Hola a todos! Perdon por la tardanza en serio, pero es que he estado un tanto ocupada con las teras, examenes y eso, aparte de que no he tenido mucha inspiración ultimamente que digamos, pero en fin, intentare continuar con la história lo más pronto posible. Sin más que decir... que lo disfruten! n.n

Naruto no me pertenece, bla, bla, bla, ya saben todo eso jeje.

Lost Heaben

1.En las sombras

4 siglos después...

Sakura POV´s

Es un poco aburrido en verdad. La joven guía que va al frente de nuestro grupo no para de hablar y de hablar, no digo que sea algo malo, es sólo que todo eso ya lo había escuchado. La historia de éste lugar, el castillo del conde Ventrue, es algo que la mayor parte de los estudiantes de universidad ya conocen, puesto que por el pueblo corren leyendas acerca de éste. Extrañamente el castillo no está abierto al público, si no para los historiadores, y raras veces dan recorridos para los turistas y estudiantes, por lo que hemos tomado la oportunidad para conocerlo por dentro.

Es un lugar lúgubre, pero hermoso. Los pasillos son iluminados con antorchas para dar la sensación de estar en los tiempos del siglo XVII. Bajamos por unas escaleras en forma de caracol hasta llegar a los calabozos del éste magnifico lugar. Cadenas, objetos de tortura, incluso sangre coagulada de hace siglos manchaba las paredes de algunas celdas. Sentí como mi estomago daba un vuelco y lleve mi mano derecha a mi boca, intentando contener un poco el asco que me daba imaginarme a personas siendo torturadas y desangradas hasta la muerte. Mientras, la guía seguía hablando.

- Estos son los calabozos donde el conde mandaba encerrar y torturar a aquellos que intentaban asesinarlo. Hasta el momento se desconocen las razones por las cuales los presos intentaban matar al conde, ya que durante varios años del reinado de Ventrue, nunca se había presentado incidentes como esos. Cuentan que en este lugar hay diversos pasadizos secretos, en los cuales el conde se escondía cuando había un ataque o una guerra; desafortunadamente el rumor sobre la existencia de esos pasadizos se ha desecho, debido a que las autoridades e historiadores del lugar nunca han conseguido encontrarlos. – valla, al fin algo que no sabía. – Si pueden ser tan amables de seguirme por favor. – todos comenzaron a caminar detrás de la joven, pero algo me detuvo, algo que causó que un escalofría recorriera mi espalda. Me giré para buscar la causa de ésta sensación tan extraña. Pase mi mirada a través de las celdas y de los pasillos. Algo o alguien me miraba, lo podía sentir, unos ojos clavados en mi. El temor estaba recorriendo mi cuerpo, la desesperación se apoderaba de mí, quería moverme mas mis piernas no respondían. Una mano se posó en mi hombro. ¡DIOS MÍO!

- ¿Sucede algo mi lady? – una voz seductora susurra a mi oído, provocando que me girar y pegara un grito.

- ¡AAAAAAAAAAHHHH! – el hombre que ahora se encontraba frente a mi me mira con ojos de sorpresa. Gracias a Dios, es solo un guardia del lugar. – Por el amor de Dios, me ha pegado un enorme susto. – comienzo a respirar entrecortadamente a causa del espanto. El hombre sonríe y me mira. Hasta ahora lo noto, no es tan viejo, deberá tener la misma edad que yo o un poco más, al menos unos 23 años.

- Lo siento, no fue mi intención.- se disculpa.

- No lo he visto venir. –

- Es solo que soy un tanto escurridizo. Debería seguir a los del grupo o si no se perderá. Este castillo es bastante amplio y podría perderse; y créame… - se acerca un poco más a mi, provocando en mi el nerviosismo. - … no le gustaría nada. –

- ¿Por qué lo dice? – me intriga.

