Vale, primero que nada un anuncio, para este punto se habrán dado cuenta que borre algunos capitulo… No, no fue intencional, y la neta uno de ustedes tenía razón… Me la mame… Si, hasta ahí me llega, pero no es momento para presumir. Esta historia es… Muy preciada para mí como para cometer errores de este tipo. Creo que lo correcto sería hacerlo como debe de ser, sin dar saltos apresurados con los personajes, así que tomando esa idea, seguirá en la parte después de la evolución. Dicho esto, espero que comprendan gracias por seguir esta historia.
Cuando te explican que los humanos tardaron millones de años en evolucionar, te parece ridículo y casi imposible de creer que alguien que está justo frete de ti, evolucione en un abrir y cerrar de ojos. Para mi fueron 5 segundos, y posiblemente para Tao, fueron quizás minutos, pero… No sé, simplemente, no sé explicarlo realmente, sé que no estoy en el mundo humano, pero yo esperaría algo de lógica… Aunque si hubiera lógica me habría ahogado dos veces desde que llegue a este mundo digital. En fin… Ahora tenía que lidiar con dos cosas, la primera de ellas era el frio que comenzaba a golpear mi cuerpo debido a que comenzábamos a acercarnos hasta la cima de la montaña, y segundo… Exactamente… Tao… Aunque si soy honesto, yo no lo llamaría un impedimento. Quiero decir, es posible que yo tuviera en la mente algo parecido, ya que según las explicaciones de Tao, como compañeros estamos entrelazados, y mayormente los humanos, (ósea yo) podemos influir en la evolución de nuestros compañeros, o eso fue lo que yo entendí, por lo cual, si yo deseaba o quería que ella evolucionara, lo haría… Bueno, hasta cierto punto. Pero nunca creí que tomara una forma tan, sexy. O al menos para el ojo humano. Digo, no soy precisamente el chico cristiano más devoto de dios, ósea, soy también un chico y por ende hay cosas que cruzan mi cabeza. Y… es MUY posible, o más bien MUY probable, que quizás, o tan solo quizás yo en algún momento de tranquilidad o simplemente pensando para mí. Me imagine a Tao en una forma más… Pues, atractiva. ¡Pero fue solo por unos segundos! ¡Ni siquiera me la imagine tal cual como ella se mira en este momento!
Ahhh… Frustración… Quizás estoy exagerando, solo estoy nervioso por la nueva forma que adopto Tao, creía que Kyubimon era la evolución de Renamon. Por extraño que suene, ella tenía esa descripción en su nombre cuando miraba al Digivice. Es posible que sea una sub-clase de su raza. En todo caso… Es algo que si necesitaría saber del porque su apariencia cambio tan drásticamente.
En fin… Nuestro viaje a lo que parecía ser la cima de esta montaña, para mí no parecía tener fin alguno, ya que no importaba cuando caminara, en el fondo sentía que no avanzaba nada. No me malinterpreten, suelo caminar mucho en casa, después de todo hago casi una hora desde el trayecto de mi casa hasta la escuela. Así que puedo decir que caminar no representa ningún problema para mí… Aunque, si lo hace el estar caminando por todo un sendero muy empinado que dificulta las cosas para un humano como yo…
Si, era difícil, y más cuando tienes que estar distraído para no mirar los atributos de lo que es tu actual compañera de viaje… Me siento nervioso, preocupado a la vez, no he dicho nada desde que logramos salir del problema con los anteriores digimon. Trato de tranquilizarme, ya que no quiero provocar una reacción negativa de Tao. Que pensaría si supiera que su compañero es un pervertido?... Bueno, se de antemano que ella no me abandonaría a mi suerte… ¿Verdad?
