Relámpagos de pasión y sonidos de melancolía.
Ya saben, lo de la disgrafia, disculpas por los teclazos y horrores del auto corrector.
Y recuerden, Naruto y sus personajes son propiedad de Kishimoto sensei
Review
Virus pirata
Cierto, por eso lo puse
Y a ver de apoco como se va revelando eso.
Otakufire
No hay cuidado amigo.
Veamos que puede hacer Naruto con la memoria de pura leyenda.
Después de todo, conocimiento es poder.
Darkned159
Escapó, deje claro eso.
Konoha, barrio rojo.
Samui soltó la toalla que abrazaba su cuerpo y dejó escapar un suspiro de satisfacción mientras se metía en el agua humeante. Fue agradable tener un momento de descanso durante su misión de infiltración en Konoha y la casa de baños fue su primera parada en ese breve descanso. El agua voló suavemente a su alrededor y Samui no pudo evitar dejar escapar un gemido.
Ella suspiró. Debido a la misión y al ajetreado día a día suyo antes de ella, su vida sexual era prácticamente inexistente. Sin embargo, esta agua sí que era agradable. Sopló sobre sus pesados pechos, haciendo que sus pezones se tensaran. Miró alrededor de la casa de baños. "Parece que estoy sola…" pensó aliviada.
Necesitaba liberar algo de tensión, ella, Yugito y Mabui de verdad se la habían jugado al permanecer en la aldea sin completar su misión de asesinar a Chusai y enviar los informes al Raikage de todo lo que habían logrado averiguar.
El espionaje no era su especialidad, pero habían reunido suficiente información como para que al kage de Kumo le parecía prudente hacer un cambio de dirección en la misión.
De momento dejarían en paz a Chusai y se concentraría su equipo tanto en convencer a un Hyuga de la rama secundaria para que deserte a Kumo, como en ver cómo hacerle para que el Uzumaki Jinchuriki haga lo mismo.
Misión nada fácil, sobre todo con Jakenpon y alrededor, al menos en lo referente a Naruto.
La cabeza de la rubia voló hacia atrás cuando dos de sus dedos se deslizaron sobre sus labios inferiores. Sus dígitos rozaron arriba y abajo sus pliegues. Dejó escapar gemidos silenciosos una vez que comenzó a mover sus dedos más rápidamente en respuesta a su creciente placer. Sus pezones se volvían más duros cuando se tocaba, poniéndolos completamente erectos.
Samui cerró los ojos y metió dos dedos en su feminidad, entrando lentamente y luego retrocediendo sus dígitos, entrando y saliendo de su entrada en llamas. El increíble calor en su cuerpo hizo que ella derramara más jugos fuera de su centro, y gotas de líquido subieron a la superficie. Sus dedos fueron más y más rápidos, esparciendo lágrimas de su excitación en la tina.
-¡Aaaaaah!- la rubia detuvo todo lo que estaba haciendo, escondiendo rápidamente todo menos su cabeza bajo el agua cuando escuchó un grito de voz masculina. Miró en la dirección del sonido para ver a un joven rubio gemir de dolor. Parece que había caído ahí luego de molestar a Riki Senryaku, si el chanclazo en la cara de Chusai era una indicación
Los ojos de Samui se abrieron de sorpresa cuando él se puso de pie, dándole a Chusai una vista completa de su cuerpo desnudo. ¿La había visto desnuda? Samui era inteligente, tenía muy claro que en su aldea natal era más un ideal que otra cosa. Y eso es un decir.
Estaba plenamente consiente de que más que cortejarla a ella, teniendole en cuenta como una pareja potencial, le querían como algo para presumir. Modestia aparte, ella era muy consciente de que era la mujer más hermosa de Kumo o de menos la más sexy. Yugito, su compañera de equipo Karui y Mabui bien podrían pelear el título de la más bella, pero de que ella era la del mayor atractivo Sexual eso era innegable. Y también ella sabía que Chusai era un buen espécimen masculino y como bono extra, era de su aldea natal, lo que le hacía muuuuyy deseable. Que la mire o hiciera el esfuerzo de verla a los ojos jugaba a favor de Chusai en más de un sentido, le haría a ella las cosas más fáciles para poder aprovechar esta oportunidad.
Chusai tragó saliva cuando Samui se acercó a él. No había planeado mirar a Samui mientras ella se relajaba, pero Riki y su poca paciencia ante las bromas bien intencionadas (se hizo la nota de jamás cuestionar que ella era pelirroja Natural) le envió a volar como represalia con el chanclazo más poderoso que seguramente ella había estado reservando para Shiro.
