-Estar aburrida-
-ya lo se-
-estar aburrida y cansada- el muchacho miro hacia el cielo, que pecado habría cometido para soportar esto? Resoplo un poco, contando mentalmente hasta diez, luego con la mejor voz que pudo, simplemente respondió
-yo también-
-por que no volver a nuestras tumbas de una buena vez?- La chica junto a el, a veces parecía mas una niña de diez años, solo le faltaba empezar a patalear en el suelo, el muchacho ahora la miro al rostro.
-hay Shampoo, Shampoo, por que Ukyo y Ryoga necesitan intimidad-
-vaya par pervertidos, hacerlo en cementerio, sobre su tumba-
Ranma sonrió ante el comentario de la amazona, ambos estaban sentados en la otra sección del cementerio, para darle unos momentos de soledad a su acompañantes, como le sucediera anteriormente a Akane y sus hermanas, alejarse de sus tumbas por un tiempo les provocaba tal cansancio, que luego volver les era casi doloroso, motivo por el cual Ukyo y Ryoga no se alejaban nada de la suya cuando el deseo se encendía…
Pasado el Shock inicial, así como la tristeza de ver a sus seres queridos y conocidos lamentarse de sus muertes, los muchachos y muchachas se vieron obligados a descubrir que era ser fantasmas, aunque como Ranma sabia por lo que Akane le había contado, muchas cosas estaban; y estarían probablemente sin respuestas. El hecho de pisar tierra firme o apoyarse en objetos como si aun fueran seres corpóreos o vivos, y en otros momentos atravesarlos sin pensar en hacerlo, solamente con decidirse a realizarlo, los desconcertaba.
El ser los únicos fantasmas del panteón también era confuso, habían visto llegar en los últimos seis meses al menos una veintena de féretros, pero eso no significaba que la población fantasmal aumentara de la misma manera que las sepulturas ocupadas, y ni hablar de intentar salir del campo santo. Al igual que las Tendo, intentar brincar una pared les era imposible por el agotamiento de estar lejos de sus sepulcros, y al intentar atravesar la enorme puerta, como sucediera a Akane y compañía, se quedaban paralizados, sin poder realizar movimiento alguno. Pero al solo pensar en regresar hacia el interior, el control sobre si mismos regresaba.
-Shampoo agotada, quiere volver-
-dale unos minutos mas, malvada, o quieres ir a fisgonear acaso?-
-Ranma proponer algo a Shampoo?- la amazona sonrió como si esa idea le agradara…
-olvídalo, no fue esa mi idea- Ranma volvió miro al cielo, y Shampoo se cruzo de brazos ofuscada
-saber, ser muy aburrido tu también- Ranma sonrió ante el comentario –no comprender que ver chica fantasma en ti…- Shampoo le miro ahora sonriente –suponer que un día mostrar a Shampoo secreto, verdad?- Ranma sonrió a su vez, se acerco un poco a ella… casi provocadoramente…
-ni soñando- luego se volvió a sentar derecho, el cansancio le provocaba dolores en la espalda, Shampoo se hubiera levantado e ido de allí… si no estuviera tan adolorida como el…
-Shampoo empezar a pensar cosas raras de Ranma, no ser gay tu- a Ranma la boca se le cayo hasta el subsuelo, pero con una nueva cuenta se calmo.
-buen truco, pero no caeré, tendrás que esperar a que nos liberen para que Akane te cuente…, claro, si encontramos a quien pueda hacerlo, y ninguna LOCA AMAZONA se interponga claro…- Ranma la observo de manera asesina, y a veces la hubiera asesinado verdaderamente de no estar ya muertos.
-otra vez con eso, ya pedir disculpas, a ti, a Ryoga y Ukyo, pedir cientos de veces, HARTA DE PEDIR DISCULPAS- la chica hizo el ademán de levantarse de su banqueta, pero el cansancio pudo mas y luego de un quejido volvió a quedarse quieta, Ranma no quería discutir nuevamente sobre ello, pero…
-en que estabas pensando, pudiste destruir su alma, y mira lo que nos costo… aun no entiendo-
La amazona se cruzo de brazos, sintiendo la fría brisa del otoño agitar sus cabellos, tomo aire y suspiro largamente.
