Corazones sincronizados.

By Hisaki Raiden.

Quiero aclarar que los personajes de Digimon 02 no me pertenecen y que no persigo ningún fin lucrativo al realizar este fan fic.

NOTAS DE LA AUTORA: Hola a todas y a todos n.n.

Yami Hisaki: Oo… ¿Por qué dices "a todos"?

No sé… a la mejor hay algun chico por ahí que lo lea y no deja review… n.n

Yami Hisaki: ¬¬ SI, como NO… mejor sigue, con esto.

Leika: Oo…er… gracias por el apoyo… pero… ¿Te gustó el fic o que pex? Ojalá vuelvas. Te cuidas.

Mish: Menos mal, pensé que no había sido de tu agrado y pues a mi si me gustó mucho escribir a Take-kun besando a Dai… pero fui mala por que eso lo confundió mucho. Estaré feliz de leer tus reviews aunque tan solo pongas cinco palabras que me ayuden y me den ánimos para seguir. Te cuidas Mish.

Ruri-Sakuma: Hola, Ruri-chan, er… pues ya te había dicho que esto se convirtió en un triángulo jejejeje (Yami hisaki: ¬¬ estas frita) n.nU y sobre Ken aquí está y que oportuno que te esté gustando el TakexDai jajaja me declaro culpable y victima ya que a mi ya me está gustando tambien, pero inicié pensando en hacer un DaixKen así que tengo que controlarme (Yami Hisaki: ¬¬XX ya sabes lo que te espera) Y gracias por tu apoyo me fue bien en los exámenes. Y sobre SD (Sentimientos Destructivos) yo también ya extraño a Shindo-kun, espero poner el capí 6… el lunes 4 o el martes 5. Te cuidas amiga.

Youko Sakuma: Jajajajaja no sabía que te había caído tan mal el comportamiento de Takeru (Yami Hisaki: ¬¬ pues a mi SI, me gustó Youko y espero que Take-kun se quede con Dai-kun) ¡Cállate Yami! ¿Quieres que me linchen? Takeru si, quiere muchísimo a Daisuke estoy convencida de que lo ama, pero… snif, snif… quiero llorar… n.n pero bueno, gracias por tu opinión sincera XD XD XD y ya me debes dos reviews, el del 11 y el del 12 y si tiene un tiempecillo haber si checas mi fic de Beyblade, se llama "Buscándote". Te cuidas Youko y ojalá ya actualices tus fics, yo ya actualizo como tres veces este y tu aun no T.T. ¡Te cuidas! Y espero hablar pronto contigo.

Anoded: Hola anoned n.n... Ops! OPS! Ojalá no me quemes con tu Lanzy… yo también espero que Ken reacciones pronto T.T… soy muy joven para morir. (Yami Hisaki: ¬¬) Y que bueno que decidieras dejar review de nuevo… un lector más me hizo apurarme a actualizar esto n.n, no te preocupes yo sé lo que es tener la universidad sobre ti… pasé por eso apenas T,T. jajaja que bueno, yo no sé porque pero mis fics siempre terminan convirtiéndose en angustiantes triángulos, después ya ni yo sé como salir de ellos Jajaja… er, bueno n.nU mejor me callo o en verdad me quemas con tu Lanzy. Gracias gracias y ojalá me escribas otro review. ¡Te cuidas!

Ann Saotomo: Creo que en verdad ya voy a escribir mi testamento (Yami Hisaki: Oo… otro? Ya lo habías escrito, por tu Fanfic de Yugi oh, ¿no?) Bueno, espero resistirme a la tentación de convertir esto en un TakexDai… es que los dos se ven lindos… XD XD XD no, como crees defenderé el DaixKen todo irá bien, demo… Esto es un Angst, solo quiero recordar eso n.n. Gracias Ann y pues verá un poco más de TakexDai… lo siento, pero el chico es muuuuy persistente… ¬¬ como mi Yami, ella es la culpable de esos encuentros entre el castaño y el rubio (Yami Hisaki: n.n). ¡Te cuidas!

Gracias por sus review… y todo el TakexDai que lean por aquí es culpa de mi Yami que quiere que lo meta.

