la carta solo para el rey.
Unos soldados rodearon al joven Ichijouji al fin y al cabo había entrado sin permiso, tenían sus armas en alto listos para atacar, el pelinegro mantenía la calma estaba consiente del contenido de la carta, y también sabia que ambos reinos necesitaban esa unión, sino era probable que el Reino del Norte ganara aquella guerra y se apoderaría de ambos reinos algo que nadie quería.
Cuando el joven termino de leer la carta, el rey observo al joven pelinegro.
-Tenientes pueden retirarse me gustaría hablar un tiempo a solas con el chico…
Todos abandonaron la habitación excepto el pelinegro, fijo su mirada en el rey, se le notaba realmente agotado. El rey le hizo una señal al pelinegro, y este se acerco.
-Dile a tu rey que acepto la tregua. Creo que no será necesario enviar una carta o si?...
-En realidad, su alteza pienso que lo mejor seria enviar una carta a mi reino.
-Esta bien… Podrías escribirla tú… -pregunto el anciano, Ken simplemente asintió.
Ken se acomodo en una de las sillas que habían traído los centinelas, luego estos le facilitaron un papel y una pluma.
El contenido de la carta no era largo pero algo había sorprendido a Ken, el rey del Este invitaba a las tropas del vecino reino para el festival y fiesta que iba a ser dentro de algunos días, Ken aun seguía sin comprenderlo del todo. Estaban en guerra, con gran desventaja, probablemente la comida escasearía, ambos reinos tenían poco ejercito y aun así el anciano rey deseaba celebrar…. ¿Celebrar que?
-Enviare a alguien para que entregue la carta, tu puedes quedarte aquí si lo deseas… -fueron las palabras que el rey pronuncio antes de que sacaran a Ken de la habitación, alguien lo esperaba afuera era una de las mujeres encargada de la servidumbre del palacio. Condujo al joven Ken hasta una de las habitaciones del castillo. Al abrir la puerta de la habitación el pelinegro se asombro por la habitación que la había sido asignada, las gigantes ventanas se encontraba justamente al frente de la puerta de entrada, la cama entre las ventanas y la puerta. En ese momento no hacia falta algún tipo de iluminación, las ventanas eran suficientes para dejar ciego a cualquiera. Ken dejo toda su mercancía en la habitación y luego se dispuso a salir… Debía hablar con Mimi luego se encargaría de las telas.
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-No lo puedo creer… así que tú dormirás en el castillo… -comento una ingenua Mimi observando con recelo a Ichijouji
-Mimi… sabes que no vine aquí solo por eso.
La expresión en la cara de la chica cambio drásticamente, los dos ninjas estaban en campo abierto una serie de plantaciones se extendían a sus lados luego un bosque con pequeños árboles se hallaba frente a los dos. Cuando Mimi apenas se topo con Ken pidió disculpas al general Ishida y se marcho con el pelinegro para aquel lugar. Allí ambos podrían hablar tranquilamente sin que las personas los acusaran de estar armando una rebelión en contra del reino Este por pertenecer ellos al otro Reino
-Que sabes de Tai
-Antes me gustaría saber si recuerdas bien las palabras del jefe cuando dijo, muy claramente, que "yo" era la única persona que podría ir de un reino a otro…
-Dime que sabes de Taichi y luego veremos que le decimos al jefe… -se defendió la castaña. El pelinegro no opuso resistencia seria realmente tonto oponérsele a Mimi Tachikawa.
-Antes de partir el jefe me envió para buscar al general Taichi Yagami en el bosque y llevarlo el Reino del Oeste. Y eso fue lo que hice… si tal vez tu te hubieras quedado allí habrías podido verlo…. Pero como siempre me buscas problemas a mí. –le reclamo el pelinegro aunque la castaña parecía no escucharle…
-¿Como se encuentra?
-Descuida ya esta bien… Ahora dime que le diré al jefe.
-Eso tendrás que pensarlo tú… ahora, según lo que me acabas de decir. El Reino del Este y el nuestro formaran una tregua?
-Si
-Eso quiere decir…
-El rey del Este ha invitado a parte del ejército del Oeste para el festival que se celebrara aquí dentro de una semana…
-Entonces…
-Tai y los demás generales del Reino vendrán –completo Ken, la chica simplemente guardo silencio
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Después de aquella conversación con Mimi, Ken se devolvió al palacio se la hacia tarde y después de todo no podía desaprovechar la oportunidad de dormir en una de las lujosas habitaciones del castillo, después de todo siempre estaba viajando y en los lugares donde dormía no eran del todo cómodos ni tampoco agradables.