-Haz estado callado… ¿Ocurre algo?-
Al salir de mis pensamientos, levante la mirada hacia Tao, si antes ella era alta, ahora era mucho más alta, como Renamon, ella me superaba en altura por quizás unas cuantas pulgadas, ahora fácilmente me llevaba de uno a dos pies de altura. Se erguía frente a mí a dos patas como lo hacía como una Renamon, calco y repito, es una Kyubimon, yo esperaba ver una cuadrúpeda, de hecho, cuando ella estaba evolucionando, me había imaginado a… Oh… Ya… Olvídenlo, creo haber encontrado el error en esta matrix. Ahora que lo pienso… Habría sido más útil si fuese la Kyubimon común… Comienzan a dolerme un poco los pies de tanto caminar.
-No, no ocurre nada, simplemente estoy algo cansado.-
Trate de mirarla a los ojos… "trate" porque honestamente mi mirada en ningún momento se apartó de sus senos, a lo cual esto lleno mi rostro con un sonrojo. Creo que muchas personas pensarían que tendría suerte de estar en esta posición, pero… Qué pensaría ella de que su actual compañero la ve prácticamente como un… Bueno…. Me ahorrare la palabra obscena.
Tao antes de hablar miro a su alrededor y luego miro el tramo aun faltante de la montaña, nunca he sido bueno para las distancias, además si intentara dar una proximidad, no creo que sea factible porque es posible que por mi cansancio y mis ganas de descansar piense que faltan kilómetros para llegar… Algo curioso, porque si miraba hacia abajo, podía ver miles de kilómetros a la redonda de todo lo que habíamos recorrido… Praderas de un lado, desierto de otro y un bosque… Si, aquel bosque del cual habíamos salido. Resulta desde extraño hasta impresionante lo mucho que habíamos recorrido, incluso yo estoy impresionado del gran viaje que hemos logrado hacer hasta ahora.
-Aún falta al menos unos 10 minutos de caminata –Hablo Tao mientras señalaba a la distancia – Encontraremos un camino mejor construido para caminar por este paso, normalmente ahí algunos digimon's guardianes lo utilizan para descansar del tramo.-
Ella en ningún momento me prestó atención, de hecho, desde que llegamos a esta zona más alta de la montaña, ella también había estado muy callada, normalmente veía sus orejas moverse de un lado a otro, como si estuviera prestando atención a cualquier cosa que pasara, pero lo único que se escuchaba era el viento y algunas rocas que caían, rocas pequeñas. No la culpo que este en estado de alerta constante, pero nunca me ha gustado que haga eso, ya que siento que en cualquier momento saltara algo a atacarme. Mientras no sea nada con aspecto de insecto… Odio a los insectos…
-¿Sabes?... Los humanos no fuimos hechos para recorrer grandes tramos…- Dije entre jadeos mientras trataba de alcanzar la posición de Tao, a unos 15 metros delante de mí.
-No puedo hacerme a la idea de que una especie tan delicada y débil fuera la que hiciera a los Digimons… De hecho, me sorprende el hecho de que aun siguán vivos.- Note un tono de decepción de su parte, ella volteo su cuerpo hacia a mí, mientras trataba de acercarme a ella. Ella no decía eso con malas intenciones… O eso esperaba. Es común que ella se pregunte eso, después de todo… También me preguntaría lo mismo si nosotros fuéramos más fuertes que dios.
-A lo largo de la historia humana -Tome algo de aire mientras caminaba –nuestra evolución es muy diferente a la de los digimon´s, nuestra evolución radica en nuestra forma de pensar y actuar. Comprender y analizar, aprender y realizar, práctica y superación- Explique tomando algo de aire cuando por fin logre colocarme a su lado- Notaste que nosotros no tenemos poderes como ustedes, al igual que nuestra destreza física no se compara con ninguno de ustedes-
-Entonces… ¿Nunca habrá un cambio físico real en ustedes? Solo en como deciden pensar y actuar?-
-Exactamente, aunque cambios físicos se realizan con el pasar de los años… Envejecemos, y morimos eventualmente de forma natural en el mejor de los casos.-
Al mirar hacia adelante, note a lo que Tao se refería hace unos instantes, ya no había caminos empedrados, ahora había escaleras hechas de la misma piedra de la montaña junto a barandales de madera que se miraban sumamente firmes al suelo. Suspire un poco aliviado al ver eso, ya que era un alivio para mis rodillas que ya me dolían por el camino inestable.
