Capítulo 29: "El equipo más fuerte, Crimson Wings – parte 5"
_Hace 2 años y 7 meses_
Ash miró con una expresión sombría, la situación que se desarrollaba frente a él.
Estaban rodeados.
No fueron miembros del Team Rocket los que los rodearon, sino guardianes, lo que encontraron en la base, donde supuestamente estaba Arachne, fue una emboscada de los guardianes. El azabache solo se dio cuenta cuando entraron, sin embargo, podía desde su posición podía sentir diversas señales, que solo producen naturalmente, los usuarios de aura.
Y no eran pocas, eran muchas.
Pasaron de decenas a cientos, mientras el chico buscaba desesperadamente una forma de salir de aquel lugar.
Blue y los otros estaban confundidos, cuando el azabache les ordenó ocultarse dentro de la base. El joven liberó a Lucario, y le pidió buscar una salida dentro de la base, sin embargo, al final, descubrieron que la base tenía todas sus salidas bloqueadas o destruidas.
El azabache volvió con todos, luego de comprobar la situación.
Todo el mundo lo miraba confundido y algo asustados, entre ellos, Blue era quién tenía la peor expresión de todos, tal vez, ella ya había entendido cual era la situación actual.
Ash tenía dificultades para hablarles, sin embargo, no pudo acobardarse e ignorar la situación.
- Fuimos rodeados por guardianes aurales – (comentó el azabache, haciendo que todo el mundo, salvo Blue y Silver, colocara miradas confusas)
- ¿Guardianes aurales?, ¿Qué es eso? – (preguntó Gold, a lo que el azabache negó con su cabeza, mientras colocaba una expresión sombría)
- Son usuarios del aura, un poder oculto para la mayoría de las personas… son algo así como los guardianes del mundo, se mueven entre las sombras asegurándose que el mundo mantenga su balance natural – (respondió el azabache, notando como todo el mundo tenía una expresión más confundida que antes)
- ¿U-Usuarios del aura? – (preguntó Yellow confundida)
- ¿Estás bromeando? – (preguntó Crystal, mirando escéptica al azabache)
- ¿No estás jugando con nosotros, Red? – (preguntó Gold, mirando con la ceja alzada al joven)
- En mi caso… he oído un poco de ellos, los guardianes, pero por lo general, las personas no tienes una gran opinión de ellos, la mayoría creen que son un timo – (murmuró Silver, haciendo que todo el mundo lo mire)
- Silver, quienes te hayan dicho eso, puedes descartar volver a tomarlos en serio, esos tipos, simplemente no saben nada de lo que ocurre realmente en la oscuridad – (comentó Blue, concentrando las miradas en ella ahora, especialmente la del pelirrojo, el cual estaba sorprendido) - Los guardianes aurales… son malas noticias, muy malas… las peores, de hecho… ahora entiendo, por qué Red ha estado tan preocupado hasta ahora –
- U-Um… ¿Son peligrosos? – (preguntó una confundida Yellow, haciendo que Blue y Ash fruncieran el ceño)
- Son peligrosos, en la oscuridad, nadie desea hacerse enemigos de ellos, especialmente la organización que los junta y los controla, la Torre de los Milagros… todos ellos son monstruos, capaces de hacer cosas que los humanos jamás podrían hacer… entre los nuestros, se les conoce como los verdugos de capas azules – (respondió Blue, haciendo que todos se tensaras gravemente)
- ¿V-Verdugos? – (preguntó Crystal, algo asustada)
- E-Espera, ¿Por qué tipos tan peligrosos vienen tras nosotros?, ¿Son amigos del Team Rocket? – (preguntó un alterado Gold, haciendo que Blue se tensara notablemente)
Blue perdió el habla durante un momento, mientras la mirada de todo el mundo se centró en ella.
- E-Eso es… - (murmuró Blue, dándole una fugaz mirada a Ash, cosa que este aceptó silenciosamente)
- …Es mi culpa, los guardianes me buscan a mí – (respondió Ash, haciendo que todos voltearan a verlo)
Todos los jóvenes, salvo Blue, miró fijamente al azabache, mirándolo confusos y algo preocupados.
El joven se enfrentó a todas miradas de frente, sin ocultarse.
- La Torre de los Milagros me busca, ya que provoqué su ira al desobedecer su pensamiento – (comentó el joven, al mismo tiempo que levantaba su mano y creaba una esfera azulada de aura en su palma, y se las enseñaba a todo el mundo) – Como verán, yo también soy un usuario de aura… hace 7 meses, yo y la Torre de los Milagros entramos en conflicto, y aunque no podemos llamarnos enemigos como tal, ambos simplemente somos irreconciliables… si ellos vinieron hoy, es por mi culpa, solo mía –
- ¿B-Buscan a Red? – (preguntó una confundida y preocupada Yellow)
- ¿P-Pero por qué?, ¿Qué has hecho? – (preguntó Crystal, mirando igualmente preocupada a Ash)
- …No entraré en detalle, es lo mejor para ustedes – (respondió el azabache, haciendo que todos fruncieran el ceño)
- Debes estar bromeando… ¿Y quieres que nos conformemos con eso?, ¡Al menos explícanos eso! – (gritó un molesto Gold, haciendo que el azabache negara con la cabeza)
- No me malentiendan… esos tipos son rencorosos, es mejor para ustedes estar lo menos relacionado con ellos, especialmente, con cosas relacionadas a mí – (comentó Ash, mirando seriamente al peli negro)
El ambiente se enfrió cuando el azabache habló.
Todos tenían miradas confusas y preocupadas, por lo que Blue se adelantó y le preguntó al azabache que harían.
- …Yo los enfrentaré, ustedes deben esconderse dentro de este lugar… no deben salir bajo ninguna circunstancia, no importa lo que suceda –
Un pesado silencio siguió luego de las palabras del joven.
Nadie esperaba esas palabras, no, probablemente todos sabían que esas palabras saldrían de la boca del chico. Después de todo, durante todo este tiempo junto, jamás vieron al joven acobardarse y darle la espalda a las batallas.
Pero esta vez es distinto, todo el mundo lo sabía.
Algo, algo muy dentro de ellos, sabían que esta vez, las cosas no saldrían tan bien como antes.
Blue se acercó e intentó detener al joven, pero tras mirar los ojos decididos al azabache, ella no pudo decir ni una palabra. Ni ella, ni nadie más.
Ash, comprendiendo lo que estaban pensando, les dio una cálida sonrisa a todos ellos, como si eso bastara para dejarlos tranquilos.
