Hola a todos! Quiero pedir mil disculpas por la tardanza! Por suerte ya tengo internet de nuevo en mi casa así que ya voy a poder actualizar más rápido! Gracias por la paciencia y ahora a los agradecimientos:

sonylee: Que bueno que te esté gustando el Fic! Pues si me tarde una eternidad, has de querer matarme también por lo que tardó éste! Jaja! Gracias por leer!

Mimi Star: Disculpas de nuevo por la tardanza! Gracias por comprender! Pues espero que este capi también te guste! Pues si! Coincidimos totalmente Arnold tonto! Pero ya ves lo que pasa cuando nos dejamos llevar por la rabia. Aunque Arnold no es de ése tipo, el amor cambia a las personas! Besos!

Sailor angel7: Que bueno que te haya gustado! Me preocupaba un poco que me saliera del hilo de la historia el que me haya quedado tan dramático! Jaja! Pero bueno no siempre va a ser todo felicidad, estamos llegando al desenlace de la historia de a poco! Espero que este capi también te guste y gracias por ser tan fiel a mi fic!

Shinta-Girl: Bienvenida seas a mi historia! Que bueno que te haya gustado hasta el momento! Espero que siga así! Espero tu próximo review! Besos!

HeLLeNsItA16: Que bueno que te guste! Me halagas! No hay problema con lo de los reviews, no siempre tenemos tiempo para dejar uno! Pero me alegro que finalmente hayas podido enviarme uno! Esta serie es realmente muy pero muy linda! Haaa! Jamás me cansaré de decirlo, de hecho hay algunos fics bastantes buenos de la misma, tendrías que animarte a leer algunos! Especialmente los que ya están terminados! Ya somos tres las que pensamos que Arnold es un idiota, pero bueno, mediante las equivocaciones y las metida de pata se originan lo problemas y, por supuesto, como tu dices la emoción de la historia! Espero con ansias tu próximo review!

carla gonzale: Gracias por leer! Y perdón por haber tenido que escribirme dos veces! Aquí tienes la actualización!

H.fanel.K: Jaja! Viva la lista de alertas! Es un honor estar en la tuya amiga! De verdad te inspira a publicar las tuyas? Wow! Me sonrojo! Gracias! Jaja! Deseos cumplidos! Aquí está la continuación! Aunque de seguro no en el periodo que esperabas! Jaja! Que vergüenza! Besos!

Shiira: Gracias por tu review! No te preocupes, no me agradan del todo las personas que no concluyen su fic, puede que me tarde en actualizar pero jamás abandonaré a mis fics! Eso lo juro!

Ahora si, de nuevo muchisisisimas gracias a todas las personas que se molestaron en dejarme uno o más reviews! Espero que este capi compense la tardanza! Que lo disfruten!

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Capítulo 6:"Una promesa pendiente"

Las cristalinas gotas de lluvia caían sobre Hillwood empapando ligeramente todo a su paso, dejando ver su mando sobre la naturaleza en esos momentos, demostrando su poder. Una de sus tantas victimas era ella, la niña rubia cuyo corazón terminó por romperse dolorosamente con ésas últimas dos palabras, provenientes de la persona que durante siete largos años consideró la más importante para ella, la razón de su existir, la esperanza del presente y del mañana, su fuente de inspiración, la luz de sus ojos. Un hermoso sueño que duró siete venditos años, y que el día de hoy, se dio contra la realidad y terminó por desaparecer.

Ya no había razón para ocultarse, poco le importaba que un zopenco de la clase o un integrante de su familia la viera en ésas condiciones ahora, a Helga Pataki nadie la había visto llorar de ésa manera hasta el momento, y el único que lo hizo hace tan solo unos instantes poca importancia le dio. Helga sentía que si en ese momento venía un ángel y se llevaba su vida consigo no se enteraría, pues ya el fruto de sus sonrisas y de todo lo maravilloso sobre la faz de la Tierra se había esfumado.

