PRÓLOGO:
Bueno, este es el fanfic que hice sobre lo que fue, desde mi punto de vista, la vida de Trunks antes de su viaje al pasado. El título de este fanfic lo elegí del nombre original del capítulo N° 164 de Dragon Ball Z: "Zetsubo no mirai! Jigoku o ikinuita otoko Trunks" que se traduce como "Un futuro sin esperanza! Trunks: el chico que vino del infierno". Hasta me he arriesgado a explicar brevemente como funciona la máquina del tiempo! (claro, que tuve que ver unos cuantos documentales en televisión). Nota: algunos capítulos son muy cortos, je nnU sweatdrop
CAPÍTULO 1: Si no los derrotamos nosotros, nadie podrá
Él estaba sentado en la playa. Era de noche, el cielo lucía resplandeciente con sus estrellas y la inmensa luna a lo lejos. Las olas que venían del mar casi tocaban la punta de sus botas negras. Miraba el horizonte como hipnotizado, sin pensar en nada, como si buscara olvidarse de todos sus problemas. Un momento después sintió un cálido ki acercándose y una mano sobre su hombro derecho.
"Vamos Trunks, es tarde, ya terminamos de entrenar, ¿acaso no tienes hambre?"
El muchacho de apenas 14 años salió de su ensimismamiento.
"¡Sí! ¡Claro Gohan!"
Los dos caminaron hacia Capsule Corp. en la oscuridad, pocas eran las luces que quedaban en la maltratada Capital del Oeste. Desde alguna casas semi-destruidas se escuchaban llantos y lamentos que destrozaban el corazón de Trunks. Su maestro se dio cuenta rápidamente de lo que sentía su pequeño acompañante. Entonces rodeo los hombros del jovencito con su brazo, abrazándolo mientras caminaban.
"No te preocupes Trunks, algún día esto terminará".
El muchacho de cabello lila esbozó una pequeña sonrisa que apenas se notó. Gohan, él era el único que lo comprendía realmente, y si no, ¿quién más? Ya no había nadie más con él, excepto su madre. Pero Gohan era muy especial: su mejor y único amigo, como un hermano, casi como el padre que nunca tuvo. Gohan llenaba todos esos huecos que la ausencia de Vegeta y los demás habían provocado en el corazón de Trunks.
Llegaron a Capsule Corp. Bulma los esperaba con la cena lista. Los dos Saiyajins comieron como de costumbre. Mientras cenaban, charlaban, de vez en cuando reían por algún comentario gracioso, parecía que todo era normal...
Ya era muy tarde. Bulma se fue a dormir avisando a los dos jóvenes: "No tarden en irse a dormir". Como respuesta Bulma obtuvo una mezcla de "sí mamá" y "claro Bulma" al unísono.
Eran las 11:30. Gohan y Trunks jugaban a un juego de mesa.
- ¡No es justo Gohan! ¡Tú siempre ganas! ¡Es muy aburrido así! -
- Mm... entonces... te mostraré algo más interesante. -
El joven de cabello oscuro fue a la cocina y volvió con un salero, dos palillos para los dientes y dos tenedores iguales. Trunks miraban desconcertado como su amigo acomodaba lo que había traído en la mesa.
- ¿Qué harás con todo eso? -
- Ya verás...-
El salero estaba sobre la mesa, Gohan colocó uno de los palillos en uno de los agujeros del frasco, luego cruzó los dos tenedores por sus cuatro patas para que quedaran enganchados y finalmente puso los tenedores en un extremo del palillo restante por donde se unían, de manera que quedaron balanceándose.
- Bien Trunks ¿crees que podré apoyar la punta libre de este palillo con los tenedores del otro lado, sobre la punta del palillo que está puesto en el salero?-
- ¡NANI! ¡¿Qué los palillos queden unidos por esas puntas tan delgadas con esos tenedores haciendo peso!-
- Hai -
- ¡Ja, ja! Gohan, eso es imposible!-
- ¿Seguro?-
- ¡Por supuesto! Es definitivamente imposible que...-
La voz del más joven Saiyajin se fue apagando cuando Gohan colocó la punta del palillo con los tenedores sobre la punta del palillo del salero y éstos de quedaron ahí, suspendidos, en perfecto equilibrio de manera perpendicular (Nota de la Autora: esto se puede hacer de verdad. Yo lo he hecho en mi casa. Hasta pueden intentarlo ustedes mismos. Espero que se haya entendido la explicación! nnU).
Ahora Trunks miraba de cerca, asombrado como nunca antes.
- ¡No puede ser! ¡No se cae! ¡¿Pero por qué! -
- Es muy simple Trunks. Al ser los palillos exactamente iguales y los tenedores también, tienen equilibrio. Lo ves, los palillos están a 90° y los tenedores igual. -
Trunks estaba maravillado, se notaba que a Gohan le gustaba la Física.
- Bueno Trunks, mejor vayámonos a dormir. -
- ¿Y qué hacemos con esto? -
- Je, déjalo ahí armado para que Bulma lo vea cuando despierte. -
El joven de ojos azules comenzó a reír.
