Cuando me pongo a pensar sobre lo ocurrido con Rusia, referente a su historia, siempre me llega a la mente la unión soviética, la U.R.R.S. Chernóbil, la K.G.B. o incluso todos los actos vistos desde un punto de vista "malo" debido a la crueldad con la que se le caracteriza a este país.

Debo decir que si bien he tenido un gran respeto por este curioso país, admiro aún más que haya sido este país el primero en reconocer el peligro potente que tenía una bomba atómica, quiero decir, Chernóbil fue literalmente un campo de pruebas abierto para Rusia en su momento, ya que aprendimos mucho de ellos, y ahora entiendo que, si ellos hubieran querido, podrían haber comenzado una tercera guerra, pero una tercera guerra nuclear cuando ellos aprendieron más sobre los destrozos que ocurría solo con desechos radioactivos.

Ahora, veo con mejores ojos a este país, porque conociendo a Estados Unidos, y su maldita historia de utilizar incluso a sus propios ciudadanos como conejillos de indias como lo hicieron con los proyectos de la C.I.A. y M.K. Ultra, comprendo que ese maldito país si habría iniciado esa guerra.

Pero dejando de lado mi apasionado gusto por aprender historia de uno de mis países favoritos. La gente de Rusia resulto sumamente amable, o al menos Boris, aquel anciano que me mantuvo en su casa un par de días hasta que mi condición fuese mejor y mi "tocayo" Alexander. Estar aquí me hizo sentir mucho más tranquilo, pero extrañamente preocupado, en el fondo sabía que tenía que seguir con mi camino, no tenía las respuestas ni las preguntas correctas, pero ir al centro de investigación Románov, aclararía algunas cosas, no sé exactamente a que se deba el hecho de que quieran borrar el digimundo, tampoco sé exactamente cómo fue que los digimons se enteraron de eso, pero con los estragos que estaban causando, solo reforzaba el hecho de que ellos eran un peligro. Más aun cuando las noticias informaban de cómo las víctimas de los "monstruos" aumentaba a un ritmo alarmante y criaturas que necesitaban ser detenidas pero por armas de alto calibre. Véase con el uso de tanques, aviones o incluso artillería pesada.

Las noticias habían informado que los vuelos podrían ser cancelados, incluso se peligraba en los mares cuando unas serpientes de metal gigante atacaban barcos comerciantes. Parecía una película de invasión sumamente preocupante, y la verdad… Me resultaba difícil convencer a personas adultas que evitaran destruir un mundo donde aparecían monstruos agresivos con un potencial destructivo y fuerza comparable a las mitologías de dioses.

Mientras más lo pienso… Más pienso que no debería seguir con esto, ¿Cómo alguien como yo podría si quiera cambiar este caos? Quiero decir, no soy más que uno del montón. Y los gobiernos, estoy seguro que ellos actuaran a favor de la seguridad de todos, y cuando digo todos me refiero a la humanidad entera. Dudo mucho que si quiera se interesen en un conjunto de "datos" como los Digimon.

Lo sé mejor que nadie, aprendí que muchos de esos digimons hacen sus vidas como nosotros. Un ejemplo seria la familia de Tao, y los Gekomon. Es por eso, que si pienso en dejar esto, seria mandar al diablo todo mi esfuerzo y sufrimiento que pase para llegar hasta este punto. La verdad es… Que tengo miedo como puede terminar esto, o termina muy bien para mi, o termina muy mal, no existe un punto medio, o eso pienso.

Suponiendo que todo sale bien, los digimon regresan a su respectivo mundo, claro, si es que aun desean hacerlo, lo cual entra en conflicto. Ahora, el punto malo sería que yo termine muerto, herido de gravedad o en su defecto, vivo si decido retirarme ahora mismo.

Mire a mi izquierda, pensando profundamente en todo lo que había pasado hasta ahora, y mire a Tao sentada sobre sus piernas, como siempre era su costumbre, ella parecía estar meditando, aun así, ella siempre parecía percatarse cuando yo pasaba por algo, y esta vez no fue la excepción, ella volteo a verme, abriendo sus ojos azules, fríos y carente de alguna emoción, ladeando ligeramente su cabeza ella dijo.

¿Ocurre algo?

Negando con la cabeza, logre salir de mis pensamientos rápidamente, aun nos encontrábamos en casa de Alexander y Boris, el abuelo de Alexander.

—Pienso en que si debo seguir con esto…—

Aprendí que ocultarle secretos a Tao no era buena idea, para bien o para mal ella terminaba dándose cuenta, ella ponía una atención tan preocupante al detalle que uno podría decir que es una perfeccionista y una detallista. Una combinación peligrosa si me lo preguntan a mí.

—No sé exactamente qué hacer, estamos muy lejos de Moscú, y si lo que dicen en las noticias es cierto, los trenes no estarán factibles hasta que el invierno termine en este lado del mundo, de una u otra forma, creo que no sería posible llegar ahí. —

Busque algún movimiento o una señal de desaprobación de Tao, o una aprobación a lo que dije, en cualquier caso, solo quería saber si valía la pena el riesgo, no solo es mi vida, Tao es quien realmente se arriesga en todo esto. Los militares podrían estar en nuestra contra, a eso sumándole los peligros de algunos digimon que estén por el país, terminaríamos en fuego cruzado.

