Pido disculpas por la tardanza y porque me equivoqué de titulo de capítulo en el anterior, ese título es de este capítulo, pero ya lo corregí. No sé quien sea Kisara porque no he visto la nueva temporada (de hecho no la puedo ver gracias al trabajo y la escuela) y de hecho la información de internet que he encontrado sobre ella me confunde un poco. Sé que Kisara no debería de estar aquí, pero supongamos que anda rondando desde hace tiempo. Aclaraciones hechas, ya no molesto y vamos al cap. 6!
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Joven Kaiba, los papeles que solicitó están en su escritorio.
Si claro, en unos momentos los firmo... - abrió la puerta de su oficina, estaba completamente enfadado - mientras más rápido los tramite mejor...
Y le están esperando!
En cuanto entró pudo ver a una joven de largos cabellos casi blancos, piel blanca y ojos de un azul indefinido, vestida en un lindo vestido azul de seda. Seto la miró embelesado, sin poder articular palabra, pero la joven solo sonrió y corrió a abrazarlo fuertemente. La secretaria salió de la oficina algo asustada al ver como esa jovencita podía abrazar a su jefe sin esperar consecuencias.
Sacerdote! Hace tanto tiempo que no lo miraba!
Kisara? - el castaño estaba realmente sorprendido - Que haces aquí?
Que no puedo visitar a mi sacerdote favorito?
No se de donde estas sacando que soy un sacerdote - se sentó en su imponente silla de escritorio, haciendo su pose de Ser Supremo - estas igual de loca que Ishizu.
No estoy loca, y sigo diciendo que tú eres mi sacerdote favorito - ella sonrió de una manera tan tierna que hizo que Kaiba hiciera una mueca de nerviosismo - aun así me gustaría que saliéramos a cenar, quiero comentar contigo ciertos sueños que he tenido...
No soy ningún siquiatra como para que vengas con esas cosas.
La joven hizo un puchero al ver que Seto no le estaba prestando atención por andar leyendo los papeles que le entregó la secretaria. Se paró de la silla y se le arrimó al escritorio de una manera poco salvaje, tanto que el no tuvo mas remedio que mirarla.
Te espero en el restaurante del Four Seasons a las ocho de la noche, sé que te va a interesar - ella se quitó del escritorio y se dirigió a la puerta - no faltes porque si faltas, vas a conocer la verdadera forma de un dragón blanco ojiazul.
Kisara salió de la oficina dejando una amenaza pero no le importo, ya que de los papeles que había leído dependía el futuro de su empresa. No era que no confiara en salir bien librado, pero existía una muy remota posibilidad de que todo saliera mal, de hecho no tardó en recibir la noticia de que sus "adorados" socios habían convocado la audiencia para unos días después.
Como si no tuviera tantos problemas con los que ya tenía.
Rápidamente los firmó y metió en un sobre, llamó a un mensajero para que se los llevara a su abogado y luego siguió revisando papeles tranquilamente. Según lo que le había dicho Marik (al cual tuvo que ascender para darle las gracias por la información recolectada; tanto Bakura como Marik estaban actuando de espías en su propia empresa, claro que pagados por el mismo) la audiencia que habían convocado sus "adorados" socios sería en esa semana, y como hombre prevenido vale por dos, esos papeles que acababa de firmar eran su As bajo la manga.
Mi cabeza me da vueltas... creo que si voy a volverme loco...
Joven Kaiba, tiene una llamada de su casa - mencionó la secretaria por el intercomunicador - es su esposa.
Pasa la llamada - otro problema que tenía que resolver - Ahora que quieres Ishizu?
Seto Kaiba! Mas te vale que vengas a comer porque si no lo haces te mato!
Ishizu, no sé a que viene todo eso, no es necesario, tengo muchas cosas que hacer...
