Los personajes no me pertenecen son de Rumiko Takahashi. Escrito sin ánimo de lucro.( ‿ ).
Esta historia participa en la dinámica navideña de la página de Facebook Mundo Fanfics Inuyasha y Ranma #Navifics_Con_MundoFanfics #MundoFanficsInuyashayRanma
-Y para que dice que sirve esto?-Sostuvo el pequeño adorno(?) en frente de sus ojos
-Hay una mujer especial para ti, muchacho?-preguntó el anciano sentado en la entrada del local adornado con guirnaldas y luces navideñas
-Pues, no... más bien...en realidad... pues...-dudó el chico
-Eso no te sirve de nada si no tienes a una chica, déjalo donde estaba-el anciano vendedor dio un sorbo a su taza humeante y el vapor le empañó los lentes claros.
-Qué se supone que significa eso?
-Significa...si no hay una chica no funciona, tienes una o no?!-preguntó molesto el vendedor
-Ja, no solo una, hay al menos cuatro mujeres interesadas en mí.-exclamó con seguridad- Bueno, quizás solo sean tres, pero...-murmuró para sí mismo
-Ya veo, entonces no necesitas de esto-el anciano se acercó sin hacer ruido y le arrebató el pequeño adorno, una ramita de hojas verdes y bayas rojas.
-Oiga anciano, que no dijo que sólo funciona con chicas!
-Nunca dije que con varias, solo con una. Y, al parecer, tú tienes demasiadas, según tú mismo has dicho. No puedo darle algo tan valioso a un mujeriego como tú-señaló el hombre de cabello canoso.
-Lo quiero-sentenció el chico de cabello trenzado arrebatándoselo al vendedor de las manos, aún sin saber cómo diablos se supone que funcionaba aquel adorno.
-No!.-el hombre golpeó la cabeza de Ranma con un periódico viejo
-Al menos dígame cómo funciona-pidió, pues ya su curiosidad había escalado suficiente
-Pues, cuando dos personas-empezó a decir el anciano volviendo a sentarse-están bajo el muérdago, la tradición dice que deben besarse
-Que bobería!-exclamó el chico de ojos azules
-Cállate y escucha!-gritó el anciano-Sin embargo, este que ahora sostienes solo sirve si ambas personas están enamorados.
Ranma dejó de mirar el adorno y volvió a prestar atención al hombre frente a él.
-Qué quiere decir eso?
-Puedes ir y sostener eso con cualquier chica, pero solo si ambos tienen los mismos sentimientos el uno por el otro, el muérdago hará que se besen. No funciona de otra manera.
-bah, no le creo-Ranma metió las manos en los bolsillos de su pantalón negro y se dispuso a salir del pequeño local.
-No lo sé, Akane, no creo que se vea muy bien-Ranma caminó hasta ella mientras contemplaba la supuesta decoración navideña que su prometida llevaba horas intentando terminar.
-Cállate, si al menos me hubieras ayudado podrías opinar-Akane lanzó una patada al chico que ya sostenía la escalera en la que ella decoraba.
-Oye, te daré dos consejos y me iré-Ranma señaló a la chica con su dedo índice, aún sin soltar la escalera.
-Por favor, qué clase de consejos puede dar un tonto como tú?-respondió ella sin mirarlo
-Primero: abandona la idea de ser decoradora de interiores y segundo: no crees que deberías tener más cuidado al dar patadas si estás usando una falda?
-Ranma!-gritó la chica, está vez mirando en dirección a su fastidioso prometido.
Él rió alegre y sonoramente y sus ojos azules se hicieron más pequeños, más lineales, como los de un niño travieso.
El corazón de Akane latió más fuerte y más rápido de lo normal. De repente la escalera no parecía el lugar más estable para estar.
[Cálmate-se dijo a si misma-es solo Ranma diciendo tonterías, como siempre]
Últimamente no se le hacía tan sencillo fingir que él no provocaba todo lo que, de hecho, causaba en ella. Se había jurado a sí misma no provocar el ego de su prometido, pero su cuerpo obviamente no la ayudaba a ocultar sus sentimientos frente a él.
