Advertencia: Todos los personajes de esta historia son propiedad de J.K. Rowling. Esto fue escrito solo por diversión y no fue hecho con fines de lucro. Las canciones que aparecen en esta historia son: "Luz" del maravilloso, genial y absolutamente sorprendente cantautor español Miguel Nández y "Todavía duele" que es interpretada por el gigante de la canción Nelson Ned.

Hola a todas las personas que leen este fic, quiero agradecerles por su apoyo y sus mensajes. Como habrán visto, pasamos los 500 reviews, pero todavía no he podido terminar el fic de celebración, así que por el momento está pendiente.

Este capítulo está dedicado a Blythe.Naurin, Princess-H-Potter y Naginy que se leyeron todo el fic practicamente de una sentada. Las respuestas a los reviews al final del capítulo… y una petición muy encarecida…

Capítulo XXXIII: Las cosas se complican

En el capítulo anterior Snape fue torturado por no cumplir con su misión, pero ahora viene el momento de ver que sucedió con la de su esposa.

––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––

Nymphadora Snape miraba la escena desde el puesto en que se encontraba. El señor Tenebroso había mencionado la misión de su esposo e inmediatamente se había erizado. Había llegado el momento de la verdad, ahora comenzaría a pedir cuentas y ella tenía que llevar a cabo su parte. Ignoraba cual era la misión de Severus, pero recordaba perfectamente que Dumbledore le había dicho que su marido iba a incumplirla¿en qué consistiría¿con qué excusa iba a presentarse?

Oyó como lo llamaban y se inclinaba frente a ese monstruo. Lord Voldemort siguió hablando y entonces escuchó algo que no esperaba.

– Ni siquiera lo intentaste¡tengo informes de que ni siquiera le hablaste en todo este tiempo! Solo tenías que preñarla…

Eso definitivamente no estaba entre sus suposiciones; involuntariamente enderezó su cabeza y avanzó un par de pasos para mirar atentamente la escena que se desarrollaba frente a sus ojos. Nunca habría imaginado que el señor Tenebroso le pidiera eso, no tenía sentido que quisiera que ella tuviera un hijo, pues no sería de sangre pura…

– No hubo oportunidad, las cosas no se presentaron como… – intentaba disculparse su marido.

– ¡Desobedeciste una orden directa! – bramó el señor Oscuro haciendo que sus ojos rojos brillaran y ahora tendrás que pagar… – ¡Crucio!

La joven vio como torturaban al profesor de pociones aplicándole la maldición varias veces. Ahora comprendió lo que Dumbledore le había dicho sobre la misión de Severus, la única forma de no cumplirla era no acercarse a ella. Cuando por fin se detuvo la tortura, escuchó nuevamente la pregunta del Innombrable.

– ¿Por qué?

– Por que ¡no voy a tener un hijo con una sangre mezclada! – grito el profesor de pociones mirando a los ojos del señor Tenebroso.

Ella retrocedió por la fuerza de la respuesta. ¿Su esposo había dicho eso, no podía creerlo… él no tenía esos prejuicios. Sintió como alguien la sostenía, pues de la impresión había trastabillado. Entonces sintió el perfume de ese hombre y regresó a la realidad. Lucius Malfoy estaba a su lado y la sostenía por la cintura; se soltó de él como pudo e intentó no perder parte de lo que pasaba.

El señor Tenebroso parecía sorprendido de la respuesta que le había dado el espía, de hecho era de esperar de alguien que creyera fielmente en la pureza de la sangre, pero él no lo hacía y además, estaba segura de que él la amaba… ¿no era eso lo que le permitía mantener la esperanza en ese juego de la muerte? Entonces Voldemort habló.

– Es una respuesta adecuada, pero no por eso te perdono que dejaras de cumplir mis órdenes. Aunque no estén de acuerdo con mis ideas, mis planes siempre tienen una razón de ser – su voz era dura y con su varita hacía que el profesor mantuviera su mirada en la de él – nunca volverás a desobedecerme – amenazó.