Yami Hisaki: No me voy a rendir… Take-kun se quedará con Daisuke ¬¬.

¬¬U… bueno, antes de empezar con el Capi, solo os recuerdo que esto es un ANGST… todos mis fics están invadidos de eso n.n, cualquier cosa que lean de mi es un Angst si no me creen aquí está este fic o el Yugi oh! "Flying Without Wings" o el de Beyblade… o

Yami Hisaki: ¡Ya párale con tu Comercialote y ve de una vez al fic!

Oo! De acuerdo de acuerdo, pero no me grites… que lo disfruten n.nU.

Capítulo 12: Dudas.

Eran las 10: 30 de la mañana.

Ken se encontraba acostado en su cama, encogido y sosteniendo su almohada en sus manos. Sus hermosos y lacios cabellos caían sobre su rostro, y sus cristalinos y rasgados ojos azules parecían extraviados, perdidos en un mar reflexiones, dudas, miedo… y dolor. Por más que lo intentaba no podía apartar de su cabeza lo ocurrido el viernes pero sobre todo, las palabras de Daisuke… Daisuke Motomiya…

---Ichijouyi… no,…Ken. Tú me gustas mucho---

Ken cerró los ojos y apretó sus parpados al igual que la almohada que tenía en sus manos.

–Ken ¿Estas bien?– Preguntó Wormmon al ver esa reacción, pues se encontraba al lado suyo.

–No te preocupes Wormmon... – Contestó con aparente indiferencia.

De nuevo esas palabras. ¿Por qué no podía apartarlas? ¿Por que no podía pensar en otra cosa?

---Al principio no me di cuenta… ¡Pero ahora estoy totalmente seguro! Cuando ocurrió la digievolución D.N.A lo comprendí; nuestros corazones se unieron... ¡Se sincronizaron!---

"¿Acaso fue eso…?"– Pensó Ken recordando haber experimentado la tristeza y la decepción de Daisuke con tan solo mirarlo en aquel momento.

---Estoy seguro de que tu también sientes lo mismo ¡La prueba es la evolución D.N.A…!---

"No… eso es absurdo…"– Meditó Ken, tornándose sus mejillas de rojo, al solo pensarlo.

---¡No me importa que seas un chico, Ken! ¡Yo te quiero!---

"No puedo sentir lo mismo por ti… Daisuke… yo, no… puedo…"– Murmuró con los ojos llenos de lágrimas.

–¡Yo te quiero!–

–¡No!– Renegó Ken alzándose repentinamente de la cama, con su rostro lleno de aversión y al borde del llanto. Wormmon lo miró sorprendido.

–De cualquier manera… yo no merezco ese tipo de aprecio ¡No lo merezco!– Dijo con desesperación.

–¿Ken? ¿De qué hablas?– Preguntó el Digimon preocupado, pues no entendía lo que Ken le decía.

El chico se sentó en la cama y ocultó su mirada de la cual comenzaban a brotar sus primeras lágrimas.

–Yo no he hecho nada… Wormmon…

–¿Nada…?– Repitió interrogante y confundido su compañero.

El peliazul de ojos cristalinos comenzó a temblar y apretando fuertemente la cobija de su cama con sus manos dijo:

–No he hecho nada para merecer el perdón de los niños elegidos… es más, sólo les causo problemas… aunque ya no sea El Emperador de los Digimon– Dijo en un murmullo y con tono austero –Lo mejor que puedo hacer es mantenerme lo más lejos posible de ellos, solo así ya no les causaré más problemas, ni… dolor– Dijo totalmente desahuciado mientras que sus ojos no dejaban de derramar lágrimas.

–Pero Ken…– Replicó Wormmon preocupado y confundido por la actitud de Ken y por su imparable llanto, su amigo parecían estar sufriendo mucho con cada palabra que decía. Y los días anteriores había estado igual.

–Eso iba a hacer… ¡Eso es lo que debo hacer!– Arremetió evitando cualquier comentario de Wormmon.

–¿Ken?– Se escuchó la voz de su mamá, tocando la puerta.

El chico, secó sus lagrimas lo mejor que pudo usando la cobija de su cama.

–Voy…– Dijo para parar los llamados de su mamá, cuando finalmente pudo secar su llanto, se levantó, bajó de la cama y antes de abrir la puerta se echó aire en su rostro con las manos.