- Descuiden, definitivamente saldré de esto – (comentó el azabache, sacando una capa roja de su mochila, pasándosela a Blue) – No es lo más óptimo, pero Lucario encontró un pequeño escondite al fondo del subterráneo… usen esta capa para cubrirse, entorpecerá la mirada de los guardianes… solo salgan 24 horas después de que me vaya… no importa lo que escuchen o sientan -
Con eso el chico se dio media vuelta, y se retiró hasta la entrada del complejo.
Gold y Yellow intentaron seguir al azabache, pero Blue los detuvo. Cuando miraron a la chica, para que los dejara seguir al chico, no pudieron decir una palabra, mientras miraban a la chica colocar una expresión, como si esta estuviera a punto de llorar.
Nadie siguió al Ketchum, después de eso.
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..
…
- No debiste mentirles – (murmuró Lucario, a lo que el azabache soltó una risa seca)
- Bueno, aunque no planeo morir ni nada, ¿sabes? – (respondió el azabache)
- Si hubiésemos escapado de inmediato, cuando recién sentimos su presencia, habríamos tenido mejores oportunidades – (dijo el pokemon de aura, cuestionando a su entrenador)
- Pero los chicos no – (contestó el chico, sonriéndole de vuelta al pokemon) – En fin, no será la primera vez que pasamos por un inferno por estos tipos, en general… ¿No es solo un poco más dura de lo normal? –
- Aunque yo no diría solo un poco… – (murmuró un cansado Lucario, haciendo que el azabache sonriera forzosamente)
Ambos, humano y pokemon se acercaron a la salida, lugar donde aguardaban los otros 5 pokemon del azabache, al verlos, el chico suspiró y dejó que sus ojos se volvieran rojos, dejando las bromas de lado.
- ¿Cómo es? – (preguntó el azabache, mirando a Charizard)
- Hay 100 como mínimo, también diría que todos son de categoría de élite, realmente se han preparado esta vez – (comentó el pokemon de fuego, haciendo que el azabache sonriera forzadamente)
- ¿En qué diablos piensa la Torre de los Milagros?, ¿Realmente fueron y sacaron de sus casas a más de 100 guardianes de alto cargo, solo para perseguir a un mocoso que ni siquiera acabó su entrenamiento como guardián?… Hombre, estos tipos sí que tienen tiempo libre – (murmuró el azabache, mirando con dolor de cabeza, hacia el frente)
- Realmente deben estar molestos – (comentó Sceptile, haciendo que el joven se ría secamente)
- Ja… eso no lo dudes – (murmuró el chico)
- Entonces… ¿Qué haremos? – (preguntó Pikachu, saltando a la cabeza de su entrenador)
- Los chicos se acaban de esconder… pero no dudo que estos tipos los busquen para amenazarnos – (respondió Ash, acariciando la cabeza de la rata eléctrica, con una cara complicada) – Me temo… que tendremos que hacer de carnada -
- …Nos matarán, ¿lo sabes no? – (comentó un molesto Pikachu, golpeando con su cola a su entrenador)
- Lo siento – (murmuró el Ketchum)
- Sin embargo, creo que será complicado siquiera eso… ¿Tienes algún plan para romper el cerco? – (preguntó Charizard, viendo como el joven se tensaba notablemente) – Sin plan, ¿no? –
- Tengo un par, pero todos comienzan cargando hacía el frente – (respondió el azabache con una sonrisa forzada, antes de sacar algunas cosas de su mochila, y sonreír un poco más confiado) – Aunque me traje los artículos de broma, que robamos con Ryota para usarlos contra Steel, de seguro podemos darle un uso ahora –
- ¿Realmente los usarás? – (preguntó un perplejo Pikachu)
- Vamos chicos, que todo el mundo levante su espíritu – (comentó el azabache con una sonrisa, antes de ver como varías figuras comenzaban a salir del bosque que rodeaba la base, siendo notados claramente por el azabache, el cual colocó una sería mirada) – Tal parece que ya no queda tiempo, primero debemos romper el cerco, no podemos ser descuidados, debemos forzarlos a agruparse y seguirnos… me temo que deberemos estar durante un tiempo contra las cuerdas, para hacerles creer que nos tienen –
- No acostumbro a ser flanqueado y quedarme pasivo – (murmuró Charizard, haciendo que el azabache mostrara una sonrisa salvaje)
- ¿Pasivo?, ¿Quién dijo que lo hiciéramos?, No hay razón para perdonarlos si muestran fallas que podamos usar, además… sería un gran desperdicio, si no aprovechamos un campo de batalla tan bueno, para practicar esas técnicas que Gold usó – (comentó el azabache, creando 6 hebras de luz azul, las cuales se conectaron con todos sus pokemon) – Charizard, serás el primero, haremos ese "movimiento" que practicamos –
- ¿Ese movimiento?, ¡Ja!, ¿Seguro que no quieres vencerlos ya? – (preguntó Pikachu, bajando de la cabeza del entrenador y colocándose a su lado)
- Claro, por qué no – (comentó el azabache, intercambiando miradas con todos sus pokemon y finalmente, Charizard) - ¿Listo? –
- Como nunca – (gruño el pokemon de fuego)
Para cuando el azabache volvió su mirada, vio decenas de hombres correr con varias decenas de pokemon junto a ellos, sus compañeros.
Charizard, se alzó en el cielo girando sobre sí mismo, al mismo tiempo que se envolvía en llamas feroces, las cuales crecieron en tamaño, asemejando un enorme dragón de fuego.
La carga de los guardianes se detuvo, ante la vista del irreal ser, envuelto en llamas escarlatas.
- ¡GIRO DRAGON! –
Y con el grito del azabache, inició el combate.
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…
- Es aquí –
Blue murmuró débilmente, mientras habría la extraña compuerta abovedada, oculta tras una pared marcada con un poco distinguido emblema rojo.
La chica suspiró, mientras miraba hacia atrás ligeramente.
Yellow y Cristal estaban nerviosas, a un paso del pánico. Ambas estaban en ese estado, desde que vieron en silencio al azabache marcharse, Blue comprendía completamente su pensamiento. Gold y Silver, en cambio, tenían una expresión llena de impotencia, parecían saber la poca ayuda que podrían darle a Red, eso solo los presionaba.
Pero ninguno de ellos podía hacer nada.
Ella sabía lo que había afuera, decenas de monstruos del mismo tipo que Mask of Ice, seres que solo poseen la apariencia de humanos, pero cuyas habilidades alcanzan o superan a los mismos pokemon.
Era una brecha, que la tecnología actual apenas alcanza.