Decidida, bajó poco a poco los escalones de metal. Cuando casi había descendido, Ranma la sujetó por la cintura y la sostuvo hasta que, por fin, pisó el suelo de madera del dojo.
Se quedaron así, cerca y en silencio, por unos segundos que se le antojaron una eternidad a la chica de cabello corto.
-Si ya terminaste con eso-empezó a decir Ranma todavía junto a su espalda-Kasumi me pidió que le ayudarás a servir la cena.
Acaso estaba loca? Había escuchado la voz de Ranma muchas veces, incluso habían estado cerca en momentos mucho más comprometedores que ese y sin embargo, durante los últimos meses cada palabra o gesto suyo por mínimo que fuera, la dejaba con el corazón descontrolado. Cuánto tiempo más podría soportar las ganas de abrazarlo y besarlo que él le provocaba?
-Adelántate, yo iré en un momento-respondió mientras se alejaba de él
-Akane-la llamó el chico-Quieres ir a ver los fuegos artificiales esta noche?
-Ir a ver los fuegos artificiales tú y yo, solos?!-sin quererlo, su voz sonó un poco alarmada.
-Si, claro.-respondió con calma caminando hacia ella- Escuché que está noche habrá un espectáculo de luces junto al río. Qué dices, vamos?
-No. No puedo. Tengo que ayudar a Kasumi.-Akane retrocedió dos pasos para mantener la distancia con él.
-A qué? Kasumi ya terminó todo y solo hace falta servir la mesa. Anda, ven conmigo a verlos!
-Entonces este año esos dos, por fin, se animaron en hacer lo que cualquier pareja japonesa hace en Navidad.-Nabiki recostó ambos codos sobre la mesa de la cocina
-Eso parece. Hoy Akane se veía muy linda, no crees, Nabiki?
-Pues, Akane es un poquito parecida a mamá, entonces, yo diría que sí, se veía un poco linda.
-Vas a seguir caminando detrás de mí toda la noche?-Ranma se detuvo a mitad del pequeño puente de madera que comunicaba el parque con el rio de la ciudad.
-Es solo que estoy cansada.-se quejó la chica a cierta distancia de él.
-Debería llevarte en mi espalda?-Ranma se acercó a ella sin que lo notara
-Claro que no!-exclamó sorprendida
-Bien, entonces dame la mano. Cualquiera que te vea pensaría que viniste sola.
-Y eso qué?
-Pues que viniste conmigo, boba.-respondió golpeando la frente de la chica con su dedo índice
Caminaron en silencio y muy despacio junto al río buscando un buen lugar en el que sentarse. Muchas parejas jóvenes ya estaban acomodados en áreas reservadas para el espectáculo de fuegos artificiales.
-Ranma, no creo que encontremos sitio a esta hora.-Habló de repente la menor de las hermanas Tendo
- Y de quién es la culpa? Tú te tardaste demasiado, yo te avisé desde temprano.
Akane soltó la mano del chico, molesta.
-Y ahora que pasa? Vamos, solo estaba bromeando, no seas tonta. Te hubiera esperado toda la noche si era necesario.
-Y eso por qué? Ah, supongo que ninguna de tus prometidas aceptó venir aquí contigo!
Ranma suspiró cansado. No importa cuánto se esforzara, ella siempre se molestaba con él.
-Oye, sabes que compré hoy?-dijo intentando cambiar de tema.
La chica lo miró molesta por no responderle.
-Es algo que pensé que, quizás, te interesará
-No veo cómo.
-Quieres saber qué es o no? Lo compré a un anciano del bazar.
-Bien, dime qué es de una buena vez.
Ranma sacó de una pequeña bolsa dorada lo que parecía ser una ramita verde con diminutos frutos y un moño rojo.
-Qué se supone qué es?-preguntó la chica mirando con cuidado el artículo frente a ella.
-Vaya, realmente no logramos encontrar un lugar antes de que empezará el espectáculo-Ranma miró hacia como los colores brillantes de los fuegos artificiales empezaron a iluminar el cielo nocturno.
-Déjame verlo-pidió la chica.
Ranma levantó la mano sobre sus cabezas en un intento de alejar el adorno de Akane.
