La rubia agradecía que sus dos amigas se encontraran ya esperándola en una de las bancas fuera de la preparatoria.

Llegó algo agitada; lo cual la arquera y la panista sólo mantenían una mirada extrañada esperando a lo que les diría su mayor.

Eli): Hoy..- Agitada.

Maki y Umi): ¿Hoy?.- Ambas levantaron una ceja algo impacientes.

Eli): Hoy le diré a Nozomi sobre mis sentimientos.- Soltó recuperando su postura y haciendo una pose segura de si misma con bastante seriedad.

Las menores se miraron sorprendidas entre ellas mismas y preocupadas.

Maki): ¿Cómo harás eso? ¿Ya le hablaste aunque sea?.-

Eli): Lo hice. Ella también quiere hacerlo, hay algo que quiere contarme.

Umi): P-pero Eli.¿Estás segura? ¿No crees que te estás precipitando?.- La arquera comenzó a tensarse.

No era extraño que las menores se preocuparan demasiado por la rubia. La apreciaban tanto que les dolía verla desanimada por esa chica.

Eli): Sé que suena muy apresurado, y que puede ser estúpido por que hace unos momentos dejó de actuar indiferente. Pero no quiero sólo quedarme con estos sentimientos reprimidos, sólo quiero que lo sepa y que me dejé estar a su lado e incluso si solamente puedo ser su amiga.- Habló con toda sinceridad y manteniendo una firmeza impecable sin siquiera titubear.

La pianista resopló y la arquera rascó su cabeza no muy convencida.

Pero era de esperarse de su querida líder. Siempre tomaba sus decisiones y nada la haría cambiar.

Umi): Está bien, Eli. No es como que necesites nuestra aprobación pero estamos aquí por si nos necesitas.- Se resignó dándole una sonrisa.

Maki): Lo mismo que Umi, sabes que cuentas con nosotras.-

La mayor sonrió confiada, no tenía idea de lo que pasaría pero estaba feliz.

Kt): Felicidades Nozomi-chan, estoy muy feliz de que tomaras esa decisión.-

Nico): ¿Le dirás todo?.-

La tarotista suspiró, su mente era un mar de emociones y se podría leer en su mirada los nervios.

Hace unos minutos que sus compañeras habían llegado.

Nz): Sólo quiero que ésto salga. No quiero ocultarlo más.-

Nico): Hazlo si así lo quieres, no pierdas tiempo.- Se recargó en una pared del pasillo.

Kt): No tengas miedo a nada. Después de todo no es tu culpa tu situación.- Le dió unas palmaditas animandola.

La mayor sostenía su bolso entre sus manos y ligeramente lo arrugaba por la tensión que sentía.

Se quedaron así unos minutos en silencio,

hasta que decidió dar el primer paso y avanzar.

Nz): Tengo que irme, estoy lista.- Dió la vuelta con total seguridad.

Las chicas miraron sonrientes a esa dirección pero como buenas acompañantes, siguieron los pasos de Nozomi con cautela.

Al menos querían verla de lejos, más que nada por si sucedía algo.

El trío soldier game hablaba cómodamente en aquella banca. La rusa esperaba pacientemente así que aprovechó para convivir con ellas.

Nz): Eli, estoy aquí.- La suave voz captó su atención, las tres voltearon a ver a la tarotista.

La rubia se acomodó, despidiendose de sus amigas para tomar camino a otra banca cerca de un árbol.

No muy lejos pero si lo suficiente para que ellas pudieran hablar sin temor a ser escuchadas.

Umi): No lo puedo creer.-

Maki): Al menos ya le dice "Eli".- Dijo recargando su espalda estando sentada.

Umi): Maki, no me digas pesimista,pero de verdad siento que algo va a pasar.- Confesó ansiosa.

Maki): ¿Eh?. Por favor Umi, entiendo que seamos densas y algo pesimistas pero no es momento para decir eso.- Le dedicó una mirada juzgandola.

