Hola, hace quince días que publiqué el capítulo anterior, espero que la espera no fuera muy cansada. Este capítulo es un poquito más largo que los otros (sé que eso no les molesta), creo que los siguientes serán algo por el estilo.
Le dedico este capítulo a tres chicas: strega-in-progress, que acaba de regresar y se puso al día con la historia (leíste como ocho capítulos de un tirón ¿no?, ¡y dejaste review en todos!), gracias. A La hija de la oscuridad, que también regresó a la historia. Y por último a Sheamoonie que se leyó toda la historia de un tirón. Chicas gracias a las dos, les respondo reviews abajo.
Por cierto, gracias a quienes dejaron reviews en "Si tú me miras", espero que les gustara y que complemente bien lo sucedido en esta historia.
Capítulo XXIII: Complicaciones antes de clases
Los problemas entre el matrimonio Snape comienzan a crecer… y el primero de setiembre llega casi sin pensarlo.
Harry y Ron habían permanecido fuera de la Madriguera por varias horas. Luego de su seria conversación, los chicos habían volado en sus escobas y habían vuelto a aterrizar cerca de la casa.
- ¿No crees que deberíamos hacer algo para que nos perdonen? – sugirió Harry a su amigo – deben estar molestas con nosotros…
- ¿Qué propones? – inquirió Ron – estoy bastante preocupado por lo que Ginny puede hacer – agregó en tono asustado.
- Estoy seguro de que puede ocurrírsele algo bastante pesado, pero con la ayuda de Hermione creo que además será doloroso…
- ¿Crees que dulces y flores sea adecuado? – dijo Ron.
- ¿De dónde sacaste eso? – preguntó curioso su amigo.
- Creo que lo decía un personaje de un libro muggle que Ginny estaba leyendo…
- ¿Le gustas las novelas rosa? – dijo sonriendo – creo que es información que me conviene saber…
- ¿Vas a acercarte a ella? – preguntó Ron deteniéndose a mirarlo fijamente.
- ¿No crees que deba hacerlo? Dijiste que los amigos era lo que me hacía diferente a él… creo que tienes razón. Además, se pone muy linda cuando se enoja, así que supongo que al regresar veré un nuevo grado de belleza…
Ron solo sonrió. Su amigo había creído su deducción y además, podía ser que pronto fuera su cuñado…
- Será mejor que busquemos una manera de que nos perdonen. Hay una castaña enojada en esa casa que tengo que contentar…
- Bueno, la verdad es que bien visto deben perdonarte solo a ti… yo no las embarqué a elaborar pasteles de calabaza – dijo Harry alegremente.
- ¡Hey! Creo que no estoy solo en esto, – le incriminó Ron – sólo porque no quiero que mi hermanita sufra por tu ausencia te dejaré llegar a la cena…
- ¡Vaya! gracias…
Un rato después, los chicos se dirigieron lentamente a la Madriguera, habían tenido una gran charla… tenían un plan para que las chicas los perdonaran… y estaban dispuestos a comer mucho pastel de calabaza…
-------------------------------------------------
La noche de Bulgaria era hermosa, la luna brillaba en el cielo y Remus podía contar las estrellas. Normalmente a esta vista le acompañaba la imagen mental de Nymphadora Tonks, pero esta noche, el rostro de la señora Snape no había aparecido… era extraño.
"Ella nunca supo que yo la amaba… ¿realmente pudo no enterarse de mi amor? A lo mejor verdaderamente lo ignoraba… pero lo dudo…" Remus sabía que en el fondo ella había preferido ignorar que él estaba enamorado de ella… tal vez por no lastimarlo… tal vez porque prefería a Snape desde hacía tiempo…
Aliance Krum… esa mujer era extraña, cuando la miraba tenía la impresión de conocerla de mucho tiempo atrás y de haber compartido muchas cosas… Obviamente no la conocía de antes ¿o sí? ¡No! ella era búlgara y era imposible que se conocieran… pero conocía a Dumbledore ¿habría visitado Inglaterra? Recordaba dos chicas de intercambio durante sus años de escuela, pero si la memoria no le fallaba eran francesas, Elizabeth y… ¿cuál era el nombre? Entonces lo recordó. Era el nombre que había mencionado Snape en una ocasión: Mary Ann, si Mary Ann Brousseau ¿sería la misma persona?
La verdad es que ya no era su asunto, lo que le interesaba en ese momento era que ninguna de las dos se llamaba Aliance Krum ni venía de Bulgaria… tal vez más adelante resolvería ese misterio.
--------------------------------------------------
Harry y Ron llegaron a la Madriguera con tres ramos de flores silvestres y bastante ortigados y arañados. La idea de llevarles flores a las chicas y a la señora Weasley había culminado en un paseo por las praderas cercanas a la casa, con el fin de conseguir flores de muchos colores. El principal problema, lo presentaron el resto de las plantas, realmente les había sido difícil recoger las flores sin ser lastimados por las ortigas.
