By Karin.EXE, n.n nyo!
Pareja: X / Zero
Genero: Romance /Angustia
PG-13 o.oU
Uh… Bueno, mejor updateo antes de que se acabe el año n.ñ
Hibary-Hiwatari: o.o … Que comment mas curioso xD Ha, grax grax! Ojala la turba rabiosa no te haya golpeado ni nada, capaz que a mi si n-ñU
Ludra-Jenova: Ah bueno, si te acuerdas me avisas, aun así gracias por comentar y too! Y no golpees tanto a Zero!
Axl-kun: Ha! Grax por el review, y sie, aunque no creas, fans de Axl hay muchos o.O Solo tenes que… Poner Axl en google, y ahí veras, hahaha xD
Caya chan: Lamento haberte causado emoción y ganas de llorar en el cap anterior, aunque… Eso está bien, haha! Significa que tengo poder en los sentimientos de la gente, mwahaha (mirada maligna)
Kyoru: Ya esperó mucho? Aquí ta el 6to cap, de tanto que me estuvo presionando, haha, bueno, al menos da frutos… Disfrute!
SpZeeru: De echo que fue un Axl/X, fue Axl quien se le abalanzó XD Ha, bueno, espero que el ffnet no se vuelva a poner malo y te deje ver este capítulo, que también está rebueno, aunque aquí pasamos a lo serio…
Okay then, disfruten, 3, 2, 1, yaoi!
Capítulo 6.-
Lugar: Algún lugar de la Montaña Snowlight
Hora: 9:10 PM
-¡Señor! Mire, la tormenta se está apaciguando- Exclamó Alia a su líder, quién estaba detenido mirando a un árbol con detención.- ¿Doy la señal de rastrear todo el área?-
Signas no respondió al instante, haciendo que la joven rubia se quedara muy extrañada. Se acercó a su superior y se puso a observar lo que había en aquél árbol. Al parecer el líder no se había impresionado del todo, pero Alia sí que lo estaba, al observar prendas de color azul a medias rasgar en las ramas del árbol. Sin cuestionarle de nuevo, la operadora se alejó corriendo hacia los Hunters que los habían acompañado en esta peligrosa misión de rescate.
-¡Oigan todos¡Hemos encontrado rastros de X y Zero¡No deben estar muy lejos¡Sepárense y busquen!-
-¡Sí, señora!-
Signas permaneció mirando el árbol, como si hubiera algo en él, pero no encontró nada más que una silueta de alguien haberse estrellado en contra de la nieve y haber dejado un agujero enorme, el cual por ahora estaba más o menos ya casi completamente cubierto de nieve, y luego... La operadora se volvió a dirigir al líder.
-¿Sucede algo, señor…?-
Señaló al piso, haciendo que la operadora bajara la mirada.
-¡Oh, Dios mío¡Creí que no habrían por la tormenta¡Hunters, regresen¡Hay un cambio de planes!- Ordenó la chica rubia. Quizás esto era esa pequeña luz de esperanza que anheló toda la noche…
Lugar: Desconocido
Hora: 9:50 PM
Su cuerpo se estremeció un poco al sentir el calor desentumecerlo tan repentinamente. Le costó bastante volver a abrir sus ojos, y más aclarar su vista, todo se veía muy borroso; juraba haber dormido mil años. Pero allí estaba, despertando. Por lo poco que veía, logró divisar una pequeña… ¿Fogata¿Qué…?
-¿Zero…?- Intentó hablar normalmente, pero su boca estaba seca, sus palabras no se oyeron muy dulces que digamos, a pesar de ello, el nombrado le escuchó.
-Descansa, X… Estás muy débil…- Le respondió en voz baja del otro lado del fuego, al parecer no lo estaba mirando.