- La gente habla, las paredes callan, las sombras se apoderan del lugar dando paso a cosas que la gente no debería ver…ni recordar. –

- ¿Qué clase de cosas? – puede que la respuesta no me agrade mucho, pero siento la terrible necesidad de saberlo.

- ¿Cree en el diablo, mi lady? – la pregunta me sorprende ¿pero qué clase de persona es este hombre?

- No. – siento como un nudo va formándose poco a poco en mi garganta.

- Debería, ya que en este lugar es donde habitan sus hijos. –

- ¿De qué me está hablando? – tengo que admitirlo, esto comienza a asustarme. - ¿Me esta diciendo que éste lugar esta habitado por demonios? –

- No tanto como demonios, si no como otros seres. Seres que buscan la inmortalidad y que la consiguen entregándose a los brazos del pecado, a los brazos de la eterna oscuridad. – se da la vuelta y comienza a caminar, alejándose de mí. – Debería de irse ya, el grupo la deja. – miró por mis espaldas para darme cuenta que es verdad, el grupo ya se había ido. Vuelvo a posar mi mirada en aquél guardia pero…se había ido, que raro, juraría que no había dado ni 5 pasos cuando dejé de mirarlo, ahora habían desaparecido, como si las sombras lo hubieran absorbido. Por mi mente retumban las palabras de aquél hombre ¿A qué se refería con eso de los seres? Mejor lo dejo a un lado y busco a los demás, por alguna extraña razón las palabras del guardia había despertado temor en mí. Corro y subo unas escaleras, a medida que avanzaba por aquél lúgubre podía sentir como alguien me miraba, acelero el paso y al doblar una esquina siento que choco contra alguien. Caigo al suelo.

- ¡Ouch! – en verdad que dolió. Miro a la persona con la cual había tropezado y puedo sentir un enorme alivio recorriendo mi ser, es Hinata, mi mejor amiga del instituto.

- Sakura ¿Estas bien¿Dónde estabas? Comencé a preocuparme. – sus blancos ojos reflejan preocupación. Es una joven alta, de un cuerpo atlético y de cabellera azulada. La conozco desde que íbamos al jardín de niños y desde entonces somos inseparables. Aunque hay veces en las que discutimos no dejamos que eso nos separe, en cambio, nos une más. Es una chica madura y un tanto tímida, a pesar de eso, siempre ha intentado ser valiente ante cualquier situación y analizar todo, encontrándole el lado lógico a las cosas. En cambio yo, soñadora, un tanto alocada y distraída, de vez en cuando torpe pero atrevida. Ambas casi diferentes, pero eso nunca ha sido un obstáculo para nuestra amistad.

- Gracias a Dios que te encuentro. – me pongo de pié y la abrazo.

- ¿Sucede algo malo Sakura? – me alejo un poco y la miro, sonrió y niego con la cabeza. - Volvamos con el resto del grupo, seguro y nos están esperando. –

- Si. – comienza a caminar, y antes de seguirla, doy un último vistazo al corredor que hay a mis espaldas, esperando, por alguna extraña razón, a que el joven guardia apareciera, pero nunca lo hizo, así que continué caminando al lado de mi amiga.

Alcanzamos al grupo y la guía nos sanciona por avernos separado. Permiso disculpas y continuamos con el recorrido. Llegamos a un salón. Las ventanas cubiertas con cortinas de un color tinto, cuadros en cada pared y enormes candelabros en el techo. Algo llama mi atención. Es un cuadro bastante viejo. La figura de un joven bastante apuesto de cabello negro, mirada oscura y afilada, sentado en una enorme silla de oro y vestido con una larga y negra túnica adornada con hilos dorados, estaba plasmada en ese lienzo.

- ¿Quién es el de ésta pintura? – pregunto a la joven guía, quien de inmediato se dirige hacia a mi.

- Éste es el conde Ventrue, es el único retrato que se posee de él. –

- Es bastante joven. ¿No lo cree? – pregunto.

