Los moradores del abismo.
Ya saben, lo de la disgrafia, disculpas por los teclazos y horrores del auto corrector.
Y recuerden, Naruto y sus personajes son propiedad de Kishimoto sensei
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Se las debo, han pasado 87 años, solo puedo decirle a mis lectores que este fic al que le tengo cariño, se termina porque se termina. Y es una promesa.
Ruinas del antiguo palacio, mientras Yugi y las niñas están jugando.
Monzaemon, Bakuramon y Antiramon estaban luchando contra los samurái y los shinobi estacionados en las ruinas. Y en honor a la verdad, el combate estaba siendo más encarnizado de lo que creían.
En el grupo que venía a investigar la destrucción de las ruinas, venían Chizuru, Benimaru y Ryo, quienes estaban luchando contra ellos, al principio, los seres creados por Yugi se habían hecho cargo de varios ANBU en su forma invisible, pero ante ellos, esa habilidad era un gasto inútil de energía, pues quedó claro que podían detectarlos a cabalidad. Además, los tres combatientes eran bastante fuertes y le estaban dando varios problemas al trío de seres que hasta ese momento, creían que no se toparian a un humano capaz de detenerlos.
Se equivocaron.
-¡Puño Trueno¡- golpeo Benimaru a Bakuramon en el pecho, dándole una potente descarga eléctrica a su oponente, al mismo tiempo que lo mandaba a comer muro.
-Mocoso insolente ¡Ya veras¡- grito furioso el ser mientras se sostenía el lugar donde fue golpeado, tras salir de un muro.
El la estaba pasando mal, al igual que los demás. Cómo Antiramon que estaba protegiendose del ataque de Chizuru, poniendo sus brazos en X.
-Son más fuertes de lo que pensaba- se quejo la coneja tras recibir a bocajarro, la técnica de viento- debemos de reagruparnos y escapar.
-Hablar por tí- se quejo Monzaemon tras alejar a Ryo que intento usar su movimiento de Taijutsu insignia en él- no voy a dejar que estos asquerosos humanos nos ganen.
-El oso tiene razón- concordó el mono- no pienso retirarme hasta haberlos matado a todos.
-Nuestra ama está cerca- apelo Antiramon a la razón- supongo que más de estos humanos también, esos tipos raros nos lo advirtieron, hay sujetos capaces de vencernos. Esta es la prueba de ello. Si no regresamos, la ama estará desprotegida.
-¡Ah, no¡- se preparó Ryo para atacar antes de que escapen- no los vamos a dejar irse tan fácilmente.
-¡Udra!- lanzó Benimaru su mejor técnica.
-Vendaval de navajas.
-Cañon de plasma- siguieron su ejemplo sus amigos.
Los tres seres recibieron el golpe de lleno y lo recibieron mal. Tras el impacto, el oso de felpa viviente parecía que había vivido días mejores, uno de sus ojos de botón apenas colgaba de una de sus costuras, mientras que uno de sus brazos colgaba apenas, inerte , tras recibir de lleno el golpe de Benimaru.
Antiramon no estaba mejor que su compañero, al contrario, ella tenía mutilaciones visibles en el cuerpo, le faltaba un ojo y la oreja del lado contrafio y una de sus piernas parecía que había pasado por un molino de carnes.
Bakuramon era el más entero de los tres, por así decirlo, pero tenía un enorme Boquete en el centro de su cuerpo y parecía que un atizador gigante lo había atravesado y cauterizado la herida en el proceso.
Estaban mal, pero aún podían pelear medianamente bien entre los tres por lo que se lanzaron un vez más a pelear contra sus oponentes.
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Mientras esa pelea se estaba dando, Yugi estaba dándose la divertida de su vida en compañía de las dos niñas.
Aunque un poco más apartada, Tsume y Shirona sonrieron al ver a las dos jugar con una nueva amiguita, validando su decisión de jugar lejos de la aldea. Aunque ambas niñas eran muy amigas una de la otra, realmente tenían un círculo social bastante limitado.
Rin era la única Inuzuka en su rango de edad, ya que los miembros del clan de forma increíble, habían estado en una suerte de limbo de fertilidad. No nació durante al menos casi tres años un solo niño de su clan, lo que hacía susurrar a varios zoquetes que la "niña demonio" mostraba una suerte de piedad morbosa al dejar sin descendientes al clan que la acogió para que se fuera en una lenta, pero no tan cruel agonía como seguramente planeaba hacerlo la otra "mocosa maldita" al estar el clan de Ino en un limbo similar.