X calló, intentando aclarar más su visión, pero sus ojos no reaccionaban del todo bien. Intentó recordar algo previo… Algo que le diera una pista de dónde se encontraba y qué había sucedido. Lo único que pudo recordar fue cuando la avalancha de nieve se le vino encima. Luego, negro. Todo de negro, no podía oír ni ver nada… Sin embargo, pudo sentir. Un calor muy fuerte, una sensación apasionada, un momento inolvidable… Pero nada más. Después, ya estaba de nuevo aquí…
Trató de fijar su vista en su amigo rubio, para ver qué hacía o si le estaba mirando. Sus ojos al cabo de segundos se aclararon, y mostraron a un Zero, bastante serio, tenía unas heridas en su cintura, y estaba con sus mejillas y ojos un poco rojos… X sabía perfectamente qué significaba eso, tan sólo recordar la expresión de Axl allá en el hotel… Cómo olvidar una cara así, pero le extrañaba por completo. ¿Acaso Zero estuvo llorando? No se la creía. Prefirió permanecer en silencio, y pensar más las cosas.
Analizó el lugar donde se encontraba. Una cueva helada y al parecer muy pequeña; notó que la entrada estaba más o menos repleta de nieve, pero se veían los rastros de que alguien salió y regresó. Ese seguro era Zero cuando trajo las ramas que en estos instantes se iban quemando en el fuego… Pero no podía realizar porqué se encontraba así, y aquí. Miró de manera vaga el piso, habían un par de manchas oscuras, cuyas les extrañaron un poco, pero no les dio mucha importancia, probablemente era barro causado por el polvo de la cueva que se humedeció con la nieve.
De repente, una brisa cruzó en la cueva, haciendo temblar a ambos Hunters. X se cubrió más con la chaqueta que traía puesta, mas al pasar unos segundos, notó que ésta no era la suya. Obviamente era de Zero, por el color rojizo, y la mancha de chocolate que aún tenía en ella… Sonrió levemente al pensar que Zero se preocupó de él para protegerlo del frío. Le alegraba ver de nuevo a su compañero actuando como es siempre, cuidadoso, protector y calmado… Sí, cómo había extrañado a ése Zero.
Permaneció mirando la fogata, pensando. Lo más probable que haya sucedido era que después de la avalancha, Zero haya venido a rescatarlo… Un rubor apareció en sus mejillas de tan sólo pensar eso. Después de todo, Zero aún le quería… Por lo menos como amigo.
-Qué dulce…-
-¿Qué cosa?-
X se tapó la boca al darse cuenta que se le habían escapado las palabras.- ¡Nada!- Se sonrojó mucho más, por la vergüenza. Menos mal sólo había dicho eso… Sonrió para sus adentros al recordar lo curioso que se ponía Zero siempre al no querer decirle algo; evidentemente, el rubio se puso de pie para sentarse a su lado.
-No me digas que nada, te conozco. ¿En qué pensabas?- Cuestionó Zero, mirando por el rabillo del ojo a su compañero, que permanecía tendido, tratando de esconder su rubor cubriéndose con la chaqueta.
-En que… Al final, después de todas las riñas que tuvimos en el día, viniste a rescatarme… ¿No es así?- Zero no le miró, disimulando no impresionarse por lo dicho, debía mantener su postura seria, como el Zero de siempre.
Miró fijamente el fuego en la fogata. Ya había sufrido mucho congelándose hace un rato, y el calor que ahora le producía la fogata lo hacía calmarse, mental y físicamente. Ahora ya tenía esperanzas de poder salvar a X, no se iría a morir congelado… Pero temía poder salir de aquí, puesto que en este sector aún no se había apaciguado la tormenta. No esperaba que alguien los viniese a rescatar, así que sus esperanzas de mantenerse vivos por mucho tiempo se fueron desvaneciendo lentamente.
-¿No, Zero?-
-¿Ah?- Lo sacó de sus pensamientos.
-Que viniste a salvarme… Porque, bueno, sacando conclusión, lo último que recuerdo fue cuando se me vino la avalancha de nieve de encima, y luego despierto aquí contigo…- Sonrió, sonrojándose un poco, puesto que lo último que dijo se podía mal pensar (yo lo mal pensé xD).- Así que me imagino que todo lo sucedido mientras no estaba consciente, fue sólo traerme hasta acá y cuidarme… Por eso decía que fue muy dulce de tu parte…-
Zero no prestó atención al cumplido, sino a lo que había dicho antes. ¿Acaso no recordaba que pasó cuando ya estaban dentro de la cueva? Pero si le había hablado y también…
-Yo sólo quiero… Que seas el mismo Zero de antes… A quien yo quiero… A quien yo amo…-
-¿Qué--
X empujó a Zero contra el piso, evitando que se moviera sujetándole aún por los hombros. Zero se puso del mismo color que su ropa, completamente rojo, al ver la manera en que lo había tratado recientemente.
