Viernes 15 de mayo, 21:20

-¿entonces como estuvo tu día? - pregunto Sasuke, estaban sentados uno frente al otro, en el suelo, alrededor de la meza ratona que estaba en la sala. Habían terminado de cenar y el estaba medio apoyado contra el sofá.

-Supongo que estuvo bien, pero no se te ocurre otra cosa sobre de que hablar.

-¿Por qué? - El curvo los labios en una media sonrisa, demasiado sexy para ser real, Sakura quería estirar la mano y apartar un mecho de cabello que le caía sobre la frente.

-No lose, lo encuentro poco profundo, prefiero hablar de otras cosas como... como...

-¿Cómo qué? - la apuro el, cuando vio que ella dudaba de seguir hablando.

-Matemáticas. Macotas de la infancia, la familia. Como te gusta el té , si crees en la vida después de la muerte, si has llorado alguna vez con una película, que día de la semana es el que más odias.- levanto la mirada esperando encontrar la expresión de un hombre que cree que esta loca. En su lugar sus ojos estaban fijos en ella mirándola como si pudiera ver su alma.

-Con leche y sin azúcar. – contesto un momento después.

-¿Cómo dices? - pregunto desconcertada

-Así me gusta el té, con leche y sin azúcar.

-¿Quién toma el te amargo? Eso no es normal.

-No me gustan las cosas dulces, de todas maneras creo que hay personas que necesitan hablar sobre como estuvo el día, antes de confesar sus mas oscuros secretos con respecto a su gusto sobre el te .-

Sabiendo que le estaba tomando el pelo, Sakura, dejo pasar el comentario. Y finalmente dijo - ¿cómo es tu familia?

-Ya conoces a mi padre y a mi hermano, y mi madre es como cualquier otra madre.

-Si pero háblame de ellos, y ¿Por qué no tienes una oficina en la empresa? Nunca estas ahí

-Es por que no trabajo para mi padre, trabajo con el. Con Naruto abrimos una agencia de publicidad, aun es algo pequeña, pero estamos creciendo.

-¿Entonces por qué vives en este complejo es solo para empleados o no?

-Si técnicamente, cuando me gradué, mi padre se ofreció a regalarme una casa, no la acepte. La idea era alquilar algo hasta que la agencia diera resultado, pero mi madre insistió en que por lo menos viviera en uno de los hoteles, entonces elegí este.

-¿Por qué rechazaste la casa que tu padre te ofrecía? - pregunto ella, mirándolo como si tuviese dos cabezas.

-Hm, - sonrió – durante mas de la mitad de mi vida estuve a merced de mi padre, siempre presionándome, diciéndome que debería hacer, que deportes practicar, que debería estudiar, siempre con la idea de que yo al igual que Itachi, me dedicaría al negocio familiar. Cuando decidí estudiar publicidad, en lugar ciencias económicas como el quería, amenazo con desheredarme. Le dije que no necesitaba su dinero, no soy una marioneta, no volvería a vivir así.

-Sin embargo, trabajas con el ahora.

-Si por insistencia de mi madre, ella hace de mediadora entre nosotros. - Sakura asintió con la cabeza, dándole a entender que lo entendía- rechace la casa porque quiero tener las cosas por mi mismo, saber que lo merezco.

-Ahora si que se volvió muy profundo esto- dijo sonriendo- sabes mi padre dice "no hay nada mejor que tener algo que no mereces"

-¿Como es eso? – le pregunto entre la curiosidad y diversión.

-Por ejemplo, cuando le hable del trabajo en Uchiha corp le dije que era una oportunidad única, pensé no merecerla. Entonces solo me dijo dite a ti misma " Bien por mi, tengo mucha suerte, no solo tengo un buen trabajo, es el trabajo por el que la mitad de mis compañeros darían una pierna y están todos muertos de envidia". Y entendí que no importa si lo merecía o no, lo tengo de todas maneras, así que "bien por mi"

-Es una interesante reflexión, tu padre me cae bien.