En realidad el profesor de pociones hacía un esfuerzo sobre humano para poner atención y a la vez mantener cerrada su mente, pues ese contacto visual presagiaba una incursión del Innombrable en su cabeza. Pudo sentirlo entrar, pero no pudo ver más que su manera de ignorarse mutuamente durante esos dos meses. Eso, más las reacciones de su esposa durante esa entrevista, debía ser suficiente para dejar a la chica fuera de la furia del señor Tenebroso por el incumplimiento de la misión… el castigo era exclusivamente suyo.

Severus Snape pudo sentir como nuevamente era castigado; pero en esta ocasión solo recibió una maldición y con un hechizo fue llevado hasta un extremo del salón. Poco a poco intentó recuperarse y buscar a su esposa con la mirada. Desde su posición observó atentamente lo que sucedía.

Todos los mortífagos se habían animado con la tortura y ahora esperaban con ansias a la siguiente víctima. El señor Oscuro, se ubicó nuevamente en su asiento y Nagini hizo su aparición. Aliance se sorprendió de ver pasar al enorme ofidio a su lado, pero se contuvo y vio como se dirigía a los pies del señor Tenebroso.

– Señora Snape, usted tenía una misión para hoy… – dijo Voldemort con voz siseante – espero que la cumpliera.

– Si señor – dijo la chica hincando su rodilla y haciendo una reverencia profunda.

El murmullo en el grupo de los mortífagos se hizo general.

– Presenta las pruebas que te pedí – ordenó el innombrable.

– No tengo pruebas materiales de que Snape sea un traidor, es bueno ocultando sus pasos… – dijo rencorosamente la chica – pero tengo algo que debe mirar.

Sabía que tenía que hacer una actuación creíble para evitar que todo se echara a perder. En ese momento sacó de su túnica un pensadero, el mismo que Remus recibiera de manos de Snape hacía casi dos meses. A simple vista parecía una simple vasija de barro, pero en su interior una sustancia plateada daba vueltas a su propio ritmo.

– Esto será interesante – dijo Malfoy a Krum que era quien tenía a su lado.

– Estoy segurro de que sí – respondió el búlgaro.

– Deseo que todos vean las pruebas que trajiste – dijo Voldemort indicándole a Nymphadora que se acercara – Transmitto

El hechizo utilizado sobre el pensadero, permitiría a todos los presentes ver las imágenes que se encontraban en el mágico objeto. El artefacto empezó a temblar violentamente y de su interior surgió un rayo de luz que proyectó en la pared más grande de la sala los recuerdos del hombre lobo. (N/A: los distintos momentos que se proyectaron en la pared aparecen en itálica)

La imagen era borrosa al principio, pero poco a poco se fue aclarando y pudo distinguirse una figura en lo que parecía ser una cocina. La persona a la que pertenecían los recuerdos era quien hablaba.

– Sí… en la última reunión de la Orden Dumbledore nos comentó tu plan para sacarla del castillo – dijo la voz de un hombre – espero que no se lo impidan…

– No te preocupes por eso, ya está arreglado. – dijo el profesor de pociones.

(Solo Aliance Krum reconoció la voz y sintió como un nudo se formaba en su garganta, una pequeña llama de celos se encendió en ella, pero consiguió dominarla al recordar los últimos dos meses en Bulgaria.)

Snape tomaba piezas negras de un ajedrez colocado sobre la mesa de la cocina y las miraba atentamente. Una mano que presuntamente pertenecía a su interlocutor hacía lo mismo con las piezas blancas del mismo tablero. Luego de unos segundos, el profesor de pociones habló.

– Ella está preocupada por ti, creo que estás enamorado de ella y sé que no te agrada que se haya casado conmigo.

En ese instante la imagen se borró y un remolino de colores brillantes era lo único que se podía ver en la pared. Snape pudo sentir la mirada que recibía de todos sus compañeros y sobre todo, el odio que algunos sentían en esos momentos. Nuevamente apareció en la pared la figura del profesor de pociones, esta vez entraba a un salón. Bellatrix Lestrange no tuvo ninguna duda de que conocía esa casa, el problema era que no recordaba exactamente de quién era…

– Hola Severus¿cómo estás? – atinó a la misma voz que en el recuerdo anterior.