Ingresaron directo a la cocina, en ella se encontraban dos chicas sentadas alrededor de una mesa. Sus rostros reflejaban un gran cansancio y sus ropas eran el perfecto muestrario de los ingredientes utilizados. La señora Weasley no se encontraba en la habitación, por lo que la oportunidad era perfecta.
Su entrada fue silenciosa, pero no pasó desapercibida. Dos cabezas giraron para mirar a los intrusos, pero encontraron directamente frente a sus ojos sendos ramos de flores.
- Sé que deben estar cansadas, pero queremos agradecerles que sacrificaran su tarde para hacer los pasteles de calabaza – dijo Ron.
- Sí – corroboró Harry – gracias, realmente me hace ilusión comerlos. Ustedes saben que en casa de mis tíos no sería posible comer esas cosas… – no le gustaba utilizar la lástima como arma, pero sabía que ellas estaban bastante molestas y que su "instinto maternal" era lo que más podía serles de ayuda para que los perdonaran.
Velozmente, Harry entregó su ramito a Ginny y Ron hizo lo mismo con Hermione. Ellas los miraban boquiabiertas sin saber qué decir, ¿se habrían vuelto locos?
Ron estaba completamente colorado, pero la sonrisa que le regaló Hermione al recibir sus flores valía el bochorno que estaba pasando. Siguiendo un impulso, Ron le corrió un mechón de cabello que estaba en la cara de su amiga y lo colocó atrás de su oreja. Ella le miró sorprendida, pero Ron le sonrió y ella terminó por responderle de la misma manera…
Harry pudo captar la mirada de Ginny al entregarle las flores y ella no pudo separarla, esos ojos esmeralda la tenía completamente hipnotizada… Harry le sonrió, ¡que hermosa era la pelirroja! Fue entonces cuando ella se percató de los arañazos que tenía su amigo en la cara y los brazos…
- ¿Dónde te metiste? – preguntó preocupada – estás completamente arañado…
Hermione volvió su rostro a Harry, pero regresó inmediatamente su mirada a Ron, ahora que Ginny lo mencionaba, el rostro y los brazos de Ron estaban enrojecidos y con pequeñas cortaditas…
- ¿Dónde estaban ustedes? – dijo la castaña – miren sus rostros y sus brazos, ¡parece que se pelearon con un gato!
- No es nada – aseguró Ron – algunas plantas eran bastante altas y tuvimos que moverlas para llegar a las flores…
- ¿Todos esos cortes fueron por obtener estos ramos? – preguntó Ginny un poco incrédula mirando a su hermano.
- Pues sí – le respondió Harry haciendo que volviera a mirarlo – pero valió la pena solo por ver que nos sonríen de nuevo…
Hermione lo miraba completamente sorprendida ¿Harry estaba coqueteando con Ginny?, ¡eso era maravilloso! Ella sabía que su amiga nunca había dejado de estar enamorada del niño que vivió, pero últimamente Harry estaba muy distante de todos y ese cambio era realmente inesperado. Lentamente, la castaña dejó de mirarlo para observar a Ron, la mirada del chico no se separaba de ella ni un segundo y eso la hacía sentir incómoda…
- Creo que… debería curar… digo, deberías curar esos cortes… antes de que se infecten – le dijo un poco cortada – es mejor que vaya… digo, vayas por el botiquín…
Había resultado, las chicas habían olvidado el enojo que sentían por sus amigos. Para Harry aquello era maravilloso, la pelirroja que le quitaba el sueño no solo le había sonreído y perdonado sino que además, se estaba preocupando por él, ¿podría conseguir conquistarla? No estaba seguro, pero parecía ir por buen camino… tendría que darle tiempo al tiempo.
Ron por su parte no estaba tan esperanzado, aunque Hermione se preocupara por él, eso no distaba mucho de lo que siempre sucedía entre ellos, así que no lo veía tan claro. ¿Podría conseguir su objetivo? La verdad es que no estaba seguro de que funcionara… Pero no estaba dispuesto a ceder.
-------------------------------------------------
La aurora encontró a dos personas completamente desveladas en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. El matrimonio Snape no había podido conciliar el sueño…
Ella había esperado toda la noche el regreso de su esposo, sabía que algo no estaba bien. Hasta el momento él había permanecido a su lado… aunque su sueño fuera ligero, habían compartido las noches desde que se casaron y aun antes de tener relaciones sexuales siempre había sentido que él estaba a su lado. La noche anterior había comprobado que algo extraño le estaba sucediendo a su marido. No solo la había estado rechazando sutilmente, sino que incluso había llegado a hablarle rudamente, ¿habría percibido que ella le había mentido? Era muy posible, él era muy perspicaz… y ella era mala mentirosa…
Pero no era eso lo único que le preocupaba. Sabía que había estado muy alterable debido a los problemas que le proporcionaba la misión recibida. Estaba muy sensible y lo sabía, tal vez su esposo no estaba evitándola sino que ella lo estaba imaginando, ¿era posible? ¡No! la noche anterior él no había querido besarla cuando ella se acercó a hacerlo… Tenía que ser efecto de su mentira… no podía ser otra cosa, ¿o sí?… pero sabía que no podía sincerarse con él. Lo mejor era no darle más vueltas, tendría que enfrentar el problema tal y como se presentaba y lo haría esa misma mañana… ahora necesitaba despejarse y lo mejor era dar una vuelta por los jardines del colegio.