-amazonas nunca perder- Ranma la miro
-que?- silencio por unos segundos, luego Shampoo volvió a tomar aire
Las amazonas nunca perder, a nada, Shampoo darse cuenta que nunca pudo lograr atraerte como chica fantasma, Shampoo enojar, no por no lograr que tu amar, si no por que no poder ganar a chica espíritu, leyes amazonas decir que Shampoo deber matar a rival, o morir, Shampoo solo poder hacerlo de una manera, para cuando darme cuenta de lo que estar haciendo camionzote estar encima…y ya decir que lo sentir, no continuar con tortura por favor…-
Ranma la observo, escucho atentamente, su tono de voz y sus palabras fueron tan sinceros que creyó al menos entender lo que quiso decirle
-entonces, ibas a ayudarme a liberarla?-
-intentar gritar eso, pero tonto Hibiki tomarme del cuello y taparme boca… y pedir que dejar tema en paz- permanecieron en silencio otro largo rato, hasta que Ranma se levanto pesada y quejosamente, extendió su mano a Shampoo.
-supongo que esos dos ya deben estar mas calmaditos, vamos- Shampoo miro la mano, comúnmente una amazona desdeñaría ayuda, pero con ese cansancio doloroso, tomo la ayuda sin decir ni mu.
Volvieron por el mal iluminado sendero entre tumbas, eran uno doscientos metros, pero cada uno era una agonía, cualquiera que los viera, diría que eran una pareja de enamorados por lo junto que caminaban, pero la verdad era que uno se apoyaba en el otro, cada paso era un suplicio, logrando que una distancia a cubrir en dos minutos, tomara diez largos, poco a poco, la imagen de una pareja, muy junta, Ranma junto fuerzas.
-YA ESTÁN PRESENTABLES, O TRAEMOS AGUA FRÍA Y PALOS?- Ryoga y Ukyo, esta ultima sentada sobre el regazo de el, se pusieron rápidamente de pie, Ryoga ayudo a Ranma a volver junto a su sepulcro, Ukyo a Shampoo, y ella…
-sacar sucias manos, haberse lavado al menos, pervertidos…- esos gritos y gestos de repugnancia acabaron con la poca fuerza y resistencia de la amazona, quien se dejo al fin llevar algunas lapidas mas allá, Ukyo refunfuñaba
-deja de quejarte, si estamos aquí es por tu culpa- Shampoo cerro los ojos, Ranma, que había escuchado, rió sonoramente
-creo que es tu infierno personal Shampoo, oírnos eternamente echarte la culpa- la amazona levanto lentamente su mano y cerro el puño, pero dejando extendido el dedo mayor
El día llego como siempre, tras la noche, Ukyo despertó, (despertó?) por decirlo de alguna manera cerca de la tumba que compartía con Ryoga, simplemente se aparecía allí, de pie, vestida con la misma ropa que la noche que murió, su pequeña camisa, su suéter, sus faldas y zapatos, así desde esa noche en que se encontró mirando una fría y sin dudas reciente lapida que tenia el nombre de su esposo y el suyo tallado allí.
Se miro un poco, su ropa estaba impecable, no como anoche… pensó con sonrojo que era una suerte que llevara falda, si no su esposo y ella jamás podrían hacer lo que hacen cuando la pasión llama…
-Ya aquí?- la voz de la Amazona la saco de su ensueño libidinoso, trato de aparentar una normalidad que empezaba a perder y sin darse vuelta contesto.
-sip, tu también?-
-aun molesta por dichos de Shampoo anoche, pensar que haber pasado ya- la chica de cabello violáceo mal interpreto la actitud de la castaña, esta se volteo al fin.
-oye, que no estoy enojada, solo estaba pensando cosas nada mas- Shampoo era mujer, y conocía esa mirada… suficiente para lograr…
-OH, rayos, pensar en eso, ustedes no descansar nunca?- la castaña se puso mas roja aun, mientras Shampoo sonreía ante el efecto de sus palabras, al fin la tomo del cuello y le golpeo amistosamente la cabeza – dar envidia a Shampoo, vamos, contar que hicieron esta vez, contar--
El tiempo pasaba, y por muy resentidos que estuvieran Ryoga, Ranma y Ukyo, terminaron por aceptar a Shampoo como una mas. Tanto que Ukyo cuando se libero del abrazo de ella la golpeo juguetonamente.