– Bien – contestó el profesor lacónicamente – ¿ya llegó Dumbledore?

– No, todavía no ha venido, lo espero para dentro de una media hora…

– Tengo prisa, espero que llegue pronto…

– Quisiera preguntarte… ¿cómo está ella? – preguntó tímidamente la voz.

– Bien¿crees que no puedo cuidarla? – la voz de Snape era amenazante y su mirada no era nada conciliadora.

Snape tenía un brillo en su mirada que indicaba que estaba molesto por algo de lo que había escuchado..

– Estoy seguro de que haces muy bien tu trabajo, pero quisiera saber cómo se encuentra, son muchos meses sin tener noticias de ella y ya que tú la ves bastante, pensé que querrías informarnos… – dijo la voz del dueño del contenido del pensadero.

– No seas condescendiente conmigo¡no me importa como creas que hago mi trabajo! Y ella está bien. – bramó el profesor de pociones.

– No era mi intención molestarte – contestó el hombre – solo quería saber cómo se encuentra.

Nuevamente la imagen se borró. El grueso del grupo de mortífagos se miraba de hito en hito y esperaba una reacción de su señor para tener una idea de la manera en que debían actuar.

Solo los más inteligentes se decían que las imágenes indicaban claramente que el profesor de pociones estaba en contacto directo con Dumbledore en un ámbito que no era el educativo; pero en el fondo¿no era eso lo que esperaban? Él era un espía, tenía que relacionarse con ellos en todo lo referente a esa guerra para poder llevarles información. Ellos aun no estaban convencidos…

Nuevamente la imagen se hizo borrosa y el remolino de colores brillantes se hizo presente. Poco a poco se fueron sucediendo los recuerdos de Remus Lupin acerca de Severus Snape. Snape recordándoles que él era el encargado de llevar información sobre los mortífagos, Snape presentando informes en las reuniones de la Orden, Snape molestando a Sirius Black porque no podía salir de Grimmauld Place para hacer trabajos para la Orden, etc.

Todos los presentes pensaban que Snape debía ser un traidor, pero aun podía alegar que su forma de actuar en las imágenes que habían visto era para guardar su posición en la Orden y poder llevar las mejores noticias al lord. Las convicciones comenzaron a tambalear cuando vieron a Snape avisando de algunos ataques, pero el realmente decisivo fue el último de los recuerdos del licántropo.

En la escena estaba Tonks y podía notarse que carecía de la marca en su brazo, así que era del año anterior. No solo ella estaba en la habitación de la misma casa que visionaron antes, también estaban Hermione Granger, Fred, George, Ron y Ginebra Weasley y Harry Potter. Los chicos parecían listos para regresar al colegio y Nymphadora Tonks y el dueño de la voz que habían escuchado incesantemente se despedían de ellos.

– Cuidaos mucho. – les recomendó la voz, y les estrechó la mano a todos, dejando a Harry para el final – Escucha, Harry… – bajó la voz, mientras los demás se despedían de Tonks, – ya sé que no tragas a Snape, pero es un especialista en Oclumancia, y todos nosotros, incluido Sirius, queremos que aprendas a protegerte, así que trabaja mucho¿de acuerdo?

– Sí, bien. – contestó el aludido con gravedad, mirando el rostro de su interlocutor – Hasta pronto. (1)

Ahora a nadie le cabían dudas, Severus Snape era un traidor, pues había enseñado a Harry Potter a bloquear su mente ante su señor. Eso explicaba cómo había podido eludirlo por tanto tiempo antes de caer en la trampa de la sección de Misterios del Ministerio de Magia. Por otro lado, decía la voz que Snape era especialista en Oclumancia, así que por eso no había sido descubierto en tanto tiempo, fue necesario que se casara con una traidora a la Orden para que lo desenmascararan…

El silencio se hizo patente en la estancia y todas las miradas estaban dirigidas a una sola persona: el profesor de pociones del colegio Hogwarts de Magia y Hechicería.

