Corazones sincronizados.

By Hisaki Raiden.

Quiero aclarar que los personajes de Digimon 02 no me pertenecen y que no persigo ningún fin lucrativo al realizar este fan fic.

Lágrimas.

"¿Por qué…?" "¿…Qué es esto?" "¿Por qué estoy llorando…?"–Se cuestionaba Ken mirando sus lágrimas en sus manos, pues se pasaba las manos por sus ojos tratando de secar aquel líquido salado, pero por más que lo intentaba no podía detenerlo. Miró a Daisuke a unos cuantos pasos de él y el desconsuelo del chico castaño lo hacia deshacerse en lágrimas también a él, era como un reflejo. Sintió deseos de consolar su dolor, ¿Quería consolarlo…? Talvez… para detener así su propio llanto… pero no podía moverse de donde estaba, era como si se hubiera edificado un muro entre ellos, la cual aunque no la podía ver, no le permitía acercarse… en realidad era una ansiedad terrible, por no saber qué hacer o que decir para reparar aquel daño, esa herida, de la que salían lágrimas… así como de una herida corporal salía sangre, de una herida en el corazón salían lágrimas, la sangre del alma… pero ¿Acaso podría reparar ese daño? Se sentía impotente, a pesar de que había sido él, el que le había causado ese daño no tenía idea alguna de cómo curarlo… Se dejó caer, de rodillas frustrado…

–Daisuke…– Balbuceó –Daisuke… ¡Daisuke!– Lo llamó como si de ello dependiera su vida.

El nombrado lo miró otra vez con sus ojos que brillaban como dos cristales frágiles y observó que el peliazul, estaba golpeando el piso con una mano. Se veía tan desesperado como él.

–¿Por qué nos mentiste…? ¿Por qué me engañaste?

–Tuve que hacerlo…– Contestó casi inaudible –Si no lo hacia, ella mataría a Wormmon…

–¿Por que no nos dijiste nada? ¿Ibas a entregarnos a ella?

–No…– Contestó Ken aturdido por aquel reproche.

–¿El que te querías unir a nosotros fue solo una vil mentira? –Dejó caer Daisuke mirándolo con verdadero rencor.

–No…

–¡¿Por qué no lo aceptas! –Replicó furioso y con tono lastimero– Si no fuera por todo este teatro ¡Nunca te habrías unido a nosotros!

–¡NO!

Negó Ken consternado, pero sin saber como desmentir aquellos reproches de Motomiya. ¿Era cierto que nunca se habría unido a ellos? No lo sabía, lo único que recordaba era que había intentado mantenerse lejos de ellos, porque no podía confiar en sí mismo. No podía confiar en que no volvería a lastimar a alguien y lo peor de todo era que su más grande terror se había vuelto realidad. Lo había herido a ÉL, a pesar de que había descubierto cuan importante era para sí mismo… ¿Pero qué era todo eso? ¿Qué eran esos sentimientos? ¿Era amistad? ¿Sólo eso era? Buscaba inútilmente una forma de decirle a Daisuke lo que sentía, pero no sabía como y eso le llenaba de una gran desesperación, su amistad, o fuera lo que fuera ese vinculo entre ellos… se estaba haciendo trizas, y el no encontraba ninguna forma de evitar que se acabara de destruir…

Takeru, Miyako y los demás escuchaban esa conversación sin dejar de percatar lo mucho que lastimaba a ambos.

De pronto el techo estalló y todos gritaron. Arukenimon se cubrió con sus brazos, el polvo cegó por un momento también a los niños.

–¡Aullido de lobo!

Takeru reaccionó.

–¡Garurumon!

El aullido apenas y afectó al Devidramon que ya iba sobre los niños, los cuales con lo distraídos que estaban no percataron.

Garurumon aterrizó entre Arukenimon y ellos.

–¿Se encuentran bien?

–Ah… casi– Contestó Hikari.

Arukenimon se burló.

–¿Un Garurumon? Tú no podrás contra mis poderosos y oscuros Devidramon.

