CAPITULO CUATRO: CASTIGO ¿INDESEADO?
-Subamos a las habitaciones, por favor ¿si?
-De acuerdo
Las dos amigas subieron a las habitaciones, concretamente en la de la más joven, que estaba vacía. Hermione se sienta en la cama y Ginny se queda frente a ella observándola. Sabía de lo que iban a hablar. No era para menos, ahora eran la comidilla de todo Hogwarts, todos los alumnos de cualquier casa giraban la cabeza allá donde pasase ella, Hermione, Harry o Malfoy. Y eso que solo habían pasado apenas unas horas.
-Ginny cada día me sorprendes más. ¿Me vas a explicar por qué seguiste a Harry al compartimento...?
-Si lo sabes, Harry me gusta mucho y noté que algo iba mal cuando salieron todos los Slytherin del vagón donde estaba Malfoy y que éste no había salido para nada. Apenas me había parado delante de la puerta del compartimento cuando oí un golpe seco, cuando golpeas a alguien en la cara. Al golpe lo siguió una carcajada que identifiqué como la de Malfoy así que pensé que lo mejor era entrar. Al abrir la puerta me encontré a Harry tirado en el suelo, paralizado y a Malfoy arrodillado a su lado.
-Y entonces Malfoy intentó atacarte a ti
-Más o menos. Le dije que dejara en paz a Harry y me dijo que no me metiera en donde no me llamaban si no quería tener problemas. Parece que se lo pensó mejor, y viendo que Harry no iba a hacerle nada decidió ir a por mi. Me abofeteó, me lanzó al suelo y se colocó encima de mi. Había empezado a besarme cuando poco después llegaste tú. Ahora debes explicarme tú...¿qué se te pasó por la cabeza para que te lanzases a matar a Malfoy? ¡Nunca te había visto tan furiosa!
-Ya lo sé, sé que no suelo perder tanto el control. Es que en el momento en que entré en el compartimento y vi la situación, no pude pensar en otra cosa que en matar a Malfoy. ¡Es que es un...!
-¡Venga no te alteres más! Ya va a recibir su merecido y casi seguro que no le veremos la cara durante mucho tiempo
-¿Chicas estáis aquí?-Harry asomaba la cabeza por la puerta
-Sí Harry ¿qué pasa?-preguntó Hermione un poco sobresaltada temiendo que las haya oído
-La profesora McGonagall me ha pedido que os avise de que mañana debemos ir a su despacho a primera hora de la mañana, antes del desayuno
-Gracias Harry, buenas noches-el chico se despidió con la mano y se marchó
-¿Crees que la profesora McGonagall será muy severa con vosotros?
-No lo creo Ginny, lo hicimos por una buena causa, para que ese cabrón no te violara. Además McGonagall sabe que Harry y yo no vamos por ahí pegando a la gente por gusto. Por cierto, me voy ya que si no, no me podré levantar mañana a tiempo. ¡Buenas noches!
-¡Buenas noches!
Hermione bajó las escaleras volviendo a pensar en la bronca que se había ganado por parte del profesor de pociones (ahora de Defensa). "¡Qué rabia!¡cómo si no hubiera profesores en esta escuela! Tuvo que ser él!" Durmió muy intranquila y mal por lo que se caía de sueño cuando iba de camino al despacho de McGonagall en compañía de Harry.
-Pasad-dijo con voz imponente la profesora cuando Harry llamó a la puerta. Los dos jóvenes entraron y se sentaron en los asientos que la profesora había preparado previamente. McGonagall los observaba fijamente y con severidad.
-El profesor Snape me puso al tanto de lo ocurrido ayer en el tren. Por supuesto, como todo en esta escuela los rumores vuelan y ya estaba al tanto de lo sucedido
-Entonces no tendremos que explicarle nada ¿no?-preguntó Harry tranquilo
-No y siento mucho anunciarles que a pesar de que lo hicieron para evitar una desgracia no me queda más remedio que castigarles-ninguno de los dos dijeron nada, estaban conformes. Hermione estaba tensa, esperando las palabras reprochadoras de la jefa de su casa, al igual que había hecho Snape. A pesar de que horas antes había deseado que esa mujer le echara la bronca en vez de Snape, en ese instante, en el que la tenía delante, deseaba lo contrario.
-Señorita Granger-McGonagall pronunció su nombre con frialdad, sin mirarla a los ojos, que a pesar de estar fijos en los papeles que tenía delante se podía notar la decepción reflejados en ellos. Hermione se derrumbó. Definitivamente era peor que una bronca
-Sí profesora
-Cumplirás un castigo con el profesor Snape, una vez a la semana, durante un mes. Tendrás que hablar con él en una de sus clases para que te confirme el día y la hora. Después te entregaré tu horario, tras el desayuno. No tengo nada más que decirle, se puede marchar
-Muy bien profesora-es lo que pudo decir Hermione antes de salir. Harry esperaba el veredicto impasible. Le hubiera gustado saber que castigo iba a recibir su amigo, sin pensar en el suyo propio. Sólo cuando entró en el comedor y vio aquellos cabellos negros.