- Lo mismo dicen todos. Nunca se supo a que edad murió, ni en donde se ha enterrado el cuerpo. No se tienen muchos datos acerca de él. Los historiadores han cavado e investigado el lugar en busca de pruebas acerca de la vida del conde, pero nunca encontraron nada, hasta la fecha siguen con las investigaciones, pero no se encuentra ningún dato. Se cree que algún pueblerino de aquellos tiempos logró asesinarlo y que escondió el cuerpo en el bosque. –

- ¿Es cierto que éste lugar esta embrujado o algo así? – quería poner a prueba los datos que me había dado aquél guardia.

- Esas son solo leyendas que se han ido contado de generación en generación, acerca de seres demoníacos que chupan sangre, pero como ya lo he dicho, son solo leyendas, no hay ninguna prueba de la existencia de esos seres. – se aleja de mi lado para dirigirse al resto del grupo, pero yo me quedo en el mismo lugar, observando cada detalle del rostro de aquél conde. Por alguna extraña razón se me hace conocido. Repentinamente la imagen de aquél misterioso guardia viene a mi mente. No puede ser. Ahora que lo pienso detenidamente, el conde y aquél joven son exactamente iguales. No, es completamente imposible, ya han pasado cerca de 4 siglos desde su existencia, y si hubiera una probabilidad de que aun existiera seria tan solo un saco de huesos. Pero… son iguales, el rostro, la mirada, el cabello. Cierro los ojos y sacudo la cabeza para dejar de pensar en eso.

- Es completamente imposible. – sin darme cuenta he pensado en voz alta e Hinata me ha escuchado.

- ¿Qué es completamente imposible? – demonios, a ella no le puedo mentir, es mi mejor amiga y hemos jurado nunca escondernos nada. Me muerdo el labio inferior en señal de duda. - ¿Sakura? –

- Hay algo que debo decirte Hinata. –

End of Sakura POV´s

000000000000000000000000000

- ¡Malditos humanos¿Por qué demonios no podemos atacarlos y así evitar que vuelvan a nuestro hogar? – la voz del joven retumbaba por el lugar. Un grupo de personas estaban reunidas alrededor de una mesa. Algunos hablaban a favor del chico y otro tan sólo negaban con la cabeza.

- Tranquilo Gaara, sabes perfectamente la razón por la cual no lo hacemos. – un joven de mirada roja hablaba desde un extremo de la mesa, sentado en algunos cojines y con barias mujeres a su alrededor.

- "Para evitar nuevos conflictos" – dijo de manera molesta el pelirrojo. – Por supuesto que lo se Itachi, es sólo que me muero de hambre y ahí arriba hay docenas de estúpidos que no saben de nuestra existencia. Seria muy sencillo escabullirnos entre ellos y traer a un par a éste lugar para alimentarnos. –

- Y divertirnos. – opinó uno, provocando la risa de los demás, los cuales asintieron animados.

- ¿Lo ves Itachi? Todo el mundo está de acuerdo. No se por que te opones. –

- Lo hago para evitar nuestra extinción. Si se enteran de que existimos puede que nos persigan nuevamente y puedo asegurarles que de esta no saldríamos, cada ves somos menos y la raza humana se ha extendido cada vez más, tanto ellos como su tecnología a avanzado y mejorado con rapidez, no tendríamos ninguna oportunidad si luchamos contra ellos. Es mejor quedarnos aquí.-

- ¿Durante cuanto tiempo más¿Toda la eternidad? Vamos Itachi, no seas egoísta, sabes que tenemos que divertirnos, alimentarnos; estoy arto de la sangre de animales, quiero nueva sangre, más fresca, más viva y no hay mejor elección que la de los humanos. Los hemos atacado con anterioridad y los tontos inventaron rumores estúpidos acerca de alienígenas y monstruos, no creo que salgan de eso si lo volvemos a hacer. – la mirada de Gaara era desafiante. Itachi suspiro resignado de hacer cambiar de opinión a su compañero. Miró a su alrededor. Sus hermanos, sus amigos…su familia. Parecía que todos deseaban lo mismo. No había elección. Miro al pelirrojo y sonrió.

