Capítulo 2: Y así todo se va al diablo…
Noodle despertó de su cómoda cama, se estiró y se fue a desayunar. Chiyoko había hecho arroz condimentado y estaba poniéndolo en la mesa. Noodle se sentó y comenzó a comer.
-Itadakimasu. –dijo Noodle.
-¿Vas a ir al mar? –preguntó Chiyoko.
-Sí, por qué, ¿paso algo?
-No, pero tómate un descanso; llevas trabajando un mes seguido.
-Bueno, pesco una almeja grande que vi y vuelvo. No creo que me lleve mucho tiempo. –dijo Noodle finalmente.
Chiyoko aceptó, terminaron de desayunar y Noodle fue a cambiarse. Salió de la casa y fue caminando hacia el mar para poder conseguir esa peculiar almeja. Llegó a la orilla y se dirigió al espigón, se lanzó al mar y nadó en dirección de su objetivo. Iba tomando bocanadas de aire mientras se dirigía, ya que se hallaba algo lejos. Finalmente llegó, tomó una bocanada de aire y se sumergió.
La almeja era más pesada de lo que se veía, y le tomó trabajo llevarla a la superficie; pero lo había logrado. Estando en la orilla, Noodle se sentó, estaba cansada por lo que quiso recuperarse. Luego de retomar fuerzas, se dedicó a abrirla, cosa que también supuso mucho esfuerzo. No lograba abrirla, era como si estuviera cerrada con candado, y no tenía la llave.
Tuvo que hacer un mecanismo de palanca con unos palos de madera que encontró. Al desbloquearla, la abrió lentamente, esperando encontrar una hermosa perla; sin embargo, al terminar de abrirla, no había nada. Noodle estaba decepcionada, pensaba que el esfuerzo que había hecho valdría la pena, entonces vio un humo negro acumulándose en el interior de la almeja, de repente salió disparado, noqueando a Noodle al instante.
Noodle despertó agarrándose la cabeza por el dolor del golpe recibido, preguntándose que había sido eso. Luego de recuperarse del golpe, se dio cuenta de que ya no estaba soleado; es mas, estaba más nublado de lo normal.
Se dirigió a su casa porque comenzó a hacer un fuerte viento. Al llegar, la villa estaba hecha un desastre, como si un tornado hubiera pasado ahí hace unos minutos. Fue corriendo hacia la casa de Chiyoko, encontrándola tirada en el piso.
-¡Chiyoko!, ¡¿estás bien?! -le dijo Noodle
Chiyoko se comenzó a despertar lentamente.
-No-Noodle, ¿eres tú?
-Sí Chiyoko, soy yo. ¿Qué es lo que pasó?, ¿por qué todo está destruido?
-Mazuu, lo que pasó fue Mazuu. -dijo finalmente Chiyoko.
-¿Qué es Mazuu? -preguntó Noodle mientras ayudaba a levantar a Chiyoko
-No que, sino quien. -le aclaró. -Mazuu era un antiguo demonio que aterrorizó a Japón hace muchos años atrás. Destruía todo a su paso; hasta que finalmente un grupo de samuráis lo venció y encerró en una prisión que arrojaron al mar y nunca más se supo de él. Se supone que solo era una leyenda, pero al parecer es real.
Noodle ya sabía cómo es que Mazuu había vuelto, estaba dentro de la gran almeja que había encontrado y abierto, lo había liberado.
-Perdón Chiyoko. -dijo Noodle entre lágrimas. -Yo liberé a Mazuu por accidente, no sabía que estaba dentro de esa almeja grande que pesqué.
-No te preocupes Noodle, no sabías la historia, y se supone que solo era una leyenda. -consoló Chiyoko a Noodle.
-Pero ahora un demonio anda suelto por mi culpa, debo hacer algo para detenerlo.
-Noodle ya viste lo que hizo con la villa, no puedes derrotarlo tu sola, además ahora puede estar en cualquier parte de Japón.
-Debo remediar esto, tengo que hacerlo. -insistió Noodle. -Tengo que derrotarlo.
Chiyoko suspiró
-Bien, pues espero que lo consigas, ya viste como dejó la villa, tiene que pagar por eso. -dijo Chiyoko con una sonrisa alentadora.
-Sí Chiyoko, prometo que lo atraparé. -le dijo Noodle.
Ambas ordenaron la casa y ayudaron a los demás en la villa a reponerla. Luego de haber terminado, Noodle fue a empacar para irse.
-¿A dónde irás? -preguntó Chiyoko.
-Iré a Osaka, es lo más cerca de la villa, seguro que Mazuu también fue ahí.
-Voy a conseguirte transporte para que puedas ir.
Noodle asintió y terminó de empacar sus pertenencias. Fueron a la carretera y esperaron a que algún auto parara. Finalmente paró un camión que se dirigía a Osaka. Noodle se despidió de Chiyoko y se subió a la parte de atrás del camión y arrancó hacia la ciudad.
Noodle observaba como la figura de Chiyoko se alejaba y se hacía cada vez más pequeña, se echó mirando al cielo. El mes de paz que disfrutó en aquella villa pesquera se había terminado, ahora tenía que volver a las andadas y vencer a Mazuu para poder volver con Chiyoko. Noodle pensaba esto mientras el camión se dirigía a Osaka y se perdía en la pista y anochecía.
Mazuu estaba en la punta de un rascacielos de Osaka, observando la ciudad de noche.
-¿Comenzamos?
Fin del Arco de Descanso.
