Malestar

Ya saben, lo de la disgrafia, disculpas por los teclazos y horrores del auto corrector.

Y recuerden, Naruto y sus personajes son propiedad de Kishimoto sensei

Reviews

Virus pirata

Tienes razón sobre Sasuke, aunque aquí será algo diferente, en su momento verás a qué me refiero.

Y si, Anko es una criatura similar más no igual un vampiro, así que a esperar que quiere decir eso.

Y aquí será inútil y me iré por una explicación real que se da en las dictaduras, como lo es Konoha.

Y no ví que mencionaras al ramen.

Elchabon

Sip, no soy el primero en dar ese giro a la Uzumaki, y si, más que pala, el hokage parece usar excavadora para su tumba

Mago rojo

Es algo común, solo analiza casos puntuales como lo fue la guerra civil gringa, todo porque afectaban los intereses de los que tenían esclavos. No era lo mismo pagar por la pizca a tener mano de obra grátis prácticamente.

Y veamos el recuento…. Soul, no, hijo de…. Tampoco, redención…. Nop, las hijas de…. Sip, centinela…. Nop, Imperio del este…. Sip…. No soy… no…. Aquí…. sip.

La estadística niega la afirmación de la pregunta.

Ampliando más la respuesta, usar de antagonista a las Inuzuka puntualmente en "Las hijas de la noche" tenía que ver con el que quería que fueran, el motivo y lo que pasó, al final solo ellas y tenian una razón válida, es así que era un caso de antagonista y tuvieron un final amargo y tragico, en Imperio del este, no fue tan total, como aquí, y en No soy un héroe, solo la están pasando mal por algo lógico que he planteado, sin malicia.

A todo esto, si tienes Messenger mándame por MP como buscarte.

La serie y el manga me dan la razón, más que perder poder,fue más pasivo y eso desencadenó en varias situaciones, aquí daré otra interpretación de lo que eso hace.

Y lo ven mal porque son mercenarios no shinobi y de países no shinobi.

Más que nada al tener un orígen diferente, tendrán comportamiento diferente en muchas cosas, pero ya verás a qué me refiero.

Diegoossorio1

Sip, quise usar varios detalles que no se usan mucho aquí. Ese es uno de ellos, más no el único.

Manu

De hecho….. oye esa no es una mala idea (lo de los papás del yondaime) lo otro…. Nop, y ya dije,ando muy saturado.

Invitado

Y veremos a la primera víctima en caer.

Pegasister Geishiken

Algunos defensa, otros si que serán muy peligrosos. Y bueno, eso es sobre estimar a Danzō, puede ser que pueda amenazar a gente civil, pero líderes de clan…. No lo veo coherente, de poder ya sería Hokage por cohersion. Veo más creíble lo de Hiashi, eso sí, pero no lo otro.

Otakufire

Les va a doler, solo diré eso.

Carlos Goyo

Te dije que había una sorpresa.

Y si, está más y más profunda.

Carlos29

Gracias

Tobi1091

Gracias y que bien que te está gustando.

Oficina del Sandaime, veinte minutos después de emitir la orden de localización para Hayate y Hana.

Hana Inuzuka y Hayate Gecko estaban sentados frente al Sandaime, que no se veía nada complacido. De hecho, estaba sumamente furioso. Uno podría pensar que podría estar así, debido a que un grupo de shinobi de la aldea se atrevió a vengarse de una mujer cuyo delito fue el mejorar la condición del sector mercantil de la aldea. O porque dicha venganza fue dirigida hacia su hijo en todo menos en relación sanguínea. Incluso que la razón era que este niño ya había sido víctima de varios ataques similares. O ya de plano en Última instancia, porque esos atentados mancillaron el legado de Minato San y Kushina Sensei al permitir que su mayor tesoro fuera herido de nuevo en las mismas circunstancias que la otra vez.

No, lo que lo tenía realmente enojado, era que el hijo de su amada Sensei estaba rodeandose de personas que francamente eran indignas de siquiera estar cerca suyo.

La tímida princesa Hyuga, los herederos de los clanes Nara y Aburame eran una asociación expendida para que el niño se hiciera de apoyo político importante, incluso, Hana deseaba con fervor que algo de la relación entre ella y su sensei regresará en forma de la amistad entre el cabeza dura de su hermano y Naruto.