–Si…– Dijo abriendo.

Su mamá miró su rostro y se alarmó.

–¿Qué pasa?– Se inquietó al verla así.

–¿Te encuentras bien hijo?

–Si…– Contestó lentamente y con una voz suave.

–¿Es verdad?

Ken inclinó la vista y la señora Ichijouyi lo interpretó como un No.

–¿Quieres hablar al respecto?

Ken guardó silencio y sus labios temblaron, aunque quisiera no podría hablarle a su mamá y decirle que estaba así por que un Chico, se le había declarado y que antes de eso por su culpa ese Chico casi moría, él y todos sus amigos en el Digimundo. Obviamente todo eso era demasiado complicado…

Ella sonrió levemente.

–Comprendo, es algo que no puedes decir, supongo que vas a pensarlo un poco más y después tú mismo encontraras la solución al problema… Está bien.

Las palabras de su mamá sorprendieron a Ken.

–Sabes que si necesitas ayuda o apoyo, tu papá y yo estaremos aquí cuando lo requieras, hijo.

–Mamá…–Dijo Ken con voz ahogada y abrazando a su mamá comenzó a llorar silenciosamente.

Ella se sorprendió, era la segunda vez, desde que reencontraran a Ken de haber estado extraviado por dos meses, que él la abrazaba buscando su apoyo y su cariño.

Wormmon miró esto con lágrimas en sus ojos, desde donde se había quedado inmóvil, Ken no le había contado su plática con Daisuke a orillas del lago, pero desde entonces estaba así de deprimido. De pronto comenzaba a llorar silenciosamente y mientras dormía decía palabras como: "No puede ser" "No puedo…" "Daisuke…" Lo único que Wormmon entendía es que su amigo sufría por algo que no había le había contado, pero ¿Qué era? ¿Qué tenía que ver Daisuke en ello?

–Lo siento…– Murmuró Ken, después de un rato, alejándose de su mamá y algo apenado por haber llorado tanto.

Ella le sonrió.

–No te preocupes hijo, todo está bien.

Ken sonrió secando sus últimas lágrimas y se percató de que su mamá llevaba una bolsa.

Ella se dio cuenta de lo que él miraba.

–Iba a ir de compras, hay algunas cosas que faltan en la alacena.

–Yo voy– Se ofreció Ken.

–¿Estas seguro?– Lo miró un poco sorprendida.

–Si, en serio– Respondió Ken logrando sonreír.

–Esta bien– Aceptó ella y le dio el dinero indicándole lo que se necesitaba, alegando que la salsa de soya casi se terminaba, y otras cosas necesarias.

–Ya me voy– Fue lo último que Ken dijo y salió por la puerta.

Su mamá le sonrió, pero luego se quedó un poco pensativa, preguntándose que pudo haberle ocurrido a Ken para estar tan triste de nuevo, después de que apenas estaba recuperándose de esa gran depresión que había tenido hacia tres meses.

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–¿Y… que vas a hacer Daisuke?

–¿He?– Reaccionó el chico de ojos castaños. Él y Demiveemon estaban ya en la tienda, mirando los aparadores –¿A que te refieres?– Preguntó, sorprendido.

–Me refiero a Ken Ichijouyi y a Wormmon– Apuntó, el pequeño Demiveemon que sabía todo sobre los sentimientos de Daisuke y que a diferencia de Ken, él si le platicó a su Digimon todo lo ocurrido. Demiveemon poco entendía sobre relaciones interpersonales entre humanos, lo único que sabía es que Daisuke le había platicado que el cariño que le tenía a Ken era muy grande y por ello quería estar a su lado, pero… que desafortunadamente, Ken no sentía lo mismo por él...

–Debo admitir que me duele mucho– Soltó con toda la naturalidad del mundo– Pero si él no es como yo, no puedo obligarlo– Concluyó, con una sonrisa triste.

–Daisuke…– Murmuró Demiveemon al ver ese gesto en su rostro.

–Pero, lo quiero mucho y eso no va a cambiar y por ello siempre que pueda trataré de ayudarlo– Afirmó, esa era la más grande virtud del chico, su sinceridad y su franqueza –Aunque él no pueda sentir nada más por mí, me conformaré con ser su amigo.

