Agradecimientos:
sonylee: Gracias por escribir y lamento mucho la demora! Bye!
Mimi Star: Hola! Muchísimas gracias por tus comentarios! Que bueno que te guste el fic! Y si! El dicho esta bien dicho! Jaja! Besos!
Sailor angel7: Que bueno que te haya parecido divertido el capitulo! Me parece que olvide darle un poco de eso en este capitulo pero lo tendre en cuenta para el proximo! Estas por darle en el clavo en cuanto a los sentimientos de Helga! Jaja! Pues ya lo veremos mas adelante, he? Espero que me tengas paciencia! Muchisisisismas gracias por leer!
Lanier: Perdooonnnn! De verdad tengo tantas faltas! Lo siento mucho! De seguro fue en las partes en que me descuide! Eso me pasa por apurada! Jaja! Gracias!
Number6: Guauu! Que largo tu review amigo! Gracias por molestarte! Me halagas! Tienes razon en a lo que te refieres de Brainy, creeme, pero no hay mucho que pueda decirte por el momento, todo se sabre a su tiempo, si?. De hecho, tienes razon en absolutamente TODO lo que dices! La verdad es que me sorprendiste y creeme que tengo presente todo eso! Ya lo veras mas adelante! Gracias por todo!
juna-chan: Muchisisisimas gracias por tu review! Espero que te siga gustando y lamento la demora! Besos!
carla gonzales: Hola! Pues si, te juro que Arnold se lo dira, pero mas adelante, en este capitulo te daras cuenta el porque! Gracias por leer! Besos!
Muchas gracias de nuevo a todos por sus reviews! Los quiero mucho! Y antes que nada, les deseo unas muy felices fiestas y que la pasen junto a todos sus seres queridos! Merry Christmas!
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Capítulo 5:"Confesiones..."
Un nuevo día de escuela en la PS 118. ya todos los niños se encontraban en el patio de la escuela, aguardando el toque del timbre que anunciara el inicio de las clases. Aunque otros niños se encontraban esperando algo más.
"Dónde se habrá podido meter Helga?" se preguntaba Phoebe en compañía de Gerald y de Arnold. Por alguna extraña razón, Helga no había subido al autobús esa mañana para dirigirse a la escuela como siempre lo hacía. Por lo mismo, Arnold se encontraba un poco desilusionado ya que quería disculparse con ella lo antes posible. Y sus amigos comprendían esto.
"No te preocupes viejo..." dijo Gerald colocando una mano en el hombro de su amigo "Si no viene hoy a la escuela podrás ir a su casa después de clases, no hay apuro para ello."
"Gerald tiene razón Arnold, ahora que Helga se encuentra algo distanciada de Brainy podrás hablar con ella tranquilamente...". Repentinamente la puerta de la escuela se abrió bruscamente, muy al estilo de Helga, pues la misma era quien acababa de llegar. Arnold suspiró aliviado, finalmente podría hablar con ella. La niña comenzó a caminar rápidamente llevándose a todos por delante, inclusive a Phoebe quien apenas saludó e iba directamente en la dirección que se encontraba Arnold.
"Helga! Podemos habl...?" Pero para sorpresa de Arnold y de sus amigos, Helga pasó por al lado de él sin siquiera escucharlo, pues a paso firme y decidido se dirigía hacia Brainy. Al llegar con él, un tenso ambiente se formó entre todos los alumnos, atentos a la situación.
"Tenemos que hablar." Dijo bruscamente la niña y Brainy algo temeroso accedió inmediatamente.
"D-de los re-regalos? T-te gusta-taron?" preguntó éste inocentemente. .
Regalos? pensó Arnold en su cabeza.
"Ha? Si, si, gracias.. pero en realidad lo que ... quería decirte es que..." Helga se encontraba un poco apenada por lo que estaba a punto de decir. "bueno que... lo que sucedió ayer... no fue tu culpa..." Brainy, al igual que Arnold, Gerald y Phoebe se sorprendieron por las palabras de la niña "Es decir... estoy segura de que... no fue tu intención el dejarme en ridículo... s-supongo que exageré un poco..." esto último lo dijo tan bajito que sólo Brainy pudo escucharlo "así que... p-porque n-no lo intentamos... de nuevo?" Por toda respuesta Briany sólo la abrazó fuertemente por impulso, diciéndole un tierno te quiero en el oído, lo que descolocó un poco a Helga.