Sin embargo, Samui tenía otros planes. Estaba de licencia temporal en cierto modo y una polla como la de Chusai podría ayudarla con el estrés acumulado. Acercándose a su compatriota, jadeó. Era aún más grande de cerca, si la erección que ya estaba manifestando era un indicador. Tenía que medir al menos 10 pulgadas si sus cálculos eran los correctos.
Para sorpresa de Chusai, Samui se arrodilló , le bajó los pantalones, el boxer y agarró su pene. Retiró su prepucio para revelar la cabeza rosada debajo. La cabeza estaba cubierta de líquido preseminal, lo que la hizo sonreír. Después de todo, ningún hombre pudo resistirse a ella. Abrió la boca y presionó la lengua contra el eje, rodando arriba y abajo del pene duro como una roca. Una vez que llegó a la punta, enrolló el músculo a su alrededor, dejando que todo el líquido preseminal rodará sobre su lengua.
El joven gimió, acercando sus labios a su pene, haciéndola tomar un poco de su pene en su boca. Captó la indirecta y tomó más de él, pero se detuvo cuando la punta comenzó a golpear su garganta. Afortunadamente, Samui ya tenía experiencia en hacer mamadas, por lo que no sintió ganas ni de vomitar. Pero cuando Chusai trató de empujar más de sí mismo, ella empujó la cabeza hacia atrás.
-Basta. ¡Eso no está nada bien!- le reclamo ella enojada .
-Mira que si vas a saltarme encima así para aprovecharte de mí, lo menos que puedes hacer es darme ese gusto- dijo de manera desafiante Chusai- no porque sea un "indefenso civil" y tú seas una kunoichi voy a dejarte hacer tu voluntad.
Estaban solos, así que podían ser sinceros el uno con la otra.
Por única respuesta, Samui se puso de pie. Por un momento Chusai sintió que todo había terminado. Pero la rubia no parecía enojada en absoluto cuando comenzó a abrir su toalla, lo que le permitió a Chusai ver los senos más grandes que jamás había visto. Eran tan grandes y suaves que la sola idea de tocarlos lo hacía babear. Sin embargo, cuando Samui se quitó la toalla por completo, supo que lejos de enojarse, eso la había puesto más cachonda
Chusai ,a la única persona del grupo que le guardo algo de rencor por el intento de asesinato era a Mabui, por ser alguien en el pasado cercano a ella. Podía entender que las otras dos rubias hicieran lo que debían, pero con ella era diferente.
Así que, si la rubia de prominentes pechos quería divertirse, él podía sacar algo de provecho de ello, en retribución a qué trato de cargarselo. Si Ryoku ni hubiera interceptado su ataque, seguramente a estás alturas ella estaría muerta. Bueno, si la vida te da limones, haz limonada.
Chusai salió corriendo hacia ella y Samui fue derribada al suelo. Se sentó a horcajadas sobre su estómago, poniendo sus manos sobre sus suaves pechos. Se movían y rebotaban con cada movimiento que hacía, por pequeño que fuera. Sus pechos eran tan grandes que tuvo problemas para mantenerlos alrededor de su polla cuando empujó su virilidad entre sus maravillas naturales por lo que podía sentir.
Samui puso los ojos en blanco. ¿Por qué todos los hombres que tuvieron sexo con ella siempre querían tanto una cubana? A regañadientes empujó sus pechos contra la polla de Chusai para ayudarlo. El rubio sonrió una vez que comenzó a empujar su escote. Sus senos eran tan grandes que su pene desaparecía por completo cuando empujaba sus caderas hacia atrás, y solo podía verse brevemente cuando se empujaba completamente hacia adelante. Samui observó cómo la cabeza rosada salía de su escote con cada empujón, aferrándose brevemente contra su boca, haciendo que el líquido preseminal de su amante formara una línea entre sus deliciosos labios y su pene.
Chusai se estremeció cada vez que la lengua de Samui rodaba sobre su pene. La vista era tan caliente, y la sensación de sus pechos apretados tan ceñidos, que estaba seguro de que pronto se correría. -¡Aquí viene, Samui-chan!- anunció Chusai. Las pupilas de Samui se agrandaron cuando una inyección de tragos blancos voló a su boca, haciéndola probar inesperadamente el semen de Chusai. Ella soltó sus senos en estado de shock, liberando el pene de su amante, y este aprovechó la oportunidad para forzar su verga en su boca abierta, disparándole todo por la garganta.