-X, que estás…- Pero fue silenciado cuando X selló sus labios con él, besándolo apasionadamente. Zero cerró sus ojos, cediendo al momento, sintiendo el calor y sabor de los labios de X, tan dulces y suaves… Toda una delicia.
Fueron apenas segundos para cuando Zero se separó, mirando completamente perplejo a su amigo. No creía lo que había echo recién. ¡Lo habían besado, y él se dejó llevar! X parecía indiferente, serio, observándole… Zero no pudo quitar su mirada, quería más, oh, claro que sí, pero no entendía qué diantres trataba de hacer X con él, ni siquiera tuvo un instante para pensar en las últimas palabras que le había dicho, y ya se estaba deleitando con el beso que le había entregado de manera inesperada.
Zero temió bastante este comportamiento, le extrañaba ver a X así¡Él no es así! No es del tipo de gente que hace cosas tan repentinas sin el consentimiento del otro, más aún con él. X sabía completamente que con Zero no se le podía tratar como a un cualquiera, pero aún así lo había echo, se le había abalanzado a besarlo… Sin siquiera saber la respuesta de Zero.
X se acercó nuevamente y lamió los labios de su amado, como si estuviera tentándolo a seguir con su expresión de cariño. Zero al no saber qué hacer, prefirió aceptar sus deseos, y se dejó llevar por las intenciones de X. El de azul volvió a enlazar el beso, y Zero lo disfrutó, también correspondiéndole de la misma manera. Ambos sintieron sus cuerpos ir aumentando su temperatura a mil por hora, ahora ya no importaba el frío, tenían bastante para calentarse mutuamente.
X fue bajando hasta el cuello de Zero, besándole también, con mucho cuidado. Zero suspiraba, sintiendo un enorme placer corriéndole por todo su ser. No le parecía mucho la idea de que X sea el que dominara en esto, pero… ¡Qué va¡Le gustaba! No quería detenerse, ahora que X se estaba comportando tan raro (pero bien ;D), debía aprovechar… Sintió las frías manos de X por debajo de su camiseta acariciar su pecho, delineando con sus dedos todo sector, haciendo estremecer levemente al rubio. Le encantaba esa sensación, nunca antes alguien le había causado algo así con tan sólo una caricia, se notaba que X lo excitaba muy fácilmente.
Pero de repente, su placer se desvaneció cuando X se detuvo súbitamente. Zero abrió sus ojos para observarle. ¡Y eso que estaban tan bien!. Y luego, dolor; un enorme dolor, al sentir como X se intentaba mantener sobre Zero, sujetándose de su cintura, enterrando sus uñas. Al parecer X estaba volviendo a su estado débil, o peor aún, lo estaba sufriendo. Zero intentó hacer que X lo soltara, pero éste estaba muy sujetado, no quería separarse… Zero también sufrió cuando X presionó con más fuerza sus dedos, tanta que le causó unas injurias terribles, cuyas no tardaron en comenzar a sangrar.
-Z-Zero…- X se oía cansado, débil, con miedo. Sus voz era entrecortada y jadeante. Zero no supo que hacer, pero no iba a aguantar que X lo siguiera lastimando.
Tomó con fuerzas el rostro de X, e hizo que le viera fijamente. Se impresionó al ver los ojos de su amigo completamente vacíos, sin ningún resplandor que señalara tener vida. Estaba llorando… De inmediato acertó, X no estaba para nada conciente de lo que hacía.
-¡X¡Calma, me estás… Haciendo daño…!- Intentó hablarle para que reaccionara. Pero su rostro se empalideció al sentir como X, gritando de terror y dolor, enterraba completamente sus manos dentro de él, saltando sangre a borbotones. Zero arqueó su cuerpo, tomando por los brazos a su amigo. No le importó que a X también le doliera más aún estar haciéndole daño, ya no aguantaba más. Utilizando una fuerza sobrehumana lo arrojó contra una pared de la cueva, azotándolo abruptamente.