–––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––

En la habitación de las chicas de sexto año, Ginny y Hermione se preparaban para la cena de esa noche. Se habían retirado temprano y se dedicaban a arreglarse. Ninguna de las dos era una lumbrera en la materia, pero no tenían más remedio que acicalarse para verse hermosas en la cena y el baile de la noche… aun no eran concientes de que Harry y Ron las verían bellas aunque se presentaran en uniforme.

Estaban un poco nerviosas de pensar que esta noche ambas tendría su primera cita con los chicos que les gustaban. Para Ginny esto era una ilusión que databa de mucho tiempo atrás, para Hermione era algo mucho más reciente.

– Estoy nerviosa – dijo la castaña a su amiga.

– Tranquilízate, Ron no te va a comer – dijo la chica con una gran sonrisa – al menos no todavía…

Hermione no parecía muy a gusto con el comentario de su amiga y su mirada se lo transmitió abiertamente.

– Calma – le aconsejó Ginny, volviendo a su peinado – mi hermano puede ser despistado, impetuoso y hasta torpe, pero es un buen chico¡ya verás que la pasan muy bien!

– ¡Tu hermano no es torpe! – le contestó su amiga acercándose a ella – Tal vez si un poco de lo otro, pero no es torpe… es muy dulce.

– Supongo que tendré que creerte… no soy yo la que conversa con él por las noches.

La castaña la miró sorprendida. No le había contado a nadie de sus conversaciones nocturnas con Ron¿él se lo habría dicho a Ginny¿los habría visto? Estaba a punto de preguntarle cuando la pelirroja siguió hablando.

– No le des vuelta. Ron no me lo dijo, Harry los vio hace tiempo y dice que mi hermanito sigue saliendo de la habitación después de que ya se retiró a dormir. Yo lo había olvidado hasta que dejé un libro en la sala común la semana pasada, baje por él y oí sus voces cerca de la chimenea.

– ¿Alguien más lo sabe? – preguntó la aludida.

– Al menos no de mi boca – aseguró Ginny – pero cualquiera que bajara a la sala común puede haberlos visto.

Hermione se quedó de piedra. La pelirroja tenía razón, cualquier compañero de casa que bajara a la sala común después de la hora de dormir podía haberlos visto. ¿Le importaba? La verdad es que no hacían nada malo… y podía decir que como prefectos estaban vigilando que todos estuvieran durmiendo… o que… ¿necesitaba una excusa? Y la respuesta le llegó de golpe, aunque la necesitara no la quería: estaba en la sala común con Ron por que quería estarlo ¡y punto!

– No me importa que la gente lo sepa, me gusta tu hermano – afirmó separándose de su amiga y concentrándose en su acicalamiento.

Ginny Weasley se volvió a mirar a su amiga y le sonrió sinceramente.

– Nunca creí que declararas tus sentimientos tan abiertamente – dijo incrédula.

– Nada gano ocultándolo. Además, me temo que cada día es más obvio¿no crees?

– La verdad sí. Antes no lo hacías, pero ahora te sonrojas casi por cualquier cosa que te diga Ron.

– ¿Ves?

– ¿Vas a decírselo a mi hermano? – preguntó Ginny.

– No – respondió su amiga tranquilamente – te lo digo a ti y él tendrá que averiguarlo por su cuenta. Aunque supongo que ya debe suponerlo.

– Mi hermano puede ser muy despistado… a lo mejor no se entera.

– ¡Si es preciso le haré un mapa! – dijo la castaña un poco violentamente – pero quiero que él me lo diga directamente.

La pelirroja le sonrió a su amiga y siguió en lo suyo.

– Es despistado, pero no es tonto…

–––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––

Harry y Ron estaban alistándose en su habitación. El resto de sus compañeros de cuarto hacía exactamente lo mismo, pero era evidente que los dos chicos estaban en un mundo aparte.

– ¿Crees que ya estén listas? – preguntó Harry a Ron.

– No lo sé – respondió su amigo – ¿nervioso?

– Pues sí, un poco; ¿y tú?

– También. Hay momentos en los que me pregunto cómo pude atreverme a invitarla…

Harry miraba a su amigo atentamente, tenía la impresión de que estaba a punto de pensar demasiado en la situación que les esperaba esa noche y eso podía desembocar en un ataque de histeria.