-Entonces… ¿Morirás?- Ella me volteo a mirar con un rostro de preocupación y de cierta inquietud. Yo podría decirle una mentira piadosa, pero se que ella no es ninguna tonta, averiguaría la verdad eventualmente, ya sea por otros medios que yo desconozco. -¿Cuándo ocurrirá eso?-
Me encogí de hombros mientras negaba con la cabeza. –Realmente no lo sé, podría decirte que falta mucho tiempo, décadas en el mejor de los casos.-
-¿Décadas?- Ella inclino la cabeza algo confundida.
Decidí no indagar mucho en ese tema, ya que sería difícil de explicar a alguien de otro mundo nuestra metodología sobre el tiempo y la forma en que lo vemos, adaptamos y lo llevamos a la practica en nuestra vida cotidiana. Después de todo, en un mundo donde técnicamente todo está en "pausa" debido a que ellos no envejecen y solo hay día y noche, el tiempo no tiene significado alguno.
-Creo que para explicártelo deberíamos llegar al mundo humano… Es bastante complejo para explicártelo con palabras- Ella no pareció muy contenta con lo que le dije, de hecho me puedo atrever a decir que ella pensaba que le estaba negando el saber, y era cierto… Hasta cierto punto. –Pero puedo asegurarte que pasara mucho tiempo para eso.-
Ella respiro profundo antes de simplemente asentir con su cabeza. Nuevamente ella miro a su entorno antes de hacerme una señal para seguir adelante. –¿Quieres que te lleve? Podemos llegar más rápido si te cargo.-
La oferta era tentadora lo admito, por un lado quería dejar que ella me llevara… Honestamente me dolían los pies y las rodillas… Pero por otro lado me sentía ofendido porque que ella realmente pensaba que yo ya no podía más… Y tenía toda la razón, así que aceptare…
-Solo procura no soltarme…-
trague saliva cuando me acerque a ella, y casi como un muñeco de trapo ella me tomo en sus brazos y me cargo… Ahora puedo tener una idea cercana de lo que podrían sentir mis soldados de juguete cuando jugaba con ellos. Coloque mis manos alrededor del cuello de Tao aferrándome a ella cuando dio el primer salto, esto solo hizo que aferrara mucho mas mi agarre a ella, logrando un gruñido de disgusto de su parte, ya que quizás apreté demasiado fuerte, y estaba apunto de disculparme, pero cuando ella dio otro salto y yo mire hacia abajo, me dio vértigo.
-E-Enserio no me sueltes!-
Escuche una risa de su parte, y al verla al rostro note que tenía una pequeña sonrisa, yo por mi parte gruñí algo molesto por su burla, ya que no era la primera vez que hacia esto, de hecho… Ahora que lo recuerdo… Hizo lo mismo en el mundo humano…
-Sueles tener miedos muy irracionales ¿sabes?- Ella siguió con ese tono de burla mientras seguía dando saltos sumamente largos y altos –Podrías estar frente a muchos digimon´s que podrían poner fin a tu vida y muestras una gran determinación y hasta algo de valor… Pero te asustas cuando estas a una altura relativamente alta.-
-Porque en esas instancias puedo salir vivo del peligro, en cambio a esta altura nada detendrá la caída que fuera a tener y eso es una muerte segura… Claro si antes de la caída no choco contra las rocas de la montaña en el proceso.-
-Siendo un ser tan frágil creo entender tu miedo.-
-Dudo mucho que tengas miedo…- Aparte la mirada de ella mirando hacia otro lado que no sea su rostro y el suelo debajo de nosotros y mucho menos cuando saltaba, porque por alguna razón mi miedo amplificaba la altura a la que nos encontrábamos.