- Sólo por las noches, no quiero que traigan a ninguno a éste lugar y si lo hacen, les puedo asegurar que se arrepentirán. No podemos dejar rastro de nuestra existencia ahí arriba. Si toman a una, desgárrenle la garganta. No habrá manera de que nos descubran. – Todos gritaron de manera victoriosa.

- Ha sido una de las mejores elecciones que has hecho Itachi. –

- Y espero no arrepentirme Gaara. –

La puerta del lugar se abrió dando paso a un joven bastante atractivo y de mirada tan negra como la noche.

- Hola hermanito. ¿Dónde te habías metido? – le saludó Itachi desde su asiento, mientras que las mujeres le besaban el cuello y acariciaban su pecho.

- Tan sólo paseaba por los calabozos, aun no saben nada de éstos pasadizos secretos. En verdad que son estúpidos. – contestó Sasuke, sentándose al lado de su hermano.

- ¿Te han visto? –

- Sólo una joven, pero no fue nada del otro mundo. – su respuesta hizo que Itachi arqueara una ceja y lo mirara des aprobatoriamente.

- Sabes bien que no debemos dejar que nos vean. -

- Descuida, iba disfrazado como guardia, aparte no hay mucha diferencia entre nuestra apariencia y la de ellos. –

- Espero que así sea. - la conversación terminó e Itachi continuó jugueteando con las mujeres que tenía a su lado. Sasuke frunció el ceño y salió del lugar para dirigirse a su habitación. Abrió la puerta del cuarto y pudo ver como una joven estaba acostada sobre su cama, con la blusa semiabierta, dejando ver parte de sus atributos. Se encontraba en una posición bastante atrevida, dándole entender al joven Uchiha lo que quería.

- ¿Qué demonios haces aquí Ino? – el joven pasa al lado de la cama, en donde se encontraba una joven bastante atractiva, rubia y de ojos tan azules como el mar. Se dirigió hacia la mesa que estaba en la esquina de la habitación y dejó la chaqueta sobre la silla.

- Sabes bien lo que hago aquí Sasuke. – la rubia se levantó de la cama y caminó hasta posarse frente al joven, quien se encontraba sentado en la silla, quitándose los zapatos. – Se que me deseas cariño. ¿Por qué no lo aceptas?- se sentó sobre las piernas del Uchiha, rodeando el cuello de éste con sus brazos y comenzando a besarlo de una manera incitadora y apasionante. El joven pareció corresponder aquél beso durante unos momentos, no lo podía evitar, sus instintos no lo dejaban. Comenzó a acariciar las curvas de la rubia, mientras que ésta revolvía el oscuro cabello del joven. Repentinamente el Uchiha se levantó de su asiento tan rápidamente haciendo que Ino cayera al suelo, soltando un pequeño grito de dolor.

- Sal de aquí Ino. – Sasuke se dirigió a la puerta y la abrió, dándole a entender a la rubia que era momento de marcharse. La joven bufó y se levanto del suelo, caminó hasta la puerta en donde se detuvo un momento para mirar a Sasuke.

- Algún día caerás Uchiha, eres un vampiro, no lo podrás evitar. – acarició, a través de la playera, el tan bien formado pecho del joven.

- Sal. – repitió. Ino lo miró enfadada y salió del lugar. Sasuke cerró la puerta tras de ella y se acostó en la cama. No habían pasado ni 2 minutos desde que Ino se había marchado cuando alguien llamó a la puerta.

- ¿Quién? – contestó el Uchiha. La puerta se abrió con un leve chirrido, dando paso a un joven rubio. – Ah, eres tú Naruto. ¿Qué sucede? – se incorporó y se sentó en el borde de la cama.