Pero, casi a dos años y medio de esa suerte de maldición, la prima de Tsume, Sango rompió con esa "maldición" al embarazarse y nueve meses después dar a luz a un hermoso niño al que llamaron Shippo, que crecía fuerte y sano, según las visitas al pediatra.
Y lo mismo con los otros seis niños que desde entonces habían estado naciendo.
Mismo caso en el clan Yamanaka. Lo que claramente no era una coincidencia.
Aunque claro está, no es algo que se viera como una maldición, si mirabas fríamente los hechos.
Durante casi tres años su clan estaba maldito, no….. era una forma de desviar la culpa colectiva a pocos cuando era de muchos. Tsume y Shirona vieron como una bendición disfrazada de tragedia que no hubiera habido concepción en la situación tan desesperada que sus clanes estaban viviendo, como toda la aldea. Claro, los clanes que no hicieron nada malo al Uzumaki no fueron golpeados tan severamente por la lluvia maldita, pero aún así, también padecieron los efectos, al pasar hambre y tener que comprar todo más cargado debido a la mala sangre que surgió hacía la aldea. En esa situación, la Matriarca Inuzuka no envidiaba los racionamientos de víveres que clanes como el Hyuga o el Aburame (lo mismo pensaba Shirona con sus clanes hermanos) hicieron incluso entre los bebés que iban naciendo. El servicio de matronas se volvió vital muchas veces, dando una suerte de privilegios a algunas personas como su amiga Kiyomi Aburame o a Mei Hyuga que de esa forma logró salvar a sus hijas de ser miembros de la rama secundaria, al pactar ser matrona de varios niños de la rama principal, con la condición de que sus mellizas de dos años no fueran agregadas más adelante a la rama secundaria. Y aunque al consejo Hyuga la idea no le agrado nada, Hiashi calló los temores de la mujer al jurar sobre la tumba de Hanamei Hyuga, su propia esposa, que el acuerdo se cumpliría.
Los pensamientos de todos se interrumpieron cuando una poderosa explosión en dirección de la zona arqueológica se dejó ver y sentir en el horizonte. Seguida de las poderosas presencias de Bakuramon y los demás, antes de apagarse de golpe, pero dejando muy intranquilas a ambas matriarcas que llamaron a sus hijas para irse, no sin antes buscar a quien había traído a Yugi a jugar al parque.
La niña simplemente se dirigió al este, al tiempo que de algún lado, salió un joven que se parecía a ella y que le tomo de la mano para llevarsela de ahí, de mala gana, ella se despidió de sus amigas, haciendo la promesa de que alguna vez volverían a jugar juntas.
Una promesa de meñique más tarde (que se le explicó a la rubia pálida que eso la hacía inquebrantable), la demonio salía del pueblo sin mirar atrás y sin extrañar a esos incompetentes que interrumpieron el momento más feliz de su vida. Que bueno que algo los mato, le ahorraron la molestia de hacerlo ella misma.
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Uzu. Santuario.
-Un tiburón de cristal- medito Aioros el informe que Kanon le había mostrado- recuerdo haberme enfrentado a alguien así hace tiempo, bueno, una mujer que usaba el elemento cristal. ¿No creerá que..?
-Tomando en cuenta el tipo de enemigo al que nos enfrentamos, lo creo- afirmó el patriarca- si es ella, es preocupante, era hábil con sus conocimientos de manipulación de chakra, una confiable "mano" de Orochimaru. Ahora que sabe usar cosmos, hay que tener en cuenta que se volvió más peligrosas gracias a su experiencia.
-Y sus deseos de venganza- admitió el caballero dorado- ¿ya saben esto Naruto y los demás?
-Les avisaré más adelante- admitió el peliazul- primero necesitaba que confirmaras la identidad de esa demonio. Ahora debemos estar en alerta ante cualquier posible ataque de ella y los demás demonios.
En eso, entro Shion, la sacerdotisa de Hestia en el santuario, la adolescente rubia y con un bastante sospechoso parecido a Hinata Hyuga, lucía preocupada por los acontecimientos que acababa de ver.
