lunes, 20 de octubre de 2003
Contestando Reviews:
Rika Himura Hiwatari: Jejeje, no te preocupes, soy igual que tú. Y eso de que Rei es sadomaso... pues por ahí va la cosa (y el título del fic)
Rei Kon 18: soy mala. De eso me convencí hace mucho, y con otro fic. Y en cuanto a los otros fics, ya van ya van.
Aiko5: no podré actualizar muy seguido. ¿Me creerías que aún no salgo de clases?, ¿y que recién saldré de vacaciones el 27 de enero?, y después trabajaré, pero intentaré poner lo más posible en este mes de diciembre. ¡Mucho esfuerzo!
Estoy enfermo Kai.
Capítulo 3.
Max y Takao esperaban junto al teléfono alguna noticia. Kai les había prometido llevar a Rei a la casa de Mizuhara en poco tiempo, pero habían pasado horas y no tenían noticias de ninguno de los dos.
-Realmente me preocupa Rei... -murmuró el rubio pecoso -ha estado tan alejado de nosotros este último tiempo. ¿Crees que tenga algún problema o que esté enojado por algo?
-No lo creo... Rei es de los chicos que te dicen todo a la cara, aunque con diplomacia... -Kinomiya se tendió en el suelo y miró el techo -Pero pienso que deben estar bien. Quizás estén conversando, ya sabes que esos dos se llevan más entre ellos que con nosotros...
-No digas eso Takao... todos somos amigos...
-No digo que no sean nuestros amigos, pero ellos son distintos a nosotros. Mejor esperemos la llamada de Kai, estoy seguro que están bien...
-Supongo que si... ¿has sabido algo de Kyo?
-Debería estar por llegar.
-Genial. Hace varios días que no lo vemos.
-Su trabajo con el Señor Dickenson le pide mucho tiempo.
-Pero está tan feliz que no me atrevo a sugerirle vacaciones.
-Es cierto...
Ambos miraron el techo de la habitación y sonrieron.
-Espero que lleguen pronto.
-Si...
El silencio que siguió no les ayudó a disipar las dudas que los invadían... ¿qué pasaba con Rei?, ¿porqué Kai no había llamado?
-¿Comamos Max?
-Si, es lo mejor....
***
El silencio más absoluto reinaba en la amplia habitación. Rei dormía pesadamente en la cama, apenas cubierto por el cobertor color vino, mientras una helada brisa entraba por las ventanas abiertas, jugando con las cortinas damasco. Kai observaba con el teléfono en la mano. Las risas de aquél sujeto todavía resonaban en su mente, llenándolo de ira.
-"¿Tentado Kai?"
-Si te acercas, te mato.
-"Jajajaja, no me hagas reír"
-Bastardo...
-"Ya le verás lo que yo le veo..., el mismo se encargará de eso"
-No vuelvas a buscarlo...
-"Te devolveré tus cosas mañana por la mañana, en la Plaza Mayor, frente al Estadio Negro. Si las quieres las buscas, sino... me gustó mucho tu chaqueta...:"
Tentado... ¿cómo podía insinuar siquiera que su preocupación por Rei derivaría en algo diferente?, en algo... malo...
-"No... prometí cuidarlo..."
Con pasos sigilosos se acercó a la cama, quitando suavemente los mechones negros que caían sobre la morena cara.
-"Siempre creí que podrías cuidarte solo... que no necesitabas de mi eterna presencia... Siempre imaginé que de todo el equipo serías el último en necesitarme.... vaya vuelta de la vida"
La débil figura de Kon reposaba ahora en un sueño intranquilo. Sus ojos fuertemente cerrados y los labios entreabiertos en busca de aire fresco evidenciaban una pesadilla que lo torturaba sin el beneficio del despertar.
-Rei... -susurró en su oído mientras movía levemente su hombro -Rei...
Un sobresalto y la inmediata tensión del cuerpo entero le indicaron a Hiwatari que su compañero había despertado, o al menos eso creía.
-¿Estás despierto Rei?