Me odia... Arnold me odia... finalmente se confirmó mi sospecha... la razón por la cual él jamás va a amarme... soy de su total desagrado, siempre lo supe y quise ignorarlo... quise llenarme de falsas esperanzas para seguir viviendo un falso amor, falso pues era dado y no correspondido, bien sabido es que ése sentimiento se da de a dos, pero en mi caso, siempre fue solitario... he sabido en un instante... que lo nuestro es imposible, que lo nuestro nunca existió ni existirá, que no hay espacio en tu corazón para mi y que el mío no basta para terminar de cobijar todo este sentimiento que tu sola sonrisa provoca en mi...

Una tibia mano tocó uno de sus hombros contrastando con el frío de su ser. Helga no quería levantar la cabeza, sabía quien era y no quería que fuera verdad, sentía que era demasiado, que no lo merecía. Pero ahí estaba...

"Brainy..." era una bendición en ese momento contar con su presencia allí "Qué haces aquí?"

"A-poyando-te..." Helga no podía creer lo que estaba escuchando.

"Porqué? Después de todo lo que te hice sufrir... deberías de odiarme... porque no lo haces?" A Brainy se le oprimió el corazón al escuchar a su amada, tanto por el contenido de sus palabras que por el doloroso tono utilizado para lo mismo.

"Ya s-sabes p-orq-que..." Si, sabía a lo que él se refería pero aún le costaba creerlo. Más sin embargo, Brainy le suplicaba tan solo con la mirada, que le creyera, que viera a través de sus ojos los sentimientos que su corazón albergaba para ella, tan solo para ella.

"De verdad... me amas?" Brainy asintió tan energéticamente que nadie hubiera podido no creerle. Incluida claro estaba Helga, la acumulación de lágrimas en sus ojos se hizo extrema, tanto así que sin siquiera parpadear se liberaron con el mismo fervor que una torrente fluvial en plena inundación. "Porque! Porque lo haces! Porque si toda mi vida no he hecho más que golpearte e ignorarte, porque si no tengo atractivo alguno? Porque si nunca pude ni podré ofrecerte nada!". Brainy endulzó aún más su mirada, comprendiendo a la perfección las dudas de su amada. Pero sintiendo a su vez miedo por la depresión que comenzaba a inundarla.

"A-arnold j-amás hi-zo algo p-para e-namorart-te tampo-poco... simple-mente... fue si m-mismo" . Entonces lo comprendió, esas meras palabras bastaron, el amor que Brainy le brindaba era el mismo que ella le profesaba a Arnold. Un amor incondicional, el cual nunca esperó nada a cambio, muy a pesar que el corazón estuviera pidiendo a gritos ser correspondido. "T-te am-mo porq-que posees un c-corazon p-puro..." Brainy tomó su mano para ayudarla a ponerse de pie, pero lo que no sabía es que además, con su palabras, también levantaba los ánimos de Helga. "...por el am-mor sacri-ficado q-que eres capaz de d-dar..." Esas palabras tan dulces llenaban por completo a la niña, acariciaban tiernamente sus oídos para finalmente abrazar y apaciguar el dolor de su alma. Y entonces ocurrió lo inevitable, lo inesperado para Brainy..

Helga lo abrazó fuertemente y rompiendo a llorar nuevamente, pero esta vez de felicidad.

"Lo siento tanto!.." era lo que Helga recitaba en los oídos del niño "Tu me has dado tanto y yo...! Nada!" Brainy rápidamente correspondió al abrazo, ese abrazo soñado, aceptando gustoso su disculpa "T-te prometo que no volverá a ocurrir! De ahora en adelante... seré la novia que tu mereces tener! Comenzaremos de nuevo! Pagaré todo el dolor que te hice sentir, nunca te abandonaré... lo prometo." Para Brainy no hacia falta prometer nada, Helga lo hizo feliz desde el momento en que la conoció, pero lo único que ahora deseaba es hacerla feliz a ella también, tan feliz como ella lo hizo sentir durante tantos años, y ahora que ella se lo permitiría lo haría sin lugar a dudas. Aunque no del modo en que Helga esperaba...

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"La odio.."

"No, no lo haces..."

"Claro que si! la odio!"

"Claro que no!"

"Si lo hago! La odio! La odio con todas mis fuerzas!"