– Mejor veamos si ya bajaron – propuso el–niño–que–vivió a su amigo – veamos en el Mapa del Merodeador…

Los dos chicos se acercaron a un trozo de pergamino que se encontraba en blanco y Harry se lo ofreció a Ron, el cual le dirigió su varita a él murmurando:

– "Juro que mis intenciones no son buenas"

Separó su varita del mapa y poco a poco se fue llenando de delgadas líneas de tinta que dieron lugar al mapa de Hogwarts y la ubicación de todas las personas que se encontraban en él.

– Aun no han bajado – señaló Harry – ¿crees que nos hagan esperar mucho? Me estoy impacientando.

– Pues no lo sé. Aun están en las habitaciones¿qué tanto hacen? – preguntó un poco molesto.

– No lo sé, pero vamos a tener que mostrarnos muy sorprendidos de su aspecto si queremos conservar las cabezas. Después de toda la tarde arreglándose nos matarían si no les decimos algo agradable de cómo se ven.

– Tienes razón – dijo Ron volviendo su mirada nuevamente al mapa – ¡Mira! ya Seamus y Lavander están en el salón¿crees que ya estén sirviendo la comida?

– No, la mayoría de las personas no han llegado todavía, supongo que la cena será cerca de las ocho de la noche, dijeron que era lo primero y nos citaron a las siete treinta – opinó Harry.

– Mira Lupin no ha salido de su habitación¿crees que irá a la actividad?

– No, recuerda que hoy es luna llena. Además, está un poco preocupado… una amiga suya fue secuestrada por mortífagos, así que no sé si estará para fiestas.

Al nombrar a los mortífagos Ron no pudo evitar la tentación de fijarse en las mazmorras y ver si Snape se encontraba por allí. Su hermana se había asegurado que Tonks y él estarían todo el día juntos y por lo que Lupin había dicho iban a quedarse en sus habitaciones, pero en ellas no había ninguna persona. Eso era extraño¿habrían decidido salir después de todo¿a dónde irían?

– Snape y Tonks no están en su cuarto – comentó.

Harry comenzó a revisar los diferentes pisos del castillo y no encontró rastro de ellos en el mapa¿dónde se habría metido esa pareja?

–––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––

– Parece ser que se la llevaron por medio de un traslador – le comentaba el director a Remus por medio de la chimenea – sabes que de esa manera pueden haberla llevado a cualquier lugar…

– ¿No es posible averiguar a qué lugar la llevaron? – preguntó sabiendo que la respuesta sería negativa.

– Sabes que no. Tendremos que esperar al siguiente informe de Krum o de Snape, pero estoy seguro de que deben tenerla en el castillo. Los mortífagos deben haber aprovechado que te fuiste para atacar, y como no saben cuando regresas, lo mejor era hacerlo lo más pronto posible.

– Por lo menos sabemos que no van a lastimarla antes de luna llena… – dijo resignadamente – no podemos hacer nada mientras Snape y Nymphadora se encuentren allí…

– Sabes que no, eso los pondría en un mayor peligro a los tres… tenemos que esperar. Pero sabemos que la poción solo puede hacerse en períodos que no concuerden con luna llena, eso le da tiempo hasta la siguiente semana.

– Sí – dijo distraídamente el licántropo – será mejor que terminemos la conversación aquí – agregó – debo tomarme la última dosis de la poción matalobos, esta noche va a salir la luna…

De esta manera los dos hombres se despidieron. El director Albus Dumbledore se dirigió al gran comedor a presidir la actividad de esa noche. Remus Lupin esperó pacientemente la salida de la luna llena.

–––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––––

Luego del último recuerdo guardado en el pensadero que llevó Nymphadora Tonks a la reunión de mortífagos, el silencio y la tensión podían cortarse con un cuchillo. Todos los presentes miraban alternativamente al profesor de pociones y a su señor. ¿Qué sucedería ahora¿lo mataría o jugaría un poco con él primero?

