Guerra total.
Ya saben, lo de la disgrafia, disculpas por los teclazos y horrores del auto corrector.
Y recuerden, Naruto y sus personajes son propiedad de Kishimoto sensei
País del Hierro.
Nuevamente se hacía una reunión Kage, algo inédito dada la distancia entre ambas cumbres, finalmente, Iwa y Kumo se unian a la alianza para detener a los demonios, no es que fuera algo tarde para ello.
Al hacer el balance de sus fuerzas, estaba muy claro para Tsunade, Cocodrilo, Mei y Mifune, que en caso de sobrevivientes a la Guerra Santa, Kumo e Iwa dejarían de ser una de las ahora Tres grandes naciones shinobi.
Sus inútiles escaramuzas habian mermado considerablemente los Shinobi de ambas aldeas, dejando a Kumo con solo la mitad de los ninjas que tenía antes de la guerra mientras que Iwa sólo tenía al cuarenta por ciento de ellas.
Si les fuera extraordinariamente bien a ambas aldeas, perderían un tercio más de sus fuerzas y eso reduciría aún más su ya de por sí debilitado poder.
Eso no era relevante de momento. Pero debían archivarlo para cuando ganarán (si es que lo hacían) ya que podría ser un motivo de conflicto nuevamente.
Onoki y el Yondaime Raikage sabían perfectamente bien ese hecho, pero dado que los jodidos demonios lograron convencer a Hoshi, los restos de las Aldeas de las aguas termales, de Taki y del País del Cielo, así como de las Nadeshiko ahora demonizadas, estaban del lado de los invasores de otros mundos, eran la mejor adición militar a la alianza.
-Y bien- se permitió algo de Mezquindad el ex Espectro de Hades- ¿No se suponía que ambos podían hacerse cargo de las invasiones en sus respectivos Países?
-Pudrete Cocodrilo- le fulmino con la mirada Onoki- de acuerdo, no tenía idea del alcance del poder del enemigo al que los dioses invasores nos trajeron, pero no se me puede acusar de nada más.
-Nada más que ser Idiota- le recriminó Mei- Ahora que ya comprobaron lo que otros creímos, vienen ambos a pedir ayuda, una que de todos modos iban a recibir, he de agregar.
-No tenía manera de saber el alcance del enemigo- también se defendió A.
-Pero nosotros sí- dijeron a coro Cocodrilo y Kanon.
-He estado ahí, traté de advertirles eso- comentó Cocodrilo- pero eligieron subestimar la amenaza y este es el resultado.
Su estupidez hizo que varias naciones siguieran su ejemplo y las consecuencias se están pagando.
-Pero, no daremos culpas- cortó Kanon con un posible altercado- lo que pasó, la historia se hará cargo de juzgarlo. Lo que importa ahora es ver cómo esconder las llaves de la prisión demoníaca y también, como reconfigurar la cadena de mando de la alianza.
-Lo más Natural es que cada Kage sea un comandante- no vio problema alguno Onoki.
-En la teoría, sí- admitio Mifune- pero esta clase de conflicto es ajeno a la mayoría de nosotros. Lo ideal será que los Dioses guerreros y los caballeros dorados asuman esos puestos, entre ellos debe haber alguien que pueda ser de ayuda.
-Para fortuna de ustedes- intervino el Patriarca- hay miembros de cada Dios que está presente en este mundo que puede ser el representante de sus respectivos países para ser el comandante.
Yugito de Esfinge, Kurotsuchi de Sirena y Cocodrilo de Wendigo y Koharu de Aries Eso nos da cuatro comandantes, dejando a Kiri sin alguien de su país para comandar.
-Tsunami de Yuki onna es alguien muy apreciada en las fuerzas de Kiri- intervino nuevamente Mei- ella bien podría ser la comandante de nuestra fuerza militar. Entiendo que los kage seamos dejados de lado en eso, ya que no tenemos la misma experiencia que ellos.
"Es la ventaja de reencarnar con esos recuerdos" pensaba él Raikage a regañadientes. "Por otro lado, todos saben que pensaba nominar a Darui como sucesor natural y aún es bastante respetado en nuestra aldea… o lo que quede de ella.