–¿Pero eso no te lastimará?– Preguntó preocupado el pequeño Digimon azul.

Daisuke se sorprendió por la perspicacia de su amigo, pero sonrió.

–Por supuesto que no. Ayudar a Ichijouyi en lo que pueda y estar cerca de él aunque sea como amigo, me hará feliz– Y diciendo esto tomó una caja de arroz, pero de ese que es de fácil preparación.

–Oye Daisuke… ¿Tu hermana te pidió de ese?

–No– Contestó sonriente –Pero si le llevo de este, le ahorraré bastantes problemas.

–¿En serio Jun cocina tan mal?

–No…, pero su Curry es casi mortal. No se lo daría a probar ni a mi peor enemigo– Dijo con una sonrisa bastante divertida –Bueno, tal vez si Arukenimon lo comiese…– Se echó a reír alegremente, mientras que el dueño del mini-super lo veía atentamente con una cara de: "Ese chico está loco"

–¿Y que vas a querer que te compre Demiveemon?

–Umn…– Meditó el pequeño mirando un momento los aparadores y luego dijo– Ah, pues quiero…– Pero se interrumpió a si mismo cuando miró que él rostro de Daisuke estaba con la mirada fija, hacia algún punto específico –¿Daisuke?– Lo llamó y volteó hacia donde él miraba y distinguió a aquel chico de hermosos y lacios cabellos azules, con aquella mirada de cristalinos ojos color azul como la profundidad del mar, si, Ken Ichijouyi estaba afuera de la tienda, y mirando a través del cristal; repentinamente Ken echó a correr.

–¡Ichijouyi!– Gritó Daisuke y de forma automática salió de la tienda olvidándose de todo hasta de Demiveemon que se quedó en el estante, parado y mirándolo salir corriendo.

–¡Ichijouyi!– Lo llamaba, pero Ken no parecía querer parar su carrera, al escuchar su voz más corría ¿Estaba huyendo? –¡Ichijouyi, espera por favor!– Lo alcanzó y logró asirlo de un brazo deteniéndolo.

Ken se sintió angustiado, no quería enfrentarse a Daisuke, a pesar de que cuando lo había visto, no pudo apartar su mirada de él, ahora se recriminaba el haber ido ahí.

–¡Qué quieres!– Preguntó fríamente soltándose de su agarré con un movimiento brusco.

–Lo siento…– Se disculpó Daisuke comprendiendo que le había molestado que lo agarrara. Pero en realidad era todo lo contrario, Ken se sentía muy nervioso, por ello estaba evitando mirarlo, de lo contrario…

–¿Qué quieres…?– Dijo de nuevo, pero con una voz más suave.

–Quiero pedirte que me disculpes.

Ken se extrañó, ¿De que estaba hablando Daisuke?

–Me refiero a que… no debí tratar de obligarte a que me correspondieras– Dijo Daisuke con una sonrisa triste.

Ken se volteó levemente para mirar al chico.

–Olvidemos lo que pasó– Sonrió Daisuke y le extendió su mano.

–¿Olvidar…?– Reiteró Ken más confundido que nunca.

–Si, seamos solo amigos, aun tenemos que vencer a Arukenimon– Dijo sin bajar la mano y con una sonrisa tranquila y sincera.

Ken se sintió molesto, sin entender por qué… ¿Olvidar? ¿Acaso quería que olvidara lo que les había hecho? ¿Su traición? O ¿Quería que olvidara su confesión? ¿Y las horribles palabras que le dijera después de ella?

–No puedo aceptar lo que me ofreces…– Dijo con el rostro sombrío.

–¿Por qué?– Se desanimó Daisuke.

–Ya no quiero causarles más problemas… y… no quiero lastimarte más…

Daisuke se sorprendió, pero sonrió.

–No te preocupes por mi, estaré bien– Cerró sus ojos –Si aceptas ser mi amigo me harás muy feliz.

