Muy bien, aquí estamos con otro cap del fic. Nuevo Arco, nuevas aventuras. Como ya dije antes, este será un arco 100% original, porque necesito cubrir cosas que son necesarias para lo que se viene y es imposible que lo haga sin esto. DIgamos que esta es una idea que he tenido hace tiempo y el momento para poder hacerlo.

Me siento confiado en lo que veremos esta vez. Además que me gusta como he llevado las cosas. Pueden tomar este arco casi como una película de un anime, solo que sigue la continuidad de la historia... Ver Saint Seiya y su película de los guerreros escarlata... Infancia.

El OP y ED fueron hechos por Ryucader, como siempre. Gracias de nuevo amigo. Sin más que decir, nuevo arco iniciando.


Sekiryuutei Supremo Ascension

Arco 3: The Tempress Feelings and The Machinator Past

Capítulo 35: Vida tras el Caos

Insertar canción: FAITH – MADKID (TV edit.)

Now or Never…

Al iniciar las letras de la canción, se ve un gran orbe de luz.

Just fight it out… (X4)

Para que suene la música de fondo y se muestre a Issei que daba un salto hacia atrás mientras se pone en una pose de lucha para que a su lado se encuentre Vali quien se acercaba para ayudarlo mientras que ambos ven a una desconocida mujer que se acerca a ellos, pero notan que tres sombras emergen de las pisadas que deja en suelo y se alzan al cielo para que se unen en una luz negra mientras que lucha con una luz blanca y otra luz roja con una plateada se unen para luchar entre sí y muestran el título de la historia por unos segundos para que la pantalla se muestren diversos destellos y se alejen de la cámara como si fuera un cielo nocturno estrellado.

Night sky reflects my eyes

(El cielo nocturno se refleja en mis ojos)

Para que se muestre a Issei quien estaba sentado momentáneamente mientras que se levanta y se coloca una chaqueta para empezar a caminar hacia donde se encuentran sus conocidos que lo esperan.

Hikaru hoshi te wo nobashi

(Buscando las brillantes estrellas)

Pero los presentes ven como el Sekiryuutei se detiene por unos instantes para ver de nueva cuenta el cielo nocturno que se queda en la pantalla enfocándolo y se cambia la escena bajo ese mismo cielo.

Semaru jikan de nijinde iku mirai

(Y el tiempo corre y sangra hacia el futuro)

Y se muestra a Vali Lucifer quien veía en una especie de barranco el mismo cielo que Issei veía.

But I want to be honest with myself

(Pero quiero ser honesto conmigo mismo)

Para que se vea que el joven de cabellos plateados tenía el puño apretado mientras que parte de su grupo se acerca hasta donde se encuentra.

Come clean kazamuki (ah?)

(Confesando a la dirección del viento [¿Ah?])

Pero repentinamente se alarman ya que el cielo se vuelve un tanto rojizo en donde estaban el Hakoryuukou y su grupo quienes van hacia otro lugar.

Kaete tsukuru scene

(Cambiando y creando una escena)

Al igual en donde se encontraban Issei y sus conocidos quienes se alarman al ver que una persona se aparece en frente de ellos emanando un gran poder.

Keep it real ikita akashi (ah?)

(Mantenlo real, es la prueba que vives [¿Ah?])

Siendo Afrodita que con solo mover su mano hace una gran onda de poder…

Nokosu masterpiece

(Dejando una obra maestra)

Y todos los presentes caen con la presión de la Diosa que iba al ataque ante ellos sin notar que un aura oscura emanando de ella se hacía más fuerte para que camine hacia donde se encuentra Issei.

Everybody betray me. No furete kureta kimi no yubi

(Todos me traicionan. No, tu dedo me ha llegado a tocar)

Mientras que Afrodita mostraba una gentil, pero oscura sonrisa, emana un orbe de energía para eliminar a Issei, pero desaparece al ver que Vali había llegado a tiempo haciendo que ese ataque de la Diosa se cancele.

Everything betray me. That's not it asetemo yuruganai

(Todo me traiciona. No lo es, incluso si desaparece no se desvanecerá)

Para que Afrodita vea enojada como el Hakoryuukou ayuda al Sekiryuutei previo a luchar haciendo que la Diosa emane una gran cantidad de energía oscura para atacar a los dos Dragones Celestiales, pero repentinamente recibe un ataque mágico para que la cámara vea a Rias y Twilight que tenían sus brazos a la altura de sus hombros siendo ellas que hicieron la ofensiva para que Ayane, Irina y Xenovia vayan a atacar a la Diosa.

Nanbyakkai datte nanbyakumankai datte

(Cientos y cientos, incluso miles de veces)

Mientras que la Diosa se defiende de los ataques hecho por las dos portadoras de espadas celestiales y la chica ninja, repentinamente se aparecen Kuroka y Koneko.

Kizu kasanetemo yuzurenai my faith

(No importa cuánto me lastime, no renunciaré mi fe)

Quien trata de golpear a Afrodita, quien se defiende por su poder, pero siente que sus piernas se congelan para ver a la distancia que Sona, Le Fay y Pinkie que hicieron ese ataque.

Sonzai no shoumei itsudatte myself

(Prueba que existo, siempre siendo yo mismo)

Y se nota se ve ahora que Yuuto, Arthur, Bikou, Rainbow, Tsubaki y Rarity están luchando, pero ven que varios monstruos van hacia donde se encuentran Fluttershy y Asia.

I gotta make a change (make a change yeah)

Para que los monstruos se congelen al frente de ellas mientras que Gasper active su Sacred Gear para que Aj, Katase y Murayama borren del mapa una parte y la otra siendo bombardeadas por magia entre Akeno y Rosswiesse.

Yuganda sekai de ashiato tadotte

(En este mundo distorsionado, siguiendo las huellas)

Para que se cambie la escena y se muestren a Bikou junto con Esdeath y Teppo viendo lo que ocurre mientras eliminaban seres que iban hacia donde estaban los demás.

Koe ni naranai sakebi wo osaete

(Sin hallar la voz para hacer escuchar un grito)

Pero todos se alarman al ver que Afrodita iba hacia donde estaban las chicas que tienen interés amoroso de Issei y de Vali.

Nanbyakkai datte nanbyakumankai datte

(Cientos y cientos, incluso miles de veces)

Y fusiona las tres sombras en una sola para atacarlas…

I Find & Create myself. Now or Never…

Justo en ese momento que el monstruo de sombra iba a atacar a las chicas, una luz roja y una luz blanca se aparecen para darle de llego un poderoso golpe para alejarse del lugar.

Just fight it out… (X4)

Para que el monstruo de sombras ruede un tanto por el suelo mientras que Issei y Vali mostraban su rostro habiendo activado sus Balance Breaker, pero al notar que su contrincante trata de levantarse haciendo que los portadores de Dragones Celestiales se cubran su rostro con su respectiva mascara de parte de la armadura para ir de lleno hacia él mientras que justo cuando se acaba la música de fondo se congela la imagen al mostrar que el Sekiryuutei y el Hakoryuukou van hacia la batalla.


Dormir ya no era tan fácil para él. No desde que regreso a casa.

Hyoudo Issei se encontraba recostado en su cama, mirando el techo y tratando en vano de lograr conciliar el sueño. No era posible debido a varios factores…

Tenía algunas cosas en su mente, en relación a temas que no son importantes ahora. Así como también que trataba de razonar la situación en la que se hallaba.