-y tu nunca dejaras de preguntar, ve y conquista a Ranma y te enteraras que hacemos- la amazona resoplo.
-eso querer, pero ser fantasma fiel, por los dioses, solamente a Shampoo tocar uno así…- ambas rieron sonoramente, cuando ambas sintieron a alguien tomarlas por el hombro, suficiente para hacerlas saltar por el aire. Cuando aterrizaron, descubrieron a unos muy sonrientes Ryoga y Ranma.
-querer matarnos de susto?- Shampoo no noto que la frase ya había quedado desactualizar, Ukyo le dio un golpe, entre amistoso y real a su esposo
-Idiota, casi me hago encima- ambos levantaron sus manos como diciendo que no fue tanto, aunque trataban de contener la carcajada.
La rutina de todos los días comenzaba, allá andaba el ya viejo Meiho, limpiando alguna que otra lapida o tumba, por allí andaba su amigo, Jue, en su eterna tarea de barrer los corredores entre las hileras de sepulcros, una misión que nunca acababa, a medida que la mañana pasaba los deudos hicieron sus apariciones, algunos solemnes y tristes, a veces acompañados de pequeños juguetones, los cuales ponían música de risas y alegrías a ese triste lugar.
había algunos turistas, de esos extraños tipos que piensan que para conocer las costumbres y rituales de un país, debes conocer como entierran a sus muertos, u otros que cumplían con un deber mas que con el deseo de estar al menos espiritualmente con un ser querido.
Hacia una semana había venido el viejo patriarca Kounji, era la segunda vez que venia, la primera luego del entierro, el hecho de vivir al otro lado del país limitaba seriamente sus visitas, sus ojos con lagrimas, y algún llanto que escapo del control del padre de Ukyo, partió el corazón de los espíritus, obviamente el de Ukyo mas que nadie.
Las chicas de la misión a la que perteneciera Ukyo antes de casarse eran quienes mantenían la tumba del matrimonio en perfecto estado, algunas eran chicas muy jóvenes, risueñas y alegres, contrastando con el ambiente solemne del lugar, incluso acuñaron una frase para Ryoga, luego de conocida su historia: "quien a camión mata, a camión muere" .
Genma y Nodoka se encontraron también con la dolorosa sorpresa, al igual que el padre de Ukyo, el golpe de perder a su hijo fue duro, pero poco se fueron recuperando, aunque ya nada seria igual. Conocieron a un tal Soun Tendo, un hombre que había perdido hacia ocho años a sus tres hijas en un accidente, y les brindo ayuda y consejo para superar la tristeza de la perdida, tanto que con el tiempo se convirtió en un incondicional de Genma… sus largas partidas de Shogui se extendían horas y horas.
Nodoka fue visitada en varias oportunidades por una misteriosa anciana, quien le dijo que había visto en sueño lo sucedido a su hijo, una madre que a perdido a su vástago puede tomar cualquier cosa para ahogar su pena, y la anciana, le dijo lo necesario para que ella aceptara mas rápidamente la perdida.
Soun era el único que visitaba las tumbas de todos, exceptuando la de Shampoo, el saber que sus hijas estuvieron atrapadas tanto tiempo entre las cuatro paredes del camposanto le hizo dudar si las cosas no pudieran repetirse. Aunque nadie podía estar mas cerca de la verdad, Soun nunca veía o escuchaba nada. Colocaba las flores en las tres tumbas, como penitencia por haberlo olvidado de hacer por tanto tiempo en las de sus hijas, y como agradecimiento en las de Ranma, Ukyo y Ryoga.
Estos observaron al solemne hombre cumplir con su deber, y luego retirarse serio y meditabundo, perderse entre la hileras de lapidas.