Ken se llenó de desesperación; no importaba cuanto tratara de alejarse de Daisuke o lo rechazara, el seguía insistiendo, ya no sabía que hacer, ¿Era acaso su comportamiento el que no les permitía salir de ese circulo vicioso? Estaba harto, ¡Harto! Ya no quería que Daisuke fuera amable con él, ¿Acaso era por esos sentimientos que decía tener por él? ¿Era por que le gustaba? ¿Cómo podía querer a alguien como él…? No lo merecía, de ningún modo…

–No…– Dijo al fin conteniéndose.

–Pero… Ichijouyi.

–¡Ya no insistas!– Gritó el ojiazul con desesperación, si alzar su rostro.

–Creo que… lo volví a hacer…– Declaró Daisuke tristemente –Sin darme cuenta estaba tratando de obligarte otra vez… lo siento… ya voy a dejarte en paz.

Ken escuchó eso y echó a correr. Otra vez… Otra vez… había vuelto a lastimar a Daisuke, y su corazón y sus lágrimas se lo reclamaban, pero no detuvo su carrera, eso tenía que terminar…

Demiveemon llegó al fin hasta donde estaba su amigo, parado.

–Daisuke…– Se sorprendió cuando miró que de los ojos de su amigo salían silenciosas lágrimas, y como estaba inclinado, estas cayeron al suelo.

–Daisuke, Daisuke– Lo llamó.

Él miró a su amigo y lo recogió del piso.

–¿Qué pasó Daisuke?

–Tampoco quiere ser mi amigo, Demiveemon…– Dijo al fin con la voz lánguida – No quiere nada conmigo… de seguro que lo único que puede sentir por mi es repulsión– Abrazó a Demiveemon, sin dejar de llorar –¡Malditos sentimientos! ¡Malditos sentimientos! ¿Por qué tuve que fijarme en él? ¿Por qué lo quiero así?

Demiveemon no sabía que decir, casi quería llorar con su amigo, pues no hallaba ninguna forma de consolarlo.

Daisuke reaccionó cuando se dio cuenta de que su pequeño amigo lloraba.

– ¿Demiveemon?

–Daisuke… lo siento, por ser un inútil y no poder hacer nada para hacerte sentir mejor.

–No digas eso Demiveemon– Sonrió Daisuke abrazando con más fuerza a su pequeño amigo, esta vez para consolarlo a él– La culpa es de mis sentimientos... y no sabes como agradezco que estés conmigo, sin ti, esto sería mucho más difícil…

–Daisuke…–Murmuró todavía llorando. Ojalá pudiera hacer algo por su amigo, ojalá el pudiera persuadir a Ken Ichijouyi de que correspondiera a los sentimientos de Daisuke… ojalá pudiera cambiar todo lo ocurrido…, pero no podía, mientras… Daisuke seguiría sufriendo y él tendría que seguir esperando a que Ken Ichijouyi reaccionara, pero ya había esperado hace tres días, en el Digimundo a que él mismo le dijera la verdad sobre el plan de Arukenimon y no había ocurrido, era un hecho que definitivamente no había nada que hacer.

Ken detuvo su carrera muy lejos de ahí, en un callejón, se recargó de la pared e inclinó su rostro, sus ojos ya no aguantaban las ganas de llorar. Era irónico, lo único que Ken quería era no causar más problemas y no lastimar más a Daisuke, pero en su intento lograba sólo lo contrario y no sólo eso, si no que él también se hacia daño, por no aceptar sus sentimientos, por creer que estando lejos todo se solucionaría…

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Mas tarde…

Daisuke había regresado a la tienda por el arroz y le había comprado a Demiveemon unas galletas, como se lo prometió, lo que él quiso. Ya casi eran las 2:00, Jun estaría furiosa, pero no le importaba, ultimadamente pocas cosas le importaban. Miró a Demiveemon que iba dormido en la bolsa y sonrió. Cuando alzó su vista al frente, se sorprendió de ver a cierto rubio de ojos azules esperándolo en la esquina de la calle donde estaba un poste.

–¿Takeru…?– Murmuró Daisuke sorprendido al ver al rubio frente a él.

El lo miró fijamente y sonrió con naturalidad.

–¿Cómo estas Daisuke?– Le saludó.

El aludido desvió la vista.

–Mas o menos…– Contestó sin poder evitar que el sonrojo se apoderara de su rostro.