Severus no estaba mejor que su esposa. La noche anterior se había encerrado en su mazmorra y había intentado concentrarse en las pociones que debía elaborar para el inicio de clases, pero había sido imposible. La mirada triste de su esposa la noche anterior no dejaba de seguirlo… ¡pero tenía que evitar su cercanía! ¡no podía ni besarla! Sabía que si la besaba no podría dormir a su lado sin intentar que sucediera algo más… y para su mayor tortura sabía que a ella le sucedía lo mismo. Definitivamente las cosas no estaban resultando…
Era momento de salir de su laboratorio y dirigirse a su habitación, ¿ya habría levantado su esposa?, ¿lo habría esperado mucho rato? No quería enfrentarse con ella, pero si tenía que hacerlo para mantenerla alejada, ¡lo haría! ¿No sería mejor decirle la verdad? Tal vez de esa manera no se sentiría tan culpable y ella no se molestaría con él… pero no quería poner más cargas sobre la espalda de la chica, sabía que Voldemort debía haberle asignado algo realmente gordo para que no quisiera decírselo. Él no iba a darle más problemas…
Al entrar en la habitación, la encontró casi vacía. Solo Pascual estaba entretenido en roer un trozo de zanahoria… ¿dónde se encontraría ella?
- Parece que nuevamente te dejaron listo y sin paseo… – le dijo Snape a la mascota de su mujer – ¿dónde está mi esposa? – le preguntó seriamente.
El pequeño conejo lo miró atentamente y luego de unos segundos, regresó su atención a la zanahoria que tenía al lado.
- ¡Debo estar volviéndome loco! ¡Esperando respuesta de un animal!
Lentamente caminó hasta la habitación interior. La cama estaba hecha y había una sábana sobre el sillón, ¿habría pasado la noche esperándolo en el sillón? Cada vez se sentía más culpable… Rápidamente tomó su varita y con un par de movimientos la habitación quedó completamente arreglada.
Tenía que reunirse con Dumbledore esa mañana, necesitaba seguir conjeturando sobre la misión de su esposa, realmente requería resolver el dilema para estar tranquilo. Se dispuso a salir, lo mejor era no encontrarse con ella hasta hablar con Dumbledore, tal vez esa conversación le diera un nuevo panorama de la situación…
Antes de salir, decidió dejarle una nota. Ella podría llegar buscándolo y lo mejor era que no se preocupara.
Voy a reunirme con Dumbledore y a trabajar todo el día en las mazmorras. Si tienes alguna duda sobre tu trabajo no dudes en preguntarme.
Te amo
SS
¡Vaya si la amaba! Pero eso era un problema que no podía atender en ese momento, lo mejor era hablar con el director lo más pronto posible. Se dirigía a la puerta cuando esta se abrió dando paso a una ojerosa señora Snape…
- ¡Severus! – su voz sonó como un reproche. "Será posible que se vaya sin hablar conmigo" – ¿a dónde vas?
- Debo reunirme con Dumbledore… – comenzó a explicarle, pero fue interrumpido por su esposa.
- ¡No! tenemos que hablar… ¿porqué no regresaste anoche? Te esperé por horas – su voz denotaba una gran tristeza, pero podía detectarse un incipiente enojo en ella.
- Te dije que regresaría cuando sintiera sueño y eso no sucedió – contestó cortante – pensé que había quedado claro – añadió.
- No me hables como a una de tus alumnas – indicó ella con chispas en sus ojos. No estaba dispuesta a ser tratada por su marido como una estudiante – no puedes pasar las noches en vela…
- No tenía sueño, cuando el insomnio aparece no puedes dormir – dijo Snape tranquilamente.
Nymphadora Snape lo miró atentamente. El enojo en ella crecía por momentos… él la rechazaba, la dejaba sola toda la noche y encima la trataba como a una niña… no iba a permitir eso. Ella era su esposa y él iba a tener que tratarla como tal. No le quedaba más remedio que enfrentar la situación y, como solía decir su padre, tomar el toro por los cuernos…
- ¿Porqué me estás evitando?
Snape la miró directamente a los ojos y comprendió que no podría salir de esta sin decir la verdad o enojarla profundamente. Lo único que le quedaba era demorar ese momento lo más posible.
- ¿Quién te está evitando? – dijo aparentando sorpresa.
- Tú – gritó ella – no creas que no me doy cuenta que no quieres ni besarme… ¿por qué lo haces? Me lastimas…
El corazón se le estrujó al escucharla… Eso era más de lo que podía soportar… ella estaba sufriendo por su culpa ¿qué podía hacer?