- Vamos, entremos –
El corazón de la castaña se retorcía mientras se obligaba a entrar con sus compañeros. Los cuales tenían expresiones tan tensas como Blue.
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…
Una hora había pasado desde el inicio de la batalla.
El azabache estaba lleno de heridas al igual que sus pokemon, mientras que solo habían avanzado 500m desde la base.
El joven iba montado en su Charizard, que había tomado una apariencia de Mega evolución Y. Mientras que Vee y Pikachu estaban agarrándose fuertemente a los hombros del chico. Los otros 3 pokemon corrían alrededor de este, atacando a cualquiera que se acercarse.
El azabache miró detrás de su hombro, viendo lo lejos que estaba la base cuando su pokemon le advirtió.
- "¡Ash!" -
Charizard rugió, al mismo tiempo que Ash saltaba.
El pokemon de fuego se rodeó de llamas y expulsó una enorme Llamarada. Pikachu y Vee también saltaron, situándose a un lado del pokemon de fuego, expulsando un enorme torrente eléctrico y lanzando una enorme Bola Sombra, respectivamente.
- "¡Pikachu, Vee!" – (gritó el chico, al mismo tiempo que aterrizaba contra el suelo)
Tan pronto como el joven terminó de hablar, una serie de estacas hechas de roca, aparecieron chocando contra el ataque de los pokemon del joven. Las estacas pétreas se extendieron a un costado de él, formando un camino de estacas, que empezó desde los costados del joven, para luego arrasar con la mayor parte del bosque, perdiéndose en la distancia.
Pikachu y Vee aterrizaron en los brazos del joven, al mismo tiempo que se reagrupaba con sus pokemon.
Frente a él, 4 figuras se presentaron.
- Pero vamos, si es el famoso Red… ¿Cuánto tiempo ha pasado desde que nos vimos, mocoso? - (preguntó uno de los hombres, mientras comenzaba caminar alrededor del joven, quien no cambió su mirada seria en ningún momento)
- No tanto como quisiera, líderes de sección - (contestó el azabache, viendo a los 4 guardianes frente a él)
El líder de la sección de Ejecución, Evan Meyer, un viejo calvo con una cara de pocos amigos.
El líder de la sección de Ley, Kiel Raymond, un hombre pasado de los 30' de cabello castaño y barba algo descuidada.
La líder de la sección de Investigación, Melissa Aerial, una mujer en sus 20', con un distintivo cabello verde celeste, con una mirada curiosa e infantil.
El vice líder de la sección de Combate, Emerald, un niño de 13 años aparentemente, de cabello rubio y una extraña gema verde, parecida a la esmeralda en la frente. El famoso niño genio, alumno y protegido del líder de la Torre de los Milagros.
Los 4 plantaron cara al azabache.
– Mira que venir todos juntos, ¿Tanto me extrañaron?, ¿O perdieron el trabajo tras lo de hace 7 meses? – (preguntó el azabache, mirando cínicamente a los presentes, mientras una gota de sudor bajaba por su frente)
- Mocoso… ¿Tienes idea, de todo el caos que has causado, en estos pocos meses?, ¿Cómo crees que ha reaccionado el mundo común y corriente a tus payasadas? - (preguntó el hombre castaño, mirando seriamente al Ketchum, avanzando al azabache con un Gallade a su lado) – El otro lado está notando nuestra presencia, estás colocando en serios problemas a los guardianes… esto no será tolerado, mocoso, tenlo por seguro -
- Ya, ya, Kiel… tampoco es para tanto, además la culpa de eso es de otro, que no dejaba de mandar subordinados sin una célula de cerebros - (murmuró la chica, conocida como Melissa, mirando críticamente al hombre calvo, le devolvía la mirada con el ceño fruncido) – Además, ha sido un divertido juego, hasta ahora, nadie había logrado escaparse de nuestras garras… pero él consiguió huir por casi 8 meses, eso es algo bastante increíble –
- No es un juego, Melissa – (respondió el castaño, pero fue ignorado)
- Además, tengo mucho interés en lo especial que es - (agregó la chica, para luego cambiar su mirada, por una desquiciada, que logró incomodar al azabache) – Una cantidad anormal de aura interior, capaz de hacer Link con múltiples compañeros, talento en muchas áreas… si no fuese por el líder, me gustaría hacerlo mi mascota -
- Estás enferma - (murmuró Ash, molestando un poco a la peli verde, que ya no poseía rastro alguno de su anterior sonrisa) - ¿Y bien vinieron a jugar o a decir chistes estúpidos?… si es así, me gustaría que volvieran otro día -
- Es una lástima, pero tenemos órdenes… Ash Ketchum – (murmuró Emerald, haciendo que el azabache se tensara y su vínculo con sus pokemon tambalease) – Por órdenes directas del 78° líder de los guardianes y actual amo de la Torre de los Milagros, Elmer von Hessen… debes ser llevado bajo arresto, por la violación de múltiples normas y códigos de la Torre -
- Interesante, porque no recuerdo seguir esas normas de las que hablas, en primer lugar – (comentó el azabache, dejando salir su aura y estabilizando su conexión con sus pokemon, y en su espalda un símbolo de sol dorado comenzaba a aparecer)
El joven y los guardianes se miraron durante unos instantes.
Y luego empezaron la batalla.
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Las sacudidas y ruidos por explosiones aumentaron, sacudiendo a los 5 jóvenes dentro del refugio.
Blue estaba fuera de la capa dada al azabache, junto a Silver y Gold, manteniéndose junto a la puerta mientras esperaban tensos, el paso del tiempo. Yellow y Crystal, en cambio, estaban bajo el manto del joven, abrazándose a sí mismas, mientras temblaban cada vez que la tierra se sacudía.
Todo el mundo había perdido el sentido del tiempo, ahí, la hora se había transformado en decenas de horas, mientras que la preocupación por el chico fuera de la base, aumentaba sin parar. Siendo francos, ya podría considerarse una tortura para ellos, quienes hacinaban por salir a toda prisa y ayudar a su compañero y amigo.
Una sacudida especialmente fuerte, hizo que Yellow perdiera el equilibrio y se derrumbara de rodillas.
La pequeña abrió los ojos de golpe, y como si una fuerza desconocida la llamase, se dirigió tambaleante a la salida.
- ¡Yellow! –
El gritó de Blue, despertó a la pequeña rubia, la cual se estremeció y miró a la castaña con grandes lágrimas en los ojos, como si esta se resistiera a llorar.
Blue se mordió los labios al notar lo que la chica quería.
