Hola a todos, ya se que me he tardado en actualizar, pero entre tantas cosas que tengo que hacer, no me deja mucho tiempo pero en fin ya les traje el cuarto capitulo de "Mariposa" - disfrutelo...
El viento soplo sobre el bosque, llevando a todos los rincones el olor de las flores de aquel misterioso prado. El sol salio lentamente y alumbrando a todo su paso, anunciando la llegada de un nuevo día. La canción de un pájaro hizo que Kagura abriera los ojos. Lentamente se levanto tratando de reconocer el lugar, ante ella se encontraba una fogata y tres pescados que se estaban cocinando. La mujer vio a todos los lados, tratando de encontrar a alguien cuando una voz hizo que se diera la vuelta. Ante ella, una chiquilla le sonreía:
-Hola que bueno que despertaste.
-Gracias, y ¿Sesshomaru? – contesto Kagura tímidamente.
-El amo Sesshomaru salio a caminar, se fue muy feliz con el señor Jaken.
-¿Feliz?
-Si, pues ahora que esta con nosotros, el amo Sesshomaru esta muy feliz aunque no lo demuestre.
-¿En serio? – murmuro la dominadora del viento al escuchar esas palabras.
-Claro, si por eso estamos por estos rumbos. Desde que la salvó de morir ahogada en el rió, a estado siguiendo su rastro hasta ayer que la encontró.
Kagura se quedo sin palabras, no podía creer que había recorrido medio Japón tan solo para hallarla. Una lágrima rodó por su mejilla, en realidad sus sueños se estaban cumpliendo. Rin se asombro al ver aquella mujer llorar, aunque la había visto pocas veces, daba la impresión de ser una mujer fuerte y segura de si aunque que llevara a cuesta la gran carga que es la soledad. Pero al verla llorar, una extraña sensación se apodero del cuerpo de aquella niña. Corrió hacia ella y la abrazó con fuerza. Kagura se quedo lívida al ver la acción de la pequeña, no sabia como actuar, era la primera vez que alguien la abrazaba de esa forma. -¿Por qué me abrazas¿Por qué? – murmuro Kagura.
-Por que no me gusta ver a la gente llorar, cuando vivía mi madre, me dijo que si veía a una persona llorar o estar muy triste, que le diera un fuerte abrazo y así se pondría feliz. – exclamo Rin mientras sonreía. Kagura se sorprendió de aquellas palabras, y sin decir más se abalanzo hacia a Rin abrazándola con fuerza.
-Gracias, muchas gracias – exclamo con fuerza Kagura. No se imaginaban que una persona las observaba.
-Kagura – murmuro el espíritu mientras sonreía y desaparecía.
No muy lejos de ahí, dos personas caminaban lentamente en dirección al campamento…
-Entonces¿Ella se va a quedar con nosotros amo bonito?
-Si Jaken, Kagura se quedara algunos días con nosotros.
-Pero señor¿Usted confía en esa mujer? Acuérdese que trato de traicionar a su creador varias veces y tuvo el descaro de secuestrar a Rin, además…
-¡Ya es suficiente¡Ella se va a quedar con nosotros y punto! – exclamo enérgicamente Sesshomaru, harto de los comentarios de Jaken. De pronto se detuvo al detectar un olor conocido. De pronto agarrando del cuello a Jaken, lo lanzo lejos de ahí. El pobre sirviente cayó de cabeza sobre una piedra sin tener explicación alguna del acto de su amo.
-¡Viento Cortante! – se escucho un grito al mismo tiempo que Sesshomaru saltaba y esquivaba el ataque. Rápidamente saco a Toukijin y se puso a la defensiva en espera de otro ataque. El humo que se produjo por aquel ataque se disipo lentamente dejando al descubierto al atacante. Una mueca de odio se dibujaba en el rostro de Inuyasha quien había atacado intempestivamente al detectar el olor de Naraku, pero aquella mueca desapareció al ver que era Sesshomaru. Este se mantuvo impasible ante su hermano quien colocaba a Colmillo de Acero en su funda.
-Inuyasha como te atreves a atacarme de esa forma a tu hermano mayor. – espeto Sesshomaru a su hermano al mismo tiempo que guardaba a su espada.
-Vamos, no seas tan dramático – respondió burlonamente Inuyasha.
-¡Inuyasha! – se escucho un grito al mismo tiempo que un grupo se acercaba al lugar.
-¿Dónde esta¿Dónde esta Naraku? – exclamo Kagome mientras llegaba corriendo al lado de Inuyasha.
-No lo se, pero quizás el sepa donde esta. – murmuro Inuyasha mientras observaba de reojo a su hermano.