- No sé a qué te refieres… – dijo aparentando ignorancia – sabías que al llegar a Hogwarts las cosas cambiarían. No puedes comportarte en tu lugar de trabajo como si estuvieras de vacaciones…
- ¿Pero qué estás diciendo? – dijo colocando sus manos en la cintura, en la más típica posición de la señora Weasley – no te creas ni por un momento que voy a pasarme el año completo a dos velas… ¡eres mi marido! No voy a aparentar que solo somos compañeros de trabajo…
- ¡Por supuesto que soy tu marido! Pero tengo trabajo que hacer y no puedo distraerme de él…
- ¿Eso es lo que soy? ¿una distracción? – la chica no estaba pensando lo que decía, ahora solo quería sacar toda su frustración… quería lastimarlo como él la estaba lastimando con su actitud hacia ella.
- ¡No digas tonterías! Sabes que eres lo más importante para mí – no podía creerlo, ¿él estaba diciendo eso? Nunca creyó que lo diría de nuevo… – pero estamos trabajando y debemos concentrarnos en lo que hacemos…
- ¿Por eso ni siquiera quieres besarme? – le cortó ella bruscamente – claro, ¡eso puede hacer que te distraigas! – añadió irónicamente.
El rostro de la señora Snape cambiaba poco a poco y se coloreaba de rojo debido a la cólera que tenía. Su cabello se había vuelto completamente blanco y sus ojos eran de un negro tan profundo como los de su esposo. El enojo que tenía la chica era el más violento que había tenido nunca y no era para menos… el hombre que amaba pasaba de ella y ni siquiera quería aceptarlo y menos decirle la razón de su actitud.
Snape la miraba atentamente. Cada cambio en su apariencia le parecía más adorable que el anterior. ¡Maldición! ¿cómo podía estar pensando en lo atractiva que se veía cuando ella estaba dispuesta a volarle la cabeza? Pero no podía evitarlo, se veía temible, pero no podía apartar de su cabeza la idea de tomarla en sus brazos y terminar la discusión en la cama…
Ella se fue acercando lentamente a él. Sus miradas se encontraron, ella parecía echar chispas por los ojos, él sintió que su determinación cedía, que terminaría por besarla y eso no lo podía permitir…
- Tal vez deberías ir a desayunar… el hambre te pone alterable – y esa fue la gota que derramó el vaso.
- ¿Cómo dices? ¿Crees que estoy loca o qué? Tú eres el que me altera, tu forma de tratarme en estos días es deplorable, ¡no puedo creer que me ignores, me alejes y encima te burles de mi! – la chica se había acercado demasiado y le había tomado por el brazo… que hermosa sensación tenerla tan cerca… ¡peligro!
- ¡Nadie se burla! Pero definitivamente necesitas comer – dijo, "aunque yo quisiera comerte a ti…" pensó separándose de ella – y sacar ese animal, ¡no creas que voy a hacerlo yo! – dijo señalando a Pascual.
- ¡Por supuesto que lo sacaré! No sea que termine por ignorarme él también – dijo irónicamente.
- ¡Oh vamos! Tú sabías que al llegar al colegio las cosas cambiarían – dijo trayendo a colación la única excusa que se le ocurría – no podemos comportarnos como dos colegiales, ya aquí va a haber bastantes…
- ¡Por Merlín! ¿No se te ocurre una excusa mejor? ¿Por qué te comportas así?
- No puedo decírtelo… – dijo muy quedo.
- ¿Qué? – preguntó la chica… "será que también fue hechizado… el Innombrable no lo haría, eso lo pondría sobre aviso…", sin pensarlo se acercó nuevamente a él – ¿No puedes o no quieres?
- Pues no quiero – dijo él con furia al ver que se acercaba. Realmente no podía permitirlo y solo le quedaba un camino por recorrer… – hay cosas que no voy a decirte ¡y esa es una de ellas! – le dijo bruscamente.
La verdad es que le dolía ser grosero con ella. Desde que habían arreglado sus diferencias y aceptado que se amaban solo podía dedicarle palabras amables y no se sentía bien tratándola de esa manera. Pero no podía poner más carga sobre sus hombros… y si la única manera de evitar la intimidad con ella era que la chica se molestara con él, lo haría. De pronto se dio cuenta que ella seguía hablando y él no la escuchaba.
- …¿pero quién te crees? ¡Eres mi esposo, no mi padre! ¿Por qué me ocultas cosas?
- No soy el único que oculta algo aquí – dijo fríamente – tú también sabes de eso ¿o no? – y la miró atentamente. Su reacción no se hizo esperar, palideció hasta quedar más blanca que el papel y sus ojos se anegaron… "soy un idiota, ¿cómo puedo hacerla sufrir así?" Su primer impulso fue ir a ella y disculparse, pero al comenzar su avance ella lo detuvo con un ademán…
- No te acerques – dijo con una voz completamente calmada – ahora sí que no sabes de lo que hablas…
Una solitaria lágrima corrió por la mejilla de la joven auror. Ella lo miró fijamente y con un gran esfuerzo dijo:
- Espero que su estancia este año escolar sea agradable profesor Snape… – y silenciosamente salió de la habitación.
