Cuando el sol entraba por la ventana Hermione aun permanecía despierta, lo había oído irse y como se despedía de Ron y le había dolido que no lo hubiera echo de ella que no supiera donde había ido ni que ni tan siquiera le hubiera dicho un adiós, no había podido conciliar el sueño en tenia rabia dentro de ella contra aquel al que tanto había querido, porque ahora solo sentía frustración, se levanto rápidamente e igual de rápido se vistió, no dijo nada a nadie, no quiso que la vieran llorar, no quería que algún día ellos le dijeran que había sufrido por el que había llorado su partida, se metió en la chimenea en silencio y después de que las cenizas la inundaran apareció en un pequeño salón donde un chico todavía en pijama hacia en ese momento aparición.
- Eric – le llamo lanzándose en sus brazos – el se ha ido, se fue anoche me beso y luego volvió a desaparecer de mi vida – lloro en los brazos de su amigo que no le decía nada solo la abrazaba consolándola en su dolor – dime que no me equivoco, dime que esta bien que le olvide, por favor dímelo.
- Hermione – fue todo lo que su amigo le dijo mientras la continuaba abrazando sin soltarla.
Oigo el silencio
de medianoche
oigo que todo se acabó
Que haré si tú te vas, que haré sin ti, solo ahí silencio a mí alrededor y todo duele demasiado, duele decirte adiós, duele dejar morir este amor.
Hoy soy tu ausencia
hoy no es tu nombre
hoy pongo en venta nuestro amor
Siento que es lo mejor, lo mejor para mi, lo mejor para dejar de sufrir, lo mejor para no volver a llorar, no me correspondes, solo me das lo que tu crees lo necesario para que me mantenga en la expectativa.
A quién le importa lo que vaya a
hacer
si ya no hay forma de hacerme volver
Debo olvidar para ser feliz y si para hacerlo debo apartarte de mi lo haré, te olvidare para dejar de llorar, te olvidare para dejar de sufrir.
Falsa tu envidia
falsa mi suerte
falta que pidas por favor
En tu mano lo voy a dejar en tu propia decisión, no volveré a ti, no permitiré que me vuelvas a dañar, si quieres que vuelva a ti tú me lo deberás pedir.
¿Será mi vida?
¿Será mi muerte?
Serán los besos que no dio
No puedo seguir pensando en lo que podía haber sido en lo que se sentirá al estar en tus brazos al sentir tus besos a oír de tus labios un te quiero.
A quién le importa lo que vaya a
hacer
si ya no hay forma de hacerme volver
Si tú puedes olvidarme a tu antojo yo también lo podré hacer, no sabes lo fuerte que puedo llegar a ser, no sabes lo difícil que puede ser, pero soy capaz de ello y de más.
Tuya mi vida
tuya mi suerte
tú ya no dictas mi dolor
Yo decido en mi vida, yo decido que hacer y aun cuando ahora me rompe el corazón se que será lo mejor, lo mejor para dejar de sufrir será olvidarte y cerrar mi corazón a ti.
Que en el olvido
caiga tu nombre
que ya no es dulce ni tu voz
Que mi corazón se cierre que no vuelva a sentir nada por ti, que no permita pasar ningún sentimiento por ti ni siquiera la amistad.
A quién le importa lo que vaya a
hacer
si ya no hay forma de hacerme volver
- Hermione ¿Estas segura de lo que vas a hacer?
- No – negó ella – no lo estoy, pero no puedo seguir así, esperando que el se de cuenta de que estoy aquí.
- El sabe que estas ahí, solo que le cuesta demostrar lo que siente.
- ¿Eso crees? – pregunto ella.
- Si lo creo, es mas estoy seguro.
- Yo no, no lo creo porque puedo entender que no me quiera, que no tenga los mismos sentimientos que yo tengo, pero no puedo concebir la idea de que ni tan siquiera me tenga respeto.
- No digas eso sabes que no es verdad.
- Si lo es, si no porque hizo lo que hizo, me besa me dice esa tontería de quería saber si aun sabias igual y luego cuando es el momento de irse, se despide de Ron, pero yo no existo para el. No se acordó de decirme ni tan siquiera hasta luego.
- ¿A dónde ha ido? – pregunto a su amigo mientras la sentaba con el en el sofá aun abrazada a él.
- No lo sé, tenia que hablar con un hombre sobre no se que cosa para controlar sus poderes.
- Eso esta bien, se puede defender bien si controla mejor sus impulsivos y para que lo vamos a negar, ese chico es muy impulsivo.
- ¿Tú crees? – interrogo ella.
- Claro que si, porque piensas que te beso si no.
- No te entiendo – dijo ella.