Pensamientos similares de Onoki con respecto a su nieta.
-Y eso nos deja al comandante general de la alianza- observó Tsunade.
-Ese debe ser el Patriarca- intervino Cocodrilo- después de todo, les enviaron por algo aquí.
-Estoy de acuerdo- Asintienron Mei, Mifune y Tsunade casi de inmediato, evitando que el aludido pudiera protestar.
Si bien no era unanime su candidatura, Onoki y A sabían que no quedaba nadie más para eso.
Tendrían que ser meros soldados en una guerrera, algo que no habían sido hacia mucho tiempo.
-Con eso dicho- retomo Mifune- aún queda saber que paso con los Biju y sus respectivos Jinchuriki- explicó su sentir- salvó los dos Jinchuriki de Iwa, ninguna llave está en su poder, pero no sabemos que pase por la cabeza de los Biju. Podrían voltearnos bandera o sencillamente no ayudarnos en esta ocasión.
-Isobu obviamente está en shock, pero afortunadamente tiene gente que le quiere y eso ha suavizado mucho las cosas- admitio a regañadientes Mei, más por lo que debía decir ahora que por la simpática muchacha que consideraba una segunda hermana para ella- con respecto a Saiken…. Utakata no se ha podido comunicar con él por lo que es una incógnita.
-Shukaku es una amiga mía desde hace tiempo, esa revelación también la alteró, pero sin esa porquería de sello afectado su mente, por cariño a mi y a Gaara, dudo que nos traicione.
-Kurama también es una incógnita- siguió con el improvisado informe Tsunade- Naruto aún no ha podido hablar con él. Chomei por otro lado aunque está también impactada por la verdad, quiere a Fū casi como si fuera su hija, así que también está peleando por nosotros en esto.
-Yugito San comentó que Matatabi está dispuesta a pelear para finalmente completar la misión que tenían- agregó Kanon.
-Bee no se ha podido comunicar tampoco con el Hachibi…
-Gyuki- le corrigió Cocodrilo.
-Con el Biju- se negó A a ser corregido.
-Entonces tenemos dos Biju capturados, tres incógnitas y cuatro que si dicen estar de nuestra parte- Hizo el balance Mifune- creo que eso es una buena noticia, pero eso me deja con la duda de que haremos con los Jinchuriki.
-Deben estar confinados- comentó Onoki- son el objetivo del enemigo, sería una estupidez ponerlos en el campo de batalla.
-Eso es una completa estupidez- negó Mei- dos de los Jinchuriki son aprendices de caballero dorado y otra es una ex Espectro de Hades, son una fuerza a tener en cuenta como parte de esta alianza.
-Además, con las cenizas sagradas, se reduce bastante el poder del enemigo- recordó ese detalle Cocodrilo a los kage recién integrados a la Alianza- Gaara y los demás Jinchuriki que no están en esa lista bien pueden seguir siendo de utilidad. En cualquier caso, tenerlos escondidos es una perdida de recursos estratégicamente hablando.
-¿A qué te refieres?- Preguntó A.
-Necesitariamos tenerlos bajo custodia- explicó el Kazekage- eso quiere decir, destinar a personas físicamente aptas para el combate a mantener confinadas a personas físicamente aptas para el combate. Los Demonios solo necesitan ver eso y deducirán exactamente dónde atacar para arebatar fácilmente a cada una de las piezas de la llave que necesitan.
Tenerlos repartidos en el campo de batalla peleando, reducirá bastante las Posibilidades de que lo atrapen, a qué si están juntos.
-Eso y que recibirán más apoyo así- entendió la Senju.
-Concuerdo- dijeron a coro Kanon, Mei y Mifune.
Al final de la reunión, aunque Onoki y A no habían salido de ahí con la fuerza política que deseaban, al menos tenían lo que necesitaban.
La alianza sabía perfectamente bien que aunque de momento no se podría recuperar de golpe a Iwa o a Kumo, si era de vital importancia recuperarás, apenas le arrebataran el bastión que los Demonios habían asegurado primero.
