Estoy enfermo Kai.
Capítulo 9.
Un desayuno simplemente delicioso. Digno de ser comido en el comedor de la Mansión de su Abuela...
--Rei eres genial, la Abuela tiene que probar esto alguna vez... –comentó admirando un pequeño pedazo de tarta que Rei había hecho -¡Esto es delicioso!, maldito placer culpable... ¡mmmm!
Kon rió con ganas mientras colocaba otro pedazo frente a la mujer. De cierta forma era irresistible ver esas mejillas increíblemente pálidas colorearse con el carmín suave tan parecido a los ojos de Kai... los ojos de Kai...
--Kai, ¡prueba! –Anika se inclinó contra su primo, sosteniendo con su tenedor un tentador trozo de tarta con un enorme pedazo de chocolate encima... –prueba...
--Sabes que no soy muy tolerante a lo dulce Anika... –reclamó él con la cara encendida en vergüenza
--¿Cómo es posible que digas eso teniendo este estupendo cocinero en tu casa? –regañó con un puchero gracioso. –No sabes de lo que te pierdes...
Trozo a trozo, la tarta comenzó a desaparecer, mayoritariamente frente a las narices de Anika, que no paraba de elogiar a Rei.
--¿No hay más?
--No Anika. –dijo Kai mirando de reojo a su prima, y volteando a ver el último trozo de tarta... el de su plato. –No hay más.
--Pero a ti aún te queda... –comentó mientras comenzaba acercarse lentamente
--No hay. –volvió a decir el chico al tiempo que alejaba con una mano su tarta y con la otra se empinaba su café.
--Kai...
Rei miraba de reojo con una sonrisa que a cada segundo parecía más forzada. Aceptaba que era un buen cocinero y que sus tartas solían generar ese tipo de "conductas"... pero ella se estaba acercando demasiado a Kai...
--¡No seas malo conmigo! –acto seguido ella le tomó la cara y le plantó un sonoro beso en la mejilla, aprovechando el estupor de ambos chicos para robar una esquina de la tarta de su primo.
--¡Anika!
Como respuesta, la Hiwatari le envió un beso por el aire y le guiñó un ojo de manera coqueta. Kai se puso rojo como un tomate y simplemente le tendió el plato con todo lo que quedaba de tarta.
--¡Eres un amor Kai precioso!
Un portazo indicó que Rei había salido, haciendo temblar la cocina entera en su trayecto. El ruso observó confundido, antes de levantarse e ir tras el neko. Ella solo esperó hasta que su primo saliera. Entonces se sentó cómodamente y sonrió con algo de maldad. Todo estaba saliendo a pedir de boca.
--¿Caprichoso Gatito?, no te preocupes... –murmuró al tiempo que degustaba el último trozo de tarta –No estoy aquí para quitártelo...
Desentendiéndose por algún rato de los muchachos, subió a su habitación e hizo una llamada por celular.
--Cleo, soy Anika –dijo cuando al fin le contestaron –Necesito una pequeña charla con el chico ese... el tal Bryan...
--¿Rei?
El chino estaba sentado sobre la cama de Kai, abrazando sus rodillas, en completo silencio.
--¿Qué ocurre?
--...No es nada...
--¿Estás seguro? –preguntó acercándose, y colocando una mano sobre su hombro.
--Estoy bien.
--¿En serio estás bien?, ¿porqué saliste de esa forma de la cocina?
--....Lo siento, no medí mi fuerza al cerrar...
Los ojos escarlatas de Kai seguían fijos en Rei, como sabiendo que mentía. El chino lanzó una queja a un dolor inexistente, y de un momento a otro abrazó el cuerpo de Hiwatari, tirándolo sobre la cama, y quedando encima.
--R-Rei...
--...¿Quién es ella?
--...Ya te lo dije... –tartamudeó –Es mi prima... ¿Qué ocurre Rei? –insiste al sentir un pesado silencio y una necia obstinación en el abrazo del chino... eso, sumado a una fuerte presión que el muchacho ejercía contra su cuerpo, generando diversos efectos, que iban desde la falta de aire a...
--...Lo siento Kai... –se disculpó Kon, separándose lentamente del cuerpo de Hiwatari, rozando sus narices –Pero... yo.... ella...
Los ojos dorados dudaron mientras observaban llenos de lágrimas a Kai. Sus manos se cerraban sobre la tela de la suave camiseta negra que el ruso llevaba. Rei se mordió el labio al verse incapaz de expresar eso que su corazón sentía. Estaba confundido y herido, sin saber que pensar, sentir o hacer.