-Kanon Sama, hay algo que es de suma importancia que vea- le llamo Shion, sosteniendo una copa de oro, dentro de esta, había muchos huesos pequeños, sumamente limpios, pese a lo "añejos" que se veían- estaba consultando al oráculo y me está enseñando un horrible vaticinio.
-Eso es de preocuparse- admitió el ex caballero de Géminis- ¿Qué dice?
-Eso es lo más extraño- tomo la copa y en un ágil y elegante movimiento, arrojó su contenido al suelo, recogió los huesos y repitió dos veces más el procedimiento, llenando de temor a Kanon y a Aioros.
Ellos no tenían la puta idea de cómo leer esa clase de oráculos, pero sí sabían reconocer patrones y lo que vieron era irrefutable. En las tres veces que Shion usó los huesos de palomas blancas, estos siempre mostraron exactamente el mismo patrón, cambiando únicamente la dirección en que se ubican, más por qué Shion se movía cada vez que recogía los huesos para usarlos que por otra razón.
-¿Qué significa eso?- preguntó el patriarca.
-Que nuestro mundo será destruido por los moradores del abismo- vaticinó fríamente la rubia- un mal tan antiguo y poderoso que incluso Lucifer y los demás Dioses y otros seres temen.
-¿Un enemigo más poderoso que Lucifer?- se atragantó el caballero de Caballo.
-Por eso estoy confundida- admitió Shion- claramente dice que una vez que aquella que anhela lo que jamás ha tenido pueda obtenerlo, el caos y la destrucción se abrirán paso por el mundo y que nada de lo que hagamos podrá parar al mal que caerá en el mundo.
-Que Yugi haya escapado de su prisión no puede ser una coincidencia- meditó en voz alta Kanon- pero no sé y creo que tú también, es cómo encaja ella en esto.
Shion asintió a lo dicho por su par y añadió.
-También no creo que sea coincidencia- afirmó- algo está sucediendo aquí que me hace pensar que estamos apunto de vivir un horror, un horror más allá de lo creíble.
Kanon y Aioros se miraron incómodos, Shion siempre tenía la razón en estas cosas, si ella decía que algo muy malo venía, es que era verdad. Y eso era lo preocupante. Un mal que incluso el príncipe del infierno tenía miedo de enfrentar no era algo para tomar a la ligera.
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Ubicación desconocida, con Guren.
La tiburón humanoide sujeto entre su poderosa y relativamente humana boca, las ligas que cortaban su circulación, para poderse aplicar la morfina que calmaba sus dolores.
El cuerpo que tomó vivía en una eterna agonía, lo que hacía difícil las labores más sencillas, pero ella aún así pensaba cumplir sus deberes. Asmodeo le prometió venganza hacia quienes le arrebataron su vida y la de su señor, que una vez que ellos se hicieran con el mundo, sus ambiciones se cumplirían. Y aunque dependía de ellos para poder sacar a Orochimaru de los pozos más profundos del abismo, se sentía optimista por ello.
Según le explicó uno de los Demonios que eran compañeros de ella, al asimilar totalmente el cuerpo que poseía, los dolores y la posible adicción a la morfina se irían y sería más fácil para ella moverse.
La tiburón no pudo evitar sonreír divertida, los Demonios en sus creencias llegaban a ser buenos, aunque no era la norma, pero estas criaturas tenían una suerte de dualidad. Podían ser crueles con los humanos y animales, pero se cuidaban bien entre ellos. Claro, había oído historias de unos cuantos traidores que tenían sus filas que fueron castigados duramente, pero eran la excepción a la regla. Y eso era lo que le daba esperanza. Una de las primeras cosas que cambiaron en ella que noto, además de su figura, fue que perdió su capacidad para mentir. Y era algo que ninguno de los Demonios podía hacer, sabiendo eso, ella confiaba plenamente en que Asmodeo no la usaba para descartar su apoyo a la menor oportunidad, el trato sería honrado y era lo que importaba.
Una vez que la morfina hizo efecto, Gusten camino tranquilamente por la playa en la que estaba estacionada, en el país del Mar, y sintió el olor de su comida, dos pescadores ebrios que claramente iban al bar más cercano y que a estas alturas del día pensaban iniciar la juerga. Eso le serviría.