La arquera le regresó la misma mirada.

Umi): Está bien, está bien.-

Miraban atentas como las chicas reían tranquilamente. Lo más probable es que hayan iniciado una conversación agradable.

Ver a la rubia sonreír tanto, les provocaba satisfacción pues no la habían visto hacerlo de esa manera.

Nico): ¿Ustedes también están haciendo guardia?.

La pelirroja fue la primera en voltear ante esa voz chillona.

Notaron que no estaba sola, una linda peligris le acompañaba con su encantadora sonrisa.

La arquera evitaba el contacto visual. Le era imposible no hacerlo.

Maki): De qué hablas?.- Contestó indiferente.

Nico): Dioses, acabamos de ensayar unas horas juntas y eres totalmente indiferente ahora.- Regañó molesta.

Maki): Sólo fue profesionalismo. No me pidas ser amable.- Contestó mirando en otra dirección.

Nico): Jumm. Da igual.-

La modista miraba la escena divertida.

Kt): Sonoda-san, ¿podrías acompañarme a llevar algo?.- La arquera impresionada por esa petición, comenzó a dudar.

Pero al ver los ojos de la modista, se puso de pie. Dándole una mirada de confirmación.

Dieron unos pasos entrando a la preparatoria.

Nico al sentir cierto abandono, que después se quejaría con la modista. Se dió cuenta del espacio que había en la banca.

Estar cerca de la menor era un dolor de cabeza, pero si tomaba asiento en otro lugar no podría observar a la mayor.

Nico): Voy a sentarme aquí y no necesito tu permiso.-

Maki): No me importa en realidad.- Suspiró moviendo unos mechones de su cabello.

Pasaron unos minutos bastante incómodos, la pelinegra trataba de mantenerse en silencio pero le era imposible.

Nico): Oye.. Nishikino.

Maki): Hum?

Nico): Nico piensa que tienes una bonita voz.- Sin pensarlo, le dijo mirando unos árboles de cerezo.

Maki): ¿A-a qué se debe eso?.-

Nico): N-no lo sé, no me preguntes idiota.- Sus mejillas se tornaron rojizas al darse cuenta de lo que había dicho.

La pianista estaba apunto de iniciar una discusión, ahora entendía a sus demás compañeras con ese tipo de "ambiente" entre ella y la mayor.

No entendía por qué, pero la presencia de la pelinegra le gustaba aunque sólo se la pasaran discutiendo.

La miró de reojo, la mirada de Nico se notaba tranquila y con un leve brillo de emoción por los arboles. Su sonrisa.

Maki se perdió en su sonrisa y sus ojos.

Maki): Bonita...- Susurró insconcientemente.

Nico): ¿Dijiste algo?.-

Maki): T-tu voz.. También es bonita.-

Nico): Oh..- Sorprendida sonrió.

La pianista cruzó los brazos, pensando unos momentos con un semblante serio.

Maki): A-ahora que vamos a convivir constantemente con los ensayos. P-puedes referirte a mí con mi nombre de pila.- Dudosa ocultó su sonrojo.

Nico): También puedes hacer lo mismo conmigo.- Contestó.

Maki): M-muy bien, Nico-chan..-

Nico): Perfecto Maki-chan.-

Ahora ambas sonrieron, de alguna manera sintieron un avance y crearon un leve vínculo de confianza.

\Mientras tanto ~\

Una brisa suave y un ambiente tenso por los nervios se acompañaban a las emociones fuertes y claras que se hacían presente en ese lugar.

Agregando un artardecer cálido y un silencioso.

Las mayores habían tomando asiento en esa banca alejada de las demás para comenzar su plática y resolver las dudas de ambas.

La tarotista miraba sus manos ligeramente temblorosas y la rubia trataba de tranquilizarse controlando su respiración.

Eli tomó una bocanda de aire para ser quien iniciara la conversación e ir al punto sin rodeos.