PERO esto era la gota que colmo el vaso. Ya era bastante malo que Naruto viviera en el barrio rojo, en un edificio que servía de casa para las putas que vivían ahí, era peor saber que una de ellas era la "madre" de Naruto. Ella y su esposo venido a menos eran las figuras paternas del pequeño. Era hipócrita de su parte, pero sentían Hayate, Yugao, Hana y Kakashi que el niño era un terrible recordatorio de lo que habían perdido. Yugao, Hayate y Kakashi por diferentes circunstancias, habían quedado huérfanos y sus sensei habían sido el paliativo del vacío de no tener padres cerca, al grado que los tres consideraban una segunda figura de esa categoría a sus fallecidos sensei y sus cónyuges.

Kushina había acogido a los huérfanos de una escaramuza entre Kiri y Konoha en su equipo Genin, pese a lo cuesta arriba que sería esa desicion. En su tiempo, la ahora pareja de castaño y pelimorada tenían una suerte de relación simbiótica que aunque enfermiza, funcionaba. Con apenas diez años de edad, ellos le habían confesado cuando tenían catorce, que intentando llenar el vacío que sentían en el orfanato al no tener familia, habían tenido relaciones sexuales. Ambos habían tenido la clásica escena de los "aplausos" muy jóvenes y medio entendieron que eso de hacía entre personas que se querían mucho, como una prueba de amor y que así, se complementaban.

Ambos eran grandes amigos, querían dejar de sentir soledad y bueno, Hayate era enfermizo y Yugao más fuerte que un roble, la ley de que los opuestos se atraen parecía cumplirse una vez más. No fue hasta una larga serie de charlas que Kushina pudo sacarles las teralañas de la cabeza, desarrollando la muy hermosa y sana relación que tenían ahora.

Por su lado, Kakashi había Sido salvado de si mismo dos veces por Minato, una cuando intento lavar el honor de los Hatake al cometer sekkupu, la otra cuando Obito Uchiha y Rin Nohara murieron, dejando al prodigio, muerto por dentro.

Ellos tres no odiaban a Naruto, ni Hana Inuzuka, pero si al Kyubi. Si ese jodido saco de pulgas no se hubiera soltado, nada de esto habría ocurrido. Por ello, Yugao, Hayate y Hana acordaron ser civiles con el niño, una vez que pudieran estar en la misma habitación que Él, sin la tentación de hacerlo pedazos para llegar al zorro. Kakashi simplemente, compensaría su negligencia, siendo el sensei del niño y ayudándolo con las bases para hacerlo llegar a una edad mayor a la de sus padres.

Y aquí estaban ahora, los únicos en la aldea con una relación cercana a los padres de Naruto, oyendo del regreso de Jakenpon a la aldea. Nada bueno saldría de ello.

Jakenpon era un grupo de cazarrecompensas famoso que tenía integrantes de Naciones no shinobi que a su vez no eran shinobi. Estaba integrado por Riki Sendaryu, alias "La muerte roja" una deshonrada primogénita del clan de sacerdotes más afamado del país de los Demonios. Riki había perdido su estatus como heredera de clan al haberse negado a convertirse en sacerdotisa del dios Susanoo, para integrarse al servicio de Inari. En familias tradicionalistas dónde todos son abogados, ingenieros o médicos lo que la pelirroja quería sería el equivalente a que uno de sus miembros en vez de seguir la tradición familiar, optará por ejemplo, con volverse chef.

El segundo miembro de Jakenpon era Ryoku Asai "La Hoz de Shinigami", decendiente de una de las familias nobles del País del Hierro, la que tradicionalmente tenía a jueves y policías entre sus filas, dado que Ryoku tenía un sentido fuerte de la justicia, eso lo habría hecho el candidato ideal para liderar su familia, si no fuera tan gentil. Lo habian desheredado cuando ayudo a huir a un hombre que lideró una red de tráfico humano que sacaba personas de las minas de uno de los nobles del vecino País de los arrozales, ya que estos eran obligados a trabajar a la fuerza ahí como esclavos en todo menos en nombre, a petición del feudal del País. El joven lo vio como un ultraje y ayudo al sujeto a librarse de la cárcel, perdiendo el estatus de futuro cabeza de familia y le salió barato. No podían probar que lo hizo, pero lo sabían y esa que había Sido la gota que colmo el vaso vasto para exiliarlo.