Una vez que se comió a ambos tras saltar sobre ellos y empalarlos con lanzas de cristal que salieron del suelo arenoso, Guren regreso a la cueva dónde estaba viviendo en lo que la asimilación de su nuevo cuerpo terminaba de suceder. Una vez que le dieran luz verde, ella tenía la labor de ser la guarda espaldas de una princesa demonio que estaba siendo rescatada de sus enemigos, los caballeros dorados.
Ella no podía esperar a estar bien y hacerlos pedazos. Y al hacerlo, estar más cerca de cumplir su meta.
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Con Yugi, más tarde.
-Estupidos muñecos, estúpidas mujeres- mascullaba Yugi, mientras pateaba piedras en el camino a una cueva que tenía dentro de ella un templo antiguo que ella pensaba usar como alojamiento en lo que recuperaba fuerza. Aunque podía comer alimentos terrenales, ella necesitaba otra clase de comida, a saber la vida de un ser vivo y ella se negaba rotundamente a aspirar la vida de los animales. Instintivamente sabía que ganaría algunos años si lo hacía con la de un humano, por lo que debía de contentarse con la vida de las plantas que no era tan sustancial para ella. Dejando a su camino, una estela de árboles marchitos y podridos que no habían hecho realmente mucho por alimentarla. Básicamente era el equivalente a solo desayunar y llenar el estómago con arcilla para no sentir hambre. Se sentía satisfecha, pero no estaba a plena capacidad. Menos aún, si tomamos en cuenta que había estado sellada eones.
Seguía pateando piedras, mientras su nuevo sirviente, a quien llamo Raziel, la miraba sin decirle nada, cuando pateó una piedrita brillante que llamo su atención.
Era una piedra preciosa o parecía serlo, de unos cinco centímetros de alto y en su parte más ancha media solo dos, tenía forma de semilla de uva, de color rojo granate, y parecía que había sido pulida de una piedra preciosa, pues era sumamente lisa al tacto y tan caliente, que parecía estar viva.
Yugi tomo la piedra preciosa entre sus manos y al hacerlo pudo oír claramente una voz, provenir de la semilla.
-Parece que estás sola en este mundo- le dijo la voz- puedo cumplir cualquier deseo que quieras o mejor dicho, darte la información y el impulso para lograr aquello que más quieres en el mundo. Solo tienes que consumir esta semilla del Caos y al hacerlo, las puertas que retienen a tu más grande sueño serán abiertas para que puedas hacerlo realidad.
-¿Cuál es la trampa?- pregunto cautelosa Yugi.
-Solo tendrás que abrir una puerta, eso es todo- admitió la voz- pero es un precio muy bajo por la felicidad, ¿No crees?
Parece ser que lo creía, pues se pasó la semilla, sin llegar a oír la risotada maligna que la voz había soltado.
"Tonta. Una vez que tú estúpido sueño se cumpla, mis tropas entrarán en tu mundo y lo consumirán por completo"
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Konoha, dos días después.
La noticia de la aparición de unos demonios en las ruinas y de su derrota a manos de Chizuru, Benimaru y Ryu fue ampliamente conocida por toda la aldea y el país del fuego en su conjunto. El Yondaime Raikage casi se había visto obligado a llamar a una cumbre Kage debido a los problemas que experimento en su país debido a la presencia de esos seres, al igual que otras naciones como el País de la Tierra, pero eso sería admitir debilidad y él no iba dejar que piensen eso de él.
Menos aún, cuando los alumnos de los caballeros dorados aniquilaron a esos seres que en opinión de varios, no eran demonios, pero claramente servían a uno y bastante poderoso, si el nivel de poder de esos seres era una indicación.
Chizuru y los demás, apenas y habían sobrevivido a la pelea y por lo que Kanon les trajo sobre la posible identidad del amo, incluso se necesitaría de un par de caballeros dorados al menos, para poder detener a la demonio Yugi. Un demonio que había inspirado toda una serie de leyendas, si las palabras de la jefa de Encriptado eran verdad, al hacer memoria y corroborar una serie de cuentos populares que tenían al menos un milenio de antigüedad y hablaban de un gran mal que la reina que venía de las estrellas, pudo derrotar mandando al olvido a ese ser.