- Hermione te beso porque no supo despedirse de ti, no puede hacerlo. No lo hizo cuando tu te fuiste ni tampoco lo hizo ahora pero esta vez necesitaba hacerlo, así que hizo lo primero que se le paso por la cabeza besarte.
- ¿Qué debo hacer Eric? – pregunto ella mientras se frotaba las sienes – estoy perdida, confundida.
- Sabes lo que tienes que hacer, lo que te dicta tu corazón, sigue tu corazón Hermione porque el será el que te de la respuesta.
- Estupendo tengo que venir a un monte para encontrarme a mi mismo como no estoy poco perdido normalmente lo mejor es dejarme en un monte para ver si me pierdo mas maravilloso, pensaba Harry mirando a su alrededor buscando a alguien a quien preguntar.
-
- Harry Potter – el chico se dio la vuelta asustado, estaba seguro que hacia un segundo allí no había nadie y ahora un viejo con una gorra le miraba con una sonrisa en sus labios.
- ¿Y usted es? – pregunto el.
- Erinsonte Walkacer, Remus te hablo de mi ¿no es así?
- Si – afirmo Harry – pero esperaba a otra persona mas …
- ¿Joven?
- Si, no se ofenda, pero Remus me contó que usted le enseño a controlar al lobo y no parece muy fuerte que digamos.
- Porque no le enseñe a pelear, le eduque a manejar su karma y su espíritu, dominar su yo interior.
- ¿Su yo interior? – interrogo Harry con sarcasmo en su voz – no se ofenda porque desde luego lo último que quiero es que le parezca mal, pero mi yo interior y yo nos encontramos muy bien, nos controlamos muy bien mutuamente.
- ¿A que le tienes miedo?
- ¿A mi yo interior? – pregunto otra vez con todo el tono de ironía que podía poner.
- Sabes a que le tienes miedo, sabes cual es tu secreto mas oculto, tu mayor deseo.
- ¿Lo sé?
- Lo sabes – Harry iba a contestar algo de nuevo con ironía cuando se dio cuenta de que se encontraba en otro lugar, en una casa donde se oían voces.
- Hola – grito, pero no recibió respuesta – hola – en ese momento una mujer pelirroja paso por delante de el – mama – grito emocionado – mama soy yo Harry.
- No te oye, no puede oírte – miro al anciano que estaba junto a el.
- ¿Dónde estamos? ¿Y que hacemos aquí?
- Estamos en casa de tus padres Harry, viendo tu mayor deseo.
- ¿Mi mayor deseo? Esto me esta empezando a cansar quiero irme de aquí, no tiene ningún sentido.
- Lo tendrá tranquilo, lo tendrá.
- ¿James que es ese ruido? – Harry se giro para mirar a su madre y ver aparecer a su padre con la varita en mano.
- Nos ha encontrado sube a por Harry y vete.
- James no te puedo dejar.
- Vete a por Harry y vete, no lo pienses Lily, vete – la mujer dio un rápido beso a su marido y corrió por las escaleras en el momento en que la puerta saltaba por los aires, Harry se interpuso entre su padre y Voldemort pero no sirvió para nada, Voldemort lo atravesó como si fuera un fantasma – no permitiré que hagas daño a mi familia, no lo permitiré.
- Sabes que no eres rival para mí. Avadra Kedabre y su padre callo muerto antes de llegar a tocar el suelo.
- Papa – gritaba Harry – papa contéstame – chillaba, oyó el grito de su madre en la parte de arriba de la casa y corrió hacia allí, pero había llegado tarde su madre estaba muerta y entre sus brazos un bebe perdía también la vida – no puede ser – gritaba Harry – yo no muero, yo no …
- Tu mayor deseo es no haber quedado marcado con tu cicatriz, no ser el niño que vivió y eso es lo que yo te he dado.
- Mi muerte es eso lo que me ha dado – gritaba Harry casi al borde de un ataque de nervios – pero sus gritos quedaron en el aire, miro a su alrededor ahora se encontraba en otro sitio, lo distinguió en el acto era Hogwarts, estaba seguro, pero parecía un montón de ruinas.
- Corre Ron, corre – oía los gritos de una chica.
- ¿Ginny? – pregunto Harry casi en un susurro – pero ella esta muerta.
- No te quedes atrás Hermione corre – Ron arrastraba a la chica que cojeaba y venia apoyada en el chico.
- No puedo mas Ron, estoy agotada y la pierna me duele demasiado, déjame, no puedo seguir.
- No te voy a dejar ¿Qué estas diciendo?
- Me duele Ron – dijo ella mientras se sentaba en el suelo.
- Hermione no nos podemos parar – le rogó Ginny – debemos continuar.
- No puedo de verdad, que no, no doy para más, estoy demasiado cansada y no tengo mas fuerzas.