En poco menos de unos minutos terminaríamos llegado a un sendero y zona plana, había casas de lo que parecía ser arquitectura asiática, no estoy seguro si es china o japonesa, eran pequeñas, ni siquiera tenían un piso adicional, parecían hechas de madera y algo de paja, siendo un total de 3 casas sobrepuestas de tal manera que fueran a cada lado del camino de las escaleras. Para mi sorpresa había una especie de fuente, una fuente que tenía la estatua de un humano… Sun Tzu para ser exacto, recuerdo a este señor porque hable de el en mi reporte sobre la cultura china y de lo que eran para mí los mejores generales del ejército chino. Supuse que solo servía como adorno en el lugar.
Tao me termino bajando una vez que llegamos cercas de una de estas casas, no parecía que hubiera alguien, en todo caso parecían abandonados, aunque… Pude notar que había un gran conjunto de plumas blancas por todo el lugar. Plumas grandes, casi como si fueran de una avestruz o algo mucho más grande… Tome una y realmente eran muy rígidas, si bien el conjunto de sus plumas parecía impresionante y de un color blanco puro. Tao por su parte inspecciono una de las casas que había en el lugar, ni siquiera le tomo mucho, pues en cuanto se acercó a la primera y observo el interior me hizo una señal para que la siguiera.
-Puedes descansar aquí, mañana podremos seguir con el resto del camino que nos falta-
Siguiendo a Tao, me acerque a la primera casa, tenía unas pequeñas escaleras que permitían el paso a la casa. Y como ver una cabaña de madera, la casa se miraba en buen estado, algo sorprendente desde mi punto de vista, ya que si bien este lugar está abandonado, o al menos eso pienso yo, ya que bien las plumas pueden ser un indicio de algún digimon volador. Ante mi poca curiosidad dije.
-¿Hay alguien que cuide este portal como tu lo hacías?-
-Si, existen guardianes en cada portal, incluso pueden ser un conjunto de digimon´s, sin embargo no se quien protege este portal, ya que nunca había tenido la necesidad de salir de mi zona.-
-Excepto cuando viajaste el mundo humano.- Si bien mi tono tuvo algo de burlón, ciertamente parecía ella esbozar una sonrisa, que bien parecía compartir el recuerdo.
-Te repito, fue para destruir a los digimon's que habían entrado al mundo humano… De no haberlo hecho, quien sabe lo que habrían hecho ahí-
Cuánta razón tiene ella, creo que desde un principio, nunca la habría conocido. Es curioso pensar que había estado al borde de la muerte por unos instantes y que la simple decisión de Tao por entrar o no al portal radicaría en que siguiera vivo o no.
-Gracias…- Le dije levantando la mirada hacia ella-
-¿Por qué?- Con extrañeza ella inclino ligueramente su cabeza de lado mirándome algo confundida. Debo decir que se ve linda. O al menos en lo que concierne a las facciones de su rostro cuando muestra alguna emoción como esta.-
-Por entrar al portal… No puedo decir con certeza que habría pasado, solo puedo especular… Pero si tu no hubieras pasado por él, lejos de no habernos conocido, yo no seguiría vivo.- No he sido del todo bueno a la hora de expresarme con mis emociones, pero si entiendo el valor de estar agradecido con alguien.
-Es posible que nuestros caminos habrían sido diferentes si yo no hubiera entrado por ese portal… Aunque si no lo hubiera cruzado, era posible que mis hermanas me regañaran por dejar que todos esos digimon´s pasaran por el portal.-
Entre a la cabaña y observe con detenimiento lo que había, pues si bien era algo muy simple, también lo eran los escasos muebles del lugar. Calco y repito, todo con aspecto chino o japonés, no había sillas o sillones, tan solo unos cuantos cojines en el piso, y nuevamente aquellas plumas blancas estaban regadas por el lugar. En si no eran una molestia realmente, solo que no podía imaginarme qué clase de digimon esta viviendo en estos lugares. Había una pequeña mesa en el centro al lado de diversos cojines pero nada más fuera de lo común.