Por lo tanto, las tropas se movería primero a Amegakure y el País de la Lluvia para recuperar esa nación y así poder ir recuperando algunos países no shinobi para poder voltear a Iwa primero y a Kumo después.
Otra cosa que se acordó era que habrían cinco comandantes y a su vez un comandante general, así como varios generales divididos en varias divisiones.
Comandante general de la Alianza: Kanon
Comandantes: Yugito, Tsunami, Kurotsuchi, Cocodrilo y Koharu.
General de la primera división: Mu
General de la segunda división: Aldebarán.
Comandante de la tercera división: Saga.
Comandante de la cuarta división: Máscara mortal.
Comandante de la quinta división….
Hasta llegar a los doce Caballeros dorados.
Comandante de la décimo tercera división: Shizune Katō.
Comandante de la décimo cuarta división: Sigfrid
Y también, cada división tendría un brigadier siendo estos:
Kurenai.
Bud
Sid
Mabui
Samui.
Fū
Naruto
Hinata
Tsunade
Hagen
Thor
Mime.
Y tambien se decidió poner a los demás usuarios de cosmos con armadura en los rangos inmediatos a los brigadier y después a los respectivos kages y a Mifune. Esto por supuesto que fue una patada en el orgullo del Raikage y del Tsuchikage, pero no había nada que hacer
En una guerra así, solo por el poder no estaban ni cerca para poder protestar aunque quisieran.
Y vaya que querían.
Así que, con eso dicho, ya podían empezar a estudiar una estrategia para poder recuperar Amegakure.
Y sobre los Dioses que ahí estaban, a saber, Matsuri y Darui, de momento, estarían como una suerte de respaldo.
Ellos eran la clave para usar un recurso que de momento se guardaban que podría poder la balanza aún más a su favor, pero que requería de toda su concentración y fuerza para ello.
Ojalá que ese recurso valiera la pena el tener a un dios sin pelear.
Amegakure.
Los demonios no estaban ociosos, aunque las cosas iban bastante bien, El Señor de las Moscas sabía que no debía confiarse.
Los humanos solían combatir aunque llevarán las de perder y también sabía que los dioses no estarían sin hacer nada en esta situación.
Como el mejor general de Lucifer, aún en ese frágil cuerpo creado para estar ahí, Belcebú podría planificar la guerra ahora y ya cuando tenga su verdadero cuerpo, cosechar los beneficios de su contribución de campaña.
Salió de sus pensamientos cuando Kushina llegó a darle su informe.
-Parece ser que al fin han decidido iniciar las hostilidades- explicó la Demonio pelirroja- piensan venir aquí a intentar recuperar Ame y también planean enviar a uno de sus brigadier a tratar de sellar a Yugi en una vasija.
-Guren por lo que veo, no ha tenido algún avance real- gruño el Gran señor Demonio.
-Por lo que entiendo, ella desconfía de los adultos de manera indistinta- medio excuso Kushina a su camarada- así que debe ganar su confianza primero y traerla al redil después.
-¿Sabes quién es la persona que tratará de sellar a Yugi?
-Si, lo sé- sonrió con satisfacción Kushina- es el guardián de uno de los fragmentos de la llave.
-Y viendo tu cara, ya se exactamente cuál de ellos- no necesito Belcebú saber quién era por boca de Kushina.
Hasta en eso era incapaz de mentir o mejor dicho, de ocultar quién era esa persona. Su lenguaje corporal era demasiado evidente.
-Enviare a Dayu, Decker y a tí a enfrentarlo- concedió parcialmente la petición que sabía le haría Kushina- quiero una garantía de que esa amenaza será neutralizada y que la llave estará en nuestro poder.
-Solo pido darle el golpe fatal- aceptó Kushina- y que ese par no interfiera a menos que se los diga.
-Eso puede arreglarse.
Y con eso dicho, la pelirroja salió de ahí contenta.
Matar a ese zorro mugroso sería algo tan dulce, debía pensar maneras de alargar su sufrimiento.
País de la lluvia. Dos días después.