-bueno, el favor nos salio caro- Ranma suspiro, Ukyo, Ryoga y Shampoo lo perdieron definitivamente de vista.
-Yo preguntar por que no depositar flores en tumba Shampoo- la amazona miraba un poco entristecida su tumba se veía un poco ajada y raída.
-tal vez por que tu armaste todo este lió- la voz, cascada y grave, les llego a los fantasmas por detrás.
-AAAAAAAAAAHHHHHHHHHH- los cuatro se abrazaron mirando con terror a Cologne, que había llegado tras ellos sin que se dieran cuenta.
-abuela, dejar de hacer eso- Shampoo estaba muy roja, y el resto aun recuperando el aliento, Cologne rió sonoramente.
-fantasmas asustados por seres humanos, eso va contra las reglas, no?- la anciana parecía risueña, los espíritus la rodearon, era bueno poder hablar con alguien mas, la anciana llevo flores a la sepultura de su nieta. Seguidos por el resto. Luego la anciana se ubico en una banqueta, los
demás se sentaron junto a ella.
-averiguo algo Cologne?- Ukyo hizo la pregunta, la anciana se veía particularmente risueña, pero negó con la cabeza.
-nada pequeña, aun no se con seguridad que paso, mentiría si dijera algo- la anciana tenia ojos brillosos, algo que Shampoo noto.
-Tu saber algo, conocer esa mirada- todos miraban a la anciana, esta seguía sonriente
-por que dices eso bisnieta, yo no se mas que tu- la voz parecía sincera, si algo pasaba, los fantasmas no lo sabían, Cologne se puso de pie y camino unos pasos – o tal vez sepa algo-
Todos se pusieron de pie y la rodearon, pero dejaron que Shampoo hiciera las preguntas.
-por los dioses abuela? Que es lo que sabes, dinos ya- la anciana encendió su pipa con una calma que ponía los nervios de punta, le dio una chupada y luego exhalo el humo con calma.
-solo se que… esto puede durar mucho-
Todos se fueron de cara al piso, se pusieron de pie y Ranma hubiera estrangulado a la vieja
-ya sabemos que esto pude durar mucho, las hermanas estuvieron aquí ocho años, lo sabemos- Cologne seguí casi como aguantando la risa, volvió a chupar su pipa.
-creo que le dará un cáncer- menciono casi con un gruñido Ryoga, Ukyo le dio un codazo que lo doblo al medio.
-bueno, creo que esto puede durar mas – cara de decepción de todos- lo mismo o… menos, tal vez siete meses, tres semanas, y cuatro días…- Ranma contó con sus dedos…
-es el tiempo que paso desde el accidente, pero… entonces?- la anciana camino saliendo del circulo fantasmal y fue ella la que rodeo a los espectros.
-mmm, bueno, a pesar de la estupida idea de mi bisnieta, a ultimo momento sabemos que se arrepintió y pretendió ayudar a Akane, que todos ustedes fueran tan ciegos como para no ver un trailer de dieciocho ruedas solo fue un casualidad, sin embargo, todos tenían ese maldito medallón en sus manos…, además, todos ustedes, incluso tu Shampoo, murieron realizando el sacrificio máximo, una vida por otra, o en su caso, cuatro por un alma, que mas se puede pedir?- la anciana seguía girando alrededor a ellos y de su bolsillo emergió el bendito medallón.
Los ojos de Cologne brillaron con resplandor dorado, un fuerte viento se elevo del sur, y una luz blanca se hizo visible desde el este, Ukyo, Shampoo, Ryoga y Ranma miraban entre asustados y esperanzados, dos figuras se hicieron visibles, como si vinieran caminando desde el foco de la luz.
Nabiki y Kasumi Tendo, hermosas, rozagantes, con sencillos pero hermosísimos vestidos blancos llegaron hasta donde estaba el grupo, su presencia desprendía un aura de paz que se irradiaba por todo el lugar, sonreían de una manera tan encantadora, como si fueran tan solo dos niñas traviesas. Kasumi sin decir palabra, le tendió su mano a Shampoo, la amazona dudo en tomarla.