-Veré si encuentro algo para comer.- Dijo Tao hablándome desde la entrada de la cabaña.- Quédate aquí y no salgas por favor.- Hablo en un todo algo autoritario, mientras que me miraba de forma inquisitiva.
-Sueles tener una forma malévola de amenazarme ¿sabes?- Dije tomando asiento en uno de los cojines que estaban en el suelo. Ella simplemente cruzo los brazos de bajo de su voluminoso busto, algo a lo que yo rápidamente aparte la mirada pero solo viéndola de reojo me basto para ver que tenía el ceño algo fruncido y decía.
-Normalmente mis amenazas las cumplo a mis enemigos… En tu caso lo mejor que puedo hacer es simplemente dejarte sin comer- Había un tono de malicia en su voz, al principio no creía lo que ella decía pero al notar no solo su postura si no también tener esa determinación que siempre tiene cuando pelea.
Casi como cual caricatura, pude notar que arriba de mi apareció un signo de admiración al tiempo que exclame y dije –No serias capas-
-Pruébame.- Amenazo con un tono casi sarcástico.
-Tampoco comerías tú, y por ende no estarías en condiciones para pelear por no tener la energía necesaria.- Intente apelar al lado "lógico" de las cosas, claro está. Sumado a eso, su lado protector, Dudo mucho que ella quiera arriesgarse hacer tal cosa si eso afecta su rendimiento para cuidarme, quizás piensen que es un golpe bajo, pero ella empezó.-
-Soy una guerrera por naturaleza, estoy acostumbrada a pasar largos periodos sin comer y mantener un rendimiento óptimo en una pelea… Tú por otro lado, desde que te conocí dependes casi completamente de tres comidas diarias si mal no puse atención en el mundo humano. Además de eso, no tienes precisamente un buen rendimiento físico para mis expectativas si soy honesta, en todo caso el único aquí que no podría estar en condiciones óptimas para al menos subir la montaña serias tu.-
(Inserten cachetada marca dios)
-Tuche…-Dije derrotado quedándome sentado en el cojín- Bien, no iré a ningún lado entonces…-
Ella se acercó lentamente hacia a mí, casi como si se pavoneara frente a mí. Supuse que lo que había dicho antes fue solo tomar ventaja de su condición actual de mi protectora o de lo que sería también una falta de respeto hacia ella… Quizás este problema mío de hablar sin pensar afondo de las consecuencias es un problema que debo de remediar con el tiempo… Una vez que ella estuvo frente a mí, lejos de lo que espere, ella simplemente me dio un par de palmadas en la cabeza y dijo.
-Procura nunca pasarte de listo conmigo. Así como soy amable, y paciente, puedo ser todo lo contrario.- El tono no era amenazador en todo caso era casi como si me hablara en un tono maternal, si bien era una llamada de atención ella tenía razón- Mi deber es protegerte es cierto. Pero no abuses de lo que somos. ¿De acuerdo?- Yo simplemente asentí un par de veces, a lo que ella sonrió y se dirigió hacia la puerta.- Descuida, traeré esos hongos que te gustan.-
-Por favor.-
Una vez dicho esto ella se fue… Obviamente, como las otras ocasiones, no pretendía hacer caso a esta "norma" que ella medio, además, en teoría dijo que no me fuera, así que creo que mientras permanezca en la zona, todo estará bien. Quiero decir… ¿Quién deja estas cabañas abandonadas? Están en perfecto estado y no pareciera que hubiera algo que realmente fuera una amenaza por estos lugares… Bueno, salvo por la posibilidad de una avalancha, debido a la nieve que se mira mas arriba en la montaña. Debo decir que al menos hay una forma de subir la montaña. Al menos relativamente fácil, ya que espero que en el camino, este camino que llevamos siguiendo no se pierda conforme subimos.