Nadie en el patio escolar podía creer lo que acababa de suceder, Helga se había disculpado! Y con un chico! Se había mostrado como una persona amable y comprensiva. Pero a Arnold, eso le rompió el corazón. Veía a su Helga allí, abrazada a un chico que no era él, lo estaba aceptando, cuando a él siempre lo rechazaba a pesar de amarlo, o es que ya no era así?.
Por su parte, Helga acababa de comprender la situación, ya se estaba yendo de sus límites, por lo que se apartó del chico aunque lo hizo suavemente. Al girar sobre sus talones, dispuesta a irse de allí, se dio cuenta de que absolutamente todos los alumnos de la escuela tenían sus ojos posados sobre ella. Aún no sabía como reaccionar frente a esto, Rayos! Fue tan impulsiva que no tuvo la delicadeza de hablar con él en privado!.
Un momento! finalmente reaccionó Helga Desde cuando me importa lo que los demás puedan pensar de mi!. Sin titubeo alguno tomó de la mano a su sorprendido novio y comenzaron a caminar juntos. A paso firme y con la frente en alto hasta llegar a sus compañeros de clase.
"Y ustedes que ven montón de zopencos!" exclamó la niña "Saben qué? Si! Brainy es mi novio! Y si a alguien no le gusta se las verá conmigo!". Los niños aún no cabían en si de la aptitud que había tomado Helga, pero aún así se atrevieron a hablar.
"De hecho Helga..." comenzó a decir Sid "...nosotros queríamos felicitarlos!" terminando por esbozar una cálida sonrisa. Helga abrió sus ojos desmesuradamente frente a esto mientras que escuchaba los comentarios de aliento de sus compañeros.
"Si! Son el uno para el otro!" exclamaba Rhonda junto a Nadine.
"A pesar de que me halla enamorado alguna vez de Helga, espero que les vaya bien!" comentó Stinky, a pesar de que Helga lo hubiera querido golpear por ello.
"Hacen una pareja hermosísima! Muchas felicidades!" dijo también Lila.
"Si, después de todo..." comenzó a decir Harold para el asombro de Helga "..no son tan malas personas, se merecen ser f-felices..". Simplemente, en un abrir y cerrar de ojos, Helga y Brainy se habían convertido en el centro de atención. Dejando de lado, por supuesto, a Arnold, Phoebe y Gerald. Y sintiendo que faltaban éstas presencias, Helga desvió un poco su atención hacia ellos, sólo para ver a un Arnold cabizbajo yéndose del lugar seguido por Gerald muy de cerca, y al girar ver a su mejor amiga dirigiéndole una mirada de reproche por lo recién hecho. Helga! Qué estás haciendo?.
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"Viejo! Espera!" intentaba en vano de frenar Gerald a su mejor amigo. "No desesperes! De seguro debe haber una buena explicación para lo que sucedió recién!".
"Explicación de qué!" explotó Arnold "Viste como lo defendió! Cuán orgullosa estaba de tenerlo como novio!"
"Arnold?" la dulce vos a sus espaldas llamó la atención de los niños.
"Lila..." apenas murmuró Arnold, tratando de esbozar una sonrisa a su amiga.
"Está todo bien?" preguntó ésta preocupada "Es decir... estábamos todos felicitando a Helga y a Brainy por su noviazgo, pero tu no estabas allí haciendo lo mismo, cuando siempre has sido el primero para brindar apoyo... se puede saber porqué?". Esta pregunta descolocó bastante a los niños, habían olvidado lo observadora que era Lila.
"No, no es nada Lila, de verdad estoy bien." Mintió Arnold intentando zafarse de la situación "Con permiso, necesito ir al baño..." y se estaba alejando poco a poco del lugar.
"Es por Helga, verdad?" nuevamente el comentario de Lila hizo parar de lleno al niño. Arnold no pudo más que bajar su vista hacia el suelo, perdido en sus pensamientos y sintiéndose realmente desnudo frente a ella, no hizo intento alguno por desmentir lo recién afirmado.