Aunque tuvieron que dejar de lado a Yugi para concentrarse aquí, las fuerzas aliadas habían enviado a Mu y a Máscara mortal con sus respectivas divisiones (unos diez mil shinobi cada una) a recuperar el país.
Cómo era de esperarse, varios demonio animales y varias Nadeshiko estaban ahí, apostadas para plantar cara a sus enemigos.
-Estoy será interesante- comentó Mu al tiempo que veia pasar ante él a varios sacerdotes de Te fiti del país de los Oasis ante él.
Templo de Fit, Alabasta.
Matsuri extendió sus brazos por encima de su cabeza, al tiempo que en el campo de batalla, su Suma sacerdotisa colocaba en el suelo una urna y la destapaba.
-Atmósfera Celestial- encendió su cosmos divino la diosa.
De la urna salió una columna de Cosmo energía blanca que envolvió el campo de batalla, haciendo que los demonios rieran divertidos al no entender que era exactamente que había pasado.
Pero muy pronto lo sabrían.
En una montaña en el país del rayo, Darui también pondría de su parte para emparejar aún más el terreno para los shinobi y sus respectivos hogares.
-¡Gran muro de Tebas!- exclamó el Dios Egipcio.
En cada una de las aldeas shinobi, el santuario, la capital del País del Hierro y las respectivas capitales de los países aliados, una serie de vasijas similares a las que Matsuri había bendecido, surgían enormes columnas de luz que surcaron el cielo hasta los cinco mil metros de altura, y al llegar ahí, estás columnas crearon un domo que envolvió cada lugar con un poderoso campo de fuerza.
No le quedaba la menor duda a nadie que los Demonios intentarían atacar esos lugares si las tropas estaban fuera para proteger sus lugares de origen.
Y obviamente, al mandar a un grupo para tratar de proteger a esos lugares, se vulneraria mucho la fuerza del ejército aliado.
Por eso Osiris creyó conveniente crear un campo de fuerza con su Cosmo divino para así poder evitarle a la alianza una preocupación de esa categoría.
"Ustedes pueden" pensó el Dios mientras se concentraba al igual que Te fiti para Manter su parte.
Gabriel, Quetzalcóatl y Hecate aparecerian en el momento más oportuno, así que ellos tendrían que resistir mientras tanto.
País de la Lluvia.
-¡Extinción estelar!- atacó el caballero de Aries a la primera oleada de enemigos.
Cómo era de esperarse, aunque eran Demonios de baja ralea, estos no murieron instaneamente luego de recibir su técnica.
Algunos todavía alcanzaron a maldecir su nombre mientras morían, revelando sus cuerpos purificados de las más diversas formas.
-¡Ataquen!- ordenó Kurenai a los shinobi de las cinco Aldeas que confirmaban su ejército.
-¡Raiton, Ondas infernales!- se quitó de encima a varios enemigos Máscara mortal.
Había aprendido bien durante la guerra contra Hades que su técnica no sería útil y por eso la había recubierto de energía raiton para serle de ayuda en esta pelea.
Cosa de adaptarse al enemigo frente a él.
Y dado que los que recibieron su nueva versión de las Ondas infernales, en su mayoría kunoichi Nadeshiko, o regresaron a sus formas purificadas o se habían desintegrado en la nada, parecía ser que no se equivocó en su decisión.
-¡A por ellos!- Arengó Mabui de Venus a los demás.
Los shinobi ahí presentes se lanzaron también a la batalla, lanzando ola tras ola de Justus, al tiempo que una suerte de lluvia caía sobre ellos y sus enemigos.
Dado que las cenizas sagradas debían hacer contacto con sus enemigos, Matsuri había usado su técnica bendita para exparcir un buen lote de esas cenizas a modo de lluvia, debilitando a los Demonios
Y fortaleciendo a los humanos. Ya que la lluvia haría que durante un buen rato, el chakra y el cosmos de los ahí presentes sea mantuviera sin cambios por varias horas.
Con esa gran ayuda, esperaba Matsuri que pudieran recuperar el país y la aldea.
Con Guren.
