Capítulo 1: "Retorno del Entrenador Legendario – Parte 1"
Ciudad Carmín
Ya han pasado 2 horas desde la llegada del azabache a la Ciudad Carmín.
Este se sorprendió al no ver ni al Prof. Oak, ni ningún conocido, pesa a que avisó previamente al Prof. Oak, confundido, decidió hacer un tour por la ciudad costera. No había estado en Kanto desde hace mucho tiempo, desde que volvió de la región Kalos, hace 4 años, por lo que, realmente deseaba volver a ver los lugares increíbles que había visto ya hace mucho tiempo.
El joven entrenador había cambiado mucho en este tiempo, con sus ahora 18 años de edad.
Su altura, la cual durante mucho tiempo le preocupó bastante, especialmente, cuando se reencontraba con Gary Oak y este último ya le sacaba una cabeza de altura. Realmente, se alivió muchísimo cuando su altura superó los 1.70 metros, y ahora, con casi 1.80 de altura, puede mirarse con orgullo frente al espejo.
Lo siguiente, fue su apariencia, cambió su antigua gorra a una roja, que asemeja una pokeball. Además, viste una chaqueta roja que hace juego con su gorra, una camisa negra debajo de esta. Su conjunto de jeans y zapatillas deportivas no ha cambiado mucho, pero se notaban cuidadas, pese a su uso.
Sin embargo, lo más remarcable sería, sin duda, su expresión.
La mirada infantil e ingenua, que alguna vez tuvo en su pasado, se había ido. Ahora, su mirada muestra una mirada tranquila, pero segura, sus ojos solo muestran una determinación única, prueba que solo demostró cuantas grandes catástrofes superó en su vida.
A veces, algunas jóvenes se le quedaban viendo fijamente, con un ligero sonrojo cuando sus miradas se encontraban con las de este, sin embargo, el joven solo fijaba su mirada en tiendas cercanas o su pokemon… en fin, algunas cosas simplemente no cambian con facilidad.
- Les envié la carta una semana antes… aun así, terminé de esta manera - (murmuró Ash mientras compraba 2 helados, para él y su compañero)
- Pika pikapi - (comentó Pikachu, mientras lamía el helado)
- Si, si… ya sé que deben estar ocupados, no me molesta, de verdad - (respondió el entrenador, caminado con el pokemon en el hombro y comiendo un helado) – Pero, realmente quería volver a encontrarme con mis conocidos, después de todo, tengo un poco de tiempo libre, hasta que sea tiempo de cumplir la misión -
- Pikaa… - (respondió el pokemon mientras una gota le caía por la nuca, luego miró a un grupo de personas, reunidas alrededor de una televisión de gran tamaño en la vitrina de un edificio) - ¿Pika? -
- ¿Hm?, ¿Qué es eso? - (se preguntó el azabache acercándose al grupo de personas)
-/La TV/-
La TV mostraba la grabación de una batalla pokemon entre 2 entrenadores, los pokemon de estos luchaban frenéticamente para derrotar a su rival. Uno de los entrenadores usó un ingenioso movimiento, logrando derrotar el pokemon del otro, dejándole solamente un pokemon.
El azabache reconoció a uno de los entrenadores de inmediatos.
- ¡El entrenador Ritchie ha elegido a su último pokemon!, ¡Su Raichu, Sparky! - (gritó el comentarista con emoción) – Estos 2 ya han mostrado un gran desempeño en sus anteriores combates, pero su contrincante aún conserva 2 de sus pokemon, ¿Será suficiente para ganar el combate? -
- Vaya, pero si es Ritchie - (comentó el sorprendido azabache con una sonrisa, mientras entrecerraba los ojos) - Ha crecido, parece haberse hecho más fuerte… aunque, su guarda ropa sigue fuera de moda -
- Pika… - (dijo el pokemon apoyando a su entrenador)
- Oye, espera un minuto, que yo si he cambiado mi guarda ropa – (comentó el joven un poco malhumorado con su pokemon)
- Pika pi pika? –
- Para tu información, las gorras si son ropa… -
- ¡Wow!, ante todo en contra, Ritchie, ha logrado acabar con el pokemon de su contrincante, ¡Ahora solo quedan uno para cada lado! - (dijo el comentarista, haciendo gritar al público de la televisión)
- ¿Huh? - (dijo Ash volviendo su vista al televisor) – Diablos, me lo perdí... -
El último pokemon que ocupó el contrincante de Ritchie, fue un gran Tyranitar, que hacía ver al pokemon de Ritchie como una hormiga. Tyranitar, haciendo uso de su gran tamaño, atacó al Raichu de Ritchie, lanzándolo violentamente, contra la pared que rodeaba el estadio, ante la expectante mirada del público
Inesperadamente, el pokemon logró recuperarse del golpe, gracias a los llamados de su entrenador. Luego usó el ataque Trueno contra el suelo, lanzando los escombros sobre el contrincante, quien no logró esquivarlos a tiempo debido a la poca movilidad que le otorgaba su cuerpo, para luego ser golpeado en la cabeza, por el ataque Cola de Hierro de Sparky, derrotándolo
- ¡Damas y Señores!, ¡La batalle ha finalizado!, ¡El entrenador Ritchie ha derrotado a su oponente y se ha hecho con uno de los cupos para el Torneo Seven Heaven! - (dijo el comentarista, al mismo tiempo que varios gritos llenaban la arena)
Lo que se mostró en la TV después de eso fueron varias imágenes de otros combates, así como las fotos de los representantes de la región Kanto y, posteriormente, varias escenas de entrenadores de otras regiones.