No puedo decidir por ti, este viaje que comenzamos… Solo tú puedes decidir si quieres dejarlo o continuar. Mi deber consiste en protegerte, no en detenerte, si quieres ir a tu hogar, yo puedo entenderlo muy bien, has pasado por mucho desde que me conociste, seria egoísta de mi parte obligarte a ir por una senda que no deseas… Solo quisiera pedirte una cosa, si deseas irte, te pido que consideres a mi propia familia...

Ahí no pude decir mucho, en cualquier caso, su dialogo me dejo sorprendido, pero también aún más indeciso. Pero también, ella tenía razón, pase por mucho y la verdad, no quisiera seguir adelante con esto, más que nada por miedo… Pero también Tao tenía un punto importante. Ella se preocupaba por su familia, o sus hermanas mejor dicho. Esta era una razón mas que suficiente para darme a entender que ella al igual que muchos en el digimundo merecían tener la posibilidad de seguir viviendo. Pero también, no puedo imaginarme lo que seria ser "apagado" o "borrado" puedo considerarlo como la muerte para ellos. Bueno, ser apagados, podría ser considerado como un sueño, hasta cierto punto, y borrado, creo que eso si entraría en muerte.

—El viaje puede ser largo…— Mire el digivice en mi mano por unos instantes, solo viendo la ubicación exacta donde me encontraba. Faltaban varios cientos de kilómetros para llegar a Moscú. Observe a Tao una vez más y dije. —Hasta ahora todo ha salido bien Tao, bueno, relativamente bien. Es solo que, tengo miedo de seguir…— Mi voz se quebró por unos instantes. —La cuestión es… Que… Tengo tanto miedo de que te pase algo, como de yo morir. —

A pesar de que Tao podría mostrarse fría y distante de manera sentimental, cierto era que ella siempre era muy empática, a la vez que comprendía bien la situación. Quizás lo mejor que tiene Tao, es saber que decir o hacer para animarme.

Sabes, los grandes héroes del digimundo, tenían que decidir si seguir adelante o retirarse. Todos tenemos miedo, eso me incluye a mí.

Enarque una ceja en un enfoque algo escéptico, pero nunca creí que ella tuviera miedo, quiero decir, si se ha llegado a preocupar por mí, ¿Pero miedo? Nunca la vi temblar, o incluso asustarse por ese sentimiento que da impotencia.

Lo que quiero decir, es que, si esos héroes un hubieran seguido adelante, posiblemente no habría digimundo, y yo al igual que mis hermanas no habríamos existido. — Luego de decirme eso, ella se habia puesto de pie y camino hasta donde estaba reposando en la cama. Tomando asiento aun lado mio, ella paso su mano sobre mi espalda, sentí un leve alivio, pero a la vez algo de tranquilidad cuando ella palmeo mi espalda. Llevando una de sus manos a las mias, en las cuales tenia el digivice, ella tomo con fuerza mis manos, y dijo.

Tienes el poder de no solo salvar tu mundo, si no también el mío, sé y veo que tienes miedo de tomar la decisión de seguir adelante por el peso que recae en tus hombros, ahora mismo. Pero no lo harás solo. — Levantando su mirada, ella me miro a los ojos y continúo. —Te prometí que te mantendría a salvo, y eso es lo que hare, pero en el proceso, también pretendo apoyarte para que puedas seguir adelante con esto. Así que, como dije antes. No te culpare si decides ir a casa, pero si decides continuar, no solo estaré muy agradecida contigo, si no que puedo asegurarte que esto te hará mas bien a ti como persona. Ahora comprendo porque ustedes no evolucionan como nosotros. Ustedes los humanos tienen una forma tan única y especial de evolucionar con el tiempo, con sus acciones, vivencias, errores y experiencias. — Luego de eso vi que ella dejo salir una leve risa silenciosa antes de decir. —Comienzo a tenerles envidia…

Me mordí el labio inferior luego de haber escuchado lo que Tao tenía para decirme. Como dije antes… Ella sabe que decir y cómo hacerlo. Por mucho miedo que sienta al decir estas palabras, deberé seguir adelante, ya veré que decirle a mis padres. O como comunicarme con ellos luego.

—Sabes Tao, no solo nosotros evolucionamos de esa forma. — Acaricie la mano de Tao con suavidad, mientras la miraba tome el digivice y dije. —Tú también lo haces. —

¿Entonces cual será tu decisión?

—Iremos, partiremos esta noche, preferiría que Boris y Alexander no nos vean, tomare prestadas algunas de sus prendas para este frio, ya se las regresare o pagare cuando todo esto termine. —

Bien, entonces prepárate, porque el siguiente viaje que sigue, será más difícil que el anterior.

—Eso es justo a lo que le tengo miedo…—

Curioso, para mi esa es la parte divertida del viaje.

FIN DEL CAP.