De hecho te llamaba porque he descubierto algo sobre mi investigación y te lo quería comentar - mencionó ella de una manera mas seria. Nunca la había escuchado hablar tan serio desde el día en que le dio a Obelisk - pero bueno, allá tú si no quieres saberlo.
Ush, esta bien, estaré allí para la hora de cenar, ahora déjame trabajar...
En cuanto hubo terminado de hablar se puso a diseñar un nuevo sistema de duelos; tal vez se miraba algo obsesionado, pero era la manera en que se ganaba la vida.
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Llegas noche - dijo una voz detrás de Seto, él volteó y se encontró con Ishizu - son las once de la noche.
Y? Ya comenzaste a comportarte como una esposa celosa?
De hecho me importa un comino, como no llegaste me puse a seguir trabajando...
Ishizu había estado trabajando toda la mañana en la tablilla. Era lo bueno de tener los recursos a la mano, inclusive agradecía que la biblioteca de la mansión fuera tan grande.
Había investigado, visto, leído, comparado, buscado tanto, que su espalda le dolía al punto de no querer levantarse, pero por fin había encontrado algo.
Cómo osas tocar a mi amada?
Que rayos estas hablando?
Te hice una pregunta... - Kaiba la miraba con ojos profundamente enojados - cómo osas tocar a mi amada!
Tu amada?
Si, mi amada computadora maestra - se acercó a la maquina que ahora tenía jeroglíficos en su pantalla - No me digas que la usaste para tu investigación?
Y si así fuera? Mejor vamos a comer, estoy muy cansada y tengo que contarte lo que encontré.
Se levantó de la silla en la que estuvo trabajando todo el día y se estiró de una manera que denotaba cansancio, pero que Seto pudo notar algo más a pesar de las sencillas ropas que traía, de hecho, Seto tuvo que hacer un esfuerzo enorme para no fijarse en la anatomía de la morena.
Ya en el comedor notaron que Mokuba aun no había llegado, aunque realmente no querían saber en que pasos andaba ese jovencito.
Me lleva la...
Ahora a quien estás maldiciendo?
A mí mismo, tenía una cena hace dos o tres horas con un cliente - mintió él, recordando la cena que tenía con Kisara.
Si claro...
Y que se supone que descubriste?
Es un ritual para sacerdotes.
Que dijiste?
Es un ritual para sacerdotes - repitió ella lo mas calmada posible - por aquellos tiempos los sacerdotes se dedicaban a servir únicamente al faraón y a los dioses, pero este ritual solo involucra a la diosa Bastet, no a ningún otro dios.
Y eso que tiene que ver?
No seas ignorante, Bastet es la diosa del matrimonio en esa cultura, lo que indica que esos sacerdotes de la tablilla buscaban unirse. Lo descubrí al descifrar el jeroglífico que indicaba a Bastet y comparándolo con tablillas de otros rituales. Pude ver que había unos que significaban "unión".
Y porque no lo descubriste antes?
El signo estaba muy deteriorado, al momento de la comparación me di cuenta, y era demasiado lógico cuando descubrí a Bastet.
Pues yo no veo el caso de que un par de sacerdotes locos se hayan "unido", ni que se hubieran casado.
"Por qué se miran así? Hicieron algo malo?"
"Solo se están peleando como siempre, ni que se hubieran casado"Ishizu despertó súbitamente y se encontró en la recamara. Miró el reloj y vio que habían pasado un par de horas desde la comida, aunque para ella hubieran parecido unos segundos. A su lado ya se encontraba Seto dormido, y no era para tanto después de todo lo que tuvo que manejar ese día.
"Habrá sido quien me trajo? Nah, de seguro se lo pidió a sus sirvientes... o no?"
Se sentó en la orilla de la cama, levantó el teléfono y habló con Yugi para pedirle su collar del milenio por un tiempo en lo que descubría el misterio de sus visiones, claro que no le dijo el motivo.
Al contrario de lo que ella creía, él había despertado al escuchar los sonidos de una conversación y no pudo evitar escucharla.