Y por último estaba Shiro Yoku "El lobo negro" y ex príncipe heredero del País de los Pantanos, el ex principe sintió el llamado a servir a los dioses y contra la voluntad de sus padres, fue al País de los Demonios disfrazado humildemente y se convirtió en monje ahí. Sin embargo, el deshonrado principe tuvo que huir del país al ayudar a escapar a la princesa Shion de una secta que quería usarla para sus propios proyectos, al haber sido difamado por ellos. No es su culpa que su llamado haya Sido para servir a Amaterasu no fuera suficiente para quitarle lo mujeriego.

Esos tres se encontraron y crearon una sólida agrupación cazarrecompensas que podía darle serios problemas a shinobi rango A y algunos S.

Pero, ¿Cómo es que conocían en la aldea a dos de los tres miembros de JaKenpon?

Sucede que al principio de su travesía, ni Riki, ni Ryoku tenían ánimos de vivir tan grandes tras la ruptura total con su familia. La novicia había dejado morir la fé en los lazos humanos y el aspirante a Samurái, en la justicia. Ahí es donde entraban los padres de Naruto.

En la tercera Guerra mundial shinobi, estando involucrados los ex herederos en un complot y una confusión, fueron salvados por el Minakushi, siendo deslumbrados por la brillantes de ambos, el sentido de justicia de Minato y la fé en los lazos que demostró Kushina, fue como ver lo que ellos aspiran a ser ,en otra persona y eso causo dos cosas. El aliento de seguir adelante y….. pues un fanatismo digno de una película de terror.

Y si no me creen, antes de tener sus característicos ahora, cabellos rojo y rubio, Riki y Ryoku eran castaños.

De ahí el temor del Sandaime de que entre JaKenpon y su fanatismo por su sucesor y los Kadō y su aparente desprecio por la aldea, tratarán de socabarlo para vender a Naruto la idea de dejar la aldea.

Si bien Naruto estaba en su derecho, dado su estatus especial como heredero del País de Uzu, de abandonar la alde, su condición de jinchuriki ponderaba más en la mente del Sandaime para que permanezca aquí. Le dolía tener que recurrir a este medio, pero Minato había sentado las bases para ello, pudo llevarse al Kyubi con él, pero privilegio el esquema de poder reinante, pudo pedir que su hijo siguiera en el anonimato de jinchuriki, pero pidió que se le honrara por ello. No iba a defraudar la fe que él, como los anteriores kages habían tenido en la aldea.

-Los he mandado llamar- inicio el Sandaime, queriendo acabar con esto de una vez ,para atender otros asuntos, entre ellos, saber cómo iban las cosas con la localización de dos Sanin y dos capitán ANBU, así como de la junta que seguramente tendría que convocar para sancionar a los Akimichi y los Kurama.

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Diez días después del atentado contra la vida de Naruto, ya totalmente recuperado y dado de alta por la médico que su madre trajo para atenderlo, este paseaba en compañía de Shiori Sendaryu y de Yuriko Tetsuno, la autoproclamada neechan de Chusai. Shiori era una niña de seis años, pelirroja de cabello hasta los hombros enmarcado por un fleco y que tenía ojos azules como su madre que vestía un bonito vestido azul con girasoles estampados, por su lado, Yuriko era una niña de once, de cabello castaño ensortijado y de ojos marrones, que vestía un qipao verde claro con sandalias a juego, mientras la niña usaba sandalias de madera tradicional.

Los niños venían con los mandados que sus respectivos padres/ figura "paterna" les habían encargado en el ahora existente distrito de mercado dentro del barrio, platicando la pelirroja y la castaña, aunque Naruto seguía en su mundo, diez días y no podía creer aún, lo que su reencuentro con el zorro había traído a su vida.

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Pasaje mental, diez días antes.

Naruto se sorprendió por estar nuevamente en el "santuario" del zorro que había traído felicidad a su vida, algo que ya esperaba que sucediera, aunque, no esperaba que pasará en circunstancias tan lamentables.

Así que, con convicción se acercó a la enorme jaula que contenía al enorme zorro y este al verlo lo saludo formalmente.

