La noche culminó y la nave Asturiana pronto se encontraba volando sobre tierras Fanelianas. La nave fue vista por Jouji quien de inmediato fue a avisarle a Van.
-Majestad Van, al parecer tenemos visitas de Asturias.
Van se encontraba de espaldas viendo la pared grabada con el escudo de Fanelia.
-Bien. Preparen todo para recibirlos.
-Si majestad.
Jouji notó en Van un semblante demasiado serio, pocas veces había logrado entablar una plática con el, y ahora ni siquiera le dirigía la palabra, se mostraba seco con las demás personas del consejo y solo hablaba si era necesario y sin mostrar gran efusividad. Los tripulantes del crucero bajaron, pero solo Millerna, Dryden y Allen se presentaron frente a Van. Este los recibió en una gran sala donde a espaldas de Van se encontraba el escudo de Fanelia tallado en la pared y un sencillo asiento. Allen, Millerna y Dryden se inclinaron ante el, a lo que Van les pidió que no hicieran eso. Estos se acomodaron en unos cojines donde permanecieron sentados.
-A que debo su visita princesa Millerna.
-Majestad Van, como sabrá nosotros nos hemos preparado desde lo que pasó en Freíd, pero al parecer mi padre se rehúsa a tomar las armas, y prefiere seguir con actos de diplomacia. Mi padre cree que si estas personas ven grandes fuerzas armadas lo tomarán como ofensa y empezarán atacar.
-Princesa Millerna si a lo que usted ha venido es para pedirme apoyo militar debo decirle con mucha pena que no podré ayudarla. Fanelia no tiene nada que ver con esa guerra.
-Te equivocas Van si crees que no estas implicado en esta guerra. -Dryden interrumpe a Van con tono serio, viendo de reojo a Van a través de sus lentes-.
Van serio se le queda mirando y este se levanta de su asiento.
-Dryden si te refieres al hecho de que la persona que mató a los soldados de Freíd es un riujin, no implica que Fanelia se meta en esos asuntos, somos de razas completamente diferentes. Ahora mis sirvientes les mostrarán sus habitaciones para que descansen, es seguro que están cansados de tan largo viaje.
Van se retira dejando a sus amigos y estos se dirigían a su ves a sus habitaciones guiados por los sirvientes. Millerna se sentía más presionada y temerosa, cosa que Dryden nota.
-Tranquila Millerna, todo estará bien, se arreglará todo en cuanto Van escuche lo que vamos a decirle.
-Eso espero Dryden, eso espero.
Van se aleja asía las tumbas de sus padres, Escaflowne se encontraba ya en el mismo lugar donde antes dormía pero este se encontraba sentado en un lugar especialmente diseñado para este tipo de Guymelef. Van se queda mirando la tumba de su padre con melancolía, pero al poco tiempo puede sentir que no esta solo. Al mirar a su lado izquierdo se encuentra a una mujer con una armadura, su rostro cubierto por una máscara y su cabello platinado ondeaba delicadamente por el aire. Van se sorprende al verla y siente que ya la había visto antes, de repente varias imágenes de su batalla en Freíd le vienen a la mente, ve que su oponente mostraba un rostro de asfixia, como si el hubiera sentido algo que le causara daño, el pierde el conocimiento por unos momentos y después nota que ya no se encontraba sostenido por su enemigo, si no que unas delicadas manos lo ponían en el suelo y observa como una mujer se le queda viendo por unos momentos, antes de volver a caer inconsciente recuerda que ella portaba unas alas, las cuales brillaron al contacto con la luz de La Luna Fantasma. Era ella, si, no había duda, era la misma persona.
-¿Quién eres tu?.
La chica no respondió.
-¿Eres la misma chica que estuvo en Freíd, tu me salvaste¿no es así?.
La chica solo asiente con la cabeza.
-Entonces por lo que veo, has venido a reclamar las gracias. Van sonó arrogante. Si es así te las daré, pero no reclames nada.
La chica se le acerca y queda frente a el, ambos se quedaron viendo por unos segundos, cuando un agudo golpe se escucha, haciendo que varios pájaros que se encontraban descansando en las ramas de los árboles salieran despavoridos asía otro lugar. Van se encontraba de lado, sus mechones negros caían ocultando sus ojos, pero mostraba una mejilla roja. La chica se aleja unos pasos de el, quedando frente a la tumba del padre de Van.