No era raro despertar en medio de la noche y tener a Rias y Twilight pegadas a él, ya estaba acostumbrado. Lo que no estaba acostumbrado es que el grupo de Rias y el suyo se escabullan en su cama y duerman a su lado… ¿Qué diablos…?

Esto ha estado muy raro. Desde que lo último es como si no quisieran dejarlo un solo segundo, no es un niño que deben de cuidar las 24 horas.

Lo que si le molesta es que despierte a veces en el suelo. Y si bien esta vez no fue así, el pie de Xenovia que se pudo en su cara no ayudaba a que lograra dormir… Muy bien, mejor sale de aquí.

Con más que cuidado, que de dificultad, Ise logró salir de la prisión que se había vuelto su propia cama para poder ir a la puerta. Necesitaba aire…

Todo sin que él se dé cuenta de que Raynare veía de reojo como se iba… la caído estuvo tentada de ir con él, pero sabía que de seguro quería estar sólo. ¿Será que le molesta toda la atención que ellas le están dando?

Naturalmente, lo que le pasó las afectó en gran medida. Se sintieron vacías en su momento… por ello, cuando regresó, es que querían pasar más tiempo con él y finalmente consolidar algo. Aunque parece que no tomaron en cuenta su opinión o su situación. Era más que obvio que… de seguro él tenía sus propios problemas.

El haber muerto no era algo fácil de digerir para nadie. Ise no lo mostraba, pero de seguro en el fondo aún pensaba en ello… y eso lo asustaba. Sentir la muerte en carne propia.

Optó por acomodarse mejor y dormir… no sin antes, alejar a Asia de Kuroka, esa gata está murmurando cosas nada santas en sueños… y le dicen a ella de mente sucia.


En medio de la sala, Ise trataba de consolidar algo de sueño. Más porque ha tenido un sueño extraño, sumado ya a lo que estaba sucediendo. ¿Qué habrá sido lo que vio ahí? Le hubiera preguntado a Himmel, pero estaba dormido, como Skeith… y Ddraig. Los 3 se la habían pasado descansando mucho estos días. Lo atribuye a lo que debieron hacer para salvarlo… y le está agradecido a todos ellos.

Pero le preocupa que estén así mucho tiempo. Y cuando tocó el tema con Azazel, este le dijo que los deje descansar… que ellos volverán al 100% cuando sea el momento.

Ojalá no pase mucho tiempo… ahora mismo se siente algo desprotegido e inútil. Vaya sensación tan rara…

Fue en ello que sintió la presencia de alguien atrás de él. Cuando volteó a ver quién era… se sorprendió al ver a Sunset ahí parada, en la entrada de la sala.

Sunset Shimmer había sido condenada en cierto modo a un arresto domiciliario. Ella no podía estar ni actuar sola… debía tener al menos la presencia de uno de los miembros de la casa para hacer algo o usar sus poderes. Y si bien admite que el ambiente no era fácil al inicio… Él no detestaba a la chica. Al contrario, la entendía en cierto modo… quería cambiar… pero tenía el peso de los errores de antes y ahora…

-Lo siento… pensé que no había nadie.

Ise negó con la cabeza, la verdad sea dicha, necesita algo de compañía. Ella… se le veía algo complicada, hasta asustada.

-No debes preocuparte por lo que los demás piensen si te ven conmigo. ¿Algo de beber?

-… Agua con gas. ¿Tienes?

El Sekiryuutei asintió y se dirigió a la alacena, donde sacó un par de botellas con el dicho líquido. Se sentó de nuevo en el sillón y ella hizo lo mismo, para luego recibir la botella de agua. Ambos no tardaron en beber el contenido de este y simplemente…

-¿Cómo va todo…?

La chica suspiró al escuchar la pregunta… sabía que no la podía evitar. Pero al mismo tiempo, necesitaba decir algo…

-Como lo esperaba… a parte de Twilight y cierta medida Rias… ninguna en la casa confía en mí.

-Ophis juega contigo.

La chica rio un poco. Era verdad, Ophis quién ahora vivía con ellos gustaba de pasar tiempo con la chica y de simplemente jugar. El Dios Dragón estaba en paz desde que llegó a esta casa. Y en más de una ocasión se le ha visto jugar ajedrez con Rean… era raro. Pero Sunset sabía que ella era la gran excepción a la regla.

-Tal vez no fue una buena idea venir aquí…

-Oye, no ha pasado ni una semana desde que todo pasó. Date tiempo… los cambios no surgen de la noche a la mañana.

La chica miraba al Sekiryuutei con algo de análisis. No lo entendía, era un chico muy raro, pero que a la vez te daba cierta confianza para decirle lo que piensas y sientes.

-¿Crees que pueda llevarme bien con todos?

La pregunta de ella vino con algo de miedo… era natural. Hace poco eran enemigos y ahora ella estaba aquí, tratando de ser diferente, cambiar para bien. Pero el peso de lo que hizo en el pasado, no la ayuda. Él sabe bien que es eso… por ello es que la entiende de seguro mejor que nadie en esta casa.

-Lo harás… te lo aseguro. – Ise volvió a beber algo de la botella. – Todos podemos cambiar para mejor… si yo pude, es posible.

-Hablas como si hubieras sido un caso perdido.

El Sekiryuutei sonrió a esas palabras… no estaba lejos de la realidad. Aunque lo mejor sea no decirlo en voz alta. Sunset por su lado solo tenía otra pregunta en la cabeza…

-¿Qué crees que haya sido de él?

-… No lo sé… Lo que le hice y como quedó… dudo que sepamos de él un tiempo si es que… logró sobrevivir a la maldición. Yo la probé de primera mano y sé lo fatal que es… aún tiemblo de sólo recordar el agudo dolor que me provocó.

Sunset pudo ver como el cuerpo del Sekiryuutei tembló un segundo. De seguro recordando ese agudo dolor. No sabe lo que es. Morir debe sentirse horrible.

-¿Qué se siente… morir? – la pregunta de la chica lo sacó de cuadro. – Digo…

-No, te entiendo. La verdad… es como simplemente dormir, pero cuando sientes lo que yo sentí en ese momento… no es la forma más placentera de dormir. – Ise se sobo el brazo derecho… ese que fue creado a partir de la carne del Great Red. – Aún la siento… el dolor de cuando ese sujeto me cortó el brazo.

Sacudió la cabeza al recordar ese momento. Y simplemente trataba de no pensar en ello… no quería admitir que ese momento lo había marcado. Siempre trataba de mostrarse fuerte, pero a veces necesitaba demostrar que no era infalible… y ella lo vio. Lo último lo había marcado de un modo más allá del físico, a nivel psicológico… Hyoudo Issei ya tenía una cicatriz mental más.

-¿Seguro de no querer ver a un especialista?

-¿Qué le puedo decir…? Sólo me dirá que lo afronte y una que otra medicina. No… ya pasé por ello años y no ayuda. De niño era más difícil, pero ahora… lo puedo afrontar. Es más, no me afecta en las peleas como has visto.

La chica rodó los ojos. Se ve que él también aprecia un buen reto. Más allá de ello, parece que estaba bien… es más, se nota que lo está afrontando y no huyendo de él.

-No es de mi incumbencia todo esto… Pero ¿no debemos comprarle a Ophis algunas cosas para ella? Ha estado durmiendo conmigo en mi cama, pero de seguro le gustaría tener su propia cama.