-No era la mejor manera de volvemos a ver- admitió el Kyubi- pero no me voy a quejar por ello. Supongo que te ha gustado mi regalo.

Naruto asintió, por lo que el zorro suspiro y se acomodo mejor para ver con más detalle el rostro del niño antes de continuar.

-Ahora, debes de saber que sucederá si lo que te voy a pedir, te rehusas a cumplirlo, más aún, vas a tener razones de mas para no hacerlo. Pero quiero dejar en claro dos cosas, diste tu palabra y es en el beneficio del mundo- inicio su petición el zorro.

-¿Que es lo que me pides?- quiso saber Naruto.

-Alla afuera, hay al menos tres Uchiha vivos, en algún momento de tu vida has estado en contacto al menos, con los tres- inicio el Kyubi- uno de ellos, es tu odioso compañero de clases, el otro es el ANBU cuervo que te cuidaba de vez en cuando y que era tu amigo. Y el otro, fue en parte responsable de la muerte de tus padres.

-¿Mis padres?- Preguntó en shock Naruto y agrego- ¿Sabes quiénes son mis padres de nacimiento?

-Padres biológicos- corrigió el ser y añadió- claro que se, yo estaba ahí, el día de tu nacimiento.

Naruto comenzó a juntar las cosas y entendió finalmente la situación. Ante el, no estaba un zorro que cumple deseos, estaba el infame Kyubi, quien dicho sea de paso, se suponía que murió en batalla junto al Yondaime.

-¿Eres el Kyubi no Yoko?- Preguntó el niño temeroso.

El imponente zorro asintió con la cabeza.

-No te lo dije antes por dos factores, el primero, aún estabas bajo la influencia total del Sandaime y habrías recelado todo lo que escucharás de mi- explico el zorro- y segundo, sinceramente, esperaba usar esa oportunidad para escapar del sello que me mantiene prisionero en tí.

-¡Que¡- se conmocionó el niño.

-Como dije, esperaba usarte como medio para escapar de mí- siguió adelante y añadió- sin embargo, al enterarme de tu deseo, decidí cumplirlo, porque al final, aunque quiero mi libertad, no quiero tener en la conciencia, la muerte de un alma tan pura. Por ello pude contactar con los Kadō y explicarles tu situación.

-Me habías mentido- susurro en voz alta el niño.

-Soy incapaz de mentir, si no me crees, pruébalo- pidió el zorro.

-¿Estás seguro que está camisa No es naranja?- Preguntó Naruto señalando su camisa naranja

-Vaya estupidez, pero veo el punto- sonrió divertido el zorro- estoy totalmente seguro que lo es.

La pregunta de Naruto tenía una trampa, si como el Kyubi aseguro, era incapaz de mentir, la mejor forma de saberlo, era usar un condicional en una pregunta sin rodeos.

Si decía la verdad ,que no era capaz de mentir, le saldría natural asegurar que lo era, ya que no solo era verdad, era la respuesta equivalente a preguntar de qué color era. Si fingía decirla, habría tratado de elaborar una respuesta y esa breve pausa le habría dado esa indicacion. No podría mentir en esa respuesta, sería demasiado estúpido hacerlo.

Queriendo capitalizar ese conocimiento, Preguntó:

-¿Sabes quiénes eran mis padres y si la respuesta es afirmativa, como se llamaban?

-Tus padres eran el Yondaime Hokage, Minato Namikaze y su esposa, la infame Habanero sangrienta, Kushina Uzumaki.

Naruto se quedó sorprendió al saber que era hijo de su héroe, pero la sorpresa dió paso a una gran ira, porque entiendo en el acto una sola cosa, EL SANDAIME LO SABÍA Y NO SE ATREVIÓ NUNCA A DARLE LAS RESPUESTAS QUE TANTO ANSIABA.

-Lo odio- surruro Naruto- ¡Odio a ese maldito anciano de mierda y a esta estúpida aldea¡

-Estas en tu derecho niño- asintió el zorro- y también a odiarme, pero debes saber que aunque ataque a la aldea, un Uchiha me obligo a hacerlo, tras liberarme del sello que me contenía de mi anterior carcelera, tu propia madre.

-¿Mi madre?