-¿Puedo pasar?
-Sí señorita Granger
Ya sabía a lo que venía la joven. McGonagall ya le había dicho que la chica iba a cumplir el castigo con él mientras que Potter lo haría con la profesora de Transformación. Faltaba veinte minutos para que diera comienzo la primera clase de Defensa Contra las Artes Oscuras con los de sexto curso y tenía la lección casi lista
-Profesor venía por lo de...
-Sí, sí ya sé-respondió el profesor con frialdad, con apatía. Se sentía agotado y sólo acababan de comenzar las clases. Llevar una doble vida era demasiado duro para él, le cansaba demasiado. Mejor dicho, en esos momentos llevaba una triple vida, aunque la vida como profesor se podía tomar como una parte de una y otra. Por no hablar de "otra vida" que le acababan de "regalar"-cumplirás tu castigo los sábado por la tarde en mi despacho, una hora después de la hora del almuerzo. Todo durante un mes.
-Muy bien profesor-dijo Hermione con un asentimiento de cabeza
-Bien, puede esperar fuera en el pasillo mientras termino de preparar la clase. La chica obedeció de inmediato y se reunió con sus amigos que volvían de tener la primera hora libre.
Severus Snape terminó de preparar la clase, aquel día practicarían los hechizos no verbales. Hizo pasar a los alumnos. Como ocurría siempre Gryffindor compartía clase con Slytherin. Suerte que el señor Malfoy había sido expulsado esa misma mañana porque conocía muy bien a Potter y compañía para saber que hubieran continuado con lo que no terminaron el día anterior.
El profesor comenzó su discurso sobre las Artes Oscuras y su defensa...
Hermione apenas probó bocado, estaba muy nerviosa. Harry por su parte estaba feliz, porque aquel día no cumpliría su castigo. Era su primer día de clases particulares con Dumbledore. Ella en cambio tendría que pasar una tarde entera con la persona que quería evitar a toda costa aquel año.
-Anímate Hermione ¿qué te pasa?
-Pues que le va a pasar Ron ¿tú no estarías igual si cumplieras castigo con Snape?-le espetó Ginny con malhumor, malhumor que se le pasó cuando llegó Dean y se sentó a su lado. La castaña se sorprendió ante el semblante de Harry, que cambió de felicidad a recelo. Parecía que no le gustase la presencia de Dean...
-Bueno chicos-dijo el moreno levantándose-me tengo que ir ya. Nos vemos
Ante la mirada atónita de sus amigos se fue al despacho del director mientras que Hermione también recogía sus cosas para irse al despacho de Snape
-¿Sabes que le pasa a Harry?-le preguntó Ginny, como quien no quiere la cosa pero su amiga sabía que la pregunta estaba cargada de mucha intención.
-No tengo ni idea Ginny, supongo que será por las clases. Me tengo que ir...
-¡Mucha suerte! Y...¡ten cuidado!-le dijo guiñándole un ojo
-Tranquila lo tendré-"supongo que me lo dice porque sabe que a veces me dejo llevar demasiado por mis sentimientos" pensó mientras iba bajando las escaleras que dirigían a las mazmorras. Tendría que controlarse si no quería tener más problemas de los que tenía ya.
La joven Gryffindor se encontró frente a la puerta del despacho antes de lo que hubiera deseado. Respiró hondo y tocó una vez (y con fuerza) en la puerta.
-Pase-le dijo la voz melodiosa del profesor. Hermione se quedó de una pieza al ver allí a Jonathan, el joven de once años que se parecía al hombre que se sentaba frente a él, al otro lado del escritorio. ¿Qué hacía allí?
-Creo señor Walker que ha entendido todo lo que le he dicho. Como puede comprobar, en estos momentos estoy muy ocupado. Además estoy seguro de que sus amigos lo están esperando
-Sí...profesor-Hermione notó que había algo raro en el ambiente, tensión...¿tensión?
-Señorita Granger ¿a qué espera para tomar asiento?-"está más antipático que de costumbre, está claro que ese chico significa algo en su vida ¿o son mis imaginaciones?"
-S-sí señor-dijo pero ya estaba sentada. "¡Uf no puede ser, ya estoy nerviosa!". El profesor no se dio cuenta de nada, buscaba algo en su oscuro despacho, de espaldas, lo que puso más nerviosa a la chica. Tenía que disimular de alguna forma así que decidió hacer como que buscaba algo en su mochila. La pluma o el libro de Defensa de aquel año por ejemplo (N/ A: no recuerdo el nombre ni tengo ganas tengo de ir a buscarlo ahora).