-vamos bisnieta, las oportunidades se dan una vez, ella es tu guía al próximo mundo- Shampoo tomo la mano de Kasumi, al instante sintió que esa paz la envolvía, era tan hermoso, tan… ambas se dirigieron hacia la luz.
Ukyo y Ryoga observaron a Nabiki acercarse a ellos, caminando casi a saltos, como una niña pequeña, Ukyo empezó a llorar de felicidad, y Ryoga no parecía muy lejano a ello, la angelical figura los tomo de las manos y los guió casi corriendo hacia la luz, donde Shampoo y Kasumi eran una figura lejana. Al entrar en el cono blanco, la luz se fue debilitando, hasta que solo fue un pequeño punto que se perdió en la lejanía, Ranma quedo solo con Cologne, había mil preguntas en su mirada, Cologne le dio otra chupada a su pipa. El humo de ella se disipaba en una suave brisa… Cologne simplemente giro y se encamino hacia la salida., dejando atrás al muchacho
-recuerdas que te dije que estabas mancillando, no un cuerpo, si no un alma, que estabas pecando de manera atroz?- Ranma suspiro, si que lo recordaba, pero no pensó que eso ahora… la brisa se trasformo en viento, la oscuridad y la soledad de las noches por venir, todo parecía agolparse en el, Ranma dio media vuelta y empezó a caminar hacia su tumba, Cologne se detuvo de repente, sin voltear le hablo
-adiós Ranma, fue un gusto conocerte- el muchacho, aun mas confundido giro nuevamente, la veía alejarse hacia el maldito portal
-como que fue un gusto? Me dejara solo aquí, no volverá mas?- se podía oír desesperación en la voz de Ranma
-No, no volveré mas- la anciana no se detuvo, siguiendo a paso cansino hacia la entrada al camposanto
-por que?- no fue una pregunta, fue un gemido
-…-
-POR QUE?- ahora si había voz de terror en el, pero al ver que la espiritista no se detenía, comprendió que su castigo por ese pecado había llegado -adiós Cologne- Ranma empezó a caminar hacia su sepulcro, con la cabeza gacha y los ojos cerrados, la matriarca rió sonoramente mientras se alejaba
-adiós Ranma, salúdala de mi parte, -los dejo solos-
-solos?- Ranma se volvió nuevamente, Cologne era algo ya alejado,
El viento pareció calmarse de repente, no entendía, no entendía nada.
-hola Ranma- la sorpresiva voz a su espalda no lo asusto, la conocía demasiado bien. Giro tan rápido como pudo y la vio allí. Su voz casi se quiebra
-TU?-
Akane, al igual que sus hermanas, vestía un sencillo vestido blanco, pero aun así parecía tan brillante, como si hubiera sido hecho para ella, el aura que la rodeaba parecía hacerla radiante como una joya, Ranma la miro, tan subyugado por la belleza de la niña mujer ángel que quedo paralizado, pero Akane se lanzo hacia el y lo abrazo tiernamente, solo en ese momento reacciono y la rodeo también con sus brazos.
-te extrañe, te extrañe tanto- el muchacho empezó a llorar, mientras le hablaba al oído. Empezó a besarla, besos cortos, de rencuentro, de amor, un llanto de felicidad broto de Akane, quien lo tomo de la barbilla y le beso largamente, luego le sonrió.
-nunca mas estaremos solos, nunca mas- Akane le llevo hacia uno de los muros, y simplemente desaparecieron por entre el, dejando por primera vez en muchos años, el cementerio de Nerima verdaderamente vació y solitario.
Eh contado esta historia como me la contó el amigo del amigo del primo de ese amigo, y aun dudo que sea verdad..
Pero como dice un tal Soun Tendo, los fantasmas no existen, pero que los hay, lo hay
FIN
Quienes relean esto se daran cuenta de que hay correcciones al epilogo, espero que les sea de agrado, suelo escribir mis historias teniendo en mente la gran mayoria de las veces solamente la escena inicial y la final, y simplemente trato de unirlas, pero pocas veces me costo como esta. No se si es una gran historia, o una buena siquiera, pero si se que ha sido la que mas me ha costado llevar.
Deseando que les sea agradable
Hugo el Unma