"Ya basta Arnold!" estuvo a punto de golpear Gerald a Arnold. Después de lo acontecido, éste último, descontrolado, se dirigió hacia la casa de su mejor amigo en busca de un punto de apoyo. Pero no encontró lo que buscaba precisamente, pues hasta el momento Gerald no ha hecho más que regañarlo. "No la odias, todo lo que le dijiste sólo fue producto de un arranque de histeria! La ira sólo te hizo decir pavadas!". Arnold dejó de lado sus preocupaciones para escuchar atentamente a su amigo. "Heriste el corazón de la persona que posiblemente más te ama en el mundo!"

"Ella no me ama! Todo este tiempo sólo ha estado jugando conmigo! Me uso Gerald, lo oyes? ME USO! Sólo... sólo para protegerlo a él!" la furia volvió como nunca a los ojos de Arnold "Ella misma me lo dijo, es como... es como si..." en contraste con la expresión de su rostro anterior, éste se volvió deprimente debido a los pensamientos que atravesaban su mente, atrayendo la mirada preocupante de su mejor amigo "...lo hubiera escogido a él.."

"NO, NO y NO!" explotó Gerald, de verdad se encontraba enfadado, había contado con que la madurez superdotada de su amigo lo haría hacer bien las cosas, esa fue la razón por la cual tanto él como Phoebe dejaron que los testarudos de sus amigos arreglaran solos sus problemas amorosos. Pero al parecer, el rubio era inmaduro en ésa categoría, aún más de lo que Helga lo era. Y ahora se arrepentía tanto de ello. De seguro Phoebe los mataría a los dos juntos en cuanto se enterara de lo que había sucedido. "Tu más que nadie sabe perfectamente que no se puede escoger a quien amar!"

"Lo sé! Pero... y si lo hizo después?..." Gerald no comprendió a lo que se refería Arnold "Y si se enamoró de él y después lo escogió!" la desesperación de Arnold comenzaba a exasperar a Gerald.

"Por supuesto! Porque la gente se enamora de dos personas al mismo tiempo toooodos los días! No?" respondió irónicamente "Viejo! La gente se enamora de una sola persona y si fuera alguien sana mentalmente, lo cual no es ni tu caso ni el de ella, ELIGE a esa persona! Te queda alguna duda!"

"Eso sólo quiere decir que..." pero en lugar de animar a su amigo esas duras palabras no hicieron más que deprimirlo aún más de lo que ya estaba "lo que en realidad sucedió es que dejó de amarme y ahora lo quiere a él...".

En señal de irritación Gerald se dejó caer de rodillas mientras tiraba nerviosamente de su cabello "Dios! Porqué éste castigo!" Sólo espero que a Phoebe le esté yendo mejor...por fortuna es una persona bastante tolerante, de seguro tratara con mucha comprensión a Helga..

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"QUÉ TU QUÉ!" Helga retrocedió precavidamente, jamás había visto a su amiga en esas condiciones. Su mejor amiga tenía derecho de saber lo que había ocurrido, por lo que en cuanto se calmó un poco le pidió a Brainy que la dejara en casa de ella, para así hablar tranquilamente "Helga! Cómo pudiste!".

"Lo siento! Si! Se que me equivoque pero ya todo está arreglado! Brainy me perdonó!" intentó tranquilizarla.

"No me refiero a él sino a Arnold! Qué sucedió con él!" con el solo recuerdo de él, a Helga le parecía que se le partía el alma.

"Sólo eso, que me odia más que nunca..." apenas murmuró, el dolor era tan grande que pareció llegar hasta su amiga, pues ésta se calmó y volvió a ser la dulce y comprensiva Phoebe.

"Eso no es cierto Helga, de seguro se enfado tanto que no pudo controlar lo que decía. Entiéndelo, después de cómo lo utilizaste cualquiera explota. Aunque... en realidad nada lo justifica... sé que no quiso hacerlo Helga, de seguro en este momento debe estar arrepintiéndose de lo que hizo." Lamentablemente esas palabras no tuvieron el efecto que Phoebe esperaba en su amiga, ya que ésta seguía cabizbaja, pero esto no impediría que intentara hacerla entrar en razón "Al igual que tu lo estás haciendo en éste momento, quizás lo mejor sea que mañana te disculpes con él..."