Ise la miro con algo de sorpresa y una gran gota de sudor… no lo había pensado así. La chica suspiró al ver que el chico había olvidado algo. Negó con la cabeza al pensar que todos los hombres eran iguales de olvidadizos. Lo que si no hará es que deje a la pobre Ophis sin cosas necesarias para que ella viva.

-Decidido, iremos a comprar cosas para ella.

-¿Iremos…? ¿Nosotros?

-Por supuesto. ¿Quién más sino?

-Pero…

-Solo escucha. Lo que haremos será sencillo, compramos cosas para Ophis, yo conozco más la zona y tú liberas en algo tu mente. ¿Ves? Sencillo, todos salen ganando. Y no te preocupes.

-… Tienes harta confianza en ti ¿no?

-Algo…

La chica negó con la cabeza mientras sonreía.… Ojalá nadie se moleste por lo que hará. Muy bien…

-Bien…. ¿Mañana al medio día? Aprovechando que es domingo.

-Hecho. Descansa, de seguir en vela esas ojeras tuyas se harán más notorias. – Ise se tomó la cara al oír ello… ¿tenía ojeras? – Oh… y gracias por el tiempo de oírme… ya sabes.

-Duerme Sunset, ya mañana hablamos de ello.

La chica asintió para luego irse a las escaleras. Mientras que Ise se quedó nuevamente sólo en la oscuridad de la sala, pensando. Aún la sensación de haber muerto no se había ido del todo… aún parece que vuelve y lo atormenta. Aunque sabe que es una sensación fantasma, está ahí. Y debe de enfrentarla… superarla… porque no se puede pasar su vida temiendo a la muerte, algo que es natural en este mundo… a fin de cuentas, todo muere.


-¿Cómo lo ves…?

Azazel estaba bebiendo algo de licor mientras le hacía la pregunta a Rean. Este estaba cruzado de brazos y simplemente estaba razonando lo que su amigo le dijo.

Estos últimos días, Azazel se había centrado en sus investigaciones. Al fin tenía el tiempo libre para hacerlas y con ello… hacer algunas cosas que antes no. Pero el tema central para ellos, era Ise.

Ambos sabían que la experiencia última, la de morir, no era como las anteriores. Sí, había afrontado la muerte, pero nunca la había sentido en carne propia. Es una experiencia horrible… Rean lo sabía muy bien. La sintió en carne propia antes de… volverse lo que es. Es más, las secuelas seguían presentes en él… sólo que ha sabido sobrellevarlas.

-Trata de mostrarse fuerte. Pero no es sencillo. Se ve que lo último si lo afectó Azazel. Tal vez en la batalla no lo demuestra… pero ahora que todo volvió a la calma… Parece que no se siente tranquilo, es como si temiera que la muerte lo reclame. Sé lo que es eso…

-… TEPT. Ise debe estar desarrollando eso en un grado menor. No es grave, pero si no lo trata o afronta dentro de poco… él no necesita más cargas en su vida.

Rean no supo que más decir a las palabras de Azazel. Miro el vaso que tenía en mano y algo de su reflejo se pudo ver. Su ojo derecho tenía una mezcla entre rojo y morado… maldito efecto secundario de lo último. Es más, parece que esta vez si se excedió.

Su problema era una opción aparte para él. Era Ise quien le preocupa más. A su edad él no debería de estar pasando esto. Quizás deba callar lo que…

-No creo que sea conveniente que le ocultes lo que Atenea te ha escrito. Tarde o temprano se enterará.

El humano vio al caído, quien lo miraba con reproche. Al mismo tiempo maldijo que no haya callado cuando era la oportunidad. Sólo él sabía lo que Atenea le escribió, a parte de esas tres.

-No le quiero dar más problemas…

-Rean. Tú mismo has admitido que no estarás mucho tiempo aquí presente. Es más, has preparado a Ise para que cuando tú no estés, él pueda llevar el manto de tu escuela y extenderla más de lo que imaginaste. Pero no lo hará si tratas de impedir que supere lo que sea que lo está afectando. Esta es una prueba para él…

-… Es posible que algo del pasado se vea involucrado esta vez. ¿Aun así crees que sea correcto?

-No puedes huir del pasado. Sólo puedes afrontarlo y aprender de él. Ya es momento de que empecemos a pensar en el retiro. Sirzechs lo ha estado pensando seriamente. Que la era de los Maou actuales está llegando a su fin.

Rean optó por no decir nada a esas palabras. Puede que sea cierto… tal vez ya sea la hora de tirar la toalla. Ya no están para estas cosas. Él sobre todo…

-Ten, desarrolle esta medicina luego de tu última muestra de sangre. El efecto es el mismo, sólo que es una dosis ligeramente mayor.

Rean tomó el frasco con pastillas para luego suspirar. Parece que poco a poco él…

-No lo sigas intentado Azazel, ya me hice a la idea de que no viviré mucho.

-Aún no me rindo. Con todos los avances que hemos visto en tu condición y la tecnología nueva que hemos adquirido, si nos lo proponemos… Quizás en un par de años logre…

-Años que quizás yo no tenga. Te recuerdo Azazel, que mi vida no es tan segura como la que muchos creen. Mientras más pelee, menos tiempo me queda. Y tras lo último… no lo sé…

-Entonces deja de pelear. – Azazel lo miro con seriedad. – Deja que nosotros nos hagamos cargo. Tienes tres hijos en camino, aún tienes que ayudar y guiar a Ise… aún no puedes morir.

Rean cerró los ojos y trató de pensar en la respuesta correcta para esta situación. En verdad… ya su mente estaba decidida al destino que le parece tocar. No es que lo maldiga, la verdad… sin esta condición no habría logrado vivir todo lo que vivió hasta ahora. Conocer a Ise, a los demás… estaba feliz con lo que ha vivido hasta la fecha. Y sabe que…

-Sólo prométeme una cosa Azazel. Si muero en pelea, que es lo más probable, dile a Ise lo que te dije y le mandas a esa persona la carta que te di. Sin peros…

-Rean…

-Prométemelo. Es lo único que te pediré y hasta rogare como amigo. Será lo último.

El caído fue incapaz de decir algo en contra de la petición de su amigo. Una vez algo se le mete en la cabeza, no lo dejará ir tan fácilmente… Por más que el resto le diga que lo haga.

-Bien, será a tu modo. Pero no digas que…

-Lo sé… gracias Azazel.

Ambas optaron por quedarse en silencio. Había mucho que hacer aún y más ahora que…

-Odio tener que meter a Cadance en esto. Pero ella es…

Azazel no dijo nada. Si, al parecer el pasado no los iba a dejar tranquilos el día de hoy. Lo mejor era hablar de una vez con Cadance.


-Mi Señora…. ¿Segura de esto? ¿Segura de querer pedir el apoyo de ese hombre?

En la oscuridad de su palacio, iluminado sólo por la luz de la misma luna, Atenea paso a ver a una de sus guerreras amazonas. Ella misma sabe que ninguna de las presentes confía en los hombres, los ven como seres impuros y salvaje. A ella en verdad le daba igual ese pensamiento. Sí, pueden ser impulsivos y agresivos, pero hay algunos que…

-No me digas que aún piensa en ese hombre.

La amazona se retractó rápidamente de sus palabras al ver la intensidad en los ojos de la bella Diosa. Nunca se trataba del tema de los sentimientos de ella… nunca. Porque siempre estaba esa sensación de culpa, de no haber sido más firme y valiente de decir lo que sentía en su momento. Ya que de hacerlo… tal vez no estaría sufriendo tanto. El dicho haber amado y perdido sonaba con más fuerza para ella ahora.