Entro al castillo sin problemas, tenia el permiso del rey. Por fin dormiría en un lugar decente y lo mejor de todo era que no se había vuelto a perder, dentro de los pasillos difícilmente iluminados por el fuego, a pesar de que la luna había comenzado con su reinado de luz no era suficiente para aquella magnifica edificación.
El pelinegro se dirigía hacia su habitación pero algo lo detuvo.
-¿Miyako? –murmuro extrañado viendo a la joven frente a él, en ese momento recordó algo muy importante, en que momento había establecido una relación tan intima con ella en la que la podía llamar por su nombre. Inmediatamente se corrigió arrodillándose frente a ella, la chica recrimino su acción llevándoselo dentro de la habitación que estaba frente a ella, la habitación qua había sido asignada para él. La sobrina del rey empujo a Ken dentro de la habitación que este termino sentado en el suelo.
El pelinegro estaba atónito no sabia porque razón la chica había reaccionado de aquella manera. La chica se asomo por la puerta y luego se regreso en la dirección en donde estaba el pelinegro. Él necesitaba una explicación. La chica sonrió por el rostro del joven.
-Lo siento –dijo ella-. Se supone que debo estar en mi habitación y no merodeando por los pasillos… No tienes idea de lo que mi tío me haría si los guardias me encuentran.
Ken simplemente le sonrió y se relajo pensó que la chica estaba realmente enojada con el pero el rostro de ella indicaba lo contrario mas bien parecía cómoda, tranquila; ella suspiro. El pelinegro recordó algo se levanto de golpe siendo vigilado por la mirada de la chica.
El pelinegro regreso emocionado cargaba una fina tela entre sus manos, la extendió frente él para que ella la tomara.
-¿Esta es la tela? –pregunto anonadada la chica al sentir la tela entre sus manos, era realmente linda aquella tela, era de un color verde claro y extremadamente suave. Ken asintió ante la pregunta de la chica. –Vaya es realmente hermosa –comento la chica, luego levanto su mirada para ver al pelinegro directamente. Se abalanzo sobre el chico con tanta fuerza que el joven no pudo mantenerse en pie cayendo ambos al suelo.
-Lo siento –se disculpo la muchacha, levantándose con una sonrisa en sus labios. –Esta invitado –dijo sin rodeos. El chico no entendía de que hablaba ella.-Dentro de algunos días habrá una fiesta en el castillo, quiero que vengas. ¿Sabes bailar no? –pregunto ella.
Ken aun no procesaba toda la información, había sido invitado a quedarse en el palacio, no se había perdido entre los pasillos, Mimi solo lo metió en un conflicto (con su jefe), y ahora la sobrina del rey lo invitaba para que asistiera a una fiesta. Definitivamente ese día se había despertado con el pie correcto.
-Y bien que dices –pregunto con interés la joven deseaba saber la respuesta, pero este parecía estar pensando en otras cosas… la chica no le quitaba la mirada de encima, Ken comenzaba a sentirse incomodo
-Está bien –respondió Ken tomando una bocanada de aire al fin la chica había dejado de mirarlo de esa manera tan acusadora.
Antes de que ella se marchara le había dedicado un mirada y una sonrisa en señal de despedida, ambos sabían que se verían pronto, contaban con ello.
El sol anunciaba el comienzo de un nuevo, y valla que iba a ser un nuevo día, habían pasado 6 días desde que los reyes de ambos reinos, el Este y Oeste habían anunciado su alianza ambos pueblos estaban sorprendidos y ni que decir con el Reino del Norte, aquella noticia había tomado de sorpresa a todos.
El Reino del Este se preparaba para recibir a los generales y parte del ejercito enviado por el Reino del Oeste todo aquello era una interminable caravana que surcaba los valles y llanuras, muchos opinaban que el Reino del Oeste quedaría totalmente desprotegido y la merced del nuevo enemigo, pero nadie se opondría al rey.
El general Taichi Yagami era el encargado de dirigir las tropas del reino del Oeste, ahora el joven ejercía el mayor cargo en el ejército. Por lo tanto el debía presentarse ante rey del Este, algo que favorecía a Taichi.
