Cuando llego a la academia vio como se acababa el ultimo duelo de entrada y sintio que el corazón se le desplomo. Si faltaba a ese duelo, tendría que esperar hasta el proximo año para poder volver a enrolarse, y no se sentía capaz de poder aguantar un año en una escuela normal. Corrio hacia la orilla de la multidumbre y grito al maestro que precidía los duelos que le diera una oportunidad.
Al maestro no le gustaban los estudiantes informales, y para el, llegar tarde era considerado una falta de seriedad que no podía perdonar.
Sacudio la cabeza, "Perdón, pero aqui estan los estudiantes que si llegarón a la hora que debían estar aqui y que se merecen llevar este uniforme, en cambio tu llegas tarde y para colmo de males interrumpes."
"Por favor, deme una oportunidad de demostrar que merezco un lugar en esta academia. No quiero esperar otro año!" suplico.
"Eso lo debiste pensar cuando decidiste llegar tarde." Le contesto el profesor y le dio la espalda, acabando la conversación.
El chico agacho la cabeza, derrotado y comenzo a caminar hacia la puerta cuando otra voz interrumpio.
"Muchacho, te daremos otra oportunidad, pero tendras que batirte en duelo con el Profesor Chronos." Dijo el otro individuo.
Al chico se le prendierón los ojos de illusion y felicidad.
"Pero…" seguía diciendo el otro señor, "Solo si le puedes ganar te podras quedar en la academia."
"Si, claro!" Brinco la cerca que separaba a la multitud de la arena y volteo a ver a los otros estudiantes que ahi se encontraban. Entre todos ellos, distinguio a una rubia que veía todo el espectaculo con un gran interés y por un segundo sus miradas cruzarón y le parecio como si la conociera de toda una vida. Rapidamente sacudio la cabeza en un instante la rubia había desaparecido de sus pensamientos.
Ahora lo unico que importaba era el hombre frente a el.
Tendría algunos 2 o 3 días cuando recibio una carta de amor de parte de una tal "Asuka" que lo invitaba a un duelo en el dormitorio Azul de las chicas a la media noche. La confesión de amor no le intereso mucho, pero el duelo si, asi que acepto sin pensarlo dos veces.
"Pero aniki, sabes lo que te puede pasar si te llegan a descubrir en el dormitorio de las chicas?" le preguntaba su nuevo amigo, Sho.
"No va a pasar nada, ademas ella fue la que me retó y yo no me puedo negar a un duelo."
"Entonces yo voy contigo."
Se llevo una gran sorpresa al ver que su contrincante era la misma rubia que había visto en su primer día.
"Que significa esto?" pregunto sorprendida.
"Tu me citaste aqui, o no?" contesot Judai.
"No, no fuiste tu el que me cito a mi?" pregunto incredula.
"Por que habría yo de hacerlo?"
"Me parece que nos han engañado. Entonces si no hay nada que hacer, me voy antes de que nos descubran."
"No espera! Espera, aqui dice que quieres tener un duelo conmigo, asi que porque no lo hacemos ya que estamos aqui?"
"No sería mala idea, desde el día de entrada he estado pensando en ti." Dijo Asuka.
"Que?" pregunto Sho, sorprendido.
"Pensando en como le pudiste ganar al Profesor Chronos, y deseando tener un duelo contigo."
Sacarón sus barajas y comenzaron. La chica no era nada tonta, y fue una contrincante dificil, pero al final el pudo sobre llevarla y gano.
"Fue un gran duelo, pero no creas que la proxima vez me volveras a ganar."
"Esperare con ansias ese día entonces." Le contesto el con una sonrisa.
Y fue asi como se convirtio en amigo de Asuka, la primera chica que lo había hecho pensar en un futuro muy ajeno al de los duelos profesionales.