- Hey Sasuke, buenas noticias, Itachi ha dado autorización para que salgamos esta noche a divertirnos. ¿Quieres venir? – el rubio sonaba bastante animado. Él era la clase de chico al que le encantaba salir por las noches a divertirse con los humanos, no teniendo relaciones con ellos o cualquier cosa por el estilo, si no charlar, como si fuera uno más de ellos, dejando a un lado su vida inmortal y volviendo al pasado, en la época en la cual éramos simples mortales. Curioso. Parecería que no le agradara mucho la idea de ser inmortal y sobretodo estar encerrado en éste castillo como un animal salvaje en una jaula.

- No lo se, no tengo muchas ganas de salir. –

- Oh vamos Sasuke, hace años que no tenemos una oportunidad así, podemos salir a divertirnos y mezclarnos con los humanos. No seas aburrido. – lo miraba suplicante. Como un pequeño niño que miraba a su madre para que lo llevara a un parque a jugar. Sasuke suspiró resignado.

- De acuerdo ¿A qué hora nos vemos? – Naruto dio un grito de victoria.

- A las ocho, en el claro del bosque. –

- Ahí nos vemos entonces. – El rubio asintió y salió del lugar. Podía ser que esa noche fiera divertida.

0000000000000000000000

- ¿Me estas diciendo que era un fantasma? – la voz de Hinata sonaba un tanto asustada. La declaración que su amiga le acababa de hacer la había dejado helada, no podía imaginarse al fantasma de un conde vagando por el castillo vestido de un guardia. Era algo imposible.

- No, no era un fantasma, era real, yo lo se. Podía sentir su respiración y las antorchas provocaban que su sombra se reflejara en el piso. Aparte… - Sakura se detuvo un momento, estaba asimilando cada palabra que le había dicho aquél joven acerca de las criaturas. Por laguna extraña y misteriosa razón, todas aquellas cosas que le había dicho parecían verdad, aunque era prácticamente imposible, no existían criaturas así. - …eran tan parecidos, el joven y el conde.

- ¿No crees que haya sido tan sólo una coincidencia? En el mundo puede haber personas que se parezcan a otras que ya han muerto. –

- ¿Enserio? – Hinata sólo se encogió de hombros. Valla que era una situación de lo más rara.

- No me digas que te creíste todas esas patrañas de seres sobrenaturales… ¿verdad? –

- Pues sonaba muy convincente. – se encontraban fuera del castillo. Sakura miró nuevamente la construcción. Magnífica. Era un hermoso castillo, no lograba imaginarse que en ese lugar llegaran a habitar seres diabólicos, como los que le dijo aquél joven guardia. Suspiró. Era mejor olvidarse de todo aquello y seguir con su vida, no tenía por qué estarse preocupando sobre cosas que resultarían ser mentira. Miró a Hinata y le sonrió. – Creo que es mejor que volvamos, estoy algo cansada y debo de terminar unas cuantas tareas. – Hinata asintió y subieron al auto de la pelirosa.

Una vez que Sakura hubo dejado a su amiga en su casa, se dirigió a su apartamento para terminar los deberes, pero no lograba concentrarse en el libro de matemáticas que tenía frente sus ojos, los sucesos de aquella tarde la habían dejado consternada y no podía dejar de pensar en el guardia y su enorme parecido con el conde. "Estas loca, Sakura, puede que sea como Hinata dijo, solo una coincidencia." Se dijo a sí misma. El estómago comenzó a gruñirle y creyó que era tiempo de ir a comer algo, necesitaría fuerzas para esa noche. Se encaminó hacia la pequeña cocina y hurgó en el refrigerador, en busca de algo que le pudiera servir…vacío. "Demonios, tendré que salir a la tienda". Buscó su abrigo y salió del lugar…

000000000000000000000

Sasuke POV´s

- ¡Por fin! – Naruto baila de alegría.

Nos encontramos en las afueras del castillo, la oscuridad ha inundado la ciudad, dándonos la oportunidad de salir y divertirnos. Los muchachos se encuentran bastante entusiasmados y hablan acerca de lo que piensan hacer con las chicas que encontrarán, obvio, sólo quieren placer. Vamos vestidos con ropa oscura y gabardinas, para así poder identificarnos con facilidad.