-Estoy aquí para averiguar lo que sabes, lo que ese hombre te dijo aquella noche y para advertirte que no te metas en esta guerra. No te pertenece y no quiero estorbos en mi misión.
-Van se voltea asía ella y con una mirada de disgusto le contesta. ¿Quién eres tu para mandarme, lo dije una ves y lo cumpliré, no me entrometeré en guerras que no le incumben al pueblo de Fanelia.
-Bien, era justo lo que quería escuchar.
La chica se empezaba a retirar cuando la voz de Van vuelve a escucharse.
-Pero nunca dije que no recuperaría lo que me pertenece.
-¿Qué dices.
-Ellos se robaron algo muy valioso para mi, y no estoy dispuesto a perderlo.
-Ellos hicieron lo mismo con migo, y no quiero que un rey de cuarta venga a arruinar mi misión. Además puedo hacerlo sola.
-¿A ti, que tienen que ver los seres de la luna fantasma con esto.
-Valla si sabes de donde provengo.
-Digamos que conozco perfectamente donde vivo.
-Entonces que rayos perdiste de tanto valor que estas dispuesto a hacer una guerra e involucrar a tu gente, a tu pueblo.
-Ellos tienen a Hitomi, y por lo que veo, tu estas en busca de ella¿no es así.
-Ya te dije que esto no involucra a los de tu mundo, ustedes la robaron, puedo matarlos por cómplices.
-Yo no soy tan ruin como para planear una moustrocidad así.
-Exacto, esa moustrocidad que tu gente hizo no tiene perdón, como se atrevieron a profanar su hogar y llevarse consigo el cuerpo, aprovechando lo que paso.
-Ya te dije que yo no soy así, tengo principios y lo menos que quiero es que ella se encuentre con hombres así.
-Pues si no quieres eso, mas te vale dejarlo en mis manos, ustedes en especial lo estropearían, solo estorbarían en mi misión.
-Pues no lo haré, traeré conmigo el cuerpo de Hitomi y descansará aquí, en Fanelia, donde debía estar.
-Estas demente, ella pertenece a la tierra, ella será enterrada junto a sus padres, no aquí.
-¡Van!.
Ellos son interrumpidos por la voz de Allen, Merle lo acompañaba y se sorprende al ver a la chica que supuestamente había golpeado a Van a tal punto de matarlo.
-¡Amo Van cuidado esa mujer trató de matarlo.
-No te preocupes Merle, esta de nuestro lado. Allen se acerca a la mujer y mira a Van. Por lo que veo ya se conocen.
-Si, ya nos conocemos. Van lo decía en tono molesto y serio.
-Pues en ese caso tenemos que hablar, es urgente que escuches a Dryden.
-Esta bien, síganme, iremos a un lugar donde podamos hablar sin ser interrumpidos.
Todos avanzan, Merle se acerca a Van y lo toma del brazo, Van voltea y ve como la mujer se quedaba quieta viendo las tumbas de su familia, este se detiene y por entre su hombro le habla.
-Piensas quedarte ahí o seguirnos, si quieres encontrarla será mejor que escuches lo que Dryden dirá. O piensas quedarte ahí y ver si los muertos te hablan y te dicen su ubicación.
Ella voltea y muestra enojo, notándose cuando ella serraba los puños fuertemente. Pronto Dryden y la princesa se les unieron, Van se sentó en una gran mesa, esta se utilizaba cuando tenía juntas con el consejo así que contaba con varias sillas a su alrededor. Allen, Millerna, Merle y Dryden se sentaron, pero la chica prefirió recargarse en el marco de una de las ventanas y permanecer parada.
-Antes que empecemos con lo que tengo que decir me gustaría que la joven se presente, y nos diga sus intenciones, espero no ser grosero pero no la conocemos a pesar que estuvo con nosotros en todo el viaje.
-La chica se queda en silencio, parecía estar nerviosa-. Mi, mi nombre es. Demitra.
-Y de donde provienes?
-De la Tierra, según ustedes la llaman La Luna Fantasma.
-Bueno, por lo que veo somos aliados después de todo, pero por que estas aquí, .
-Ja. La razón del por que estoy aquí es por que los habitantes de este planeta osaron profanar un hogar y llevarse a Hitomi.
-¿Raptaron a Hitomi!. Allen se levanta exaltado por la noticia.
-Así es.
-Eso es un error, nosotros no lo hicimos. Van se levanta y golpea la mesa.