-¿Por qué crees que yo lo se? – respondió fríamente Sesshomaru mientras un raro escalofrió lo paralizaba.
-Pues el olor de ese maldito me condujo hasta aquí y que casualmente te encuentro a ti.
-Tonterías – exclamo el terrible youkai ante las palabras de su medio hermano.
-Inuyasha vamonos, el no lo sabe y Naraku no esta aquí. ¿Para que mentiría? – pronuncio Miroku para evitar una pelea.
-Es cierto lo que dice "Su excelencia", mejor vamonos – agrego Sango.
-Esta bien, Kagome vamonos, hay que seguir… - no termino la frase cuanto su olfato sintió algo.
-¿Qué pasa Inuyasha? – pregunto Kagome.
-Este olor es de Naraku.
-¿Qué¿Naraku esta aquí?- murmuro Shippo mientras se ocultaba detrás del monje y la exterminadora.
-No, no esta aquí, sino que proviene de alguna parte. – Empezó a oler el ambiente por unos momentos hasta que descubrió de donde provenía. Miro a Sesshomaru de forma furiosa mientras saltaba hacia el quedando a pocos centímetros lejos de el.
-¿Por qué todo tu cuerpo despide el olor de aquel infeliz? – murmuro fríamente Inuyasha.
-No se de que hablas- respondió Sesshomaru mientras hacia a un lado su cara para evitar ver a los ojos de Inuyasha.
-No te hagas, confiesa.
-Shippo ¿Es cierto lo que dice Inuyasha? – pregunto Kagome al pequeño kitsune. Este olfateo el viento y cerrando los ojos respondió – Si es cierto, muy extraño.
-Kirara ¿tu hueles lo mismo? – pregunto Sango al mismo tiempo que la gata respondía con un gruñido.
-¿Creen que Sesshomaru esta mintiendo, que si ha visto a Naraku?
-No lo creo, algo que reconocemos de Sesshomaru es que jamás ha mentido y no creo que comience ahora, Shippo. – respondió Kagome.
-Si que es raro – murmuro Sango mientras veía como Inuyasha y Sesshomaru gritaban.
-Cierto, yo… - el monje Miroku no contesto pues logro divisar algo en la ropa de Sesshomaru. – Oye Sango ¿Qué es eso? – pregunto mientras apuntaba a la estola del youkai.
-Déjeme ver – contesto Sango mientras enfocaba su vista en la prenda. – De pronto en su rostro se dibuja una facción de sorpresa.
-¿Qué pasa Sango¿Qué es? – exclamo Kagome.
-Es una pluma, es una pluma blanca que lleva atorada en su ropa.- respondió la exterminadora.
-¿Qué una pluma¿Acaso Sesshomaru come aves? – pregunto Shippo inocentemente.
-No lo se, pero extraño – respondió Sango mientras miraba a Kagome, pero el monje Miroku miraba a Sesshomaru al mismo que una rara idea pasaba por su cabeza.
-Bien, me dirás donde esta Naraku.
-Ya te dije que no lo he visto. No seas terco Inuyasha.
-¡No mientas, confiesa!
-¡No te lo diré!
-¡Si lo has visto, dímelo!
-¡Ya te dije que no he visto a ese imbecil!
-¡Entonces si no lo has visto¿Por qué todo tu cuerpo despide un parecido olor a Naraku!
-¡Eso no importa!
-¡Sesshomaru, Idiota, responde, porque todo tu cuerpo despide tan asqueroso y pútrido olor!
-¡No vuelvas a decirlo! – respondió Sesshomaru al mismo tiempo que veía a la cara a Inuyasha.
-¿Qué no vuelva a decir que¡Que despides la peor peste del mundo, el olor mas asqueroso, más repulsivo del mundo! – exclamo iracundo el hibrido.
Sesshomaru no soporto más, velozmente estiro su brazo y agarrando a Inuyasha del cuello, lo levanto mientras lo veía furiosamente.
-No vuelvas a decir eso, porque juro que te matare.
-Imbecil, ya sabia que habías visto a ese infeliz de Naraku.
-Ya te dije que no lo he visto.
-Mentiroso, apestas a mierda, apestas a vil basura. – sentencio fríamente Inuyasha con rencor.
-¡Jamás vuelvas a decir eso de la persona que amo con todas mis fuerzas! – grito Sesshomaru mientras arrojaba a Inuyasha varios metros de ahí.
-¡Lo sabia! – grito triunfalmente Miroku al ver la reacción de Sesshomaru ante los insultos de Inuyasha.
-¿Qué cosa sabias? - pregunto Shippo al monje.
-¡Ya se porque Sesshomaru despide el olor de Naraku por todo su cuerpo!