- No puedes ir –
El silencio llegó una vez más al refugio, mientras las sacudidas de la tierra, eran lo único que daba ruido a la habitación.
Yellow miró hacia el suelo durante un momento, antes de apretar sus puños y volver a ver a la castaña con ojos decididos.
- Debo ir – (murmuró Yellow)
- ¿Y qué puedes hacer?, Tú no sabes lo que son esos tipos… ¡Son monstruos con apariencia humana! – (gritó una furiosa Blue, sorprendiéndose a sí misma, gritándole por primera vez a la rubia)
- ¡Y eso qué importa! – (gritó Yellow, mirando fijamente a la castaña, sin dejarse intimidar por esta) - ¡Red nos necesita! –
- ¡Somos un estorbo para Red!, ¡Él pudo escapar si tan solo no estuviéramos!, ¡Somos nosotros quienes lo obligaron a pelear! – (gritó Blue, soltando todo lo que ella sentía desde el fondo de su ser)
- ¡Es por eso que debemos pelear!, ¡Si escapamos, Red podrá escapar! – (gritó Yellow, mirando desesperadamente a ambas chicas)
- ¡Ya basta las dos!, ¡¿Qué creen que hacen en este momento?! – (gritó Crystal, interponiéndose entre ambas chicas, las cuales estaba tan cerca la una de la otra, que parecía comenzar a pelear de no haber sido detenidas)
Blue y Yellow se miraron consternadas.
Ambas estaban muy alteradas, tanto que ambas ni notaron que ambas estaban llorando mientras discutían. Crystal miró a ambas chicas, con una mirada dolida, y luego abrazó a ambas chicas, las cuales se aferraron fuertemente a la peli celeste.
Silver y Gold se miraron, y negaron fuertemente con su cabeza.
Las chicas se abrazaron durante un tiempo, hasta que Crystal se separó y miró a la castaña firmemente.
- Debemos salir, Blue – (comentó Crystal, haciendo que la castaña se sorprendiera) – No me mires así, estoy pensando seriamente en esto… y creo que Yellow tiene razón, Red está peleando en ese momento y las sacudidas son peores que nunca… sí creo que es lo que está pasando, es que una batalla importante ha ocurrido… entonces, este es el momento, para que nosotros huyamos –
- Los guardianes ven el aura de los seres vivos, escapar de ellos es una broma, no puedes evitar eso – (comentó Blue, haciendo que todos la miraran sorprendidos, sin embargo, Crystal señaló el abrigo que llevaba)
- No si usamos esto – (respondió la peli celeste)
Ambas chicas se miraron en silencio por unos segundos, antes de que Gold interrumpiera a ambas.
- Incluso si nos vamos, alguien debe quedarse y avisarle a Red, de otra manera no servirá de nada, incluso si huimos – (comentó el peli negro, haciendo que todos lo miraran sorprendidos)
- Pensar el día que Gold usaría para usar su cerebro… - (comentó Blue, haciendo que el chico tuviera una marcada vena en su frente, sobresaliendo, para luego volver a mirar a Crystal la cual ahora estaba llena de dudas)
Blue miró a la chica severamente, antes de suspirar y apretar sus puños.
- …Yo me quedaré – (murmuró Blue, haciendo que todos se voltearan a ver a la chica)
- ¡Espera Blue, en ese caso yo puedo quedarme! – (gritó Silver, haciendo que la castaña le negara con la cabeza)
- No es así, Silver… tú todavía eras muy pequeño cuando escapamos de Ice of Mask, pero ese tipo nos enseñó técnicas derivadas de los guardianes… yo fui considerara un fracaso, pero aprendí a ocultar mi aura, eso es lo que me ha permitido escapar de ese lunático por años – (comentó Blue, colocando su palma en la cabeza del chico pelirrojo) – Ustedes debe huir, vuelvan a nuestro campamento y luego diríjanse a la Ciudad Olivine, yo y Red nos reuniremos con ustedes cuanto antes –
- Blue… - (susurró un frustrado Silver, al mismo tiempo que Crystal colocaba su mano en el joven, sobresaltándolo)
- Vamos a creer en ellos, Silver – (comentó la chica, haciendo que el pelirrojo asintiera)
- Blue… yo – (murmuró una asustada Yellow, la cual fue abrazada fuertemente por la castaña la cual comenzó a acariciarle la cabeza)
- Lo siento, Yellow… tenía miedo… gracias, por estar aquí – (susurró Blue, al oído de la pequeña rubia, la cual sonrió felizmente) – Vayamos los 3, Red, tú y yo a comprar ropa, luego de esto… hagamos que ese idiota cargue nuestras bolsas, en castigo por preocuparnos -
- ¡Sí! – (respondió una feliz Yellow, haciendo que todo el mundo sonriera)
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…
Blue soltó todo su aire y comenzó a operar aura, para ocultar su presencia.
La castaña dio unos pasos fuera de la base, y quedó pasmada luego de presenciar lo que estaba fuera.
La escena de un desastre natural, llegó a su visión cuando se encontró de frente con todo un terreno hecho pedazos y con marcas parecidas a explosiones en todo el terreno.
Blue, salió de su estupor y llamó rápidamente a los otros miembros.
Los otros presentaron expresiones parecidas a la de la castaña, sin embargo, la chica los hizo centrarse y concentrarse en su tarea.
Los jóvenes identificaron la zona de batalla del azabache, a casi 500 metros de ellos. Grandes llamas y rayos, chocaban con distintos poderes, en un vórtice de destrucción que se veía tras los rastros de árboles.
Blue le hizo una seña a los jóvenes y estos, tras un gesto, comenzaron su escape silencioso.
Blue misma, miró hacia la batalla, con la frente y la espalda sudando de nerviosismo.
Tomó una bocanada de aire, y avanzó al campo de batalla.
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- ¡Oh!, creo que se me pasó la mano - (murmuró la chica peliverde, buscando al azabache con la vista) – oye~, ¿Por qué no sales?… ¿O quizás ya lo maté? - (agregó la chica, más para ella, que para alguien en especial)
Grandes raíces de varios metros rodeaban la zona que antes era un bosque común y corriente. La tierra se hizo pedazos, y las raíces y las estacas de piedra sobresalían en el terreno y en medio de estas, un enorme circulo dejaba ver un enorme claro creado artificialmente, por alguna especie de explosivo poder.
El choque de los poderes entre los líderes de los departamentos de la Torre de los Milagros y el azabache, acabó en la derrota de este, pero ahora, no podían encontrar al joven en la zona tan accidentada.