Gerald se encontraba estático, al parecer no era el único que conocía los sentimientos de su amigo. Pudo ver como Lila se acercó por la espalda a Arnold y apoyando una mano en su hombro le susurró algo en su oído mediante una sonrisa. No pudo saber cual fue el contenido de ése comentario, pero sin lugar a dudas fue de gran importancia pues, en cuanto Lila desapareció de su vista, los ánimos de su amigo subieron bien en alto, tanto así que le pidió que lo acompañara y así, rápidamente, volvieron por donde habían venido.
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"Brainy, podrías dejarme a solas con Helga por favor?" preguntó educadamente Phoebe aunque a leguas podía verse su rostro enmarcado por la preocupación, algo que no pasó desapercibido para Helga.
"N-no hay p-roblem-ma.." dijo Brainy alejándose tranquilamente dejándolas a solas.
"Helga! Que has estado haciendo?" directo al grano Phoebe preguntó. "Pensé que ibas a pensar seriamente el cortar definitivamente con ésta relación!"
"Hey! Tranquila chica!" intentó calmarla Helga "Pues bien, si, y te juro que intenté hacerlo pero no pude! Sólo mira!" la niña buscó en su mochila un pequeño libro que luego colocó en las manos de su mejor amiga.
"Un libro de poemas?" preguntó dudosamente Phoebe observando el hermoso libro.
"Así es, me lo regaló Brainy! Lo puedes creer?" Helga parecía entusiasmada con lo que le estaba contando a su amiga "Lo hizo ayer y junto a un ramo de flores a modo de disculpa! Jamás nadie había hecho algo así por mi!". Phoebe disfrutaba de ver a su amiga tan feliz, pero lamentablemente debía de volverla a la realidad.
"Pero Helga, eso quiere decir que si no has terminado con él ha sido sólo por lástima..". ése pequeño comentario le cayó muy, pero muy mal a Helga, quién pareció volver a la realidad pero hecha una fiera.
"LÁSTIMA! YO!" explotó Helga "Acaso te volviste loca! Helga G. Pataki no siente lástima por nadie!"
"Entonces porqué razón estás con Brainy? Acaso es por amor? Lo amas Helga?" temió por preguntar Phoebe. Claro está que Helga lo desmintió inmediatamente.
"No, no, no es amor, pero... no lo sé... sólo... creí que era lo correcto.." Por alguna extraña razón, todos los acontecimientos de los últimos días, terminando por esos hermosos regalos, habían dejado un tanto sentimental a Helga, tanto así que ahora estaba siendo muy abierta, algo que, en cierta forma, agradeció su amiga.
"Crees que está bien que juegues con sus sentimientos?" preguntó la niña.
"Con sus sentimientos? Claro que no, él no está enamorado de mi si es a lo que te refieres Phoebe!" exclamó algo alarmada Helga.
"Pero él te lo dijo en su primera cita, lo recuerdas?" recordó Phoebe "Le gustas y mucho!"
"Sólo está confundido créeme, en cuanto me conozca de cerca un poco más querrá alejarse lo más que pueda de mi. " Repentinamente el rostro de Helga se transformó a uno de maldad asustando a Phoebe mientras se frotaba un poco sus manos "De hecho ya tengo un plan para que sea él quien corte conmigo y así no saldrá lastimado!."
"Helga."
"Dime."
"Me asustas."
"Jaja!". Helga cayó precipitosamente cuando alguien la volteó tomando de su mano no muy delicadamente.
"Helga! Tenemos que hablar!" se trataba de nada más y nada menos que de Arnold, quién era seguido por un Gerald bastante impactado. Desde cuando Arnold se había convertido en un niño rebelde sin sentido de la delicadeza y de los modales? Ya se estaba pareciendo a Helga.
"Otra vez tú Cabeza de Balón! Qué no ves que estoy ocup..! Hey! Suéltame!" quiso zafarse Helga. Llegando al limite de su paciencia, Arnold optó por llevársela a rastras de allí, sin tomar en cuenta que el timbre de entrada estaba ya sonando. Mientras tanto Gerald y Phoebe no pudieron más que dirigirse a su aula, debían de dejar a solas sus mejores amigos.
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Arnold introdujo a Helga en el salón del conserje de limpieza, que si bien no era muy grande, estaba completamente vacío y podrían hablar tranquilamente. El niño cerró la puerta tras suyo para asegurarse de que su presa no escapara como seguramente tenía pensado hacer.
"En qué diablos estás pensando Arnoldo! Tenemos que entrar a clases! Vamos a llegar tarde!"exclamó Helga sin tener la menor idea del asunto que tenían que hablar.