-Ella respetó su planeta y que es lo que hacen ustedes, ir a la Luna Fantasma a secuestrarla.
-Demitra, nosotros no haríamos eso. Apreciamos mucho a Hitomi desde que llegó. -Allen trataba de suavizar un poco la situación, pero parecía que las cosas iban empeorando.
-Tranquilos, enojándonos no nos servirá de nada, ahora necesitamos estar juntos para poder salvar a Hitomi. -Millerna hablaba con tranquilidad, Van y la chica parecieron hacer lo mismo-. Demitra, en el lugar de la batalla se encontró esto tirado, los soldados de Freíd no reconocían el tipo de grabado que contiene este objeto, tal ves esto sea tuyo.
Millerna saca de entre sus ropas un pañuelo rozado el cual contenía un objeto largo, esta lo desenvuelve y lo deja en la mesa, Van al verlo siente un escalofrío en el cuerpo, dejando que su mente volviera a reproducir las imágenes de la batalla pasada donde este hombre le decía una terrible noticia.
-Mira bien Rey de Fanelia, no te parece maravilloso eso, La Luna y La Luna Fantasma mostrando ese gran espectáculo, ese color tan hermoso que a tomado ahora La Luna. ¿No lo cree así su majestad?. Hace tres noches hemos visto este hermoso espectáculo, y si digo que es hermoso este color en la Luna es por que esta muerta, no hay vida, ni brillo. Y que puedo decir de La Luna Fantasma, ese brillo que antes tenía ahora se esta perdiendo. Por cierto¿no te acuerdas de alguien al ver hacía La Luna Fantasma?. ¿Como se llamaba?. ¡A si, Hitomi, la chica de la Luna Fantasma. Después la imagen de la daga apareció en su mente. No la reconoces, acaso no la has visto antes?. Un sueño tal ves?. Sombras atravesando un lugar. Una casa. Una mujer mostraba horror viendo como todo lo que quería se derrumbaba fácilmente bajo sus pies. La madre de Hitomi. Una daga apuntando al pecho de una joven mientras veía el cuerpo inerte de su madre muerta bajo sus pies, lágrimas recorrían su rostro por el sufrimiento al ver como su padre y hermano sucumbían uno a uno por causa de estas sombras. Jajaja, aquí viene la mejor parte, ella se entierra esa misma daga que tienes en las manos en el pecho. Jajaja¿no es gracioso?. La daga que traes en tus manos es la misma con que ella se quitó su vida, la sangre con la que se encuentra aun empapada es de ella, de nadie más. Tu mismo velo, su estrella esta completamente muerta, su brillo se a perdido y para siempre. Jajajajaja. Que momento tan mas glorioso para que resurjan los de nuestra especie, con la muerte de la guardiana de la llave. Ella corrió la mala suerte de cuidar algo tan valioso para los de nuestra especie. Sinceramente no sabíamos donde había quedado ese pendiente desde hace varios años, pero al sentir su presencia varias veces cuando fue la guerra nos dio la ubicación exacta de ella. Jajaja ya pasaron tres días de su muerte, que lastima me das, ni siquiera llegaste a sus funerales.
-No te creo, mientes. ¡MIENTES!.
Este no aguanta mas y se aleja bruscamente de la mesa hacía la ventana, sentía que le faltaba el aire.
-¿Amo Van se encuentra bien.
-¿Van, que sucede.
-Nada no es nada.
Van decía serio, pero sus ojos se movían desesperadamente, sus dientes empezaron a temblar y sus manos se cerraron fuertemente.
-Por lo que veo el rey de Fanelia no es tan fuerte que digamos.
Van voltea bruscamente asía la mujer y todos la miran con atención.
-La daga que tienen ahí dio muerte a Hitomi y su familia.
Cuando ella menciona el nombre de Hitomi volteo a ver a Van, pero este solo cerro los ojos. Millerna, Merle, Dryden y Allen no podían asimilar bien la noticia, las manos de Millerna temblaron, Merle se quedó paralizada y Dryden y Allen querían formular tantas palabras y preguntas al mismo tiempo que su mente se desconectó quedándose callados.
-Hitomi fue elegida por fortuna para cuidar del pendiente, de la llave, sinceramente León fue un contacto, la diosa Fortuna manejó su destino para que ella tuviera en sus manos el pendiente. Hitomi es la reencarnación de la Diosa Fortuna, aquella que velara el último legado de Atlantis y del sello. Obviamente ella mandó a una guardiana.