–Claro que no, pero si podré detenerte– El lobo de rayas azules dio un magnífico salto hacia la superficie alta sobre de aquel pequeño cuarto, logrando derribarlo, el techo se derrumbó sobre dos de los Devidramones. Los niños cerraron los ojos, los escombros estaban por darles a ellos también, pero nada pasó, cuando Iori alzó la vista miró a Kabuterimon cubrirlos.

–¡Es el Kabuterimon de Izzy!– Exclamó el pequeño.

–Deprisa chicos suban sobre mí– Exclamó el enorme insecto y los chicos así lo hicieron.

Takeru levantó a Daisuke y casi lo obligó a abordar las espaldas de Kabuterimon, al chico no parecía importarle huir de ahí, él sólo quería terminar la plática con Ken. Hikari se atrevió a alentar a Ken a ir con ellos, Takeru e Iori habrían puesto miles de objeciones, pero no había tiempo para ello. Stingmon ayudó a Agumon y a Garurumon a destruir aquella rara mansión dejando atrapados bajó sus escombros a Arukenimon y a los terribles Devidramon.

–¿Cómo sabían que estábamos ahí?– Preguntó Hikari a Kabuterimon.

–Izzy los localizó en el mapa del Digimundo. Taichi y los demás estaban preocupados por ustedes.

Ken iba al lado de Hikari, silencioso, hubiera querido desaparecer de ahí de haber sido posible. Mientras que Daisuke lo miraba fijamente, recordando lo que le había dicho.

–Los llevaré a un punto donde puedan abandonar al Digimundo– Dijo Kabuterimon.

–¿Qué pasará con Agumon y Garurumon?

–Ellos estarán bien.

–Si– Asintieron todos, menos Ken y Daisuke.

Cuando llegaron a un lugar conocido, donde podían abrir una puerta. Kabuterimon los dejó y se fue.

–Gracias por todo Kabuterimon– Dijeron todos despidiéndolo al aire.

Ken miró a Stingmon en el aire y se volvió hacia los cinco. No sabía que decir, pero lo intentó…

–Yo… lo que pasó…

–Nos traicionaste…– Dijo Iori, observándolo con disgustó y Takeru también, pero nadie se atrevió a decir nada más, aparentemente no había más que discutir.

–Ken-kun…–Balbuceó Miyako mirándolo.

–¡No lo hizo a propósito!– Se escuchó la voz de Stingmon, quien se interpuso entre su amigo y los demás niños elegidos, transformándose en Wormmon– Arukenimon me atrapó y obligó a Ken a seguir sus órdenes. ¡La culpa es mía! ¡No culpen a Ken, él sólo quería salvarme…!– Suplicó desesperadamente.

–Wornmmon…– Murmuró Ken sorprendido.

–Diles lo que pasó, Ken– Le dijo Wormmon, volteándose hacia él.

Veemon intervino.

–¡Es cierto!– Se volteó hacia ellos poniéndose de lado de Wormmon –Wormmon nos lo contó todo. Y yo le creo– Confirmó, pero ninguno de los demás Digimon dijo algo.

–Tal vez sea cierto– Habló Iori de nuevo, antes que todos, pero mirándolos (a Ken y a Wormmon) con reproche –Pero esto no hubiera pasado de habérnoslo dicho.

Daisuke se sorprendió mirando al pequeño de cabellos castaños.

–Estuvimos muy cerca, Ken Ichijouyi– Comenzó Takeru –Hoy Arukenimon estuvo apunto de matarnos.

–Eso…, lo sé…– Dijo lentamente frunciendo el ceño y cabizbajo, asumiendo la culpa.

–¡Pero Arukenimon lo amenazó con hablar!– Replicó el compañero de Ken.

–Pues guardar silencio, no mejoró la situación ¿oh, si?– Comentó Takeru con algo de ironía– Supongo que te prometió liberar a Wormmon a cambio de nosotros…

Ken lo miró.

–¿Qué te hizo pensar que Arukenimon cumpliría con la otra parte del trato?–Recriminó Takeru Takaishi con tono despectivo –¡No puedo creer que cometieras esa tontería, poniendo de por medio la vida de todos nosotros y tu propia vida!

–Si lo que quieres es comprensión, los comprendo– Dijo Iori con tono grave –Pero no los perdono– Concluyó y se dio vuelta.