"Eso ya no importa. Hay asuntos más importantes que atender." Respondió calmadamente Arnold pero controlando su rabia.
"Jaja! Arnold, el niño más responsable y correcto de toda la ciudad, faltando a clases!" se mofó la niña y continuó diciendo con ironía "Jaja! Muy bien y qué es ese asunto del que según tú tenemos que hablar?"
"mmm...pues..." pretendió Arnold pensar "De tus mentiras tal vez?"
"Qué!" Arnold se acercó peligrosamente a Helga tratando así de intimidarla.
"De que yo si te gusto Helga!" Helga parpadeó ante la sorpresa "Me mentiste!"
"Otra vez con eso?" Helga se escapó de la cárcel que se había convertido entre el niño rubio y la pared y le terminó por dar la espalda. "Ya te dije que eso no es cierto! Porqué iba a gustarme un cabeza de balón como tú! Ha!". Sin darse por vencido Arnold volteó bruscamente y volvió a tomarla fuertemente por las muñecas, sorprendiendo tanto a Helga que hizo que ésta resbalara por la pared hasta terminar ella sentada y Arnold arrodillado casi encima de ella. Estaba perdiendo todo el autocontrol que aún tenía, jamás se había sentido así, sólo Helga tenía la capacidad de volverlo así de loco.
"Pero lo haces! Te gusto! Lila me lo dijo! Tú se lo confesaste el día de la obra! Cuando aprovechaste para besarme! Ella me lo contó todo!". Arnold estaba llegando a ser violento, algo que estaba asustando un poco a Helga, definitivamente ésta vez tenía las de perder. Fue entonces que se dio cuenta de la presencia que había del otro lado de la puerta asomada sutilmente sobre la misma, con todas las intenciones de entrar a su rescate. Y, tras ello, también recordó el plan que debía llevar a cabo.
"Porqué tanto interés en saberlo! Que más te da lo que yo sienta por ti!" Helga actuaba.
"Tengo derecho a saberlo!" gritó Arnold.
"Muy bien, muy bien sólo quitas tus manos de mi y te lo diré, de acuerdo!" se atrevió a decir Helga. Arnold, sin pensarlo ni un segundo, la soltó inmediatamente con todos los deseos de escuchar esas palabras que tanto anhelaba de los labios de Helga.
"Te escucho..." casi gimió el niño. Helga se lo quedó mirando, se sentía tan nerviosa, iba a hacerlo, iba a romper su pacto con Brainy porque no se supieran sus más íntimos secretos. Iba a humillarse una vez más, sólo para volver al principio, en donde se encontraba tan pero tan sola, si, sola, pero tranquila, quizás fuera lo mejor. Eran tantos los pensamientos que atravesaban su mente que no notaba la desesperación en los ojos de Arnold. Lo único que podía hacer era ver de reojo al niño que se encontraba espiando.
"E-es v-verdad..." Helga no quería hacerlo, pero quería terminar con todo eso cuanto antes. Sentía que sus prioridades ya estaban cambiando, y con ello se iba su egoísmo. "M-me g-gustass." Qué estoy haciendo?. Una punzada en su pecho le hizo saber que había cometido un grave error y la silueta de Brainy en el pasillo alejándose rápidamente sólo confirmó ése sentimiento. Había dicho la verdad pero con las intenciones equivocadas y había resuelto un problema pero de la forma incorrecta.
"Helga!.." No supo la razón, pero Helga simplemente se fue corriendo casi sin mirar hacia donde se dirigía. "Helga! Espera! Por favor!". No podía dejarla ir de esa forma, no después de ésa confesión, jamás se lo perdonaría, ésta vez no lo echaría a perder. Rápidamente se dirigió por el pasillo donde ella se había ido, pero perdió el rastro, por suerte el director Watz supo guiarlo bien, aunque, claro está, no quedó muy contento con la situación. Pues la niña había salido de la escuela y con Arnold ya eran dos los alumnos que se le habían escapado.