No tengo la más mínima idea de que podré hacer mientras esté fuera del castillo. El sexo no me llama mucho la atención, pero se que en mi interior, en un recóndito lugar de mi alma, es lo que quiero. Hace siglos que no he poseído a una mujer, y pienso seguir así, no quiero ser como los demás del clan, quiero encontrar mi propia manera de vivir, si es que a esto se le llama estar vivo.

- Vamos Sasuke, es hora de divertirnos. – Gaara me da un pequeño golpe en el hombro, dándome ánimos para seguirlos, le dedico una sonrisa falsa y camino tras de ellos. La luna ha comenzado a asomarse a través de las oscuras nubes del cuelo nocturno, dándole un toque misterioso a la noche.

Llegamos a las oscuras calles de la ciudad, iluminadas por las luces de los antros y algunos faroles.

Vagos, jóvenes y prostitutas pasean por la acera. Éstas son las criaturas de la noche que vagan todos los días por la ciudad. Veo como mis compañeros les sonríen a unas cuantas jóvenes que están haciendo fila para entrar a una de las discotecas, las chicas los miran seductoramente y ellos las siguen. Idiotas, en verdad que no pueden esperar a nada. Naruto me mira.

- ¿Qué sucede? – le pregunto secamente, creo que puede notar claramente mi inconformidad l estar en éste lugar.

- ¿No vas a entrar? – me pregunta, como si fuera lo mas obvio en el mundo.

- ¿Para qué? Si tengo la oportunidad de salir de esa ratonera prefiero aprovechar el tiempo en cosas de utilidad. Entra si quieres, yo caminare un poco más. – paso por su lado y sigo de largo.

- ¿Acaso no piensas divertirte? Vamos Sasuke, hace siglos que no tocas a una mujer, nuestro cuerpo nos lo pide, es algo natural, algo que no se lo puedes negar. – me giro sobre mis pasos y veo a Naruto. Es raro verlo actuar de esa manera, pero como lo ha dicho, nuestro cuerpo lo desea. Si que es persistente, pero es verdad. Siento la terrible necesidad de poseer a una mujer, aun que no lo quiera admitir. Suspiro. No se que hacer y la mirada del rubio me da a entender que quiere una respuesta.

- Solo un momento. – sonríe. Puede que me llegue a arrepentir, quiero seguir otro camino, pero al parecer no será posible.

Entramos al lugar. La música es estruendosa y lleva un ritmo electrónico con algo de heavy, cientos de personas se encuentra bailando en la pista y sobre unas mesas. Las luces se tornan de diferentes colores y las maquinas de humo disparan aquél gas en el que las personas desaparecen durante un momento, como fantasmas a través de las paredes. Veo como una chica me mira picadamente y con un dedo me llama a su encuentro. Parece que mi cuerpo se mueve por si solo e instintivamente me acerco a ella, la cual ya está acostada sobre una de las mesas, moviéndose a un ritmo sensual, y mordiéndose el labio inferior. Dios, en que situaciones son en las que me vengo a meter. En verdad que es incitador. Gracias a nuestra naturaleza, las sensaciones en nosotros son cien veces más fuertes que en los humanos, es por eso que no podemos resistirnos a la oportunidad de sentir placer.

Se acerca lentamente a mi odio y muerde suavemente el ovulo, me estremezco.

