- Tranquila – le susurraron al oído – no te voy a dejar caer.

- Oliver, quiero tocar el suelo – le dijo sujetándose a su cuello y cerrando sus ojos – sabes que no me gusta volar, aterriza ya.

- Abre los ojos.

- No, ni lo sueñes. No sé a que viene esto, pero quiero que me dejes mis pies sobre algo firme.

- Veras, llevo varios días pensando en hablar contigo, pero no se me presento la ocasión, y ahora al verte paseando tu sola, se me ocurrió.

- Quieres que hablemos, de acuerdo en el suelo – grito ella tozudamente.

- No, aquí, abre los ojos y ve el colegio desde el aire – ella se dio por vencida y abrió sus ojos, al mirar hacia abajo, los volvió a cerrar y se apretó todavía mas contra él.

- Por favor, baja, no me gusta estar aquí arriba.

- Confía en mi, abre los ojos y mira como se pone el sol. Solo un momento, si te da miedo, bajo te lo prometo – él pudo notar como ella bufo en su cuello, se separo despacio de el y abrió sus ojos – mira - le dice él señalando el ocaso – a que es bonito.

- Si – contesto ella, él pudo notar como su cuerpo se relajaba y se apoyaba en el suyo.

- Lo ves, a que no es tan malo.

- No, pero sigue sin gustarme volar.

- Bueno yo vuelo y tu ves el paisaje.

- ¿Ya no estas enfadado conmigo?

- Nunca lo he estado, porque abría de estarlo.

- No sé tu sabrás, eras tú el que me rehuías.

- No te rehuía, lo que ocurre es que estos días, he estado preocupado por la final, y puede que te tuviera un poco abandonada – el sabia que no era verdad, desde que la había visto en el baño, no se lo podía quitar de la cabeza y luego cuando Kathy le había dicho que los vio besándose, era mucho peor, cada vez que la miraba, se la imaginaba besándose con Flint y eso le hacia hervir la sangre, llevaba años sintiendo algo mas por ella que una simple amistad, pero cuando se entero que estaba con Flint, decidió ocultarlo todo, ser solamente amigos, como siempre lo habían sido, ella estaba enamorada de un imbecil y el no podía poner remedio a eso aunque quisiera, perderla no era una opción, así que si lo único que ella le iba a dar era amistad, el no duraría ni un momento en brindarle la suya a ella.

- Me alegro, porque no sabia lo que había hecho mal – en ese momento volvió a sentir como sus pies tocaban el suelo – gracias.

- ¿Porque?

- Por el paseo.

- Ha sido un placer. ¿Vendrás a ver la final?

- Si, quiero ver como sostienes la copa, y le das una paliza a los de Slytherin – Oliver le sonrió, cogió su escoba y se encaminaron de vuelta al castillo.

- Le voy a dar una paliza a tu novio – rio él.

- Lo sé – fue la contestación de ella – y esa es una de las razones por las que voy a ir.

El día del partido había llegado, el equipo de Gryffindor odio mas que nunca a su capitan, durante el desayuno Oliver no paraba de animar a todo su equipo para que comiera, incluso alguno lo llego a cebar, pero el no probo bocado.

Anne estaba sentada con algunos de sus compañeros de curso, junto a ella estaba Andrea Loqquertan, una de sus compañeras de séptimo.

- Van a ganar – decía animada – a que si Anne, a que van a ganar.

- Claro que si, tenemos el mejor equipo que a habido en años.

- ¿Tu crees? – dijo emocionada Loqquertan.

- Eso dice Oliver,

- Pues si Wood, lo dice, es cierto, es uno de los mejores jugadores del colegio – guardaron silencio al oír los gritos de la multitud, con excepción de los miembros de la casa de Slythering, el resto del colegio animaba al equipo de Gryffindor.

Los dos equipos salieron al campo, cuando Lee Jordán empezó a presentar a los jugadores de Gryffindor el estadio estallo en gritos de ovacione y los abucheos de los miembros de la casa de Slytherin.

Cuando la señora Hooch ordeno a los dos capitanes darse las manos ellos se aproximaron y se estrecharon la mano con mucha fuerza y con ojos de odio el uno al otro.