-No aparecí al azar- continúo- tu madre fue mi segunda prisión y Mito Uzumaki la primera. Debido a que solo un Uzumaki podía contenerme, tu padre decidió sellarte en mi y tenía fe en que esta aldea haría lo mejor para honrar su sacrificio.

-Y me condenó por ello.

Para su sorpresa, el zorro negó con la cabeza.

-Los padres siempre tenemos fe en los hijos y esperamos lo mejor para ellos- defendió a Minato - las personas de esta aldea en su mayoría, no estuvieron a la altura de esa fe que tus padres tenían por ella. Creeme, ellos te amaban y esperaban con mucho amor.

Naruto entonces estudio más al zorro y vio que tenía genuino arrepentimiento. Debido a como lo trataban, el niño se formó un criterio que se basaba en no juzgar a nadie por las experiencias y creencias de los demás. Libre de ese sezgo, Naruto entendió que un monstruo cruel y sin corazón no podía sentir esa empatía y arrepentimiento por él. Y ya que no podía mentir, sabía que era verdad sobre que un Uchiha lo obligó a atacar la aldea.

No podía odiar al zorro, no podía odiar a sus padres que cumplieron con su deber. Algo le decía que sacar un zorro de 50 metros de un sello mataría a su contenedor y también meterlo en alguien al que lo haga. Pero el Sandaime, varios de los padres si no a todos los de sus compañeros de clases y la mayoría de los adultos eran un asunto distinto.

Viendo que el niño no lo odiaba el Kyubi continúo.

-Lo que deberás hacer para mí, es muy simple- comenzó la petición- deberás asesinar a todos los Uchiha que quedan en el mundo, Sasuke, Comadreja y al responsable de liberarme.

-¡Sasuke¡- se soprendio el niño.

-¡A todos¡- fue tajante el zorro.

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Y por eso estaba pensativo. No le tenía particularmente mala voluntad al Uchiha, pero matarlo para tener padres se sentía mal, aún con la loca historia que le contó el zorro sobre Indra y Ashura y como este le dejó una maldición de odio a los Uchiha que los hacía consumir todo por el odio. Sasuke podría caer ahí, ser una amenaza, pero no por eso ,sentía que debía matarlo a la primera oportunidad.

Por otro lado, el Kyubi logró hacer llegar un mensaje a los Kadō, quien sabe si podría ingeniarselas para matarlos si veía que no quería cumplir el acuerdo. No era un riesgo que deseaba correr.

De ahí que estuviera aún en conflicto.

Tras separarse de sus amigas, Naruto subió a su apartamento vacío ,ya que sus padres estaban en sus trabajos, y se recostó a tomar una siesta,al menos así, podría de momento, escapar de esa cuestión.

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Luna Azul, esa misma noche.

Tsume Inuzuka estaba recibiendo un tratamiento especial por la persona que había contratado, un servicio no sexual, aunque para ella habría Sido mejor que fuera una mujer.

Desnuda y boca abajo , en una mesa de masaje, la Inuzuka estaba siendo atendida por uno de los barman del lugar, un nuevo barman llamado Nageru Kauzera.

Nageru era experto en masajes relajantes y la mujer que típicamente le hacía ese servicio, estaba atendiendo a alguien más, por lo que al no tener naturaleza sexual su petición, Shio le había dicho que Nageru podría hacerle el servicio sin problema.

Tenía que admitir Tsume que el jóven hacía muy bien su trabajo y que su charla era liberadora.

Nageru aplicó un aceite diferente en la piel de Tsume, tras haberse limpiado perfectamente bien los restos del que había usado previamente, sin dejar rastro alguno y comenzó a darle largos círculos en la espalda media , subiendo lentamente hasta sus hombros, dónde procedió a deshacer los nudos que tenían.

- ¿Alguna vez te habías sentido tan bien, Tsume?- Preguntó el masajista

- No, nunca.

- ¿Quieres que me detenga?

- No, Nageru. Por favor, no pares. Me encanta esto.- rogó con voz lastimera la Inuzuka

- Bien, Tsume. Bien. Yo también estoy disfrutando esto- admitió el masajista y agregó-. ¿Sabes que eres una mujer hermosa, Tsume?

- Gracias- agradeció sonrojada- es la primera vez que me llaman así, normalmente solo me dicen sexy.