La caravana ya se encontraba dentro de los límites del Reino del Este, la mayoría de las personas se habían quedado asombradas aquellos campos verdes llenos y abundantes una pequeña naciente saliendo del bosque, todo aquello indicaba una prosperidad para el reino todo lo contraria al Reino del Oeste. Unos imponentes muros se alzaban como gigantes de leyenda. Con un paso lento pero firme llegaron frente las puertas, estas se abrieron con lentitud, eran demasiado pesadas. El primero en entrar fue el general Yagami, este se sorprendió al pasar los gruesos muros, allí esperándolos a todos estaba parte del ejercito del Este frente a Yagami estaba otro chico de cabellos rubios también montando un caballo de color claro, el chico se acerco a Taichi.
-Bienvenidos al Reino del Este. El rey lo espera general Yagami… -pronuncio detallando al chico frente a él. Taichi se limito a observar todo y a todas las personas a su alrededor, luego con una señal uno de los generales se acerco hasta él. El castaño le dijo algo…
-Vamos… -fue todo lo que dijo antes de irse tras el chico ojiazul. (N/A: Sí es él… Matt. solo por si las dudas…)
Los ojos del castaño miraban a su alrededor aunque no lo quería admitir estaba sorprendido por el recibimiento, primero una tropa esperándolos en la entrada luego custodiando el camino que llevaba hasta el castillo, tanto del lado izquierdo como del derecho se encontraban varios soldados cada uno con su vista en alto y firmes. Tal vez el Reino del Este quería causar una buena impresión o simplemente quería asegurarse de que nadie los tomara por sorpresa, es decir, no confiaban mucho en la nueva "alianza".
Los caballos avanzaban rápidamente por el sendero que llevaba al castillo imperial. Taichi noto que aquel camino en realidad era una especia de laberinto, el sendero por el que iban se dividía en muchos mas y a pesar de parecer que iban en dirección contraria a donde se encontraba el castillo, el castaño estaba seguro que iban en la dirección correcta, una pequeña estrategia para ahuyentar a los ladrones. El rubio parecía correr con mayor velocidad en su caballo de color marrón claro, casi crema, aunque el otro general no se dejaría intimidar, estaba conciente que su caballo no estaba preparado para subir montañas después de todo el Reino del Oeste estaba rodeado de estepas. Logro alcanzar al otro joven, este giro su rostro para ver al castaño, de un movimiento hizo que su caballo acelerara el trote, Taichi lo tomo como un juego y también apresuro a su caballo. Ambos jóvenes comenzaron a competir por ver quien era el caballo mas veloz, lógicamente el general Yamato salio vencedor.
Taichi dejo su caballo a manos de un desconocido, no le gustaba eso pero tampoco podría llevarse a su fiel compañero dentro del palacio, Ishida le acompaño hasta la entrada allí se despidió de él diciendo: Yo aguardare aquí afuera, me volverás a ver cuando finalices la reunión con "su alteza". El castaño entro no muy confiado, dos guardias lo guiaron por el castillo hasta el salón del rey, como de esperarse, el rey estaba en su trono, su semblante era tranquilo, algo común, en aquel rey. Taichi fue escoltado hasta quedar frente al rey, luego le obligaron a arrodillarse, los soldados que le escoltaban lo dejaron a solas con el rey.
-Puedes levantarte –agrego el rey, Taichi hizo lo que le pidió.
-Su alteza vengo de parte del Reino del Oeste, mi rey ha enviado…
-Olvida el prologo… -interrumpió el rey un poco aburrido y cansado. –Se muy bien a que viniste y cuantas personas conforman tu ejercito; lo que no entiendo es como un joven como tu tiene a su cargo la mitad de un reino.
-Tiene razón al decir que soy un joven, pero al decirme que tengo la mitad de un reino a mi mando. Con el debido respeto su alteza –agrego ante la mirada extrañada del viejo rey.