- Ginny tu sigue yo me quedare con ella y cuando descanse un poco iremos contigo.
- Ron los tenemos pegados a nosotros, no tardaran en encontrarnos.
- Pues por eso sigue tú.
- No – grito su hermana.
- Ginny – el chico la cogio por los hombros – vete te prometo que nosotros te seguiremos ahora vete junto a la orden ellos te ayudaran y en unos minutos yo y Hermione nos reuniremos contigo, te lo prometo.
- Ron vete con ella – dijo Hermione con esfuerzo desde el suelo.
- No la dejes Ron – grito Harry.
- No digas tonterías, me quedare contigo y Ginny tu sigue – la menor de los Weasley miro a los dos antes de volverse y seguir corriendo.
- Eres tonto, deberías irte con ella.
- No te voy a dejar Hermione ya te lo he dicho y no pienso seguir discuentiendo esto contigo, relájate y seguiremos en unos minutos.
- ¿Por qué haces esto Ron? Debes irte.
- Sabes porque lo hago.
- Ron no me lo digas de nuevo por favor, se que te duelo pero yo no siento lo mismo por ti y a mi me duele verte sufrir.
- Lo sé Hermione se que no me puedes querer, pero yo no puedo evitar hacerlo.
- Ahí están es la sangre sucia y la comadreja – Ron levanto a Hermione del suelo pero la chica no tenia ya fuerzas para seguir huyendo.
- Vamos Hermione.
- No puedo Ron déjame – pero ya era tarde, estaban rodeados por lo menos veinte mortigafos y entre ellos apareció Draco Malfoy.
- Estupidos como pensasteis que podíais llegar a escapar – rió mirándolos a los dos con las varitas apuntando a sus enemigos que los superaban en mucho.
- No pienses que nos vamos a rendir Malfoy.
- Tampoco me importa comadreja, vais a morir y yo estaré aquí para disfrutarlo – Harry miraba todo sin saber que hacer, no podía hacer nada, estaba indefenso viendo como sus amigos estaban atrapados – matarlos y que sufran – de las bocas de los mortigafos salieron una sola palabra crucio y de sus varitas rayos que se clavaron en Ron y Hermione, Harry corrió a abrazar a Hermione para protegerla con su cuerpo, pero los rayos pasaban a través de el.
- No - gritaba el chico – páralo, detén todo esto – le gritaba entre sus sollozos al anciano que miraba toda la escena apoyado en una pared – no permitas que ellos mueran, no dejes que la pierda, por favor noooooooo – su último grito se volvió en eco que se repetía una y otra vez, miro al suelo donde su amiga estaba y solo vio hierba, se levanto y vio al hombre parado junto a él.
- ¿Estas preparado para aprender Harry?
- ¿Qué demonios fue todo eso?
- Eso era lo que habría ocurrido si el que fue tu deseo se hubiese hecho realidad.
- ¿El que fue? – pregunto el chico aun con la respiración entrecortada por las sensaciones que había experimentado.
- ¿Cuál es tu mayor deseo ahora Harry? – el se quedo pensando en las palabras del anciano y lo pensó muy detenidamente antes de contestar.
- Proteger a los que quiero.
- Estas preparado para aprender.
-
-
Ya hacia casi tres meses que Harry había partido, Hermione disimulaba todos los días riendo ante todos pero en el fondo tenía el corazón roto.
- En serio Draco esta es una de la mejores cenas que he tomado nunca – dijo Hermione sentada en el sofá del salón de la mansión de Malfoy.
- Felicitare al cocinero de tu parte – contesto el orgulloso mientras apartaba el flequillo que tapaba los ojos de la chica y se le acercaba despacio.
- Señor Malfoy señor – interrumpió una voz chillona – lo siento señor pero tiene una visita.
- Esta bien Oby dile a quien sea que ahora mismo voy.
- Si señor Malfoy señor – después de una referencia desapareció con un plan el elfo delante de ellos.
- Discúlpame Hermione iré a ver quien es.
- Tranquilo no pasa nada – cuando el chico se fue ella miro detalladamente el salón, se acerco a las estanterías que había para poder contemplar los libros que en ella había estaba tan ensimismada que no se dio cuenta de que ya no estaba sola en la habitación y para cuando lo noto ya era demasiado tarde, alguien había tapado su boca y la había inmovilizado, no se podía soltar, vio en la estantería una figura, la cogio y golpeo con ella a su atacante esperando poder darle en la cabeza y así fue porque su agarre ceso, se dio la vuelta rápidamente y saco su varita – Expeliarmo – grito y su atacante salio volando hasta chocar contra la pared.