- Eehhh~, pero vaya… el torneo será más entretenido de lo que pensaba - (comentó el azabache alejándose del lugar, con una sonrisa en el rostro)
No muy lejos de ahí, las 3 ex-compañeras del joven descansaban en un parque, mirando como los jóvenes entrenadores corrían felices junto a sus pokemon. Había una mirada nostálgica en la expresión de las 3 chicas.
- Es muy raro que podamos juntarnos así tan seguido, ¿no? – (comentó una chica pelirroja, mirando al par de chicas de cabello azul y castaño, que le miraban con una sonrisa) - ¿Cuánto ha pasado de la última vez, un año quizás? -
- ¡Si, tienes razón!, he tenido muy poco tiempo, con lo apretada de mi agenda este último tiempo… si no fuera por el torneo, ni siquiera podría tener este descanso ocasional – (comentó la chica peli azul, a lo que la castaña asintió repetidamente)
- ¡Te entiendo perfectamente!, yo tampoco he tenido tiempo, al principió creí que luego de ganar el Gran Festival las cosas serían más tranquilas, pero luego descubrí que era todo lo contrario – (comentó la castaña suspirando pesadamente)
- Pero ustedes pueden viajar y conocer gente nueva en sus concursos, además, han salido varias veces en la TV… yo en cambio debo quedarme todo el año en el gimnasio, a veces es agotador, ¿saben? – (comentó la pelirroja de forma divertida)
- ¿Lo dice la protagonista de la película "Mermaid"?, ¿Todavía tienes la cara para decirnos eso? – (respondió la peli azul, sonriendo burlonamente hacia la pelirroja)
- ¡Si, te has hecho muy popular en mi región!, ¡Todos mis conocidos quieren conocerte, Misty! – (agregó una igualmente burlona castaña)
- ¡Dios!, ¡Ya les dije que no hablaran de eso, saben que me avergüenza!, ¡Lo digo en serio, May, Dawn! – (comentó la avergonzada chica)
Las chicas se rieron de la pelirroja durante un buen tiempo, antes de seguir con sus compras. Las tres llevaban atuendos distintos a los usuales, principalmente para evitar destacar demasiado entre la multitud.
En el tiempo que pasaron lejos de cierto azabache, han cambiado muchísimo, dejando de lado sus rasgos infantiles y volviéndose bellas y atractivas jóvenes, que harían que los hombres giraran su vista inconscientemente.
Después de pasar un tiempo adecuado, las chicas se detuvieron en una tienda de helados. Las jóvenes comenzaron a hablar durante un tiempo, al principio hablaron temas triviales, sin embargo, el rumbo de la conversación rápidamente si dirigió hacia cierto desaparecido entrenador.
- …Así que ustedes tampoco han sabido nada de Ash - (murmuró Misty, acomodándose en el asiento de la tienda)
- Le he preguntado a mis conocidos, pero ninguno tiene alguna pista sobre el tampoco - (susurró la castaña mientras suspiraba)
- Ash ha participado en varios torneos, no es globalmente conocido, pero tampoco es como si nadie lo reconociese… es raro que nadie tenga alguna pista de su paradero - (comentó la peli azul mirando el cielo)
- Si, la primera vez que me lo contaron, no pensé que desaparecería tanto tiempo… - (dijo Misty mientras se llevaba el postre a la boca) - Ash nunca ha estado quieto en un lugar por mucho tiempo, pero nunca ha dejado de llamar a su casa o preguntar por sus pokemon -
- Sí, lo sé - (susurró la peli azul) – me pregunto… ¿Dónde estará ahora? –
Las tres jóvenes se miraron las unas a las otras, y soltaron un suspiro.