Samui se puso de rodillas y tosió una vez que él empujó sus caderas hacia atrás. Sintió el semen viajar a su estómago. El nacido en Kumo observó cómo sus pechos se movían de un lado a otro con cada tos. Su polla ya se estaba poniendo dura de nuevo. Samui jadeó cuando él agarró los lados de sus caderas, colocando sus dedos en su piel.
-¿Qué... huff... huff... ¿Qué estás haciendo?- logró decir apenas la rubia.
Chusai no dijo nada. Ella sabía lo que estaba haciendo. Guió su polla contra su coño, presionando ligeramente contra el pequeño agujero. Samui se preparó mentalmente para la polla entrante, sabiendo que el tamaño que estaba a punto de tomar era uno que nunca olvidaría. Ella gimió de placer cuando Chusai empujó hacia adelante sin previo aviso, empujando su pene hasta la empuñadura sin detenerse. Su ingle chocó contra su trasero, que era tan flexible como sus pechos. Chusai se negó a darle tiempo a Samui para que se adaptara a su tamaño e inmediatamente comenzó a balancearse de un lado a otro. Sus manos jugaron con las nalgas de Samui, pellizcando y masajeando las mejillas carnosas. La cabeza de Samui estaba cubierta de sudor mientras apretaba los dientes tratando de contener un potente gemido. Sin embargo, poco a poco comenzó a acostumbrarse. Una vez que se acostumbró a la enorme polla, comenzó a empujar a Chusai, retomando el dominio perdido sobre él. Le había excitado mucho que Chusai la dominara, pero ella era alguien a quien le gustaba más dominar. Si acaso él lograba dominarla, pobre de él. Nunca lo dejaría ir.
Antes de darse cuenta, la mano de Samui había viajado a su clítoris, estimulando el botón duro. Chusai finalmente se aburrió un poco de su trasero, sin importar cuán increíble fuera. Voló sus manos hacia adelante, agarrando sus enormes tetas, haciéndolas hincharse. Incluso con las manos en los montículos, todavía se balanceaban furiosamente en línea con sus embestidas. Tiró de sus pezones, a lo que Samui respondió con gemidos aún más fuertes que antes. Pronto, Chusai no pudo soportarlo más.
-¡Me voy a correr!- volvió a anunciar.
La kunoichi asintió.
-¡Yo también!- comentó ella
Ambos gritaron cuando llegaron al clímax. El coño de Samui agarró la polla de Chusai aún más fuerte, ordeñándolo hasta dejarlo seco. El nacido en Kumo la sintió chorrear contra su polla mientras liberaba su semilla, enviándole directamente al útero de Samui. El rubio se retiró cuando había derramado todo y ambos tuvieron que recuperar el aliento antes de hablar.
-Eres el mejor amante que he tenido- comentó ella- es una lastima que no seas un ninja, estoy segura que a estás alturas serías Jounin y podrías darle a Darui una carrera por su dinero.
-No me gusta esa vida- negó nuevamente Chusai- me puedo defender bien sin las artes ninjas y estoy haciendo finalmente avances en mis objetivos. Díganle al Raikage que si me deja en paz, no haré nada para importunarlo. Si me deja a mi y a los amigos que tengo.
-Le daré el mensaje- Asintió ella- pero no sé lo va a tomar bien.
-Me tiene sin cuidado- se encogió de hombros Chusai.
-¿Sabes algo?- comentó Samui poniéndose cachonda de nuevo- tengo debilidad por los chicos malos.
-Y yo por las mujeres rubias y tetonas- comentó Chusai.
En este momento no eran enemigos, eran dos personas que querían pasar un agradable rato más.
Ninguno de ellos se dió cuenta que Mabui los había visto. Y también no se dieron cuenta que ella sintió su corazón romperse.
"Entonces, aún te amo" pensó ella al entender que se sintió así por seguir amando a su antiguo amigo.
Quizás si le hubiera dicho porque ella quería que él sea shinobi, esto no habría pasado. Lastima que no fue capaz de arriesgarse.
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Con Yugito.
El aire es pesado en comparación al de su hogar, pero también es muy nítido y claro, mucho más limpio que el aire del País del Hierro, Iwa o Kiri. La claridad con la que se pueden ver las estrellas desde los oscuros cielos nocturnos de Konoha solo tiene rival en Suna y Kumo.