-Mide tus palabras… hay muchas amazonas que desearían tener tu posición y yo con gusto se las puedo dar.

La guerrera bajo la cabeza en señal de perdón a la Diosa de la Sabiduría y la Guerra. Ella sabía lo amable que era su señora, pero también lo estricta que podía ser si colmaban su paciencia.

-Y a tu pregunta. Sí. Confío en Rean. Por sus venas corre la sangre de la familia de Himmel. Y la otra mujer, Cadance, ella heredó lo que se necesita para salvar al Imperio de lo que se está asomando. Y sobre el Sekiryuutei, es necesario que él venga. Este es un tema que él no puede evitar.

-Su vida pasada hizo esto mi señora. El chico no…

-Lo sé. Pero él necesita afrontarlo. Tengo el presentimiento que esto es muy necesario. Más para él que nadie. Porque no es fácil experimentar la muerte y luego volver al mundo de los vivos.

Atenea miraba el cielo para luego acercarse al manantial que había justamente en su templo. No le tomó mucho quitarse lo que llevaba encima y entrar al agua.

La imagen de ella, una Diosa pura, sin nada que la cubra era algo que muchos soñarían de ver. Sólo uno lo había hecho y lo más gracioso es que no pasó nada más allá de ello… aunque ella lo había deseado. Atenea a veces maldecía no haber sido más firme. Por ello, le importa poco lo que su padre le vaya a decir… El Imperio de Cristal es algo que ella construyó para el bien del mundo, no para solamente los griegos. Por ello… será el momento de que al fin libere los conocimientos de este al mundo. Era momento de librar a esa mujer de dicha carga que le puso. Pero el tema con su hermana… Malditos problemas familiares.

-Afrodita ha estado metida en algunas cosas. Aún tras tantos años. Y temo que lo que tenga en mente provoque más mal de lo que es necesario en esto. Debo estar alerta…

-Mi señora… aun no le veo la razón por la que debe llamar a ese chico.

-Porque él es necesario. Te hago recordar que lo único que puede reactivar el cristal es el alma de Himmel y su sangre. Y como sabes, Himmel nunca tuvo descendencia… pero su hermana sí. Por ello los necesitamos.

-Pero hacer que el imperio que ha protegido tanto tiempo y su poder… Que sean públicos… No es…

-Hades no ostenta en gastos a la hora de aplicar sus planes. Yo no puedo simplemente ignorar lo que está sucediendo. Si con esto podemos poner la balanza a nuestro favor, no solo con los terroristas que amenazan la paz del mundo, sino también la de fuerzas que no conocemos, lo haré con gusto. Ya me harté de no hacer nada.

La amazona sabía que su Diosa era determinada. Pero desde que el chico con el alma de ese hombre apareció… ella se ha vuelto más consciente de muchas cosas y que, además, se ve como ella aún lamenta no haberle dicho nada cuando pudo.

-Mi señora, sabe muy bien que nosotras siempre la apoyaremos. Pero no mezcle sus emociones con los demás… ese chico no es Himmel.

Atenea se vio tentada en gritarle por la insolencia que le acaba de hacer sin querer. Más bien, se mantuvo en silencio, porque sabe que ella desea lo mejor para su persona. Por más que odie esto… ella sabe muy bien que no puede cambiar el pasado….

Atenea salió del manantial en donde estaba y se secó con la toalla que estaba cerca de ella. Sabía que esto no iba a ser fácil para nadie… pero era lo que ellos debían de pesar y afrontar al ser los que heredaron la voluntad de Himmel… y eso conlleva a afrontar lo peor de uno mismo.


Al día siguiente, Ise había hecho lo que él y Sunset acordaron. Ir al mall para comprarle a Ophis lo que necesita para tener su propia habitación y demás.

La pequeña estaba en medio de ambos jóvenes, miraba con suma atención todo el lugar debido a la gran cantidad de gente.

Sobra decir que lo primordial para ambos era comprarle ropa interior con urgencia. No pueden creer que en todo el tiempo que la conocen, no haya llevado nada debajo del vestido. La sorpresa de Ise fue mayúscula cuando ella misma dijo que no llevaba nada y se estaba levantando la falda.

… A veces el instinto masculino te juega en contra, este fue ese caso. Sólo recibió un par de piquetes en los ojos por parte de algunas de las presentes por pervertido. Que tal injusticia, no es un pecado querer ver si lo muestran voluntariamente.

En fin, cuando él mencionó que Sunset iría con él… puede jurar que muchas vieron a la chica con algo de desconfianza. Ella misma estaba… algo conflictuada.

El joven rodó los ojos y se llevó a ambas fuera de la casa antes que ellas puedan decir algo. No entiende el porqué de los celos, no es que Sunset esté interesada en él. Es más, hasta ella misma ha dicho que tras lo último… No piensa buscar pareja. Lo de Cao Cao ya fue decepción suficiente para ella…. ¿Por qué su suerte es tan mala?

De todos modos, aquí estaba, lista para iniciar esta travesía con un chico que no parece tenerle malas intenciones. Es un chico raro… oh bueno, tal vez deba pensar seriamente en dejar de razonar mucho y…. Mejor deja de pensar maldición.

-¿De qué te ríes?

-De qué eres similar a Twilight, sólo que tú piensas en silencio.

La chica lo miro de mala gana, se burla de ella. Al mismo tiempo, Ophis comía su paleta, una que Pinkie le dio antes de salir. Para que se porte bien, aunque ambos juran que ella le susurró algo en el oído.

-Me pidió que los espié. Para que no hagan nada sucio.

Sin duda alguna Ophis sería una pésima espía, es muy pura para tal mal pensamiento. Ise jura que le dirá a esa chica un par de verdades.

-Mejor vamos a comprar lo que necesitas Ophis, antes que me empiecen a llamar destruye hogares.

El Sekiryuutei vio con Sunset se llevaba al Dios Dragón de la mano y no pudo evitar sentir cierto nexo con ella. ¿Por qué será…?

-Tal vez porque ella es cómo tú. Alguien que se siente cómodo en la oscuridad. No me sorprendería que ella y tú se llevaran tan bien.

-¿Por qué lo dices Himmel?

-Quieres ayudarla… porque sabes lo que es caer en la ruina.

Ise siguió su camino tras esas dos, lo primero era una cama para Ophis y sabían donde hallarla. La tienda no era del todo grande, pero si bastaba para que ellos vean lo que tenían en exhibición.

-¿Cuál te gusta Ophis?

-¿Importa? Es para dormir.

Sunset ganó una gran gota de sudor ante la respuesta tan verídica del Dios Dragón. La verdad, tenía razón. Pero al menos quería que ella decida lo que le gusta.

-Ophis, solo ve y elige la cama del tamaño que te gusta.

Ella asintió ante la sugerencia de Ise, quien dio un suspiro al imaginar que así debía ser tratar con un niño. Claro que no la podían perder de vista…. ¿Quién sabe que puede pasar? No pueden tener tan mala suerte.

-Eres bueno con los niños.

-… Tal vez sea porque aún soy uno.

Sunset rio ligeramente ante las palabras del joven quien miraba su celular. Suspiro al ver que eran mensajes Spam. Como odia esas cosas.

-¿No te molesta que ellas a veces se pongan celosas?

-¿Eh…? Oh… un poco, a veces. Pero yo no soy nadie para decir nada. También soy celoso.