Por ello, Shikaku Nara, Inoichi Yamanaka e Ibiki Morino estaban en la oficina de Tsunade, que en compañía de Shizune y de Koharu, leían cada uno de ellos, la copia del extenso informe que el equipo ANBU que llegó a escena después de que la perla acabo.
La ruinas fueron demolidas por esos seres, que tenian un enorme poder destructivo. No solo eso, se necesito de mucho poder de Tiro de parte de Chizuru , Benimaru y Ryo para detenerlos. Y desafortunadamente, esos seres eran inmunes a las cenizas sagradas.
-No me sorprende tanto- termino de leer Koharu- las leyendas dicen que Yugi podía crear seres de la nada. Técnicamente no son demonios, así que era muy posible que las cenizas no les hicieran nada.
-Pero eso podría ser aprovechado por Iwa y Kumo- comenzó a hilar la situación el Nara- aunque fue una victoria para nosotros, la ineficacia de nuestra principal arma para esta guerra, les da un punto de apoyo para desacreditar la alianza y también a cada líder en ella. Si esa arma falla, ¿Que impide que otra cosa sobre la que teníamos certeza no lo haga?
-¿Dudas de nuestros aliados?- pregunto en un tono muy peligroso la Sanin que era en secreto, la Potestad de esta nación.
Viendo el peligro a la cara, Shikaku elaboró mejor sus palabras.
-No se trata de eso, Hokage Sama, solo estoy señalando que los demás Kage usarán esto para hacer un frente común alternativo al nuestro para combatir la amenaza que los demonios representan. Y si no hacemos algo para controlar los daños, estaríamos peleando a dos frentes una guerra.
-En momentos así, eso de que "Quien no conoce la historia, está condenado a repetirla" es una afirmación muy exacta de la situación- negó en decepción Shizune- es muy famosa entre los antiguos caballeros de Athena, la historia de como Hades y unos pocos dioses del Inframundo y de otras deidades, hicieron frente solos a Lucifer, porque los demás dioses no creían en la amenaza o que ellos podían detener el avance del Principe de las tinieblas. Y ahora estás sugiriendo que además de preparar todo para una batalla inminente, debemos luchar también contra los antiguos enemigos que ven esto como una oportunidad de ganar prestigio sobre nosotros. Arrogancia en su máximo esplendor.
-No me gusta admitir eso- dijo muy incómodo el Nara- pero somos shinobi y es así como se hacen las cosas. Dejar pasar eso, solo fortaleze más a nuestros antiguos enemigos y debemos pensar las cosas como si esta guerra la tuviéramos ganada. Si es tan terrible como la pintan, si Kumo e Iwa no pelean. Me temo que lo primero que harán, será intentar someter a Suna, Konoha y Kiri. Y no sabemos que será de Uzu, así que debemos pensar en esa posibilidad.
-Entiendo eso- cruzó las manos la Senju y descansó su mentón en ellas- no pensar en ello, básicamente es rendirnos. No me gusta lo que planteas, pero es posible.¿ Alguna sugerencia?
-Lady Tsunade ….- intentó protestar la ex Caballero de plata, pero no la dejo su sensei.
-Tienes esperanza- la interrumpió - es una manera deprimente de ver las cosas, pero aún así, cree que podemos ganar. Y no pienso ir por ahí, aplastando eso. Mientras creamos que hay manera de ganar esto, hay una muy alta posibilidad de hacerlo y eso es lo que cuenta. Por muy cuesta arriba que debamos pelear en dos frentes al mismo tiempo.
-En realidad son tres- interrumpió Tefiti, que apareció de súbito- acabo de detectar algo que es de extrema necesidad que se localicé y necesito pedirle a ustedes que envíen un mensaje a Uzu.
-¿No puede hacerlo directamente?- preguntó con una reverencia Inoichi. Shirona e Ino lo matarían si descubrían que le faltó el respeto a la diosa que ambas veneran.
-En circunstancias normales, debería poder ir Yo misma a advertirles- admitió Matsuri- pero estás no son circunstancias normales. Voy a intentar localizar esa anomalía y espero que nadie la haya encontrado. De ser así, nos espera una terrible batalla que debemos ganar a toda costa.
Todos notaron que estaba siendo muy vaga al respecto, por lo que Shikaku hizo la pregunta que flotaba en el aire.