La joven está sentada en un techo, sus piernas largas y esbeltas se levantan hasta el pecho mientras parpadea con ojos brillantes a las constelaciones que se forman, apenas visibles por el sol poniente.
Fue un largo día en el restaurante donde ella estaba encubierta; pero valía mucho la pena estar ahí, alejada de los ceños fruncidos de su aldea, celosa de ver qué edad expresiones no eran dirigidas a Bee, en gran parte por ser hermano del Raikage.
Su madre, cuyo nombre le dijeron que era Miyuki, murió al darla a luz. Su padre, Toshihiro, era el segundo al mando en la época del Sandaime Raikage; él murió poco después de que ella naciera. Le dicen que se parece a su padre. Se pregunta si, quizás, su padre no hubiera muerto y su clan no se hubiera arruinado, si su vida hubiera sido mejor. Ella piensa que tal vez lo hubiera sido.
Nii Yugito tenía dos años cuando el Nibi fue transferido a ella en Kumogakure. Fue arrancada de los brazos de su niñera en la oscuridad de la noche en el más absoluto secreto. Usando la sangre de un aldeano, la niña tenía dos años cuando se convirtió en jinchūriki, gritando por su niñera mientras el dolor del sello quemando su piel la abrumaba.
El Yondaime había pensado que la posición social del joven Yugito sería suficiente para protegerla de la burla y el tormento infligido a otros jinchūriki. El Yondaime era joven e inexperto cuando tomó esa decisión, y siempre fue un tonto cuando se trataba de asuntos de la naturaleza humana.
Yugito se estremeció como siempre cuando pensó en el sellado, su primer recuerdo real, toqueteando las cuentas azul tiza en su brazo, sintiendo el dolor palpitando alrededor de su garganta blanca.
Su bijū ha recibido muchos nombres. Neko, bakeneko, ikiryō... Pero Yugito llama al bijū por el nombre con el que se refiere a sí mismo. Matatabi. El verdadero nombre del nekomata le había sido revelado por ella misma cuando cumplió seis años, como regalo de cumpleaños.
Tan pronto como tuvo la edad suficiente, a Yugito se le dio un lugar en la casa del Raikage. Junto con el entrenamiento shinobi habitual, recibió un entrenamiento riguroso para controlar a la nekomata y entreno para convertirse en miembro de la guardia personal del Raikage, la élite ANBU. Ella nunca estuvo en un equipo con otros genin; su mentor fue el mismo Raikage. Sin embargo, el entrenamiento que Yugito detestaba más era cómo infiltrarse, y le da vergüenza admitir que alguna vez tuvo que tomar un particular entrenamiento, el como ser una dama de compañía; lo único que ella realmente disfrutó de ese entrenamiento fue el arte del shamisen. Y esos regímenes de entrenamiento han dado resultados en su capacidad para ejercer control sobre Nibi y su capacidad para asistir a cenas de estado sin ser la vergüenza de Kumogakure.
Yugito suspira, mirando con ojos rasgados el cielo vespertino color lavanda pálido. Desearía tener el shamisen con ella en ese momento para poder tocarlo, las suaves notas la tranquilizan, pero en un momento recupera la cordura y sabe por qué ya no lo lleva al techo con ella, por qué se le relaciona demasiado a Kumo y al País del rayo el instrumento y ella dijo que no es de ahí. No puedo tocar esos tres hilos de seda en público.
Yugito es exquisitamente hábil con el shamisen, pero los sonidos tienden a atraer a una multitud, y Yugito no está preparada para lidiar con aldeanos enojados que se burlan de las dulces notas de su shamisen, denunciando como su arte como "los maullidos agonizantes de un pobre gato" .
La rubia piensa con una sonrisa en esa ironía , le gustaría ver lo que esas personas dirían si vieran lo que ella es capaz de hacer con un tipo que realmente le ha cabreado.
Siempre se garantiza que la vida de un jinchūriki será dura; soledad todos los días de tu vida, sin absolutamente nadie que realmente entienda tu dolor... Y la mayoría ni siquiera lo intenta.
Para sus adentros, la rubia jamás niega que está intensamente amargada por su destino como carcelera bijū. Ella no niega que, aunque cualquier sentimiento de odio que tenía hacia el Yondaime se acabó hace mucho tiempo, todavía está resentida con él por haberle hecho esto... solo un poco. Ella no niega que las noches solitarias son largas y duras, llenas de extraños sueños de consuelo de la Nekomata.