Sunset asintió, no lo duda. Y… si, sabe lo que es tener un novio celoso. Tuvo al menos una relación antes de irse de la isla Alicorn y vaya que se arrepintió.

-Aún no te pido perdón por lo que pasó en Kyoto… yo…

-Sunset… déjalo. Ya está en el pasado.

-Pero al menos quiero…

-Si lo deseas hacer, demuéstralo. Creo que así muchos te creerán más. Yo… siento que has cambiado. Lamentablemente mi opinión no contará con el resto.

-… A veces me cuesta creer que seas tan tonto en algunas cosas, pero puedes entender el corazón de otros.

El Sekiryuutei se mostró ligeramente ofendido a esas palabras. Es decir… Si, sabe que no es el más listo, no se lo deben de recordar constantemente maldita sea y…

-Tengo la cama que quiero.

Ophis apareció frente a ambos y cuando señaló lo que quería, se quedaron helados al ver que era esa clase de camas que hallas en un Love Hotel… ¿¡Qué hace eso en una tienda familiar!?

-Habla también.

Cuando tocó lo que parecía ser un botón en la parte superior de la cama, se pudo oír ciertos sonidos… ok, esto era incómodo. Todos en la tienda se les habían quedado viendo. Sunset se tapó la cara de la vergüenza, mientras Ise…

-¿¡Qué hace esa cosa ahí!? ¿¡Dónde está el encargado!? ¡Daré mi queja!

… No volverá a entrar a esta tienda. Nunca.


-La vergüenza… nunca me había sentido tan humillada…

-Te acostumbras al vivir aquí… créeme, lo sé.

Ambos caminaban con un aura de depresión en sus cabezas. Ophis no, ella feliz con su cono de mega helado que le acaban de comprar en petición que nunca diga nada de lo que acaba de pasar.

En verdad, no saben que más hacer. Tenían el dinero para comprar todo y online. El ingreso monetario de Ise, debido a los derechos de nombre y demás que tiene con el show del Sekiryuutei Supremo… le da un gran ingreso que un joven de 17 años no debería tener… son demasiados ceros. Ugh, la desgracia.

[Oye compañero, deja de gruñir en tu mente. Trato de dormir…]

-¡Deja de dormir dragón flojo, ayúdame! ¡Hace rato que trato de actuar natural con Sunset, pero no me sale nada!

[… Y yo aquí creyendo que la experiencia te haría más sabio]

-¡Ddraig!

[OK… Sólo sé natural, no es la primera vez que sales a un lado o interactúas con una chica con problemas]

Tenía razón, pero si era la primera con la que siente una empatía natural… a veces odia ser afine a la oscuridad. Sólo le da más problemas de los que vale.

-Yo no oí quejas en el pasado.

-Tú cállate.

-Lamento interrumpir tu charla mental, pero hemos llegado a la tienda de ropa. Y creo que lo mejor será que esperes aquí. Afuera.

-¿Ah? ¿Por qué?

-¿En serio…? Tienes dos novias, no sé cuantas enamoradas de ti… ¿y me preguntas por qué? A veces me cuesta creer que seas el Sekiryuutei más poderoso de la Historia.

[Me agrada la chica]

-¡Oye, eso sí fue ofensivo!

Sunset sonrió al ver su reacción y se llevó a Ophis de la mano al interior de la tienda de ropa, haciendo una señal de que lo vigila. Él por su lado estuvo más que tentado de sacarle la lengua, pero no… él era un joven maduro.

-¡Oh, salió el nuevo juego de Resident Evil!

… Olviden lo último, el Sekiryuutei era un idiota inmaduro.

….

-¿Qué te parece este Ophis?

-… Me aprieta.

Sunset sonrió nerviosa al ver que estaba usando a la pobre Ophis como muñeca para ropa. Había olvidado lo que era esto. Sin duda días que extraña.

Le pidió a la chica que las atendía que le traiga una talla más grande. Todo eso mientras trataba de quitarle a Ophis lo que llevaba puesto. Rayos… la cabeza no ayuda. Lo que si no puede creer es que…

-No aumentes tus pechos. Cuando dije que si podías cambiar algo de tu cuerpo, lo decía en broma.

-Pero no fue broma.

-Lo sé pero… Ugh… no sé porque me esfuerzo.

-¿No te diviertes? Creí que desde que estas aquí, te ves más feliz.

La chica se sorprendió al oír ello… ¿Era así? No lo había pensado. La verdad era que… no se sentía distinta.

-Yo…

-Quiere ser feliz… ser querida. Pero temes que todo acabe. Como en esa isla… como con ellos, con él.

Las palabras de Ophis eran… veraces. No crueles, pero sabían dar donde podía herirte sin querer. Ella… en verdad no sabía ni que pensar.

-¿Tan obvia soy? ¿Tanto se me nota no ser capaz de… aceptar que a donde voy terminará todo igual?

Ophis no respondió, sólo trataba de ponerse el vestido que le trajeron. Al mismo tiempo que Sunset la ayudaba. Y cuando al fin logró ponérselo, se alegró al ver que este era perfecto. El color morado y negro le quedaba como anillo al dedo.

-A mí me agrada que estés aquí. A parte de todas en casa…. Tú eres como una hermana mayor.

-¿Hermana?

-Si. Rias en la mamá, Twilight también, Akeno quizás… Asia, Xenovia e Irina las hermanas. Rossweise la tía pobre. Konkeo y Ravel son las primas que sólo pelean. Ayane, Raynare, Kuroka y Fay, el grupo de amigas que son de la familia. Aki y Kaori las primas que siempre están en todas las situaciones. Kiba y Gasper, los amigos de papá. Pinkie, Aj, Rainbow, Fluttershy y Rarity, las hermanas de papá. Sona, la amiga de mamá y confidentes….

-Creo que entendí… - Sunset detuvo al Dios Dragón de su largo monólogo. - ¿Cómo es que describes a todos así?

-Lo vi en una de las novelas que las mujeres de Rean ven. Me hicieron ver un capítulo.

…. Debió suponerlo. Esas 3, lo mejor era dejar así las cosas y terminar de hacer estas compras.

Sunset le acomodo a Ophis el sombrero que iba a cuadro con el vestido para luego sonreír. Le queda perfecto. Y con ello, ambas salieron al fin de la tienda. Tenían todo lo que necesitaban. Es más, les dieron a los encargados de la tienda la dirección en donde deben dejar todo lo que han comprado. Ver como ellos parecían reconocer la dirección, le hizo ver que ya algunas chicas de dicha casa habían hecho las suyas.

Ise vio como Ophis salía con su nuevo conjunto de ropa y a la vez pedía algo de comer. Ella era un barril sin fondo.

-Anda, vamos por unas hamburguesas.

Ella asintió a la sugerencia mientras Sunset aún tenía en su cabeza lo que ella le dijo. Lo había intentado más de una vez, pertenecer a un lado. Pero en todas las ocasiones, se sintió que no era permanente, era del momento. No niega que disfrutaba de dichos momentos, pero quisiera…

-¿Sunset, vendrás? Sino mal recuerdo hay una oferta hoy.

La chica paso a ver al Sekiryuutei. Aún no entendía porque él era tan amable con ella. Ella hizo cosas horribles contra sus amigos y muchos otros. Pero ahí estaba él, tratando de hacer que se sienta cómoda. ¿Por qué? ¿Qué ganaba?


-…. ¿Segura que no tratará nada?

-Rias, por enésima vez. No lo hará. Confío en mi intuición.