Eli): Nozomi..- Llamó tratando de captar su atención con una sonrisa.

La contraria inmediatamente levantó su mirada conectando con los orbes azules.

Sus ojos esmeralda brillaron, su emoción por estar junto aquella rubia le era demasiado.

Nz): ¿Si?.-

Eli): Lamento haber desaparecido. Sin darte una explicación en realidad.-

Entre cerró sus ojos, haciendo evidente el tenue cambio de ánimo y mordiéndose su labio inferior indecisa.

Nz): No, no me pidas perdón. La que debe explicarte soy yo.- Colocó una de sus manos encima de las de la rubia cuidadosamente.

Ese toque provocó una sensación de tranquilidad en la rusa.

Eli): Voy a escucharte.- Contestó claramente.

Nz): Tienes que saber que mi familia creció con ideas algo.. ¿Anticuadas?.. Algo que no se hace hoy en la actualidad.- Rascó su cabeza tratando de usar las palabras correctas.

Eli): Entiendo. ¿Qué hay con eso?.- Se acomodó tomando una postura firme y mirandola directamente.

Nz): Cuando estábamos en 3cero de secundaria mis padres me sorprendieron diciendo algo que tenía que hacer sin si quiera escuchar mi opinión y mi sentir.-

La rubia prestó atención y con curiosidad no apartaba la mirada, esperando lo que diría a continuación.

Nz): Me dijeron que debo casarme con un amigo de la infancia.Un pacto que hicieron nuestros padres para mantener arriba socialmente nuestra reputación y nombres. Es una obligación que debo cumplir terminando la universidad o antes si así lo quiero.- Apretó ligeramente la mano de Eli, detonando su agustia.

Por otra parte, cierta persona había sentido esa respuesta como un valde de agua fría. Acabando con todas sus posibilidades de tener algo o sus ánimos para confesarle sus sentimientos.

Sus bellos ojos azules tomaron un color oscuro y frunció sus cejas levemente, sintiéndose confundida, pero el dolor le nubló la mente. Sin pensarlo.

Eli): ¿Tu de verdad quieres casarte por decisión de tus padres?. O bien dicho ¿Quieres a ese tipo?.- Su tono de voz sonaba dolido.

La tarotista trató de manejar el asunto lo más tranquila posible, pero no esperaba esa reacción en la rubia.

Nz): De verdad que no quisiera hacerlo. Y cada que hablo con ellos sobre eso, simplemente no me escuchan.-

Eli): Nozomi...¿Tú lo quieres a él?.- Buscó su mirada para mantenerla en esa pregunta que retumbaba en su corazón fríamente.

No esperaba que Nozomi correspondiera sus sentimientos,se conformaba con la idea de ser su amiga. Pero ¿Casarse con alguien que no quiere? ¿Ver a su hermosa Nozomi del brazo de un tipo usando un vestido de novia?

Jamás se le pasó por la cabeza que algo le rompiera tanto el corazón.

Nz): Yo.. Yo realmente no lo quiero. Podría decirte que quiero a alguien más.- Aparto sus ojos con un sonrojo.

Eli movió sus cejas dudosa, ahora se moría por dentro.

Estuvo esperando 3 años para ver de nuevo a Nozomi y decirle su sentir. Se preparó mentalmente por bastante tiempo.

Si tenía que salir ahora. Lo haría.

Pero, ¿quién era "ese" alguien?.

Eli): Nozomi hay algo que quiero que sepas antes de que me digas algo.- Su respiración dejó de ser estable por unos instantes.

Agregando que su estómago se sentía extraño por los nervios y sus manos ligeramente temblorosas.

Nz): Dime Eli..-

Eli): Nozomi yo...-

Nz): ¿Si?.- Comenzó a preocuparse por la aura notoria de la rubia, dándose cuenta de los nervios.

Nz): Eli. ¿Estás bie..-

Eli): Lo siento Nozomi, estoy muy enamorada de ti.- Volteó haciendo contacto visual.