"No tiene caso Phoebe. He decidido dejar las cosas tal y como están. Dejaré atrás a Arnold y comenzaré a vivir de nuevo, porque mis deseos de ser feliz han florecido más que nunca! Y sé que ésa felicidad está en Brainy...".

"Pero Helga, tú no lo amas... acaso fingirás quererlo?" preguntó su amiga.

"No lo amo, él lo sabe y... aún así me aceptó... dime Phoebe... qué amor más puro que ése existe?" preguntó Helga pero Phoebe no supo que responder frente a eso. "Y yo... aprenderé a amarlo... estoy segura de que lo haré, es lo menos que puedo hacer para devolverle aunque se una mínima parte todo el amor que él me brindó durante todos estos años."

Con esas últimas palabras todas las esperanzas de Phoebe fueron directo al suelo, algo le decía que aunque se le demostrara lo contrario, frente a sus ojos, nada haría cambiar de opinión a Helga.

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El sol irradiaba luz sobre todo el parque, era un día espléndido y era sábado, por lo que no hubo niño que no aprovechara ésa oportunidad para divertirse. Todos se encontraban jugando béisbol ú otros deportes cuando repentinamente algo llamó su atención. De hecho era algo normal de todos los días, pero no podían dejar de sorprenderse. Eran Helga y Brainy, tomados de la mano, quienes sonrientes buscaban un lugar apartado de los demás niños para estar a solas. Ésa era su primera y verdadera cita, sin intenciones ocultas, sin obligaciones, sólo un par de niños que querían disfrutar de la compañía del otro.

"Cielos!" exclamó Phoebe al ver a la parejita, allí sentados, al parecer Helga había estado escribiendo uno de sus tantos poemas y ahora se los estaba mostrando a Brainy, a la vez que ambos reían alegremente "Le está dejando ver sus poemas, esos que nunca nisiquiera a mí ha dejado ver, pero... todos ellos son siempre dirigidos a Arnold, acaso no sabe las consecuencias que tendrá en el pobre Brainy ver eso? O es que no son dirigidos a su mantecado?" Gerald, quien estaba a su lado, se preocupó de igual forma por esa confesión. Y con algo de temor miró sobre su hombro a su mejor amigo, quien se encontraba sobre el césped y la expresión de su rostro pues... no se podía describir el dolor que en él se hallaba.

"Arnold..."

"Volvieron a estar juntos... no es así?" preguntó Arnold ya sabiendo la respuesta.

"Arnold.." dijo Phoebe mientras de rodillas se colocaba a la altura de su amigo para consolarlo "..Helga está cometiendo un grave error, cree que no es amada por nadie más que por Brainy y es por ello que está con él, tratando de ser feliz con lo que él le pueda brindar..."

"Es decir que ése amor del que hablas es superior al que yo le puedo brindar..." apenas pudo murmurar Arnold.

"Pues que esperabas viejo!" exclamó Gerald ya fuera de sus cabales "Helga tenía frente a sí a dos niños, por un lado a Brainy, quien se decidió por declarársele para ser feliz y para hacerla feliz y, por el otro, a Arnold, cuyo amor es tan reprimido que no le ha dicho a la chica de sus sueños que la ama porque está esperando a que ella lo haga primero! Por quien va a decidirse?" el tono irónico utilizado hizo entrar en razón a Arnold. Aunque en pago también recibió una mirada de reproche por parte de Phoebe.

"Eso no es cierto Gerald!... Yo... solo... quería asegurarme" la pasividad con que acabaran esas últimas palabras provenientes de la boca de Arnold le hizo saber a su amigo que finalmente lo había comprendido. "Cielos... de verdad he estado haciéndolo, no? Me he obsesionado con que Helga me diga que me ama y no he pensado en que quizás ella, en el fondo, estaba esperando lo mismo de mi..." ambos niños asintieron a lo dicho por él.

"Arnold... el hecho de que se encuentre con otra persona no te impide que le confieses tus sentimientos por ella." Aseguró Phoebe, los tres sabían lo cierto de esas palabras. Eso era lo que debía de haber hecho desde el principio, para haberse ahorrado tantos problemas y tanto sufrimiento.