X cayó al piso en acto seguido, ahora sin mostrar ninguna respuesta. Zero estuvo varios segundos intentando detener el flujo de sangre que caía por su cuerpo, hasta que lo logró; sabía que su sistema de auto-reparación iba a activarse de inmediato y comenzar a cubrir sus heridas. Aún así le dolía bastante… Pero como si le hubieran dado un buen golpe en el rostro, reaccionó a darse cuenta lo terrible que le había echo a X. Por lo débil que se encontraba le costó bastante ponerse de pie y acercarse lo más rápido posible a su amigo, que yacía en el suelo, aún, sin dar señales de vida. Lo tomó y lo zarandeó un poco, completamente preocupado de haberlo matado con el golpe.
-X… Por favor, despierta… Agh, yo no…- Pero no respondió, al parecer se había desmayado por completo por el golpe, al menos respiraba… Zero lo abrazó con fuerzas, lamentando de nuevo lo que había echo.
Y de nuevo la cueva se quedó en silencio.
Zero apretó sus puños con fuerza al recordar aquello, bajando levemente la mirada. Después de lo que había sucedido, decidió tomar riendas en el asunto. El cuerpo de X lo estaba haciendo hacer cosas inimaginables, por culpa del frío, y posiblemente, por su estado mental… Zero sabía que X también estaba muy deprimido por todo lo que había pasado ese día, por lo cual, era probable que en algún momento reaccionara involuntariamente, no se sabe de qué manera, pero dejó a Zero casi sin aliento… No se pudo perdonar el echo de que había disfrutado aquel momento inconsciente de X, y al final de cuentas le había echo un daño tremendo…
X miró preocupado a Zero, se le veía muy pensativo, y su expresión mostraba algo de culpabilidad. No sabía porqué, pero le intrigaba bastante. No encontraba las palabras para comenzar una conversación, le tenía temor a que Zero no le volviera a responder de nuevo, así que prefirió mantenerse en silencio, mientras que se sentaba, ya retomando un poco sus fuerzas.
Ninguno se dirigió palabra alguna, por muchos minutos. Permanecieron mirando la fogata, pensando…
Zero entrecerró un poco sus ojos.- X… Quiero hacerte una pregunta, pero no quiero que te… Alarmes o algo así… Quiero que me respondas con un sí o un no…-
El chico de cabello castaño miró confuso a su compañero, la pregunta lo atrapó por sorpresa.- Claro, ojalá no sea del todo--
-¿Tu me amas?- Preguntó sin más preámbulos.
Y se sintió como si el mundo entero se callara. X estaba pasando por una fase de tornarse en todos los colores rojos existentes, mientras que miraba con ojos del porte de un plato de sopera al rubio, quien permanecía sin darle una mirada, esperando la respuesta en silencio. Su corazón parecía estallar de su pecho, y su respiración era acelerada y descontrolada. Sintió un nudo enorme en su garganta, evitándole responder, o tan si quiera pensar en una respuesta.
Y pues sí que lo había dejado "plop". X sabía bastante bien que lo amaba, pero… No quería decírselo, no tan repentinamente… Él esperaba que si tuviese que decirlo, fuera en su momento, y a su voluntad, pero ya no podía hacer nada, Zero le había pedido una respuesta, y X había aceptado… Claro sin saber que le iba a preguntar cosa semejante.
Zero suspiró ya después de un par de minutos sin oír tan si quiera una reacción de X (bueno, no lo estaba mirando, así que no podía ver la cara de perplejo que tenía).- Lo siento… Creo que no debí haber preguntado algo así… Neh, qué estupidez… Sólo olvídalo…-
X se calmó, pero se entristeció al ver cómo Zero se había desilusionado al no recibir una respuesta; lo pudo ver por el tono de voz que puso. Pero por más que tratara, no podía responderle, no se encontraba listo…
-Es sólo que…- Zero volvió a retomar la palabra, en un tono muy desesperanzado.- Viendo las circunstancias… Deseaba preguntarte eso… Antes de…-
-¿Circunstancias¿Antes de qué, Zero…?- Preguntó X, un poco intrigado, no le gustaba el aire temeroso que se puso en el ambiente.
