Ahora si contesto los reviews que había ^^.
Neko-Jeanne: Neko neko, mi querida Neko... estos capítulos ni tú los tienes ^^.
Rei Kon 18: Jejeje, lo siento, pero necesito a Bryan vivo... al menos unos capítulos más. Pero no te preocupes, el desvío fue necesario, y habrán otros pequeños, que solo servirán para ubicar mejor a cada personaje ^^. Disfruta de lo que la psicóloga vendrá a desarmar...
Kiri-chan: Siempre me ha gustado que Rei sea importante para Kai, ya que este precioso bishounen no pareciera tener ninguna persona especial en la realidad. Bueno "realidad". Además, se ven bien juntos ^^. En cuanto a Bryan... no aseguro nada.
Dayiah Belsebú: ¿Dos capítulos está bien?. Hacía tiempo que no escribía sobre este fic. Espero que te gusten. Gracias por tus palabras ^.^.
Bien, hora de sufrir, digo de leer.
~ · ~
Estoy enfermo Kai.
Capítulo 7.
Una breve conversación con su joven primo para que pareciera que no sabía nada de nada. Anika sonreía con naturalidad y cordialidad, mostrándole a Kai que podía confiar enteramente en ella.
--No te preocupes Kai, haré lo que esté a mi alcance.
Y Hiwatari sabía que eso era realmente mucho. La mujer pudo ver como la sombra desaparecía de sus ojos marrones y una sonrisa cristalina nacía en su cara. ¿Hacía cuanto que no veía esas expresiones en su único primo...?, claro, ¿cómo olvidarlo?. No veía esas sonrisas... desde que Kai era su único primo.
--La historia sería tan diferente de haber seguido vivo Taichi... –dijo mirando por la ventana de su habitación –Tu hermano menor está en perfecto estado –la llama del encendedor brilló y el humo del cigarro fue expelido –Los planes salieron casi a la perfección, ya sabías que Voltaire no era cuidadoso, como nosotros... Ni como tú ni como yo. Pero teníamos 9 años, ¿cómo demostrarle que Kai no era perfecto de nacimiento?. Ahora lo veo todo tan claro... Sin embargo ahora, tantos años después vienes a darme problemas. Nunca los tuvimos Tai, ¿porqué ahora me molestas con este muchacho?. Solo a ti se te ocurre crear el prototipo de conducta con 15 años... la base de los Demolition Boys.
--¿Prototipo de conducta?
--Claro. Separas la personalidad en espectros, y cada uno de ellos es un rasgo de la personalidad. Luego dejas el que más te convenga. Así, puedes manejar chicos que no sean capaces de sentir miedo o preocupaciones. Incluso amor y odio. Eres capaz de manejar todo el rango de posibilidades que el cerebro humano genera.
--Eso nos será útil con el entrenamiento de tu hermano.
--Voltaire no lo quiere usar. No confía.
--Es un tonto. Propongámoselo a Boris.
--Eso es mejor.
--Bryan... –dijo mirando un expediente a la luz de la luna –Clase B, especto azul. Vaya, nadie ha llegado al espectro negro... O sea, patrón de conducta tres: dominación, superioridad y todas esas basuras que no sirven mientras no sea un asesino... –molesta tiró el expediente a la cama –Tal como lo pensaba, una reverenda estupidez. Boris también es un inútil. ¡Porqué se te ocurrió morir Tai!. Fue la excusa perfecta para sacarme del entrenamiento de Kai. Pero bueno, ni siquiera yo puedo traerte de vuelta... aunque quizás después de esto y del proyecto haga un clon tuyo o algo así.
Despreocupadamente comenzó a desvestirse. Le gustaba hablar sola y recordar a Taichi-kun.
Si alguien decía que solo había un genio por familia, que manera de equivocarse. Taichi y Anika...
--Podríamos haber conquistado el mundo Tai. Pero no. Se te ocurrió morir.