- ¿Te quieres divertir? – su vos ha sido la chispa. Tan atrayente, tan sensual. La tomo por la nuca y comienzo a besarla, lento, más rápido, apasionado. Las lenguas bailan, buscando a la otra. Me separo un momento y me siento en uno de los sillones del lugar. No puedo creer que me deje llevar tan rápidamente. Es simplemente irresistible, y eso, cualquier vampiro lo sabe. Se sienta sobre mí. Su cuello, Dios, creo que estallaré, no podré contenerme más. Vuelvo a besarla con la misma intensidad, pasando mis manos por aquella delgada figura, extraña. Acabo de verla, ni siquiera se su nombre y me encuentro bajo su cuerpo, llenándome de excitación y placer. Bajo mis labios a su cuello, abriendo un poco la boca. Tengo sed, la quiero, la deseo…sangre. Poco a poco voy mostrando mis colmillos, aquella prueba de que no soy humano y atravieso su piel, escucho como gime de dolor. ¡Demonios¿Qué estoy haciendo? Estoy bebiendo de ella, en un lugar en el que las personas pueden ver. Reacciono. Me separo rápidamente de ella y me levanto tan repentinamente de mi asiento que la chica cae al suelo un poco mareada.

- ¿Qué demonios piensas que estás haciendo?- Miro a mi alrededor, esto no está bien, varias personas se encuentran mirando. – ¡Me has mordido idiota! – se levanta hecha una fiera y me empuja, haciendo que caiga. Maldita zorra. Me levanto, vera de lo que soy capas. La ira se apodera de mí y estoy a punto de abalanzarme sobre ella, pero siento como unas manos me detienen.

- Cálmate Sasuke, este no es lugar para eso. – miró a quien me detuvo. Naruto. Debía suponerlo. Respiro entrecortadamente, gracias a la aceleración de la sangre. Miro nuevamente a la chica que me observa aterrada. Genial, puede que ahora esté en problemas. Me alejo de Naruto y salgo corriendo del lugar. Espero que no me siga, no deseo escuchar sermones en estos momentos. Estuve a punto de beber hasta la última gota de sangre de aquella chica, en pleno público, pendiéndonos a todos en peligro. Me siento tonto. Miro sobre mi hombro para verificar que nadie me siga. Efectivamente. Estoy solo. Me detengo en un callejón y me apoyo contra la pared. Cierro los ojos pensado en lo sucedido. Ahora si que la he cagado. Itachi me matará si se entera de esto.

- Vamos jovencita, ven con nosotros, será divertido. –

- ¡Suéltenme¡Alguien que me ayude! – los gritos de una joven retumban en mis oídos, observo hacia el fondo del callejón y puedo ver cómo dos tipos tienen arrinconada a una chica. Parece que está llorando. En su rostro se nota la desesperación de estar en esa situación. No se por qué, pero corro hasta ellos.

- Ayúdame por favor. – me implora la joven, las sombras no me dejan ver con claridad su rostro, ni el de sus atacantes.

- Vete de aquí chico, si es que no quieres salir herido. – veo el brillo del filo de las navajas que acaban de salir de sus chaquetas.

- No lo creo. – digo seriamente. En lo personal, no creo que me puedan hacer demasiado daño con eso.

- ¿Con que andas de valiente, eh? – se ríen estúpidamente. Idiotas, no saben a lo que se enfrentan. Uno se abalanza hacia mí con la navaja en alto e intentando darme en el pecho, pero me logro hacer hacia un lado y tomó la mano con la que sostiene el objeto, la aprieto lentamente y escucho sus gritos de dolor.

- Bastardo. – el segundo sujeto corre hacia mí e intenta darme en el rostro. Suelto la mano del otro tipo y me alejo del golpe. Nuevamente intenta atacarme, me retiro y le propino un fuerte golpe en el estómago, haciendo que el aíre de sus pulmones saliera, sofocándolo. Cae al suelo. Tontos. Río para mis adentros. Busco con la mirada a aquella chica a la que atacaban, me acerco lentamente a ella y puedo notar como se aleja un poco, con miedo. Repentinamente, siento un dolor agudo en el costado derecho, miro el lugar. Maldición, estoy sangrando. Uno de los sujetos me ha clavado el filo de la navaja. Me giro y lo golpeo en el rostro dejándolo inconciente. El dolor es cada vez más agudo, y la sangre no deja de salir de aquella herida.