Twilight puso a un lado su libro de magia que tenía en la mano para ver a su amiga.

-Disculpa que a mí me cueste creer en lo que esa chica puede hacer Twilight. – Akeno estaba cruzada de brazos. – Mejor prevenir que lamentar.

-Pero tampoco podemos crucificar a la chica sin cargos. Te recuerdo que Ise trata con ella.

-Ayane-san, usted en verdad cree eso… ¿pero que hay de ella?

-Vaya, hasta Asia desconfía. No sé qué pensar de ello. Pero yo opino igual, hay que tenerla vigilada.

-Creo que todas tenemos ese pensamiento Xenovia. Sunset no se ha ganado nuestra confianza.

Irina era la que más quería creer en el cambio de la chica. Es más, en estos días no había nada que mostrara que ella tenía ideas ocultas.

-Oigan, podemos hablar de otro tema. Creo que estamos siendo redundantes.

-Aki, tú eres la primera que tocó el tema. Si hubieras tenido tu bocota cerrada, no estaríamos en esto.

Kaori dejó de lado su celular y lo que estaba viendo, el tema ya se está volviendo cansado para ella y para todos.

-Tal vez sea una buena idea…

-No Fay, no creo que debamos hacer un hechizo de espionaje en ellos.

-… Pero la idea de por sí es tentadora Ravel. Así podríamos…

-Shirone… estás sacando cada vez tu lado malo… Onee-chan está orgullosa nya.

Koneko rodo los ojos, no es algo que le guste, a decir verdad. Rayos, todas estaban teniendo esos pensamientos fuera de lugar. Incluso las que no estaban interesadas románticamente en el Sekiryuutei.

-No confío en ella. Por eso le pedí a O-chan que los vigilé por mí.

-Pinkie, por el amor a Dios. Eso está más allá de lo que uno llamaría preocupación.

-AJ tiene razón, no hay que olvidar que Ise se sabe cuidar sólo. Si algo pasa, él puede hacerle frente.

-Pero, Rarity, él parece confiar en cierto nivel que esa chica ha cambiado… y yo, eso me preocupa.

-Fluttershy, Ise es el Sekiryuutei, quien ha vencido a enemigos que pensábamos eran invencibles. Él puede hacerse cargo si algo malo pasa.

Rainbow jugaba en su celular mientras el resto de sus amigas parecían no tan seguras de lo que estaba diciendo. Es más, se atreverían a creer que algo malo puede llegar a suceder. Fue en ese momento que Ray le quitó a la chica su celular.

-¡Oye!

-Si tanto tiempo tienen de charlar tonterías, hay que entrenar. Nunca se sabe cuando algo puede surgir.

Todas pasaron a ver a Raynare con sorpresa, pensaron que ella sería la primera que mostraría un claro rechazo a todo esto.

-Me sorprende lo calmada que estas Raynare.

-No exageres Rias. Sólo trato de darle a esa niña el beneficio de la duda.

-Pero Sunset es mayor que tú… tiene 18….

-Detalles sin importancia. – Twilight miro a la caído con una gran gota de sudor en su frente.

-Oh, que bien. Todas están presentes. – Justo en ese momento, Rossweisse entra a escena con Kurama a su lado. Lo había sacado a pasear. – Me acaban de informar que las nuevas instalaciones para entrenamiento para nosotros están listas.

Luego de la victoria de la Alianza contra la Khaos Brigade en el último incidente, y tras la gran influencia que tuvo la participación de ellos en la victoria, se acordó que sería una buena idea darles más facilidad para entrenar a todos ellos.

Por lo que parece han agregado algunas cosas extra a la zona de entrenamiento que hay en la casa. Eso sí, no están del todo seguras si eso es bueno o malo. Hay que recordar que hablamos del Inframundo y sus locuras…

-Eso suena excelente, tengo ganas de practicar mi poder de hielo. ¿Me ayudan Ravel y AJ? Necesito mis partners de siempre.

Ambas chicas sabían que Pinkie lo decía porque desea estar lista cuando Sunset las traicione… no es que se quejen, ayuda en el entrenamiento y hacerse más fuertes.

Akeno, Fay y Ayane acordaron que no sería una mala idea también entrenar el poder de los Epitaph en ellas. Si, necesitan el entrenamiento.

Una a una se fue retirando a la dicha zona de entrenamiento, todas menos Ray quien se quedó en su lugar a un lado de la ventana.

Vale, admite que le está dando a Sunset el beneficio de la duda. Porque ella sabe muy bien lo que es haber estado en el mal camino y de simplemente darse cuenta que has hecho mal. De querer cambiar para mejor, pero eso no es tan sencillo. Más porque sabe como pueden ser los demás de críticos con uno.

Tal vez… Solo Twilight confía en ella, de que Sunset en verdad desea cambiar. Pero el resto no, aún lo dudan. Deben de estar más seguras de que…

Aunque, lo que la fastidia de verdad… es como Ise parece tener confianza plena en ella. Como si hubiera algo entre ambos que los une de forma instantánea. Y eso… eso la molesta.

¿Debía soportar la idea de que alguien más se le adelante? Sabe muy bien que… ha sido paciente. Más de lo que ella quisiera ser. Pero… ¿Estaba bien seguir así? No sólo Rias y Twilight se le habían adelantado. Akeno, Fay, Ayane… Aki, Kaori… Kuroka y Koneko… hasta ve como Asia, Irina y Xenovia poco a poco están tratando de finalmente romper ese último muro que… Rossweise, se ve que algo en ella ha cambiado, se ve por como a veces trata de tener contacto visual con Ise. Ravel ni que hablar, ella misma ha dicho que no le importa esperar un poco más. Pero ella no… ya estaba harta de seguir siendo dejada de lado.

Ella… Ella lo conocía de años. Él la había salvado. Él era importante para ella. Sin él… ella ahora sólo sería un cadáver más… ella…

-Si sólo ellas no… - detuvo su pensamiento al ver a donde estaba yendo. – No… No-no-no. Yo no soy así, no debo dejar que los celos me consuman… yo… debo de despejar mi mente.

Justo cuando iba a seguir al resto a la zona de entrenamiento. Sintió escalofríos, como si algo hubieran tocado directamente su espina dorsal. Se sobo los brazos para intentar alejar esa sensación de su cuerpo y seguir caminando. Sin notar lo que había ingresado a su cuerpo… una nueva voz, dos nuevas voces se hacían presente en su alma.

-Oh, hemos hallado a alguien interesante. – la primera voz sonaba jovial y enérgica.

-Pero, ¿Está bien que hagamos esto? Digo… - La otra parecía ser más tímida y suave.

-Bah, ya estamos aquí. Recuerda que ya hemos estado mucho tiempo vagando en busca de un candidato. Deja de quejarte Blue.

-Pero Red… OK… sólo espero que no le moleste nuestra presencia.

-¡No lo hará! ¡La ayudaremos a sacar eso que oculta! ¡Verá lo genial que es tener a Gorre de su lado!

-… Espero que no hayamos cometido un error.

-Tú si que sabes bajar el ánimo de una, hermana.

-Perdón…

Al parecer Raynare llamó la atención de la quinta fase de la Onda. Aunque, tal vez aún haya mucho que ver antes de pensar si esto es bueno… o malo. La doble personalidad de Gorre, puede que sea un factor de suma importancia para todo esto.


Al mismo tiempo, en una de las tantas sucursales de Mac Donald`s que hay. Ise ponía en mesa las órdenes que había pedido para ellos.