-------------------------------------------------
- ¿Cómo conociste a Dumbledore? – le preguntó la voz de Remus a sus espaldas.
- ¿Perdón? ¡buenos días a ti también! – dijo Aliance irónicamente.
- ¡Oh! Buenos días, disculpa… es que es una pregunta que quiero hacerte desde que llegué… – Remus se disculpó completamente rojo y le sonrió. Ella devolvió la sonrisa, ¡vaya que se veía hermosa cuando sonreía!
- ¿Realmente no me recuerdas? – ella dejó lo que estaba haciendo, se volvió y lo miró atentamente. El hombre lobo estaba impactado.
- ¿De… be… ría? – balbuceó con cara de sorpresa.
- No creo haber sido tan popular como para estar muy presente, pero cuando estuve en Hogwarts di mucho de que hablar…
- ¿En Hogwarts? ¡¿Estudiaste en Hogwarts?! – Remus la miraba anonadado,
- Probablemente no me recuerdes, cuando ingresé estabas en sexto año… los Merodeadores eran toda una leyenda…
- ¿Pero tú eres búlgara? ¿Cómo estudiaste en Hogwarts? – Lupin estaba perplejo, ¿por qué no la recordaba?
- Si quieres puedo contarte la historia, pero tendrá que ser más tarde. ¿Te parece al almuerzo?
Remus asintió lentamente, realmente quería conocer la historia, ¿sería posible que la conociera de antes? Ella era menor que él, pero podían haber coincidido en su época escolar ¿o no? Ella realmente lo intrigaba…
-------------------------------------------------
- Severus, ¡qué bien que viniste! Tenemos que hablar… – dijo el director jovialmente al verlo entrar a su despacho. Pero al ver el rostro de su amigo, interrumpió su bienvenida… – ¿qué sucedió?
- Nada – contestó Snape – ¿hay algo de lo que quieras hablarme? – preguntó simulando interés.
- Sí, es bastante importante, pero me parece más indicado comenzar por lo que te trae a mi despacho a estas horas de la mañana… – dijo el anciano mirándolo por encima de sus anteojos.
- Supongo que no estoy acostumbrado a las peleas maritales… – dijo restándole importancia al asunto.
- Te peleaste con Nymphadora…
- ¡Estoy cansado de que me mienta! ¿Por qué no me dice la verdad? Sé que le fue asignada una misión más complicada que espiar a Potter… – dijo velozmente el profesor de pociones. En su voz se podía sentir la impotencia y la frustración que esta situación de provocaba – ¿es qué no confía en mi? Porque…
- No puede decírtelo – interrumpió Dumbledore firmemente.
- …yo estoy seguro de que puedo ayudarle… ¿cómo dijo? – se interrumpió al comprender las palabras del director.
- Digo que no puede decírtelo. Lo descubrí ayer al finalizar nuestra reunión. ¿Has escuchado hablar de un hechizo llamando Secretus Avada?
- ¡Por Merlín! – dijo el profesor abriendo muchísimo los ojos – ¿ella se lo dijo? ¿por qué no me lo dijo a mi? Pudo decirme que Voldemort lo usó con ella y yo la habría comprendido…
- Me temo que no está muy enterada de los alcances de este hechizo y prefirió cortar por lo sano… no decir nada a nadie. Le sugerí que utilizara este hechizo para sus primeras clases y eso la obligará a investigarlo…
- Secretus Avada – murmuró Snape – por eso dijo que no comprendía nada… – súbitamente se puso de pie y se dirigió a la salida – tengo que hablar con ella…
- ¡No! – de detuvo Dumbledore – déjala que averigüe un poco sobre el hechizo primero, de lo contrario puedes hacerla sufrir innecesariamente… recuerda que no conoce sus alcances… Además, recuerda que es una Black, necesitará tiempo para asimilar lo que sucedió antes de poder hacer las paces contigo…
Dumbledore se había acercado a él y tenía una mano en su hombro. Lentamente el profesor se volvió a mirarlo a los ojos y asintió.
- Como siempre, tiene usted razón… – dijo Snape.
- ¿Por qué mejor no me cuentas que sucedió exactamente? – dijo el director – tal vez pueda ayudarte a ver las cosas desde otro punto de vista…
- Sí… – y se dispuso a contarle la historia de lo ocurrido.
-------------------------------------------------
Trabajaron juntos hasta la hora del almuerzo. Remus no podía negar que espero este momento con mucha ilusión. ¿Qué le sucedía con esta chica?, realmente estaba muy interesado en ella, más de lo que nunca creyó poder estarlo por una mujer que no fuera Nymphadora Tonks… En fin, probablemente la lejanía obraba milagros y él era la víctima propicia.
Hablaron de muchas cosas durante el almuerzo, pero Remus no se atrevía a preguntarle nuevamente por su estancia en el Reino Unido, las dudas se agolpaban en su cabeza, pero no sabía como llegar nuevamente al tema…
Aliance estaba bastante nerviosa, por suerte su trabajo le había hecho desarrollar una gran capacidad de autocontrol, pues de lo contrario estaría tirando cosas por doquier. ¿Sería apropiado decirle que le conocía de antes? ¿Debería decirle que siempre supo su secreto? ¿Por qué no hacía ya la pregunta?