De un brusco movimiento, Rei se giró, alejándose del contacto de Kai, cubriéndose completamente con la frazada mientras su cuerpo entero temblaba sin control.
-Oi... ¿qué pasa?
Desde el momento en que su mano se apoyó en el costado de Rei hasta el minuto exacto en que cayeron envueltos en sábanas y almohadas, nada estuvo claro. De pronto Kai se vio en el suelo, sobre algo cálido y tembloroso. La respiración agitada del muchacho chino lo obligó a intentar ponerse de pie rápidamente, aunque las sábanas se lo negaron, permitiéndole, de momento, solo alejarse lo suficiente para dejar un contacto mínimo entre sus piernas y brazos. Preocupado y apenado, Kai miró a Rei, y su alma se deshizo en pena. El chico chino estaba un poco agazapado bajo su cuerpo, intentando evitar el temblor que lo invadía, con los ojos fuertemente cerrados y las lágrimas corriendo silenciosas por sus mejillas morenas. Sus labios eran mordidos con crónico nerviosismo intentando apagar los sollozos que hacían que su fisonomía saltara de tanto en tanto.
-Rei...
Kon negó con la cabeza varias veces y abrió los ojos, luciendo una triste y derrotada sonrisa.
-Estoy bien, estoy bien... -decía en voz baja mientras sus manos se posaban en el pecho de Kai para deslizarse suavemente hasta sus hombros, entrelazando los dedos tras la nuca blanca de Hiwatari -estoy bien... no pasa nada...
El ruso se tensó ante el forzado contacto. El cuerpo de Rei temblaba por completo sin control alguno, y sus ojos se perdían en la niebla aunque disimularan observarlo.
-Rei...
-Yo... -como en trance, Kon acercó a Kai a su cuerpo, abrazándolo con extrañas ansias -
-Despierta Rei... -violentamente se alejó, zamarreando a su compañero de los hombros-¡Rei! -repentinamente los dorados ojos tomaron algo de brillo y parecieron volver a la realidad -
-¿Kai? .... ¿qué...?
-Tranquilo... -calmó al ver que comenzaba a temblar nuevamente -tropecé al pasar junto a la cama y te arrastré conmigo, eso es todo, no ha pasado nada... Créeme...
Lagrimeando, Rei asintió. Su cara estaba teñida de rojo y sus ojos ya estaban hinchados de tanto llorar. Kai sintió que sus propias gemas marrones se llenaban de agua, pero luchó por ser fuerte. Debía ser firme para mantener a Rei a salvo de aquel cerdo de Bryan...
-Rei...
-Ayúdame Kai... por favor... -suplicó una vez más -Ayúdame...
Los brazos del ruso se cerraron sobre la pequeña cintura del chino, mientras cambiaba posiciones. Aún envueltos en sábanas y almohadas, Rei lloró en el pecho de Kai por otro cuarto de hora, mientras Hiwatari soltaba fugaces lágrimas de tanto en tanto.
-Yo te cuidaré Rei... lo prometo...
Y por primera vez, Kon se sintió seguro en esos brazos fuertes que lo cobijaban sin asfixiar. Y su corazón se atrevió a abrir un poco la puerta y ver quien llamaba buscando su confianza. Y su alma abrió los brazos y se aferró a esa única esperanza de salvación que el destino le ofrecía.
-Kai... -con ojos suplicantes lo miró de nuevo, sin saber como agradecer el primer rayo de luz y vida que sentía en su pecho en semanas. Entonces hizo lo único que, creyó, podía significar un 'gracias'...
-Rei...
Y sus nombres se dijeron en un susurro entre narices. Y sus labios se unieron, y Kai sintió su cuerpo temblar...
"¿Tentado Kai?"
Y el beso se prolongó por algunos segundos, enviando increíbles sensaciones por sus cuerpos.
"Pronto le verás lo que yo le veo... el mismo se encargará de eso"
Y Hiwatari tembló... y tembló de duda....
Quizás Bryan tenía razón....
Y cerrando los ojos, se abandonó a la sensación de Rei en su boca....
-"Delicioso..."