El partido comenzó Angelina marco el primer tanto lo celebro volando por el estadio, pero Flint chocó contra ella y casi la tira de la escoba, Anne y Andrea se levantaron asustadas, pensaban que su amiga caía, pero había tenido suficientes reflejos y se agarro bien a su escoba, Flint, pasaba con una sonrisa en su rostro, pero se le quito cuando momento después, Fred le lanzó el bate hacia la nuca de Flint. Anne puedo ver como la cara de su novio se daba contra su propia escoba y comenzaba a sangra por la nariz, no pudo evitar echarse a reir, Oliver paro un lanzamiento de Flint el estadio volvió a estallar en gritos.

Pero unos minutos después se volvió a repetir la jugada y estaba vez Flint consiguió marcar. Bole y Derrick, aprovecharon un momento en que los gemelos Weas­ley estaban protegiendo a Angelina para lanzar dos bludgers a Oliver, Anne se levanto asustada, una le había dado en él estomago y segundos siguientes la otra, ella vio como él dio una vuelta en su escoba y parecía estar sin resuello.

Ahora todo el campo estaba pendiente de Harry y de Malfoy, este último sujetaba la saeta de fuego del primero para que no pudiera coger la snitch y resulto porque la perdió de vista, Anne y Andrea sonreian al mirar a la profesora McGonagall que le gritaba a Malfoy furiosa.

Angelina estaba en un apuro, todo el equipo de Slytherin se había lanzado contra ella, pero Harry paso con su saeta dispersando al equipo y dejando el camino libre a su compañera para que marcara. Después se tiro en picado hacia donde iba Malfoy, le llevaba una gran ventaja, pero consiguió ponerse a su lado, estiro sus manos y en ese momento el estadio grito enloquecido, Gryffindor había ganado la copa.

Toda la casa de Gryffindor salto al campo, cuando Anne llego al campo vio como Oliver lloraba de alegría, fue a abrazar a Angelina, que se encontraba junto a Kathy las dos saltando de alegría. Luego felicito a los gemelos Weasley y fue hacia donde estaba Oliver que al verla la cogió por la cintura la elevo y empezó a dar vueltas con ella en el aire.

- Hemos ganado, hemos ganado –le decía entre lágrimas que caían de sus ojos mientras la dejaba en el suelo.

- Lo sé felicidades – ella le limpio las lágrimas que tenia por su rostro y le sonrió, él le puso las dos manos en su cuello y le dio un beso en los labios, la afición en ese momento, cogió a todo el equipo y lo llevo a hombros a recoger su premio.

Anne se quedo allí de pies parada sin saber que hacer, llevándose una mano a sus labios.

La emoción de ganar la copa, todavía duro varias semanas mas en la casa de Gryffindor, pero los exámenes finales, comenzaban y había que centrarse en ellos.

Era mas de la una de la madrugada, Anne estudiaba para su examen de artimancia, por un momento estuvo tentada en ir a despertar a Hermione Granger y pedirle ayuda, pero desecho la idea cuando vio la hora que era. Oyó unos pasos bajando por la escalera.

- ¿Qué haces aun despierto?

- Me desvelo Percy, esta volviendo a hablar sobre su discurso como Ministro ¿Tú?

- Aritmancia. No sé porque escogí esta asignatura, es agobiante – el se sentó enfrente de ella, mirando a los pergaminos y tablas que tenia por encima de la mesa.

- Te gusta complicarte la existencia – sonrio mirandola.

- Si debe ser por eso

- Oye... que veras, el día del partido... que yo té... ósea cuando... yo té... eh... – el se sonrojaba más aun con cada palabra que decía y se revolvia el pelo nervioso.

- Oliver, tienes una idea de lo cansada que estoy – dijo ella mirandole derrotada.

- Si, es tarde – confimo él.

- Si, así que si vas al grano, te lo agradecería, bastante tengo ya con aritmancia como para dedicarme ahora a la adivinación.