-¿Quién eres? –pregunto con cierto brillo en sus ojos –He escuchado rumores de que fuiste tu quien se enfrento con mi mejor general "Filius Dei" y lo venciste…
-En realidad señor… fui yo quien termino siendo prisionera de su general. Me escape mientras todos estaban entretenidos en una batalla contra el Reino del Norte. No me gustaría pensar de esta manera pero creo que de cierta forma tengo parte de mi vida en sus manos… -termino de decir el general, el rey frente a él se limito a observarlo, el silencio se hizo presente. Por un momento al castaño le pareció ver una sombra cerca del rey, no se alarmo, tal vez lo había imaginado.
-Tu y tus amigos están invitadas a la fiesta que se hará mañana en este castillo. Ahora solo espero que disfrutes del festival que están celebrando allá afuera –comento el rey dando por terminada la conversación, pero Taichi quería algo más.
-Disculpe su alteza pero me gustaría pedirle un favor… -agrego el castaño el rey permaneció expectante.
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El general Taichi abandono las lujosas instalaciones del rey del Este siendo escoltado por los mismos soldados, a la entrada del castillo. La luz del sol cegó por varios minutos la vista del castaño, cuando logro adaptarse a la claridad en el exterior del castillo pudo observar una figura que a juzgar por su manera de estar parado, parecía estarlo esperando. No se trataba de aquel joven rubio que lo había llevado hasta el castillo, lo supo porque la silueta frente a él era mas baja de estatura.
-¿Mimi? – se aventuro el moreno, la figura no respondió, simplemente salio corriendo e su dirección, cuando estuvo mas cerca al chico no le quedo duda de que se trataba de la castaña.
Ambos jóvenes se abrazaron, estaban alegres de poder verse una vez más, pero a la vez tristes, probablemente las cosas serian igual que antes… Ninguno de los dos quería eso, aunque ahora que importancia tenia…
-Te extrañe - comenzó de manera sincera la castaña después de todo era verdad. Lo había extrañado
-Yo también –contesto, dejando escapar un suspiro, ya no estaba preocupado por ella, sabia que estaba bien y eso de cierta manera lo relajaba.
-Me pregunto… -dijo casi en un susurro- Cuando será el día en que mi caballero no tendrá que marcharse para arriesgar su vida y podrá permanecer a mi lado. –El chico se sorprendió ante lo dicho, no esperaba aquello. No había duda de que la chica algunas veces sabia la impresión de ser una niña traviesa caprichosa y algunas veces consentida, pero en ningún momento había dejado de ser sincera y ESO era lo que le gustaba al joven Yagami, entre ellos no existían los secretos… ó así era al principio.
-Mimi… Prometo que ese día llegara pronto.
Los dos jóvenes seguían abrazados, su cariño no había cambiado pero si sus pensamientos entre ellos.
-Ejem! –hizo notar su presencia el joven rubio. El ojiazul no entendía aquella escena, en un principio le dio la impresión de que el joven Yagami era un orgulloso pero cuando vio como abrazaba a su "amiga" porque eso eran ellos, se quedo con la boca abierta. ¿Acaso se conocen? pregunto para sus adentros, pero que tonto por supuesto que si, después de todo pertenecían al mismo Reino… . Los dos chicos que estaban abrazados se separaron poco a poco, debían admitir que habían olvidado la presencia del otro joven. Cuando terminaron de separarse Tai observo al otro joven¿Quien era el para interrumpirlos de esa manera? se había cuestionado Yagami.
Las miradas que ambos jóvenes se lanzaron no eran para nada amigables, entre ambos chicos había cierto… desagrado. Mimi noto las miradas entre ambos jóvenes, el ambiente comenzaba a colocarse tenso, aquello no era una buena señal. Hizo las presentaciones.
-Tai el es un amigo fue quien me ayudo a llegar al reino… Su nombre es Ishida Yamato, aunque le gustan que le digan Matt
-Dime Ishida –agrego Matt mientras extendía su mano.
- A mi dime Yagami… -respondió el castaño, Mimi simplemente agacho la mirada… Esos dos parecían unos niños…
Los dos generales se observaban aun con cierto resentimiento, Mimi había intentado calmar a ambos pero no lo había logrado, después de todo la situación se le hacia divertida, dos jóvenes generales actuando como niños de 7 años.
Habían decidido irse del castillo y solo tenían dos caballos¿Con quien iría Mimi, ambos jóvenes se observaron luego el castaño hablo…
-Bien, Mimi decide con quien iras…
Genial! Ahora la decisión dependía de ella…Bien tenia dos opciones… Conocía a Taichi desde hace tiempo, y a pesar de todo estaban comprometidos, ella no podía abandonarlo, pero… Aquí venia la excepción, Ishida Yamato, el chico que la había ayudado y que sin pensarlo se había tornado "especial" para ella.