Originalmente, ninguna de ellas estuvo realmente preocupadas por ello, después de todo, en estos tiempos es muy común para los entrenadores embarcarse en viajes de forma constante. Ash Ketchum, se podría decir, que era el entrador viajero promedio, saldría de viaje tan pronto obtenga su primer pokemon, viajaría por las regiones, capturaría más pokemon, lucharía con algún gimnasio, ganaría experiencia y maduraría a través de su viaje.
Sí, es tal como lo haría cualquier entrenador.
También como la sociedad es hoy, los padres, quienes también fueron entrenadores en su tiempo, dejarían que los niños corran libres, pese a saber que pueden ser viajes duros y peligrosos, después de todo, saben que eso los ayudará a crecer. La época donde los padres tachaban esto de locura, se olvidó varias generaciones atrás.
Sin embargo, era importante que los jóvenes se comunicaran continuamente con sus padres. No solo para darles tranquilidad a estos, sino que también poder contar con un registro de sus pasos. Muchos jóvenes hoy en día, pueden caer presa de malvadas organizaciones si no tienen cuidado, esto es una constante preocupación para las autoridades, por lo tanto, tener un registro es importante, este por lo general viene incluido dentro de la pokedex, la cual contiene el registro del entrenador.
Cuando Ash desapareció, su registro se cortó misteriosamente, desde ese día.
A los pocos días llegó un aviso a su madre, su tutora legal, sin embargo, no solo no pidió una investigación, sino que incluso consintió esto. Para sus conocidos esto fue bastante extraño, especialmente para Misty, quien solía visitar a la señora Ketchum y el Prof. Oak, cada vez que tenía tiempo libre.
Al principio, la madre de Ash, les dijo que este se fue a entrenar. Conociendo al chico, todos lo aceptaron tranquilamente. Sin embargo, tras cumplir varios meses sin noticias, comenzaron a preocuparse, tras 1 año, buscaron sacarle alguna información a la madre del joven, pero no tuvieron mucho avance.
Tras cumplir 2 años, los conocidos del joven azabache decidieron investigar por su cuenta, pero no encontraron ninguna información de importancia. Ya después de otro año, el Torneo Seven Heaven salió a la luz, ese día, la madre de este dijo:
"Quizá Ash participe"
Con esto, todos los conocidos quedaron expectantes a esto, sin embargo, hasta la fecha no hubo noticas reales.
- ¡Chicas! - (gritó alguien a espaldas de las chicas)
- ¡Brock! - (gritaron las jóvenes acercándose al moreno, que traía una bolsa colgando)
- ¿Cómo han estado chicas? - (preguntó el moreno observando cada detalle de las 2 coordinadoras) – mmm… han crecido, bastante bien - (agregó el moreno cargando su voz en la palabra bastante)
- Brock, déjame recordarte que la oficial Jenny ya te puso cargos por acoso y por perturbar el orden en ese pueblo al sur de Hoenn - (le advirtieron las jóvenes, mientras miraban al moreno de forma asesina) – Si intentas algo, no dudaremos en castrarte -
- Lo mismo digo, Brock - (dijo un adolecente con mirada molesta detrás del moreno)
- ¿¡Max!? - (gritó la castaña mirando como el nombrado sonreía) - ¿¡Qué diablos haces aquí!? -
- ¿Qué más?, intentar proteger a mi hermana de idiotas peli verdes, que solo la buscan para jugar con ella - (respondió el menor con una pose heroica, haciendo que a los presentes se les cayera una gota por la nuca)
- Brock, supe que lograste obtener uno de los cupos de Kanto, ¿Pero no te traerá problemas? - (dijo la peli azul mirando al moreno) – Recuerda que ahora eres un doctor pokemon, ¿No estarás ocupado con todo esto? -
- No te preocupes, me dieron vacaciones en lo que dura el torneo, luego tendré que reponerlo - (respondió el moreno) – pero, May y tú no lo han hecho nada mal, ambas lograron obtener un cupo, son bastante difíciles de conseguir, incluso para los líderes de gimnasio -
- Es cierto, yo tuve suerte de que mis contrincantes no fueran la gran cosa, pero he oído que, en otros casos, incluso había miembros de la Unión en la competencia - (murmuró Misty mientras suspiraba) – esos sujetos son muy difíciles de vencer, especialmente esos que son conocidos -