- ¡Melissa!, ¡¿Qué te hemos dicho, de utilizar tus poderes tan descuidadamente?! - (gritó un molesto Kiel, acercándose a la peliverde, que solo hizo un puchero) – ¡No me jodas con eso!, ¡Tus bombas, son aire ultra comprimido, no solo eres capaz de joderte a cualquier ciudad, sino que ni siquiera nosotros, podemos salir ilesos de eso! –
- No es mi culpa~, es culpa de Celesteela – (gimió la chica, mirando al enorme pokemon de apariencia aerodinámica, detrás de ella)
- ¿…No es este pokemon, de la zona especial?, ¿Cómo lo conseguiste tú?, ¿Sabes que está prohibido sacarlos de su recinto? – (preguntó Kiel, mirando sospechosamente la peli verde)
- Soy la líder del departamento de investigación… no pueden negarme un favor incluso si lo desean – (comentó felizmente la chica, mientras el hombre castaño se tomaba la cabeza, frustrado)
- ¿Ya terminaron? - (preguntó un niño rubio, conocido con el nombre de Emerald, el cual miró hacia el lugar donde el joven fue lanzado, junto con la mitad del bosque)
- ¡Bah!, ¡Melisa!, ¡¿Tienes idea cuantos problemas crean tus ataques?!- (gritó un viejo calvo, mirando furioso a la peliverde) – ¡Ahora tendremos que decir, que un huracán o algo arrasó con todo esto!, ¡Idiota cabeza hueca! -
- ¡Vamos!, no fue tanto, ahora solo tenemos que buscar lo que quedé de él, y todo se acabará - (murmuró una molesta chica)
La chica malhumorada dio un paso adelante, para evitar más preguntas de sus compañeros guardianes, cuando chocó con su pie, una extraña esfera dorada del tamaño de una canica.
- ¿Qué es esto? – (preguntó la chica, tomando la bola, y mirándola fijamente, cosa que alertó a todos los presentes cuando vieron eso en la mano de la chica)
- ¡Suelta eso ahora! – (gritaron los 3, sorprendiendo a la peliverde)
Pero era tarde.
Una luz destellante, tan brillante como el sol mismo deslumbró a todos los presentes. Todos estaban ciegos, incluso los pokemon, mientras que la peli verde, rodaba por el suelo gritando, mientras sentía sus ojos cegarse casi totalmente.
Lentamente, una figura salió arrastrándose de entre los escombros.
- Diablos, esa maldita loca… que monstruoso poder destructivo tiene ese pokemon, ¿Dónde diablos, lo sacó?… Bueno, se lo tiene merecido - (susurro el joven, al mismo tiempo que una especie de aura verde lo rodeaba, curando lentamente sus heridas más graves, cerrando sus ojos, mientras que su respiración se tranquilizaba, y abría nuevamente sus ojos, los cuales tenían un resplandeciente color rojizo) – Ahora, es mi turno para-
El joven cortó su discurso, al sentir un enorme dolor en el pecho, obligándolo a escupir un gran escupo lleno de sangre, cayendo de rodillas en el proceso.
Su condición era peor de lo que esperaba.
- Debemos salir de aquí – (murmuró el joven, mirando hacia sus pokemon, de los cuales, solo Charizard, Pikachu, Sceptile y Lucario podían continuar, Greninja y Vee aún no se acostumbraban a la presión ejercida por el Link, por lo que el joven tuvo que devolverlos a su pokeball, tras el ataque)
El azabache miró hacia el cielo, el cual se estaba repleto de espesas nubes grises, anunciando una futura lluvia.
"Al menos dame un buen día, ¿Quieres?"
El chico sonrió un poco ante su pensamiento estúpido, y luego se puso en camino.
Lentamente, el joven se alejó de los guardianes.
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..
…
Lejos de la batalla, Crystal y los otros, caminaban con cuidado a través de las arboledas.
Todos caminaban apretados bajo la capa, todos estaban tensos e incluso el mismo Gold estaba demasiado pendiente a sus alrededores, para poder aprovecharse de alguna de sus compañeras.
El grupo siguió a paso firme, hasta que finalmente vieron la salida del bosque, y el comienzo del camino de la ruta.
Los jóvenes sonrieron de forma aliviada.
- Veo que finalmente decidieron salir –
Una voz compuesta y elegante, rompió completamente el ambiente, paralizando a los jóvenes en su lugar.
Cruzada de piernas, estaba una atractiva mujer peli azul, con traje de secretaria y con lentes. La mujer miraba con una expresión sin emociones a los jóvenes, frunciendo ligeramente el ceño, por un instante.
- Cuarto… extraño, los vigías dijeron que eran cinco, en fin, él puede hacerse cargo del otro – (murmuró la mujer, levantándose del tronco en el que estaba sentada y caminando con paso lento a los chicos) – No creí en los informes, pero realmente ese mocoso estaba viajando con normales, de todas las cosas -
- ¡A-Alto!/¡¿Quién eres?! – (gritaron Gold y Silver, adelantándose y protegiendo a las dos chicas detrás de ellos)
- Me temo que no tienen la autoridad para saberlo – (respondió la mujer, deteniéndose a una distancia prudente de los jóvenes) – Pero pueden considerarme un enemigo –
Una enorme presión salió disparada de la mujer, haciendo que todos los jóvenes palidecieran y tragaran dificultosamente.
- ¡Explotaro! –
- ¡Feraligatr! –
Los dos jóvenes gritaron, mientras llamaban a sus pokemon al frente de ellos.
- Crystal, Yellow… retírense, Gold y yo ganaremos tiempo – (murmuró Silver, haciendo que ambas chicas lo miren horrorizadas)
- ¡De ninguna manera! – (gritaron ambas chicas, a lo que Gold de dedicó una forzada sonrisa, llena de sudor, el cual corría abundantemente por su cara)
- Crystal, yo opino lo mismo… haremos todo lo necesario, pero ustedes deben correr, ahora – (comentó Gold, volviendo la mirada hacia el frente, donde lo esperaba aquella terrorífica mujer)
- Me niego, ¿Cómo esperas que los deje atrás para huir? – (murmuró decidida Crystal)
- Igualmente, estoy harta de ser tratada como una damisela en peligro… tanto por Red, como todos, yo también puedo combatir – (agregó Yellow, mirando fijamente hacia el frente)
- ¡U-Ustedes! – (susurró un frustrado Gold, antes de soltar un suspiro cansado) – Hagan lo que quieran –
Los jóvenes se miraron entre ellos y se decidieron, mientras se preparaban para el combate de sus vidas. Ellos miraron con decisión hacia el frente y vieron… nada.