Ante la escena, Kai sintió que la cercanía de Rei producía aún más efectos... Tan inocente, tan desvalido, tan pequeño, tan... hermoso... Sin querer levantó la mano, tomando la barbilla del chino entre sus dedos, y se acercó, depositando un beso tranquilizador en los labios temblorosos del otro. Kon soltó el aire que retenía cuando sintió el roce de la piel del ruso, y cerró los ojos casi sin pensar. Un beso, por fin podía degustar de otro beso, y esta vez no habría sentimiento de culpa, ya que no había comenzado él... Un beso... por fin la boca dulce y fuerte de Kai junto a su boca, recorrida, reconocida... suya... solo suya para alejar al fantasma que lo atormentaba y que intentaba convencerlo de algo completamente estúpido... Pero no se dejaría engañar... eso no podía pasar... Kai lo ayudaría a olvidarse de eso para siempre, y volvería a vivir tranquilo... ¿Verdad?, Kai lo haría... Kai lo haría...
Pero eso no es lo que quieres en realidad, ¿verdad?
--Lo que quiero... lo que quiero es estar con Kai...
¿Y tu deseo?
--Mi deseo... es imposible... es estúpido... No puede ser...
Era antes, ¿porqué no ahora?
--Por que ahora Kai está aquí...
Y usarás eso... Usarás a Kai...
--Si... usaré a Kai para salir de aquí... para liberarme... Aprenderé a amarlo con el tiempo... Él es mi única salida... y no la perderé por nada...
Aquella molesta vocecilla en su cabeza rió un par de veces antes de callar. Rei sonrió sin romper el beso que llevaba con Hiwatari... si, esa voz se había ido por el momento, lo dejaba actuar... Entonces se permitió a sí mismo desconectarse del mundo y solo sentir... La piel de Kai ya estaba a medio exponer, y era un espectáculo que no podía perder...
Un cuerpo se exhibía frente a él, una piel que deseaba ser tocada, un ser que anhelaba ser saciado... Un deseo hambriento de él llamaba, y no podía dejarlo sin respuesta.
Un jadeo sensual escapó de sus labios cuando el beso se rompió. Empujones suaves y sutiles llevaron a Kai a apoyar su espalda desnuda en la cama... aunque no tuviera la menor idea de cuando su camiseta había desaparecido de la escena.
--Rei... Yo...
--No... no digas nada Kai... Arruinarías el ambiente...
Un nuevo beso y el ritual comenzaba. Esa sensación de apartarse de su propio cuerpo y sentarse a un lado mientras un extraño tomaba posesión de su fisonomía y se dejaba hacer todas esas cosas que, en otros tiempos, le habían parecido repugnantes. Sin embargo el tiempo y la "práctica" lo habían llevado a admirar el fervor del deseo humano y sus alcances. Ahora simplemente se colocaba a un lado y dejaba que ese "otro yo" actuara bajo su cara, maravillándose de las respuestas ajenas... La lujuria, el placer, la entrega, el dolor... Todo era demasiado atrayente...
Rei puso sus manos sobre el pecho de Kai, arañando suavemente la región de los pectorales, especialmente sensible a estas alturas. Hiwatari tuvo que separarse de los labios de Kon para emitir un gemido fuerte con los ojos cerrados, dejando el cuello expuesto a los filosos colmillos de Rei, que no esperaron demasiado antes de probar la piel suave y la calidez de las venas que golpeaban con fuerza. Su lengua recorrió el sanguíneo camino, bajando y bajando, llegando a las tetillas que se alzaban furiosas, esperando su turno de ser acariciadas. Con maestría y delicadeza, Rei trabajó sobre ambas al mismo tiempo, lengua y manos coordinadas con el fin único de provocar un placer desmedido y salvaje.
--R-Rei...
Con violencia Kai se irguió sobre sus codos, tomando con su mano derecha el cabello negro de Kon, y jalando de él, obligando al otro a entregar sus labios nuevamente en un beso, esta vez brusco y un tanto doloroso, que envió sensaciones de electricidad y fuego por su espina hasta el último de los huesos de su columna.
Anika observaba desde su habitación, gracias a la pequeña camarita que había en la habitación. Había sido fácil entrar en las redes de seguridad de la Mansión.
Su plan estaba marchando sobre ruedas. Solo necesitaba algunas reacciones más y el final estaría cerca.