Ken miró a Miyako y a Hikari quienes sólo bajaron la vista sin decir nada. Por consiguiente el también la bajó, no se atrevió a mirar a Daisuke, desde un principio había sabido que todo terminaría así, sabia que no lo perdonarían cuando se enteraran de la farsa, ya estaba resignado.

–No volveré a atravesarme en su camino…– Estaba por irse cuando…

–Espera.

Takeru, Miyako y Hikari miraron a Daisuke, quien no había vuelto a decir nada desde hacía rato.

–Daisuke…– Se alarmó Takeru.

El aludido miró al peliazul con el rostro compasivo, y el rencor que antes estuviera reflejado en sus ojos había desaparecido. Ken lo miró atónito.

–Quiero decirte algo…– Agregó a sus palabras –Antes de que te vayas.

Miyako miró fijamente a su amigo recordando lo dolido que estaba antes.

–¡¿Todavía quieres hablar con él!– Reclamó Takeru molesto, sin molestarse en ocultarlo –¡Nos traicionó! ¡No hay más que hablar!

–¡Lo hizo por Wormmon!– Le gritó Daisuke, llamando no solo la atención de Takeru, sino también de Miyako, Hikari y de Iori que a pesar de lo lejos que estaba escuchó –¿Qué pasa con todos ustedes? Ichijouyi cometió un error– Bajó la vista con dolor –Es verdad, pero… yo también lo hubiera hecho todo por un amigo– Dijo el chico de los emblemas del valor y de la amistad.

Iori miró a Daisuke y bajó la vista, Armadillomon lo contempló. Miyako y Hikari estaban sorprendidas, no había duda alguna, Daisuke era el representante de la amistad.

Daisuke contempló a Miyako un instante y luego desvió su vista y caminó hacia el lago, que estaba cerca de ahí, Ken dudó, pero fue tras él y Wormmon y Veemon fueron tras ellos. Inoue casi pudo suponer lo que pasaría y eso le hizo sentirse triste.

–Vamonos– Dijo Miyako rompiendo el silencio.

Pero Takeru seguía parado en el mismo lugar desde que Motomiya le gritara los motivos de Ken para su traición.

–¿Takeru…?– Lo alcanzó Patamon y se fijó que el rubio no apartaba la mirada de Daisuke y de Ken Ichijouyi a lo lejos.

–¿Takeru?– Esta vez fue Hikari quien lo llamó.

–Adelántense– Balbuceó –Yo esperaré a Daisuke…– Concluyó con voz lánguida.

–Pero…– Vaciló Miyako.

Hikari lo comprendió, si es que Daisuke estaba dispuesto a hablar con Ken, Takeru quería ser el primero en conocer el desenlace de esa plática. Hikari sintió mucha pena por Takeru, ella mejor que nadie sabía que el rubio había sufrido mucho el día de hoy y que ahora mismo además de esperar a Daisuke quería estar solo un momento, por lo que la Yagami puso una mano en el hombro de Miyako y sonriéndole un poco la convenció de que dejaran a Takeru sólo.

Iori se dio cuenta de que sólo Miyako y Hikari regresaban y que Takeru se había quedado ahí.

00000000000000ooooooooooooooooooooo00000000000000

Ya eran casi las 7:30 de la tarde. La oscuridad de la noche estaba presente en el Digimundo y tan solo dos chicos y dos Digimon caminaban al lado de las tranquilas aguas del lago, Ken trataba hasta de no respirar para no romper ese silencio, estaba deseando que esa caminata no acabara y no tuviera que enfrentar fuera lo que fuera que Daisuke tuviera que decirle; ya no quería molestarlo más, sentía que no merecía la compasión ni el perdón de nadie, pero aun así, Daisuke lo había defendido de nuevo, ante los demás…

"¿Por qué lo haces Daisuke? ¿Por qué?"– Pensó, preguntándole a sus espaldas, mientras lo miraba caminar delante de él.

–Veemon, Wormmon– Ken brincó al escuchar a Daisuke decir eso –¿Podrían esperarnos un momento?– Pidió Motomiya.