-Cristales demoníacos- lanzo Guren su técnica a Tsume que la esquivo a penas.
Luego de que Darui uso su bendición para proteger la aldea, Guren no podía salir de ahí y sintió como se debilitó sustancialmente.
Con eso, aunque llevaba a Rin y a Yue en un pergamino de prisioneros, estaba teniendo dificultades para enfrentarse a Shirona y a Tsume al mismo tiempo.
Debía hacer una nota mental para jamás subestimar la ferocidad de una madre protegiendo a sus hijos.
-Ilusion fatal- lanzo la Yamanaka una versión shinobi del Golpe fantasma de la técnica del Fénix.
Eso selló el destino de Guren, ya que fue impactada de lleno por esta, paralizando a Guren en el acto.
-¡Gagtsuga!- uso Tsume su movimiento más trabajado de Taijutsu.
Guren solo sintió el impacto que rompía sus costillas y aplastaba sus órganos.
Momentos después, también ella dejaba paso a su forma purificada.
Tras morir Guren y luego de poner un bebé tiburón en un sello de almacenamiento, recuperó el pergamino con su hija y la de sello junto a la hija de Shirona.
Jodida Yugi, a ver si aprendía que sus hijas no irían con ella nunca.
Con Naruto, Ukyo y Tier, País de la Luna.
Hablando de hijos, madre e hijo se habían internado en el país tomado por Yugi, clara intención de cumplir con su orden. Aunque Naruto seguía dándole vueltas a su cabeza a sus dos problemas en este momento.
Por un lado, seguía buscando una manera de evitar sellar a Yugi ya que eso no se sentía bien en su conciencia.
Lo segundo era la preocupación por su amigo.
Kurama seguía callado sobre ese asunto en particular y Naruto no sabía a bien cuál era la causa de ello.
Podía entender a Kurama, ya que aunque no en la misma escala, sabía que era una píldora amarga de tragar que alguien a quien admirabas mucho te podía mentir sobre algo importante.
Pero de nuevo, incluso Naruto no tenía idea como es que los hijos de Kaguya, Hagoromo y Hamura habían podido abordar tan terrible verdad.
Sacudiendo esa idea de la mente, Naruto y su amiga y su madre se movieron hacia la capital, ya que tenían que acabar con este asunto rápido para incorporarse a la guerra.
-No son bienvenidos aquí, humanos- salió al paso de los presentes una joven de cabello naranja y piel pálida vestida con una suerte de conjunto de gimnasta- largo y quizás no tenga que darles una paliza.
-Yo me hago cargo- salió al paso Ukyo sonriendo con confianza.
-Eres uno de esos patéticos ninja- sonrió confiada la mujer- esto no me tomara mucho, así que lo que vengan a hacer, más vale que corran, será divertido alcanzarlos en poco tiempo.
-Te veremos más adelante- se despidió Naruto.
Madre e hijo salieron de ahí, al tiempo que Ukyo se ponía una armadura de hierro que emulaba de manera muy básica las protecciones principales de la armadura de su sensei.
Dado lo que ocurrió con Shadow Weeber y lo que sabían…. Esto no iba a ser tan fácil como esa criatura pensaba.
El ser lanzo su cabello al ataque, esquivando Ukyo con soltura el ataque, al tiempo que concentraba su cosmos para ser ella quien usará su propia técnica.
-Flor de fénix- lanzo la versión con cosmos de ese Jutsu
La criatura sabía que estaba jodida si intentaba bloquear con su cabello tan fuerte como el acero esa marea de fuego, ya que el calor de las llamas se había potenciado bastante por la cosmo energía de la peliazul, por lo que, para su vergüenza, había optado por esquivar el ataque.
Que era exactamente lo que Ukyo quería.
-Guadaña- hizo el ademán Ukyo de dar una suerte de gancho.
De su brazo salió una onda de energía verde aqua que salió a toda velocidad contra el ser, quien está vez si trato de bloquear con su cabello esa técnica.
Mal hecho, aunque tan duro como el acero, el cabello fue cortado como si nada por ese movimiento del estilo de combate de la peliazul que se basaba en el estilo de pelea de Shura.