"¡Ja, ja! ¡Qué sorpresa se llevará!"
Los dos se fueron a la cama con una sonrisa.
Apenas apoyó su cabeza sobre la almohada Trunks recordó a los Androides, las dos causas que tenía de su sufrimiento. Pero rápidamente este pensamiento fue reemplazado por el de Gohan.
"Gohan-sensei está entrenándome para que pueda convertirme en Super Saiyajin, seguramente pronto lo lograré y una vez que eso pase los Androides no podrán contra dos Super Saiyajins. Mientras Gohan y mamá estén conmigo todo estará bien. Tal vez debería extrañar a mi padre y a los demás guerreros... pero lamentablemente ni siquiera los he conocido... Ya verán esos desgraciados Androides, pronto todo volverá a ser como siempre debió haber sido..."
Estaba muy cansado, el entrenamiento de todos los días era muy duro. Inmediatamente Trunks se rindió al sueño sin pensar en nada más. Durmió profundamente toda la noche, como pocas, sin despertarse abruptamente a mitad de ella, sin pesadillas...
A las 6 de la mañana Bulma levantó. Fue hasta la cocina para preparar el desayuno pero cuando pasó por el comedor y vio la mesa...
"¡¿Nani! ¡Qué cosa más extraña! Seguramente Gohan la hizo".
Luego se acercó a la ventana. El cielo se veía hermoso, aunque el sol apenas salía podían verse tonalidades de rosa, celeste y naranja.
"¿Gohan-kun?"
Él estaba ahí afuera entrenando en SSJ, vaya a saber desde cuando. Pero, ¿por qué no estaba con Trunks?
Gohan sintió el pequeño ki de Bulma en la ventana, entonces entró.
"¡Ohayoo Bulma-san!"
Los dos desayunaron mientras conversaban.
- ¿Por qué Trunks no estaba entrenando contigo Gohan?-
- Es que... él siempre está despierto cuando voy a llamarlo muy temprano para entrenar, pero hoy cuando fui a su habitación estaba tan dormido que preferí dejarlo descansar.-
La cara de Bulma se ensombreció levemente.
- ¡¿No será demasiado duro el entrenamiento!-
- Claro que es duro, así debe ser si queremos derrotar a #17 y #18, fue Trunks mismo quien me lo pidió.-
- ¡¿Y por qué tiene que ser él quien se encargue de salvar al mundo! ¡Es sólo un niño! ¡Esos Androides pueden matarte a ti o a Trunks en cualquier momento si continúan enfrentándolos! ¡¿Qué haré yo entonces!-
Gohan intentó tranquilizarla.
- No podemos hacer otra cosa, no hay otra salida, tú lo sabes... Si no los derrotamos nosotros, nadie podrá, entiende ¿Acaso vamos a vivir en este infierno el resto de nuestras vidas? Yo, aún transformado en SSJ no pude siquiera hacerles daño, pero tengo la esperanza de que si Trunks llega a ese nivel él sea más poderoso que yo ahora...-
- Discúlpame Gohan-kun, tienes razón...-
Los tibios rayos del sol de la mañana entraban suavemente a la habitación de Trunks por la ventana. Pero toda esa claridad no era suficiente para despertar al muchacho que aún dormía profundamente.
Gohan entró al cuarto con la intención de despertarlo. Al verlo aún dormido, sonrió. Luego se acercó a la cama.
"Trunks, ya es hora de que te levantes, vamos".
El joven abrió sus ojos lentamente y vio a su amigo.
- Gohan...-
- Arriba Trunks, ya son las 10 de la mañana -
El pequeño Saiyajin se sentó sobresaltado en su cama.
- ¡¡Nani! ¡Las diez! ¡Es muy tarde! ¡¿Por qué no...-
- Estabas muy cansado por el entrenamiento de ayer, poco podrías hacer esta mañana estando tan agotado, fue mejor dejarte dormir unas horas más.-
- ¡Demo...-
- Vamos, Bulma ya preparó el desayuno.-
- Hai -
Entonces, después de que Trunks desayunara, los dos fueron a la playa a comenzar el entrenamiento del día.
Gohan le pidió a Trunks que lo esperara un momento y se fue. Y luego de unos 10 minutos regresó trayendo una grandísima roca que dejó caer sobre la arena.
- ¿Para que es esto sensei? -
- Es la roca más dura y resistente que existe por aquí. Ahora, destrúyela. -
Trunks se paró delante de la enorme piedra. Es verdad que era una roca demasiado grande, pero no sería muy difícil. Junto sus manos que comenzaron a resplandecer, pero...
- No. – dijo Gohan. – De esa manera es muy sencillo. No uses tu ki, usa tus puños, debes desarrollar fuerza física. -
Trunks hizo lo que le ordenó mientras Gohan observaba cada uno de sus movimientos sentado a algunos pocos metros de distancia.
- Muy bien Trunks, ahora ven conmigo, hay muchas más rocas como esa en la montaña... y más grandes. -
- Como digas Gohan-sensei. -
Y así los dos entrenaron todo el día y todos los días siguientes hasta que llegara el momento de enfrentarse nuevamente a los Androides #17 y #18.