- Yo casi conseguí un cupo en el torneo, pero me tocó pelear ese tipo absurdo - (comentó Max cabizbajo)
- ¿Absurdo? – (preguntó la peli azul, mirando con duda al chico)
- Tobias, ya sabes, el idiota destroza torneos… - (comentó la castaña, consolando ligeramente a su hermano)
- Ugh, ese sujeto otra vez… - (murmuró Dawn con una mala cara, recordando la dura batalla que tuvo el azabache con el hombre en el campeonato de Sinnoh)
- ¿Creen que Ash haya entrado en el torneo? - (preguntó el moreno mirando a las chicas)
- Eso espero… ya que fue por él que entré en este estúpido torneo - (respondió Misty susurrando lo último)
- Más le vale… si no se aparece por el torneo, juró que lo mataré - (dijo Dawn susurrando lo último)
- Ash, ama los retos, de seguro ya tiene uno de los cupos… de lo contrario, la próxima vez que lo vea, le daré su maldita gorra al primer Salamence que vea - (comentó May susurrando lo último)
- E-Esperemos que él haya conseguido el cupo - (dijo un nervioso moreno, notando las oscuras intenciones de las jóvenes)
- ¿Huh?, ¿Realmente importa si Ash consiguió un cupo? – (preguntó Max, mirando confundido al moreno)
- Se ve que aun te queda mucho por crecer, Max… no lo digas en voz alta, claro, si quieres mantener esos lentes intactos – (respondió el ex líder, mirando nerviosamente a las jóvenes)
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Meseta Añil, Kanto
Dentro de la Meseta Añil, se podían apreciar a 6 personas las cuales estaban sentadas alrededor de una mesa mientras hablaban animadamente sobre los proyectos y planes del torneo
- Bien, con esto hemos terminado - (dijo un hombre pelirrojo, ordenando unos documentos y guardándolos) – Ahora debemos prepararnos para el torneo, no sería una broma si perdemos en primera ronda, especialmente, siendo los organizadores del torneo -
- Tienes razón - (comentó una mujer rubia, mientras casualmente cruzaba sus largas piernas y suspiraba) – No hay que menospreciar a los entrenadores que participaran, si lo hacemos, nos espera una terrible derrota -
- Cierto - (apoyó un peli plateado, levantándose para poder estirarse) - Los entrenadores han aumentado mucho su nivel, y para colmo, estos 100 entrenadores elegidos, bien tienen el potencial de reemplazarnos -
- ¿Ho?, que pasa chico Stone, ¿acaso tienes miedo? - (preguntó un hombre mayor, con apariencia descuidada, burlándose del peli plateado, quien se enfadó por lo dicho) – No sé cómo serán las cosas en Hoenn, pero puedo asegurar que estos novatos aún están muy lejos de mi nivel -
- No deberías burlarte, recuerda a quien, casi apalearon esos novatos- (dijo un hombre de aspecto vistoso, mientras elegantemente giraba su mano, indicando a una chica de morena, la más joven del grupo) – Y mejor recuerda, el trono le pertenece a otra persona, ya nadie quiere perseguir tus viejos huesos -
- Steven y Wallace tienen razón, entre los entrenadores que han sido elegidos, claramente alguno puede ocupar nuestros puestos un día de estos- (comentó Lance, para luego girarse a ver a una glamorosa rubia) – Cynthia, ¿pudiste encontrar a ese mocoso problemático? -
- ¿Paul? - (preguntó la rubia, con una mirada divertida) – Si, al parecer estará en el torneo, pero creo que se entrenará en secreto, ese chico es tan frio como siempre -
- Ya veo - (respondió el pelirrojo mientras suspiraba y se agarra el puente de la nariz) – Ese mocoso, no puedo creer que ya es un profesional, pero aun así se comporta como un mocoso engreído -
- Vamos, ¿Sigues molesto porque te llamó abuelo? - (preguntó una hermosa mujer con una risa, incrédula por la actitud del campeón) – Pensé que lo superarías, especialmente, después que rechazó unirse a Unión, creí que ustedes finalmente se entendieron el uno al otro –
- Bueno Diantha, tampoco puede evitarlo, son pocos los que lo han puesto contra las cuerdas – (comentó un sonriente Wallace, mientras miraba al pelirrojo) - Ese día casi creí que el titulo cambiaría de manos, ¿sabes? –