-Eso es porque no te ven con el cabello liso por la peluca que usas para mantener el anonimato, te verías muy tierna con el cabello rubio y largo- replicó el barman y agregó - ¿Alguna vez has… ya sabes… estado con una mujer, Tsume? – preguntó a sabiendas de la respuesta.

Nageru notó como Tsume se tensaba ligeramente. Se inclinó junto a su oído y le susurró. -No te preocupes, me lo puedes decir… puedes contarme cualquier cosa. Confías en mi.

La Matriarca volvió a relajarse de nuevo, pero ésta vez más profundamente.

- Sí. – susurró. – Te puedo contar cualquier cosa…

- ¿Alguna vez has estado con otra mujer? – volvió a preguntar Nageru.

-Si- admito Tsume

- ¿Te gustó?

- Fue, como decírtelo…, diferente. Las mujeres son mejores amantes que los hombres- respondió dando a entender que era común que se acostara con otras mujeres

-¿Te gusta esta loción, Tsume?- preguntó el Barman.

- Sí, es muy relajante.

- ¿Quieres que pare, Tsume?

- No, Nageru.

- Bien. ¿Estás cómoda?- Preguntó buscando una respuesta en particular.

- Sí, pero me está dando un poco de calor.- admitió sonrojada la Inuzuka- tus manos me están poniendo cachonda.

- Tal vez deberías aliviar tu "picazón", Tsume. – sugirió Nageru.

- Sí, creo que lo voy a hacer.

-¿Quieres que comience a masajear tu "punto más dulce"?- sugirió de nuevo Nageru susurrando al oído derecho de la mujer.

-Nageru, ¿podrías tocarme? – pidió la castaña- creo que tus dedos harían maravillas por mí.

- Por supuesto, cariño. – dijo el barman apartando una de sus manos de la espalda baja de Tsume y comenzó a penetrarla, metiendo y sacando sus dedos a un ritmo lento

- ¿Tsume?-

- ¿Sí, Nageru?

- ¿No crees que sería genial sentir este placer cuando y donde quieras?- Preguntó el hombre

- Sí, me encantaría eso- admitió la mujer tras arquear su espalda por el intenso placer.

-Si, mi linda gatita, esto es demasiado bueno para dejarlo ir- comenzó Nageru a hacer una serie de comandos a la mujer.

El ayudante de Chusai era un hipnotista, algo para lo que los shinobi no tenían defensas o forma de rastreo. Claro, había Genjutsu que podían inducir algo similar, pero estos dejaban rastro y normalmente, a menos que fueras un Uchiha, había una alta posibilidad de que tú blanco logré romperlo. Pero esto, sin saber exactamente como, no era ni detectable o reversible. Perfecto para arruinar la vida de la Inuzuka más allá de cualquier intento de reparación.

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Una semana después.

Hana Inuzuka veía jugar a Kiba a los ninja con sus amigos, Shikamaru, Chouji y en menor medida, Naruto. La razón de la mujer para ver jugar a los niños tras las clases de la academia, era que no quería llegar a casa y tener que lidiar con el comportamiento errático de su madre.

Desde hacía días, Tsume estaba comportándose bastante raro, un momento, era la mujer temperamental y ruda que conocía y al siguiente, una tímida y sumisa en general mujer que solo regresaba a su verdadero yo, cuándo había mujeres cerca…. Y no de una forma agradable.

Tsume tuvo que ir a una misión junto a ella, rastreando una cepa de peste negra que estaba azotando a los pobladores de la frontera con el País de las aguas termales. Podría ser algo grave o muy grave, dado el hecho que habían atrapado a una kunoichi de Kumo de piel morena, a la que la Inuzuka reclamaba bajo la tercera enmienda de los acuerdos internacionales. Una que sabía Hana que era hacerse de un esclavo que cometió una grave falta y que de tenían pruebas de ella, como reparación del agravio.

Dado que la mujer tenía viales con tejido contaminado, frotis de la cepa para ser específicos, sabía que su madre pensaba seriamente hacerle de la mujer.

Y lo peor, fue ver a Tsume, obligarla a tener un "duelo a muerte con tijeras", para mayor consternación de Hana.

Y no sabía si eso o que en sus desvarios despotricara sobre los perros y cantará loas a los gatos era lo que más la había desconcertado.

