Harry Potter, pertenece a JK Rowling. Tokyo Ghōul, pertenece a Sui Ishida.

1.- Fem-Harry tiene que ser un Ghoul, eso está implícito.

2.- El harem de mínimo siete, tiene que tener a Lily, Hermione, Daphne, Padma, Susan, Kaya y Tōka si o si, decide las otras dos, e incluso puedes agregar a más chicas, siempre y cuando las seis estén.

3.- NO es un Cross, solo vamos a usar el Ghoul como criatura mágica, a Tōka, Kaya, el Kagune y nada más de Tokyo Ghoul.

4.- La criatura Ghoul tiene que ser endémica de Japón, es decir: difiere de los Ghouls que ya existen en el canon de HP.

5.- Por naturaleza los Ghouls son... agresivos, así que el Fic tiene que ser bastante oscuro y sangriento.

6.- Quiero golpes para Snape, Ronald y Draco. Aunque bueno esa regla es más específica para ti que parecer tener alguna especie de... aprecio por la mierda esa de Snape.

7.- (Lo de la relación incestuosa por supuesto está implícita también, pero por si acaso, la agrego)

8.- El Fic tiene que comenzar en el tercer, cuarto o entre esos dos años.

9.- Tiene que contener Lemons.

10.- Fem-Harry tiene que crear una empresa en el mundo mágico, para hacerlo evolucionar, yo que se una empresa de celulares mágicos (esta idea fue tomada de Godfather and Godson by Mark_Ward)

11.- Tiene que haber un altercado con el mundo Muggle, no solo como referencia a Tokyo Ghōul sino también para que se demuestre aún más esa separación entre mundos.

Corte AKA Harén: Lily Potter, Hermione Granger, Daphne Greengrass, Padma Patil, Susan Bones, Tōka Kirishima, Pansy Parkinson, Kaya Irimi, Narcisa Malfoy.

Artemisa: Una Ghoul en Hogwarts (Segunda Versión)

Capítulo 17: Sobre el Torneo de los Tres Magos... y el regreso.

Todo era una locura en la CCG. Y el distrito especial de Chiyoda, donde se ubicaba la oficina central, y núcleo de la CCG.

La última vez, que algún investigador fue asesinado, en cualquier distrito de Tokio, fue en 1955, y ahora, solo con unas 48 horas de diferencia, cuatro investigadores elite y cerca de ocho investigadores de bajo rango, fueron asesinados.

—Y pensar que incluso alguien como Mado, seria... bueno... pues si me preguntas cual creería yo, que sería el resultado más obvio, diría que este. —Dijo un investigador, a otro. —El instrumento del investigador, no es tan solo el Quinque... todo esto sucedió, porque Mado solía estar recolectando armas, para mejorar su "habilidad"

— ¡Señor Marude! —le increpó otro investigador. —Por favor: mantenga esas palabras desdeñosas contra el muerto, para usted mismo.

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Al mismo tiempo, que los Investigadores de la CCG, tratarían de recolectar pruebas, solo encontrarían a sus otros Investigadores, muertos por disparos y otro tipo de raros accidentes, provocados por Artemisa, Kaya, Daphne y Susan, logrando así despistarlos.

En esos momentos, para sorpresa de Artemisa llegó una carta a Anteiku, justo dos días antes de que salieran del país: Era para Tōka, así que Artemisa la tomó y fue a buscar a su amiga.

Era del director de Mahōtokoro, diciéndole que tuvo las suficientes y más altas calificaciones y que podría tener una beca a cualquiera de los otros colegios de magia, alrededor del mundo.

Y adjunto a la carta, le daban una lista de las escuelas mágicas. Tōka eligió Hogwarts, y para ello, derramó algo de cera, junto al nombre de la escuela, y usó un sello. La lista fue consumida por un fuego mágico rosado.

Los últimos días en Tokio y en el país del sol naciente, pasaron para los magos ingleses, quienes se asombraron, al saber que Tōka se trasladaría con las chicas, para estudiar en Hogwarts. Inmediatamente, Sirius le ofreció una de las muchas habitaciones de la casa Black, y la chica aceptó, estando algo apenada.

Así mismo, fue una sorpresa del mismo nivel, que Kaya también decidiera abandonar Anteiku y Japón. Dijo que, incluso si solo Tōka y Artemisa eran sus clientas, planeaba abrir una cafetería en Londres.

Cuando finalizó otro día, Kaya, Tōka y Artemisa, se encontraron con un automóvil que las recogía y era conducido por Jean Granger, quien las llevó al hotel y hasta la habitación, encontrándose con las maletas de todos, listas y disminuidas en tamaño.

—Chicas —habló Sirius, encontrándose complacido, al ver a Kaya y Tōga, allí. —Julius, Amelia y yo, acabamos de terminar una conversación por Flu, con los otros lores y ladis del Wizengamot.

Kaya habló, para explicarlo a su amiga de cabellos violetas y negros (Tōka). —El Wizengamot es el cuerpo gubernamental, sino estoy mal. —Los adultos asintieron.

—Albus Dumbledore, es el director del colegio al cual Tōka asistirá, desde el 1 de septiembre y, además, es una figura muy querida en Europa, porque derrotó a un mago muy malvado, en 1945, al tiempo que la II Guerra Mundial Finalizaba. —Explicaba Sirius, a Kaya y Tōka, quienes asintieron. Pero Artemisa, Hermione, Susan, Pansy, Parvati y Padma—Al salvar el Mundo Mágico Europeo, le ofrecieron muchos puestos gubernamentales, y él aceptó los puestos de Jefe Magos del Wizengamot y de Jefe Supremo de la Confederación Internacional de Magos. Todo esto, al tiempo que tomaba el papel de director de Hogwarts. —Entendieron y asintieron. —Pues bien: Este año, un hombre quien en el pasado se unió a un Mago Oscuro y que se excusó con haber estado bajo el poder de un hechizo de control mental, por el cual generalmente acabarías encarcelado, y miembro del Lado Oscuro del Wizengamot, apoyó a Dumbledore, cuando él dijo que quería traer de vuelta, una competencia de escuelas mágicas.