- ¿Y qué fue de tu familia? Sé que Víktor es tu hermano y desconozco cualquier otro detalle – dijo Lupin introduciendo un nuevo tema de conversación.
- Ellos murieron hace algunos años. Víktor es mi única familia en Bulgaria. Todavía me queda una tía en Londres, pero nos vemos poco. Mi trabajo y el de Víktor nos reclaman muchísimo tiempo y las visitas a mi tía nunca son de un par de días, con ella tienes que quedarte al menos dos semanas – contestó ella con una sonrisa. Siempre le gustaba recordar a su tía, ellas habían pasado por mucho estando juntas y eso le permitió asistir a Hogwarts…
- Siento lo de tus padres, es duro perder seres queridos. Mis padres fallecieron durante la guerra y yo soy hijo único, así que desde esa época solo me quedan los amigos…
- Los amigos siempre son un gran sostén. Yo tengo muy pocos, de hecho casi ninguno, pero todavía tengo a Víktor… aunque ahora con este trabajo… no sé… temo que… lo pierda… – dijo tristemente.
- ¡Hey! No te pongas así… Si Dumbledore piensa que puede ser un buen espía, es porque puede serlo. – intentó tranquilizarla – Los buenos viven muchos años… el otro lleva mucho tiempo con nosotros y ahora incluso está felizmente casado…
Ella le sonrió, le gustaba que intentara hacerla sentir bien…
- ¿Él también estudió en Hogwarts? Es posible que lo conozca… – dijo Aliance.
- Sí, pero no puedo decirte quién es… eso lo pondría en peligro a él y a ti. Cuando hay un espía, mientras menos personas sepan de él es mejor.
- Tienes razón y me alegra que no me lo dijeras, porque sé que tampoco le revelarás a nadie que Víktor también es un espía.
- ¿En qué época estuviste en Hogwarts? – preguntó aprovechando el silencio que se hizo después de la última intervención de la chica.
- Soy de una generación posterior a la tuya… pero los Merodeadores son famosos en todas las épocas.
- ¿Cuál fue tu casa? Sé que no es Slytherin, porque no tendrías este trabajo… pudo ser Gryffindor, definitivamente eres muy valiente…
- No, en mi época escolar solo me interesaban los libros, así que fui una Ravenclaw…
- ¡Claro! La casa de la inteligencia… era obvio, debí suponerlo desde un principio. – dijo el hombre lobo – ¿qué tan posterior a mi generación? Si se puede saber… la verdad es que no quiero ser indiscreto, pero tal vez coincidimos alguna vez…
- Cuando ingresé a Hogwarts los Merodeadores estaban por salir del colegio, yo era solo una niñita, pero los recuerdo perfectamente… – sus ojos denotaban que estaba recordando una gran época – pero no formaba parte de su club de fans, así que dudo que alguno me recuerde…
- Yo tendría que recordarte – dijo Remus – ya solo quedamos dos… y el otro no tiene cerebro…
Aliance lo miro fijamente, en los ojos de su amigo había una huella de profundo dolor… era mejor dejar el tema ¿o no? Tal vez lo mejor era darle un espacio para que se desahogara… Ella conocía la historia, todos la sabían en el mundo mágico: James traicionado por Sirius, su mejor amigo; Peter muerto por la mano de Black y este encerrado de por vida en la prisión mágica…
- Sé que es una historia triste, pero James y Peter murieron por una buena causa…
- Te equivocas… Peter no murió, aunque merece estar muerto…
La chica lo miró sin comprender sus palabras. ¿Peter estaba vivo? ¿merecía estar muerto? Ahora sí que no comprendía absolutamente nada… Lupin debió ver la confusión en su rostro y dijo:
- ¿Quieres oír una larga historia? – y hablaron el resto de la tarde…
-------------------------------------------------
El resto de ese día y los días anteriores al primero de setiembre, la señora Snape dedicó su tiempo a la investigación de ese hechizo que recibiera junto con su misión. Este trabajo le llevó muchas horas y le permitió mantener su mente alejada de sus problemas. Durante las comidas, se ubicó siempre lejos de su marido y evitó hablarle en todo momento.
Él por su parte le dio el espacio que necesitaba, no quería presionarla, sabía que al llegar los estudiantes al colegio ella misma lo buscaría… la llegada de los hijos de algunos mortífagos la acercaría nuevamente a él… o al menos eso esperaba.
Durante el desayuno de ese día, el primero de setiembre, la había descubierto mirándolo a hurtadillas… eso era una buena señal. Cuando percibiera un destello en sus ojos, sería el momento de acercarse a ella e intentar aclarar las cosas. Lo tenía decidido, no preguntaría más por su misión y le diría una parte de sus sospechas, ella le creería, de todas maneras el buen actor era él…
Cerca del medio día, se dirigía al comedor cuando la encontró de frente. Se miraron fijamente y él pudo ver en los ojos de su esposa el sufrimiento que la embargaba…
- Creo que debemos hablar – dijo él.