-¡Ejem!-carraspeó Snape para que Hermione dejara de hurgar inútilmente en su mochila y le mirase-me gustaría que fuera a los almacenes a buscar unos ingredientes para una poción que voy a preparar-"¿una poción?"-necesita un tiempo de preparación y tengo que empezar a elaborarla ahora mismo. Hoy me ayudará con ella. Aquí tiene la lista de lo que me debe traer-Hermione cogió el trozo de pergamino, temblorosa, y a continuación salió del despacho leyendo los ingredientes. Por lo que estaba leyendo se trataba más de un mejunje que de una poción, el de tentáculos de murtlap. Mientras iba al almacén del aula de Pociones se preguntaba a quién le haría esa poción. ¿A aquél chico? "no qué va, no parecía que tuviese problemas, y mucho menos que estuviese herido"
Cogió todo lo necesario para la poción, lo guardó todo en una bolsa y volvió. La verdad que el castigo...¿realmente se podía llamar castigo a ayudar a hacer una poción? ¿iba a ser eso peor que un castigo? Porque hacer una poción con el profesor significaba más contacto visual del que quisiera...significaba tener cerca el cuerpo que más deseaba
El profesor esperaba pacientemente de pie y apoyado en su escritorio. Ya había preparado, en una habitación anexa, el caldero para comenzar la poción. No es que fuera un castigo, ayudar a hacer una poción, pero la iba a tener todas las semanas allí, durante un mes y durante varias horas. No estaba tan creativo aquel año como para buscarse buenos castigos para cada ocasión. Hacer copias... no iba a ponerla a hacer eso, la señorita Granger no tenía ya once años. Y por ahora no necesitaba hacer arreglos en el despacho...además le corría más prisas hacer ese mejunje. Era muy urgente y requería tiempo para elaborarlo. Y con ayuda de una alumna como ella, que aunque le diera rabia admitirlo, era la mejor realizando pociones de su promoción. Al cabo de diez minutos Hermione estaba de vuelta con los ingredientes.
-Muy bien, comencemos
Para el profesor, sencillamente era un trabajo en equipo. Para Hermione era su perdición, sobretodo cuando su imaginación comenzó a desbordarse...
CONTINUARÁNotas de autora: La verdad que me he atascado un poco con este capítulo. Al final me he dado cuenta de que todavía Ron no sabe lo que le pasó a su hermana. Me ocuparé de ello en el próximo capítulo. Comentarios de este capítulo... lo más interesante, claro está, es que Hermione cumple castigo con Snape, por la sencilla razón de que, además de ser quién la pilla con "las manos en la masa", McGonagall está demasiado decepcionada con su alumna que prefiere que sea él quién le ponga los castigos. Al menos no han sido expulsados ni él ni Harrry...aunque para el chico se está convirtiendo en una costumbre, pobrecito. Por cierto ya se está empezando a picar con lo de Dean jejejeje. Me he saltado el discursito de Snape sobre las artes oscuras, aunque mi intención era ponerlo y añadir los pensamientos de él mientras habla pero he pensado que podría ser muy pesado. Lo mismo ocurre con el resto de clases durante esa semana. Paso ya con los últimos rewiers
TercySScloe: al final te hice caso y decidí castigar a Herms con Snape, aunque no hasta navidades...jejejeje la verdad es que es la única manera de que halla algo más de tema entre los dos. De todos modos, iba a alterar muchas cosas relacionadas con el sexto libro con la expulsión de Malfoy...¡aunque ese es mi objetivo! Intentar no parecerme tanto al libro y despellejar un poco a Rowling por ciertas cosas que pone en el libro y con las que no estoy de acuerdo.Chica si estás en la edad del pavo a los diecisiete años por pensar sólo en tíos. ¿Qué hace una amiga mía que está igual que tú y tiene veinte años?
HoneyBeem: Espero que te guste también este capítulo. Seguiré haciendo fics sobre Snape mientras me siga quedando ideas pero por ahora seguiré con esta historia, no haré historias cortas ni nada porque ahora no tengo mucho tiempo con las clases. La gente lo odia más por culpa de Rowling, que lo ha pintado así. Sabes que ya hemos hablado esto por el Messenger así que mientras salga el séptimo ¡a escribir fan fics!
Por cierto ¿cómo se llama la pasta o el mejunje ese que se aplica Harry en el quinto libro para curarse los cortes de la pluma de Umbridge? Lo he estado buscando pero ahora mismo no he encontrado esa parte concretamente. Ya lo cambiaré cuando lo encuentre...
Nos vemos en el capítulo cinco!
Notas de autora (14-04-06): Sólo he puesto alguna palabra suelta y le he dado nombre a la dichosa poción :-)