-Me imagino que tu eres la guardiana¿no es así?. –Van hablaba con mucha furia.
-Pues que clase de guardiana eres tu, dejaste que ella muriera. Merle hablaba con furia y llanto en sus ojos.
La chica no contestó y Van no la perdía de vista.
-Ella no aguantó el sufrimiento. Ya no quería sufrir mas, y decidió quitarse la vida. Prometí protegerla y eso hice, que optara por la muerte fue su decisión.
-No puedo creer en lo que dices, ella no actuaría de esa forma. – Van hablaba empezando a subir su tono de voz.
-Espera Van, si lo que dice Demitra es verdad, y si Hitomi es la reencarnación de una diosa, eso quiere decir que todavía hay esperanzas, ella puede revivir.
-La única manera para que ella pudiera hacerlo era teniendo su cuerpo, pero como fue robado, dudo que pueda resurgir de nuevo.
-¿Por eso quieres encontrar al riujin, el es el responsable que Hitomi no este con vida.
-Así es y el tiempo se agota.
-¿Se agota.
-La luna Fantasma esta desapareciendo, las dimensiones se han quebrado, dentro de poco La Luna de las Ilusiones solo será más que un rumor, ya que esta desaparecerá por completo. Cuando La Luna se vuelva completamente negra, ella ya no podrá surgir de nuevo.
Todos se sorprenden.
-Y lo que es peor dejará que el sello de Gaea se rompa, dejando salir a los del clan del Dragón Negro.
-¿El clan del Dragón Negro?. Van preguntaba dudoso.
-El clan del Dragón negro es otra raza de Riujins, estos no eran tan perfectos como los otros eran, por eso las alas obscuras.
-Las alas obscuras representaban el final de un riujin.
-No solo eso Van. -Dryden interrumpía para seguir con la historia-. En la batalla que tuviste en Freíd encontramos los restos de una espada y esta contenía un escudo peculiar. Me fue difícil encontrar datos de este escudo pero por fin encontré su historia, o algo de ella. El riujin que tenía obscuros planes y se envolvía a un destino que perjudicaba a Gaea y a su pueblo, sus alas cambiarían del color blanco a uno negro. Esta raza fue expulsada de Atlantis por que la mayoría de ellos eran ambiciosos y que deseaban más del legado de Atlantis. Como ellos no se conformaban con lo que tenían y exigían mas de este poder sufrieron el destierro. Pero ellos no se quedaron con los brazos cruzados y su grupo se llamó el clan del Dragón negro. Estos mas tarde empezaron una guerra para obtener el poder de Atlantis y para esto los Atlantes decidieron construir Gaea y hacer que en ese lugar sus hijos por fin crecieran en paz.
-Es lo que Hitomi nos había dicho cuando fuimos a Atlantis.
-Cierto princesa Millerna, pero omitieron que la destrucción de Atlantis no solo fue por la máquina creadora de destino, si no que esta explotó al tratar de sellar en un lugar remoto a esta clase de seres, que al parecer no han descansado con tal de vengarse de sus antiguos carceleros. Obviamente estos crearon una llave que sería capaz de encerrarlos de nuevo en caso que estos escaparan o si querían abrir el sello nuevamente. Esta llave fue confiada a un habitante de la Luna Fantasma para que no cayera en manos equivocadas y les fuera más difícil salir de su encierro. Al parecer la llave fue confiada a la abuela de Hitomi, que a su ves se la pasó a ella, que más protección que estar al cuidado de una diosa.
-Esos seres por eso fueron a la Luna Fantasma, querían recuperar la llave pero no la encontraron y por eso decidieron llevarse a Hitomi.
-Así es Demitra, el pendiente resulto ser una llave.
-Por eso me decías que querías recuperar a la guardiana de la llave, la guardiana es Hitomi.
-Así es caballero Allen. Si el cuerpo de ella es rescatada junto con la llave será enterrado junto con su familia, además ella no quiere resurgir, su cuerpo se ha cansado y como lo dije en un principio, ya no quiere sufrir más.
-¿Hitomi no quiere revivir?. -Van preguntaba serio y con la mirada asía otro lugar.
-Ese fue su deseo antes de morir, si recuperó su cuerpo al menos podrá descansar en paz.