Por eso mismo, básicamente era como ver una navaja de barbero cortar un grueso mechón de cabello como si nada.
El ser fue partido en dos, convirtiéndose en arena, dando fin a su vida.
Pero la cosa no termino ahí, por desgracia, ya que una suerte de seres parecidos a Osos de peluche estaban rodeando a la aprendiz de Caballero dorado.
-Supongo que ustedes no son ositos cariñositos- se resignó Ukyo a seguir peleando.
-Aquí te tengo tu cariñito- jugaba casualmente con una maza uno de esos treinta seres.
-¿Para qué quiere un oso una maza?- quiso saber la joven.
Encogiendo los hombros el oso contestó con simpleza.
-Es que no me gusta ensuciarme las manos.
Y como si esa fuera la señal de iniciar la pelea, los osos se lanzaron contra Ukyo que comenzó a pelear contra estos raros oponentes.
Si no supiera de dónde venían, ella habría encontrado esto más extraño de lo que ya de por sí era.
Amegakure.
-¡Cadena de amor de Venus!- lanzo una suerte de cadena hecha de eslabones con forma de corazones con una punta de flecha la peliplata de Kumo.
La cadena empaló por el corazón o el cráneo a cuánto demonio se ponía a su alcance, siendo en su mayoría demonios de tipo animal.
Un león morado de ojos rojos y seis patas rugio con fuerza y una onda de cosmos se acercó a gran velocidad a Mabui que esquivó con gracia el ataque.
-¡Cañón de flor!- lanzo una técnica de cosmos diferente Mabui.
El león se convirtió en un gatito atigrado que fue sellado por la mujer, una orden que todos en la alianza habían recibido, recuperar a todos los involucrados en ello.
-Elemento Tierra, kunai de roca.
-Elemento Fuego, flor fénix.
-Elemento agua, ariete acuático.
-Elemento viento, guadaña de aire.
-Elemento rayo, senbon eléctricos- salieron los Jutsu disparados contra los Demonios enemigos y varios shinobi de Hoshigakure que fueron heridos por la ola de Jutsus.
Finalmente entendían los Demonios que es lo que ese campo había hecho y era algo que no habían presupuestado.
Creían que vendrían sacerdotisas o mikos con las cenizas en urnas y trataría de usar un ritual para debilitarlos. De hacer eso, cosa de destruir ese objeto y matar a quienes tratarán de protegerlo o de usarlo.
Pero no contaban con que esos jodidos dioses harían algo como esto, se la habían aplicado y a lo grande.
-¡Hacha de Tebas!- atacó un demonio grande que parecía un adulto pelirrojo con largo cabello ondeando como fuego, con una hacha de mano muy ornamentada.
El arma salió volando y corto a cuánto ninja tenía al alcance, hasta que un par de tonfas detuvieron de golpe el arma al chocar contra ellas de forma defensiva.
-Creo que ya se contra quién voy a pelear- sonrió Tenten al ver a un oponente contra el que podría pelear primero.
-¿En serio crees poder derrotarme?- se burló el Demonio- ¿A mí, el gran Zenki, cree poderme vencer una mocosa?
-Una hace su lucha- sonrió de lado Tenten al tiempo que desplegó su armadura- y después de todo, una de las siete virtudes debería ser capaz de enfrentar a un tipo como tú. Tenten de la caridad a tu servicio.
-Vamos a ver si ustedes los ángeles están a la altura de nosotros- se lanzó Zenki a combatir a Tenten.
País de la Luna, con Tier.
La amazona de Tiburón se había separado de Naruto luego de que una de las creaciones de Yugi, una suerte de robot samurái les tratará de cortar el camino para poder ir con su ama.
La rubia tenía un mal presentimiento sobre la misión y quería apresurar su combate para ir con el Uzumaki a apoyarlo en lo que fuera.
-Espada…..¡Deslumbrante!- lanzó un tajo con su arma de energía la creación.
Una onda de energía verde se abalanzó contra Tier que sacó una espada corta y contraatacó con su propia técnica.