A veces no sientes que las cosas se están forzando? Como si te empujaran y arrinconaran de una manera que sientas que no puedes respirar... Nah, olvídalo, aunque más dormido no puedes estar...
"No sé porque, pero yo me he sentido así..."
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Hey ya levántate - Seto movía a Ishizu desesperadamente para poder despertarla - tienes una pesadilla o que?
Ella se levantó lo más rápido posible, agitada y algo sudorosa. Seto notó que tenía algo de fiebre y volvió a recostarla para ir por algo que la calmara. Mala suerte que fueran las tres de la mañana y que sus sirvientes estuvieran dormidos. Muchas veces le había tocado hacer de enfermero cuando su hermano Mokuba se enfermaba, pero se le hacía raro atender a la que ahora era su esposa.
"Que tanto sueñas para que te tenga asi?"
Como si le hubiera respondido, Ishizu murmuró algo de lo cual solo escuchó decir su nombre, o por lo menos eso parecía. El la calmó al sostenerla por los hombros.
Tranquila, tienes que descansar...
Esto es una completa maldición...
Deja de delirar, mejor cálmate para que te duermas...
Le dio un calmante y un antibiótico para bajarle la fiebre, pero ella seguía delirando. Algo decía ella sobre una consumación, una maldición y algunos sucesos del pasado, que a pesar de ya no tener su artículo del milenio parecía recordar.
Ishizu, alguien te ha dicho que no debes de comer comida pasada?
Cállate, que tu también tendrás la maldición...
No te estoy entendiendo anda!
Muy a fuerzas hizo que se durmiera, pero se sentía raro. Raro por verla dormir tan tranquila, sin llegar a los insultos ni a los golpes. Que más hubiera podido pedir que no fuera un poco de tranquilidad?
No pudo dormir después, mas bien se puso a anotar proyectos en una librea a la luz de la lámpara de la mesa de noche, mientras vigilaba a la morena. Cada proyecto era precedido de un tachón enorme y de hoja arrancada, no podía concentrarse al tenerla al lado, inclusive se había olvidado de la cita perdida con Kisara.
De repente sintió un abrazo, dándose cuenta de cómo ella lo había tomado desprevenido, aunque claro, la fiebre era la culpable, ya que estando en sus cinco sentidos ella jamás haría eso de abrazarlo.
Y no podía dejar de mirarla.
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Ishizu despertó con un fuerte dolor de cabeza, y esta vez estaba completamente segura de que algo había pasado.
Y no solamente era su presentimiento, sino también la sensación de nerviosismo que le causaba el estar abrazando a Seto Kaiba.
"Un momento... - intentó reaccionar como el CEO la abrazaba con una mano mientras que con la otra sostenía una libreta. Estaba aparentemente dormido - por qué me está abrazando?"
Intentó moverse para poder ir a enjuagarse su cara, pero pareciera que mientras mas se movía mas la aferraba hacia él. No lo soportó mas y lo golpeó con su codo en el abdomen, logrando despertarlo.
Pero que te pasa mujer! Por qué me golpeas!
No tienes vergüenza? Eres un descarado! No tienes derecho a tocarme!
Momento, yo solo te cuidé porque te dio temperatura en la madrugada. Sinceramente lo hice porque no me gusta cargar muertes en mi conciencia...
Cuándo me enfermé? No estoy enferma!
Es lógico que no lo recuerdes, solo decías cosas que no entendí y no me dejaste dormir en buena parte de la noche.
Por cierto, me sueltas o comienzo a pensar que tienes algo conmigo?
La oportunidad perfecta para vengarse por su falta de sueño había llegado, y no le importaba que ella se acabara de recuperar de un delirio atormentante.
No la soltó, sino que la aferró aun más por la cintura y la miró directamente a los ojos con algo de... perversión?
Por qué no quieres que te toque? Temes que te guste?