Ya cambiada de ropa, abrió su laptop y buscó nuevamente los archivos de Bryan. Luego abrió los de Rei y los de Kai.
--Obsesión... esa es la base del problema... Bryan solo se irá si lo matan, pero no puedo decirle eso a Kai por dos razones... –pensaba –Una, es que lo haría, lo que no es malo pero si es imprudente, y dos porque ese chico me conviene para demostrar mi teoría. En cuanto a Kon... es extraño que el chico haya caído tan fácilmente... su perfil no es de ese tipo... Patrón de conducta A, espectro... ¡amarillo!, ¡el chico es un santo!. Vaya... hace años que no trataba a alguien con ese espectro... pero algo me molesta... ¿qué será...?. Kon Rei, patrón amarillo, tiranizado por un espectro azul... ¿porqué?, esos chicos jamás caen en la influencia de un tipo B o C... Demonios... por último, Kai, patrón B2, espectro púrpura. Mas malo que Bryan, más estratega que Rei. Un patrón realmente interesante.... Vaya, creo que no pensaré más en ellos por esta noche. Quiero dormir.
Haciendo de su melena una compacta trenza blanca y resplandeciente se tiró sobre la cama, sin embargo fue incapaz de dormir. La pregunta seguía dando vueltas en su cabeza.
¿Porqué Rei está bajo el control de Bryan?
Las horas pasaban, y en su mente se formaban miles de posibles hipótesis. Algunas quedaron luego de un riguroso filtro, pero nada más podía hacer mientras no hablara con el muchacho.
--Primero con Rei... –dijo bostezando –Luego con Bryan...
Y por fin se quedó dormida.
***
--¿Duele?
--No, para nada.
La luna se alzaba casi sobre la vertical entre el cielo y el suelo, y ellos continuaban mirando y curando cortes, quemaduras, golpes y arañones.
--Es una suerte que muchas de estas marcas puedan desaparecer –dijo Kai –Anika puede conseguir los mejores medicamentos para que en poco tiempo tu piel sea la de antes. Así podrás lucir tu traje chino sin problemas.
Rei sin embargo, guardó silencio. Kai solía hablar lo como serían las cosas 'cuando todo acabara', pero él no sentía esa seguridad... ni ese deseo.
--Si Bryan ve mi piel limpia la marcará de nuevo –dijo en voz baja –siempre es lo mismo.
--Bryan no volverá a ponerte una mano encima Rei, confía en mí.
--...Claro.
Cuello, manos, brazos, pecho, espalda, abdomen, muslos, tobillos, orejas, incluso nuca y palmas de los pies. Cada centímetro de su cuerpo tenía una marca, un rasguño o una quemadura. Solo faltaba la marca a fuego que dijera "propiedad de Bryan"
--Rei...
--¿Mm?
--Siento haber sido... desagradable hoy en la tarde...
--Ok, no hay problema. Todos tenemos malos días, aunque realmente no me gustaría que se repitiera... me pusiste muy nervioso.
--...De acuerdo.
La barbilla de Hiwatari tembló levemente. Tenía unas asquerosas y enormes ganas de llorar, de tomar a Rei de los hombros y gritarle que volviera a ser el de antes... Pero suponía que él no era quien para hacer milagros.
--¿Cómo puedes pedir sonrisas y comprensión después de lo que ha pasado? –se reprochó en silencio –¿Cómo te atreves... a esperar que el antiguo Rei sea quien te acompaña ahora?
--Neko...
--¿Mm? –el ruso resopló ante la nueva costumbre del chino de contestarle con monosílabos
--Aún hay dos partes que debo curar –dijo haciendo alusión al bóxer que aún Rei llevaba puesto –Y así no se puede...
--No es necesario...
--Rei... era un compromiso.
--Kai, no...
--No te haré daño.
--No, por favor... no me obligues... –Hiwatari suspiró y retiró los objetos de primeros auxilios
--De acuerdo.