– Me sentiría muy honrada si me permitiera matarlo señor – dijo la voz de un hombre rubio y algo que minutos antes se había ubicado al lado del traidor – merece la muerte…

– ¡No! – grito Bellatrix Lestrange – merece ser torturado primero… la muerte es muy poca cosa para él…

Lord Voldemort parecía estar considerando las opciones, esto preocupó mucho a Nymphadora y a Víktor, pues ambos contaban con la promesa que el Innombrable le había hecho al joven mortífago. Eso provocó que el exjugador se atreviera a hablar.

– Señorr – dijo acercándose e hincando la rodilla en el frío suelo – ¿puedo matarrlo ya?

Todos los presentes, en especial Malfoy y Bellatrix, le miraron extrañados, nadie sabía de la oferta que el señor Tenebroso le había hecho al nuevo especialista en pociones, pero estaba claro que Krum iba a tener el honor de matar al espía. Aun así ellos no estaban dispuestos a ser dejados de lado ahora que veían una posibilidad de vengarse del profesor de pociones.

Bellatrix sabía que si el señor Tenebroso le había ofrecido a Krum la oportunidad de matar al docente, eso no quería decir que ella no podría torturarlo, así que decidió intervenir.

– No creo que deba morir… todavía – dijo atrayendo todas las miradas sobre ella, cosa que la llenó de satisfacción – creo que la muerte es un precio muy bajo por lo que ha hecho.

– ¿Qué propones? – le preguntó el Innombrable.

– Antes de matarlo, debemos hacerle pagar su traición – dijo mirando a su señor, aunque de reojo intentaba ver el efecto que sus palabras producían en el espía – estoy segura de que mi sobrina estará de acuerdo en que su "marido" no merece que se le tenga ningún tipo de consideración.

La mujer verdaderamente estaba disfrutando de ese momento. Muchos años antes había jurado que Severus Snape pagaría por haberla despreciado… y este era el instante que había esperado pacientemente. Por otro lado, su sobrina le debía aun algunas cuentas, así que no estaba dispuesta a que pasara desapercibida, pues cualquier signo de debilidad que presentara podría ella usarlo para dejarla en mal con el señor Tenebroso. Lentamente sacó su varita y miró dócilmente a su señor.

Aparentemente, Severus Snape no reaccionaba a lo que escuchaba. Él estaba completamente concentrado en la situación que se desarrollaba en ese momento. No había vuelta atrás, había sido declarado culpable sin darle oportunidad a defenderse, pero eso no lo sorprendía… sabía que sería así.

Pudo ver las manos tensas de su esposa y el visible cambio de color en su cabello. Eso solo podía significar dos cosas, estaba molesta o estaba muy deprimida, pero debido a que conocía su carácter explosivo estaba seguro de que no era lo segundo. Definitivamente estaba furiosa con Bellatrix, pero ambos sabían que no podía demostrarlo. Lo mejor era dejar que las cosas siguieran su camino.

Casi imperceptible, lord Voldemort hizo un gesto de asentimiento a la sugerencia de su mortífaga favorita.

Crucio… – gritó con fuerza dirigiendo su varita al profesor de pociones, que se retorció de dolor y cayó fuertemente al suelo.

Con un gran esfuerzo Snape consiguió no gritar, pero el dolor lo traspasaba fuertemente. La tortura continuo por un buen rato, el señor Tenebroso no permitió a nadie más participar en ella. Le agradaba ver la maldad reflejada en el rostro de su subalterna.

Nymphadora no podía alejar de su mente al matrimonio Longbotton, que se volvieron locos a base de torturas infringidas por esa mujer… ¿y si Snape no soportaba por tanto tiempo?

Expelliarmus… – exclamó Bellatrix enviándolo al fondo del salón. En ese momento cayó a los pies de su esposa…

Nymphadora no pudo evitarlo y se agachó a ayudarlo… era su esposo y ella lo amaba, no podía quedarse impávida ante lo que le sucedía. No lo pensó, ya era suficiente, no podía verlo sufrir más. Al colocarse a la altura de su marido, él clavó la mirada en ella y le susurró una pregunta. Solo ella podía ver sus labios y entender el murmullo que no llegaba a ser audible.

– Sí – respondió la chica en voz alta.