La tarotista quedó en silencio, abriendo sus ojos totalmente sorprendida sin apartar su mirada de la rusa.

Eli): Sé que no puedes corresponder mis sentimientos de la misma manera. Sólo quería que lo supieras desde hace bastante tiempo.- Recogió suavemente uno de sus mechones para hacerlo a un lado de su rostro, tratando de ocultar su rubor.

Un silencio tomó control de esos instantes, provocando que Eli mirara con atención a la mayor.

Eli): Aah, soy una tonta. Umi tenía razón, tal vez me apresuré demasiado para decirte lo que siento. No fue mi intención arruinar esto. Tal vez puedas olvidarlo y dejarlo pasar.-

Acto seguido, la rusa se puso de pie para retirarse totalmente desanimada,evitando el contacto visual con la tarotista.

Sintió un jalón en la manga de su saco, sorprendida volteó insconcientemente.

Encontrándose con la mayor haciendo eso.

Eli): ¿O-ocurre algo?.- Atragantó nerviosa. Pues nozomi tenía la vista en el suelo y su respiración estaba agitada casi no se podía notar pero Eli se había dado cuenta.

Nz): Tal vez yo..-

Eli): S-si?.-

Nz): Tal vez yo también esté muy enamorada de ti Elicchi. Lo estoy.- Segura de si misma levantó su mirada regalando una hermosa sonrisa acompañada de un sonrojo.

Eli): N-nozomi..- Abrió ligeramente su boca en shock y con sus ojos abiertos de la impresión.

La mayor se puso de pie, quedando a unos centímetros de la rubia.

Y sin esperar tanto, se acercó a ella dándole un pequeño beso en sus labios, colocando con cautela sus manos en los hombros de ésta.

Eli): ¡N-nozomi!.-Acabando el beso puso sus dedos en sus labios, su rostro se adornó con un rubor intenso.

Podía admitir que su interior estaba apunto de estallar por su emoción y felicidad. Sus ojos regresaron al azul brillante que tanto le encantaban a la tarotista.

Nz): Perdóname, me resistí años de no hacerlo.- Dijo juguetonamente.

La rusa era un mar de emociones no sabía si llorar o gritar de felicidad. No podía creer lo que había sucedido.

Estuvo bastante tiempo creyendo que recibiría una respuesta negativa. Jamás creyó que sucedería algo así.

Mk): ¿Acabas de ver lo mismo que yo?.- Una pelirroja miraba con asombro el inesperado momento de su líder.

Nico): Dios mío. Al fin sucedió.- Aún cruzada de brazos seguía mirando a ese par desde lejos con ojos abiertos.

La pelinegra sintió mucho felicidad de ver a su amiga con esa alegría. Nunca la había visto sonreír así.

Mk): Oye Nico-chan.-

Nico): Uhm?.- Volteó atenta.

Mk): Quería decirte algo.-

Curiosamente la mayor sintió una emoción extraña, esperando lo que diría la pianista.

Pues acababan de presenciar como sus amigas se habían confesado, era de esperarse que Nico no sintiera cierta tensión.

Nico): D-dime, Maki-chan.- Nerviosa mantuvo su postura a lado de la pelirroja.

Mk): Hay un chico saludando allá atrás, creo que te habla a ti.- Apuntó desinteresada hacía aquél lugar.

La mayor pestañeo, ahora se sentía molesta y ni si quiera sabía el por qué.

Soltó un suspiro y con el mismo desinterés miró a esa dirección.

Ahora sus ojos parecían platos de la impresión y se sintió asustada.

Nico): Oh no.-

Mk): ¿"Oh no"? ¿Quién es?.- Levantó una ceja mirando como el chico se acercaba a ellas.

Un joven de tez clara, cabello negro oscuro hacía atrás y sus ojos ligeramente rasgados de orbes azules.

Mk): ¿E-es tu novio?.- La pianista se sintió un poco fastidiada respecto al chico.