-Antes de que muramos…- Dijo Zero, suspirando.
-¿Mu-Muramos…¿De qué hablas…?-
Bajó más la mirada, temía decírselo, pero debía.- Sucede que… Estamos aquí atrapados en la tormenta… No tenemos alimento, ni menos abrigo… No tengo la menor idea donde nos encontramos, y al parecer nadie podrá venir a salvarnos… No a tiempo…- X tragó saliva al escuchar eso.- Así que…- Zero se volteó y miró fijamente a su compañero.- Necesito saberlo…-
X desvió la mirada. Ahora ya no tenía la menor opción, debía hablar ahora que no sabían cuanto tiempo más tenían ellos de vida antes de morir congelados allí. Pero súbitamente, como si fuera por una fuerza involuntaria, fijó la vista en sus manos… Rojas, ensangrentadas…
-Z-Zero…- Sintió un horror enorme inundarle, sin saber porqué tenía las manos así.- Qué… Q-Qué…-
-Hm, era inevitable que te dieras cuenta…- Murmuró Zero como si fuera lo más normal del mundo. Al parecer ya no le importaba nada, sabiendo que su fin estaba cerca.
X intentó quitar la mirada de sus manos, pero era algo tan petrificante, estaba completamente aterrado… Luego miró al piso, aquellas manchas que había visto, no era para nada barro… Era también sangre… Y hacia Zero, las heridas que tenía en su cintura… Miró sus manos nuevamente, luego a Zero, y luego sus manos. Temió lo peor.
Bajó su mirada, temblando de terror, mientras que permanecía observando sus manos ensangrentadas.- Zero… ¿Qué… He… Hecho…?- Unas lágrimas rodaron por sus mejillas, sintiéndose culpable de haberle echo tal daño a su amigo.
Pero en un abrir y cerrar de ojos, X sintió como los brazos de Zero lo rodeaban, haciendo que se apegara a él. X no alzó la mirada, sólo intentó calmarse un poco, puesto que cualquier idea de lo que había sucedido en su estado de inconsciencia para estar así, le provocaba un terror increíble.
-Al llegar aquí… Lo único que yo sentía era un sentimiento de culpabilidad y tristeza enorme…- Comenzó a explicar Zero, manteniendo el abrazo.- Así que lo único que pude hacer es llorar y sollozar por todo lo que había sucedido en el día, las cosas que te había echo… Me sentía muy mal por ello…- X ahora comprendió el hecho de que tuviese el rostro como si hubiera llorado a morir.- Fue algo estúpido, puesto que tu estabas completamente inconsciente, y no podías escuchar lo que yo te decía…-
Conforme X escuchaba, misteriosamente, sintió como si le vinieran recuerdos que no creyó haber tenido… Pero ahí volvían, aclarándose muy lentamente. Siguió oyendo lo que decía, sin levantar la mirada, no quería verle la cara a Zero.
-Entre todos mis intentos para mantenerte con vida, te abracé, para entibiar tu cuerpo, mientras seguía tratando de hablarte… Pero sorpresivamente tú despertaste, o algo así… Comenzaste a decirme cosas de que dejara de disculparme y luego… Me… Me…- Zero no pudo continuar, le dolió abruptamente tan sólo pensarlo.
-A quien yo quiero… A quien yo amo…-
X sintió cómo esas palabras aparecían rondando en su mente. Se sonrojó completamente. La escena apareció como por arte de magia en su cabeza. ¡Se lo había dicho? Sin quererlo se cubrió el rostro con las manos, tratando de esconder su rubor, manchándose de sangre (de nuevo, recuerden cuando no quiso decirle en qué pensaba? xD). Zero no dijo nada, no le estaba mirando fijamente, pero debía decírselo de todas maneras.
-Me dijiste que me…- Bajó la mirada, aún sin mirar a su compañero.
-No sigas, Zero, no quiero saber más…- Interrumpió X en voz baja.