Al notar el sonrojo de la morena hizo su movida especial: con un rápido movimiento la acorralo en la cama, encima de ella y tomándole las muñecas para que no pudiera escapar.
Decías, querida? - acercó su rostro cada vez mas, hasta hundir su cabeza entre el hombro y el cuello para ponerla nerviosa con su respiración y asustarla hasta mas no poder - Acaso tienes miedo? Me temes? Pero claro, solo dime... quien no le teme al gran Seto Kaiba?
Sabes bien que no tengo miedo...
Ah no? Y por qué estas temblando? - notó un nuevo sonrojo y la enfrentó, acercándose cada vez mas a sus labios - ya no eres tan fiera como antes...
Su resistencia era mucha, pero sucumbía poco a poco hasta que no le bastaron fuerzas para sostenerla. Al ver sometida a la presa, las manos de Seto dejaron de apretar las muñecas de Ishizu y comenzaron a recorrer sus muslos, mientras su boca devoraba con ansiedad su cuello, con tanta ansiedad que realmente no sabía de donde había salido, pero lo único en que pensaba era en poseerla, como si algo estuviera posesionándolo a él para hacer lo que hacía.
Y lo peor de todo, era que a ella le estaba gustando, y pudo saberlo por la manera que lanzaba sus suspiros y débiles gemidos. Fue ahí cuando él paró y se levantó de la cama para dirigirse al baño por una buena ducha de agua helada.
Luego hablamos querida, porque ya voy tarde al trabajo.
Ishizu se hundió en su almohada muerta de rabia por haber sucumbido ante Seto Kaiba, maldiciéndolo por haberla dejado con el corazón latiendo a mil por hora, incluso se dijo maldiciones a si misma por andar de calenturienta.
Tonto... maldito perro del mal... pero lo mandaré al reino de las sombras, esto no se va a quedar así!
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-Y que pasará cuando se note? El faraón nos va a matar!
-No tiene porque hacerlo, seguimos todo al pie de la letra.
-Pero...
-Pero nada, y se llamará Horus.
-Que? Será Sekhmet!
Ishizu volvió a despertar sobresaltada. Se había vuelto a dormir encima de su mesa de trabajo, pero esta vez en el museo. Eso de desvelarse trabajando en esa tablilla del demonio ya la estaba hartando, además supuso que le hacía falta algo de energía. Por otro lado su cabeza le daba vueltas desde la madrugada, no sabía si era por el trabajo, la comida que dejó preparada, o el suceso que tuvo con Seto.
Tenía poco conviviendo con el casi las veinticuatro horas del día y no dejaba de pensar que tenía que ver Seto con todo lo que le estaba pasando.
Estúpido Kaiba, lo mandaré directo al reino de las sombras, pero no sin antes cortarle "esos" primero - tocaron a la puerta - pase!
Sacerdotisa! Tengo que hablar con usted!
Esa voz le entró como un chillido en sus oídos, y cuando se dio cuenta ya tenía a Kisara frente a ella con ojos casi llorosos. La verdad lo que le pasara a esa chica le tenía sin cuidado, pero al parecer ya era demasiado tarde.
No se a quien recurrir, pero se que el sacerdote le tiene mucho respeto.
"Si claro, tanto que no me manosea por las noches " - pensó la egipcia.
Se supone que ayer en la noche íbamos a ir a cenar, pero lo esperé y nunca llegó. Quería hablar con el de algo muy importante, pero parece que no le interesó...
"Así que era esto... bien Seto Kaiba... no sabes en lo que te metes..."
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Para los que querían un poco de "acercamiento" entre nuestros protagonistas aquí lo tienen, y esperence porque se viene algo buenísimo, ya con Kisara en medio algo debe de pasar... jo jo jo (risa diabólica).
En fin, sugerencias, criticas constructivas, alabanzas y bishounens como Marik y Bakura por favor en un RR (excepto los Bishounens, esos van a mi mail o a mi casa xD)
Nayru.