-¿Y bien? –pregunto con cierto interés el ojiazul… Mimi lo observo y guardo silencio por unos momentos, la morena y el rubio se observaban no parecían cansarse de hacerlo. Taichi noto las miradas de ambos¡Vamos no estoy ciego, el castaño comenzó a desesperarse, sentía como una especie de celos Quien se creía aquel chico para mirar a Mimi de esa manera y enfrente de él
Después de todo Tai aun quería a Mimi aunque sea como una hermana y no le gustaba la manera en que esos dos se miraban…
Fin del capitulo 6
ACLARACIONES: 1.Creo que no lo había mencionado pero Matt también es un general
2. Bueno imagínense después de tan largo viaje y expuesto al sol Tai tuvo que agarrar más colorcito…XD
Bueno creo que ya se me esta siendo costumbre el retardar los episodios…. Pero heme aquí! Con un nuevo capitulo… no hubo mucha interacción entre las parejas pero miren el lado amable, ya están todos los personajes en el mismo lugar y listos para la carrera jejeje!
Y ahora ¿Con quien quieren que se vaya Mimi? Jeje….
Espero sus reviews…. Y una vez mas
DISCULPEN LA TARDANZA…
Afrodita-15: Hola, gracias por tu review y disculpa la tardanza jeje, creo que ya se me esta haciendo habito, pero bueno. Aquí esta el otro capitulo espero que te haya gustado aunque no hubo mucha interacción entre las parejas creo que ahora se viene algo interesante… Espero ver tu review para que me digas que tal te pareció el capitulo y la pregunta del momento ¿con quien se ira Mimi? ok? Bye. Y gracias!
battusai-clau: Hola chica! Como tas? Disculpa la tardanza, pero bueno aquí estoy con este nuevo capitulo….espero que me dejes un review para decirme que tal te pareció… Ya nos vemos pronto….. y espero que también actualices tu fic! XD JEJE! Cuídate!
Mika Seido: Oye! Gracias por leer mi fic de veras eso me pone muy alegre y aun mas feliz el saber que te gusta…. Estoy Feliz yo también! Espero que lo sigas leyendo y bueno espero tu review para ver que te parece este capitulo jeje y sobre todo la pregunta. Con quien se ira Mimi tu con quien crees que se ira?
Blackfalcon.x: Hey! Como te va? Espero que bien, sobre todo con tu fic, y dejame felicitarte en lo personal también me gusta mucho tu fic. Y gracias por leer el mío de veras me alegra mucho que lo hagas y espero que sigas leyéndolo… espero tu review para ver que te parece este capitulo… Cualquier comentario o queja que quieras hacer hazla soy toda oídos jeje. Ok Bye Cuídate
KibumiWong: Hola chica! Gracias por leer mi fic de veras no esperaba que te asomaras por aquí y la verdad me sorprendió mucho verte y sobre todo el que te guste la pareja Mimato. Voy a esforzarme por hacer un buen capitulo entre esos dos aunque no te aseguro nada jejeje! Gracias por el review de vera me alegra mucho verte por aquí y espero que sigas leyendo mi fic. Por cierto el tuyo va muy bien!... Bueno Nos vemos! Ah, una pregunta… ¿Con quien se ira Mimi¿Matt o Tai? (bueno creo que ya se tu respuesta jeje)
Saturno: Gracias por tu review. Bueno aquí esta el encuentro entre Ken y Yolei, fue corto pero espero que te haya gustado… y espero que de verdad descifres todas tus dudas leyendo jejeje…… Aunque descuida que ahora se viene la fiesta aun no se bien que haré pero abra un poco de cada pareja…. Espero tu review para ver que te parece este capitulo. OK? Sayonara y Cuídate!
Shining-girl: Así que no esperabas a Ken teniendo ese trabajo… jeje pues déjame decirte que es bastante extraño pero así fue como se me ocurrió…. Gracias por tu review y espero que sigas leyendo mi fic, y tambien espero tu review para ver que te parecio esta capitulo… Tambien para que respondas ala pregunta del momento ¿Con quien se ira Mimi¿Tai o Matt?