-¿Que haría que un digimon con la capacidad de volar se fuera de este lugar?- Hable para mí mismo mientras miraba una de las muchas plumas que había a mi alrededor, algo que pude diferenciar entre algunas de ellas, era que había un pequeño tono rosa en algunas de las puntas de algunas plumas. Instintivamente trate de hacerme a la idea de algún animal con plumas de ese tamaño y que pudiera volar, posteriormente trate de imaginarme la extraña apariencia que podría tener.. Y para mi desafortunada suerte, o quizás para mi buena suerte, no tenía la mórbida habilidad de hacerlo. Lo único que podría imaginarme seria quizás un flamenco o un avestruz. Pero incluso si fuera el caso, no explica por qué el color de las plumas. Blancas…
-¿Un flamenco albino o una avestruz blanca?- tome algunos de los cojines a mi alrededor para improvisar una pequeña cama, y funciono, si bien no superaban la suavidad que tenían mis almohadas, no podía ser quisquilloso en este lugar. –Por el amor de dios, no tengo la imaginación para esto…- Me lleve una mano a la cara tratando de entender todo esto. –Estas en un mundo habitado por un conjunto de criaturas que pueden matarte… y… Consideras la idea de ayudarlos… Ayudarlos…-
Me recosté en las almohadas pensando todo esto… ¿Realmente estoy haciendo esto?... Hace poco más de unas semanas, esa "bestia sagrada" casi me mata… y déjenme decirles que de sagrada no tiene una chingada, incluso lo veo como una ofensa debido a mi fe… ¿Que ser con "Sagrado" en su nombre haría tales barbaries? De hecho ni siquiera debería hacerlo… Vi las noticias, y había muchos estragos en el mundo humano como para siquiera considerar ayudar a estas criaturas, recuerdo haber escuchado incluso una noticia de un niño que había sido encontrado muerto por uno de los digimon's que literalmente se lo estaba comiendo. Pero... También estando aquí me he dado cuenta que no todos los digimon's son como los animales… Son pensantes, entienden, y pueden llegar a ser amables y convivir con los humanos… La raza de Tao es un ejemplo, y los Gekomon´s también… Y quien sabe cuántas criaturas existan como ellas, igual de amables.
Tao me contó que había muchas razas de digimon's que no son agresivos, que son más tranquilos, y que forman pequeñas ciudades en el Digimundo, o poblados, sería la palabra correcta.
Pero… ¿Realmente estaba considerando el hecho de evitar lo que querían hacer aquí?...
Okey… Si hicieran esto, sobre borrar el Digimundo, sería como si se hiciera un genocidio, Tao me demostró que no son simplemente programas que se hacen mediante una computadora… Bueno, son programas hechos a computadora, pero… Han evolucionado a algo que creíamos imposible… Razonan, entienden… Están vivos. De cualquier manera posible que no puedo entender aun. Si bien es cierto que si borraran el Digimundo, se evitarían los problemas de que más Digimon's fueran al mundo humano a causar estragos… Seria relativamente fácil cerrar los portales y así evitaríamos cualquier otra cosa… Al menos claro que tengan otra cosa planeada, y conociendo la historia de mi mundo. Todo lo bélico, es siempre fundamental y no dudo que quieran sacar ventaja de esto…
Si me pongo analizarlo me da miedo, quiero decir, ellos posiblemente incluso podrían haber abierto los portales para que estos estragos pasaran y de ese modo tomar medidas más drásticas, y por consiguiente estudiar más afondo no solo los portales si no algo más… Mientras más lo pienso, puede tomar algo de sentido, o quizás simplemente he mirado demasiados videos de conspiraciones a lo largo de mi vida…
Además… ¿Porque los soldados quería atrapar a esa vestía digimon? Okey, podría ser una mera casualidad haberla encontrado… Pero no que un pelotón completo de soldados armados hasta los dientes nos encontraran casualmente donde estaba una de las bestias sagradas. Lo cual solo fortalece mi teoría de que; Él o los gobiernos, traman algo.
No tengo las ecuaciones, si no las variables. Así que no puedo especular más allá de lo que sé.