-Muy bien, aquí tienes Ophis. Una gran Mac para ti sola.

-Gracias. – el Dios Dragón vio con alegría su alimento, no lo expresa, pero se ve que está feliz. Es más, ya empezó a comer.

-Lo mío es esto. Gracias Ise. – Sunset tomó lo suyo y empezó a comer. – Sabes, nunca había entrado a uno de estos lugares.

-¿No? – el Sekiryuutei iba a dar un mordisco a su alimento cuando oyó lo que Sunset dijo. - ¿por qué?

-Digamos que… no tenía cabeza para cosas como estas. Para mí, ser la más fuerte era todo. Y eso era lo que pensaba. No lo sé, a veces siento que fui una tonta al creer que… todo debía ser como yo lo creía conveniente.

Ise no dijo nada, sólo observaba a la chica. Quien noto como el Sekiryuutei la veía. No niega que se siente algo nerviosa al ver como esos ojos hetercromanos la miran. Era una sensación algo rara. Es más, jura que si los ve con suma atención… puede ver una vasta oscuridad y en el fondo de ellos… una chispa, un destello de luz Carmesí. Era… atrayente.

-Vaya, yo que pensaba que era porque eras una aburrida.

Sunset salió de su ligero trance para luego volver su mirada a su comida para ocultar el pequeño rubor en su cara. ¿Qué le pasa? Ya, esto es absurdo. Acaba de sufrir una nueva decepción amorosa y esto le pasa… ¿será por ese vínculo que hay entre ellos? Ni ella entiende porque hay esta conexión entre ambos. Es raro…

-Yo creo que… tal vez sólo deseas cambiar. No es fácil, lo sé. Hasta te puedo dar mil ejemplos en las veces en que creí… que tal vez lo mejor era tirar la toalla.

-… ¿Cómo lo afrontas? El fracaso… Yo no…

-No lo sé. – Ise dejó a un lado su comida y se miro la mano derecha, el vendaje era un recordatorio eterno de que ya no había nada de humano en él. Era un dragón con forma humana, nada más. – Antes no podía, me daba miedo afrontarlo… pero ahora… entiendo que sin fallas, no puedes mejorar. Creo que es cosa de cada uno en ver eso por su cuenta.

-¿Y si no puedo…? ¿Y si fallo como lo he estado haciendo últimamente?

-Creo que… intentarlo antes de decir que fallaras, es un buen modo de iniciar el cambio que buscas.

Sunset sonrió a la respuesta tan simple que él le acaba de dar. No juega que tiene razón. Lo que si le molesta es que él use palabras tan simples para darse cuenta de que debe de intentarlo antes de pensar en el fracaso.

Ambos vieron como Ophis seguía comiendo sin miramientos, a ella nada más le importaba. Estaba feliz en este lugar, eso era lo que parecía importar para ellos.

-Gracias. – el Sekiryuutei pasó a ver a la chica quien le sonreía. – Ya sabes… por darte el tiempo de oír lo que tengo que decir. Y demás…

-Nah, también necesito un cambio de aires. Creo que es un modo de tratar de olvidar lo que me atormenta. – Ise aún recuerda claramente lo que es morir, pero al hablar con ella y simplemente tener una charla distinta, parece haberlo ayudado.

-¿Seguro de no querer ir a un terapeuta?

-Ya fui a uno años atrás… sólo te ayuda a tenerlo bajo control. Pero si deseas superar lo que sea que te atormenta. Debes de darle cara. Es difícil, pero es la única solución que hay.

La chica se sorprendió al oír ello… ¿él iba a un terapeuta? Ahora que lo recuerda, dijeron que sus padres… Oh, ya entiende. Y si bien se mostró culpable, Ise rápidamente hizo un gesto con la mano, dando alusión de que no es un problema. Que no le molesta hablar de ello.

-Dejemos los temas tristes. ¿Qué me puedes contar de ti? Antes de todo.

Tal vez… no sería mala idea hablar de ello. Si, no lo era.


-¿En serio hizo eso?

-Jajaja, sí. Lo hizo. Y trató de sacarme una muestra de sangre para corroborar que su poción de envejecimiento funciona.

Ise trato de no reír en medio del camino a casa. No dudaba de la palabra de Sunset para esto, es más… hasta puede jurar que se imagina a Twilight vestida de científico loco, lista para hacer sus experimentos y en el peor de los casos, traer un ser a la vida.

…. Por alguna razón, ya no le parece tan gracioso. Ahora le dio escalofríos imaginar ello. Maldita sea.

-¿Y cómo te van las cosas en la escuela?

-Ugh… había olvidado lo que era ir, sentarse frente a un profesor y oír horas de horas de temas que de por sí, ya sé. Pero es parte de lo que tocó para que no me den un castigo mayor. He de admitir que Azazel logró persuadir muy bien a todos los que me querían condenar.

El Sekiryuutei se sorprendió de ello, había oído de Azazel que varios miembros de la Alianza querían mandarla a una prisión por sus actos. Pero que este logró evitar que sea así porque no sólo ayudó en la captura de algunos miembros de la Facción de Héroes, sino también en dar información relevante para que estén listos para cualquier cosa.

Parece que la pusieron bajo el cargo de ellos, por el temor de que quizás… alguien trate de tomar represalias contra ella… no sería descabellado que sea así.

De todos modos, ella sabía en que se había metido y las consecuencias. No era lejos de decir que… esta algo asfixiada por todo lo que le esta pasando, pero trata de afrontarlo. Puede hacerlo… aunque le gustaría tener algo más de suerte en algunos ámbitos, uno en especial… Que le es esquivo.

-Oye… ¿eres feliz con Twilight y esa chica Rias?

La pregunta sacó algo de cuadro a Ise, quien se detuvo unos segundos al no saber como reaccionar a dicha pregunta. Es decir… claro que es feliz con ellas. La pregunta sería ¿ellas lo son con él? ¿Las demás lo serían de estar con él? ¿Más ahora que cuando cierra los ojos, teme no abrirlos de nuevo?

-Lo estoy… ellas son todo para mí. Aunque no sé si yo…

-Por como lloraron al creer que estabas muerto. – Sunset vio como Ophis miraba la máquina expendedora de dulces ahí presente. – Lo sé, lo vi. Eres importante para ellas. Más de lo que puedes imaginar… y eso me da envidia.

-¿En qué sentido? – Ise vio como Sunset sacaba una barra de chocolate para Ophis de la dicha máquina y se la entregaba.

-No sé qué es amar y que lo hagan con la misma intensidad. Siempre estuve tan centrada en mis ambiciones y tener lo que quería, que nunca me puse a pensar en lo que… otros sentían. Y eso me hace egoísta… incapaz de recibir el mismo cariño que el resto. Yo…

-¿Hablas de Flash y Cao Cao?

El silencio de la chica parecía ser respuesta suficiente para él. La verdad era… que ella no sabía si amo a esos dos de verdad, o sólo fue un intento subconsciente de no querer estar sola.

-Flash me gustaba… pero él veía a Twilight. Por rabia, salí con alguien más un tiempo y terminó… por hacerme daño. – Ise no quiso preguntar que clase de daño, teme que no sea algo agradable. – No te preocupes, no hubo agresión física… no se lo permití. Pero eso alimento mi desprecio a Twilight y lo que ella lograba. Y con Cao Cao… ¿Qué habrá sido? No niego que me parecía apuesto y un buen prospecto… ¿pero había más? ¿Veía a la persona o al tipo ambicioso que no tenía límites en sus metas? ¿Qué no le importaba la muerte de otros o sus derrotas? No lo sé… Porque cuando veía su obsesión con más claridad. Más miedo me daba pensar… estoy acabando así. La luz de la Armonía que Twilight logró la introducir en mí me hacía darme cuenta de esas cosas poco a poco.