Cuando ese estado pasaba, además de no recordar nada, la mujer parecía genuinamente aterrada de su "otro yo" por alguna razón que Hana sabía que era personal. Conocía muy bien a su madre para intuirlo.

Así que, primero se pensó en que fue sometida a un poderoso Genjutsu, pero ni su amiga Kurenai, los miembros del clan Kurama o el Sandaime pudieron diagnósticar a la mujer.

Al sumergirse en su memoria, ningún Yamanaka pudo averiguar qué desencadenó dicho fenómeno y mucho menos revertirlo. Lo que dejaba una última, aterradora y esperaba ella, nula posiblidad: el hijo de su Sensei fue poseído por los poderes demoníacos de esa criatura y estaba atormentando a su madre o peor.

La veterinaria sacudió su cabeza ante esa ridícula idea y se dedicó a ver a su hermano y amigos jugar. El hijo de Kushina chan seguía siendo un niño enérgico , gentil y hasta cierto punto, humilde, pero algo sutilmente había cambiado en él y si el Sandaime tenía razón, los tutores del niño eran los responsables.

El niño seguía siendo su yo alegre, pero algo sutilmente importante cambio, ya no buscaba activamente ser amigo de todos los niños de su clase o de pedirle citas a la niña de la que decía "estar" enamorado.

Por el contrario, jugaba con un estrecho círculo de amigos, entre ellos su hermano, pero había dejado de lado el tratar de hacerse amigo de los demás.

Hana le pregunto a su hermano si sabía la respuesta y este comento que también había visto ese cambio. Pero mientras Kiba creía que era para mejor, pues valía más tener un puñado de amigos verdaderos que cientos solo de nombre, la Inuzuka no creía que eso fuera lo que su sensei quería.

"Mi Naruchan será amigo de todos en su salón y la mayoría de las niñas estarán atrás de él" recordaba con amargura las palabras de Kushina Sensei, palabras que la inacción, el odio, rencor y miedo redujeron el número de un salón a una cantidad de niños que podías contar con los dedos de una mano.

La Heredera de los Hyuga, el de los Aburame, su hermano, el chico Nara y el Akimichi. Apenas cinco de 29 que componían su clase.

"No sé preocupe, estoy segura que será un poderoso ninja, yo le enseñaré a rastrear" recordó su promesa, una que había incumplido, consuelo de tontos, recordó otras tres sin cumplir.

"Voy a practicar con él, Kenjutsu"

"Yo le enseñaré todos y cada uno de los Jutsu que he copiado"

"Yo (cof, cof) creo que puedo enseñarle un par de movimientos extra que este par no conoce"

El dolor, el rencor, su incapacidad de perdonar y seguir adelante, todos se habían combinado para orillar a un niño, al hijo de su sensei, ser criado por una puta y un herrero. Pero como se lo había hecho entender el Sandaime, todavía había una esperanza de contrarrestar el daño, así que dispuesta a crear el vínculo que siempre tuvo que tener con Naruto, Hana se acercó a recojer a su hermano, al mismo tiempo que Natsu recogía a Hinata, Shibi a su hijo y la madre de la niña Yamanaka a su hija y a los hijos de sus amigos.

-Veo que se divirtieron muchísimo- saludo Hana a Kiba y Naruto que esperaban a quien iría a recogerlos- Así que este es tu amigo Naruto, estoy verdaderamente impresionada hermanito- sonrió encantada la Inuzuka.

-Espero, no hayas dicho nada que no sea verdad- acuso mitad en broma , mitad en serio Naruto.

-No creo que haya dicho nada malo, si dijo que pasaste del último al primer lugar, vaya que esa es toda una hazaña- dió una verdad parcial Hana.

-Bueno, no esperaba ser el mejor- se rascó la nariz apenado el rubio, algo que le encogió el corazón a Hana, al ser un gesto que había heredado de su madre- pero cuando todos los maestros te han estado saboteando, es normal que seas el último, sin importar qué tan bueno seas.

-Al menos algo no cambia- sonrió burlona Hana- Kiba sigue en el sótano de la clase.

-¡Oye¡- se quejo el Inuzuka- no es mi culpa que las clases curriculares sean tan aburridas.