Nico): ¡Claro que no! Nadie es digno de la gran Nico.- Un aire de orgullo y superioridad le acompañó.

Ahora la menor suspiro aliviada cosa que le sorprendió. ¿Por qué le alivio saber que Nico no tenía novio?.

El chico ya estaba a unos metros de ellas, levantando la mano sonriente.

???): Hey, Yazawa-san. Buen día.- Saludó educadamente.

Nico): H-Hola Kenta-kun.- Haciendo una sonrisa nerviosa, rezaba por dentro que sus amigas se dieran cuenta de la presencia de éste.

Kenta): ¿Qué sucede? ¿Te sientes bien?.- Se agachó tocando la frente de la pelinegra extrañado.

Nico): E-estoy bien, gracias por preguntar heheh.- Rascó su cabeza de una manera ansiosa.

La pianista se limitaba a observar la escena, un presentimiento se hizo presente, haciéndola sentir extraña.

El chico se dió cuenta de la presencia de Maki, con curiosidad mantuvo su mirada fija en ella con una sonrisa. La pelirroja sintió la mirada e irónicamente levantó una ceja cuando se encontró con los ojos del jovén.

Kenta): ¿Tú eres...?.- Tanteó a preguntar con interés.

Mk): No es de tu inte..— Tan pronto fue callada por la más bajita. Tapándole la boca con un semblante nervioso mientras reía.

Nk): E-es una de las chicas que vinieron de la escuela vecina. Ya debes de saber del tema hahaha. ¿N-no?.— La pelinegra se esforzó por ganar tiempo con aquél chico para mantenerlo ocupado. Maki deshizo el agarre retiraron las manos de su sempai. Suspiró extrañada por su raro comportamiento.

Kenta): Cierto si me lo contó, de echo estoy buscando a Nozomi... Oh ¡Ahí está!.- Se despidió dando la vuelta alegremente y tomando esa dirección, dejando de lado a las dos chicas.

Nico se levantó tratando de hacerle señas a su amiga desde atrás. Pidiendo a todos los dioses que la tarotista le mirará de reojo al menos.

Mk): ¿Qué te pasa? ¿Ésto es malo?.- Cansada de mirar a la mayor hacer esas escenas, resopló internamente, parando las manos de Nico ella misma.

Nico): Maki-chan, ese chico es el prometido de Nozomi-chan.- Trató de susurrar, cosa que no le sirvió ya que escuchó como respuesta dos veces un "¿Qué?"

Mk): ¿Acabas de escucharlo Umi?.- Preguntó sorprendida al darse cuenta de su compañera.

Umi): Acabo de llegar y fue lo primero que escuché. ¡¿Cómo que Toujo-san tiene prometido?¡ !Dios mío¡... ¡¿Eli sabe?¡.- Se acercó bruscamente a la pianista.

Maki): No tengo idea, creo que ya confesaron sus sentimientos. Al parecer Toujo-san le correspondió, quiero creer.-

Umi): Pero ese tipo ya va en camino con ellas, ¿hacemos algo?.-

Maki): Lo más correcto es que nos quedemos aquí observando y si notamos algo extraño, vamos en seguida.- Dichas estas palabras, la arquera se relajó. Tomando asiento de un lado.

Nico): ¿En dónde está Kotori?.- Preguntó mirando a la peliazul, decidió no volver a mencionar sobre aquel chico en esa conversación junto a esas 2, no era buen momento para decirlo y mucho menos para explicar todo.

Umi): Se quedó en una de las aulas, me dijo que podía regresar sin problema. De echo me parece que intentó llamarte.- Respondió con tranquilidad.

La pelinegra sorprendida, sacó de su bolsillo su teléfono notando que tenía 10 llamadas de su amiga y un mensaje avisándole que había visto aquel chico merodear por la escuela.