***ediciones_ryochan@hotmail.com***
salió cortito ^.^
Contestando Reviews:
Rika Himura Hiwatari: Jejeje, no te preocupes, soy igual que tú. Y eso de que Rei es sadomaso... pues por ahí va la cosa (y el título del fic)
Rei Kon 18: soy mala. De eso me convencí hace mucho, y con otro fic. Y en cuanto a los otros fics, ya van ya van.
Aiko5: no podré actualizar muy seguido. ¿Me creerías que aún no salgo de clases?, ¿y que recién saldré de vacaciones el 27 de enero?, y después trabajaré, pero intentaré poner lo más posible en este mes de diciembre. ¡Mucho esfuerzo!
Estoy enfermo Kai.
Capítulo 3.
Max y Takao esperaban junto al teléfono alguna noticia. Kai les había prometido llevar a Rei a la casa de Mizuhara en poco tiempo, pero habían pasado horas y no tenían noticias de ninguno de los dos.
-Realmente me preocupa Rei... -murmuró el rubio pecoso -ha estado tan alejado de nosotros este último tiempo. ¿Crees que tenga algún problema o que esté enojado por algo?
-No lo creo... Rei es de los chicos que te dicen todo a la cara, aunque con diplomacia... -Kinomiya se tendió en el suelo y miró el techo -Pero pienso que deben estar bien. Quizás estén conversando, ya sabes que esos dos se llevan más entre ellos que con nosotros...
-No digas eso Takao... todos somos amigos...
-No digo que no sean nuestros amigos, pero ellos son distintos a nosotros. Mejor esperemos la llamada de Kai, estoy seguro que están bien...
-Supongo que si... ¿has sabido algo de Kyo?
-Debería estar por llegar.
-Genial. Hace varios días que no lo vemos.
-Su trabajo con el Señor Dickenson le pide mucho tiempo.
-Pero está tan feliz que no me atrevo a sugerirle vacaciones.
-Es cierto...
Ambos miraron el techo de la habitación y sonrieron.
-Espero que lleguen pronto.
-Si...
El silencio que siguió no les ayudó a disipar las dudas que los invadían... ¿qué pasaba con Rei?, ¿porqué Kai no había llamado?
-¿Comamos Max?
-Si, es lo mejor....
***
El silencio más absoluto reinaba en la amplia habitación. Rei dormía pesadamente en la cama, apenas cubierto por el cobertor color vino, mientras una helada brisa entraba por las ventanas abiertas, jugando con las cortinas damasco. Kai observaba con el teléfono en la mano. Las risas de aquél sujeto todavía resonaban en su mente, llenándolo de ira.
-"¿Tentado Kai?"
-Si te acercas, te mato.
-"Jajajaja, no me hagas reír"
-Bastardo...
-"Ya le verás lo que yo le veo..., el mismo se encargará de eso"
-No vuelvas a buscarlo...
-"Te devolveré tus cosas mañana por la mañana, en la Plaza Mayor, frente al Estadio Negro. Si las quieres las buscas, sino... me gustó mucho tu chaqueta...:"
Tentado... ¿cómo podía insinuar siquiera que su preocupación por Rei derivaría en algo diferente?, en algo... malo...
-"No... prometí cuidarlo..."
Con pasos sigilosos se acercó a la cama, quitando suavemente los mechones negros que caían sobre la morena cara.
-"Siempre creí que podrías cuidarte solo... que no necesitabas de mi eterna presencia... Siempre imaginé que de todo el equipo serías el último en necesitarme.... vaya vuelta de la vida"
La débil figura de Kon reposaba ahora en un sueño intranquilo. Sus ojos fuertemente cerrados y los labios entreabiertos en busca de aire fresco evidenciaban una pesadilla que lo torturaba sin el beneficio del despertar.
-Rei... -susurró en su oído mientras movía levemente su hombro -Rei...
Un sobresalto y la inmediata tensión del cuerpo entero le indicaron a Hiwatari que su compañero había despertado, o al menos eso creía.
-¿Estás despierto Rei?
De un brusco movimiento, Rei se giró, alejándose del contacto de Kai, cubriéndose completamente con la frazada mientras su cuerpo entero temblaba sin control.