Sakura lo miro en silencio, mordiéndose el labio inferior, Sasuke parecía tan relajado, tan magnifico, salvo por el mechón en su frente, Sakura quería apartarlo, la necesidad de tocarlo era demasiada abrumadora.

En un impulso se inclinó hacia adelante, estiro la mano y simplemente lo hizo, aparto el mechón de su frente, y sus dedos se demoraron tocando la suave piel de su rostro.

Sasuke la miro sorprendido y sus ojos se volvieron mas negros, si era posible, la tomo de la mano y la jalo sobre la mesa para que quedara sentada sobre él.

-¿Sakura quieres que te bese? – Sakura sintió una ola de calor recorrerla por todo su cuerpo, se había quedado sin palabras, su cabeza no era capaz de formula una respuesta, se sonrojo profundamente- voy a tomar tu silencio como un si.

Sus labios eran suaves sobre los de ellas, era un beso tierno, con intención de que ella se acostumbrara, Sakura tenía la impresión de que Sasuke era un hombre que disfrutaba los besos del mismo modo que el acto sexual en si. Solo existía ese momento, solo ellos dos, Sakura gimió en su boca, y el aprovecho para hacer el beso mas profundo, tomo todo lo que ella tenía para dar. Se separo de su boca y mordisqueo su labio inferior, y se abrió paso a su cuello, dejando besos húmedos, Sakura se estremecía con las sensaciones que le estaba provocando y hundió los dedos en su cabello negro y lo atrajo más hacia sí. Quería fundirse en él, quería que la devorara por completo. Nunca se había sentido tan excitada en su vida. Sasuke estaba duro debajo de ella, podía sentir la longitud de su sexo, erecto.

Rodeo con sus brazos el cuello y lo atrajo a besarla de nuevo, sus labios estaban hinchados, Sakura necesita más, quería todo de él, lo aprisiono entre sus brazos instándolo a besarla con mas pasión, Sasuke le exploraba la boca de una forma tan lenta y sensual, que tuvo que tomar su rostro con las dos manos y besarlo de una forma mas agresiva. No lograba tener suficiente de el.

Sakura vibraba de pies a cabeza, poseída por la necesidad que tenia de el, quería tumbarlo en el suelo y montarlo hasta saciar el hambre que la consumía. Sasuke termino el beso respirando con dificultad, - tranquila mi pequeña salvaje- dijo mientras le acariciaba el rostro de forma tierna- tenemos que parar, si no no podre mantener nuestro acuerdo.

Sakura se obligo a relajarse sobre él, apoyo su cabeza en su hombro – te debo parecer una hipócrita, pidiéndote tiempo, y luego lanzándome sobre ti. – el sonrió pero no dijo nada, sin saber que decir le pregunto – por que me besaste en la oficina?

-Ya te lo dije, estabas demasiado irresistible como para contenerme, pero hay otra razón, quise dejar en claro que me perteneces.

-¿asi que te pertenezco?

-Si, estoy dispuesto a esperar un mes para hacerte mia, no quiero que nadie piense que estas disponible.

-Bueno creo que eso quedo mas que claro, todo el mundo hablaba de eso.

-Hm, mejor. – se lo notaba muy complacido – creo que es hora de que me vaya – dijo mientras la ayudaba a ponerse de pie, luego se levantó. Caminaron juntos a la puerta.

-¿Cuándo nos veremos de nuevo?

-Pronto.

-¿No puedes simplemente decírmelo?

-Hm, no seas impaciente Sakura – le dio un tierno beso en la frente, y se marchó.

Sakura se quedó con la sensación de ese tierno beso. La asustaba como Sasuke la hacía sentir. Esta noche se había abierto con ella, contándole sobre la relación con su padre, y la forma en la que la miraba, como si viera todo de ella. El anhelo que sintió estando en sus brazos era algo más profundo que simple lujuria o atracción.

Se estaba enamorando de Sasuke Uchiha.