- Es cierto… ¿crees que pueda ser esta noche?
- Te veré en la cena de bienvenida y luego, podremos hablar con calma…
Ella solo asintió y siguió su camino, probablemente no almorzaría ese día, tenía muchas cosas en qué pensar antes de hablar con su esposo. No podía evitarlo, su corazón iba a salirse de su pecho ¿podrían arreglar su situación? Todo era cuestión de tiempo…
-------------------------------------------------
Esa noche el comedor de Hogwarts se llenó de vida. Cientos de jóvenes magos llenaron las mesas de las cuatro casas. Desde la mesa de Gryffindor, cuatro chicos miraban atentamente a la nueva profesora de defensa contra las artes oscuras… ¿no era ese el puesto de Remus?
Nymphadora Snape les sonrió al verlos tan pendientes de ella, ya les explicaría después su cambio de situación con respecto al trabajo.
La joven se encontraba sentada al lado de su marido, esto la tenía un poco nerviosa, desde hacía unos días que no se hablaban y aunque habían acordado hacerlo esa noche, ella estaba muy alterable ¿y si las cosas no salían bien? ¿y si él insistía en saber su misión? ¿y si…?
No solo Harry, Ron, Hermione y Ginny miraban atentamente a la joven auror… desde la mesa de Slytherin, un atractivo joven rubio miraba fieramente a la mujer, era Draco Malfoy. En una ocasión sus miradas se cruzaron, ella le sonrió y él le sostuvo la mirada. Nymphadora lo notó y sin pensarlo tomó la mano de su marido; enrojeció súbitamente al darse cuenta de su acción, pero no retiró su mano… lentamente lo miró y él le dedicó una leve sonrisa. Esto la tranquilizó y decidió acercarse a Draco al finalizar la cena. Esto se complicaba cada vez más.
Esto es todo por ahora, espero poder actualizar pronto, pero mejor no indico una fecha porque temo quedarles mal… Les cuento que a esto no le queda mucha cuerda, si todo sale como lo planeo dentro de unos cinco o seis capítulos se acaba (tal vez menos…).
Anna: hola chica, espero que este capítulo te gustara, como viste Snape salió más que en el anterior… Supongo que en este momento las cosas se complican para la pareja, pero eso es necesario para que luego todo se resuelva.Chica – Felton – Malfoy: hola niña, me alegra recibir tus mensajes, siempre comentas muy detallado y eso ¡me encanta! Como viste Snape está en un buen problema con su esposa, ahora van a hablar, a lo mejor se les ocurren algunas de tus ideas, no sé… Por cierto, ya salió Draco, en el siguiente capítulo hablará con Tonks, pero no te hagas muchas ilusiones con su participación, porque no está planeado que sea muy importante en la historia. Respecto a Remus y Aliance, como pudiste ver ya conversan más y ahora el lobito está comenzando a interesarse más en ella… hay que ver qué les depara el destino. Bueno wapa, cuídate.
Elanor Blackriver: hola wapa, gracias por seguir leyendo. Me alegra que te guste la conversación de Harry y Ron… a mi me gusta poner a Ron como un amigo incondicional y creo que eso es lo que es. Gracias por la aclaración, espero que sigas leyendo, en el siguiente capítulo te tengo una sorpresita.
Iraty Rowling: hola chica, me alegra que te gustara tanto el capítulo; solo espero que este no te decepcione, creo que es un poquito más largo que los otros, pero es que no pude cortarle nada. Cuidate… y no te preocupes, el review llegó muy a tiempo.
La hija de la oscuridad: ¿otra chica que cambia de nick? Esto se está haciendo común… Creo que este nick es muy bueno, la verdad es que llama la atención. Me alegra que te guste como van las cosas y sobre todo que volvieras a leer el fic, porque eso quiere decir que realmente te gusta y eso me hace feliz. Espero que sigas leyendo. Gracias.
Laurana Malfoy Rin: hola niña, me alegra que sigas leyendo la historia, vi que continuaste una, espero tener tiempo de leerla hoy… es que he estado muy presionada por el estudio y el trabajo… disculpa.