Takeru caminó hasta él y tocando gentilmente su barbilla le alzó el rostro para verlo. Daisuke sintió como sus mejillas se encendían, al verlo tan de cerca y sentir su tacto.

–¿Estuviste llorando?– Preguntó preocupado.

Eso irritó a Daisuke, ¿Por qué Takeru tenía que enterrarse siempre de lo que le pasaba?

–Si, pero no importa…

–¿Fue por Ken Ichijouyi?– Cuestionó Takeru celoso.

–Eso no te importa– Se soltó Daisuke de su caricia con desdén.

–¡Si me importa!– Replicó Takeru perdiendo la calma y sujetando a Daisuke de la muñeca.

Y de nuevo ocurrió, Daisuke simplemente no podía soportar el hecho de que Takeru siempre estuviera fijándose en él y ocupándose de descifrar sus pensamientos y sus sentimientos. ¿Acaso era cierto que Takeru sentía algo por el? ¿O solo quería fastidiarle la existencia recordándole que era un tonto? pensó cruelmente.

–Claro que no, nadie esta interesado en un chico, simplón, escandaloso y tonto como yo…– Dijo con frialdad –Ichijouyi es chico normal, ¡No un maldito bisexual como yo!– Dijo sin reparo, dejando atónito a Takeru.

–No digas eso…

–¿Por qué no? si es cierto, soy una persona indeseable– Prosiguió cruelmente –Por eso tampoco Hikari me correspondió…

Eso era demasiado para Takeru.

–¡Cállate!– Lo azotó contra el poste en esa esquina. Los ojos de Daisuke estaban al borde de las lágrimas pero su rostro seguía insensible. El alboroto despertó al pequeño Demiveemon que hasta hacia poco dormía tranquilamente en la bolsa del mandado. El chico de ojos castaños claros miró fijamente al rubio y se quedó unos segundos perdido en ese cielo que eran sus ojos.

Era difícil saber con quien estaba siendo desconsiderado Daisuke, si con él o con Takeru, pero poniendo en juego sus sentimientos por él, prosiguió, sin miramiento alguno.

–Nadie, me amará nunca… soy despreciable.

Takeru ya no resistió. Rodeó con sus brazos el delgado cuerpo de Daisuke estrechándolo fuertemente y cerrando los ojos con desesperación dijo:

–Entonces tal vez nadie me amará a mi tampoco…– Daisuke se sorprendió al escuchar eso –¡Pero yo, te amaré a ti, siempre!

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En lo alto de un rasca cielos… Arukenimon apareció, con su misma apariencia, pero algo más sombrío se notaba en ella, no solo por el hecho de que llegó hasta ahí atravesando un extraño portal negro.

–Se acabó…– Declaró con la voz más fría y cruel –Voy a terminar con esos odiosos niños elegidos aquí mismo.

Del portal negro se escuchó un rugido y unos ojos rojos y brillantes se escondían entre esa oscuridad.

–Vayan ahora…– Dijo y poco a poco del portal salieron unos enormes y espantosos Devidramon, lanzándose hacia la ciudad.

CONTINUARÁ…

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Yami Hisaki: Mendigo Daisuke ¿Cómo puedes decir todo eso? No lastimes así a Takeru ¡El no tiene la culpa de que el &&$/& de Ken no te quiera!

¡Oye! ¡No insultes a Ken!

Yami Hisaki: Te lo advierto… Ya no hagas sufrir más a Take-kun. ¬¬Xxx

Okas… n.nU Sólo permíteme dar las notas finales. Er.. Pues hasta ahí llegó el capítulo jejejeje me temo que las amenazas se levantaran de nueva cuenta. Y a pesar de todo me gustó mucho como quedó este capítulo. Y el siguiente será mejor. Ya verán. Les va a gustar jajajaja.

Yami Hisaki: Cuídate por que si no me gusta… ¬¬X Ya sabes.

nnU… Oh, oh…

Reviews, comentarios, sugerencias, amenazas de muerte, jitomatazos y de más frutas y legumbres (siempre digo lo mismo nnU) serán bien recibidos.

¡Mil gracias por leer y luego nos leemos!

ATTE: Hisaki Raiden.

Sayounara!

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