-Qué haces, bobo, déjame verlo-Akane extendió tanto como pudo su mano para alcanzar el extraño adorno y en el proceso, terminó demasiado cerca a a su prometido.
-Hay...hay una tradición-empezó a explicar él torpemente
-Una tradición?-Akane bajó el brazo y apoyó ambas manos en el pecho del chico
-Ajá, pues la cosa es...-respondió aturdido Ranma, aunque sin bajar el adorno
-Eso es muérdago, verdad?
El chico afirmó con un movimiento leve de cabeza. No podía verse, pero seguro estaba tan rojo como un tomate. Había comprado aquel muérdago con la esperanza de que Akane no supiera de que se trataba. Y ahora estaba acabado. Total y completamente descubierto.
Akane dejó de mirar el adorno y posó su mirada en sus ojos, provocando un escalofrío que le recorrió todo el cuerpo.
-Supongo que ahora tendremos que besarnos.-soltó la chica de ojos café con una sonrisa traviesa en los labios
-Yo, bueno...es solo una tonta... tradición extranjera -respondió con dificultad- Si no quieres...yo... es decir.
Akane acercó su rostro al suyo y cerró los ojos. Ranma apreció con cuidado los rasgos finos de la chica.
[Puedes ir y sostener eso con cualquier chica, pero solo si ambos tienen los mismos sentimientos el uno por el otro, este muérdago hará que se besen... Su función es revelar el verdadero contenido del corazón, aquel que la timidez o el orgullo han decidido ocultar. Si tus sentimientos son correspondidos, verás que ella aceptará que la beses, de lo contrario solo te dará una bofetada.No funciona de otra manera.]
Eso era lo que había dicho aquel anciano. Y ahora, Akane estaba...
Bajó la mano en la cual sostenía el muérdago. Quizás Akane solo estaba actuando bajo el efecto de algún tipo de embrujo. Él realmente quería hacerlo, pero no así.
-Abre los ojos, Akane-dijo con suavidad
La chica obedeció y lo miró confundida.
-Qué pasa, Ranma?-preguntó en un hilo de voz
-Ya bajé esa cosa, no tienes que aceptar esto.
-Tú, no quieres hacerlo?
-Claro que quiero, yo...!-Ranma se cubrió la boca con la mano derecha, avergonzado-Es solo que no quiero que sea de esta forma-añadió poco después
-Y eso que se supone que significa?-quisó saber ella
-No quiero que me dejes besarte solo por qué hay un muérdago sobre tu cabeza, maldita sea!
-Bien-respondió después de unos segundos de silencio la chica, volviendo a cerrar los ojos.-Te doy permiso, puedes hacerlo, si realmente quieres.
Ranma recordó las palabras del anciano "Si tus sentimientos son correspondidos, verás que ella aceptará que la beses, de lo contrario solo te dará una bofetada", acaso se refería a esto?. Respiró hondo, pero las dudas no dejaban su cabeza ni un segundo.
En medio de sus turbados pensamientos, Akane tomó su rostro entre sus manos y finalmente lo besó.
-Eres bastante lento, Ranma.-dijo separándose de él y luego sonrió con dulzura.
Ranma levantó sobre sus cabezas otra vez el muérdago, casi como un reflejo, al sentirse abandonado por la cálida caricia de los labios de su prometida.
-Oye, no tienes que hacer eso cada vez que...-el reclamo de Akane fue interrumpido por un beso tímido de Ranma.
El espectáculo de fuegos artificiales ya estaba por terminar y pronto se iniciaría el festival de comidas navideñas.
-Realmente había querido hacer esto hace mucho tiempo-le confesó al oído para que ella no viera su sonrojo.
-Yo también-respondió la chica con una sonrisa en los labios, mientras el cielo se iluminaba con colores azules, rojos, verdes y dorados
-Feliz Navidad, tonta-añadió está vez mirándola a los ojos fijamente
-Feliz Navidad, bobo.
~~~~~~~~Fin~~~~~~~~~~
Nota de la autora:En Japón la Navidad es más una festividad de parejas. Sí, hay familias que realizan cenas navideñas pero en general es más como nuestro día de San Valentín. Este oneshot navideño(llega tarde, lo sé ) lo escribí después de ver la imagen de portada en Pinterest.