- Demonios. – susurro y con mi mano aprieto el lugar donde se encuentra la herida. Caigo al suelo.

- Dios mío. ¿Te encuentras bien? – la joven se ha hincado a mi lado. Intenta tocarme pero yo me alejo, no quiero sentirla.

- Aléjate. – le espeto.

- Por favor déjame ayudarte. Dios, estas perdiendo demasiada sangre. – Intenta tocarme de nuevo.

- ¡Que te alejes! – el esfuerzo provocado por el grito hace que la herida me duela más. Demonios. Si sigo asó es probable que me desangre en éste preciso lugar.

A pesar de mis reclamos la joven me toma del brazo y me ayuda a levantarme.

- ¿Qué cree que está haciendo? – mi voz cada ves es mas débil. Esto esta mal.

- Intentando salvar su vida. – su vos es decidida. Sin otro remedio, dejo que me ayude. Caminamos unos cuantos minutos a través de las oscuras calles y al fin llegamos frente a un edificio de departamentos.

- ¿Qué es éste lugar? – necesito sangre y la necesito ya, si no, puede que muera.

- Mi departamento. Será mejor llevarte dentro y curar la herida. – No digo nada, dejo que me guíe por los pasillos y las escaleras hasta llegar frente a una puerta con el número "8" gravado en ella. Veo que saca una llave y abre la puerta. Entramos lentamente y me posa sobre el sofá de la pequeña sala. – Enseguida vuelvo, voy por los medicamentos. – sale del lugar y veo como se mete al baño. Cielos, si no salgo de ese lugar puede que no me resista a la tentación de beber de ella.

Sale del cuarto y prende la luz de la sala, al acercarse a mí y fijar su mirada en mi rostro veo cómo se queda helada, pasmada, dejando caer el botiquín de primeros auxilios. La sorpresa se apodera de mí. No puede ser. Es la misma joven del castillo…

Continuará...

000000000000000000000

Q tal? Pésimo? Bueno? Da igaul? Espero que me pongan sus comentarios por favor y agradesco a todos los que me mandaron reviews, sin ellos esta historia no continaría en pie!

Gaby Uchiha: Hola! Muchas gracias por tus alagos, me vas a hacer sonrojar jeje. Espero que éste capitulo tambien te haya gustado y como puedes observar, lo más seguro es que si valla a haber lemon, ya que en lo que gira al rededor de los vmpiros no puede faltar jeje. Aun no decido bien que pasará con Sakura, su destino es incierto muajajajajaja. OK, ok ya, nos vemos luego!

DARKOKENSHIN: Colega! te agradesco tanto por tus animos, me alegra que te haya gustado, esoty haciendo lo posible por intentar actualizar pronto, pero ps algunos trabajillos por ahí y la falta de inspiración jeje, espero que éste capitulo tambien te haya agrdado, nos vemos colega!

yukinochibi: Jimena! me alegra que te guste, espero que éste capitulo tambien lo haya hecho, nos vemos los viernes! ciao!

dunachan: Me alegra mucho que te guste, espero que éste capitulo tambien lo haya hecho.

be: Que bueno que te guste n.n. Ps si, abrá romance, pero creo que un poco más adelante ya que aun no tengo muchas parejas planeads jeje y con forme valla atranscurriendo la historia las ire formando. No creo que valla a ser como underworld, lamento decepcionarte u.u, ya que sólo tengo planeado poner vampiros y no hombres lobo o cualquier otro ser sobrenatural jeje, pesro espero q sigas leyendo y me des tu opinión n.n nos vemos!

amalia jimenez: Mmmmm...ps para serte sincera, nunk he visto una historia que separesac, pero no dudo de que haya alguns que tambien sean de vampiros, enserio lamento el aberte hecho pensar que he plajeado partes de alguna otra historia, pero te agradesco tu comentario, gracias n.n

Bueno, eso es todo por el momento, intentare actualizar pronto. ciao!