Se golpeó la frente con cierto temor ya que fue su deber haber avisado con tiempo, pero su atención estaba en Maki sin darse cuenta; un sonrojo adornó su cara pero molesta a la vez.

Mientras tanto, las dos chicas mayores hablaban con cierta emoción.

Nozomi le explicó a la rubia el por qué se había alejado de ella sin ninguna explicación e intentó ignorar, lo cual se arrepintió demasiado al enterarse que la rubia se había ido del país por un tiempo.

Nz): Perdóname Eli, fuí una tonta inmadura. Tenía miedo de confesar mis sentimientos, creí que si lo ignoraba y te alejaba sería fácil para mí.- Su mirada reflejaba total arrepentimiento, tomando suavemente su mano con ternura.

Eli): Entiendo que fue tu manera de reaccionar y ambas estuvimos mal en ciertas cosas. Pero el tiempo ha pasado y ahora todo es diferente.- Sonrió alegremente.

La tarotista sintió una presencia de la nada. Giró su cabeza para encontrarse a la persona que menos imaginaba en ese momento. La rubia siguió la dirección en donde posaba la mirada de Nozomi.

Eli): ¿Conoces a ese chico?.-

Nz): Si...- Susurró con desánimo.

Sin tardarse tanto, el joven se acercó abrazándola con total felicidad.

La rusa no tardo en llegar a deducir que ese chico podría ser el prometido de su amada tarotista. Sobre todo por la confianza con la que se acercó y la abrazó. No era la primera vez que Eli sentía celos, le tocó algunas veces sentirlos por los admiradores que tenía Nozomi en sus épocas de secundaria.

Pero esta vez era diferente, ahora de quién sentía celos era del tal "prometido" de ésta.

Sin darse cuenta comenzó a apretar sus puños y un ceño ligeramente fruncido formaba parte de su reacción en su rostro.

Kenta): Estuve buscándote Nozomi-chan.— Se separó dándole un beso en su mejilla, sin dejar su característica sonrisa.

Nz): Oh.. Lo siento,estaba ocupada.— Con total desgano respondió. La rubia notó el poco desinterés con el cual le hablaba Nozomi.

Kenta): Le dije a tus padres que vendría por ti. Te llevaré a cenar. ¿Está bien?.— En lugar de sonar aquello como una invitación, sonaba más como un deber.

La tarotista no podía negarse. Ya que si lo hacía, el maravilloso chico le diría a sus padres y conociéndolos estarían como locos con llamadas preguntando sobre el rechazo de su invitación sumando a eso un sermón.

Nz): ¿Puedes esperarme en la entrada Kenta-kun? Debo dar un aviso a mis compañeras y en unos minutos estaré ahí.— Sonrió. Bueno, dió la sonrisa más forzada que pudo haber echo, pero a los ojos de Kenta era una sonrisa hermosa que ya estaba acostumbrado a ver desde siempre.

Kenta): Perfecto. Te espero en mi coche. Una disculpa por haber interrumpido.— Se despidió y pidió disculpas a las dos chicas por intervenir en su conversación, saliendo por la entrada de Otonizaka.

Eli): ¿Es él, cierto?.— La rubia se había mantenido callada y con el tono más suave hizo la pregunta.

Nz): Sí.— Susurró con una mirada triste.

Pasaron unos segundos en silencio, ninguna de las dos quería decir algo al respecto ni si quiera sabían cómo manejar aquél tema, considerando la situación en donde estaban era difícil saber que harían.

Eli): Nozomi. Yo quiero estar contigo, no me importa las consecuencias de eso.— Y ahí estaba la rubia fuerte y segura que tanto le fascinaba a la tarotista.

Nz): Ahora que sé como te sientes. Te confieso que yo también quiero estar contigo, estoy tan cansada de reprimir lo que siento.— Con el sentir más doloroso posible tocó su rostro con cierta desesperación.

Unas suaves manos la detuvieron, colocándose en el rostro de la pelimorada con cariño.