Mientras tanto, ajenos a ésta conversación, Helga y Brainy estaban disfrutando del día, especialmente éste último. Aún no podía creer lo dulce que Helga podía ser con él, era un sueño hecho realidad.

"Mira! Traje el almuerzo, quieres?" ante dicha pregunta Brainy asintió inmediatamente, aunque con algo de duda.

"T-tu ma-má finalment-te hizo t-tu almuerzo?" el chico preguntó haciendo que Helga estallara en risas por tal ocurrencia.

"Miriam? Jaja! Claro que no! Lo hice yo!" Brainy se sorprendió, entre sus manos tenía deliciosos medallones de pollos hechos por las manos de su amada. "No porque seas mi novio quiere decir que tengas que soportar sus intentos fallidos de almuerzo como yo lo he hecho! Qué clase de novia sería yo si permito que mi chico coma una lata de crema de afeitar? " ésta ocurrencia hizo sonreír a Brainy, era bien sabido que Helga jamás había tenido un almuerzo decente proveniente de su casa. Y el ser una pequeña niña daba a pensar que aún no estaba preparada para cocinarse para si misma, y el pensar que ahora se había esforzado sólo para él llenaba de alegría su pecho. Eran esos los momentos en que su mente comenzaba a soñar en Helga y olvidaba por completo su cometido, pero una presencia acercándose a ellos lo hizo pisar tierra firme, sabía lo que tenía que hacer.

"N-necesito ir al b-baño... ahora vu-elvo..." dijo Brainy parándose para alejarse de allí, lo que desconcertó a Helga.

"Pero Brainy! No hay baños por aquí!" obviamente Helga aún no se daba cuenta de la situación ni mucho menos de que Arnold se encontraba a sus espaldas hasta que éste se sentó frente a ella, en el mismo lugar que se encontraba Brainy instantes atrás. Brainy, los había dejado solos intencionalmente para que pudieran hablar, porque sabía que lo necesitaban. Helga sólo bajó su mirada, demasiado herida como para echarlo de allí. Algo que Arnold comprendía perfectamente.

"Helga..." ésta continuaba con su mirada baja "... sobre lo de ayer..."

"Si vienes a decirme que me vaya del parque porque mi sola presencia de molesta desde ya te digo q-.."

"No! No es eso..." lo interrumpió Arnold dolido porque Helga creyera algo así "yo... q-queria disculparme..." esta vez Helga levantó su asombrado rostro para ver al niño sin ninguna intención de detenerlo "...lo que dije no estuvo bien.."

"Dijiste lo que sentías y para mi eso está muy bien!" exclamó enfadada Helga "No creas que por ser el niño bueno de la clase debes de siempre tener buenos sentimientos para todos! Es preferible que seas sincero a hacerme creer que me estimas! Ahora sé la verdad!" Arnold no podía creer lo que Helga estaba diciendo, estaba hablando de sus sentimientos tan fríamente que no pudo evitar quedar paralizado, pero su descontrol tomó poder de él nuevamente y, rápidamente, se acercó desesperadamente a Helga tomándola por los hombros para que lo viera fijamente. Ésta lo miró, una vez más, fríamente.

"No! NO! Te equivocas! Es que acaso no lo entiendes! Todo lo que dije ayer fueron mentiras! No te odio! En lo absoluto! Al contrario! Yo... yo..." Arnold estaba a punto de soltar esa verdad que hace tanto tiempo pedía agónicamente ser liberada. La mirada de incomprensión que le dirigió Helga le hizo saber que ella no tenía la menor idea de lo que estaba a punto de decirle "Acaso no lo ves Helga? Todo lo que dije fue provocado por mis celos..." Helga abrió aún más sus enormes ojos Celos?. Arnold endulzó su mirada al ver lo ingenua que podía a veces ser su amada ".. celos al ver que tus pensamientos eran abarcados por alguien que no era yo, por ver como lo protegías con tanto anhelo y pasión como sólo tu sabes hacerlo... Helga..." las mejillas del rubio se sonrojaron dulcemente "yo... te amo!".

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Y bien? Que les pareció? Háganmelo saber mediante un review, si? Los quiero mucho! Nos vemos en el próximo capitulo!