No lo entiendo, porqué se habría ido de ésa forma, cuando me lo dijo la primera vez actuó de una forma totalmente distinta.. Arnold se sonrojó al recordar que después de que Helga se le confesó lo había besado apasionadamente Tengo un mal presentimiento...no lo sé...debería de sentirme feliz de lo que me dijo pero la forma en que sucedió, las facciones de su rostro al hacerlo y el tono de su voz, no fue como lo había soñado... Ya no pudo continuar pensando, todos sus sentidos se posaron sobre los de una niña débil que se encontraba apoyada sobre un árbol, un ser totalmente diferente a la Helga de hace unos instantes. Ésta no había ido muy lejos, al parecer no tuvo las intenciones de esconderse de él.
"Helga..." la susodicha no volteó al escuchar una voz familiar, se mantenía de espaldas. Pero Arnold al tener una ligera sospecha de lo que sucedía, delicadamente la tomó por los hombros para girarla, casi sin oposición por parte de ella, pues se sentía muy débil como para ello. Y entonces la vio, sus sospechas estaban confirmadas. "Porqué estás llorando?..."
"Eso no es de tu incumbencia!" dijo Helga frunciendo su seño el cual contrastaba con las lágrimas de sus ojos "Y ahora qué quieres! Ya dije que lo que querías escuchar no! Ahora déjame en paz!"
"Yo sólo quería saber la verdad Helga, pero... algo me dice que hay algo más que debo saber..." Helga lo miró sorprendida, no podía ser! "Qué fue lo que sucedió hace un momento?". Arnold parecía más tranquilo ahora, mas sin embargo quién no estaba en las mismas condiciones era Helga, un ataque de nervios se apoderó de ella. Sentía que debía descargarse y qué mejor que con la persona fruto de todos sus problemas.
"Brainy... nos escuchó..." comenzó a decir.
"Brainy?" preguntó sorprendido Arnold "Estaba allí? Tú lo viste?"
"De hecho lo vi antes de hablar contigo, era conciente de que estaba allí desde mucho antes.." Arnold comenzó a sentir nuevamente ése mal presentimiento. En éste momento debería de estar confesándole a su amada lo que sentía por ella y quizás seguido a ello una abrazo y hasta un beso, pero algo le decía que no era el momento adecuado y que quizás, ése momento nunca existiría.
"Que es lo que quieres decir?" temió preguntar. Los ojos de Helga no demostraban compasión alguna hasta que vio la expresión en el rostro de Arnold, y es que no lo había notado hasta el momento por haber pensando tanto en Brainy, pero ya todo estaba dicho, no había vuelta atrás.
"Que lo que dije lo hice para que él lo escuchara... para desengañarlo...".
"Cómo pudiste?" Arnold entró en shock. Helga lo sabía y por eso continuó.
"Necesitaba darle motivos para que sea él quien corte conmigo! Quería que se enfadara! No que saliera lastimado!" Buscó defenderse.
"Y YO QUÉ!" la interrupción de Arnold mediante un grito dejó helada a Helga "Jamás pensaste en mi! Verdad! No creíste que podría haber salido lastimado también!" jamás lo había visto tan enfadado en su vida, pero lo que la niña no sabía era que en ese enfado mezclado también se encontraban los celos. "Para ti todo es Brainy, Brainy y BRAINY!". Helga ya no pudo decir más, sentía como si un balde de agua fría sobre su cabeza la hubiera vuelto a la realidad, acaso en los ojos de Arnold podía ver dolor? Por ella? Por ella y por Brainy?...
"Cielos Helga! No tienes sentimientos! Eres una persona fría! Totalmente fría!" Arnold estaba sacado de sus cabales definitivamente, tanto así que estaba diciendo cosas que quizás después se arrepentiría, cosas que atravesaban sin piedad el corazón de la niña "Y pensar que yo!...que yo te..! que yo te..!" Helga lo veía expectante "Haa! TE ODIO!". Ya no hubo sonido más que el silencio, un enfurecido Arnold desaparecía de la vista, nublada por las lágrimas, de Helga. La misma cayó derrotada sobre el suelo rompiendo finalmente en llanto.
Pronto las nubes negras del cielo comenzaron a derrochar sin piedad agua, empapando a todo ser que se encontrara en el camino. Y así fue como Arnold dejó abandonada a una pequeña niña desolada y desconsolada sin protección alguna. Por primera vez no acudió a su ayuda, más aún, fue él el causante de ésa gran pena. Dejó que la furia y los celos se apoderaran de su ser para tomar venganza de lo acontecido, no acudir a apaciguar su angustia. Acaso era eso lo que Helga se merecía?...