Todas las chicas, abrieron los ojos. Y Julius tomó la palabra. —El Torneo de los Tres Magos, se realiza entre la escuela de Hogwarts (en el Reino Unido), la escuela de Beauxbatons (en Francia) y el Instituto de Durmstrang (en Noruega). Se ha retomado, supuestamente para retomar las buenas amistades políticas mágicas, entre los tres países. Pero siendo que Lucius Malfoy, lo propuso... temo que quiera algo más. Quizás... quizás quiera abrir una ruta de narcotráfico mágico, o buscar apoyo del bajo mundo mágico de esos países.

No sabían nada, sobre lo que les podría deparar el próximo año y, aun así, se despidieron de Tokio.

Kaya y Tōka, comenzarían una nueva vida, sin estar siendo perseguidas por la CCG. Eso las hizo sentir esperanza.

Todos se agarraron de los dos Trasladores, sintieron los molestos garfios agarrándolos, detrás del estómago, y ser arrastrados, atravesando tubos muy delgados, antes de aparecer, en la casa Black, donde los Granger, Sirius, Amelia, Artemisa, Susan, Tōka y Kaya, pasarían la noche.

Tres Ghōuls pasaron a habitar Inglaterra.

Esa misma noche... o, mejor dicho: madrugada, Artemisa salió de su cama, se colocó ropas azules y negras encima, agarró su máscara de cráneo de gata, y fue a la cocina. Comenzó a revisarla, hasta encontrar algunas navajas y cuchillos, forjados con hierro y acero de enanos y gigantes. Sabía que ese metal, era lo que necesitaba.

Había leído bastante, sobre criaturas mágicas, y sabía que los hierro y acero, que estaban a disposición de los enanos y gigantes, eran capaces de atravesar la capa de magia, que rodeaba a los magos. Si un Muggle atacaba a un mago, con un cuchillo o una navaja, en una hipotética situación de asalto, en su contra, entonces el cuchillo o navaja se rompería, al entrar en contacto con la piel del mago, debido a la capa de magia pasiva, que rodeaba a los magos.

Pero pasaba todo lo contrario, con aquellos cuchillos que acababa de encontrar, y la prueba... era que se había infringido (de forma MUY estúpida), un mínimo corte en el dedo pulgar, de la mano izquierda.

Eso la hizo sonreír, de forma maléfica.

Si incluso ella, que era una Ghōul, podía ser herida por un simple cuchillo de cocina, entonces sabía perfectamente, lo que estos mismos cuchillos, provocarían en los Mortífagos.

Rebuscó un poco, y agarró una diminuta cuchara, para el azúcar. Se giró, con todos los cuchillos y la cuchara, y se dirigió a la sala de magia. Algo que (aparentemente), tenían todas las casas de las Nobles y Ancestrales Familias: Una sencilla sala, con cientos de tomos de magia y objetos para hacer puntería. Allí, usó la maldición Gemino, para multiplicar los cuchillos, detuvo la maldición y luego, fue señalando cuchillo por cuchillo, mientras susurraba una y otra vez, el mismo hechizo, en cada uno de ellos. — "Reducio" — Los guardó en una bolsa de tela, y un libro en específico. Y luego pensó en el cementerio de Little Hangleton, y apuntó con su varita a la cuchara. — "Portus" —Susurró, antes de sonreír, cuando vio que el Traslador funcionó a la perfección, y lo trajo al lugar que él quería. Sacó los cuchillos, y los enterró bajo tierra, uno por uno, justo donde recordaba, que estaría el caldero, donde estaría el cabrón de Colagusano, donde Aparecerían los Mortífagos. Extrajo de la bolsa de tela, el libro que llevó, y rebuscó en sus páginas, hasta encontrar el hechizo, pero también la Runa. Extrajo su báculo, el cual tenía el tamaño de una varita y realizó la runa japonesa, causando que las hojas de los cuchillos, surgieran desde debajo de la tierra. — "Perfecto" —Susurró, y devolvió los cuchillos a su tamaño anterior. Y justo cuando quería irse, preparó otra trampa, y marcó con una runa, la parte trasera de la tumba de Tom Ryddle Sr. considerando que había finalizado su trabajo, volvió a usar la cuchara-Traslador, y volvió a la misma sala, donde había estado. Suspiró, y regresó a su habitación, donde fue tomada por sorpresa, por Tōka y arrastrada a la habitación de sus amigas Ghōuls.

Las tres chicas Ghōuls, pasaron la noche, besándose, acariciando sus cuerpos y gimiendo los nombres, de las otras dos.

Mientras que una de ellas, estaba con la espalda sobre el colchón, otra lamía los pechos de la chica y la tercera lamía su monte de venus, hasta que intercambiaban besos, y la primera tenía su momento, de disfrute y perversión.

Las caricias de Tōka y Artemisa, eran suaves y eran eso mismo: caricias.

Pero, por parte de Kaya, eran bastante rápidas y algo duras, causándoles ciertas molestias y algo de fricción en los cuerpos de sus amigas, pero era compensado con los besos y palabras coquetas y dulces de la castaña.

Aunque Artemisa y Tōka, no tenían ninguna queja, de sus habilidades, con la lengua, los dedos o sus Rinkaku.