-Voy a tener que estar de acuerdo con Kiba- asintió Naruto- al menos hoy no vimos nada interesante. ¿A quien le interesa saber la historia del País de los ríos y su relación con Konoha?- Hana estuvo de acuerdo y Naruto añadio- más aún, cuado Chusai San me va a enseñar a mezclar polvora.

-No veo que tenga eso de interesante- negó Hana- la pólvora es solo un burdo intento de recrear los sellos explosivos.

-Y estos no pueden ser usados como fuegos artificiales o servir como bengalas improvisadas- defendió Naruto al genio loco.

El cocinero tenía una enciclopedica memoria que almacenaba y procesaba toda clase de información, enseñarle a hacer pólvora era el preámbulo de cosas más interesantes, como por ejemplo, combinar dos sustancias o más aparentemente inofensivas y de fácil obtención, como el hipoclorito sódico, el amoniaco y el ácido muriatico y obtener un veneno de acción muy rápida y fatal.

Los ninja en su concepto eran sigilosas máquinas de asesinato, sabotaje y espionaje y aunque como todo niño, sabía lo genial que eran los Jutsu vistosos y devastadores, los métodos discretos y sutiles eran los que llamaban más su interés.

Hana tuvo que darle razón al niño, aún así, era un insulto al legado de sus padres, queriendo acercarse más, uso otro enfoque.

-No creo que al señor Chusai le moleste que llegues tarde a su demostración- inicio su plan- ¿No te gustaría venir a cenar a mi casa?

-Eso sería genial- estuvo de acuerdo Kiba.

-¿Y perderme de jna pizza con ramen?- Preguntó Naruto- paso, además, no conoce a Chusai, es muy exigente con la puntualidad.

Cómo para demostrar el punto, Yuriko, la "hermana" adoptiva de Chusai venía acompañada de la otra camarera del negocio del dueño del restaurante, la siempre estoica Nemu Kurotsuchi.

Yuriko iba a clases a la academia civil, que estaba más adelante de la shinobi, por lo que era más práctico recoger a Yuriko primero y a Naruto después.

Así de grande era la confianza que sus padres le tenían, como a casi todo el barrio rojo.

-Ya vinieron por mi, lo lamento, pero debo declinar- se disculpo cortésmente Naruto y se fue junto a sus amigas.

"El colmo del descaro" pensó muy enojado el niño "cree que no se quién es ella en realidad, o su madre para el caso, puedo confiar en Kiba porque no sabe nada, pero ellas son un asunto distinto. No seré yo el medio para aliviar su culpa"

Naruto después de esa revelación del Kyubi, tuvo una larga y bastante incómoda charla con sus padres, estos confirmaron dos de las cosas que ya había intuido, los adultos sabían quién era, al menos la mayor parte, sobre lo que respecta al Kyubi, y algunos cuantos sabian sobre la identidad de sus padres. Ellos ya habían averiguado eso y esperaban el enfoque a usar para decirle, lo que Naruto creyó, más aún, cuando al preguntar quienes lo sabían, le dieron la lista de los líderes de clan, sus esposas y los alumnos de su padre. Vaya que lo enfureció que dos maestros de academia retirados prefieran renunciar a estar con él. Al menos la mamá de Hinata lo había ayudado en más de una vez.

"Será un dis frío en el invierno, el día que los ayude a aliviar su dolor" penso con amargura "podía entender si me hubiera dicho el hokage la identidad de mis papás y que por seguridad no debía decirlo, podía entender lo del Kyubi. ¿Pero alguien aquí siquiera intento entenderme? !NO¡ solo me dejaron la carga y esperan queo entienda así sin más, pues ¡Que se jodan¡ Seré el ninja más fuerte del mundo, para poder proteger a quienes me importan, no a ellos. Este perro de ataque de la aldea será un terrible guardian, ¡PERO SÓLO DE AQUELLOS QUE SEAN IMPORTANTES PARA ÉL¡.

Y corte.

Cómo siempre he dicho, matar muchas veces es la forma piadosa de vengarse de alguien, Que mejor manera de venganza, que arrebatarle en una lenta agonía el liderazgo a Tsume y a sus hijos.

Y no es el único caso, todavía queda otro líder de clan para vengarse.

Ya saben, dejenme su review, así no solo me animan a escribir, habrá retro alimentación entre nosotros.