Dejó de lado sus pensamientos abrumadores para concentrarse en la mirada de la rubia.

Eli): Podemos manejarlo a nuestra manera, luchemos por estar juntas Nozomi.— Esas eran las únicas palabras que necesitaba para sentirse fuerte y enfrentar lo que fuera posible.

Nz): Gracias.. Elicchi.— Sonrió tiernamente.

Eli): Ahora ve, ese idiota te está esperando.— Se quejó con evidentes celos.

Nozomi se limitó a reír por esa reacción, se acercó a la rubia para darle uno de los tantos besos que deseaba desde hace tiempo. Tomando por sorpresa a la contraria, pero que gustosa correspondió.

Apenas terminó ese beso, volteó a la dirección de su amiga pelinegra. Levantó un pulgar en señal de que todo estaba bien.

Nz): Te veo mañana Elicchi.— La hermosa sonrisa que le regaló a la rusa antes de irse jamás se compararía con las que le daba a Kenta.

Y eso es algo que le hacía sentir orgullosa de ello, devolvió la sonrisa al ver que la mayor desapareció por la entrada.

Las tres chicas que se encontraban en la banca esperaban todo tipo de reaccionar negativa en Eli, lo cual quedaron impresionadas al ver como la rubia daba la vuelta y caminaba hacia a ellas con una sonrisa victoriosa.

Maki): ¿De qué está sonriendo? Acaba de conocer al prometido de su crush.¿Eso es motivo de felicidad?.— Y ahí estaba Maki con sus comentarios llenos de sarcasmo.

La arquera los ignoró por su evidente costumbre, pero la pelinegra soltó un suspiro.

Umi): ¿Y bien? ¿Qué sucedió?.— Preguntó apenas Eli terminó de acercarse a ellas.

Se cruzó de brazos satisfecha. Tomó una bocanada de aire y de preparó para decir.

Eli): Decidimos luchar por lo que sentimos. De verdad queremos estar juntas.— Todas esperaban cualquier palabra pero no imaginaban que Eli sonreía mientras pequeñas lágrimas caían de sus ojos.

Sus compañeras reflejaron el sentir de su mayor, pues sonrieron entre ellas mismas sintiendo la emoción a flor de piel.

La pelinegra sorprendida sonrió de la misma manera, no evitó unirse al par lleno de felicidad.

Rin): ¡Eli-chaaaaaaaan!.— Una voz energética se acercó con energía.

La pelinaranja abrazó a su líder, sin si quiera darse cuenta Rin y Tsubasa estaban detrás de ellas. Así que no era sorprendente que la hayan escuchado.

Tsu): Me alegro de que todo haya salido bien.— La pelicastaña dejó caer su mano en el hombro de la rusa, dedicando una sonrisa sincera.

La pianista y la arquera se pusieron de pie y de la misma manera siguieron la sonrisa de Tsubasa.

— Estamos felices por ti Eli.— Al unísono la rubia sintió un gran apoyo de parte de su grupo, por más que se contenía sus lágrimas no podía. Así que no estaba mal salir de vez en cuando de su dura y fría armadura.

Nico miraba sonriente tal escena. Definitivamente había cambiado su manera de ver sobre aquellas chicas.

No se imaginaba cuánto le había costado a Nozomi y a Eli llegar hasta aquí, pero no dudaría en ayudarlas.

~Flash-Back~

— No puedes hacerlo Nozomi.—

— P-pero ¡papá!.—

— ¿¡Quieres ser la decepción de la familia!? Cumple con tu obligación, sólo se te pide eso.—

— ¡No te importa como me siento al respecto!.—

— No quiero escuchar otra palabra tuya. Ve a tu habitación.—

— ... —

Haru~

Hola! Hay una persona aquí que me recomendó cambiar la escritura guión por reglas de fanfic.

Así que los próximos capítulos van a estar escritos de diferente manera y de una forma más fluida. Agradezco a la persona que me lo comentó.()

Sin nada más, gracias!