- Hermione – Draco entraba en ese momento en el salón con la varita en mano - ¿Estas bien? – miro a la chica y luego al cuerpo que estaba en el suelo –Hermione ¿Estas bien? –volvió a repetir cuando ella no le contesto, se acerco al cuerpo del hombre que estaba en el suelo – joder – grito y miro a la chica - mierda.
- ¿Qué… que pasa? – pregunto ella.
- Esta muerto – contesto el.
- ¿Que? No Draco no puede ser, estas confundido.
- Lo siento Hermione pero estoy más que seguro. Esta muerto.
- Dios mío no puede ser – ella se movía nerviosa – debemos avisar a alguien.
- No vamos a avisar a nadie, estas loca, te llevaran a Azkaban.
- No, no lo harán, les contaremos que ha ocurrido y no pasara nada.
- Hermione despierta – el se puso delante de ella y la sujeto por los hombros – el es un mortigafo y tu perteneces a la orden. En serio piensas que van a creer que lo mataste por accidente.
- Los de la orden me ayudaran.
- No lo harán. Se deben cubrir a ellos mismos, estamos solos en esto.
- ¿Qué vamos a hacer? – ella lloraba mientras sujetaba al chico por las solapas de la camisa.
- Todo saldrá bien, te lo prometo yo me encargare de todo. Oby – llamo y a los segundos el elfo apareció ante ellos – acompaña a la señorita a mi habitación – yo iré en unos minutos – le dijo mirándola – yo me ocupo de todo.
- ¿Cómo se llamaba?
- ¿Qué? – pregunto el sin comprender.
- El hombre al que yo… - señalaba al cuerpo y miro al chico - ¿Cuál era su nombre?
- Nood, Trent Nood. así se llamaba.
Llevaba como veinte minutos sentada en la cama del chico cuando el entre en la estancia con una copa en su mano.
- ¿Cómo estas? – le pregunto sentándose junto a ella.
- No lo sé, se supone que debería esta preparada para algo así, para eso me he entrenado, pero nunca había matado a nadie y me siento mal he arrebatado una vida.
- Es difícil. Toma – le dio la copa que la chica cogio y miro - es algo que te ayudara a calmarte – ella tomo todo el contenido de un sorbo.
- Es amargo.
- Si un poco. No te preocupes por nada, yo me he encargado de todo, nunca nadie lo sabrá, será nuestro secreto.
- Supongo que debo darte las gracias – se sentía extraña como si su cuerpo flotara.
- No tienes nada que agradecerme – el la beso en la frente y luego suavemente en los labios – yo estoy aquí para ti – la fue tumbando despacio en la cama mientras continuaba besándola y ella se dejo hacer, no tenia fuerzas para decirle que no a aquellos besos que sabían tan amargos, como la sustancia que había tomado. Sus sentidos parecían dormirse y su mente cada vez estaba más adormecida.
La luz del sol le daba en el rostro y se forzó a abrir los ojos, miro la habitación en la que se encontraban y no la reconoció a simple vista, se giro en la cama par encontrarse con el rostro sereno y dormido de Malfoy junto a ella, miro debajo de las sabanas y ahogo un grito al poder comprobar que estaban los dos desnudos. Salio de la cama sin hacer ruido para no despertar al rubio, se vistió y salio por la chimenea lo más deprisa que pudo apareció en su casa.
- Hermione – grito Ron - ¿Estas bien? ¿Dónde has pasado toda la noche? Me tenias muy preocupado.
- Ron por favor – suspiro ella – eres mi amigo ¿Verdad? – el asintió – pues como amigo mío que eres, solamente ven a abrazarme y no me hagas preguntas te lo ruego – y eso fue justo lo que hizo la rodeo con sus brazos y las reconforto.
- Sabes que cuando quieras hablar estaré aquí para ti.
- Lo sé Ron, pero no te preocupes, solo he tenido una mala noche y estoy muy cansada, no te preocupes por nada estoy bien – dijo ella mientras escondía sus ojos para que su amigo no pudiera ver la mentira en ellos.
Alyssa Kraft: Pues si no te gusta la relación de Draco con Hermione no creo que te haya gustado este capitulo, que conste que a mi tampoco me gusta… pero todo tiene su porque.
Ahora mismo no me acuerdo de quien es la canción de los pensamientos de Harry, pero en cuanto me acuerdo te lo haré saber, gracias por tu mensaje.
Nelly Esp: No te habrá gustado mucho el capitulo, porque la relación de Malfoy y Hermione ha cambiado algo… La marcha de Harry es para que los dos se den cuenta de que se necesitan, espero que me sigas leyendo, un besito.
ZzzDe verdad tu nombre me encanta. Espero que este capitulo también te guste y tranquil que Harry volverá pronto.