Tanto su compañero como el de Ken se detuvieron permitiendo que sus amigos continuaran solos. Al llegar a donde terminaba el lago, Daisuke se detuvo y Ken por consiguiente; quedando los dos frente a frente.

–Ichijouyi…

–Ya no me defiendas…– Le interrumpió Ken bajando la cara y sacudiendo su cabeza –Ya no quiero causarte más problemas. No voy a pedirte perdón porque no merezco que me perdones…

El otro se sorprendió ante sus palabras.

–Yo los traicioné, te atraicioné Daisuke…

–Pero estas arrepentido– Aclaró.

–…–Ken alzó su vista, mirando el rostro de Daisuke el cual le sonreía.

–No querías hacerlo… tus lágrimas me lo dijeron.

–Yo…– Se le hizo un nudo en la garganta.

–Llorabas por que estas arrepentido, ¿no?

–No…

–¿No?– Se desconcertó Dai.

–Lloraba por que te lastimé… no podía soportar verte llorar… a ti…– Soltó Ken casi de manera involuntaria, y cuando se dio cuenta de lo que había dicho calló de súbito y su rostro se puso totalmente rojo.

Daisuke lo contempló y lo miró con seriedad.

–¿Qué sientes por mi… Ichijouyi?

Ken abrió los ojos muy sorprendido y la voz se le fue. Todo el día había estado dando vueltas en esa misma pregunta y aun no conocía la respuesta…

–Por favor… Ichijouyi… contéstame…– Exigió Dai con tranquilidad y firmeza; mirándolo a los ojos.

–¿Qué… quieres… que te… diga…?– Titubeó Ken.

Dai bajó un poco la vista, apretó sus puños y como si hubiera decidido algo, lo volvió a ver, más firme que nunca.

–Ichijouyi… no,– Se corrigió –…Ken– El nombrado se sorprendió.

Daisuke continuó sin apartar sus castaños ojos de él…

–Tú me gustas mucho– Confesó, al fin.

Ken ahora si estaba más que sorprendido. Daisuke Motomiya, le acababa de confesar que él… le gustaba… ¿Cómo era eso posible…?

–¿Qué… dijiste?– Replicó con voz lánguida y completamente sorprendido, ¡no podía ser, aunque… ahora que lo pensaba, ya podía comprender su comportamiento para con él. ¿Por qué no había querido darse cuenta?… sus labios se movieron con dificultad y continuó: –¿Cómo? Pero eso es…

–¿Imposible?– Se adelantó Daisuke –No es imposible, Ken. Al principio no me di cuenta…– Dijo cerrando los ojos y con seriedad –¡Pero ahora estoy totalmente seguro!– Sonrió poniendo su mano en su pecho y abriendo sus ojos –Cuando ocurrió la digievolución D.N.A lo comprendí; nuestros corazones se unieron... ¡Se sincronizaron!– Abrió los ojos mirándolo intensamente, mientras que Ken lo miraba con perplejidad– Estoy seguro de que tu también sientes lo mismo ¡La prueba es la evolución D.N.A…! –Dijo con felicidad y extendió su mano para tomar la de Ken, pero el peliazul retrocedió. Este acto no se lo esperaba Daisuke y su rostro se desanimó.

–¿Ken?

–No, sé… de qué hablas– Balbuceó Ken pasmado –Todo eso que dices… no tiene sentido… es… absurdo.

Daisuke sintió miedo.

–¡No es absurdo…!– Replicó, pero Ken lo interrumpió.

–¡Te digo que no puede ser! ¡No puedes sentir eso por mi…!– Titubeó –¡Somos dos chicos…!– Le contestó con desasosiego.

Daisuke comenzó a sentir un nuevo dolor recorrer su pecho, pero este era más intenso que el que había sentido, cuando se enteró de la traición de Ken.

–¡Eso no importa!– Gritó.

–¡La digievolución D.N.A no prueba nada!– Gritó Ken aun más desesperado y cerrando sus ojos –¡Yo no siento, nada por ti!– Concluyó y echó a correr.

Los Digimon miraron la escena.

–¡Ken! –Gritó Wormmon yendo tras su compañero.

–¡No me importa que seas un chico, Ken! –Le gritó Daisuke con los ojos llenos de lágrimas –¡Yo te quiero!