No había nadie ahí.
- Ese chico realmente no los educó en lo absoluto – (murmuró la mujer detrás de Crystal y Yellow) – Frente a un oponente más fuerte, jamás debes quitarle los ojos de encima… sino pasa esto -
Al terminar su frase, la mujer golpeó con sus palmas a ambas chicas.
Las chicas cayeron al suelo inconscientes, mientras la mujer se arreglaba a sí misma, como si lo que pasó, no le tomara mucho esfuerzo.
Gold y Silver, perdieron el habla mientras miraban perplejos a la mujer.
- K-Kris… ¡Maldita! – (gritó un furioso Gold, olvidando a su pokemon y lanzándose a la mujer, la cual solo resopló)
- ¡Idiota, no vayas de frente! – (gritó Silver, empujando a un lado a Gold, recibiendo en cambio un potente golpe en la sien, lo que lo tiró directamente al suelo derrotado)
- ¡S-Silver! – (gritó Gold, mirando al pelirrojo que yacía inconsciente, luego de recibir una patada de la mujer)
La mujer miró ligeramente hacia el pelinegro, antes de retroceder unos pasos, evitando así la Cuchillada, lanzada por el furiosos Feraligatr, luego de ver caer a su entrenador frente a sus ojos. La mujer, evitando por escasos centímetros el ataque, cargó sus manos de aura, y golpeó hábilmente el mentón y plexo solar del pokemon, haciéndolo tambalear adolorido, pese a ser golpeado solo por una humana.
Pero el ataque no se detuvo ahí, en menos de 3 segundos, la mujer lanzó al menos una decena de otros golpes, antes de tomar el brazo del pokemon y luego lanzarlo al suelo, con una técnica de judo.
Gold miró estupefacto, al pokemon estrellarse contra el suelo y luego no volver a levantarse, a un lado de su entrenador.
Su pokemon gruñó, interponiéndose entre la mujer y el chico, el cual seguía aturdido a la mujer.
- ¿Qué demonios eres?, ¿Cómo…? – (preguntó el chico, levantándose torpemente para colocarse junto a su pokemon)
- La actual operación se llevó a cabo previendo 3 posibles escenarios… en el primero… el chico hace de carnada, huye para llamar nuestra atención, ustedes se quedan… el segundo, el chico huye, los abandona a su suerte… tercero, el chico hace de carnada, ustedes huyen – (murmuró la mujer, dando un paso adelante) – Tomando en cuenta el carácter de ese chico, el primer y tercer escenario fueron los más probables… por lo tanto, es natural apuntar a ustedes… si se toma en cuenta su personalidad, después de todo, son su punto débil… -
Al terminar de hablar, la mujer desapareció de la vista del joven peli negro y el pokemon de fuego. Moviéndose a una velocidad vertiginosa que no podía ser seguida por el ojo, Gold sintió una presencia en su espalda.
Y eso fue lo último que reconoció el chico.
La mujer miró al inconsciente chico y pokemon.
Y luego volvió a abrir la boca.
- No te sientas mal, perder conmigo es solo natural… soy líder de la sección Combate de la Torre de los Milagros, Selina Gatekeeper, mano derecha del Amo de la Torre de los Milagros -
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…
Blue, caminaba lentamente hacia la zona de batalla, caminaba teniendo cuidado en dónde y cuándo pisar, sabiendo lo anormales que pueden ser los guardianes, tenía que mantener su mente fría y calmada, aún en medio de ese caos, de otra manera sería encontrada.
El camino inicial era tranquilo y sin mucho problema, pero a partir del tramo medio, el camino de árboles se llenó de gigantescos picos de roca, y enormes enredaderas cubrían la zona, como si fuesen murallas. Blue tuvo que arrastrase para poder pasar entre los troncos.
Siguió caminando, hasta que, en un instante, se encontró con una anormal zona a campo abierto, como si las raíces no hubiesen afectado este espacio, una luz anormal iluminaban el lugar, haciéndolo parecer de alguna forma… misterioso.
Blue se tensó, sabiendo que tenía que salir inmediatamente de ese lugar.
- Ya veo, así que eras tú quién se movía entre la barrera, un gusto conocerte finalmente… Ice Hunter –
Blue perdió el habla, cuando una voz la llamó casualmente a un lado de ella.
Miró lentamente hacia el lugar, encontrando ahí un hombre bebiendo té, en una lujosa mesa, con una brillante vajilla de plata.
El hombre vestía un uniforme ordenado, mientras miraba meticulosamente a la castaña. El pelo negro caía como una cascada en su espalda, siendo incluso más largo que el de ella.
Era innecesariamente atractivo, tal y como una pintura.
Era distinto del atractivo del azabache, el cual poseía un tipo de encanto más juvenil y más masculino, el encanto de este hombre, es un tipo de encanto que superaba incluso al de modelos de moda.
Pero, había algo en esa belleza que Blue encontraba aterrador, tanto como la del demonio que la atormentó en su niñez y la perseguía hasta el día de hoy.
- Vamos~, no me mires así, no muerdo sabes – (comentó el hombre, mirando divertido lo tensa que estaba la castaña) – Ven vamos a tomar un té, quiero saber de la legendaria chica que logró burlar a Mask of Ice –
Chasquido.
El hombre chasqueó sus dedos casualmente.
La visión de Blue cambió, teniendo al hombre ahora frente a ella.
Y ella sentada con un té en sus manos.
Blue perdió el habla al encontrarse en esa situación.
- Aunque claro, tengo más interés en tu relación con Ash Ketchum… oh, perdón, se hace llamar Red ahora – (comentó divertido el hombre, el cual parecía disfrutar de la mirada confusa y asustada de la castaña) – Oh, pero mira mis modales… he fallado al no presentarme primero –
El hombre se levantó casualmente, e hizo una inclinación como si se tratase de un caballero noble.
- Mi nombre es Elmer von Hessen, Líder de la Torre de los Milagros y líder de los guardianes, un gusto – (comentó el hombre, sonriendo zorrunamente, viendo como Blue perdía el color de su rostro)
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…
El azabache se encontraba caminando con la ayuda de su Lucario, mientras Charizard y Scepitle abrían el paso para el cansado Ash.
Pikachu estaba acostado en la cabeza del azabache, pero se veía notablemente agotado, no, no solo era él, todos los pokemon estaban igualmente agotado.
La hora peleando contra las decenas de oleadas de guardianes, así como el enfrentamiento final contra los 4 guardianes de alto nivel, terminó por consumir su energía hasta el fondo.