- No te preocupes, es algo sin importancia, lo podemos hablar otro día – eso es Oliver con valentía, díselo, cobarde, bueno y que pasaba si la besaba ya lo había hecho una vez, tampoco seria para tanto, se acercaría y la besaría, si eso es lo que haría, que podía pasar que le respondiera o que le diera una buena cachetada, si eso era lo mas probable, en el fondo ella tenia novio, estaba con otra persona y aunque no le había dicho nada del beso, eso no significaba que estuviera de acuerdo, se lo habría tomado como algo producido por el entusiasmo del momento, en el fondo era eso, el nunca hubiese tenido el valor para besarla solo porque si, mas de una vez lo había pensado mientras hablaba con ella, o le daba uno de esos tantos abrazos, pero solo era por amistad y esa idea siempre terminaba desapareciendo de su cabeza, nunca había visto mucho diferencia en la manera de tratarle a el de como trataba a los gemelos Weasley, eran amigos desde siempre, pero no había mas que eso, una gran amistad.

- Me alegro que me fueras a ver al partido.

- Te dije que iría – contesto ella mientras seguia mirando el pergamino que tenía delantes.

- Si, cierto me lo dijiste ¿fuiste por mí?

- Claro, tu me lo pediste, eres mi amigo

- Porque tu y yo solo somos amigos – murmuro él en voz alta sin tan siquiera pensarlo.

- Si, solo amigos... – Oliver hubiera jurado que en su tono de voz había un deje de tristeza – no, solo es producto del cansancio, pensó para sí mismo – estoy cansada y es tarde, me voy a dormir – Oliver la observaba mientras ella recogía todos las cosas que tenia esparcidas por la mesa – y si no fue cansancio, y si tal vez ella siente algo por mi – la vio levantarse, le dio una pequeña sonrisa y comenzó a andar hacia las escaleras. Se iba a dormir, si no lo hacia en ese momento, no lo haría nunca.

- Anne – la llamo, la aludida se dio la vuelta mirando a su amigo que ahora estaba enfrente de ella – lo siento.

- ¿Que sientes? – pregunto ella confundida.

- Aun nada –le dijo mientras uno de sus brazos la cogía por la cintura y su otra mano subía a su mejilla - es por lo que voy a hacer – termino diciendo mientras le daba un corto beso en los labios, cuando separo sus labios de los de ella, la miro a los ojos y la volvió a besarla, suavemente al principio, pero al notar como ella dejaba caer todos los libros y pergaminos al suelo para enroscar sus brazos alrededor de su cuello y corresponder al beso introdujo su lengua jugando con la de ella, lo que había comenzado con un pequeño roce los estaba llevando a desatar todo lo que habían escondido durante años.

- Oliver ¿Qué has hecho? – pregunto ella mientras escondía su rostro carmesí en el pecho de el.

- Lo siento – volvió a repetir él – no lo tenia que haber hecho pero...

- Yo no Oliver, ese es el problema, yo no lo siento – él sonrió al oír la respuesta de su compañera y la volvio a besar – pero no puedo dejar a Marcus, aun no puedo – termino cuando el la dejo volver a respirar.

- ¿Aun no? Bueno pero te esperare, si necesitas unos días, no hay problema.

- No son días Oliver, mi abuelo me a comprometido con él, me obliga a estar con él, y yo no puedo hacer nada para evitarlo.

- Claro que puedes, diré que no le quieres que no quieres estar con él – contesto el furioso.

- Ya lo sabe Oliver, ya lo sabe. Pero así se hacen las cosas en mi familia, a mi madre le paso lo mismo, pero ella consiguió escapar de casa, pero yo no puedo, todavía soy menor hasta el próximo año no seré mayor de edad, hasta entonces no puedo escapar.

- Entonces que me estas diciendo, que no hay mas, que todo acabo aquí.

- Por ahora yo no tengo otra salida, lo siento – Oliver la miro, había tanta tristeza en sus ojos siempre alegres, como no se había dado cuenta de lo desgraciada que era, la vida tan infeliz que llevaba – pero prométeme que no dejaras de ser mi amigo, por favor no soportaría perderte.

- Anne que no pueda estar conmigo, no significa que te vaya a dejar de lado, solo que supongo que tendré que aprender a volver a verte como una amiga.

- Gracias – le dijo ella abrazándolo – no sabes como te lo agradezco.

- Yo siempre estaré aquí para ti Anne, siempre.