–¡Daisuke!– Llegó Veemon al pie de él muy preocupado –¿Estas bien? ¿Qué fue lo que pasó?

–No estoy bien…– Balbuceó Dai con voz apenas audible –Ichijouyi… no me quiere– Se agachó abrazándose así mismo y luego mirando a su digicompañero lo tomó de los hombros –Ahora… sólo te tengo a ti Veemon– Murmuró con una sonrisa melancólica, mientras que sus ojos brillaban por las lágrimas.

–Eso no es cierto, Daisuke– Se apresuró a contestar Veemon preocupado por el estado de su amigo –Tienes a Hikari, a Iori, a Miyako… a Takeru y a los demás Digimon, todos somos tus amigos.

Daisuke sonrió de nuevo y abrazó a su amigo.

–Gracias… ya sé que los tengo a todos ustedes…– Hizo una pausa, sintiendo como sus lágrimas escurrían silenciosamente por sus mejillas, convirtiéndose en hielos con el frió de la tarde –…Y perdóname por decir esto– Reanudó –Pero, eso… ya no me basta.

00000000000000ooooooooooooooooooooo00000000000000

Más tarde… en Japón…

Ken Ichijouyi permanecía sentado frente al monitor de su computadora, estaba agachado; apoyando su antebrazo en el teclado. Recordó lo ocurrido y apoyó su frente en su brazo…

¡No me importa que seas un chico, Ken! ¡Yo te quiero!

–No puede ser Daisuke…– Murmuró casi para si mismo cerrando sus ojos –No puede ser– Reiteró Apretando sus parpados.

Wormmon estaba tras él, en el suelo y lo miró con tristeza.

"Ken… "

Los dos se quedaron quietos y en silencio en la habitación del niño genio mientras que en reloj casi marcaba las 9:00 de la noche.

CONTINUARÁ…

00000000000000ooooooooooooooooooooo00000000000000

Hasta aquí llegó el capítulo 8… ¡Que día! ¿No? uno que nunca olvidaran estos niños… antes de responder a sus reviews, solo les quiero pedir que ¡por favor no me vayan a matar!

Sus Reviews!

(Sara) No te creas Sara yo también sufrí cuando escribí el capítulo yo también quiero mucho a Ken-kun, pero la verdad tenía que salir a la luz. Ops! Perdón por lo de los exámenes, espero que hayas salido muy bien, Ken está pasando por un examen también, pero de lealtad. Y pues el Angust va a continuar por un rato, solo trataré de meter uno que otro detalle de humor para no sufrir tanto. Espero verte de nuevo por aquí. Gracias por el Review.

(Mish1) Hola! Que gusto leerte de nuevo. Y ni modo este capítulo también fue triste el solo título lo dice. Espero no me quieras matar por causarle tanto dolor a mis niños lindos. Gracias por leer. Te cuidas.

(Ruri-Sakuma) Hi! No sabes que alagada me siento de que Gracias al fic te comenzara a gustar en DaixKen, jejejeje eso significa que no soy tan mala en esto, tengo pensado hacer un TakexKen después de este, pero quien sabe si quede, en fic, Gracias por ser mi lectora asidua, un millón de gracias por el apoyo Ruri-chan y que bueno que no me quieras matar, pero seguro que en este si Xx. Pues Yo también lloré aquí, pero las cosas ya mejoraran, después… ahorita no sé n.nU. Y sobre los reviews, pues ya lo estoy superando de cualquier modo me gusta mucho escribir esto y con tu apoyo yo seguiré. Te cuidas!

(liliedel) Bua! No! como crees que lo disfrute, si me sentí muy mal después, de escribirlo, pero era necesario, bueno ¬¬ al menos alguien lo disfrutó. No te preocupes por Dai-kun, ya sabes que él es fuerte y si algo sale mal lo supera, por sabes que esa es la razón por la que me encanta este personaje. Y Ken, es muuuy drastico, pero ya hayará una forma de solucionar esto. Gracias por leer Nee-chan. Y espero que disfrutes este capítulo tambien.

Gracias por leer y luego nos vemos!

ATTE: Hisaki Raiden.

Sayonara!

12