-Oi... ¿qué pasa?
Desde el momento en que su mano se apoyó en el costado de Rei hasta el minuto exacto en que cayeron envueltos en sábanas y almohadas, nada estuvo claro. De pronto Kai se vio en el suelo, sobre algo cálido y tembloroso. La respiración agitada del muchacho chino lo obligó a intentar ponerse de pie rápidamente, aunque las sábanas se lo negaron, permitiéndole, de momento, solo alejarse lo suficiente para dejar un contacto mínimo entre sus piernas y brazos. Preocupado y apenado, Kai miró a Rei, y su alma se deshizo en pena. El chico chino estaba un poco agazapado bajo su cuerpo, intentando evitar el temblor que lo invadía, con los ojos fuertemente cerrados y las lágrimas corriendo silenciosas por sus mejillas morenas. Sus labios eran mordidos con crónico nerviosismo intentando apagar los sollozos que hacían que su fisonomía saltara de tanto en tanto.
-Rei...
Kon negó con la cabeza varias veces y abrió los ojos, luciendo una triste y derrotada sonrisa.
-Estoy bien, estoy bien... -decía en voz baja mientras sus manos se posaban en el pecho de Kai para deslizarse suavemente hasta sus hombros, entrelazando los dedos tras la nuca blanca de Hiwatari -estoy bien... no pasa nada...
El ruso se tensó ante el forzado contacto. El cuerpo de Rei temblaba por completo sin control alguno, y sus ojos se perdían en la niebla aunque disimularan observarlo.
-Rei...
-Yo... -como en trance, Kon acercó a Kai a su cuerpo, abrazándolo con extrañas ansias -
-Despierta Rei... -violentamente se alejó, zamarreando a su compañero de los hombros-¡Rei! -repentinamente los dorados ojos tomaron algo de brillo y parecieron volver a la realidad -
-¿Kai? .... ¿qué...?
-Tranquilo... -calmó al ver que comenzaba a temblar nuevamente -tropecé al pasar junto a la cama y te arrastré conmigo, eso es todo, no ha pasado nada... Créeme...
Lagrimeando, Rei asintió. Su cara estaba teñida de rojo y sus ojos ya estaban hinchados de tanto llorar. Kai sintió que sus propias gemas marrones se llenaban de agua, pero luchó por ser fuerte. Debía ser firme para mantener a Rei a salvo de aquel cerdo de Bryan...
-Rei...
-Ayúdame Kai... por favor... -suplicó una vez más -Ayúdame...
Los brazos del ruso se cerraron sobre la pequeña cintura del chino, mientras cambiaba posiciones. Aún envueltos en sábanas y almohadas, Rei lloró en el pecho de Kai por otro cuarto de hora, mientras Hiwatari soltaba fugaces lágrimas de tanto en tanto.
-Yo te cuidaré Rei... lo prometo...
Y por primera vez, Kon se sintió seguro en esos brazos fuertes que lo cobijaban sin asfixiar. Y su corazón se atrevió a abrir un poco la puerta y ver quien llamaba buscando su confianza. Y su alma abrió los brazos y se aferró a esa única esperanza de salvación que el destino le ofrecía.
-Kai... -con ojos suplicantes lo miró de nuevo, sin saber como agradecer el primer rayo de luz y vida que sentía en su pecho en semanas. Entonces hizo lo único que, creyó, podía significar un 'gracias'...
-Rei...
Y sus nombres se dijeron en un susurro entre narices. Y sus labios se unieron, y Kai sintió su cuerpo temblar...
"¿Tentado Kai?"
Y el beso se prolongó por algunos segundos, enviando increíbles sensaciones por sus cuerpos.
"Pronto le verás lo que yo le veo... el mismo se encargará de eso"
Y Hiwatari tembló... y tembló de duda....
Quizás Bryan tenía razón....
Y cerrando los ojos, se abandonó a la sensación de Rei en su boca....
-"Delicioso..."
***ediciones_ryochan@hotmail.com***
salió cortito ^.^