-Realmente no puedo creer que hare esto… Rusia… Siempre he querido ir ahí… Aunque en esta época del año el frio es más fuerte…- Suspire resignado. Irónicamente siempre había deseado una aventura y ahora que la estoy viviendo… Comienzo a retractarme… No sabes lo que está en juego, hasta que tu vida está en medio y casi la pierdes un par de veces. Soy un poco descuidado. –Ni si quiera se cómo llegar con quienes necesito hablar o con quien precisamente hablar… Cierto Andromon me dijo con quién, mas sin embargo no entro en detalles, solo señalo a un tipo en una imagen y fue todo… En fin…- Me recosté un momento mirando al techo reflexionando todo esto, y cuestionándome si realmente esto valía la pena. –En que lio me metí esta vez… -Lleve mis manos a mi rostro, frotándomelo con fuerza y frustración. -A todo esto… ¿Que estará pasando en casa? Es posible que estén muy preocupados… La regañada que me espera cuando sepan que desaparecí de México y aparecí en Rusia. La pregunta era, ¿cómo explicarles las cosas, sin aparentar ser un loco?
Deje mi duda de lado cuando un ruido proveniente de afuera de la cabaña donde me encontraba me asusto. Era un golpe fuerte, como si algo pesado callera al suelo, posteriormente escuche el sonido característico de una cachetada, o quizás lo interpreto mal, pero es lo que me viene a la mente en ese momento. Seguidamente escuche golpes mas fuertes y sentí como el lugar temblaba.
Como mi cuerpo me lo permitió, me acerque a una de las ventanas, teniendo cuidado de que lo que sea que estuviera a fuera no me viera. Hice esto debido a que, lo siguiente que escuche fue una especie de explosión, la cual hizo volar algo de tierra y algunas piedras, las cuales algunas de ellas entraron por la ventana.
-Y creía que en casa había acción de este tipo…-
Al asomar mi cabeza por la ventana lentamente, pude observar a dos figuras humanoides… No se soy yo, o es que simplemente tengo una suerte que algunas personas desearían tener… Normalmente cuando alguien mira a dos mujeres pelearse es una ocasión muy rara y sabes que las cosas no saldrán bien… Ahora, con eso en mente… Suponiendo que lo que miro es la representación de un ángel y un demonio.
¡No puedes cruzar estas tierras sagradas!
Literalmente había escuchado una voz angelical proveniente de lo que para mí era un ángel… Estaba tentado a ver que digimon era pero… Incluso cualquier creyente como yo sabría que lo que ve frente a sus ojos sería un ángel. Por extraño que pareciera podría casi confundirla con un serafín. Pero recordé que los serafines tienen ojos en sus alas y gran parte de su cuerpo...… Ahora me pregunto si realmente son los digimon's los que tienen apariencias extrañas…
¡No pienso quedarme aquí a esperar a que los malditos humanos nos aniquilen!
Escuche esta vez la voz de una mujer madura, un poco extraña, era… Como decirlo… Distante, no diría que aterradora, más bien como si su voz fuera hecha para una villana… Pero justo en el momento que dijo "Malditos humanos" yo instintivamente volví a agachar mi cabeza para mantenerme escondido. No pretendía mostrar mi cara a alguien que le tiene odio a los…
*Inserte sonido de derrumbe y Bruh*
Normalmente detesto mi suerte… Pero era necesario que fuera la chica demonio la que se estrellara contra la casa en la que estaba para que me viera?... No pudo haber sido la chica ángel? Realmente el mundo humano y el Digimundo me odia…
Pasa y resulta, que esta ángel en específico, realizo una especie de ataque contra este digimon demonio… Por consiguiente el impacto la hizo caer sobre la casa en la cual yo me estaba ocultando… ¿Y que fue lo primero que vio?
¿¡Un humano aquí?!
Yo, obviamente como todo buen chico lo primero que hice fue. –Hola…- Lo admito, fue un hola tembloroso ante lo que, para mi… Era literalmente un demonio en toda la extensión de la palabra. Aunque un poco feminizado de la manera más "ligera" si podría decirlo de alguna manera.