De un momento a otro, Sceptile colapsó.
- ¡Sceptile! – (gritó un asustado Ash, tropezando para llegar rápidamente con su pokemon)
- L-Lo siento… ya no puedo seguir… lo siento Ash – (comentó el pokemon de planta, mirando exhausto a su entrenador, que sacudió su cabeza)
- Es mi culpa todo esto… descansa amigo, saldremos de esto – (respondió el azabache, metiendo dentro de su pokeball al pokemon, para luego mirar dificultosamente a los demás) – Chicos, si no pueden seguir, adelante díganlo… no intenten forzarse a ustedes mismos –
- …Eso dices, pero apenas puedes caminar de píe – (comentó Charizard, gruñendo por lo bajo y luego seguir retirando las ramas para su entrenador) - ¿Cómo esperas escapar sin mi ayuda?, Soy el único quién puede sacarte de este lugar, luego de que salgamos de esta barrera –
- Opino lo mismo, apenas te mantienes en pie, necesitas una ayuda – (comentó Lucario, cargando al chico desde el hombro)
- También me necesitas… tu gorra se perderá si no me tienes acá – (murmuró Pikachu, causando que el chico se molestara un poco, y quisiera sacar a la rata de su cabeza)
- …Gracias, chicos – (comentó Ash, siguiendo su camino con la ayuda de sus pokemon)
El chico siguió su camino, hasta que finalmente llegaron a un claro anormalmente espacioso y brillante.
Una aterradora cantidad de aura llenaba cada espacio del lugar.
Ash miró sombríamente hacia el origen de esta anormalidad. El hombre parado casualmente, frente a una fina mesa de té.
Elmer von Hessen.
- Bienvenido, último de los Eidant, ha pasado mucho desde nuestra última reunión – (comentó el hombre, mirando sonriente al azabache)
- …Para mi es la primera vez que nos vemos, en cambio – (comentó el chico, antes de que el hombre sacudiera la cabeza)
- Vamos, vamos… ¿No me digas que no recuerdas quién te obsequió al pokemon que te ayuda a levantarte en este momento? – (preguntó el hombre, mirando divertido como Ash y Lucario se tensaban) – En fin, no vengo a presionarte o algo parecido… por el contrario, he venido a darte una mano en estos tiempos de necesidad -
- ¿Una mano?, Lo siento, recibí demasiada de tu ayuda ahí atrás, con tus subordinados – (respondió el azabache, intercambiando secretas miradas con sus pokemon)
- ¿Eso?… Oh, vaya, que desafortunado… lamento, el mal trato que mis subordinados pudieron darte, ¿Qué te parece si olvidamos eso y me acompañas en un té? – (preguntó el hombre, mirando sonriente al joven, pero con sus ojos claramente burlándose de él)
- Prefiero el café, así que debo rechazarlo – (contestó el chico, intentando utilizar nuevamente su aura, pero recibiendo un fuerte dolor en la cabeza en cambio, que el azabache contuvo, para no gritar de dolor)
- Te aconsejo que no hagas nada loco, estás herido y ya casi ni te queda aura interna… Incluso si tu capacidad es anormal, ten en mente las duras batallas que has tenido hasta ahora – (comentó Elmer, tomando una taza de té y bebiéndola tranquilamente, antes de sonreír burlonamente del chico) – Sin contar, que también podrías lastimar a una inocente invitada –
Con un chasquido del hombre, el espacio detrás del hombre comenzó a distorsionarse, apareciendo esta vez el mismo espacio anterior, excepto por una única diferencia.
Blue estaba sentada inconsciente en la silla, al otro lado de la mesa.
Thump, Thump…
El corazón del azabache dio un vuelco, cuando el joven vio a la castaña.
"¿Qué hacer Blue en este lugar?"
"¿Dónde están los demás?"
Decenas de preguntas se agolparon en la mente del azabache, mientras sentía su sangre helarse.
Thump, Thump… Thump, Thump…
Sin embargo, mirando a la chica inconsciente, su espíritu de lucha se incendió, como si llamas furiosas derretían todo rastro de duda o cordura en el chicho.
Como si una sombría voz le hablara directamente a su corazón.
"Prometiste protegerla"
- ¡Ahí estás!, ¡¿Cómo pudiste hacerme eso?! –
- Melissa, espera, el líder te está mirando –
- ¡Mocoso estás acabado! –
El azabache sintió voces viniendo desde los lados, pero sus ojos seguían pegados en la chica.
"Recuerda lo que le hicieron a Ryota"
La susurrante comenzó invadir su mente.
"Debo salvarla… debo salvarla… DEBO SALVARLA"
El sol en su espalda brillaba en oro, y los ojos del azabache comenzaron a volverse dorados. Mientras que los otros emblemas en su cuerpo comenzaron a brillar, su aura agotada comenzó a llenarse, a desbordarse y brotar de su cuerpo, ante la mirada sorprendida y asombrada de los guardianes.
- ¿De verdad planeas hacerlo? – (preguntó Elmer, mirando divertido y curioso al joven, especialmente el aura no natural que lo rodeaba) – Que increíble compatibilidad tienes ahí… -
- Sello Ro-
- Detente ahora, alumno de Steel – (dijo una mujer, llegando desde el otro lado, contrario a la posición de Elmer) – Si haces un movimiento, los acabaré -
Con un ruido sordo, los jóvenes cayeron de cara en el suelo.
Yellow, Crystal, Gold y Silver.
Las palabras frías de la mujer, fueron como balde de agua fría para el azabache, el cual fue despertado de su locura, para enfrentar la cruel realidad frente a él.
Blue frente a él.
Los chicos a su espalda.
"¿Puedo salvarlos a ambos?… Imposible"
- …¿Qué hacemos Ash? – (preguntó Pikachu, mirando a ambos lados tan confuso como su entrenador)
El aire comenzó a faltarle al chico, mientras todas sus ideas comenzaron a perder sentido.
- Haah… haah… haah –
Lentamente, algunas gotas comenzaron a caer sobre el azabache, el cual estaba comenzando a hiperventilarse.
- Es una lástima de cierta manera, pero tal parece… que ahora no te queda más remedio que hablar conmigo, ¿no? – (murmuró Elmer, sonriendo zorrunamente al azabache)
El azabache miró detenidamente al hombre sonriente.
De cierta manera, esa sonrisa parecía la risa de un demonio a sus ojos.
Pasos comenzaron a escucharse a su alrededor, tal parece que los guardianes se estaban volvieron a reagrupar.