Instantáneamente su marido cayó pesadamente en el piso del salón. ¿Había agotado sus fuerzas¿se había desmayado? O… ¿había muerto?

– ¡No! – gritó Krum – ¡yo el tenía derrecho de matarrlo!

– Parece que vas a tener que esperar a que vuelva en sí – dijo Lucius Malfoy con sorna.

– O limitarte a deshacerte del cuerpo… – terció McNair que se había acercado a ver el espectáculo.

Pero Snape no se movía y su mujer lo miraba incrédula… pero aliviada a la vez. Todos notaron que la chica parecía desconcertada.

– ¿Qué te dijo? – le preguntó Bellatrix, molesta porque se le había acabado la diversión.

– Me preguntó si quería divorciarme de él… y yo no puedo seguir con un traidor…

Hasta aquí este capítulo. Para la siguiente entrega, se hablará del destino que le espera a Nymphadora Snape.

(1) Tomado casi textualmente del libro "Harry Potter y la Orden del Fénix".

¡NO ME MATEÍS, QUE SI LO HACEÍS NO OS ENTERAÍS DEL FINAL…

Respuestas a los reviews: el primero es de alguien que no puso ninguna identificación, lo cual es una lástima, por que soy muy curiosa…

Anónimo: entiéndase que la persona que dejó este review no puso nada en la parte del nombre y no sé quien fue… gracias por el mensaje, por los halagos y por favor dime quién eres… Espero que te guste como va esto (¡y no me mates!)

Aliance: Hola wapa, me alegra recibir tus mensajes, siempre me hacen sonreír y, a veces, hasta carcajear con los reviews que envías. Lamento lo de tu gripe y espero que te encuentres mejor de salud. Cuídate mucho, mira que una gripe combinada con una piña colada puede ser dañina para la garganta…
Espero que el cuchillo lo guardes hasta el siguiente capítulo, sino no te enterarás de lo que va a pasar… (¿está funcionando? …espero que sí).

Alosca16: hola compatriota! Me alegra que sigas por estos rumbos y espero que no te decidas a marchar por el final del capítulo, que esto aun no se termina. Espero que te arreglaran ya la compu. Gracias por el mensaje y espero que te gustara el capítulo.

Blythe.Naurin: Hola wapa, bienvenida al fic y espero que te siga gustando después de este capítulo… Si tienes alguna duda, no temas en preguntar, que no mataré a nadie más (Anita cruza los dedos a la espalda y empuña la varita con la otra mano…). Espero que te agradara como va la intriga y que te esperes a leer el siguiente capítulo para ver lo que sucede.

Edysev: hola chica¿cómo te va? Gracias por el mensaje del chap anterior. Para lo de Bellatrix queda todavía un poco, ya verás que ella tiene algo que decir sobre nuestra querida pareja, y lo de la misión, pues ya viste qué fue lo que presentó Nymphadora. Bueno, espero que fuera de tu agrado.

Elanor Blackriver: hola chica¿qué tal¿cómo seguiste de la gripa? Espero que estés mejor y que te termines de recuperar, supongo que estás mejor porque ayer vi que tenía un capítulo tuyo (no lo he leído… ¡lo siento! Pero estoy atareadísima). Lo de la sangre mezclada, pues ya viste que no le sirvió de mucho, ya que pronto ella presentó lo suyo y hasta allí llegó. Espero que te gustara el capítulo…

Florence Rose: Hola amiga¿cómo te va todo? Espero que bien y que esas vacaciones que tienes en Cádiz te sienten de maravilla, sé que no son vacaciones, vacaciones, pero en fin, funcionan como si lo fueran. Lo de Aliance, pues aun está pendiente y lo del matrimonio, pues no te preocupes antes de tiempo, ya verás como todo se va arreglando. Lo único que pido es que no me mates antes de tiempo.

Iraty Rowling: hola chica! Cómo te va, me alegra que sigas leyendo el fic, yo aun tengo una deuda contigo y el fic de los merodeadores, espero ponerme al día pronto… Me alegra que te gustara el capítulo, aunque te cansaras de las dos horas de camino hasta el castillo.