El rubio lentamente posó su mirada en el rostro de su amigo, quien ahora estaba intentando evitar llorar, limpiando las pequeñas lagrimas que emanaban de sus ojos con sus brazos. X estaba ahora más que destrozado, ahora que Zero de todos modos sabía que lo amaba, y se lo había dicho inconscientemente… Para variar, ya se imaginó la secuela, de cómo llegó a tener esas heridas allí, sus manos ensangrentadas, era algo fácil de ver, por lo cual, es posible que ahora Zero no quiera absolutamente nada con él… Ya lo había perdido, y todo por su estado inconsciente.
Muchos minutos en silencio para cuando X calmó su leve llanto; Zero sólo se quedó mirándole, como si esperara algo… Y se dignó a hablarle.
-Lo que yo quiero saber…- X se calló súbitamente escuchando atento las palabras.- Es si tú, el X conciente, ya despierto… Me amas de verdad…-
No supo porqué, pero el cuerpo de X sintió un impulso, quizás no estaba todo acabado. Por un lado, Zero dejó del lado la parte inconsciente y ahora se dirigía al consciente, vivito y coleante, y por el otro, Zero podía esperar dos respuestas, no sólo una obvia. X se puso a pensar…
La tormenta ahora había cubierto casi toda la entrada con nieve, ahora con menos posibilidades de escapatoria. Un par de ruidos estruendosos se oían desde afuera; era el viento que ahora estaba totalmente feroz. No era ningún chiste que las tormentas de ese sector eran mortales.
X restregó un poco sus manos contra el suelo, para quitarse la sangre de ellas, pero era casi en vano, haciendo que se alterara un poco. Aún siendo un Hunter de la mejor categoría, si hay algo que despreciaba, era ver sangre… Le daba un aire de asesino, no sabía porqué, y peor aún si esta era la de su amigo. Zero permaneció esperando la respuesta calmadamente… Quería saber…
El de azul tragó saliva; estaba dispuesto a decírselo, pero súbitamente algo lo detuvo. ¿Y si se lo decía sin que él sintiera lo mismo? Quizás la mejor respuesta sea un no, así no terminarían tan mal… Supuso que lo que sea que le haya echo a Zero inconscientemente, le debió haber dejado cierto trauma. Pero realmente deseaba decirle la verdad. Esto era un 50/50, habían también posibilidades de que Zero también piense igual, como las que hay que no… ¿Qué hacer¿Qué hacer?
-Y-Yo… Zero… Pues…- Comenzó a balbucear, sintiendo que los nervios iban cubriéndolo de pies a cabeza. Su cuerpo comenzó a temblar, ahora se sentía acorralado por la emoción y a la vez temor.
Sus ojos se cruzaron con los de Zero. Se veía tan interesado, pero a la vez muy serio. A lo mejor tenía razón, Zero necesitaba saber si lo que sentía sobre su amor era falso, para así perdonarle lo que hizo cuando no estaba consciente. Sin embargo no quería mentirle… Vaya que lo amaba. Agachó su cabeza, viendo de nuevo a sus manos.
Zero se desesperó al ver que X no le iba a responder. Oyó ciertos crujidos del exterior, haciendo que se alarmara más; sintió un escalofrío terrible, como si se le consumiera el tiempo velozmente… Era un mal presentimiento. Más crujidos, más fuerte se oía la tormenta, más cerca del… Fin.
Tomó con fuerza a X del rostro, haciendo que lo mirara.- ¡X, por favor, responde!
-Zero, yo… ¡No puedo!- X se asustó de la manera en que lo observaba.
-¡Si no me lo dices, lo diré yo!- Zero ya parecía frenético, esa mirada de temor…
-¿Qué?- No entendió a qué se refería.
-¡X, yo te--!
Y luego se sintió un golpe tremendo, sonidos de rompedura infernales, y ambos se quedaron callados sin decir palabras, para cuando el fuego de la fogata se oscureció y todo se puso negro. La nieve se vino adentro de la cueva brutalmente, y cubrió todo… Luego un derrumbe, y luego silencio.
… Último cap? … Mentí! HAHAHAHAHAHA (sale corriendo)
