Cáp.3: Angustia
La luna se encontraba ya predominando en el cielo, en las calles no había más personas que algunos militares en rondines, toda Ciudad Central estaba generalmente desierta por las noches, pero hoy algo traía conmocionada a la milicia. Tras el encarcelamiento de la mafia de ciudad Central se trató de atrapar a los tres líderes, de dos de ellos no se ha sabido nada hasta la fecha, pero del tercero, Nicolás, quien fuera militar un par de años antes de la masacre de Ishbal y que llegó a ser un conocido de Roy Mustang, éste mismo día lo atrapó a modo de secuestro para exigir la liberación de sus subordinados. La noticia recibida por la tarde en el cuartel le calló como un balde de agua fría a Edward, la ira y algunos sentimientos encontrados lo invadieron haciendo caso omiso a las ordenes de esperar, él no iba a esperar, ¿esperar qué, ¿a que le digan que "su" Roy había muerto o algo así, no, simplemente Ed iría por él, no dejaría que nada le pasara sin importar qué.
Escondiéndose en los callejones al pasar inadvertido, trataba de llegar hasta el lugar donde tenía cautivo Nicolás a Roy. Durante todos estos años que ha estado en servicio estable en Ciudad Central se había especializado en algo, en poder ubicar a quien sea y donde sea, era el experto en rastrear criminales y demás, por ello no le fue complicado dar con el paradero de estos dos. Aún cuando Ed estaba concentrado en lo que hacía su mente divagaba ligeramente, ¿Cómo Roy había sido secuestrado así nada más, esa era la pregunta que más le atormentaba.
Había llegado, era una especie de cava por ello no era visitada con mucha frecuencia, se trataba de un buen lugar para esconderse. Elric se deslizó hasta una ventana asomándose de reojo procurando no ser visto, estaban ahí, no se había equivocado, Mustang estaba algo mal trecho, pero, el tal Nicolás era enorme, no por nada había pertenecido a los militares, por lo menos igualaba a Amstrong en físico (pero era medio bien parecido XD), se preocupó, tal vez era demasiado para él solo, una venita salto en su frente al notar como se menospreció de esa manera; tomó la decisión de esperar, parecían estar hablando.
-Así que…tienes subordinados, aún recuerdo cuando eras uno de los míos..-comentaba Nicolás
-Calla- Roy se limitó a decir en un tono neutro
-Espero que sean inteligentes y acepten el trueque-decía mofándose un poco
-¡Ja, sí que son listos, tanto que no creerán en tus mentiras,-por fin sonrió como suele hacerlo-y sabrán que me mataras aún cuando hagan lo que pides-eso molestó a su captor y se le acercó dispuesto a escarmentarlo
-¡¡¡ALTO!-exclamó Edward irrumpiendo por la misma ventana
-¿Ves, te lo dije-se burló Mustang
-¿Bromeas, un enanin como éste es tu "rescate", que patético-decía al mirar a Ed
-¿A QUIÉN LLAMAS DEMASIADO ENANO COMO PARA CUIDAR DE SÍ MISMO!-gritaba bastante molesto el muchacho
-Bueno…¡al menos tiene entusiasmo!-dijo Nicolás frotando sus manos-veremos si me puedo divertir con él…- a estas palabras Ed transmuto su automail como solía hacerlo para pelear, mientras Roy se mostraba algo preocupado.
El combate comenzó, Ed atacó primero corriendo hasta el sujeto queriendo cortarlo con su brazo de acero, el hombre saltó ligeramente para atrás evitando el ataque y propinándole posteriormente un buen golpe en el estómago que lo mandó a unos metros. Edward se paró tambaleándose con su mano izquierda sobre el área afectada, pero no pudo reaccionar rápido a la ofensiva de su contrincante. Fue duramente golpeado al grado de quedar tendido en el suelo sin aliento y adolorido. Roy no pudo quedarse más tiempo sólo viendo, aún si no tenía sus guantes intentaría ayudarlo, de esta manera se abalanzó sobre Nicolás, este apenas se inmutó y se lo quitó de encima con facilidad.
-¿Ahora quieres cuidar a éste enano?-lo tomó del cuello- Qué más da si te mato ahora o después…-
Nicolás estaba levantando a Roy muy por encima del suelo admirando como se sofocaba y quería liberarse de sus manos, pero era inevitable y pronto sólo colgaba como una muñeca de trapo, de igual manera arrojo el cuerpo inerte como un desperdicio más, y sólo quedo tirado sin signos de vida.
-…N-no…no..-balbuceaba Edward mirando incrédulo-…¿Roy?-llamó sin respuesta alguna del aludido y sólo una mirada extraña por parte del enorme sujeto.
Antes de que el propio Nicolás lo notara Edward estaba como revivido por lo que vio, la furia era poco comparada con la expresión de Ed, se mostró sumamente ágil y al fin consiguió herir al hombre, después lo golpeó con quien sabe que fuerza y lo remató atravesándolo con su automail, exhausto Ed sólo se quedó de rodillas en medio de todo aquello. Por un lado el mafioso muerto frente a él, y a su vez estaba el Coronel tumbado a unos metros de él, miro a éste último, sus ojos comenzaron a llenarse de lagrimas, se paró y se desplomó ante él.
-…¿Por qué… Roy?-habló con la voz deshilachada-…Roy..-repetía llorando sobre el pecho del Coronel, no podía creer que no pudo decirle lo que sentía, se arrepentía de no haber le dicho en la boda de hace un mes.
-…No es para tanto, ¿o si?-Ed se levantó como impulsado por un resorte al escuchar esa voz- Por cierto…que igualado es Hagane, aún cuando estuviera muerto debe respetarme-Roy se paró como si nada
-¿Estaba fingiendo?-fue lo primero que dijo Ed
-¡¡Claro, si no lo hacía nos mataría a los dos, que tonto es Hagane, creer que moriría tan fácilmente-se mofó sin notar la reacción de Ed
-…Usted-dijo Edward apretando los puños e inclinando su cabeza para ocultar sus ojos tras sus mechones dorados-…¿Como pudo!-gritó por fin propinándole un gran golpe con su mano humana.
-…-por primera vez en mucho tiempo Roy Mustang se quedó sin habla
-..¿Y mis sentimientos qué!...no sabe como se me destrozó el corazón al verlo "muerto"-Ed derramó un par de lágrimas y salió corriendo del lugar.
-…Edward-susurró Roy al cabo de un rato algo confundido, ¿a qué se refería con "mis sentimientos", debía aclarar las cosas, tenía muchas dudas, pero, primero debía terminar con esto, así que llamo al cuartel y fueron por él y por el cuerpo del criminal, explicó lo sucedido después de que curaran sus heridas. Para ese momento el sol estaba saliendo, y en su ser sentía la necesidad de ver a Ed y decir "lo siento".
Continuara…