La mayoría de los aldeanos la temen y la odian; cuando Yugito era pequeña, tenía que preocuparse por el asesino intermitente que se colaba en su opulenta pero espartana habitación encalada en la oscuridad de la noche. Ella puede ver el temor en sus ojos y retrocede ante ello.
Aquellos que no la temen la tratan con un frío respeto, reconociéndola como la hija de su padre (después de todo, ella es su viva imagen), llamándola Nii-sama, Lady Nii.
El Raikage es un poco mejor. Aunque él la trata con un respeto distante (dependiendo de su estado de ánimo, ella es Yugito-san, Yugito o Nii-san para él; los sirvientes y el consejo jonin hacen lo mismo), es mucho mejor que las poderosas emociones negativas de los aldeanos, y está claro que él no le muestra aborrecimiento.
De hecho, le permitió a veces, dar clases en la naciente academia shinobi de la aldea.
Por supuesto, los estudiantes de la academia que entrena/aterroriza regularmente tienen una relación de amor/odio decididamente tempestuosa con ella. Yugito se niega a creer que esto es por sus propios méritos; en cambio, está segura de que no tienen idea de quién es exactamente, a pesar de que todos se refieren a ella como Nii-san o Neko-san, un nombre derivado de su comportamiento ligeramente felino.
Pero Yugito no es tonta. Ella sabe que su suerte, aunque no buena de ninguna manera, podría ser mucho, mucho peor. Ella sabe que si la atacaran y se la llevaran mañana, a nadie más que al Raikage le importaría. Pero ella sabe cómo se trata al menos a otros dos jinchūriki.
Ha estado viendo casi de primera mano el ejemplo de Naruto en Konoha, aunque aclamado como un héroe por el Yondaime Hokage en sus momentos finales, es odiado por los aldeanos. Ella sabe que cuando era niño, varios descatados ANBU tenían que seguirlo casi constantemente para evitar que alguna turba lo matara.
Yugito sabe que el destino del Jinchuriki de Suna es aún peor, aunque sea el hijo de Kazekage. Ella sabe que él es atormentado y condenado al ostracismo diariamente por quienes lo rodean; incluso la rubia está enterada de la traición del tío del niño, quien decía amarlo y luego trató de matarlo, junto con una soledad insoportable (un estado de ser que Yugito conoce muy bien) ha llevado a Gaara (el nombre del chico) por el camino de la locura.
Y por supuesto, también están los rumores sobre la mocosa de Taki….
Entonces sí, Yugito tiene muchos ejemplos de cómo su suerte podría haber sido peor.
Las pupilas de los ojos rasgados, brillantes y resplandecientes de color azul plateado de Yugito comienzan a redondearse y oscurecerse. Con un jinchūriki, siempre hay algún marcador físico.
Debido a que a Gaara de Suna le implantaron el Ichibi mientras aún estaba en el útero (y Yugito está seguro de que no quiere saber cómo lograron eso ), muestra todos los marcadores físicos de un anfitrión Ichibi, incluido el más prominente. ojos bordeados de negro.
No hay base para cómo se vería el anfitrión Kyuubi con todos los marcadores físicos, pero dado que Naruto, el primer jinchūriki del Kyuubi (Recuerden que la gente en general cree que Naruto es el primer jinchūriki de Kurama, ignorando que Kushina y Mito también lo fueron), tenía el Kitsune sellado dentro de él no más de dos horas después de nacer, se supone que el sellado natal del Kyuubi produciría muchos más marcadores físicos que simplemente seis marcas de bigotes con forma de cicatriz que se extienden por sus mejillas todavía redondas como las de un bebé.
Al igual que Naruto, Yugito es la primer guardián de su anfitrión (solo el Shukaku ha tenido jinchūriki regulares y ella es la primera mujer Jinchuriki de Matatabi, algo que incluso ella le confirmo), por lo que los encargados no están seguros de cuántos marcadores físicos habría tenido si el Nibi hubiera sido sellado dentro de ella antes de su nacimiento.
Tal como está, posee la aguda vista del gato, con sus pupilas dilatadas y el tapetum lucidum que hace que sus ojos brillen como faros cuando la luz se refleja en ellos, lo que hace que las misiones de asesinato sean problemáticas (Afortunadamente, los enemigos generalmente solo ven sus ojos y suponen que es un gato). No está bendecida con la audición avanzada y el sentido del olfato de un gato, pero tiene ese extraño sexto sentido que le permite saber de los ataques antes de que lleguen, y como todos los gatos, Yugito siempre cae de pie.