Kon fijó su mirada en su amigo mientras este iba y venía del baño. La luz de la luna, azulada y ondulante lo bañaba suavemente, jugando con las tonalidades de su cabello, con las marcas en su cara y con sus hermosos ojos marrones. Sin querer, recordó una de las tantas noches que Bryan pasaba con él, igualmente bañado en luz de luna, jugando con su cuerpo. Esos ojos claros que creaban destellos completamente diferentes a los de Kai... ambos eran tan diferentes... Uno lo mataba, el otro lo salvaba. Uno jugaba, el otro protegía. Uno se reía, el otro se preocupaba. A uno le temía, al otro... también le temía. Fue en ese momento en que se dio cuenta de ese sentimiento que no se había querido revelar. Tenía miedo de Kai... ¿porqué?. Nuevamente, Bryan le dio la respuesta.
No importa con quien te escondas de mí... siempre será mi cara la que veas.
***
--¿Estás seguro?
--Ya son cuatro días Maxie, cuatro días. Kai me habló y me dijo que Rei tuvo un problema personal, que pidió que no fuéramos ni llamáramos. No creo que Kai mintiera sobre algo así.
--Aún así es muy extraño. Me preocupa Rei.
--Si, pero supongo que si está con Kai estará bien.
--Takao...
--Debemos aceptarlo Maxie. Aunque no nos guste mucho. No somos nadie para juzgar lo que sienten.
--No es que sea prejuicioso ni nada pero... No me gusta pensar que podrían... ser "así". Son buenos chicos...
--Pues esto no tiene porqué hacerlos malos chicos –sonrió Kinomiya –Vamos mejor. Tu madre nos invitó a Usa ¿no? –el otro asintió -¿Entonces que esperamos?
***
Espero que cuides de Rei. Avísanos cualquier cosa, pero cualquier cosa ¿entendiste Kai?. Si no tengo noticias tuyas por más de dos días iré a tu casa a pedirlas. Estaremos en la casa de la madre de Maxie. Takao.
Kai leyó el mail llegado pasadas las cuatro de la mañana. La habitación estaba en completo silencio y, de no ser por la pantalla del laptop, casi en completa oscuridad.
Por alguna extraña razón, no podía conciliar el sueño. Se sentía mal, se sentía inútil. Cuando decidió proteger a Rei, se prometió a sí mismo (y a Kon) que el pasado sería traído de vuelta y que volverían a ser lo de antes... Pero ahora sabía que eso no se podía.
Como odiaba romper promesas.
Sin embargo, Anika estaba ahí, y el terreno de la mansión Hiwatari era impenetrable para alguien como Bryan. Sabía que acechaba de la reja hacia fuera, pero mientras Rei estuviera del otro lado de la cerca, sus ladridos no serían más que ruido.
Y se sintió poderoso.
Rei Kon, el muchacho eternamente libre había estado cuatro días completos encerrado en su mansión. El tigre en su jaula de oro...
Y se asustó de su pensamiento. Por ningún motivo quería pensar que Rei era suyo, o que dependía enteramente de él. Solo quería creer que Rei buscaba en él un apoyo para salir con sus propias fuerzas del pozo oscuro en el que estaba hundido.
--Estoy confundido... –dijo al aire –estoy indeciso... estoy tembloroso... Por primera vez en mi vida... no sé que pensar, ni qué sentir.
Pesadamente se recostó junto a Rei, y este inmediatamente se abrazó a su cuerpo. Hiwatari se sonrojó y trató de separarse, pero el neko lo tenía fuertemente sujetado. Sonriendo, cerró los ojos y pasó sus brazos por el cuerpo de Rei. Casi al instante se quedó dormido. Kon se revolvió un momento y se acurrucó con más ganas hacia Kai.
--Mm... –habló dormido –Bryan...
continuará...
Notas: vaya, quiero que se besen. Rio.