-¿Exactamente a qué nos estamos enfrentando?
-Una semilla del Caos- respondió ominosamente Matsuri- no me queda la menor duda que alguien con los talentos de la suma sacerdotisa de Hestia en este mundo haya logrado ver el terrible mal que acaba de caer aquí, pero no creo que sepa exactamente la causa. Después de todo, las Semillas del Caos son un asunto muy serio. Pero tenemos una ventaja táctica o bendición disfrazada.
-¿Cuál sería esa?- Preguntó Ibiki que quería que la deidad dejara de darles largas acerca de que era eso a lo que estarían enfrentando.
-Incluso los demonios les temen a las Semillas del Caos- sentenció Matsuri- ellos quizás la busquen, pero no van a usarla, ninguno de ellos está tan loco como para involucrar en sus planes a La cabra loca, el zoquete o el cara de ceviche de pulpo.
-¿Puede dejar de ser vaga y decirnos que es a lo que tiene miedo?- Preguntó ya enojado el Morino- ¿Que es esa Semilla del Caos y porque le teme tanto?
Matsuri solo suspiro y tras hacerlo, adoptó un aire más serio, más del que ya tenía y respondió simplemente:
-Es un horror, un horror más allá de lo imaginable- respondió, con un escalofrío recorriendo todo su ser, luego de pensar la mejor manera de resumir lo que temia tanto.
-Me alegro de que preguntarás- intento hacer una broma Shikaku.
-Las semillas del caos son como su nombre lo indica, semillas, parecen estar hechas de gemas, pero no es así, están hechas de energía del caos en su estado más puro y tienen la virtud de darte el conocimiento y el poder de hacer realidad tu más profundo sueño.
-Si eso es así, ¿Que tiene de malo y porque los Demonios incluso le tendrían miedo a algo que podría serles útil?- no vio el porque del temor de la deidad del Océano Pacífico.
-La Semilla va consumiendo la existencia de quiénes la comen- aclaró la diosa- y si eso lo es suficiente, al consumir totalmente al usuario, una vez que cumple su sueño, el cuerpo del tipo, así como una serie de sacrificios y otros preparativos que el usuario hizo sin saber, abrirán un portal.
Tras el portal están los entes del Caos, seres repugnantes que solo desean destruir la creación de Orden y Caos, los seres primordiales que crearon todos los universos.
-Supongo que esos seres son muy poderosos- se estremeció Shikaku al entender una horrible verdad. Podía un demonio ser voluntario para que los suyos tengan el poder y el conocimiento de lograr sus planes, pero eso era irrelevante, si libera algo, algo que podría ser más poderoso que su señor y qué incluso este no fuera capaz de vencer.
-Lo son- admitió Matsuri- se dice que Yahave posiblemente sea el ser superiot más poderoso de nosotros y el no puede hacerle frente a los soldados poderosos, ya no digamos a los más fuertes de ellos. Solo hay un ser que podría hacerle frente, pero si él aparece, no hay garantía de que sobrevivamos.
-¿Porqué?- comenzó a asustarse Tsunade.
-Porque hay dos opciones para nuestro mundo una vez que Hatori acabe con la amenaza- dió a conocer de forma muy lúgubre la deidad- deja que nuestro mundo siga adelante, pero si la energía del caos contaminó demasiado el mundo, Hatori tiene el poder de destruir todo este mundo y borrarnos de la existencia.
Las muy contundentes palabras de la diosa fueron un balde de agua helada para los presentes, lo mismo en el Santuario dónde Shion les contó lo que su aliado de ese mundo, la deidad de las tormentas Susanoo les había revelado.
Debían encontrar lo antes posible a quien haya comido la semilla, o enfrentarian la aniquilación. Para su desgracia, quien la había comido era un ser muy poderoso que en la inocencia que le caracteriza, no sabía del peligro en el que había puesto al mundo.
Omake.
Uno pensaría que el infierno sería un lugar horrible con algunos castigos para ciertas personas, en base a los delitos que cometieron, eso si fueras Cristiano.