-¡Ola Final!- lanzó un tajo la ojiverde.
Una onda de color azul choco contra la verde y siguió avanzando contra el robot que esquivo con un elegante salto hacia arriba, pero no pudo decir algo ingenioso ya que la mujer le propinó una patada que lo derribo.
-¡No tengo tiempo para eso!- espetó la mujer mientras comenzaba a canalizar su energía en el arma- Estocada.
A esa distancia y estando inmovilizado, el robot no tuvo ni tiempo de hacer algo y al igual que la otra creación, se convirtió en arena, señal de que era destruido.
Aún así, Tier salió disparada en dirección de Naruto, ya que el presentimiento sé hacía aún más fuerte. Algo le decía que esto no iba a salir nada bien.
Con Naruto.
-¡Holis!- saludó Scorpia a Naruto de manera muy amable y amistosa- No sé si lo sabrás, pero los tipos con armadura están prohibidos en este País. Órdenes del Ama Yugi.
-Sí, lo sabía- admitió Naruto, no es que vaya a obedecer esa orden.
-¡Oh, ya veo!- dijo poniendo cara sería la mujer con tenazas en vez de manos- ¡Eres un chico malo! A mí no me gustan los chicos malos, porque siempre creen que pueden hacer lo que quieran
-Yo no……
-¡Podrían dejar de charlar!- interrumpió Katra la conversación entre su compañera y el invasor- ¡Este estúpido cree poder pasarnos a nosotras para intentar llegar con Yugi Sama!. Acabemos con él y luego haremos pedazos a sus compañeras.
-No tienes que ser tan grosera, ¿Sabes?- hizo un adorable mohín la albina con corte tipo militar- de acuerdo, tenemos una obligación con nuestra creadora, pero……
-¡Ya estuvo bueno!- se lanzó la chica gata a pelear contra Naruto- ¡Garras carmesí!
Naruto puso los brazos en X, canalizando su Cosmo energía y así el impacto no le hizo nada, para exasperación de Katra y diversión de Scorpia.
-Recuerdo haberle dicho a alguien que no le convenía confiarse- dijo de manera cantarina Scorpia- si no te tomas esto en serio te va a pasar lo que a Shadow Weeber, Magenta y Medusa.
-Ya lo sé- dijo entre dientes la temperamental chica Gato- solo estaba probando su fuerza.
-¡Ajá!- dijo riendo Scorpia- ¡Me toca! ¡Onda gravitacional!
De las pinzas de Scorpia salieron dos haces morados de energía que esquivo Naruto saltando hacia atrás, pero al aterrizar, Scorpia estaba frente a él, sonriendo de manera juguetona, al tiempo que preparaba su siguiente ataque.
Poniendo nuevamente sus brazos en X, el rubio bloqueó una patada de Scorpia y un derechazo de Katra que enojada por su descuido, intentó meterse al combate por el puro objetivo de ser ella quien le diera el golpe fatal a ese invasor.
"Sus personalidades son muy diferentes" analizaba Naruto "la chica gata es muy temperamental, pero es hábil en combate cuerpo a cuerpo. Y la chica musculosa es muy alegre y risueña, pero pelea siempre en serio y a matar. Si me descuido, este combate será más largo de lo que debe"
"Ese siempre ha sido tu punto flaco" le llegó el reclamo del antiguo Santo de Kitsune "juzgar a las personas está bien, pero debes de recordar que alguien divertido puede ser un asesino despiadado en realidad. Caras vemos, intenciones no sabemos"
"Es un gusto volverte a oír, viejo amigo" sonrió Naruto, que aunque estaban evadiendo a sus oponentes que no trabajaban tal cual en Equipo, si aprovechaban las aperturas que se creaban cuando peleaban contra él, haciendo difícil al Uzumaki el pelear contra ambas. "Creí que no volvería a saber de tí"
"Esa clase de cosas no debían ser" repuso el zorro "pero lo hecho, hecho está, coincido con Matatabi, acabemos la misión y luego veamos si una vez ganada está guerra, finalmente podemos descansar en paz"
"Entonces, acabemos la misión soldado" sonrió Naruto al sentir de vuelta a su mejor amigo "¿Que tal si usamos ese As en el que Chomei, Fū y nosotros estuvimos trabajando?"