-Sunset… yo…

-Je, no dudo de que te aburro con mis lamentos. Pero eres el único que se ha tomado el tiempo de oír lo que tengo que decir. Quizás… sólo busco que alguien me entienda. Twilight lo intenta… pero ella no sabe lo que es estar en la oscuridad… no lo sabe. Celestia, veo que trata de que conectemos de nuevo… pero no puedo simplemente… hacer que todo sea como antes. No tras lo que he hecho.

Ise vio como Sunset acariciaba la cabeza de Ophis quien sólo oía lo que ambos decían. Se veía que, el Dios Dragón parecía lograr entender el ambiente en el que estaban y no pensaba meterse.

-No sé qué sientes… En verdad quisiera decirte algo que te ayude. Pero no puedo… - ella sonrió con tristeza al saber que era así. – Pero… como alguien quien sabe lo que es estar en oscuridad. Te puedo dar la mano amiga que buscas. Si me dejas…

Sunset se sorprendió al oír ello. Ella… no espero que él… ver como él le daba una sonrisa sincera, pero a la vez triste, que demostraba que él también pasaba por algo difícil ahora mismo… la hizo notar que él le extendió la mano. Y ella por inercia pura la tomó para luego sentir como él la alzaba para que este de pie.

-¿Seguro…? ¿Tras todo…? ¿Yo no…?

-Sabes… yo represento el atardecer, ese es el camino del Crepúsculo que sigo. ¿No significa que deberíamos llevarnos bien por lo que tu nombre significa?

Al oír ello, la chica rio ligeramente. Que analogía más mala y hasta él lo sabía, porque se rasco la nuca algo nervioso y Ophis sonreía un poco. Los tres emprendieron camino a casa nuevamente, esta vez para acabar el atareado día.

Tal vez… pueda hacer el intento de ser amiga del Sekiryuutei que trae el atardecer Carmesí. Ella lleva también eso por nombre. Si… al menos…. Tal vez pueda aprender lo que es…

-Ngh…

-¿Pasa algo?

Tanto Ise como Ophis la pasaron a ver, ella se veía algo temblorosa. Era como si le hubieran tocado la espina dorsal directamente… ¿Qué rayos…?

-No… Sólo me dio escalofríos. Estoy bien.

El Sekiryuutei le quitó importancia a lo que ella parecía no ser algo que deba de decir, era sólo un escalofrío. Ojalá no le dé algo o se enferme. Mientras caminaban de regreso… Ophis miraba atentamente la espalda de la chica… era….

… No es hora de decir nada. Es la prueba de ella ahora. Y dejará que ella lo afronte. Como se debe.

-Que el Dios Dragón opte por dejarme hacer esto. Es un honor. – una voz femenina y algo glamorosa pero con encanto se pudo oír en el fondo del alma de la chica. – Veamos como te va niña. Tú, quien deseas saber lo que es amar y ser amada de regreso. Un amor real… ¿lo hallarás? Y si lo haces… ¿Será tu salvación o tu ruina? Yo, Macha, estoy ansiosa por ver ello.

Dos Fases se habían hecho de nuevos contenedores… ¿Será eso algo bueno…? ¿O algo malo? ¿Por qué dos a la vez? ¿Qué estaba por pasar?

-¿Ya tienes lo que necesitas mujer? Estoy harto de esperar por esto.

En la oscuridad de la noche, la misma esencia sombría parecía viajar en medio de la oscuridad que había presente.

-Se más paciente Sombra. Estoy a minutos de lograr terminar lo que nos dará nuestra victoria. Con esto… las chicas del Sekiryuutei serán nada y él, se verá hecho nada.

-No entiendo.

-Fufu, digamos que tengo algo que nos ayudará. Si mi información es correcta, él debe estar alterado por haber sentido la muerte.

Sombra no sabia si aplaudir el plan… o de tenerle pavor a esta mujer. Ellas dan miedo, más cuando el rencor que sienten parece ir más allá de lo racional.

Aunque en el fondo… Solo tiene una meta, recuperar lo que yace en ese lugar. Lo demás no le importa, nada más le importa.


Insertar canción: Eien Blue [TV Edit.] – MAKE-UP

Al iniciar la música de fondo se aparece un destello de luz que se ilumina en la oscura pantalla al ritmo de la canción que se escucha, pero se aleja mostrando un cielo nocturno estrellado mientras que la cámara se baja hasta un cierto chico que estaba de espaldas mientras veía las estrellas.

Kirameku seiza ga omae wa yonderu

(Las brillantes constelaciones te están llamando)

Para que se muestre a un tranquilo y sonriente Issei quien estaba viendo la vista del cielo nocturno con las estrellas mientras que Yuuto, Genshiro y Vali llegan hasta donde se encuentra el castaño quien se levanta al ver a sus amigos que los buscaron.

Sore wa erabareta senshi no Akashi

(Esa es la prueba de un guerrero elegido)

Para que el castaño llega hasta en donde están sus amigos, van hacia otro lugar mientras que con la música de fondo se muestra repentinamente sus rostros para que vean al frente de la cámara y caminan hacia el frente como si fueran a verla directo hacia ellas previo a que se cambie la escena en pantalla.

Girisha shinwa no youni

(Al igual que las antiguas leyendas griegas)

Y se muestre diversas imágenes sobre Issei junto con las chicas visitando diversos lugares de Grecia, Vali junto con su grupo viendo el Acrópolis de Atenas, Twilight y Le Fay junto con sus amigas viendo el Panteón, pero repentinamente se nota al castaño viendo algo que le roba su atención.

Mabushii kurossu mattote

(Portas la brillante vestimenta)

Y era que estaba viendo una estatua de la Diosa Atenea que de alguna manera brillaba en frente de Issei hasta iluminar la pantalla y se cambie la escena mostrando un cielo completamente azul y despejado.

Ah… ashita no sora no buru

(Ah… ese cielo azul del mañana)

Para que se muestre a Issei con su armadura que estaba volando en ese cielo disfrutando la vista para que descienda hasta casi pisar tierra y desactivar la armadura.

Donna yume mo shinjireba kanau yo

(Cualquier sueño se hará realidad si lo puedes creer)

Y cuando sus pies pisan tierra firme, las chicas que tienen sentimientos por el castaño lo reciben mientras que lo jalan hacia donde están los demás quienes estaban preparando algo juntos.

Ah… kokoro ni shimeru buru~…

(Ah… ese metal azulado dentro del corazón…)

Para que se muestre a Genshiro, Yuuto y Vali que estaban tranquilos, pero ven que Issei algo jadeante para que vaya con los chicos, pero repentinamente siente una necesidad de ver algo para mostrar una sonrisa a lo que estaba viendo mientras que los chicos rubios y el chico peli plateado se acercan a ver qué era lo que ve el castaño.

Eien no kagayaki

(Brillará eternamente)

Para que, a su manera, den la espalda a la cámara y ven el hermoso cielo azulado mientras que se muestran en su cuerpo cuatro auras blancas con tonos azules emanando de su cuerpo mientras que se acaba la canción de fondo.