En el Shintoismo (para efectos de la narrativa) no era así, exactamente. Al morir, caminabas por una enorme pendiente de una colina, Yomotsu, y te arrojabas de cabeza ahí, al terminar de caer, llegabas al juzgado del Rey Enma, que tras ver tus actos más significativos, los buenos y malos, te enviaba al Infierno, un enorme rio de sangre dónde ogros te obligaban a mantenerte dentro de este para que sus agitadas aguas lavaran tu alma el tiempo que fuera necesario para que al volver a ser puro, pudieras regresar al mundo como un ser inferior y tras esa penitencia, volver nuevamente a nacer como un humano y que sea lo que tenga que ser.
O por el contrario, si te enviaban al mundo puro, ibas a una versión idealizada del mundo, una utopía dónde vivías a gusto en espera de tus seres queridos y tú turno para reencarnar.
Por ello, Sasuke Uchiha, el que en vida fue el penúltimo Uchiha vivo, veía con una suerte de deleite culposo, como lo hacían su padre, tío y primos que eran shinobi, a Tobirama Senju, seguir trabado en una llave de lucha con Madara Uchiha, cuya lucha solo se detuvo el día que Orochimaru había usando el Edo tensei y lo convocó al mundo de los vivos para ser usado como herramienta. Un breve descanso a la larga lucha que seguían sosteniendo desde entonces, para entretenimiento del Uchiha.
Luego de que Naruto lo asesino, había caminado por Yomotsu y había visto adelante de él a Ty Lee y a Tashigi, junto a la mayoría de los tipos que habían intentando llevarlo a Orochimaru, salvó a la puta de pelo rojo. Y como tenía buen oído, oyo a Enma condenar al una bella pelinaranja con ropa de miko, con ir al infierno por sus acciones, pero también oyo del pase al Mundo Puro de parte del juez para Ty Lee, ganado en mayor medida por sacrificar su vida para salvar a otro.
Al llegar su turno, el rey lo mando al infierno, algo que Sasuke no creía merecer, el intento hacer justicia para su clan, necesitaba poder y Orochimaru era el único que podía dárselo,¿Cómo se atrevía ese tipo a decirle que su búsqueda de poder lo llevo a cometer varios actos horribles y que era responsable de la muerte de Ty Lee y los otros, tanto como Orochimaru?
Eso en su opinión seguía siendo injusto.
Eso hasta que un día, cuando moviéndose por las aguas vio al Sanin y a su funda, así como a Danzō Shimura, oyó una voz que le decía que si se humillaba ante Lucifer, le sacaría de ahí y también le podían facilitar la venganza contra Itachi y quiénes lo habían agravado.
Claro está como todo Uchiha tenía su orgullo, no iba a humillarse tan fácil. Así que esa voz tuvo que subir la apuesta al asegurarle que podrían sacar a los demás Uchiha y llevarlos al paraíso que era su lugar legítimo a menos que ellos más adelante desearan regresar a la tierra de los vivos y tomar el lugar que realmente les corresponde. Eso sello el trato.
Una vez que se arrodilló y juro servir al señor del Inframundo, fue transportada su alma a una suerte de vacío donde le explicaron que cuando fuera el momento oportuno, regresaría al mundo con una misión que debia cumplir, la primera de muchas para que su bando ganará una larga guerra que conduciría a la conquista del Inframundo y del mundo material.
Y el Uchiha espero, en compañía de una mujer llamada Guren y de cuatro tipos más, yéndose la mujer pelipurpura primero.
Estaba impacientandose mucho cuando vio a Ami, una de sus antiguas fan girl, llegar a una suerte de altar improvisado que tenía en su honor.
A ojos de Ami, que no lo honraran por considerarlo traidor era una injusticia y así, al menos ella honró a su alma para que tenga el descanso eterno.
Sasuy sonrió satisfecho, esa tonta sería el medio por el cual renacería como demonio y comenzaría el primer paso para vengarse del dobe, Itachi y los caballeros dorados.
Y corte.
Varios meses después y vuelvo para dejar esto hasta el año que entra…..
Charros, que año tan horrible, sinceramente me costó sacar esto. Con la vibra deprimente que nos rodea y escribir de demonios y esas cosas….. no fue fácil, pero al menos ya está esto listo.
Espero que el próximo año sea mejor y que pueda atajar los meses de inactividad.
Nos vemos entonces en el 2021.
Ya saben, dejenme su review, así no solo me animan a escribir, habrá retro alimentación entre nosotros.