Larzuwa: Hola wapa, gracias por el mensaje, me alegra que te guste y espero que este capítulo también fuera de tu agrado.

Laurana-malfoy-rin: hola chica, mira que no sé si ya me puse al día con tus fics, espero que no me quede ninguno, según yo ya los leí todos, espero no haberme saltado ninguno. Me alegra que hasta ahora te esté gustando el fic, de verdad prometo que esto no va a quedar aquí…

Marcela9: hola Andre, gracias por el mensaje, espero que te siga gustando aun con lo que pasó. Prometo que las cosas no van a quedar así… gracias por seguir leyendo. Por cierto, me alegra que estemos de acuerdo con respecto a Bellatrix.

Meilin Snape: hola wapísima¿cómo te va todo? Me alegra que te guste las historias de los chicos, a mi me fascina como son… Lo de Snape y Tonks, pues ya verás cómo se resuelve, espero que me den tiempo de el siguiente antes de mandarme Avadas electrónicos.

Miss Andreina Snape: hola chica¡No me mates¡guarda esa varita! Si mal no recuerdo tú hiciste algo similar, así que no intentes aniquilarme hasta que esto termine ¿sí?
Lo del fic de celebración todavía no está listo, pero va en la línea de tu sugerencia (espero que eso calme tus ánimos, al menos un poco…), ya lo verás cuando lo tenga listo.

Naginy: Hola chica, muchas gracias por el mensaje y por leerte el fic de esa manera. Solo espero que no te desanimes por cómo quedó esto, aun hay más y todo se irá arreglando (…o tal vez ¡no!). cualquier duda que tengas, solo envía la pregunta e intentaré responderla lo mejor posible.

Nariko: hola chica, no te preocupes tanto por lo del review, comprendo perfectamente que en ocasiones no tenemos tiempo ni para tenernos en pie. Espero que todo te esté saliendo bien, que no me mates, que tu salud esté bien, que no me mates, que sigas pronto tus fics y que no me mates¿te dije que no me mataras? Bueno, pues si no lo hice, por favor no me mates.

Nisse: hola wapa, lamento que tuvieras que esperar tanto, pero es que no me da tiempo para estar actualizando muy aprisa… espero que ahora no me mandes ningún Avada electrónico.

Nocrala: Hola chica¿cómo te va? Lamento lo de tu ojo interior, espero que se mejore… Me rehuso a responder a algo que sea en mi perjuicio, así que no diré nada de mi novio, digo, tu novio… él no me está enseñando defensa contra las artes oscuras (Anita cruza los dedos a su espalda y pone carita de ángel…). Ya leí tu nuevo fic, suena muy interesante, lamento no haberte dejado los mensajes inmediatamente, pero últimamente, no tengo mucho chance de estar en la compu… pero está muy bueno.

Princess-H-Potter: hola chica, gracias por el mensaje y espero que te siga gustando el fic, sé que está un poco tétrico, pero espero que aun así… bueno, tú me entiendes. Cualquier pregunta que tengas no dudes en enviármela, intentaré responderla sin revelarte toda la trama…

Rwana: hola chica, que bien que estás por acá. Me alegra que te siga gustando el fic y me parece genial que pienses en escribir algo, yo estaría feliz de leerlo¡anímate! Por cierto, tu hermana es muy buena escritora, estoy segura que te ayudaría mucho y si yo también puedo ayudarte no dudes en escribirme…

Safrie: hola chica¿cómo estás? Espero que bien. Como viste la reunión sigue y aun no ha terminado, pero es que no podía terminarla aquí, definitivamente este era el lugar para cortarla… aunque me temo que algunas estarán por cortarme a mi… bueno, espero que pese a ese pequeñín detalle, aun no me mateís.

Sheamoonie: hola bienvenida nuevamente, me alegra que te pudieras reintegrar al fic, siempre me animas mucho con tus mensajes (y con tu fic…). Gracias por todos los mensajes que me dejaste, espero que ahora no estés pensando en matarme, mira que aun queda fic y si lo haces no te enterarás de lo que va a pasar… Gracias por leerte el de celebración… es una canción preciosa…