--Fase uno de mi experimento se ha completado con éxito Taichi. –dijo a su laptop -¿Creíste que fallaría? No, no, no. Anika no se equivoca Tai, Anika nunca se equivoca.
Una carcajada de felicidad salió de sus labios y sus delgadas manos aplaudieron como una niña. Si había algo que le gustara más que sus dulces, era que las cosas salieran como quería.
--Ahora Anika, debemos hacerle una visita al chico de espectro Azul.... Bryan...
Su elegante abrigo negro resaltó aún más su blanca melena y sus ojos violetas fueron escondidos tras una finas gafas oscuras. La limusina la esperaba en la puerta para llevarla a donde pidiera.
--Vuelvo luego muchachos –susurró cuando pasó frente a la puerta de Rei –Diviértanse... que pronto podrían pasar algunas cosillas "desagradables".
El interior del lujoso vehículo le sentó bien luego del frío exterior.
--Al oeste –dijo simplemente –Espero que reacciones como quiero Kai, porque de no ser así, Rei se escurrirá de tus dedos como arena... Ya lo verás Abuela... Anika nunca se equivoca.
Continuará.
Notas: . Tardé bastante y corté el lemon. Deben odiarme... XD. Comencemos a contestar los reviews de los dos capítulos...
Tamy: Me alegro que te guste. Aquí va otro capítulo.
Ark angel y dark ankle: Jejeje, la respuesta a la pregunta que le haces a Rei pronto será contestada, aunque pueden comenzar a sacar sus propias conclusiones. Los reviews no los contesté en el otro capítulo porque estaba un poco apurada, y por lo de coquetearle a Kai... pues ya ves. Debes odiarme... Bryan está esperando, aunque lo que le llega no es lo que imagina y la verdad es que ni siquiera me había acordado de Tala U y lo del experimento... pues lo verás a medida que los capítulos avancen.
Chibi-Kaise: ¿en serio piensas que actualizo pronto? XD genial. Me alegra que te guste y que lo consideres un placer, me inflas el ego. Espero que te haya gustado el "mini-intento-de-lemon". Hace meses que no hacía uno U. Y en cuanto al capítulo de "relleno", pues si, en realidad es importante, gracias por hacérmelo notar.
Nat-chan07: La gracia es justamente la ambigüedad de Rei. Pero tranquila, pronto las cosas serán más claras... (amén), cierto, otra cosa... ¡mi cerebrito! ¬¬ todo es culpa de la U... si pudiera vivir de fikera...
Neko-Jeanne: Entre Rio-chan o Rio-sama... pues yo me quedo con el "-chan". Sama es.... muy vanidoso.
Shouran: Vamos, no me destripes la historia. Cada cosa a su tiempo , pero ten por seguro que algo va a salir.
Dayiah Belsebú: siendo sincera, no sé cuanto fic queda. Sé que queda, pero mirándolo con calma, como que aceleré un poco los planes, quizás no tengas que esperar tanto para ver el final (amen).
Dark girl Kon: Gomen, gomen chika, pero Rei es propiedad pública (afortunadamente jajaja) y me fascina hacerlo sufrir, pero no te preocupes, que Kai sufrirá tanto como Rei, solo una persona saldrá limpia de polvo y paja, pero no te puedo garantizar que el chino salga bien parado... Y bueno, supongo que un mes entre un capítulo y otro es tardar... gomen U-
Nakokun: Nakokun! Me alegra que el fic te guste. Ojala que el "pseudo-lemon" satisfaga tus necesidades por ahora. Pronto se viene más.
Diabolic: Gracias por tus palabras y no te preocupes si no eres de los que dejan review, me conformo con que lean.... aunque debo admitir que cierta parte de mí siempre se fija en mi cuenta de correo para ver si hay reviews nuevos, pero supongo que eso es inevitable.
JeNdOw: La verdad es que puede que pronto el apodo que le pones a Anika de "zorra" le venga mejor de lo que crees. Espero que te haya gustado este capítulo.
Kaei Kon: Realmente tus palabras me ayudaron mucho. Estaba un poco desanimada con este fic y tu review me llegó como esas musas inspiradoras que tanto salvan en el momento indicado. ¡Este capítulo es para ti!. Me alegra mucho (cruel, pero cierto) que Anika genere esos sentimientos encontrados, no eres la primera que me dice que no sabe si amarla u odiarla, pero ese es su encanto, sin embargo, más adelante todos podrán tener un solo sentimiento hacia ella (genial, estoy destripando mi propio fic).
Gracias a todos por sus reviews y espero que hayan disfrutado del capítulo. Rio.