"Hagámoslo"
-¡Jutsu multiclones de sombras!
Naruto solo creó un clon reforzado con cosmos en el que además, hizo lo necesario para darle vía libre a Kurama para poseerlo.
El clon de Naruto se convirtió en un hombre joven de cabello naranja corto y ojos avellena que vestía un hakama negro.
-Yo pelearé con la gata, te dejo a la risueña- repartió el antiguo Santo de plata las oponentes.
Scopia fue la primera en salir del shock de ver ese espectáculo y trató de interceptar a Kurama, pero Naruto le cortó el paso y le dió un mazazo con fuerza, para hacerle pagar el como le atacó hace un instante.
-¡Ese truco no te va a salvar de mí!- Siseó furiosa Katra- ¡Garra carmesí!
-¡Fuego de zorro!- lanzó su técnica de Cosmos el antiguo Caballero plateado.
Kurama no estuvo inactivo todo el tiempo, tras la revelación, varias cosas le hicieron mucho sentido, como la culpa que siempre vio en la mirada de Indra y Ashura, o esa preferencia suya los bosques y la preferencia de esta apariencia humana. La conclusión del Biju era lógica, se trataba de su apariencia real.
Así que, debido a ese sentido del deber que tiene, decidió terminar su misión y así, poder darle cierre a ese capítulo de su vida. Quizás uno de los dioses ahí presentes podría hacer algo para que pudiera finalmente cerrar su ciclo vital y así, tener el merecido descanso que quería.
Aunque de momento, hará pedazos a su rival.
Konoha.
-Vienen- anunció un guardia a Katara que se encontraba en la oficina Kage como líder temporal de la aldea.
Aunque era muy poderosa por derecho propio, la madre de Sakura no estaba en el campo de batalla debido a que una parte de la fuerza Militar de la aldea, a saber, los genin, chunin y Jounin retirados, que estaban convalecientes y no aptos para la guerra y las fuerzas de la academia y civiles con aptitudes de combate. Se había decidido al principio estacionar una buena parte de los shinobi en caso de que los Demonios atacarán las aldeas, pero el Santuario les hizo ver esto como un error y entonces decidieron que esas reservas fueran las encargadas de defender sus países y aldeas mientras la fuerza militar principal iba a pelear. Al final, si está perdía, nada podría hacerse ya y por ello era mejor tener a todos los shinobi poderosos en el campo de batalla.
Por eso Katara estaba en la aldea al no ser una kunoichi oficial de la aldea. Y fue elegida kage temporal mientras Tsunade estaba fuera.
¿Que le avisaron entonces? Que un contingente de shinobi de Hoshigakure y de Kunoichi Demonio estaban acercándose a la aldea con intención hostil.
-¡Preparen las defensas!- ordenó la pelirroja- ellos no saben aún de la barrera, pero se van a enterar. Lo más recomendable es fomentar el asedio, ya que nos da una ventaja táctica. Nosotros podríamos mantener esa posición por años, pero ellos necesitan suministros. Además, los Demonios y en general los enemigos no podrán pasar esta barrera, por lo que salir fuera de su funcionalidad es una mala idea.
-¡Entendido!- dijeron a coro los chunin que servian como centinelas.
Movimiento que se replicaba en cada una de las aldeas Shinobi, siendo Kiri invadida por la extinta aldea de las aguas termales y Suna por los restos de Kusa y Taki.
Y con esto, la guerra oficialmente entraba en las hostilidades .
Y corte.
¡¡¡¡Al fin!!!!
Luego de una serie de incidencias que incluyen que se echó a perder dónde hago los fic (T_T) finalmente regreso a publicar.
Logré encontrar a la "Vieja confiable" así que al menos podré sacar lo que está calendarizado. Ya valió el propósito, perdón por eso.
Los veré pronto
Ya saben, dejenme su review, así no solo me animan a escribir, habrá retroalimentación entre nosotros.