"¿Qué debo hacer?, ¿Qué debo hacer para proteger a todos?"
- Ahora, ¿Quieres un té? – (preguntó el hombre, apuntando con su mano, a la mesa detrás de él)
- Yo… - (el azabache miró detenidamente a Blue y los chicos, ambos en ambos extremos del campo) – Ellos no tienen nada que ver con esto… -
- ¿Es eso así? – (murmuró Elmer, acercándose al azabache hasta estar frente al joven) – Pero nadie debe saber de nosotros, incluso si son inocentes, ¿sabes? -
- ¡Ellos no saben nada! – (gritó el joven, solo para ser recibido por la sonrisa malvada del hombre)
- ¿Quién sabe?, ¿Yo no lo sé? – (comentó el hombre, mirando divertidamente al joven) – Por supuesto… hay maneras de que puedan ser libres sin ninguna consecuencia –
- …¿Qué manera? – (preguntó el joven débilmente)
Elmer sonrió exageradamente, una sonrisa sádica y graciosa.
Una sonrisa parecida a la de un demonio.
- Hay algo que quiero… un objeto importante y muy peligroso… es esencial que vuelva a la Torre… pero lamentablemente no puedo buscarlo yo mismo… no, ese objeto es muy escurridizo… necesito a alguien especial, un heredero de los Eidant, que lo busque por mí – (murmuró Elmer, tendiéndole la mano al azabache) – A cambió, puedo proteger a los tuyos… y te ayudaré con ese enemigo que yace en lo profundo de la oscuridad –
Elmer extendió su mano al azabache, mientras un aura extraña se retorcía y enroscaba en la palma del hombre, de forma similar a una serpiente.
- ¿Tenemos un trato, Red? –
El azabache miró la mano extendida del hombre, sabiendo que, de aceptar, no sería distinto de hacer un trato con el demonio mismo.
Pero el joven no dudó.
Tomó esa mano.
Porque solo entonces, ellos serían libres.
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..
…
El azabache fue conducido por los guardianes de vuelta a la Torre, mientras que Emerald quedó a cargo de transportar a los compañeros del azabache a la ciudad más cercana.
El chico trasladó a los jóvenes gracias a sus pokemon, y los abandonó frente al Centro Pokemon más cercano.
El chico miró brevemente a los jóvenes, para luego mirar la tela roja que tenían los jóvenes al momento de su captura.
- Pensar que les daría a ellos, una tela capaz de anular la detección de aura… que decisión tan ilógica… debió usarlo él mismo - (susurró el pequeño Emerald, alejándose de los compañeros del azabache y caminando hacia las sombras) – Red… tanto el maestro Elmer, como la maestra Selina, tienen grandes expectativas en él… ¿Qué clase de hombre es él? –
Un destello de curiosidad cruzó los ojos del pequeño, antes de desaparecer en la oscuridad.
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…
_Actualidad_
- Entonces… ¿A-Ash… fue capturado? - (preguntó una nerviosa White, que luego de 5 minutos recién salió de su estupor)
Los otros miembros colocaron una cara frustrada, mientras la expresión sombría en ellos crecía.
- No sabemos a ciencia cierta… lo que pasó luego de que nos dejaran inconscientes, pero Ash se separó de nosotros ese día – (comentó Blue, ante la mirada confusa y consternada de la castaña)
- Ese día fuimos completamente superados… comprendí cuan débiles éramos y cuan arrogante éramos - (respondió un apenado Gold, mientras bajaba su cabeza, en señal de disculpa)
- Ciertamente… nunca olvidaré ese día - (murmuró Silver, mientras miraba fijamente su mano, la cual no había dejado de temblar, desde que habían empezado a hablar de ese tema) – Fue la primera vez, que creí que no había ninguna esperanza para nosotros… la primera vez que enfrenté un enemigo, tan radicalmente fuerte… y ni siquiera fui capaz de enfrentarlo -
- No supimos de Red después de eso, no teníamos idea de donde se encontraba, ni que debíamos hacer... poco después nos encontramos con Arachne, e intentó secuestrar a Yellow nuevamente, pero fue la misma Yellow quién la terminó derrotando cuando nos atacó - (finalizó Blue, acariciando a Yellow)
- Después de perder a Red… había quedado perdida… pero entendí que no quería quedarme como una víctima más… o volvería a perder a las personas preciadas para mí – (murmuró Yellow, mirando firmemente a la castaña)
Mirando a Yellow, la cual mostró una valiente sonrisa, muy rara en la dulce chica, White sonrió dulcemente ante esto.
Pero una duda asaltó a White, mientras estaba en eso.
- Espera, ¿Y cómo se escapó Ash?, ¿Cuándo él regresó con ustedes? - (preguntó White, mirando atentamente a Blue)
Un silencio incomodó llegó a la habitación, antes de que la expresión de todos los presentes, cambiara a una de desagrado y molestia, para sorpresa de la castaña.
- ¿Q-Qué pasa? – (preguntó White, nerviosa)
- Según lo que supimos, ese idiota no estuvo ni 3 días atrapado - (murmuró Blue, mientras una vena le crecía en la frente) – Pero solo nos reunimos con él, un mes después de eso… en Hoenn -
- ¡¿3 días?!, ¡¿Cómo siquiera salió?!, ¡¿Y por qué en Hoenn?! - (preguntó una alterada White)
- No obtuvimos mayor explicación de su lado al respecto… hasta donde sé, al parecer, el Blanca Nieves lo ayudó o algo… ese bastardo, nos contactó 3 días después de que Red desapareció… Sin embargo, ¡Ese maldito no nos quiso decir donde estaba Ash, hasta un mes después! - (murmuró una molesta Blue, a lo que los presentes intentaron tranquilizar)
White miró la escena con una sonrisa, mientras Crystal y Yellow sostenían a la chica.
- ¿Pero Hoenn?, ¿Qué hizo Red en ese lugar? – (preguntó una confundida White, notando como Ruby levantaba su mano, en esta ocasión)
- Creo que yo puedo responder a eso, ya que yo, fui el siguiente en unirse… por cierto, creo que fue conmigo, que finalmente nos decidimos, ¿no? – (preguntó Ruby, mirando al resto de sus compañeros, los cuales asintieron)
- ¿Decidir?, ¿Qué cosa decidieron? – (preguntó White, mirando curiosa a los presentes)
- Bueno… nuestro nombre, por supuesto – (respondió Blue, con una gran sonrisa) – Fue en Hoenn, donde oficialmente se dio inicio a Crimson Wings –
CONTINUARA…