Espero que te agradara que ya apareciera Draco, sé que no es un personaje principal en esta historia, pero no podía dejarlo por fuera…
Meilin 2: niña ¡que bueno que estás por aquí! Me encantó el mini fic que publicaste… MUY LINDO. Tienes razón, Ron es muy listo en este fic, lo que sucede es que es de mis personajes favoritos y, aunque es impulsivo me gusta la audacia que tiene en los libros (sobre todo en el primero) y eso fue lo que traté de reflejar. Con respecto a Dumbledore, él si averiguo la razón por la que Tonks miente, espero que en este capítulo sea más claro. Espero que te gustara el resultado de estas dos semanas de trabajo, por cierto ¿qué quieres decir con "La Tonks del volante"?, espero que no seas un peligro en carretera…
Miss Andreina Snape: ¿verdad que cambiaste de nick? Este está muy lindo, pero creo que antes no tenía el "miss" ¿me equivoco? Espero contestar tus preguntas en este capítulo. En el siguiente Snape hablará con su esposa, pero no sé que decidirán sobre los anticonceptivos… (es mentira! Si sé…)
Por cierto, respecto a tu fic, cuando digo que los merodeadores son predecibles, me refiero a que le tiran los tejos hasta a una escoba con enaguas… (¿se entiende? Es que no sé si es una frase muy de aquí…)
Nariko: hola niña, me alegra que sigas leyendo el fic. Me alegra que te guste la historia de Aliance y Remus, creo que lo primero es que ya son bastante amigos, lo que falta es que él se enamore de ella… por que lo que es ella, está de las narices. Como viste ya salió tu adorado Draco, lo único es que no va a ser muy importante en la trama, aunque va a seguir saliendo regularmente. Espero que te conformes con eso… Me propusieron que hiciera un fic sobre él, pero lo malo es que no se me ocurre nada que pueda usar…
Noctis Black Snape: hola amiguita, me alegra que estés aun por aquí. Tengo algunos días de no entrar a leer, así que no sé si seguiste con lovenikess (¿se escribe así?) espero leer el siguiente capítulo pronto. Como viste ya en este salió Draco, lo que pasa es que no ha tenido aun mucha participación… Ya leí el fic de Sakura sobre Remus, creo que es muy chistoso. Me alegra que apruebes la suerte del pobre Pascual.
Sakura-Diana- Black: hola wapa, me alegra que sigas enganchada con la historia, ¿qué sucedió con la tuya? Todos los viernes espero que actualices… bueno, la verdad es que es tan buena que vale la pena esperar pacientemente. Me alegra que te guste como intervienen Harry y compañía, espero que te guste lo sucedido en este capítulo con ellos. Cuídate…
Sara Fénix Black: hola mi beta, que bueno que te encuentro por acá. Pensaré lo del one-shot sobre Ron… la verdad es que los que se me ocurren no me parecen adecuados, pero lo intentaré cuando no tenga tanto trabajo. Por cierto el "Se le apagó la luz" quedó genial…
Sheamoonie: hola chica, tengo una duda ¿qué significa tu nick? Estoy intrigada… Me halaga que te leyeras los 22 capítulos anteriores en dos días… (que envidia poder hacer tiempo para leer algo que no sea Matemática…(lagrimones de amsp14)). Espero que te siga gustando como va enredándose esto, yo creo que me quedan aun unos seis capítulos más o menos, pero no sé si se me irá a alargar un toquecito más, ya sabes… a veces las conversaciones se llevan más espacio del previsto y es necesario cortar un capítulo en dos…Bueno chica, espero seguir teniendo noticias tuyas y que te agrade como continuó la historia. Strega – in – progress: hola niña. No sabes cuanto me alegra que estés de regreso, no solo porque te tengo nuevamente de lectora, sino porque también has continuado tu historia que es buenísima…
Lamento el mal momento que pasaste cuando apareció Hermione, ni modo, en esta ella quedará con Ron… o tal vez no. Lo del título de "Ir de compras" es que no quería que se supiera desde el comienzo del capítulo que la consumación iba a suceder, quería que fuera sorpresivo y creo que lo logré; pero en fin, tú dirás. Por cierto, si haces pegatinas con la frase de "una persona como Severus no ama a medias", envíame una imagen por correo electrónico (al rato yo también imprimo unas…)
En cuanto a Víktor, él no sale mucho, pero va a averiguar algunas cosas que pueden interesarte…
Por cierto, Sara está muy contenta por los reviews que le has dejado, creo que hasta brincaba de gusto cuando vio la cantidad que tenía. ¿Leíste el que publicó de celebración? Me temo que es muy triste, pero la canción es preciosa y la trama ingeniosa (¿se nota el orgullo de hermana?)
Me alegra que te agrade la pareja de Aliance y Remus, creo que pronto los liaré, pero primero el tiene que hacer su parte en el problema de la pareja principal, ¿creíste que quedaría sin acción con Tonks? ¡Pues no! estoy dispuesta a enredar esto un poquito más…
Bueno wapa, espero que te siga gustando lo que lees y que no te aburras de esperar el siguiente capítulo…
Taka chan: hola wapa, bienvenida nuevamente… me alegra saber que sigues leyendo. La verdad es que algunas personas no han vuelto a dejar review, así que no sé si siguen leyendo, me alegra que vos sí. Pero tranquila comprendo perfectamente tus motivos, yo tengo los mismos problemas, pero hay que seguir adelante… Espero que te gustara este capítulo y que logres salir con la U.
Por último un comercial: hace unos días se publicó un fic llamado "Se le apagó la luz" lo escribió Sara Fénix Black, es un one-shot / song fic, y me parece muy lindo sobre todo por la canción que es preciosa (de Alejandro Sanz). Es sobre Sirius Black y una chica llamada Irune, se los recomiendo. Está entre mis autoras favoritas…