Diría que sus ojos me miraban con una rabia infernal por el hecho de que son completamente rojos, mientras que su cabello era blanco y sumamente largo. Al principio la idea del demonio o la primera humana "Lilith" me vino a la mente cuando mire a este "digimon" sin embargo lo primero que me hizo reaccionar fue el hecho de que una mano gigantesca o al menos era sumamente más grande de lo que me gustaría creer o era mi miedo el que hacía que se viera más grande.
No quise si quiera pensarlo, lo primero que hice fue alejarle lo más que pude de esa digimon dando pequeños tropezones por los escombros que había debido a que este digimon había caído sobre la casa en la que estaba oculto.
-¿P-Pero que hace un humano aquí?- Escuche hablar al ángel una vez que logre salir de la casa a medio derribar mientras que el demonio simplemente se levantaba.
Yo instintivamente me aleje del digimon ángel, o al menos lo intente. A diferencia del digimon demonio, el ángel tenia un aura más tranquilizadora o al menos no me daba tanto miedo como lo hacía el demonio.
-Tranquilo, no te hare daño…- Su voz sonaba demasiado gentil, al punto de ser casi maternal… Por extraño que pareciera para mi ella se posiciono delante de mi mientras extendía sus alas cubriéndome de aquel demonio humanoide. –No te hará daño mientras este aquí.-
Supongo que aun mi inexperiencia con los digimon's me hacían desconfiar incluso de un digimon que tiene la apariencia de un ángel.
Antes de que pudiera hablar tras recuperar el aliento lo primero que escuche fue al demonio hablar nuevamente.
-¡¿Su maldita especie nos matara y aun así tienes el descaro de protegerlo?!- Grito furioso la demonio reincorporándose.
-Este niño no tiene nada que ver con lo que va a pasar, en todo caso morirá si se queda aquí.- Expreso el ángel en un tono más autoritario.-
-Soy un adolecente…- Dije en un hilo de voz pero rápidamente fui completamente ignorado, ya que estas dos chicas tenían esta pelea a un nivel más… Personal podría decirlo?
-Grr… Aun sabiendo que vamos a morir si nos quedamos aquí… ¿Porque te reúsas a irte? Tienes el portal, tienes la fuerza para hacer lo que quieras en el mundo humano… ¡Eres una completa idiota por querer quedarte en el Digimundo sabiendo que ya no hay futuro aquí!- Grito molesta aquella demonio.
Para mi sorpresa y horror parcial, miraba un aura oscura que la rodeaba mientras sentía como si el ambiente se volviera mas pesado y frio… Había una sensación dentro de mi que me decía que alguien me estaba vigilando. Es ese sentimiento que te dice que algo anda mal y te dice que corras. Pero no podía moverme… Me temblaban las piernas y solamente sentía un miedo recorrer mi espalda. Incluso con la poca voluntad que me quedaba, no me podía mover y eso me aterraba.
-La diferencia entre tu y yo Ladydevimon es que yo tengo fe…- Al enfocar mi mirada en uno de los brazos de este ángel, note que una especie de arco luminoso aparecía en su mano, mientras que en su mano libre aparecía una flecha igual de resplandeciente que este arco.
-¡La fe no te salvara de la muerte! ¡Nos borraran! ¡No habrá más renacer solo oscuridad y la nada es lo único que nos esperaran si nos quedamos aquí!-
-Lo siento entonces por ti y por los digimon's… Pero no puedo dejar que los digimon's crucen el portal… Solamente humanos.-
Creo que esas fueron las palabras incorrectas, ya que cuando dijo esa última oración, mire una ira y coraje irrefrenables en el rostro de ese demonio, mientras que las cadenas que este demonio tenía en su cuerpo se tornaban de un color rojo y su brazo, aquel brazo largo que era desproporcional a su otra mano se alargó y emano una aura oscura.
-Bien… ¡Por mi pueden irse al infierno!- Grito con enojo la demonio extendiendo sus alas mientras se aproximaba a nosotros.- ¡No pienso morir solo por tu maldita decisión!
¡Continuara!