- Se ha vuelto fuerte, especialmente, tras perder contra Cynthia y Mirto – (comentó Steven con una sonrisa) – Me pregunto cuando vendrá a enfrentarme -
- ¡Ja, Ja, Ja!, ese mocoso se parece a Trip, ¡Ambos mocosos son unos idiotas engreídos! - (exclamó Mirto riéndose a carcajadas, mientas ocultaba una ira asesina, haciendo que todos no pudieran evitar suspirar ante esto)
- ¿Sigue molesto porque Paul le dijo que Cintia jamás se interesaría en él? - (preguntó Wallace a Lance lo más bajo posible)
- Pues, Paul además lo llamó fósil y otro tipo de insultos, además, lo hiso en televisión en vivo… esas cosas no se perdonan fácilmente – (respondió Lance de la misma manera que el otro campeón)
- Por cierto, ¿Cómo van los preparativos para la sucesión?, ¿Estarán listos el día del torneo? - (preguntó la campeona mirando con bastante interés a la chica quien apenas había hablado en la reunión)
- L-La próxima semana se hará la ceremonia, no se volverá a aplazar – (comentó la chica morena, respondiendo nerviosamente a la rubia)
- Cierto, yo también me pregunto eso, asegúrense de completarlo antes, será incómodo para Iris si aún no lo completan - (comentó Máximo)
- No quería que se convirtiera en un problema, pero el procedimiento fue lento, ¿Ya ves? - (respondió el mayor de lo presentes, mientras se giraba a la chica morena a su lado) – Y tú Iris, relájate, ninguna de estas personas te comerá ni nada, bueno el pelirrojo de allá, quizás -
- ¿Disculpa? - (preguntó Lance mientras una vena se alzaba en su frente) – Grandes palabras, viniendo de alguien que encarga a sus sucesores a otras personas y esperan que los entrenen… -
- Por favor, no escuche las palabras de este viejo decrepito, maestro Lance, conozco perfectamente, quien es al que le gusta molestar jovencitas enfermeras y que, por culpa de eso, le pusieron una demanda tan grande que casi deja en números rojos a nuestro Alto Mando - (respondió Iris con una sonrisa, mientras Mirto parecía querer vomitar sangre)
- I-Iris, dijimos que lo mantendríamos en secreto de los otros, p-piensa en mi posición – (susurró el campeón mientras miraba nerviosamente a su alrededor)
- …Iris, me alegra mucho tu llegada al poder, Unova está en buenas manos - (murmuró Máximo, sintiendo lastima por su compañera)
- Sentimos lo mismo - (declararon el resto de campeones de otras regiones, mirando a la chica de Unova con una mirada comprensiva)
- Ustedes… - (murmuró un resentido Mirto)
- … Bueno, creo que es mejor que terminemos esta reunión - (comentó Diantha, tratando de cambiar la conversación)
- Sí, es lo mejor - (murmuró Lance mientras se levantaba, junto al resto de los campeones) - ¡De ahora en adelante seremos rivales!, ¡Más les vale que no pierdan antes de que yo los derrote! -
- ¡Eso lo veremos! - (Contestaron los demás campeones con una sonrisa en el rostro)
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Ciudad Carmín
De regreso a Ciudad Carmín, el azabache que caminaba tranquilamente por las calles de la ciudad, decidió caminar hacia la playa luego de terminar de ver la zona turística.
Se sorprendió un poco al notar el ambiente festivo que tenían las personas en torno al torneo. Por todas partes de la ciudad se hablaba de eso, a veces escuchaba hablar emocionados debates en torno a los participantes, a veces podía escuchar las alabanzas de los admiradores, y otras veces, lograba escuchar a los vendedores, quienes vendían mercancía de los participantes. Por supuesto, los participantes de Kanto eran los favoritos.
Todo era muy animado.
- Siendo franco, no me esperaba este nivel de emoción – (murmuró el azabache, mirando a su compañero)
- Pika… - (respondió el pokemon, imitando a su entrenador)
Ambos continuaron su caminata sin notar que alguien le observaba de lejos, a través de unos binoculares. Una figura misteriosa salió de la oscuridad, mientras se movía entre la multitud, siguiendo cuidadosamente al joven.
- Te encontré, mi querido Red - (susurró la persona misteriosa)
CONTINUARA…