-Recuperaremos su cuerpo, pero ella no ira a la Luna Fantasma, será enterrada aquí, en Fanelia. -Van sonaba decidido y mostraba una mirada de molestia asía Demitra.
-Tú no puedes quebrantar fácilmente decisiones, aunque seas un rey. Además eres muy débil, tú mismo lo viste cuando peleaste con el lacayo del más poderoso.
-¿El lacayo?. ¿Qué quieres decir con eso Demitra?. -Dryden sonaba más preocupado.
-El hombre que esta detrás de todo esto es el hijo del jefe del clan Dragón Negro, durante generaciones este clan a estado tratando de salir de su encierro. Algunos lograron salir pero la mayoría se quedó encerrada. No podemos dejarlos salir si es que en verdad quieren que su planeta siga con vida.
-Demitra tu sabes algo mas de estos seres.
-Solo se de la guardiana y la llave, además que ellos poseen cierta magia psíquica que puede compararse al de un ataque.
-¿Energía psíquica.
-Así es Allen, vi como el asía esto, era como si emanara una gran energía y esta enterrara de forma rápida y precisa los fragmentos de su espada en mi.
-Entonces eso explica como hallamos restos de una espada dentro de tu cuerpo.
-Así es princesa Millerna.
-Estos hombres, no solo cuentan con eso sino también con una gran fuerza.
-Demitra yo soy un riujins quiere decir, que soy en cierta forma un ser superior a ellos o tal ves iguales.
-Si.
-Entonces esa energía tal ves este dentro de mí, y pueda usarla.
-Pues si, tal ves. Pero tendrás que practicar por mucho tiempo, tal ves por años.
-Podré, y se que tu me puedes ayudar.
-Te ves muy confiado para hacer esto.
-No te queda otra opción, sin mi ayuda tú y tu princesa están perdidas.
-Bueno Van se que queremos aliados en este momento pero no creen que debemos preocuparnos mas por saber donde se encuentra la llave? y por que tomó un color oscuro.
-La llave la tengo yo.
-¿Tu la tienes Demitra.
-A si es. Esta tomo un color oscuro haciendo que el sello se debilitara, y así mismo pudiera servir para abrirlo completamente. Cuando este toma un color rozado el sello vuelve a cerrarse.
-Es cierto el pendiente Hitomi me lo dio, y desde la pelea con ese riujin no lo volví a ver.
-Pues ahora esta bajo mi cuidado y en un lugar seguro.
Van muestra una mueca de enojo, sabía que no la haría cambiar de parecer.
-Muy bien será mejor prepararnos para lo que venga, no sabemos que ataquen primero.
-Pues Dryden temo que sea Fanelia.
-¿Cómo.
-Seguramente ellos saben que yo poseo la llave, por eso fueron a Freíd, yo era el objetivo y no tardarán en venir aquí.
-Pues hay que empezar a asegurar la zona en especial las afueras y el castillo. Princesa Millerna, será mejor que parta asía Asturia, las cosas aquí podrían empeorar.
-No lo haré Allen, quiero ayudarlos.
-Pero princesa.
-No insistas Allen, me quedare con ustedes.
Allen ve que la princesa no cambiaba de opinión y Dryden se siente preocupado por lo mismo.
-Bueno querida Millerna, si quieres estar aquí y ayudarnos, mas vale que vallas preparando todo en cuanto a emergencias, tal ves por esto haya heridos.
-Lo haré Dryden, Merle¿te gustaría ayudar.
-¡He, si con gusto princesa Millerna.- Merle sonaba fuera de toda conversación y mostraba un rostro demasiado triste.
-Bueno pues mas vale empezar desde ahora, Demitra, se que el viaje resultó muy pesado, pero puedes empezar con los entrenamientos con su majestad el día de hoy.
-Por mi no hay problema caballero Allen, solo necesito saber la respuesta de su majestad.
-Empezaremos cuando quieras.
Van contestaba un poco golpeado y sin dejar de mirarla. Los demás solo trataban de asimilar lo que se había dicho, no soportaban la idea de que Hitomi había muerto, pero en cierta forma, sentían que tenían esperanzas de ver a su amiga de nuevo.
Pues aquí esta el capitulo donde se hablo parte de la historia de este personaje "Demitra". Le doy gracias a Natalia Kido que ha seguido de cerca este fic, y decirte que soy del club de tener un Neko en mi casa. Sale nos vemos en el siguiente capitulo.
Anónimos, anímense a dejar sus opiniones.