-¿Por qué! – gritaron en coro Kagome, Sango y Shippo. El monje no contesto pero en su cara se dibujo una sonrisa lujuriosa.
Inuyasha al ver el rostro de Miroku, sintió un terrible escalofrió, pues una idea muy "rara" pasaba por su cabeza. Se levanto y lentamente se acerco a Sesshomaru lentamente mientras lo miraba fijamente.
-Sesshomaru ¿Acaso has estado con Naraku como…?
-No te atrevas a decir semejante estupidez – contesto tajantemente Sesshomaru al darse cuenta del error de su medio hermano. Jaken miraba extrañado la escena, no comprendía muy bien que sucedía, pero al escuchar que Sesshomaru despedía un olor semejante a Naraku, le hizo recordar que Kagura estaba con ellos.
-Señor Sesshomaru, ya ve que lo dije es cierto, tener a esa mujer viviendo con nosotros nos traería problemas.
-¿Qué mujer? – murmuro Inuyasha.
-Kagura – exclamo Miroku.
-¿Kagura? – dijo Sango ante la afirmación del monje.
-Si. Kagura – volvió a exclamar Miroku mientras se acercaba a Sesshomaru y le quitaba la pluma atorada en la estola blanca del youkai. – Y aquí esta la prueba.
-Vaya, vaya, vaya, así que el olor que despide todo tu cuerpo es de Kagura – murmuro burlonamente Inuyasha.
-¿Quieren decir que Sesshomaru y Kagura ya…? – pregunto Kagome. Inuyasha y Miroku simplemente sonrieron mientras Sesshomaru deseba que la tierra se lo tragara.
-Jaken vamonos – murmuro el youkai mientras se daba la media vuelta. Jaken asintió y siguió a su amo. Inuyasha y el grupo lo vieron alejarse sorprendidos por lo descubierto.
Ya había caminado cierto trecho, cuando una sombra lo detuvo. Sesshomaru cerro los ojos y dijo:
-¿Ahora que quieres Inuyasha?
-¿Por qué Kagura esta viviendo contigo?
-Eso no es de tu incumbencia.
-¿No crees que sea una trampa de Naraku?
-Ya ve amo bonito, hasta Inuyasha que es un bruto se da cuenta de eso.
-¡Cállate insecto! – dijo entre dientes Inuyasha al sirviente.
-¿Qué me calle¡Óyeme bien Inuyasha, yo!
-Porque nunca dudo de la palabra de alguien que sabe que va a morir.
-¿Qué quieres decir con eso?- murmuro Inuyasha al sentir un toque de tristeza en las palabras de su hermano mayor.
-Kagura va morir dentro de unos días, por lo que decidí que viviera conmigo para evitarle un dolor mayor.
-Sesshomaru- susurro Inuyasha al ver que su hermano dejaba escapar una lágrima. Era la primera vez que lo veía así.
-Inuyasha, escucha bien esto, porque será la única vez que lo diga. Jamás dejes de pelear por las personas que amas, jamás, pues si dejas de hacerlo, te fallas a ti mismo y le fallas a los demás, nunca te rindas hermano, nunca lo hagas.
Inuyasha se quedo frió al escuchar aquellas palabras provenientes de su hermano. Este siguió caminado mientras era seguido por Jaken. Inuyasha se dio la vuelta y miro como se alejaba el Youkai – hermano – murmuro Inuyasha mientras regresaba junto a Kagome y los demás.
Sesshomaru y Jaken llegaron al campamento, ya era casi medio día y no habían comido nada. Ahí descubrieron una enorme mesa con diversos platillos servidos, Jaken se le hizo agua la boca e iba a empezar a comer cuando un golpe le produjo un chichón en la cabeza.
-Espera que estemos todos – murmuro Sesshomaru al no ver a Kagura y Rin.
De pronto dos figuras salieron corriendo hacia ellos, hasta que se detuvieron enfrente de Sesshomaru.
-Te gane- exclamo Rin mientras muerta de la risa veía a Kagura llegar exhausta.
-Veo que se entretuvieron hoy. – dijo el Youkai.
-Si, - pronuncio Kagura al ver a ser que más amaba.
-Bueno, señor Sesshomaru ya es hora de comer – grito Rin triunfante mientras todos se sentaban a la mesa. Y así paso el segundo día.
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bueno y que les parecio, creo que estaba algo borracho cuando hice este capitulo pero bueno, ya esta escrito. gracias por los reviews del tercer capitulo, me alegro que sigan la historia.Bueno sin más que decirme despido, nos vemos en el 5 capitulo.
PD.: para aquellas personas que son admiradoras de Sesshomaru, esten pendientes del 5 capitulo pues una batalla de tres se acerca. y sera la más dificil para el youkai. nos vemos.