Aún así, ella se enfrenta al mundo con la barbilla levantada y la mirada al frente. Se comporta con la gracia somnolienta de un gato, sus movimientos fluidos se consideran demasiado suaves para ser humanos. Aunque no es sociable de ninguna manera y, de hecho, es bastante reticente y reservada, y nuevamente muestra una actitud distante como la de un gato, nunca se esfuerza por ser grosera con nadie. A diferencia de algunos jinchūriki, nunca ha habido incidentes de muerte a manos de ella cuando era niña debido a la falta de control sobre el poder del bijū.
Aunque todos alrededor de Yugito pueden tratarla como un monstruo, ella no cree que esto le dé la licencia para comportarse como tal. Tiene pocas ilusiones de que alguna vez ganará el amor y/o el respeto de los aldeanos (¡sería feliz si ellos simplemente la trataran como a un ser humano!), Yugito sabe que debe intentarlo. Ayuda que, aunque ha desarrollado un gusto por el sabor de la sangre a lo largo de los años, Yugito nunca ha tenido antojos por ella, y no está dispuesta a dejarlo ir y destruirlo todo, como otros jinchūriki han intentado...
La luna resplandece y brilla como los ojos de Yugito, o como la piscina perfectamente redonda de la casa donde vivió de niña (paredes encaladas teñidas de un suave tono azul por la forma de las ventanas y la falta de iluminación).
Una leve sonrisa adorna el delgado rostro de Yugito, ella se recuesta en el techo, sus brazos sostienen su cabeza, cierra los ojos y sueña…. Con la persona que le defendió ese día del casi exitoso que estuvo a nada de terminar su vida.
Es una lastima que Ryoku Asai no sea de Kumo. Está segura por su sexto sentido, que habría sido a estás alturas su pareja.
Lastima que ambos nacieron en la tierra equivocada.
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Con Tayuya.
Lo admitió muy dentro de ella, Konoha era un lugar hermoso.
Tayuya había cuido mucho el mantener al mínimo la interacción social en la misión, pero como artista que era (o se consideraba, ya que ella se veía más como una flautista que una kunoichi), siempre estaba más predispuesta a sentir y ver las cosas con cierto ángulo que los demás no hacían.
Así pues, admitía que las calles estaban bien diseñadas, el monumento Hokage era estéticamente hablando, imponente y sobrio y se respiraba una calma y tranquilidad que ella jamás había sentido en su vida.
Es difícil pensar que un lugar así sería el sitio de dónde alguien como Orochimaru venía.
"Y pensar que si se sale Orochimaru con la suya, a este lugar se lo va a cargar la 🐬" pensó oscuramente Tayuya.
Pero, se sacudió esa idea, no era su asunto. Y para alejar eso de su mente, incluso recordó la teoría de su mamá, esa donde estos jodidos abraza árboles también fueron culpables de la destrucción de su hogar.
Después de todo, solo un Uzumaki podía contener al Kyubi y si Uzu caía, teniendo a la hija de Asahina Uzumaki con ellos, estaba garantizado (tontos, se necesitaba más que cuatro grandes aldeas para barrerlos del mapa por completo) que Uzu no sería un impedimento para tener de su lado alguien capaz de albergar a tan poderoso ser.
Que negará Konoha tener Jinchuriki y también el repentino ataque del Kyubi quería decir que ella tenía una esperanza de tener de su lado a su primer pariente
Solo un Uzumaki puede contener al Kyubi.
Y según los rumores, Namikaze Minato lo había derrotado.
Tayuya sabía que aquí afuera, en esta aldea de mierda tenía un pariente que seguramente estaba adoctrinado para servir a un amo desgraciado.
"No en mi guardia perras" se juró a sí misma"
Que bueno que no le dió su verdadero apellido a Orochimaru.
Y corte.
De transición también, hay una razón para mostrar eso, conforme avance la trama verán porque era relevante.
Todavía nos faltan dos más por mostrar antes de los exámenes chunin.
Mejor dicho tres.
No hemos visto la reacción de Sasuke, Shikamaru y Chouji con relación a Ino.
Y obviamente, eso también será relevante a futuro.
Ya saben, dejenme su review, así no solo me animan a escribir, habrá retro alimentación entre nosotros.
